REP�BLICA DE CHILE DIARIO DE SESIONES DEL SENADO PUBLICACI�N OFICIAL LEGISLATURA 352�, EXTRAORDINARIA Sesi�n 18�, en mi�rcoles 1 de diciembre de 2004 Ordinaria (De 16:26 a 18:42) PRESIDENCIA DEL SE�OR HERN�N LARRA�N FERN�NDEZ, PRESIDENTE SECRETARIO, EL SE�OR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR ____________________ � N D I C E Versi�n Taquigr�fica P�g. I. ASISTENCIA......................................................................................................... II. APERTURA DE LA SESI�N............................................................................... III. TRAMITACI�N DE ACTAS..........................................................................�. IV. CUENTA............................................................................................................... V. ORDEN DEL D�A: Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que crea asignaci�n de est�mulo y desempe�o y establece normas sobre carrera funcionaria para personal de la Direcci�n del Trabajo (3729-13) (se aprueba en general y particular)................... Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que establece facultades para la Tesorer�a General de la Rep�blica y modifica la ley N� 19.848, sobre reprogramaci�n de deudas a Fondos de Cr�dito Solidario (3712-04) (se aprueba en general y particular)..................................................................................... Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica el C�digo de Aguas (876-09) (queda pendiente su discusi�n particular)............................................ VI. TIEMPO DE VOTACIONES: "D�a de la Amistad y la Paz entre Chilenos y Argentinos". Proyecto de acuerdo (S 769-12) (se aprueba)..................................................................... VII. INCIDENTES: Peticiones de oficios (se anuncia su env�o)...................................................... Inexistencia de Estado de Derecho en Chile (observaciones del se�or Mart�nez). ........................................................................................................... VERSI�N TAQUIGR�FICA I. ASISTENCIA Asistieron los se�ores: --Aburto Ochoa, Marcos --Arancibia Reyes, Jorge --�vila Contreras, Nelson --Boeninger Kausel, Edgardo --Bombal Otaegui, Carlos --Canessa Robert, Julio --Cantero Ojeda, Carlos --Cariola Barroilhet, Marco --Chadwick Pi�era, Andr�s --Coloma Correa, Juan Antonio --Cordero Rusque, Fernando --Espina Otero, Alberto --Fern�ndez Fern�ndez, Sergio --Flores Labra, Fernando --Foxley Rioseco, Alejandro --Frei Ruiz-Tagle, Carmen --Frei Ruiz-Tagle, Eduardo --Garc�a Ruminot, Jos� --Horvath Kiss, Antonio --Larra�n Fern�ndez, Hern�n --Lavandero Illanes, Jorge --Mart�nez Busch, Jorge --Matthei Fornet, Evelyn --Moreno Rojas, Rafael --Mu�oz Barra, Roberto --Naranjo Ortiz, Jaime --Novoa V�squez, Jovino --N��ez Mu�oz, Ricardo --Ominami Pascual, Carlos --Orpis Bouch�n, Jaime --P�ez Verdugo, Sergio --Parra Mu�oz, Augusto --Prokurica Prokurica, Baldo --R�os Santander, Mario --Romero Pizarro, Sergio --Ruiz De Giorgio, Jos� --Ruiz-Esquide Jara, Mariano --Sabag Castillo, Hosa�n --Silva Cimma, Enrique --Stange Oelckers, Rodolfo --Vega Hidalgo, Ram�n --Viera-Gallo Quesney, Jos� Antonio --Zald�var Larra�n, Adolfo --Zald�var Larra�n, Andr�s --Zurita Camps, Enrique Concurrieron, adem�s, los se�ores Ministros Secretario General de la Presidencia y del Trabajo y Previsi�n Social, y los se�ores Subsecretario de Obras P�blicas, Director y Subdirector General de Aguas, Director del Trabajo subrogante, y Asesor del Ministerio del Trabajo. Actu� de Secretario el se�or Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el se�or Jos� Luis Alliende Leiva. II. APERTURA DE LA SESI�N --Se abri� la sesi�n a las 16:26, en presencia de 25 se�ores Senadores. El se�or LARRA�N (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesi�n. III. TRAMITACI�N DE ACTAS El se�or LARRA�N (Presidente).