REP�BLICA DE CHILE DIARIO DE SESIONES DEL SENADO PUBLICACI�N OFICIAL LEGISLATURA 352�, EXTRAORDINARIA Sesi�n 35�, en mi�rcoles 9 de marzo de 2005 Ordinaria (De 16:1 a 18:58) PRESIDENCIA DEL SE�OR HERN�N LARRA�N FERN�NDEZ, PRESIDENTE SECRETARIO, EL SE�OR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR ____________________ � N D I C E Versi�n Taquigr�fica P�g. I. ASISTENCIA......................................................................................................... II. APERTURA DE LA SESI�N............................................................................... III. TRAMITACI�N DE ACTAS..........................................................................�. IV. CUENTA............................................................................................................... V. ORDEN DEL D�A: Sesi�n secreta: se adopta resoluci�n sobre designaci�n por el Senado de integrante del Tribunal Constitucional.............. Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la ley N� 18.933, sobre Instituciones de Salud Previsional (2981-11) (queda pendiente su discusi�n particular) Recibimiento a delegaci�n del Senado de Francia........................................... VI. INCIDENTES: Peticiones de oficios (se anuncia su env�o)............................................ VERSI�N TAQUIGR�FICA I. ASISTENCIA Asistieron los se�ores: --Aburto Ochoa, Marcos --Arancibia Reyes, Jorge --�vila Contreras, Nelson --Boeninger Kausel, Edgardo --Bombal Otaegui, Carlos --Canessa Robert, Julio --Cantero Ojeda, Carlos --Cariola Barroilhet, Marco --Chadwick Pi�era, Andr�s --Coloma Correa, Juan Antonio --Cordero Rusque, Fernando --Espina Otero, Alberto --Fern�ndez Fern�ndez, Sergio --Flores Labra, Fernando --Foxley Rioseco, Alejandro --Frei Ruiz-Tagle, Carmen --Garc�a Ruminot, Jos� --Gazmuri Mujica, Jaime --Horvath Kiss, Antonio --Larra�n Fern�ndez, Hern�n --Mart�nez Busch, Jorge --Matthei Fornet, Evelyn --Moreno Rojas, Rafael --Mu�oz Barra, Roberto --Naranjo Ortiz, Jaime --Novoa V�squez, Jovino --N��ez Mu�oz, Ricardo --Ominami Pascual, Carlos --Orpis Bouch�n, Jaime --P�ez Verdugo, Sergio --Parra Mu�oz, Augusto --Pizarro Soto, Jorge --Prokurica Prokurica, Baldo --R�os Santander, Mario --Romero Pizarro, Sergio --Ruiz De Giorgio, Jos� --Ruiz-Esquide Jara, Mariano --Sabag Castillo, Hosa�n --Vald�s Subercaseaux, Gabriel --Vega Hidalgo, Ram�n --Viera-Gallo Quesney, Jos� Antonio --Zald�var Larra�n, Adolfo --Zald�var Larra�n, Andr�s --Zurita Camps, Enrique Concurrieron, adem�s, los se�ores Ministros del Interior subrogante, Secretario General de la Presidencia, Secretario General de Gobierno, de Salud, y el se�or Superintendente de Instituciones de Salud Previsional. Actu� de Secretario el se�or Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el se�or Jos� Luis Alliende Leiva. II. APERTURA DE LA SESI�N --Se abri� la sesi�n a las 16:1, en presencia de 32 se�ores Senadores. El se�or LARRA�N (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesi�n. III. TRAMITACI�N DE ACTAS El se�or LARRA�N (Presidente).- Se dan por aprobadas las actas de las sesiones 31� y 32�, ordinarias, en 1 y 2 de marzo del a�o en curso, que no han sido observadas. IV. CUENTA El se�or LARRA�N (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretar�a. El se�or ALLIENDE (Prosecretario).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas: Mensaje De Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, por medio del cual inicia un proyecto que modifica la Ley General de Pesca y Acuicultura en lo que respecta a la regulaci�n de la investigaci�n necesaria para la administraci�n de la pesca y la acuicultura (bolet�n N� 3.801-03). --Pasa a la Comisi�n de Intereses Mar�timos, Pesca y Acuicultura y a la de Hacienda, en su caso. Oficios Tres de la Honorable C�mara de Diputados: Con el primero informa que tom� conocimiento del rechazo del proyecto de ley que establece incentivos para la entrega de informaci�n en los delitos vinculados a los detenidos desaparecidos y ejecutados pol�ticos (bolet�n N� 3.391-17), a la vez que comunica la n�mina de los se�ores Diputados que integrar�n la Comisi�n Mixta que deber� formarse de conformidad con lo dispuesto en el art�culo 67 de la Carta Fundamental. -- Se toma conocimiento y se manda agregar el documento a sus antecedentes. Con el segundo informa que ha desechado algunas de las enmiendas propuestas por el Senado al proyecto que introduce modificaciones a la ley N� 19.175, Org�nica Constitucional sobre Gobierno y Administraci�n Regional, en lo relativo a la estructura y funciones de los gobiernos regionales, con urgencia calificada de "simple" (bolet�n N� 3.203-06), a la vez que comunica la n�mina de los se�ores Diputados que integrar�n la Comisi�n Mixta que deber� formarse conforme a lo dispuesto en el art�culo 68 de la Constituci�n Pol�tica de la Rep�blica. --Se toma conocimiento y se designa a los se�ores Senadores miembros de la Comisi�n de Gobierno, Descentralizaci�n y Regionalizaci�n para que integren la referida Comisi�n Mixta. Con el tercero comunica que ha prestado su aprobaci�n a la proposici�n formulada por la Comisi�n Mixta constituida para resolver las divergencias suscitadas durante la tramitaci�n del proyecto de ley que modifica el C�digo de Aguas, con urgencia calificada de "simple" (bolet�n 876-09). --Queda para tabla. Informes De la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, reca�do en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la ley N� 19.903 en lo relativo al cobro de aranceles por parte de los conservadores de bienes ra�ces (bolet�n N� 3.642-07). De la Comisi�n de Econom�a, reca�do en el proyecto de ley, en primer tr�mite constitucional, que modifica diversos cuerpos legales para limitar el cobro de intereses, regular la subasta hipotecaria y enmendar el recurso de revisi�n (bolet�n N� 3.606-03). --Quedan para tabla. Moci�n De los Senadores se�ores R�os, Larra�n, N��ez y Andr�s Zald�var, con la que inician un proyecto que modifica la ley N� 19.638, que establece normas sobre la constituci�n jur�dica respecto de las iglesias y organizaciones religiosas, con el fin de regular la inscripci�n en el registro p�blico de una entidad religiosa, certificar su existencia y precisar su r�gimen de bienes (bolet�n N� 3.805-07). --Pasa a la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento. (El proyecto no podr� ser considerado en tanto su Excelencia el Presidente de la Rep�blica no lo incluya en la convocatoria a la actual Legislatura Extraordinaria de Sesiones del Congreso Nacional). Declaraci�n de inadmisibilidad Moci�n de los Senadores se�ores N��ez y R�os, mediante la cual inician un proyecto que modifica la ley N� 19.175, sobre Gobierno y Administraci�n Regional, con el fin de regular la instalaci�n de los consejos regionales. --Se declara inadmisible, por referirse a una materia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, en virtud de lo dispuesto en el n�mero 2� del inciso cuarto del art�culo 62 de la Carta Fundamental. El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la Cuenta. El se�or R�OS.- Pido la palabra sobre la Cuenta. El se�or LARRA�N (Presidente).- La tiene, Su Se�or�a. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, el proyecto que presentamos con el Senador se�or N��ez fue declarado inadmisible por la Mesa. Sin embargo, hemos sostenido una reuni�n con el se�or Ministro del Interior para resolver este tema, que nos parece de gran urgencia. Por ello, solicito que se oficie a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica manifest�ndole el inter�s del Senado por avanzar en esta materia, con el objeto de que preste su patrocinio a la iniciativa se�alada. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Si le parece a la Sala, se enviar� el oficio solicitado por el Honorable se�or R�os. --As� se acuerda. --------------- El se�or LARRA�N (Presidente).- Antes de entrar al Orden del D�a, aprovecho la oportunidad de saludar a distinguidos representantes del Senado de Colombia que nos honran con su presencia en las tribunas: se�or Emilio Otero Dajud, Secretario General Encargado de las Labores Legislativas; se�ora Selma Patricia Namur, Directora General Administrativa, y se�or Ruperto Bocanegra Padilla, Jefe de Divisi�n y Sistemas. Estos personeros nos visitan dentro del �mbito del Convenio suscrito el a�o reci�n pasado entre el Senado de Chile y el de Colombia, en virtud del cual se posibilita un intercambio de personal, de experiencias administrativas, etc�tera. Por ello se encuentran trabajando con nosotros durante estos d�as. Sean bienvenidos y les deseamos mucho �xito durante su misi�n aqu�, en Chile. --(Aplausos en la Sala y en tribunas). El se�or LARRA�N (Presidente).- Por otra parte, recuerdo a Sus Se�or�as que hoy, aproximadamente a las 17, nos visitar� el Presidente del Senado de Francia, se�or Christian Poncelet, acompa�ado de un importante grupo de miembros de esa C�mara y otras autoridades. A efectos de dar la bienvenida a dicha delegaci�n, leer los discursos de rigor y cumplir con las solemnidades propias de este tipo de visitas, se interrumpir� el debate de los proyectos. Se va a constituir la Sala en sesi�n secreta para tratar el primer punto de la Tabla. V. ORDEN DEL D�A SESI�N SECRETA --Se constituy� la Sala en sesi�n secreta a las 16:8 y adopt� resoluci�n sobre la designaci�n por el Senado de integrante del Tribunal Constitucional. --Se reanud� la sesi�n p�blica a las 16:17. ---------------- El se�or LARRA�N (Presidente).- Contin�a la sesi�n p�blica. MODIFICACI�N DE LEY N� 18.933, SOBRE INSTITUCIONES DE SALUD PREVISIONAL El se�or LARRA�N (Presidente).- Corresponde ocuparse en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la ley N� 18.933, sobre Instituciones de Salud Previsional, con segundo informe de la Comisi�n de Salud y urgencia calificada de "simple". --Los antecedentes sobre el proyecto (2981-11) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 28�, en 4 de marzo de 2003. Informes de Comisi�n: Salud, sesi�n 49�, en 13 de mayo de 2003. Salud (segundo), sesi�n 31�, en 1 de marzo de 2005 Discusi�n: Sesi�n 55�, en 20 de mayo de 2003 (se aprueba en general), sesi�n 32�, en 2 de marzo de 2005 (se aplaza su discusi�n particular). El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- La iniciativa fue aprobada en general en sesi�n de 20 de mayo de 2003. La Comisi�n de Salud, en su segundo informe, deja diversas constancias reglamentarias. Las modificaciones efectuadas al proyecto aprobado en general fueron acordadas por unanimidad, con excepci�n de aquellas que el se�or Presidente ir� sometiendo a votaci�n oportunamente. Cabe recordar que las enmiendas aprobadas un�nimemente deben ser votadas sin debate, de conformidad con lo dispuesto en el inciso sexto del art�culo 133 del Reglamento, salvo que alg�n se�or Senador, antes de iniciarse la discusi�n particular, solicite discutir la proposici�n de la Comisi�n respecto de alguna de ellas o que haya indicaciones renovadas. Hasta el momento, no se ha renovado ninguna. Todas las modificaciones requieren mayor�a simple para su aprobaci�n. Sus Se�or�as tienen a la vista un bolet�n comparado dividido en cuatro columnas, las que transcriben la ley N� 18.933, el proyecto aprobado en general por el Senado, las enmiendas efectuadas por la Comisi�n de Salud y, finalmente, el texto que resultar�a de aprobarse dichas modificaciones. El se�or LARRA�N (Presidente).- Solicito autorizaci�n del Senado para que ingrese el Superintendente de Instituciones de Salud Previsional, se�or Manuel Inostroza Palma. --Se accede. El se�or LARRA�N (Presidente).- A continuaci�n, corresponde dar por aprobadas todas las modificaciones que fueron acogidas por unanimidad en la Comisi�n, a menos que alg�n se�or Senador solicite discutir por separado alguna de ellas o... El se�or �VILA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or �VILA.- Pido que se vote separadamente el art�culo 22. El se�or R�OS.- Y el 24 ter. El se�or LARRA�N (Presidente).- Muy bien. En consecuencia, daremos por aprobado el resto de las disposiciones acogidas por unanimidad en la Comisi�n y que el se�or Secretario individualiz�, con excepci�n de los art�culos 22 y 24 ter, que ser�n discutidos y votados separadamente, al igual que las enmiendas que fueron objeto de votaci�n dividida. --Se aprueban, con las excepciones indicadas. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, si usted me autoriza, har� una relaci�n muy gen�rica sobre el contenido del proyecto, para entender mejor lo que votaremos, y en su momento retiraremos nuestra oposici�n a varias de las enmiendas aprobadas por mayor�a, de manera que debamos emitir pronunciamiento sobre muy pocas proposiciones de la Comisi�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Bien. Entonces, discutiremos en particular los preceptos que fueron objeto de votaci�n dividida, pues no hay indicaciones renovadas, y tambi�n, los art�culos 22 y 24 ter, respecto de los cuales se solicit� discusi�n y votaci�n separadas. El Senador se�or Ruiz-Esquide, en su calidad de Presidente de la Comisi�n de Salud, pidi� autorizaci�n para, antes de entrar al debate, hacer una breve rese�a sobre el contenido del proyecto, y anunci� que algunas de las votaciones divididas registradas en dicho �rgano se van a transformar en un�nimes, con lo cual agilizaremos el despacho de la iniciativa. Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, �sta es la tercera iniciativa legal que se plantea para reformar la salud. Con ella deber�amos dar por terminado este cap�tulo, si bien hay una cuarta, la "ley corta de isapres", y eventualmente una quinta, la "ley de derechos y deberes de los pacientes", que deber�a llegar al Senado. El proyecto que nos ocupa es bastante t�cnico y muy complejo en algunos aspectos. En la Comisi�n fue objeto de un debate dif�cil en determinados rubros, pero llegamos a una f�rmula de acuerdo bastante buena, a mi juicio, en la medida en que varios miembros de la Comisi�n depusimos nuestras objeciones en ciertos puntos, a fin de avanzar m�s r�pido en una materia sobre la que, a la larga, es necesario legislar. �Cu�les son los principales objetivos? 1) Ordenar la estructura, contenido y terminaci�n de los contratos de salud, los que deber�n contemplar las garant�as expl�citas y un plan complementario, con todos los otros beneficios que se acuerden. 2) Regular las tres modalidades permitidas de planes de salud, para evitar la proliferaci�n de miles de planes diferentes, lo que dificulta la comprensi�n por parte de los usuarios y el control de la Superintendencia. Estas modalidades son -vienen contenidas en la iniciativa-: plan de libre elecci�n del prestador; plan cerrado, donde se se�alan determinadamente los prestadores en convenio, y plan con prestadores preferentes, que combina las dos anteriores. 3) Precisar y acotar las exclusiones y las preexistencias -estas materias fueron objeto de debate en la Comisi�n y sobre ellas versan tres de los art�culos que no se aprobaron por unanimidad y que deber�n votarse-, las cuales s�lo podr�n referirse a cirug�a pl�stica con fines de embellecimiento (no curativa ni reparadora); atenci�n particular de enfermer�a; hospitalizaci�n con fines de reposo; prestaciones cubiertas por otras leyes. Adem�s, en estos art�culos se define que se entender� por preexistente la patolog�a o condici�n de salud conocida por el afiliado y diagnosticada por un m�dico antes de suscribir el contrato. 