rdf:value = "
El señor PROKURICA.-
Señora Presidenta , hice campaña durante mucho tiempo solo con voluntarios, pero llegaron candidatos de afuera que empezaron a pagar.
Apostaría que hoy es muy difícil hacer una campaña con voluntarios. A mí me han contado que al Senador señor Montes se la llevan a cabo voluntarias de la Cruz Roja en su circunscripción o que a los ejércitos de voluntarios que acompañaron al Honorable señor Navarro no se les pagaba, lo que no creo.
El señor MONTES.-
Es así.
El señor PROKURICA.-
No lo creo.
He visto, al revés, cómo en la Administración Pública se les ha obligado a los funcionarios a hacer "casa a casa" en favor de ciertas candidaturas presidenciales.
Pienso que esta es una forma de terminar con esa hipocresía, porque con la indicación se le abre un tremendo forado, como lo han dicho otros parlamentarios, al límite del gasto electoral. Me parece que en lo que más se gasta es justamente en pagarles a los voluntarios que andan en la calle.
¡Y los colegas que gozan del Gobierno los tienen!
¡En la Región que represento he observado de todo! ¡He visto órdenes de jefes de servicio para descontar recursos!
¡Todos sabemos cómo funcionan los cantantes y grupos musicales "gratuitos": lo hacen con la Administración Pública! Se les cancela una actuación para que después acompañen a determinados candidatos.
Considero que la mejor fórmula no es prohibir el voluntariado. Nadie se encuentra abocado a eso. Lo que se plantea es: "Si usted tiene un ejército de gente trabajando, cabe computarlo dentro del límite de los gastos".
He dicho.
"