- Se dan por aprobadas las actas de las sesiones 12�, extraordinaria, en 10 de noviembre; 13�, ordinaria, en 16 de noviembre; 14�, extraordinaria, y 15�, ordinaria, ambas en 17 de noviembre, todas del a�o en curso, que no han sido observadas. El acta de la sesi�n 16�, especial, en 30 de noviembre del a�o en curso, se encuentra en Secretar�a a disposici�n de los se�ores Senadores, hasta la sesi�n pr�xima, para su aprobaci�n. IV. CUENTA El se�or LARRA�N (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretar�a. El se�or ALLIENDE (Prosecretario).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas: Mensaje De Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, por medio del cual retira la urgencia que hizo presente con relaci�n al despacho del proyecto de ley que establece incentivos para la entrega de informaci�n en los delitos vinculados a los detenidos desaparecidos y ejecutados pol�ticos (bolet�n N� 3.391-17). --Queda retirada la urgencia y se manda agregar el documento a sus antecedentes. Oficios Dos de la Honorable C�mara de Diputados: Con el primero comunica que otorg� su aprobaci�n al proyecto de ley que establece facultades en materias financieras para las universidades estatales (bolet�n N� 3.502-04). --Pasa a la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a, y a la de Hacienda, en su caso. Con el segundo informa que aprob� las enmiendas propuestas por el Senado al proyecto que modifica el C�digo Org�nico de Tribunales y la ley N� 18.776 e incorpora las comunas de Alto Hospicio, Hualp�n, Alto Biob�o, Cholchol, San Pedro de la Paz y Chiguayante a los territorios jurisdiccionales de los tribunales que indica (bolet�n N� 3.708-07). --Se toma conocimiento y se manda archivar el documento junto a sus antecedentes. Del Excelent�simo Tribunal Constitucional, con el que remite copia autorizada de la resoluci�n dictada en los autos rol N� 427, relativos al requerimiento formulado en contra del proyecto de ley que autoriza a la Empresa Nacional de Miner�a para transferir la Fundici�n y Refiner�a Las Ventanas a la Empresa Corporaci�n Nacional del Cobre de Chile (bolet�n N� 3.298-08). --Se toma conocimiento. Informes De la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a y de la de Hacienda, reca�dos en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que establece facultades para la Tesorer�a General de la Rep�blica y modifica la ley N� 19.848, sobre reprogramaci�n de deudas a los fondos de cr�dito solidario, con urgencia calificada de "suma" (bolet�n N� 3.712-04). Segundo informe de la Comisi�n de Trabajo y Previsi�n Social, reca�do en el proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, sobre acoso sexual (bolet�n N� 1.419-07). De la Comisi�n de Transportes y Telecomunicaciones, reca�do en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la ley N� 18.502, en relaci�n con el impuesto al gas, y establece regulaciones complementarias para la utilizaci�n de ese combustible en veh�culos (bolet�n N� 2.701-15). --Quedan para tabla. Permiso constitucional Al Senador se�or Lavandero, quien lo solicita, de conformidad con lo dispuesto en el art�culo 57 de la Carta Fundamental, para ausentarse del pa�s a contar del 4 de diciembre en curso. --Se accede. El se�or ALLIENDE (Prosecretario).- En este momento han llegado a la Mesa dos oficios adicionales de la Honorable C�mara de Diputados: Con el primero comunica que otorg� su aprobaci�n al proyecto de ley que crea asignaci�n de est�mulo y desempe�o y proporciona normas sobre carrera funcionaria para el personal de la Direcci�n del Trabajo, con urgencia calificada de "discusi�n inmediata" (bolet�n N� 3.729-13). El se�or LARRA�N (Presidente).