4) Acotar en la ley en proyecto las alzas de precios de los programas y planes, dentro de una banda estructurada en torno a las variables de precios base y tabla de factores por sexo y edad. Adem�s, se se�ala cu�les van a ser las variables de esta suerte de bandas de precios. La variaci�n -se�ala el proyecto- no podr� ser m�s de 1.3 veces el promedio ponderado de los porcentajes en que hayan cambiado los precios base. A estos efectos, se definen los t�rminos "precios base" y "tabla de factores". Todo ello est� destinado a lograr cierta nivelaci�n del alza de precios, claridad de los conceptos, conocimiento de las personas y m�s f�cil resoluci�n de los conflictos. 5) Mantener por un a�o el contrato de salud para los beneficiarios cuando el cotizante fallece y siempre que aqu�l tenga al menos un a�o de antig�edad. 6) Permitir al beneficiario que pasa a ser cotizante debido a que comienza a recibir ingresos por la muerte del causante optar a permanecer en la isapre con un plan de comercializaci�n que se ajuste a su cotizaci�n legal. 7) Crear el Fondo de Compensaci�n Solidario entre instituciones de salud previsional para compensar las diferencias de riesgos por sexo y edad. 8) Dotar a la Superintendencia de herramientas para precaver los riesgos que afecten los derechos de los cotizantes y sus beneficiarios, permiti�ndole recabar informaci�n oportuna y confiable sobre hechos relevantes relativos a la situaci�n financiera de las instituciones; disponer auditor�as externas conforme a las modalidades establecidas para las sociedades an�nimas abiertas, y controlar los traspasos de cartera. 9) Reformular los plazos y procedimientos cuando se cancela la inscripci�n de una isapre en el registro. 10) Regular y trasparentar la actividad de los agentes de venta de planes de salud. 11) Impedir la integraci�n vertical entre aseguradores y prestadores de la salud. Las isapres que sean adem�s prestadoras de salud deber�n constituir una persona jur�dica distinta y separar los giros, dentro de un a�o desde la publicaci�n de la ley en proyecto. Este punto fue muy discutido, pues algunos consideramos que no se garantizaba que en la pr�ctica esto no terminara siendo, en definitiva, una integraci�n vertical. Por eso, las atribuciones de la Superintendencia est�n dadas justamente para que pueda garantizar que se cumplan realmente el esp�ritu y el texto de la ley. 12) Reafirmar el rol de la Superintendencia de Salud -as� se llamar� la actual Superintendencia de Isapres- en la liquidaci�n y aplicaci�n de la garant�a que deben mantener las instituciones de salud previsional. Para conocimiento del Senado, perm�taseme enumerar los temas que suscitaron mayor discusi�n, los cuales muy probablemente van a seguir manteni�ndose en el debate posterior a la dictaci�n de la ley en proyecto. Primero, facultad de las isapres para requerir informaci�n de salud de sus afiliados y cotizantes a los efectos de resolver sobre la procedencia de determinado beneficio. En esta materia se opt� por mantener el car�cter confidencial de la ficha cl�nica -lo que a nuestro juicio es muy importante- y delimitar la entrega de datos personal�simos a lo estrictamente necesario y mediante certificado m�dico del prestador. En caso de discrepancia intervendr� un m�dico independiente de las partes, inscrito en la Superintendencia para estos fines, quien podr� revisar la ficha cl�nica. En seguida, definici�n y regulaci�n de las tres diferentes modalidades del plan de salud complementario a las garant�as del AUGE. Este punto se resolvi� por unanimidad. En cuanto a las exclusiones y las preexistencias, hay una definici�n de fondo que, cuando se trate esta materia, nos motivar� a algunos a reiterar nuestra oposici�n. Y est�n por �ltimo la revisi�n anual del contrato de salud y el ajuste del precio m�nimo, as� como la facultad de las isapres para modificar los precios base en los t�rminos ya se�alados. Para ello, se autoriza a la Superintendencia a los efectos de fijar cada diez a�os la relaci�n m�xima que podr� existir entre el factor m�s bajo y el m�s alto de la tabla, diferenciando por sexo; y en un art�culo transitorio -como lo pueden ver los se�ores Senadores- se establece, para el primer decenio, una relaci�n m�xima de nueve veces entre el m�nimo y el m�ximo en el caso de las mujeres y de catorce veces en el de los hombres. La ley en proyecto entrar� en vigencia junto con el Plan AUGE, y mediante ella se faculta al Presidente de la Rep�blica para fijar el texto refundido, coordinado y sistematizado de los cuerpos legales correspondientes. Se�or Presidente, termino se�alando que en el art�culo 1�, N� 10), letras b), a) bis y A, P�rrafo 2�, se retir� la oposici�n, para que se considere que a su respecto existi� consenso y, por lo tanto, haya aprobaci�n sin debate, en el �nimo tanto de los Senadores que estuvimos en la Comisi�n como de algunos que� El se�or LARRA�N (Presidente).- Perd�n, Su Se�or�a, pero quiero pedirle que precise, pues se est� refiriendo a las normas que tuvieron votaci�n dividida y se�alando que con relaci�n a ellas se retira la oposici�n para que se consideren aprobadas por unanimidad. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Art�culo 1�, N� 10), letra b)� La se�ora MATTHEI.- �Qu� p�gina? El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Lo ignoro, se�ora Senadora. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ya la identificaremos, a medida que vayamos avanzando. Pero queremos registrarlo, para los efectos de la labor de Secretar�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- N� 10) del art�culo 1�, letras b), a) bis... El se�or LARRA�N (Presidente).- Perd�n, se�or Senador, pero nos estamos confundiendo. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Lo veremos despu�s, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- S�. Cuando entremos al an�lisis pormenorizado Su Se�or�a nos indicar� respecto de qu� normas se retira la oposici�n. As� ser� m�s simple y se facilitar� la discusi�n. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Muy bien. Se�or Presidente, creemos haber aprobado esta iniciativa en la forma que nos parece m�s �til para el pa�s. Es una materia extremadamente controvertida; la discusi�n fue muy larga. Y debo reconocer que cada uno de nosotros hizo un esfuerzo por superar sus propias reticencias acerca de algunos puntos, en el �nimo de contar con la cuarta ley necesaria para llevar a cabo la reforma de la salud. Por �ltimo, quiero agradecer -ello es normal cuando se trata de este tipo de proyectos- la disposici�n y el trabajo de la secretar�a de la Comisi�n de Salud. La verdad es que la confecci�n del informe fue extremadamente compleja, porque avanz�bamos, retroced�amos y debimos compensar y conciliar muchos art�culos. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Los antecedentes entregados por Su Se�or�a ayudar�n al an�lisis pormenorizado de la iniciativa. En discusi�n particular el proyecto. Antes de dar inicio al an�lisis art�culo por art�culo, debo informar que se recibi� una indicaci�n destinada a sustituir una norma del proyecto. Como no se trata de una indicaci�n renovada, en su momento voy a solicitar la unanimidad de la Sala para tratarla. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Ciertamente, la indicaci�n se present� fuera de plazo. Sin embargo, el prop�sito es hacer ver a la Sala que, si bien no hubo coincidencia plena en la interpretaci�n de la norma pertinente, todos los miembros de la Comisi�n de Salud estamos disponibles para que se apruebe por unanimidad lo que en ella se consigna. El se�or LARRA�N (Presidente).- En su momento recabar� el consenso de la Sala para tratarla. Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Se�ores Senadores, respecto del art�culo 22 propuesto para la ley N� 18.933, que la Comisi�n aprob� por unanimidad (5 votos contra 0), se pidi� discusi�n y votaci�n separadas. El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n. Tiene la palabra el Honorable se�or �vila. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, ped� intervenir con relaci�n a este art�culo porque considero que la perversidad del sistema que agrupa a las instituciones de salud previsional no se elimina con este proyecto, sino que s�lo se enmascara. Yo dir�a que se hace m�s refinado todo lo que tiene que ver con la presentaci�n de las normas que lo estructuran. Al respecto, si bien el art�culo 22 aparentemente elimina la posibilidad de que las isapres hagan prestaciones en forma directa, no se proh�be en forma expresa que constituyan sociedades matrices. Entonces, por una v�a indirecta, a una sociedad holding le resulta factible controlar determinada isapre y las cl�nicas respectivas. En los hechos, no hemos avanzado nada en el prop�sito y esp�ritu del proyecto en an�lisis, que s�lo siembra confusi�n en los usuarios y en la ciudadan�a en general. Muchos podr�n pensar que con �l se transparenta la actividad, se impide que la concentraci�n de este negocio siga avanzando. Parecen no advertir los miembros de la Comisi�n de Salud que en este instante cinco isapres concentran el 90 por ciento del mercado. Estas empresas se hallan felices con la representaci�n que tuvieron en la Comisi�n respectiva por parte de los Senadores Espina, Matthei... La se�ora MATTHEI.- Perd�n: fue por unanimidad. El se�or �VILA.- Todos los que pasaron por ella percibieron n�tidamente que era imposible avanzar un mil�metro m�s all� de lo que dichas empresas han establecido como criterio para el manejo de su negocio. Quiero insistir en que el art�culo 22 se convierte en letra muerta, porque su prop�sito no servir� de nada en la realidad. El hecho de que se constituya un holding que maneje tanto la isapre como la cl�nica o el conjunto de cl�nicas correspondiente concentra la operaci�n en una sola mano y, por lo tanto, cierra toda posibilidad de que los usuarios tengan el derecho a la libre elecci�n. Ellos deber�n necesariamente someterse a un sistema cerrado que, por supuesto, privilegia el lucro por sobre todas las cosas. Habr� listas de m�dicos que se impondr�n a los cotizantes, sin que a �stos les sea factible la libre elecci�n. �Termin� ese derecho para todos los afiliados a las isapres! Eso tiene que saberse y debe quedar consignado en las Actas de esta sesi�n como una debilidad m�s de este intento por mejorar la salud en nuestro pa�s. Acerca de otros aspectos que est�n en la misma l�nea de lo que despierta la inquietud que se�alo, me reservar� para darles expresi�n en el momento en que se discuta la disposici�n respectiva. Mientras tanto, quiero dejar una constancia e insistir� El se�or LARRA�N (Presidente).- Termin� su tiempo, se�or Senador. El se�or �VILA.- Si lo que aqu� se aprob� alent� una m�nima ilusi�n en alguna persona, con mucho dolor le digo que ha sido falsa y que aquello quedar� como letra muerta, como algo imposible de aplicar en la realidad. Adem�s, los efectos de la ley en proyecto� El se�or LARRA�N (Presidente).- Termin� el tiempo de Su Se�or�a. El se�or �VILA.-�no ser�n retroactivos, de manera que todas las isapres ya organizadas podr�n seguir operando en la misma forma en el futuro sin ning�n inconveniente. Entonces, las disposiciones de esta normativa no regir�n para lo hasta ahora existente, que fue precisamente lo que inspir� un conjunto de modificaciones que hoy se derrumba de manera estrepitosa como una falsa ilusi�n. He dicho. El se�or R�OS.- Pido la palabra. El se�or LARRA�N (Presidente).- Puede hacer uso de ella, Su Se�or�a. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, el mayor logro de la Humanidad en los �ltimos 300 a�os es la libertad individual. Ella es la que en definitiva fija los caminos por los cuales cada uno de los seres humanos transita asumiendo sus propias responsabilidades. La libertad es la manifestaci�n de la responsabilidad. Por tal motivo, cuando normas legales contemplan obligaciones para todos los ciudadanos en una materia determinada, entiendo que esa libertad individual se sienta afectada. Pero cuando el individuo escoge libremente el sistema que utilizar� para resolver sus problemas de salud, que son propios de �l, no deber�a crearse al respecto una atm�sfera de tensi�n innecesaria. Sin embargo, me parece interesante observar -a lo mejor la Comisi�n de Salud podr�a entregarnos alguna informaci�n- que un conjunto de instituciones de salud previsional de car�cter cerrado tiene como objetivo la atenci�n de determinados grupos de trabajadores. Las hay en distintos yacimientos cupr�feros, en �reas laborales como Ferrocarriles, en fin. Dichas isapres, con recursos provenientes de negociaciones colectivas de bastante importancia y otros que forman parte de la acci�n de desarrollo social de las empresas, proporcionan a sus afiliados una muy buena atenci�n. Tengo entendido, si no me equivoco, que este sistema permite a no menos de 180 mil trabajadores acceder a prestaciones de salud muy adecuadas. Quiero entender que el nuevo art�culo 22 que se propone, m�s los incisos que se mantienen, tambi�n tienen por finalidad sostener esos sistemas de salud espont�neos que han surgido a trav�s de las isapres que se�al�. La eliminaci�n de la responsabilidad que pudiera tener una instituci�n de salud previsional sobre otras entidades para la ejecuci�n de planes de salud indudablemente afectar�a a las isapres referidas, que, como dije, atienden hoy a 180 mil trabajadores o m�s, quienes, con sus mujeres e hijos, llegan a casi un mill�n de personas. En consecuencia, no me parece adecuada la supresi�n. Por los motivos expuestos, votar� favorablemente la norma propuesta por la Comisi�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Viera-Gallo. El se�or VIERA-GALLO.- Se�or Presidente, creo que uno a veces, por las aspiraciones que tiene, no alcanza a distinguir con suficiente claridad la justeza de algunas cr�ticas y la exageraci�n de otras. Es evidente que esta disposici�n no suprime los holding. Ellos son de la esencia del sistema en que vivimos. Puedo tener una visi�n muy cr�tica de �ste; puedo concordar con el Senador se�or �vila en que el capitalismo va hacia la concentraci�n, y m�s a�n, hacia la de tipo monop�lico. Pero eso -repito- es de la esencia del sistema, por lo cual resulta dif�cil restringirlo. Lo que s� logra esta enmienda -y en esto el Honorable colega no tiene raz�n- es que aqu� habr� administraci�n y contabilidad separadas de dos empresas distintas, lo que impedir� los traspasos de dinero de una a otra y que, por esa v�a, se burle al usuario. Si propici�ramos la eliminaci�n de los holding, tendr�amos que suprimir a los 4 � 5 due�os de todas las grandes empresas o de gran parte de ellas, que son los llamados "grupos econ�micos". Pero eso escapa a la ley de isapres y supondr�a una reforma mucho m�s profunda del sistema en que vivimos. Lo que el proyecto en debate modestamente consigue es un beneficio hacia los usuarios, en el sentido de que no puede haber un privilegio de una isapre respecto de una cl�nica de su misma propiedad. Por otra parte, no es tan efectivo lo indicado por el se�or Senador en orden a que la iniciativa terminar�a con la libre elecci�n. Si �l la leyera atentamente, comprobar�a que hay planes tanto de libre elecci�n como cerrados y semicerrados. Todos son distintos y el usuario podr� escoger cualquiera de ellos con total libertad. Los planes cerrados no son de por s� negativos. Existen en Estados Unidos y abaratan los costos. Una persona, libremente, puede decir: "Prefiero un plan de salud cerrado si me atienden equis m�dicos, que me dan tales garant�as, porque me significa pagar menos que en uno de libre elecci�n". Pretender que la �nica modalidad sea la libre elecci�n total y, al mismo tiempo, que no suban los precios es una contradicci�n en los t�rminos. �ste es el motivo por el cual en Estados Unidos gran porcentaje de las prestaciones de salud se realiza a trav�s de planes cerrados. Por eso se�al� que en algunas cr�ticas el se�or Senador tiene raz�n, pero no en otras. Por lo expuesto, y sopesando las cosas positivas y las negativas, en la Comisi�n aprobamos por unanimidad la modificaci�n a este art�culo. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Espina. El se�or ESPINA.- Se�or Presidente, yo no iba a intervenir, pero he resuelto no dejar pasar las insolencias que habitualmente dice el Senador se�or �vila. Y le digo que cada vez que lo haga voy a contestarle. �Para payasos, no, se�or Presidente! �No entr� a esta Corporaci�n para escuchar payasadas! Y lo voy a se�alar muy derechamente. Aqu� podemos discutir ideas y temas de fondo; pero sostener la insolencia de que los Senadores de la Alianza estamos defendiendo intereses o votando� El se�or �VILA.- ��sa es la aut�ntica verdad! El se�or ESPINA.- �Se�or Presidente, d�gale� El se�or LARRA�N (Presidente).- Senador se�or �vila, le ruego respetar el uso de la palabra. El se�or ESPINA.-...que haga sus payasadas cuando �l intervenga! El se�or �VILA.- �Usted no� El se�or LARRA�N (Presidente).- �Silencio, Senador �vila! El se�or ESPINA.- �Yo no le voy a aceptar a este se�or que pretenda sostener que nosotros no votamos seg�n lo que estimamos intereses generales del pa�s y de la ciudadan�a! El se�or �VILA.- �Por favor�! El se�or ESPINA.- Debo manifestar que la norma en debate se aprob� por la unanimidad de los cinco miembros de la Comisi�n de Salud, entre ellos los Honorables se�ores Boeninger, Viera-Gallo y Ruiz-Esquide, su Presidente. Y tambi�n concord� el Gobierno. �Significa eso que el Senado completo, representado por los integrantes de ese �rgano t�cnico, con la anuencia del Ejecutivo, estar�a votando en defensa de los intereses de las isapres? En algunos aspectos, por supuesto, se tiene en cuenta la opini�n de los representantes de las instituciones de salud previsional. Pero en la mayor�a de los casos nosotros velamos por los intereses de la gente que nos eligi�, por los usuarios de un sistema de salud extraordinariamente complejo. Y se requiere tener frialdad y objetividad para que ese sistema termine favoreciendo a la inmensa mayor�a de los chilenos. Por lo tanto, se�or Presidente, debo se�alar que no voy a aceptar insultos, injurias ni descalificaciones. Cuando a este se�or lo insultan a prop�sito de otro tema, entonces �l tiene derecho a salir a defenderse. Pero cree que puede trapear con el nombre de otros Senadores y que nos vamos a quedar callados. �Yo no me voy a quedar callado ni aqu�, ni afuera, ni por las v�as que �l quiera, se�or Presidente! �No estoy dispuesto a aceptar insultos, porque represento a gente decente que merece respeto! La modificaci�n propuesta resuelve una situaci�n que en Chile hasta ahora se se permite: la integraci�n entre quienes financian las prestaciones de salud y aquellos que las otorgan. El art�culo 22 de la ley N� 18.933 es diametralmente distinto. La norma que propone la Comisi�n establece la prohibici�n de que las isapres que se dediquen al financiamiento de las prestaciones y beneficios de salud participen en la ejecuci�n de dichas prestaciones y beneficios, y en la administraci�n de los prestadores. Adem�s, se otorgan a la Superintendencia de Instituciones de Salud Previsional un c�mulo de facultades que permitir�n contar con instrumentos para fiscalizar si en alg�n momento, por la v�a de de los hechos, se produce una integraci�n vertical que vaya en perjuicio de los intereses de los usuarios. Lo que se propone ahora, se�or Presidente, es mucho m�s de lo que ha estado vigente durante a�os. Y es un avance acorde con todas las normas que el Gobierno debati� bastante tiempo en la Comisi�n. Por lo tanto, puedo se�alar, para la historia fidedigna del establecimiento de la ley, que en el nuevo art�culo 22, adem�s de prohibirse la integraci�n vertical, se otorgan facultades a la Superintendencia para fiscalizar adecuadamente. Y si el Superintendente en el futuro considera que en la pr�ctica son insuficientes, entonces se le entregar�n m�s para que mejore su fiscalizaci�n. Jam�s la intenci�n fue restringir. Reitero: esta norma es producto del acuerdo un�nime de la Comisi�n de Salud, con participaci�n del Gobierno y de la Oposici�n, y con el benepl�cito del se�or Ministro, quien la consider� un avance important�simo. Debatamos ideas, pues para eso nos eligieron, y no transformemos esto en un burdel de injurias e insultos que, por lo menos yo, no voy a aceptar. El se�or �VILA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. El se�or �VILA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- No le he dado la palabra, se�or Senador. El se�or �VILA.- S�. Pero se la estoy pidiendo porque... El se�or LARRA�N (Presidente).- �No se la estoy dando, Senador �vila! El se�or �VILA.- �Pero usted comprende� El se�or LARRA�N (Presidente).- Lo siento mucho. El se�or �VILA.- �que yo tengo el derecho... El se�or LARRA�N (Presidente).- �No tiene ning�n derecho, se�or Senador! El se�or �VILA.- �Tengo el derecho, se�or Presidente,� El se�or LARRA�N (Presidente).- �No, se�or Senador! El se�or �VILA.- �porque he sido calificado� El se�or LARRA�N (Presidente).- �No, Senador! �Usted fue el que profiri� una injuria! El se�or �VILA.- �Yo no he dicho ninguna injuria! El se�or LARRA�N (Presidente).- �Usted, se�or Senador, se�al� El se�or �VILA.- �No he dicho ninguna injuria! El se�or LARRA�N (Presidente).-�que Senadores elegidos por la ciudadan�a son representantes de intereses econ�micos! Y eso, en mi opini�n, es una injuria. Si eso se le dice a Su Se�or�a o a cualquier Senador, lo va a considerar una injuria. Y el Honorable se�or Espina ha ejercido el derecho a vindicar su nombre. Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. El se�or �VILA.- �Yo he se�alado... El se�or LARRA�N (Presidente).- �Silencio, por favor! El se�or �VILA.- �que est� representando muy fielmente los intereses de las isapres! El se�or LARRA�N (Presidente).- �He dicho que tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei! El se�or �VILA.- �Y �sa es una realidad! El se�or LARRA�N (Presidente).- �Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei! La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, invito a todos los se�ores Senadores a que abran el bolet�n comparado en la p�gina 135, donde se encuentra el art�culo primero transitorio. Si lo leen, podr�n constatar la absoluta ignorancia con que cual habla el Senador �vila. Ha sostenido que �sta no es una ley retroactiva y que, por lo tanto, las isapres que ya se constituyeron y tienen una cl�nica o un prestador de servicios seguir�an en las mismas condiciones. Pues bien, el art�culo primero transitorio dice textualmente: "Aquellas Instituciones de Salud Previsional" -eso significa isapres, Senador �vila- "que a la fecha de publicaci�n de la presente ley, sean tambi�n prestadores de atenciones de salud, deber�n constituir, dentro del plazo de un a�o contado desde dicha publicaci�n, una nueva Instituci�n de Salud Provisional," -es decir, una nueva isapre- "mediante la creaci�n de una persona jur�dica distinta, la que se entender�, para todos los efectos legales, como continuadora legal de aqu�lla en lo que dice relaci�n con el giro de financiar prestaciones y beneficios de salud regulados por la ley N� 18.933". O sea, obligamos a esas instituciones a separarse dentro de un a�o. Se�or Presidente, puedo decir� El se�or �VILA.- �Eso es una farsa! El se�or LARRA�N (Presidente).- Le ruego no interrumpir, se�or Senador. �Respete el derecho de quien est� hablando! El se�or �VILA.- �Porque usted no me da la palabra! El se�or LARRA�N (Presidente).- �No se la voy a dar mientras no respete a los dem�s, se�or Senador! Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, el Senador �vila generalmente dice cosas inexactas, que son medias verdades, medias mentiras,� El se�or �VILA.- �Verdades completas! La se�ora MATTHEI.- �que no reflejan en absoluto lo que establece la ley ni tampoco la opini�n del Senado. Resulta que aqu� �l es el �nico -puede haber alguien m�s; no s�- que sostiene una posici�n claramente minoritaria. Y se acusa a la Oposici�n de estar dictando leyes en beneficio de alguien, en circunstancias de que nosotros somos minor�a en esa Comisi�n. �Somos minor�a! Adem�s, la mayor�a de estas enmiendas han sido propuestas por el Gobierno. Entonces, �saben qu� m�s? Estoy cansada de que continuamente nos descalifique en t�rminos baratos, cochinos. Lo ha hecho antes con otra gente. Cuando alguien dijo que �l ten�a intereses, �huy, qu� gran ofensa! Pero �l se ha acostumbrado en este Senado a ofender en forma gratuita y, en general, con una ignorancia inaceptable. Ha sostenido hoy cosas que son n�tidamente falsas, lo que demuestra que quiz�s antes de entrar a la Sala tuvo una conversaci�n de dos minutos con alguien que lo mal inform� y que jam�s ley� el proyecto. Gracias, se�or Presidente. El se�or �VILA.- �Es falso lo del holding? �Es falso? El se�or LARRA�N (Presidente).- Ofrezco la palabra. La tiene el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, desde ya sabemos que esta iniciativa genera conflictos de planteamientos. Entre las reformas de la salud, no cabe ninguna duda de que �sta es la con m�s aristas. El Senador que habla desde siempre ha manifestado una fuerte cr�tica al modelo de la isapres -nadie lo ignora- y estima que fue creado equivocadamente. Pero �se no es el tema al que estamos abocados hoy, sino el siguiente. Si yo pudiera resolver sobre el modelo de las isapres, lo har�a de otra forma. A lo mejor lo construir�a sobre la base de una concepci�n mutualista. En las mutuales de salud no hay ganancias, sino reinversi�n. �se es el modelo que yo preferir�a. Tanto es as� que con el Honorable se�or Andr�s Zald�var presentamos un proyecto. El Gobierno nos dijo que no era necesario hacer esa modificaci�n y que otros -incluso las mutuales- podr�an trabajar en este tema. Pero no se han interesado. Se�or Presidente, hemos llegado a un punto donde -y quisiera que los Honorables colegas lo comprendieran-, en un Senado como �ste y en una sociedad que tiene dos visiones sobre la salud -tambi�n en educaci�n-, deber�a considerarse obligaci�n nuestra abordar un mecanismo que no funciona bien. La concepci�n equivocada de las instituciones de salud previsional devino en un modelo que no se puede cambiar, pero s� mejorar. �sa es la tesis central. Y los que �ramos m�s radicales en un sentido o m�s radicales en otro nos pusimos de acuerdo para avanzar. Esto es lo que se discute. Cuando el Honorable se�or �vila formula algunas observaciones, se refiere a cosas que son ciertas. Creo que tiene pleno derecho a hacerlo, siempre que se exprese en los t�rminos que corresponden en el Senado. Pienso que, en ese sentido, con el correr del tiempo va a avanzar. Pero tambi�n es verdad que este asunto tiene otro lado. El hecho concreto es que sobre este tema se ha formulado una de las grandes cr�ticas al modelo actual. Basta la instalaci�n de una isapre para que los m�dicos y los profesionales se "funcionaricen"; luego se crea una cl�nica con laboratorio, y al final todo es vertical, convirti�ndose en algo bastante anti�tico. Tendremos que acostumbrarnos a que en Chile las leyes se cumplan. Se dice: "Mire, se van a pasar por el lado las disposiciones de un cuerpo legal". Estoy de acuerdo. Pero de alguna manera debemos lograr que la ley se cumpla. Y, para eso, en esta misma normativa otorgamos atribuciones a la Superintendencia respectiva Sin embargo, tambi�n tratamos de que sobrevivan peque�as cl�nicas privadas o centros de salud, especialmente en las Regiones, para que la isapre no obligue a concurrir a la cl�nica de su propiedad. En ese sentido, rescato el valor de lo que hemos hecho, con todas las limitaciones del caso. Y lo rescato en este punto concreto, que se repite en otros aspectos, pero que cont� con el fuerte respaldo de la Asociaci�n de Cl�nicas Privadas, que representa a una cantidad enorme de instituciones muy peque�as a veces, sobre todo en Regiones, donde se hallan absolutamente al margen de mayores posibilidades. Se resguardan, as�, la libre elecci�n en la atenci�n, el financiamiento adecuado y el que las isapres no se transformen s�lo en entidades financieras. Y ello, con todo el rechazo que abrigo contra ese sistema. Pero, �por favor!, a veces, cuando se est� ante un imposible, es preciso trabajar sobre la base de los avances que es dable materializar. Estimo que se ha dise�ado un buen mecanismo para que la gente pueda actuar con libertad, para que se disponga de los fondos necesarios y para que exista una empresa privada no monop�lica, no financiera, que represente el trabajo diario de muchos m�dicos, enfermeras y profesionales, as� como tambi�n el inter�s de los accionistas menores que invierten en una cl�nica peque�a, como sucede en las ciudades que no son Santiago, Valpara�so o Concepci�n. �se es el sentido m�s profundo del asunto y de c�mo se trat� el tema. El se�or LARRA�N (Presidente).- Pidi� la palabra el se�or Ministro de Salud. Sin embargo, ha llegado la delegaci�n del Senado de Francia, por lo que se suspender� el an�lisis del proyecto. Luego de recibirla, podr� intervenir el Ministro y se votar� el art�culo en debate. El se�or MORENO.- Una pregunta, se�or Presidente: �hasta qu� hora se extender� el Orden del D�a? La se�ora FREI (do�a Carmen).- Hasta las 18:30. El se�or LARRA�N (Presidente).- Resta todav�a una hora con diez minutos, aproximadamente, tiempo al cual no se imputa el que se destinar� a los visitantes. El se�or MORENO.- Eso es lo que quer�a saber. El se�or LARRA�N (Presidente).- Una vez que se reanude el tratamiento de la iniciativa quedar� -repito- una hora y diez minutos de Orden del D�a para, deseablemente, despacharla. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, el lapso que tome el recibimiento debe imputarse a la parte de la sesi�n en que nos encontramos, la cual dura hasta las 18:30. El se�or LARRA�N (Presidente).- No corresponde hacerlo, se�or Senador, porque �se no es un punto incluido en el Orden del D�a. Se suspende la discusi�n particular del proyecto con el objeto de recibir a la delegaci�n francesa. -------------- RECIBIMIENTO A DELEGACI�N DEL SENADO DE FRANCIA El se�or LARRA�N (Presidente).