- Corresponde que pase a las Comisiones de Hacienda y de Trabajo y Previsi�n Social, unidas, pero, ante la calificaci�n de la urgencia, esos �rganos t�cnicos se constituyeron de hecho y entiendo que lo han aprobado. De manera que se halla en condiciones de ser incorporado en la tabla de hoy y de ser analizado con informe oral de los respectivos Presidentes. Si le parece a la Sala, se proceder� en la forma indicada. El se�or FERN�NDEZ.- �Muy bien! El se�or P�EZ.- De acuerdo. El se�or SABAG.- Conforme. --As� se acuerda. El se�or ALLIENDE (Prosecretario).- Con el segundo oficio, la C�mara Baja informa que dio su aprobaci�n, en los mismos t�rminos en que lo hizo el Senado, al proyecto de ley que faculta al Pleno de la Corte Suprema para autorizar el funcionamiento de salas en las Cortes de Apelaciones durante el feriado judicial (bolet�n N� 3728-07). El se�or LARRA�N (Presidente).- Se toma conocimiento y se manda comunicar el proyecto a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica. Terminada la Cuenta. El se�or MORENO.- Pido la palabra sobre la Cuenta, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Puede hacer uso de ella, Su Se�or�a. El se�or MORENO.- Se�or Presidente, quiero hacer dos peticiones acerca de sendos asuntos a que se ha hecho referencia. La primera de ellas dice relaci�n a los informes de las Comisiones de Educaci�n y de Hacienda reca�dos en el proyecto de ley sobre reprogramaci�n de deudas a los fondos de cr�dito solidario, calificado de "suma urgencia". Esa iniciativa fue aprobada por unanimidad en ambas Comisiones. Y como pr�cticamente es de F�cil Despacho, pido que, al igual que aquella que reci�n se acord� tratar en la presente sesi�n, se incluya en la tabla a fin de despacharla hoy. El se�or LARRA�N (Presidente).- Solicito el acuerdo de la Sala para incorporar en el Orden del D�a el proyecto referido, el cual, como inform� el se�or Presidente de la Comisi�n de Educaci�n, fue aprobado por unanimidad tanto en esa Comisi�n como en la de Hacienda. Entiendo que es muy espec�fico y que sus dos art�culos complementan normativas anteriores. --As� se acuerda. El se�or MORENO.- La segunda petici�n consiste en que se autorice a la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a para discutir en general y en particular, a la vez, la iniciativa que establece facultades en materias financieras para las universidades estatales. El se�or LARRA�N (Presidente).- Si le parece a la Sala, se otorgar� la autorizaci�n solicitada. --As� se acuerda. El se�or LARRA�N (Presidente).- Considerando tanto los acuerdos adoptados con respecto a la Cuenta como el retiro de la urgencia al asunto que figura en primer lugar del Orden del D�a, sobre entrega de informaci�n respecto de los delitos vinculados a detenidos desaparecidos y ejecutados pol�ticos, sugiero incluir como N� 1 el proyecto, calificado de "discusi�n inmediata", que proporciona normas sobre carrera funcionaria del personal de la Direcci�n del Trabajo, con informe oral de los Presidentes de las Comisiones unidas; como N� 2, el relativo a la reprogramaci�n de deudas a los fondos de cr�dito solidario; a continuaci�n, el que modifica el C�digo de Aguas, que requiere mayor debate por ser m�s complejo, al cual podemos dedicar el resto de la sesi�n. Y ser�a deseable continuar con otras iniciativas; pero las dos primeras son, repito, de F�cil Despacho. Si le parece a la Sala, se proceder� de esa manera. --As� se acuerda. V. ORDEN DEL D�A ASIGNACI�N Y NORMAS DE CARRERA FUNCIONARIA PARA PERSONAL DE DIRECCI�N DEL TRABAJO El se�or LARRA�N (Presidente).- Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, relativo a la creaci�n de una asignaci�n de est�mulo y desempe�o y al establecimiento de normas sobre carrera funcionaria para el personal de la Direcci�n del Trabajo, con urgencia calificada de "discusi�n inmediata". --Los antecedentes sobre el proyecto (3729-13) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 18�, en 1 de diciembre de 2004. Informe de Comisi�n: Hacienda y Trabajo unidas (verbal), sesi�n 18�, en 1 de diciembre de 2004. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- El art�culo 1� del proyecto dispone, para el personal de planta y a contrata de la Direcci�n del Trabajo, con excepci�n del jefe superior del servicio, una asignaci�n de est�mulo y desempe�o, la que se pagar� en cuatro cuotas, en los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre de cada a�o. Asimismo, la iniciativa determina normas especiales para los concursos internos de promoci�n. Finalmente, se otorga a dichos funcionarios, por una sola vez, un bono no imponible ni tributable de 90 mil y de 70 mil pesos, seg�n el grado en que se encuentren ubicados. Las Comisiones de Hacienda y de Trabajo y Previsi�n Social, unidas, aprobaron en general y en particular el proyecto por la unanimidad de sus miembros presentes (Honorables se�ora Matthei y se�ores Boeninger, Foxley, Garc�a y Ominami, por una parte, y se�ores Canessa, Parra, R�os y Ruiz, por la otra), en los mismos t�rminos en que lo hizo la C�mara de Diputados. Cabe tener presente que el art�culo 7� tiene car�cter de ley org�nica constitucional, por lo cual su aprobaci�n requiere el voto conforme de 27 se�ores Senadores. El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n general y particular, a la vez. Tiene la palabra el Honorable se�or Foxley, Presidente de la Comisi�n de Hacienda. El se�or FOXLEY.- Se�or Presidente, hace un momento termin� la sesi�n en que las Comisiones unidas analizaron el proyecto y lo aprobaron, por unanimidad, en sus distintos aspectos. En el primero de ellos, relativo a la asignaci�n asociada al cumplimiento de metas, se fija un tope m�ximo de 12 por ciento, con una provisi�n de fondos, el primer a�o, de hasta 5 por ciento, y un promedio de 9,5 por ciento en los a�os siguientes. La asignaci�n por desempe�o se otorgar� al personal de planta y a contrata. Su determinaci�n se har� de acuerdo con un procedimiento establecido en la ley, en el cual se contemplan asignaciones por estamentos, grupos o equipos de funcionarios, y se dispone, tambi�n, un mecanismo de participaci�n del personal en el establecimiento de las metas que defina la Direcci�n. A lo anterior se deben agregar dos elementos. En efecto, asimismo existir� un sistema de concursos internos para llenar las vacantes en la planta. Y ello ser� complementado con una planilla suplementaria, para que las personas a contrata que ganen el concurso no pierdan, al pasar a la planta, las remuneraciones que recib�an y puedan mantener ese nivel de ingreso. Por �ltimo �para continuar con la menci�n de los puntos principales-, el proyecto contempla un bono adicional, por una sola vez, de 90 mil pesos para los funcionarios ubicados en los grados 23 a 14, y de 70 mil pesos para quienes se encuentren en los grados 13 a 5. Ese bono especial se pagar� al mes siguiente de la publicaci�n de la ley en proyecto. La iniciativa, como se ha dado a conocer, fue aprobada por unanimidad en las Comisiones de Hacienda y de Trabajo, unidas. En consecuencia, est� en condiciones de ser sometida a votaci�n en la Sala. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Bombal, Presidente de la Comisi�n de Trabajo. El se�or BOMBAL.- Se�or Presidente, no obstante que ayer, informalmente, habl� con el se�or Presidente de la Comisi�n de Hacienda sobre la posibilidad de que una vez que la iniciativa fuese despachada por la C�mara de Diputados -lo que ocurrir�a este mediod�a- la trataran las Comisiones de Hacienda y de Trabajo, unidas, el Senador que habla, como Presidente de ese �ltimo �rgano t�cnico, no tuvo idea de la reuni�n celebrada. Nadie me avis� de ella. Y, seg�n he preguntado en las oficinas, no hubo ninguna citaci�n. No tengo ning�n inconveniente en que se haya analizado el proyecto. De hecho, convers� ayer, informalmente �repito-, con el Senador se�or Foxley y quedamos de acuerdo en hacer esa reuni�n. Es m�s,� El se�or FOXLEY.