- Excelent�simo Presidente del Senado de Francia, se�or Christian Poncelet; se�ora Vicepresidenta de esa Corporaci�n, Senadora do�a Mich�le Andr�; se�or Vicepresidente del Senado de Francia y Presidente del Grupo de Amistad Francia-Am�rica Latina, Senador don Roland du Luart; se�or Presidente del Grupo de Amistad Francia-Chile, Senador don Bernard Angels; Senadora se�ora Jacqueline Gourault; Senador se�or Michel Guerry; Senador se�or Jean-Marc Pastor; Excelent�simo Embajador de Francia en Chile, se�or Alain Le Gourri�rec; Se�oras y se�ores Senadores: En mi calidad de Presidente del Senado de Chile, deseo agradecer esta visita en mi nombre y en el de todos los integrantes de esta Alta Corporaci�n. Para nosotros constituye un honor muy alto la presencia de esta delegaci�n en nuestro territorio, porque tenemos una profunda admiraci�n por la historia del pueblo franc�s y por su extraordinaria tradici�n, que, en todos los planos (jur�dico, pol�tico, econ�mico, cultural y social), ha hecho destacar a Francia en la historia de la Humanidad. Y nos honra muy especialmente, porque entre ambas naciones se han desarrollado intensos v�nculos bilaterales que han distinguido la relaci�n entre nuestros Gobiernos en los �ltimos a�os y que ahora buscan proyectarse en el �mbito legislativo. Su presencia en esta Sala as� lo confirma. Es, tambi�n, se�or Presidente, una ocasi�n muy propicia para agradecer, a trav�s de usted y de su delegaci�n, al Estado de Francia por haber sido el primero en apoyar el acuerdo de asociaci�n de Chile con la Uni�n Europea, hoy en vigencia. Por lo anterior, esperamos que Francia siga siendo un socio activo de nuestro pa�s en su proyecci�n dentro de la Uni�n Europea, entendiendo que la asociaci�n es un acuerdo, no s�lo de libre comercio, sino tambi�n de cooperaci�n plena en todos los �mbitos: pol�tico, cultural, educativo y social. Pensamos que la integraci�n no s�lo presenta una dimensi�n econ�mica, sino que tambi�n debe proyectarse en muchos otros planos. Es lo que le otorga sentido a ese proceso; es lo que lo humaniza y lo impulsa hacia el futuro. Ciertamente, valoramos los acuerdos en el �rea econ�mica-comercial. Y, por eso mismo, creemos que la asociaci�n entre nuestro pa�s y la Uni�n Europea constituye una iniciativa que debe fortalecer los principios de una econom�a global y abierta, los cuales se sustentan en que exista una competencia que debe ser justa y leal. Por ello, invito a que ambos Parlamentos, el chileno y el franc�s, puedan proyectar en nuestras realidades regionales la fuerza y vigencia de tales postulados con ese alcance. Ello es especialmente necesario en el actual escenario que nuestro pa�s enfrenta a ra�z, por ejemplo, de las salvaguardias impuestas a sus exportaciones de salm�n, hecho que habla de una verdadera necesidad de profundizar en el esp�ritu genuino del Acuerdo con la Uni�n Europea. Las relaciones comerciales bilaterales entre Chile y Francia han demostrado ese esp�ritu en plenitud, con un aumento del intercambio comercial entre ambas naciones, durante el a�o 2004, de m�s de 73 por ciento, en comparaci�n con el nivel alcanzado en el 2003, lo que ha convertido a Francia en uno de nuestros m�s importantes socios comerciales de la regi�n. A ello debemos agregar, con satisfacci�n, que no existe ning�n asunto contencioso en materia comercial entre nuestros pa�ses, lo que constituye una prueba m�s de los enormes frutos que pueden generar los acuerdos de libre comercio cuando se aplican en su recto esp�ritu. Testimonio de esto es el apoyo que Francia nos brind� en el delicado caso de las exportaciones de salm�n. As�, no puedo dejar de mencionar el ambicioso y visionario proyecto a que se encuentra abocado el Senado de Francia, liderado por su Presidente, se�or Christian Poncelet, del cual nos interiorizamos en la �ltima visita realizada a dicho pa�s por una delegaci�n de Senadores chilenos, integrada por el Honorable se�or Romero y quien habla. Entonces supimos del inter�s por promover la creaci�n de un Senado Latinoamericano, iniciativa que se suma a otras similares que se desarrollan en Europa y en otros contextos mundiales. La configuraci�n de una verdadera institucionalidad parlamentaria en Am�rica Latina ha sido y es una constante preocupaci�n de nuestro Senado, en el entendido de que s�lo un trabajo mancomunado entre los parlamentos nos puede ayudar a enfrentar los nuevos desaf�os que demandan las caracter�sticas del desarrollo contempor�neo. El mundo hoy act�a en bloques y los parlamentos, m�xima expresi�n de toda democracia, deben jugar un rol importante y decisivo en estos procesos. En efecto, por lo singular de nuestras funciones, que nos llevan a ser representantes de la sociedad civil y, a la vez, cooperadores y fiscalizadores del actuar del Poder Ejecutivo, los parlamentos son la expresi�n m�s genuina de la democracia. Por lo mismo, nos encontramos en una situaci�n inmejorable para generar los canales necesarios que permitan alcanzar los consensos y acuerdos que har�n posible en el futuro construir una institucionalidad que se levante con legitimidad y trabaje de modo efectivo. Y, a este respecto, la efectividad pasa, antes que nada, por conseguir estructurar verdaderas bases comunes en materias econ�micas, legislativas y culturales, las que constituyen el requisito indispensable para pensar en el Parlamento Latinoamericano o en organizaciones de parlamentarios en el contexto de Am�rica Latina. S�lo entonces esa entidad surgir� como una necesidad real, m�s que como un mero sue�o ut�pico destinado a desaparecer, como ha ocurrido tantas veces en nuestro continente con iniciativas similares que no han estado enraizadas en el pasado. Son las demandas efectivas de intercambio y cooperaci�n, basadas en los requerimientos de bienestar de nuestros pueblos, que exigen respuestas de esta envergadura para enfrentar, desde �stas, los problemas comunes que nos afectan. Por ello, se�or Presidente, agradecemos y valoramos el inter�s demostrado por el Senado de Francia en tal iniciativa y esperamos colaborar como C�mara Alta en alcanzar los consensos previos y necesarios para pensar en una institucionalidad latinoamericana fuerte y eficaz. La experiencia en el Viejo Continente, a trav�s del Parlamento de la Uni�n Europea, es, ciertamente, un buen antecedente para los pasos que alg�n d�a tambi�n tendremos que dar en Am�rica Latina. Se�or Presidente, hago votos porque la estad�a de ustedes en nuestro pa�s sea exitosa y del mayor provecho posible. Para nosotros, admiradores de la tradici�n pol�tica de Francia, en particular para muchos de nuestros Senadores que incluso se han formado en esa distinguida Rep�blica, resulta especialmente valiosa su presencia en el Senado chileno, y esperamos que de ella fluya hacia el futuro una vinculaci�n estrecha, seria y de un profundo significado hist�rico entre nuestras Corporaciones. Muchas gracias. --(Aplausos en la Sala y en tribunas). El se�or LARRA�N (Presidente).- A continuaci�n, en nombre de la C�mara Alta, impondr� la condecoraci�n del Senado de Chile al se�or Presidente del Senado franc�s, don Christian Poncelet. --El se�or Larra�n (Presidente) impone al se�or Poncelet la condecoraci�n Orden al M�rito del Senado de la Rep�blica de Chile. --(Aplausos en la Sala y en tribunas). El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Presidente del Senado de Francia. El se�or PONCELET (Presidente del Senado de Francia).- Se�or Presidente del Senado; se�oras y se�ores Senadores; se�ores Embajadores; se�oras y se�ores; queridos amigos: Antes de nada, quiero agradecerle especialmente al se�or Presidente -querido amigo- las amables palabras que me ha dirigido y a las cuales soy muy sensible, al igual -estoy seguro- que la delegaci�n que tengo el privilegio de encabezar, que est� integrada por seis Senadores, quienes representan tanto a la mayor�a como a la oposici�n, y entre los cuales se hallan los dos Vicepresidentes del Senado. Deseo manifestarle que me siento honrado de que sea su mano la que me condecore con la medalla del Senado. Mi orgullo es a�n mayor cuando esto ocurre en sesi�n plenaria, en este alto lugar de la democracia. Para m� es un honor que sea usted, se�or Presidente, quien me acoja aqu�, en el Senado de la Rep�blica de Chile. Y agradezco tambi�n a sus colegas por haberse adherido a este encuentro. Se�or Presidente, se�oras y se�ores Senadores: En primer lugar, deseo aprovechar esta ocasi�n �nica que me dan para saludar al Chile actual, que ustedes representan en toda su riqueza y diversidad. Un Chile moderno, bien inserto en el mundo globalizado de hoy y que mira hacia el futuro sin desconocer su historia. Quisiera, en particular, alegrarme, junto con Sus Se�or�as, por una vuelta plena y entera a la democracia, garantizada por la solidez de las instituciones chilenas, que confieren a su grande y hermoso pa�s una estabilidad inigualada en la regi�n, estabilidad consolidada por una destacada prosperidad, que hacen del Chile de hoy un modelo, un ejemplo, en el continente y m�s all� de �l. Dicha estabilidad va a la par con la vitalidad de su vida pol�tica, que se anuncia especialmente animada este a�o con las elecciones presidenciales y parlamentarias de diciembre. Pero tranquil�cense, pues ustedes s�lo nos preceden, ya que los imitaremos en 2007, a�o en que los franceses tambi�n tendremos comicios. Un fen�meno a�n m�s destacable es el de que esta vitalidad democr�tica y pol�tica de Chile va a la par con un consenso nacional sobre sus grandes orientaciones. Primero, pienso en su visi�n del mundo. Ustedes, al igual que los franceses, desean un mundo multipolar, respetuoso del Derecho y protector de la diversidad cultural. Despu�s, pienso en su visi�n de Chile en el mundo. Ustedes quieren un pa�s resueltamente abierto, en particular en el campo comercial, donde se destacan. Nuestro d�ficit comercial lo muestra mejor que un largo discurso. Esta apertura al mundo, que me place saludar, encontr� su punto culminante en noviembre pasado, cuando vuestra naci�n organiz� -con el �xito que conocemos- la cumbre de la APEC, que reuni� a los m�s altos responsables de una veintena de pa�ses de Asia y del Pac�fico para tratar materias de cooperaci�n econ�mica. Se�or Presidente, se�oras y se�ores Senadores: Despu�s de haber saludado el �xito pol�tico y econ�mico chileno, deseo igualmente celebrar, en este prestigioso lugar, el reencuentro de su pa�s con Europa. La historia, ya antigua, de las relaciones del Viejo Continente con ustedes conoce un nuevo �mpetu luego del acuerdo de asociaci�n firmado entre la Uni�n Europea y Chile, que entr� en vigor en 2004. Ese acuerdo determinante recuerda -si fuera necesario- que los europeos no son indiferentes a los chilenos, cualquiera sea la distancia que nos separe, y comporta nuevas facetas. Est�, por supuesto, el comercio, siempre esencial. No volver� a hablar de ello. Pero tambi�n deben considerarse la cooperaci�n cient�fica y cultural y la instauraci�n de un verdadero di�logo pol�tico, exhaustivo y regular. Por lo dem�s, los resultados no se han hecho esperar. Los intercambios comerciales entre la Uni�n Europea y Chile han crecido mucho en los �ltimos meses. Y estoy seguro de que s�lo es el comienzo. Al igual que Europa no se desinteresa por Chile, s� que ustedes no se desinteresan por la organizaci�n europea, que el a�o pasado se ampli� con diez nuevos Estados miembros y pr�ximamente deber�a disponer de una Constituci�n, si todos sus integrantes la ratifican, como lo espero ardientemente. Ampliada y fortalecida por una Constituci�n, y al progresar regularmente en el camino de una pol�tica extranjera y de defensa com�n, Europa deber�a disponer por fin de una influencia pol�tica a la altura de su peso econ�mico y demogr�fico. Chile, entonces, ha realizado una buena opci�n al privilegiar sus relaciones con la Uni�n Europea. El futuro dar� la raz�n tanto a ustedes como a nosotros; pero no debemos bajar la guardia. Se�or Presidente, se�oras y se�ores Senadores: En este escenario, a la vez nuevo y favorable, Francia encontr� su lugar r�pida y naturalmente. Nunca antes nuestras relaciones pol�ticas fueron tan buenas y regulares como despu�s del comienzo de los a�os 90. Las relaciones franco-chilenas han sido diversas. Es el caso de nuestra cooperaci�n cient�fica. Francia est� orgullosa de ser en ese campo vuestro primer socio; de los intercambios entre nuestras universidades, con permanentes movimientos de profesores y estudiantes, e incluso de nuestra colaboraci�n en materia de defensa. Para m�, el hecho de que numerosos estudiantes e investigadores chilenos realicen sus estudios en Francia y no exclusivamente en Estados Unidos no s�lo constituye un s�mbolo. Es reconfortante que cada vez sean m�s numerosos los franceses que estudian en Chile. Despu�s de todo, no hacen sino caminar tras las huellas famosas de nuestro compatriota Claudio Gay, c�lebre naturalista que, a mediados del siglo XIX, fue protagonista de una verdadera "suma" de tesoros de la naturaleza chilena y quien, muy convencido por sus trabajos enciclop�dicos, termin� por adquirir la nacionalidad chilena. Se�or Presidente, se�oras y se�ores Senadores: Ustedes saben que Francia es el primer socio comercial europeo de Chile, aunque tambi�n es cierto que estamos lejos de conseguir los niveles de Estados Unidos, Jap�n, China, o de algunos grandes pa�ses de Am�rica Latina. Sin embargo, ustedes me dir�n -y con raz�n- que Francia todav�a puede hacer un esfuerzo en materia de inversiones. Efectivamente, no somos m�s que el octavo inversor extranjero en Chile. Cuenten conmigo para que, de regreso a mi pa�s, invite a nuestras empresas a olvidar la distancia, para s�lo retener la estabilidad pol�tica y el �xito econ�mico. Se�or Presidente, se�oras y se�ores Senadores: Como pueden ver, se ha hecho bastante. Siendo optimista, sin pecar de ingenuo, s� que hay mucho por hacer, ya que Chile y Francia, en un mundo cada vez m�s borroso e incierto, tienen como inter�s com�n el reforzamiento de sus lazos. Su historia, su cultura y sus valores -pese a la geograf�a- los conducen a ello. Estamos geogr�ficamente lejos, pero cultural y pol�ticamente cerca. Tendr�a, por supuesto, muchas cosas m�s que decirles, inspirado sobre todo en la calidez de su acogida y en la gentileza de su hospitalidad; pero el tiempo, como siempre, es limitado. D�jenme simplemente manifestar bien fuerte: �Viva Chile! �Viva Francia! �Viva la amistad franco-chilena! --(Aplausos en la Sala y en tribunas). El se�or LARRA�N (Presidente).- Luego de haber o�do tan notable discurso, creo que debemos sentirnos doblemente honrados de tener entre nosotros al se�or Presidente del Senado franc�s y su delegaci�n. �Bienvenidos a Chile, se�or Presidente y se�ores Senadores! �Gracias por su presencia! Se suspende la sesi�n por cinco minutos, a fin de poder saludar personalmente a nuestros visitantes. ---------------- --Se suspendi� a las 17:31. --Se reanud� a las 17:39. --------------- El se�or LARRA�N (Presidente).- Contin�a la sesi�n. MODIFICACI�N DE LEY N� 18.933, SOBRE INSTITUCIONES DE SALUD PREVISIONAL El se�or LARRA�N (Presidente).- Prosigue la discusi�n particular del proyecto que enmienda la ley N� 18.933, sobre Instituciones de Salud Provisional. Tiene la palabra al se�or Ministro. El se�or GARC�A (Ministro de Salud).- Se�or Presidente, �nicamente deseo insistir en que, tal como expresaron los Senadores se�ores Ruiz-Esquide y Viera-Gallo, entre otros, esta iniciativa pretende, en gran medida, mejorar y transparentar una serie de situaciones que hoy en d�a hacen que no siempre los usuarios de las isapres conozcan todos los elementos y tengan resguardados sus derechos. Frente a lo planteado por el Honorable se�or �vila, quiero decir que, tal como muy bien indic� el Senador se�or Viera-Gallo, el hecho de que las instituciones operen con distintos RUT tal vez no generar� una diferenciaci�n en el poder, en la propiedad de empresas pertenecientes a un mismo holding, pero transparentar� enormemente la manera como fluyen los recursos puestos en las isapres por cotizantes y beneficiarios. De esa forma habr� una mejor fiscalizaci�n en cuanto a que tales fondos sean bien utilizados y efectivamente sirvan para responder a los intereses de los usuarios. En lo relativo a libre elecci�n, cabe se�alar que la letra a bis), nueva, que se agrega al art�culo 33 y que diferencia con claridad los distintos tipos de planes, contempla justamente el de libre elecci�n, siempre disponible, el cual obliga a una instituci�n de salud a pagar las boletas que se le presenten por atenciones recibidas por un afiliado, independiente de si el prestador que las realiz� est� o no adscrito a ella. �ste constituye un tremendo avance con relaci�n a lo que hoy d�a existe, pues, en efecto, en la actualidad no siempre situaciones de esa �ndole son respetadas. En ese sentido, creo que algunos de los temores manifestados por el Senador se�or �vila no se condicen con lo que se encuentra establecido. Gracias. El se�or LARRA�N (Presidente).- Corresponde pronunciarse sobre la disposici�n, ya que se solicit� votarla separadamente, no obstante haber sido aprobada por unanimidad en la Comisi�n de Salud. Se tocar�n los timbres y esperaremos algunos minutos para asegurar la concurrencia de los se�ores Senadores. El se�or RUIZ (don Jos�).- �Qu� norma se pondr� en votaci�n, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- El art�culo 22, que aborda el tema que se ha estado discutiendo. El se�or RUIZ (don Jos�).- �Puedo fundamentar mi voto, se�or Presidente, mientras llegan los dem�s se�ores Senadores? El se�or LARRA�N (Presidente).- S�, Su Se�or�a. --(Durante el fundamento de voto). El se�or RUIZ (don Jos�).- Se�or Presidente, aprovechando que puedo realizar una breve intervenci�n antes de que acudan m�s colegas a dar el qu�rum, quiero manifestar que, tal como el Honorable se�or Ruiz-Esquide, no he sido partidario del sistema de las isapres y creo que deber�amos hacer esfuerzos para cambiarlo. Sin embargo, dado que se encuentra vigente y que no existen posibilidades objetivas de reemplazarlo en este momento, considero importante introducirle perfeccionamientos para eliminar algunos vicios. Algo muy similar ocurre con el sistema previsional. Desgraciadamente, mientras no se trate a fondo este tema y se discuta de modo efectivo c�mo resguardar mejor los derechos de los usuarios, en especial los de la gente m�s modesta, que siempre termina recurriendo al sistema p�blico de salud, s�lo aplicaremos soluciones de parche y no resolveremos en forma definitiva este problema. No obstante lo anterior, dadas las circunstancias actuales, voy a votar a favor de este art�culo, porque pienso que, a pesar de todo, constituye un avance respecto de la situaci�n vigente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or �vila. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, la verdad es que me sorprendi� mucho la reacci�n tan virulenta de algunos se�ores Senadores que se sintieron ofendidos por una afirmaci�n que hice. A este respecto, creo que las isapres deben de hallarse muy inc�modas porque aquellos a quienes se atribuye la defensa de sus leg�timos intereses econ�micos se sienten injuriados. Es decir, tendr�an que perseguir finalidades muy bastardas o indignas para que eso motivara una reacci�n o una actitud como la que hemos visto. Aqu�, en los hechos, se quiera o no conscientemente, lo que se hace es preservar un negocio que ha alcanzado una concentraci�n altamente peligrosa. Insisto: cinco isapres tienen 90 por ciento del mercado. Pregunto a quienes adhieren a esta filosof�a econ�mica si es sana una situaci�n de esa �ndole. Seguramente concuerdan en que no lo es. Sin embargo, cuando se presenta la oportunidad de rectificar, no se aprovecha; por el contrario, se legisla en funci�n de consolidar el sistema. En este sentido, la Superintendencia de Isapres, as� como otras superintendencias, no ha recogido completamente las inquietudes de los usuarios. Al rev�s: en muchas oportunidades act�a en plena concordancia con las empresas, y en este caso, con las propias isapres. Un ejemplo al canto. Cuando se intent� ampliar esta modalidad a las compa��as de seguros, fue el propio Superintendente de Isapres quien alz� su voz de rechazo a una iniciativa de esa �ndole, porque, a su juicio, llevar�a al quiebre de las instituciones de salud previsional. Esto constituye un verdadero absurdo. Las isapres son compa��as de seguros; son entidades que cobran una prima cautiva a trav�s de las cotizaciones por asumir riesgos en el �mbito de la salud. Es decir, son empresas aseguradoras. El modelo chileno es �nico en el mundo. No hay otro pa�s que lo aplique. Entonces, ya que el mercado est� tan concentrado, deber�amos ampliarlo a las compa��as de seguros, para que intervengan en �l otros actores. Sin embargo, ello no ha sido posible mediante el proyecto en an�lisis. Y luego se ofenden porque uno se�ala que act�an en concordancia con los intereses fundamentales de ciertas empresas. Pero lo que me resulta absolutamente vergonzoso es que la propia Superintendencia, en ese �mbito tambi�n, act�e en la misma sinton�a. Por desgracia, las superintendencias, en general, han demostrado, a lo largo de estos a�os, que apuntan m�s al fortalecimiento del sistema que nos rige, altamente concentrador de la riqueza, que a atender los leg�timos reclamos e inquietudes de los usuarios, quienes ven con espanto c�mo se cierne sobre ellos una amenaza que implica, de continuar as�, la instauraci�n de una dictadura econ�mica. Si hasta el diario "El Mercurio", poco tiempo atr�s, grafic� esa situaci�n en una caricatura donde un personaje le comenta a otro: "As� como vamos, en un tiempo m�s habr� una farmacia, un supermercado�". Y nombra una serie de empresas correspondientes a diversas actividades econ�micas. �"El Mercurio" ya reclama por esto! Y los representantes ciudadanos, �d�nde est�n? �Bien, gracias! He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Los Senadores se�ora Matthei y se�or Andr�s Zald�var han pedido fundamentar su voto. Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, voy a votar a favor, al igual que la mayor�a u ojal� todos los se�ores Senadores, porque, a mi juicio, �sta es una norma que apunta en la direcci�n correcta al exigir una contabilidad absolutamente separada, p�blica, transparente y bien regulada por la Superintendencia, que proteger� a todos los prestadores que no se encuentran ligados a las isapres, lo cual hoy no ocurre. Considero inaceptable que las utilidades generadas en cierta entidad se traspasen a una que compite con otras instituciones. Eso no es competencia; no es libre mercado. En el fondo, se trata de dumping, y hay que eliminarlo. Y es precisamente lo que estamos haciendo aqu�. Iba a contestar al Senador se�or �vila. Pero cuando �l acusa al se�or Ministro y al se�or Superintendente de Isapres de vendidos,� El se�or �VILA.- Exc�seme, yo no he dicho� La se�ora MATTHEI.- �no vale la pena replicarle, porque lo �nico que consigue con eso es desprestigiarse a s� mismo. El se�or �VILA.- �No es as�! �No dije que son vendidos! El se�or LARRA�N (Presidente).- Le ruego no interrumpir, se�or Senador. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, ocurre que el Honorable se�or �vila es especialista en decir cosas y despu�s negarlas. El se�or �VILA.- �Revise la Versi�n Taquigr�fica! La se�ora MATTHEI.- Porque cuando se�al� que el Superintendente de Isapres se opuso a que existiera m�s competencia en el mercado y que con ello, en el fondo, les estaba cuidando las espaldas a las instituciones de salud, eso, en buen chileno, significa decirle que es vendido. El se�or �VILA.- �Yo no hablo "en buen chileno"! La se�ora MATTHEI.- Ruego al Senador se�or �vila que para otra vez sea un poquito m�s cuidadoso con sus palabras; que no insin�e o exprese algo y despu�s afirme que nunca lo ha dicho y se sorprenda de que la gente se sienta ofendida. Por lo tanto, no le voy a contestar. No vale la pena hacerlo. Considero que �l es la �nica persona que se desprestigia cuando habla de esa manera. El se�or LARRA�N (Presidente).- Para fundar su voto, tiene la palabra el Honorable se�or Andr�s Zald�var. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- Se�or Presidente, votar� a favor de la disposici�n, pero deseo hacer una reflexi�n sobre la materia que nos ocupa. Junto con el Honorable se�or Ruiz-Esquide fuimos autores de una indicaci�n acerca de un tema que, a mi juicio, es innegable. Me refiero a que en el sistema de salud, como tambi�n en el previsional, hay que abrir la competencia, porque el mercado se ha concentrado en unos pocos actores que ofrecen este tipo de seguro. La indicaci�n que presentamos ten�a por objeto que las compa��as de seguros nacionales o extranjeras pudieran entrar a competir, para que nos prestaran los mejores servicios de seguro en salud. Sin embargo, se nos inform� que no estaban dadas las condiciones para ello, pues se requer�a que las empresas tuvieran un giro �nico, contabilidad separada, etc�tera. Creo que las compa��as de seguros, si se hace una buena legislaci�n y se las introduce como actores de competencia, pueden tener tambi�n filiales con seguro �nico, con giro �nico en salud, igual que el seguro de vida. Estas compa��as tienen sus propios sistemas de contabilidad y control. En definitiva, aqu� hay un tema en el que no hemos avanzado m�s all� de lo que pens�bamos. Sin duda, hay que votar a favor de la norma propuesta, porque es positiva. Pero considero necesario avanzar. Debemos abrir la competencia en materia de seguros de salud. Y me atrevo a decir que, si queremos competencia real, habremos de hacerlo aqu� y, adem�s, en el sistema previsional, donde en un momento dado tendremos que discutir si vamos a tener tres o cuatro AFP que posean el 80 � 90 por ciento de la administraci�n de los fondos de pensiones y no permitiremos a otros actores concurrir al negocio con las mismas reglas del juego, no para crear competencia desleal en un sentido u otro, sino para que sea el usuario quien reciba el beneficio de la mejor prestaci�n en salud o en previsi�n. Por eso hice esa presentaci�n. Y espero que en el pr�ximo tiempo podamos discutirla, para permitir la existencia de otros actores -adem�s de las isapres que hoy d�a conocemos y que ser�n reguladas por la ley en proyecto- y el mejoramiento de las condiciones del seguro de salud a favor de la gente. En tal virtud, votar� afirmativamente, porque considero que se trata de un progreso. Empero, creo que podr�amos avanzar mucho m�s. El se�or LARRA�N (Presidente).- Para fundamentar su voto, tiene la palabra el Senador se�or Viera-Gallo; despu�s, el Honorable se�or N��ez. El se�or VIERA-GALLO.- Se�or Presidente, s�lo quiero explicar, al menos en mi caso, por qu� la ley en proyecto no acogi� la buena intenci�n de los Senadores se�ores Andr�s Zald�var y Ruiz-Esquide de abrir hacia las compa��as de seguros. Una compa��a de seguros que se dedicara adem�s al campo de la salud quedar�a sometida a una doble fiscalizaci�n: de la Superintendencia de Sociedades An�nimas y de la Superintendencia de Salud. El se�or �VILA.- �Mucho mejor! El se�or VIERA-GALLO.- Ello implicar�a que nadie la fiscalizara, o bien, generar�a un conflicto entre esos dos organismos. No comparto en absoluto las cr�ticas hechas por el Honorable se�or �vila a las superintendencias en general, ni menos la afirmaci�n de que est�n coludidas o relacionadas con las empresas que deben regular. Podr�n tener deficiencias, como toda instituci�n, pero no al nivel que indica ese se�or Senador. Si fuera como Su Se�or�a se�ala, someter a dos superintendencias a la misma situaci�n no resolver�a el problema. Nada impide que una compa��a de seguros cree otra que se dedique al rubro de la salud como negocio exclusivo. �Qu� sucede? No se trata de la existencia de un impedimento legal. Aqu� hay un impedimento de mercado. El mercado de la salud privada en Chile, por todos los defectos indicados, no es, por desgracia, suficientemente amplio como para que se multipliquen las isapres. Durante los �ltimos a�os -no en el �ltimo tal vez, pero s� en los anteriores-, la tasa de ganancia de las isapres no era enorme. O sea, no hay un gran incentivo econ�mico para entrar al negocio. Se podr� decir que pagan sueldos altos. �sa es otra discusi�n. Pero si alguien tiene que decidir acerca de un negocio hoy d�a, habr� de convenir en que dedicarse al de las isapres no es el mejor. El se�or �VILA.- �Es maravilloso! El se�or VIERA-GALLO.- Al contrario, hemos visto que algunas isapres han quebrado, fruto de que el mercado tiene restricciones reales, objetivas. Chile es un pa�s pobre. Si fuera como Suiza, Suecia o Estados Unidos, obviamente habr�a m�s interesados, porque existir�a mayor poder de compra. Pero los tres millones de personas que est�n ahora en el mercado de la salud privada no tienen un poder adquisitivo suficientemente interesante como para que se multiplique la competencia. Y eso motiva que hoy d�a existan cinco; a lo mejor ma�ana podr� haber menos. Ahora, aquello no va necesariamente en desmedro del sistema si la Superintendencia cumple de manera cabal -como hasta ahora ha hecho- sus obligaciones legales. He dicho. El se�or N��EZ.- Se�or Presidente, he querido usar de la palabra porque estamos hablando de un problema de fondo y sobremanera delicado. Le� el informe y, ciertamente, las opiniones entregadas por la Superintendencia de Salud y por el Ministerio del ramo. Entiendo, al igual que otros se�ores Senadores, que estamos dando un paso que, sin duda alguna, no es suficiente. Hemos sido particularmente cr�ticos al mecanismo de las isapres, y seguiremos si�ndolo. Mientras est�n dejando de manera permanente a muchos chilenos sin la atenci�n debida, sobre todo en un pa�s que tiende a envejecer y, en consecuencia, a generar patolog�as, nuevas enfermedades y situaciones no previstas en el sistema de salud, las isapres no van a dar cuenta de aquello. En segundo lugar, en tanto las isapres no tengan posibilidad alguna de atender a una poblaci�n m�s amplia, porque no est� en su naturaleza hacerlo, enfrentaremos una presi�n creciente sobre el sistema p�blico de salud y, en consecuencia, una carencia de recursos suficientes, a pesar del avance que logramos con el Plan AUGE. Nos preocupa esencialmente el hecho de que, no s�lo en el �mbito de las isapres, sino tambi�n en otros, en Chile haya una excesiva concentraci�n del poder y de la riqueza. Y eso es an�malo, aun en naciones como la nuestra, que tiene un grado de desarrollo mediano. Porque -es cierto- no somos Suiza, pero tampoco Bolivia ni un pa�s centroamericano (lo digo sin faltar el respeto a esas naciones). Somos un pa�s con pretensiones de progreso. Y mientras tengamos esas pretensiones y vialidad cierta de alcanzar grados de desarrollo creciente, enfrentaremos un grave problema en el �mbito de la salud, que no resolveremos con la ley en proyecto. Yo habr�a querido que hubi�semos tenido mayor posibilidad de discutir las indicaciones presentadas por los Senadores se�ores Andr�s Zald�var y Ruiz-Esquide, porque creo que van en la orientaci�n correcta al procurar abrir m�s la competencia en un sector que tiende a concentrarse. Si �sa fue la intenci�n y si estamos conscientes de que aqu� hay un grado muy alto de concentraci�n, yo pedir�a para m�s adelante cierto consenso a los efectos de generar los cambios que esa situaci�n requiere. Mientras se d� lo que estamos observando actualmente, tendremos isapres, por cierto, pero cada vez m�s cuestionadas, incluso por quienes pueden atenderse en ese sistema, es decir, usuarios de altos ingresos. Porque, felizmente, las personas de medianos y bajos ingresos se van a ir de manera creciente al sistema p�blico. Y eso es bueno para �ste, a condici�n, por supuesto, de que haya recursos suficientes para atender con prestaciones de buena calidad las crecientes demandas que se est�n generando en el pa�s. Voy a votar a favor de esta norma (reitero que le� con atenci�n los antecedentes del proyecto). Sin embargo, creo que es altamente insuficiente. Estamos perdiendo, como en otro �mbito, la posibilidad de llegar a un acuerdo m�s sustantivo. Podremos o no concordar con el Senador se�or �vila respecto, por ejemplo, a la honorabilidad de la Superintendencia. Se�or Presidente, yo no dudo de que los superintendentes que hemos tenido han sido de alta calidad. Y ojal� gener�ramos condiciones legales que les permitieran efectuar una mayor fiscalizaci�n y contar con una capacidad de regulaci�n m�s grande en cada uno de los �mbitos donde act�an. No dudo, entonces, de que aqu� no hay entremedio un problema de intereses. Ha existido, s�, un insuficiente debate acerca de sistemas, como el de las isapres y el de las AFP, m�s adelante, que est�n haciendo crisis en el pa�s. Si no somos capaces de generar consenso nacional para superar aquello, por cierto perdemos oportunidades. Y el Senado no se prestigia precisamente cuando en sus manos est� la posibilidad de lograrlo y nada hace. Votar� a votar a favor, con las observaciones que formul�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Para fundar su voto, tiene la palabra el Senador se�or Espina. El se�or ESPINA.- Se�or Presidente, quiero hacerme cargo de dos argumentos. En primer lugar, se ha manifestado aqu� que uno se siente ofendido porque se le dice que representa los intereses de grupos econ�micos. Yo, por lo menos, s� me siento ofendido, porque no pretendo representar los intereses de grupos econ�micos de ninguna naturaleza ni especie. Mi inter�s es representar el bien com�n de la mayor�a de los ciudadanos de este pa�s. En consecuencia, no me siento para nada impedido de se�alar que mi mayor inclinaci�n es a representar -creo que el resto de los se�ores Senadores lo hace- el bien com�n mayoritario del pa�s. �se es el juramento de uno cuando ingresa a la C�mara Alta y no el de representar intereses econ�micos de grupos determinados que muchas veces est�n en contraposici�n con los intereses de la mayor�a de la poblaci�n. En segundo lugar, por supuesto, considero muy lamentable que en Chile tengamos muy pocas isapres. Es malo para la competencia; es malo para el prop�sito de que los planes de salud sean m�s baratos. Y permanentemente hemos realizado un esfuerzo en el sentido inverso, para que exista un mayor n�mero de instituciones de esa �ndole. Pero decisiones importantes que se han tomado y otras que no se han adoptado impiden que ello se materialice. Por ejemplo, cuando se elimin� el 2 por ciento no se trataba, contrariamente a lo que se dijo, del subsidio a las isapres, sino del subsidio a las personas. Y a la gente rica le daba lo mismo contar con dicho porcentaje. �A qui�n le importaba? A la clase media, que con ese 2 por ciento pod�a acceder a una instituci�n de salud previsional, siempre y cuando �sta le ofreciera un plan que le permitiera ajustarse al 7 por ciento de cotizaci�n mensual, m�s un 2 � 3 por ciento adicional. Cuando se suprime un beneficio de aquella �ndole, lo que se hace es restringir la cantidad de chilenos que pueden acceder a las isapres. Y si Sus Se�or�as piden los antecedentes sobre qui�nes han salido de ellas para trasladarse al FONASA, ver�n que son personas de la clase media. Aquel 2 por ciento equivale a lo que se hace cuando se pretende ampliar a los estudiantes de establecimientos privados el subsidio que se entrega a los de establecimientos p�blicos. Se aplica la misma l�gica. Y el cr�dito otorgado a aqu�llos se puede llamar "cr�dito a las universidades privadas"; sin embargo, no se denomina as�, sino "subsidio a estudiantes de universidades privadas". La supresi�n del 2 por ciento en referencia se vendi� bajo la idea de que se quitaba un beneficio a las isapres. Pero eso no era verdad. Al final, a la gente rica le da lo mismo; no sabe cu�l es el porcentaje de sus ingresos que paga para mantener un buen plan. La perjudicada fue la clase media modesta, que con suerte alcanzaba, incluido su 7 por ciento, a un plan que le permitiera acceder a alguna atenci�n de salud en el sector privado. Por �ltimo, simplemente para la historia fidedigna de la ley, me referir� al famoso tema de la portabilidad. Al respecto hay un doble discurso. Muchos funcionarios de Gobierno y profesionales que conocen este tema, ya sea en el Ministerio de Hacienda o en el de Salud, saben que el camino hacia el futuro es la portabilidad del subsidio. Pero nos dicen: "Es que no hay condiciones pol�ticas para aprobarla". �se es el argumento para no debatir el punto. �Pero c�mo no va a ser justo que cada habitante de nuestro pa�s, con un porcentaje de lo recaudado por concepto de impuestos -m�s de 500 mil millones de pesos- que el Estado entrega al sistema p�blico, pueda optar libremente, con un ahorro adicional, entre el sistema p�blico y el privado! Hoy d�a eso no es factible. Y ello, porque el sistema de salud se financia con aproximadamente 500 mil millones de pesos provenientes del 7 por ciento que aporta cada cotizante, m�s 500 mil millones que salen de los impuestos pagados por los afiliados a las isapres y los imponentes del FONASA, todo lo cual se concentra en el sistema p�blico. Entonces, mientras la l�gica no sea dar pasos que avancen en el subsidio a la demanda y en la posibilidad de que la gente de clase media acceda a planes un poquito m�s caros que los que hoy d�a le ofrecen, las isapres se ir�n concentrando cada vez en los m�s ricos y vamos a terminar, no con cinco, sino con tres instituciones de salud previsional para la gente pudiente y con el resto de los chilenos condenados a mantenerse en un solo sistema: el p�blico. El rico podr� optar por la salud p�blica o la privada; el pobre no va a tener ninguna opci�n y quedar� siempre condenado al sistema p�blico. �sas son las razones por las cuales en nuestro pa�s, objetivamente, medidas como la que adoptamos mediante el art�culo 22 a lo menos impiden hoy lo que las isapres quer�an:... El se�or LARRA�N (Presidente).- Termin� su tiempo, se�or Senador. El se�or ESPINA.-...mantener adem�s una cl�nica. Eso ya no lo podr�n hacer. El se�or �VILA.- Da lo mismo. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ning�n otro se�or Senador desea fundar su voto. En votaci�n electr�nica el nuevo inciso primero propuesto para el art�culo 22 de la ley N� 18.933. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Resultado de la votaci�n: 30 votos por aprobar la norma, ning�n voto en contra y ninguna abstenci�n. El se�or �VILA.- �Y mi abstenci�n? El se�or LARRA�N (Presidente).- Perd�n, se�or Senador, pero usted no vot�. El se�or PARRA.- La m�a tampoco est� registrada. El se�or LARRA�N (Presidente).- Su Se�or�a est� pareado. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En el registro figuran 30 votos a favor, ninguno en contra, ninguna abstenci�n, y aparece un asistente que no vota, lo cual se computa como pareo. La se�ora MATTHEI.- �Hemos estado toda la tarde en esto, se�or Presidente! El se�or LARRA�N (Presidente).- Vamos a suponer que el Honorable se�or �vila no emiti� su voto, pero se lo dejaremos consignado. �Eso es lo que Su Se�or�a pide? �Vota en contra? El se�or �VILA.- No, se�or Presidente: me abstengo. El se�or LARRA�N (Presidente).- Entonces, se anotar� su abstenci�n. El se�or PARRA.- Y tambi�n la m�a. El se�or �VILA.- �As� es de equ�voco el texto...! El se�or N��EZ.- Votemos de nuevo. El se�or LARRA�N (Presidente).- No es posible, porque muchos se�ores Senadores ya se retiraron. Simplemente, quedar�n consignadas las abstenciones de los Honorables se�ores �vila y Parra, que no se registraron. �Correcto? La se�ora MATTHEI.- Est� bien que el Senador se�or �vila no entienda la Ley de Isapres. �Pero que tampoco sepa c�mo funciona el mecanismo de votaci�n es un poquito... El se�or LARRA�N (Presidente).- Le ruego no interrumpir la votaci�n, Su Se�or�a. El se�or N��EZ.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra, se�or Senador. El se�or N��EZ.- Se�or Presidente, en la votaci�n, por un error m�o, no qued� registrado mi voto. El se�or LARRA�N (Presidente).- �Y c�mo vota? El se�or N��EZ.- Como dije durante mi fundamentaci�n: a favor. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se consignar� su voto, Su Se�or�a. El se�or GAZMURI.- Yo tambi�n voto a favor, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- En consecuencia, tambi�n se agregar�n los votos favorables de los Honorables se�ores N��ez y Gazmuri. --Se aprueba el inciso primero del art�culo 22 propuesto para la ley N� 18.933 (32 votos a favor y 2 abstenciones). Votaron por la afirmativa los se�ores Arancibia, Boeninger, Bombal, Canessa, Cantero, Cariola, Chadwick, Coloma, Cordero, Espina, Fern�ndez, Flores, Foxley, Frei (do�a Carmen), Gazmuri, Horvath, Larra�n, Matthei, Naranjo, Novoa, N��ez, Orpis, Pizarro, Prokurica, R�os, Ruiz (don Jos�), Ruiz-Esquide, Sabag, Vega, Viera-Gallo, Zald�var (don Andr�s) y Zurita. Se abstuvieron los se�ores �vila y Parra. El se�or LARRA�N (Presidente).- Contin�a el debate. Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Respecto del art�culo 24 ter, contenido en el N� 6), se solicit� discusi�n y votaci�n separadas. El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n el art�culo 24 ter sugerido por la Comisi�n de Salud. Tiene la palabra el Senador se�or R�os. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, en principio, yo no era -tampoco lo soy ahora- tan partidario de que los agentes de ventas debieran inscribirse en el registro de la Superintendencia. Sin embargo, quiero recoger la opini�n que me entreg� la Senadora se�ora Matthei en el sentido de que, siendo un requisito obligatorio para dichos trabajadores, pareciera que sobre ellos debiera existir mayor fiscalizaci�n y cuidado. Acepto, entonces, que los agentes en referencia tengan que inscribirse. Sin embargo, no me parece adecuado -y aqu� entramos a una especie de �rea rara de las leyes laborales- que para desarrollar la funci�n de agente de ventas -por lo que se desprende del art�culo que se nos sugiere- existan dos mecanismos: uno, la contrataci�n por la isapre de un trabajador para ese efecto -sin duda alguna, esto ser� lo m�s com�n-, y dos, la contrataci�n por otra v�a -honorarios, en fin-, como agentes aut�nomos e independientes, de personas que presten servicios de venta en representaci�n de una o m�s isapres. Ambas modalidades requieren un contrato entre el trabajador y la empresa. Y este hecho obliga necesariamente a que toda acci�n de dicha persona sea una representaci�n genuina de la isapre. Eso sucede en muchos otros �mbitos. Y, trat�ndose de asuntos bastante m�s delicados -por ejemplo, tributarios-, puede suceder que un trabajador que, en representaci�n de determinada empresa, opera con facturas o boletas de compraventa incurra en una falta grave. En ese evento, la responsabilidad es, no de �l, sino de la empresa. Desde esa perspectiva, no me parece adecuado que en el art�culo 24 ter, que, aparte la inscripci�n en el registro de la Superintendencia, impone a los trabajadores otra serie de obligaciones, se establezcan prohibiciones para el desempe�o de la funci�n en comento. �Cu�les? Por ejemplo, la de que una persona cumpla funciones de agente de ventas simult�neamente en dos o m�s isapres. Esa visi�n, generalmente muy centralista, en cuanto a que los agentes de venta se encuentren ubicados s�lo en las grandes ciudades, impide que otras personas o un conjunto de isapres tengan la representaci�n de una oficina en comunidades peque�as. Es cierto que la autorizaci�n para proceder de ese modo corresponde a la Superintendencia y que ello se da en esa forma; pero lo l�gico y natural es que el empleador act�e con el trabajador, sin la participaci�n de un tercero, porque en definitiva el contrato se pacta entre �ste y aqu�l. M�s adelante se establece que, si el agente de venta no cumple en plenitud sus acciones como lo se�ala la ley, puede incluso cancelarse su registro, poni�ndose t�rmino a su contrato o acci�n profesional, cre�ndose una situaci�n laboral entre el trabajador y la empresa no prevista en esta norma. Y no podr� estarlo, porque en definitiva lo que prima en este campo son las leyes del trabajo. �Qu� pretendo decir con ello, se�or Presidente? Que la mala acci�n de un agente se paga con el t�rmino de sus funciones, sin que a la empresa que lo contrat� le asista responsabilidad alguna, lo que no me parece adecuado. La sanci�n por la falta de probidad del trabajador que est� cumpliendo una funci�n -la de vender seguros- en representaci�n de la empresa de seguros debe necesariamente recaer tambi�n en �sta y no s�lo en aqu�l. Por tal motivo, desde mi punto de vista, caben dos posibilidades. La primera, simplemente, en aprobar lo consignado en el art�culo 3�, n�mero 16, que contempla el registro de agentes de venta por parte de la Superintendencia y la fiscalizaci�n del ejercicio de sus funciones. Est� bien. Acepto. Pero hasta ah� deber�amos llegar, por cuanto, al conced�rsele la potestad para fiscalizar la acci�n, se le otorgan facultades suficientes para dictar las instrucciones pertinentes. Pero ni esa instituci�n ni organismo alguno pueden incorporar una acci�n que signifique poner t�rmino a contratos laborales, toda vez que �stos se encuentran sujetos a otras disposiciones, naturalmente muy distintas. La segunda alternativa se refiere a modificar el art�culo 24 ter, a fin de que se consideren las inquietudes que estoy planteando. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or �vila. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, me gustar�a consultar a los integrantes de la Comisi�n o, en su defecto, al se�or Superintendente acerca de si los intermediarios que actuar�n en el �mbito de los seguros de salud se regir�n por una normativa similar a la que se aplica a quienes se desenvuelven en el �rea de los seguros generales de vida y otros. Digo lo anterior, por que, ojal�, esto no termine como en el caso de estos �ltimos, en que algunas empresas y bancos han asumido tambi�n el rol de intermediarios, rest�ndole posibilidades a la gente que se desenvuelve en ese campo. Y bien puede ocurrir que determinadas isapres constituyan organizaciones dependientes que se dediquen a la intermediaci�n de sus propios seguros. Me gustar�a saber si eso est� resguardado de alguna manera. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Boeninger. El se�or BOENINGER.- Se�or Presidente, tengo la impresi�n de que la disposici�n es bastante simple. En primer lugar, establece un solo mecanismo: el del agente de venta; y como es �nico, resulta l�gico que sea agente de una isapre y no de otra. Los agentes competir�n entre s�, salvo autorizaci�n expresa de la Superintendencia, la cual -imagino- podr� hacerse cargo, entre otras cosas, del tipo de situaciones que planteaba el Senador se�or R�os, relacionadas con pueblos peque�os y apartados donde no es posible pensar en la actuaci�n de tantos agentes como isapres existan. En consecuencia, creo que, al haber un solo agente por isapre o por seguro, se evita el problema de la mediaci�n fraudulenta -llam�mosla as�- a que aludi� el Honorable se�or �vila. Por �ltimo, el tema del contrato de trabajo se halla en una situaci�n distinta. Lo que ahora se est� resguardado es el inter�s del afiliado a un seguro privado, para lo cual a los agentes se les impone un conjunto de condiciones. Para desempe�ar tal actividad las personas deben inscribirse en el registro, y en caso de que incurran en incumplimientos graves, como lo establece el art�culo en debate, o se les multa o se les cancela su inscripci�n; o sea, dejan de tener la calidad de agente de venta y su relaci�n laboral con la isapre termina. Evidentemente, se trata de una situaci�n particular. El agente no es un trabajador cualquiera, sino una persona que tiene una responsabilidad ante el conjunto de la sociedad, a la que est� vendiendo, en este caso, un seguro. Se�or Presidente, creo que debi�ramos aprobar el art�culo en los t�rminos propuestos. Y, por lo tanto, pido que se vote. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, a mi juicio, han sido aclarados los cuestionamientos del Senador se�or R�os. La norma es muy simple: se trata de privilegiar la rectitud y la seguridad en orden a que se atender� como corresponde en la venta de estos seguros. Se trata de una de las situaciones m�s dif�ciles que se han presentado en el �ltimo tiempo. Es decir, se venden seguros, no se aclaran las condiciones, hay letra chica. Se producen muchas dificultades, y parte importante de la confusi�n procede, a veces, de quien hace la entrevista. Adem�s, habitualmente los agentes de seguros no tienen contrato, por lo general son comisionistas. Incluso, si termina su contrato o se les obliga a terminarlo, al a�o siguiente pueden replantearse un nuevo ingreso a la instituci�n. Aqu� estamos privilegiando una tesis central y mejorando lo que no es posible resolver de otra forma. En consecuencia, creo que vale la pena votar que s�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Prokurica. El se�or PROKURICA.- Se�or Presidente, siguiendo la l�nea de lo que estamos tratando, yo quisiera formular una consulta al se�or Ministro o al se�or Superintendente, porque, conforme a esta discusi�n, pareciera que los servicios que brinda este tipo de instituciones son s�lo de salud. Sin embargo, conozco casos de ciudades con alrededor de 55 mil habitantes donde la isapre, porque se fusion� con otra o por otras razones, cerr� su oficina, y aqu�llos debieron acudir a otra ciudad para ser atendidos. La ley deber�a resguardar esa situaci�n. Estimo que un servicio m�nimo a los usuarios comprende la atenci�n de consultas, la posibilidad de hacer reembolsos en lugares cercanos, etc�tera. En su oportunidad formul� un reclamo ante la Superintendencia, y entiendo que el problema se ha ido arreglando. El planteamiento del Senador se�or R�os apunta a la posibilidad de que agentes de venta atiendan a dos o m�s isapres, bajando los costos y permitiendo que tambi�n act�en en localidades. El Honorable se�or Zurita me est� pidiendo una interrupci�n. Se la concedo, con la ven�a de la Mesa. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or ZURITA.- Se�or Presidente, creo que el se�or Senador confunde la funci�n del agente de venta. �ste, una vez que capta al cliente para la isapre, ya nada tiene que ver con lo pactado y el afiliado debe entenderse con aqu�lla. As� que no pensemos en un comisionista de venta, quien, adem�s de asesor comercial y financiero, tambi�n lo es en el �mbito de la salud. �No! Lo que se propone es semejante a lo ocurre en la compra de un seguro de vida: la relaci�n con quien se pact� finaliza con la firma del contrato; de ah� en adelante los clientes deben entenderse con la compa��a de seguros. Gracias, se�or Senador. El se�or LARRA�N (Presidente).- Recupera el uso de la palabra el Honorable se�or Prokurica. El se�or PROKURICA.- No confundo lo roles, se�or Presidente. Lo que estoy diciendo es que no parece bueno para el sistema que vaya un agente, incorpore a trescientas personas en una isapre, �sta desaparezca y la localidad quede sin oficina. �se es el punto. Y yo creo que esa situaci�n debe quedar resguardada. Si no, la gente estar� en contra del sistema y considerar� que da un mal servicio, pues, de hecho, no tendr� con qui�n atenderse. El se�or �VILA.- �Me permite, se�or Presidente? Deseo hacer una aclaraci�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- El se�or Senador ya hizo uso de la palabra. Le doy un minuto. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, es una aclaraci�n acerca del concepto de agente de seguro de vida. En realidad, la pr�ctica mundial en esta materia es que el agente act�e como intermediario, cuya labor no s�lo se remite a la venta, sino que tambi�n implica brindar servicio a lo largo de la vigencia del plan. �sa es la pol�tica que, al menos en teor�a, aplican todas las compa��as de seguros a nivel global. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. Corresponde poner en votaci�n el art�culo 24 ter, salvo que el Honorable se�or R�os solicite separar la votaci�n� El se�or R�OS.- Se�or Presidente, tengo la impresi�n de que no hay �nimo para proceder en ese sentido. Pero deseo fundamentar mi voto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Muy bien, se�or Senador. Mas, para no repetir el cuadro anterior, quisiera que la fundamentaci�n se solicitara antes de votar. No hay otros interesados aparte del Senador se�or R�os. --(Durante el fundamento de voto). El se�or R�OS.- Se�or Presidente, encuentro razonables muchas de las explicaciones dadas aqu�, pero, en estricta verdad, lo que estamos haciendo a trav�s de esta norma legal es sentar una especie de doctrina en virtud de la cual todas aquellas personas, trabajadores o no trabajadores, representantes de empresas determinadas, que cumplan funciones con papeles tributarios u otros que impliquen necesariamente una responsabilidad social m�s all� del simple contrato �tal ocurre en los de salud, que son trascendentes, no s�lo para el usuario, sino tambi�n para su familia- deben contar con una resoluci�n de organismos del Estado para poder actuar. El d�a de ma�ana, a lo mejor, en mi empresa agr�cola voy a tener que inscribir a todas las personas que trabajan conmigo y que hacen facturas de venta, para que est�n fiscalizadas tambi�n por otro organismo. Eso no me parece bien, porque vamos desligando de responsabilidades a las empresas y creando una situaci�n que puede terminar afectando al propio trabajador al obligarlo a transformarse en una especie de salvavidas de la empresa, que puede estar presion�ndolo. En fin, pueden ocurrir muchas cosas. Y eso -insisto- no me parece correcto. Por tal motivo, estimo que, por la explicaci�n dada, est� bien que se inscriban; pero todas las otras normas y obligaciones que se imponen a estos trabajadores, muchos de los cuales pueden ser dependientes directos de la empresa, quedan al margen de un criterio de responsabilidad global en materia de trabajo y de cumplimiento de acciones contractuales. Votar� en contra. El se�or LARRA�N (Presidente).- En votaci�n electr�nica el art�culo 24 ter. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba (22 votos contra 1 y una abstenci�n). Votaron por la afirmativa los se�ores Boeninger, Bombal, Canessa, Cantero, Cariola, Cordero, Fern�ndez, Frei (do�a Carmen), Horvath, Larra�n, Matthei, Naranjo, N��ez, Parra, Prokurica, Romero, Ruiz (don Jos�), Ruiz-Esquide, Vega, Viera-Gallo, Zald�var (don Andr�s) y Zurita. Vot� por la negativa el se�or R�os. Se abstuvo el se�or �vila. El se�or HOFFMANN (Secretario).- A continuaci�n, el primer inciso de la letra A del literal a bis), nuevo, que comienza diciendo "Plan libre elecci�n:", fue aprobado por unanimidad (5 por 0). En cuanto al segundo inciso, que se inicia se�alando "Para los efectos del otorgamiento de las prestaciones de salud", se aprob� con los votos favorables de los Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger y Espina, y el pronunciamiento en contra del Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Pido la palabra. El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n. Tiene la palabra el Senador se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Se�or Presidente, como lo anunci� en mi primera intervenci�n, �ste es uno de los votos de minor�a que retiro. El se�or LARRA�N (Presidente).- En consecuencia, se entiende aprobado por unanimidad el segundo inciso de la letra A de la letra a bis), nueva. --Queda aprobado reglamentariamente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En seguida, el �ltimo inciso de la regla n�mero 1 del segundo p�rrafo de la letra a bis), nueva, que principia se�alando "Se configura una insuficiencia del o los prestadores individualizados en el plan", se aprob� por 4 votos a favor (Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger, Espina y Viera-Gallo) y una abstenci�n (Honorable se�or Ruiz-Esquide). El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n. Tiene la palabra el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Se�or Presidente, retiro mi abstenci�n, para que la regla pueda ser aprobada y no haya discusi�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Al haber sido retirada la abstenci�n, se entiende que esta enmienda fue aprobada por unanimidad. --Queda aprobada reglamentariamente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En seguida, la Comisi�n propone intercalar una letra c), nueva, cuya finalidad es agregar en la letra f) del inciso segundo del art�culo 33 un p�rrafo nuevo que comienza con la frase "No obstante lo anterior," y finaliza expresando: "La Superintendencia regular�, mediante instrucciones de general aplicaci�n, la operaci�n de lo dispuesto en este p�rrafo.". Esta modificaci�n se aprob� por tres votos a favor (Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger y Espina) y uno en contra (Honorable se�or Ruiz-Esquide). El se�or LARRA�N (Presidente).- En el comparado se consignan cuatro votos a favor,... El se�or HOFFMANN (Secretario).- Son tres. El se�or LARRA�N (Presidente).- �pero son tres, seg�n la constancia. En discusi�n Tiene la palabra el Senador se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Se�or Presidente, este voto de minor�a y otros dos no los he retirado despu�s de la conversaci�n que tuvimos en la Comisi�n -contrariamente a lo que sucedi� con los anteriores-, porque tienen que ver con un tema esencial al cual me he opuesto, por principio, desde que se cre� el sistema de isapres. Me refiero al establecimiento de preexistencias y exclusiones o carencias. Resulta dif�cil conciliar la aprobaci�n del proyecto con la votaci�n en contra de art�culos que legislan sobre las preexistencias, materia que -vuelvo a decir-, por tradici�n, por doctrina, por visi�n de la salud, a mi juicio, no deber�a estar presente en ning�n modelo, cualquiera que �l fuese. Por lo tanto, apelo a la comprensi�n del Senado para que pondere mi planteamiento, ya que tengo la obligaci�n de hacer lo posible -como dije cuando habl� respecto de otro precepto- por mantener criterios b�sicos. Por ello, no voy a argumentar sobre la materia -ni siquiera para forzar a otros Senadores- y, simplemente, pido que la Mesa d� por aprobadas las modificaciones que rechac� en la Comisi�n. Pero, por favor, que se entienda que doy por rechazadas estas enmiendas sin mayor debate y sin hacer cuesti�n porque estamos tratando de posibilitar -como se�al� sinceramente- un proyecto que a muchos, incluso de sectores distintos del m�o, no les gusta, por poco o por bastante. No quiero poner m�s dificultades a la tramitaci�n de la iniciativa, pero comprenda el Senado que tengo la obligaci�n de mantener una posici�n que vengo sosteniendo desde hace exactamente 20 a�os. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se�or Senador, tiene todo el derecho a manifestar su voto en contra. Lo que podemos hacer es que, una vez terminado el despacho de esta enmienda, las dem�s que sean semejantes se aprueben con la misma votaci�n. Por lo tanto, repetir�amos el resultado en todas aquellas materias con las que el Honorable se�or Ruiz-Esquide � El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Se�or Presidente, �me permite una observaci�n? El se�or LARRA�N (Presidente).- Exp�ngala muy brevemente, Su Se�or�a, porque otros se�ores Senadores tambi�n han pedido la palabra. El se�or RUIZ -ESQUIDE.- Lo s�, se�or Presidente, pero esta situaci�n es muy especial. Hay quienes me dicen: "Si t� crees que tienes la raz�n, �por qu� no votamos contigo?". Yo, se�or Presidente, voy a ir m�s all� en la exigencia a mi pobre alma: acceder� a retirar mi objeci�n y no votar�. El se�or LARRA�N (Presidente).- De ser as�, dar�amos por aprobada la letra c), nueva. El se�or �VILA.- No, se�or Presidente. El se�or PARRA.- Procede que se vote. El se�or VIERA-GALLO.- Que se vote. El se�or R�OS.- Pido la palabra. El se�or LARRA�N (Presidente).- Puede hacer uso de ella, Su Se�or�a. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, quiero pedir a los miembros de la Comisi�n de Salud una explicaci�n m�s profunda sobre esto. Seg�n entiendo, estamos hablando del art�culo 33, que es bastante extenso -se halla conformado por una serie de disposiciones-, y parte diciendo lo siguiente: "Para el otorgamiento de las prestaciones y beneficios de salud que norma esta ley, las personas indicadas en el art�culo 29 deber�n suscribir un contrato", etc�tera, en el cual se dejan establecidas las preexistencias. Imagino que es eso lo que estamos viendo. Se trata de un asunto de gran amplitud y muy importante. Lo que el Senador se�or Ruiz-Esquide plantea es un eventual rechazo de esta norma o una confusi�n en torno a ella. De su lectura, pareciera que una persona que contrata un plan de salud en una instituci�n de salud previsional y declara una enfermedad preexistente podr�a recibir atenci�n en el Fondo Nacional de Salud (FONASA) durante un per�odo determinado. Eso es lo que entiendo, se�or Presidente. Si es as�, me gustar�a que me lo explicaran, porque de ello depender� que vote a favor o en contra. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, �ste es un tema extremadamente complejo y lo hemos conversado muchas veces con el Senador se�or Ruiz-Esquide. Si uno, por ejemplo, tiene un auto y lo choca, no puede pretender ir al d�a siguiente a contratar un seguro para cubrirlo retroactivamente a fin de que le paguen los da�os. Eso no existe. O se contrata con anterioridad o, sencillamente, no se est� asegurado. Si a uno se le quema la casa, lo mismo. Y si alguien muere, la viuda no puede ir a contratar un seguro de vida al d�a siguiente. Eso tampoco existe. En relaci�n a las enfermedades, el tema es m�s complejo, porque no se trata de un evento que ocurri�, sino de uno que sucede y luego puede desaparecer: alguien se enferma y despu�s mejora; se puede agravar nuevamente y volver a sanar, y as� sucesivamente. Es algo continuo. Entiendo que al Honorable se�or Ruiz-Esquide le moleste, le choque -a m�, tambi�n-, el hecho de que una persona con preexistencia no pueda entrar a una isapre. �Cu�l es el problema? Que si alguien est� en FONASA, m�s de la mitad del costo de su salud est� siendo subsidiado por el Estado. Un ejemplo. A ese cotizante el plan AUGE no le va a costar un peso m�s de lo que est� pagando. En cambio, el afiliado a una isapre tendr� que pagar la prima tantas veces como personas est�n en el plan de salud. Si se trata de una familia de siete miembros (los padres y cinco hijos), son siete primas; si ella estuviera en el FONASA, no desembolsar�a nada extra. Lo anterior significa que hay un tratamiento financiero distinto para las isapre y para el FONASA. La gente afiliada a este Fondo, sea pobre, rica o de clase media, est� siempre subsidiada con los impuestos. La que cotiza en instituciones de salud previsional, en cambio, sea pobre, rica o de clase media, no lo est� nunca. En general, las personas, cuando se enferman, prefieren estar en una cl�nica y no en un hospital; contar con libre elecci�n y no tener que ir a un establecimiento p�blico para ser atendidas por el m�dico de turno. Por lo tanto, si permiti�ramos que la gente se afiliara a una ISAPRE cuando ya est� enferma -de c�ncer, por ejemplo-, recibir�a muy buena atenci�n; pero lo m�s probable es que, cuando se recupere, volver�a al FONASA para seguir pagando el 7 por ciento y no lo que realmente cuesta la prestaci�n. Esto es consecuencia del hecho de que hay subsidios para los afiliados al FONASA, pero no para los cotizantes de las isapres. Si posibilit�ramos que la gente entrara a estas instituciones y se desafiliara cuando deseara, con preexistencias o sin ellas, todos los chilenos, en forma muy racional, estar�amos en el FONASA, pagando solamente el 7 por ciento, mientras nos hall�ramos sanos; s�lo si alguien se enfermara nos afiliar�amos a una isapre, para aprovechar la atenci�n privada, que generalmente es m�s r�pida, no obliga a hacer colas, etc�tera, y una vez recuperada su salud volver�amos al FONASA. En realidad, �sta es una norma chocante. Pero desgraciadamente no hay alternativa, porque el financiamiento del sistema es muy raro y est� bastante distorsionado. Si en materia de salud operara una modalidad parecida a la de educaci�n -donde el subsidio no se aplica a la ense�anza municipalizada, sino al ni�o, y son los padres quienes deciden si su hijo va a un colegio particular subvencionado o a uno municipalizado-, se recibir�a el subsidio, independiente del establecimiento al que se ingresara. De aplicarse en salud un procedimiento similar -podr�a haber un subsidio para los m�s pobres; uno menor o ninguno, para los de clase media, etc�tera, y la gente podr�a decidir por qu� sistema optar-, dar�an lo mismo las preexistencias, porque, en el fondo, se pagar�a igual cantidad en ambos lados. El drama que tenemos es que, cuando uno est� en FONASA, cotiza s�lo el 7 por ciento y todo el exceso de costos lo absorbe el Estado. De hecho, el aporte de �ste es cada vez mayor. Y todas las proyecciones indican que, de aqu� a algunos a�os, las ISAPRE van a desaparecer, porque no pueden competir contra un sistema que ofrece lo mismo� El se�or LARRA�N (Presidente).- Termin� su tiempo, se�ora Senadora. La se�ora MATTHEI.- � pero tiene todo subsidiado. Es por eso que, encontr�ndole raz�n al Honorable se�or Ruiz-Esquide, en este esquema no cabe otra alternativa que la planteada en el proyecto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Boeninger. El se�or BOENINGER.- Ser� muy breve, se�or Presidente. Coincido con las apreciaciones de fondo manifestadas tanto por el Senador se�or Ruiz-Esquide como por la Honorable se�ora Matthei. Sin embargo, en una sola frase quiero sintetizar el punto; en caso de no existir esta norma, la viabilidad financiera de los seguros privados ser�a exactamente igual a cero. O sea, desaparecer�a el sistema. Y como desde el comienzo se ha se�alado aqu� que estamos tratando de perfeccionar un mecanismo que adolece de un conjunto importante de vicios, esta disposici�n es indispensable, porque de otra manera el sistema desaparecer�a. Ahora bien, quiero hacer notar que la actual letra f) del art�culo 33, que es modificada por la letra c), nueva, dispone que las restricciones a la cobertura "s�lo podr�n estar referidas a enfermedades preexistentes declaradas, por un plazo m�ximo de dieciocho meses". Lo que hace el precepto en discusi�n es posibilitar la mantenci�n de la misma cobertura por otros dieciocho meses. Es decir, est� ampliando a favor del afiliado la factibilidad de prolongar su per�odo de atenci�n pese a tener una enfermedad preexistente. Dentro de ese esp�ritu, me parece que, por esta doble raz�n, lo procedente es aprobar la norma, entendiendo que la objeci�n del Senador se�or Ruiz-Esquide no es a la �ltima observaci�n que acabo de hacer. Su Se�or�a, por motivos doctrinarios y de prevalencia de lo sanitario, que esgrime con mucha legitimidad, es partidario de que no haya preexistencias. Sin embargo, dentro del mismo contexto, estamos mejorando el sistema a favor del afiliado. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Viera-Gallo. El se�or VIERA-GALLO.- Se�or Presidente, adem�s de lo se�alado, me parece importante indicar que la enfermedad debe ser previamente declarada; es decir, tiene que existir un diagn�stico. Si hay una duda o una justa causa de error, no opera la exclusi�n. Ha de mediar una enfermedad declarada; debe tratarse de alguien a quien, como dec�a la Senadora se�ora Matthei, se le diagnostic� un mal y, luego va a una ISAPRE. No se refiere al que tiene una duda acerca de su estado de salud. La se�ora MATTHEI.- O se siente mal. El se�or VIERA-GALLO.- �o a quien no sabe que est� enfermo o piensa que lo est�. Aun as�, se garantiza por otros dieciocho meses -como se�al� el Senador se�or Boeninger; y me parece importante- la misma cobertura que ofrece el FONASA. O sea, nos movemos en el mundo del seguro privado, con la l�gica que le es propia. El se�or �VILA.- �El lucro! El se�or VIERA-GALLO.- Obviamente: el lucro. Y tiene su l�gica. Puede resultar chocante que eso ocurra en el �mbito de la salud; pero tambi�n lo es que acontezca en la vida. �Por qu� en �sta lo ser�a menos que en aqu�lla? ��se es el mundo en el cual vivimos! El se�or LARRA�N (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. El se�or LARRA�N (Presidente).- �Alg�n se�or Senador desea fundar el voto? --(Durante el fundamento de voto). El se�or RUIZ (don Jos�).- Se�or Presidente, voy a votar en contra de esta norma, por la argumentaci�n que dio el Senador se�or Boeninger. Su Se�or�a me convenci� cuando se�al� que, si se rechazara esta disposici�n, el sistema desaparecer�a. Y como tengo inter�s en que eso ocurra, me pronunciar� en forma negativa. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, en la l�gica de que estamos en presencia de un seguro de salud, obviamente las primas responden al costo que significa el riesgo que se asume. En el caso de las preexistencias, hay una gran posibilidad de abuso por parte de las isapres, debido a que una intervenci�n de alto costo puede perfectamente atribuirse a la eventual existencia de un mal anterior cuyo desarrollo no fue del conocimiento de un m�dico pero s� ha estado sinti�ndose por el afectado. Entonces, una vez que se hicieran prevenciones en ese �mbito� La se�ora MATTHEI.- Est�n. El se�or �VILA.-� -ellas se habr�an efectuado, seg�n acota la Senadora se�ora Matthei-, la disposici�n me parecer�a razonable. Por otro lado, el tema de fondo que aqu� ha surgido tiene que ver con las concepciones en juego. La salud a cargo del Estado no puede regirse por criterios econ�micos ni de lucro. Las personas con preexistencias son seres humanos que, en un momento determinado, necesitar�n alg�n grado de protecci�n. No deben ser desechadas por esa circunstancia y quedar excluidas de todo amparo. Por lo tanto, el Estado nunca podr� competir en t�rminos de igualdad con los privados, porque ambos se rigen por filosof�as distintas: �stos, por el lucro, y aqu�l, por el bien com�n; los dos factores son contrapuestos. El drama es que el �mbito p�blico, al menos en materia de salud, al no ser debidamente reforzado, va a quedar cada vez m�s expuesto a que los pocos recursos con que cuenta sean succionados desde el sector privado, el cual, en relaci�n al AUGE, ya se est� preparando para ese efecto. Los hospitales y servicios p�blicos pueden llegar a ser verdaderos pasadizos a trav�s de los cuales los pacientes del AUGE, velozmente, vayan a dar a las cl�nicas. De ese modo los recursos p�blicos, una vez m�s, pasar�n a incrementar de manera sustancial las utilidades de las empresas de salud. Los se�ores Senadores pueden observar las nuevas construcciones que surgen por doquier en las principales cl�nicas, particularmente en la Alemana, que me correspondi� visitar much�simo. Y el mismo se�or Presidente, en las ocasiones en que tuvo la bondad de acudir al quinto piso de una de las torres, debi� transitar por una larga pasarela que bordeaba la construcci�n de una nueva torre que recibir� los miles de millones de pesos que surgir�n del sector p�blico como consecuencia de la aplicaci�n de la nueva modalidad de atenci�n contemplada en el AUGE. Entonces, por angas o por mangas, el sistema privado de salud se las ingenia para ir succionando, con un vigor e insaciabilidad incre�bles, los pocos recursos con que cuenta el Estado. El se�or LARRA�N (Presidente).- En votaci�n electr�nica la letra c) del N� 7, que pas� a ser N� 10, mediante la cual se agrega un p�rrafo nuevo a la letra f) del art�culo 33. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba (14 votos a favor, 3 en contra, 3 abstenciones y un pareo). Votaron por la afirmativa los se�ores Boeninger, Canessa, Cariola, Cordero, Espina, Horvath, Larra�n, Matthei, N��ez, Prokurica, R�os, Vega, Viera-Gallo y Zurita. Votaron por la negativa los se�ores Frei (do�a Carmen), Ruiz (don Jos�) y Ruiz-Esquide. Se abstuvieron los se�ores �vila, Naranjo y Parra. No vot�, por estar pareado, el se�or Gazmuri. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se cumpli� la hora de t�rmino del Orden del D�a, as� que quedar� pendiente la votaci�n del resto de las modificaciones. La se�ora FREI (do�a Carmen).- �Cu�ntas votaciones quedan, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Alrededor de diez. Pero tal vez sean menos, porque parece que varias objeciones ser�n retiradas. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Pido la palabra. El se�or LARRA�N (Presidente).- La tiene, Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, de las votaciones que quedan, se van a retirar dos objeciones: una de la Senadora se�ora Matthei y otra m�a. Y luego hay tres enmiendas aprobadas por mayor�a, relativas a exclusiones, que podr�an ser objeto de una sola votaci�n. En cuanto al tema pendiente relativo al art�culo 2�, como �ste se aprob� por unanimidad en la Comisi�n, respetaremos ese resultado. Por lo tanto, no creo que la votaci�n de las modificaciones pendientes dure m�s de cinco minutos. El se�or LARRA�N (Presidente).- �Su Se�or�a solicita que se prorrogue el Orden del D�a hasta despachar la iniciativa? El se�or RUIZ-ESQUIDE.- As� es. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se ha pedido prorrogar el Orden del D�a. La se�ora MATTHEI.- Yo quiero solicitar otra cosa, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra, Su Se�or�a. La se�ora MATTHEI.- Pido que con la misma votaci�n anterior se aprueben todas las enmiendas relativas a las preexistencias. El se�or VIERA-GALLO.- Conforme. La se�ora MATTHEI.- Podr�amos elaborar inmediatamente esa lista, para que todo eso quedara aprobado. Yo no tengo inconveniente en que se prorrogue el Orden del D�a, pero algunos Senadores no est�n dispuestos a dar ese acuerdo. Al menos, podr�amos avanzar si aprob�ramos, con la misma votaci�n anterior, las enmiendas mencionadas. El se�or LARRA�N (Presidente).- �Habr�a consenso para prorrogar la hora? El se�or CANESSA.- No, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- No hay acuerdo. El se�or VIERA-GALLO.- Se�or Presidente, quiero plantear una moci�n de orden. El se�or LARRA�N (Presidente).- Si no hay voluntad para prorrogar, yo prefiero� El se�or VIERA-GALLO.- Se trata s�lo de una moci�n de orden. El se�or LARRA�N (Presidente).- Es que habr�a que individualizar los art�culos mencionados. El se�or VIERA-GALLO.- La Comisi�n ya lo hizo, se�or Presidente. Sabemos perfectamente -y podr�amos entregar la lista a la Secretar�a- a qu� normas se refirieron los Senadores se�ora Matthei y se�or Ruiz-Esquide. Son tres. Y respecto de las otras dos, quienes se opon�an han retirado su objeci�n. Con ello el proyecto quedar�a despachado. El se�or LARRA�N (Presidente).- No. Falta tratar una indicaci�n que se agreg�. El se�or VIERA-GALLO.- Ella fue acordada por la unanimidad de los miembros de la Comisi�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Sin embargo, se requiere el consenso de la Sala para su discusi�n. El se�or VIERA-GALLO.- Si la Sala hiciera confianza en la Comisi�n� El se�or LARRA�N (Presidente).- Est� bien, pero ello significa prorrogar la hora hasta despachar el proyecto. El se�or VIERA-GALLO.- Cinco minutos, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tal vez se necesiten cinco minutos. Pero, �existir�a voluntad para ese efecto?, �habr�a acuerdo para prolongar el Orden del D�a hasta las 19? El se�or FERN�NDEZ.- Claro. La se�ora FREI (do�a Carmen).- S�. La se�ora MATTHEI.- Bien. --As� se acuerda. El se�or LARRA�N (Presidente).- Entonces, todos los art�culos relacionados con las preexistencias se entender�an aprobados con la misma votaci�n registrada anteriormente. En cada oportunidad, los se�ores Senadores dar�n a conocer cu�l art�culo se relaciona con la materia. El se�or HOFFMANN (Secretario).- A continuaci�n, respecto de la letra d) del N� 7, la indicaci�n n�mero 20 fue aprobada con los votos favorables de los Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger y Espina, y la abstenci�n de los Honorables se�ores Ruiz-Esquide y Viera-Gallo. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Retiro la m�a, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se retiran las abstenciones. En consecuencia, si le parece a la Sala, se aprobar� la letra d) del N� 7 por unanimidad. --As� se acuerda. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En la p�gina 63 del comparado, en la tercera columna, se dice: "2.- Atenci�n particular de enfermer�a�", etc�tera. El se�or VIERA-GALLO.- Se trata de una exclusi�n. Es lo mismo. Por lo tanto, habr�a que aplicar lo propuesto por la Senadora se�ora Matthei. El se�or R�OS.- �No! El se�or HOFFMANN (Secretario).- El �nico que vot� en contra fue el Senador se�or Ruiz-Esquide. La Honorable se�ora Matthei y el Senador se�or Boeninger la aprobaron. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, �me permite una breve explicaci�n? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Las preexistencias son un asunto muy complicado, como se ha dicho por todos, pero no tienen la trascendencia que llev� a votar en determinado sentido al Honorable se�or Ruiz De Giorgio. Por lo tanto, en los cuatro casos que vienen no corresponde definir con el resultado anterior, porque algunos se�ores Senadores pueden cambiar su voto. Adem�s, sobre todos ellos podr�a haber un solo pronunciamiento. La se�ora MATTHEI.- Pero, de todos modos, no se alcanzar�a a despachar el proyecto hoy d�a. El se�or R�OS.- Solicito votar el n�mero 2. El se�or LARRA�N (Presidente).- Sigamos hasta donde podamos. Pero debemos individualizar cada materia, para el registro hist�rico. No se puede proceder de otra manera. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, retiro mi voto negativo. El se�or LARRA�N (Presidente).- �Lo retira? El se�or R�OS.- Solicito votar el n�mero 2. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se�ores Senadores, no debemos tener l�mite de tiempo, porque si s�lo contamos con tres minutos, vamos a hacer mal las cosas. O prorrogamos la hora hasta el despacho total, o suspendemos la tramitaci�n de inmediato, para continuar la pr�xima sesi�n. El se�or R�OS.- �Suspendamos! El se�or LARRA�N (Presidente).- Por lo tanto, no se votar�a ahora lo que se ha enunciado. --Queda suspendida la discusi�n particular del proyecto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminado el Orden del D�a. VI. INCIDENTES PETICIONES DE OFICIOS El se�or HOFFMANN (Secretario).- Han llegado a la Mesa diversas peticiones de oficios. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se les dar� curso en la forma reglamentaria. --------------- --Los oficios cuyo env�o se anuncia son del tenor siguiente: Del se�or ESPINA: A la se�ora Directora Nacional del Servicio Nacional de Menores, solicit�ndole REINTEGRO DE FONDOS P�BLICOS A SENAME POR FUNDACI�N EDUCACIONAL Y CULTURAL SAN PABLO. Del se�or HORVATH: A la se�ora Directora Ejecutiva de la CONAMA, pidi�ndole antecedentes sobre IMPACTO AMBIENTAL DE PROYECTO DE INTEGRACI�N DE ZONA AUSTRAL CON ISLA TIERRA DEL FUEGO, ENTRE VICU�A Y BAH�A YENDEGAIA. ---------------- --Ofrecida la palabra, sucesivamente, en los tiempos de los Comit�s Institucionales 1, Mixto (Partido por la Democracia), Dem�crata Cristiano, Uni�n Dem�crata Independiente, Renovaci�n Nacional, Socialista, Institucionales 2 e Independiente, ning�n se�or Senador interviene. El se�or LARRA�N (Presidente).- Por haberse cumplido su objetivo, se levanta la sesi�n. --Se levant� a las 18:58. Manuel Oca�a Vergara, Jefe de la Redacci�n