- �Me permite una interrupci�n, Su Se�or�a? El se�or BOMBAL.- Con mucho gusto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Con la venia de la Mesa, tiene la palabra el Honorable se�or Foxley. El se�or FOXLEY.- Se�or Presidente, como es obvio, se pidi� al Secretario de la Comisi�n de Hacienda que se pusiera de acuerdo con el de la Comisi�n de Trabajo hoy en la ma�ana, porque la C�mara de Diputados despach� el proyecto cerca del mediod�a. Y, siguiendo con lo acordado ayer con el se�or Presidente de la Comisi�n de Trabajo en el sentido de celebrar la sesi�n a las 15:30, ambos funcionarios citaron �ignoro a trav�s de qu� medios- a los respectivos miembros. La prueba est� en la asistencia registrada. Lamento que no se haya avisado al se�or Presidente de la Comisi�n de Trabajo o que Su Se�or�a, en todo caso, no se haya enterado. Aunque ello no es de mi responsabilidad, le doy las excusas del caso. El se�or LARRA�N (Presidente).- Contin�a con la palabra el Senador se�or Bombal. El se�or BOMBAL.- Agradezco la explicaci�n, se�or Presidente. Lo notable es que en la ma�ana conversamos acerca de esta materia, precisamente, en la Comisi�n de Trabajo. Es m�s, a sugerencia del Honorable se�or Parra, acordamos que, en caso de que no pudi�semos reunirnos hoy, sesionar�amos el lunes y, a todo evento, contribuir�amos al despacho de la iniciativa. Deploro la descoordinaci�n, porque hasta en la ma�ana de hoy, repito, se hab�a estado hablando sobre esta materia. Averiguar� qu� sucedi�, porque, naturalmente, hubo una falla en el sistema administrativo. Sin embargo, se�or Presidente, estamos de acuerdo con aprobar el proyecto, tal como lo hab�amos conversado ayer con el se�or Ministro. Deseo consignar, s�, algo que tambi�n tratamos con algunos se�ores Senadores, en cuanto a que la normativa que nos ocupa surge como consecuencia de un conflicto gremial, de todos conocido, al interior de un organismo del Estado. Con ello se sienta un precedente bastante complejo de considerar, en el sentido de que por la v�a de la presi�n -as� como ocurri� en la pr�ctica- emerge esta clase de proyectos, que si bien van en beneficio de los trabajadores, lo que nos parece muy saludable, obedecen a un m�todo digno de observaci�n. Si los aspectos en an�lisis se hallan impl�citos dentro de la modernizaci�n del Estado, �por qu� no adelantarse a aplicar este tipo de soluciones, para evitar conflictos que a la larga causan tanto da�o a los trabajadores y, por supuesto, al organismo involucrado, lo que redund� en graves perjuicios? Si ya exist�a la idea del mejoramiento, cab�a anticiparse en materializarla, sin esperar que la modernizaci�n fuera fruto de conflictos. Se�or Presidente, nosotros concurriremos con nuestros votos a la aprobaci�n del proyecto. Y, en lo incidental, precisaremos, naturalmente, qu� sucedi�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Foxley. El se�or FOXLEY.- Se�or Presidente, aclaro al Senador se�or Bombal, por �ltimo, que su secretaria recibi� de manera formal la citaci�n a la sesi�n de esta tarde. Si ella no le entreg� el mensaje, no es responsabilidad nuestra. El se�or BOMBAL.- Voy a averiguar qu� pas� exactamente. He estado en el edificio en todo momento. El se�or LARRA�N (Presidente).- Creo que el tema ha quedado claro. Es importante que se resuelvan las situaciones administrativas; pero el Honorable se�or Bombal, como Presidente de la Comisi�n de Trabajo, ha avalado el proyecto y ha recomendado su aprobaci�n no obstante no haber participado en la reuni�n celebrada. De manera que, en lo sustancial, podemos seguir el debate. Me parece muy relevante que las formalidades se cumplan, porque cualquier Presidente de Comisi�n puede, en cierto sentido, ser sorprendido, lo cual no habla bien de nuestros procedimientos internos. De manera que algo debemos revisar en esa materia. Tiene la palabra el Senador se�or Ruiz. El se�or RUIZ (don Jos�).- Se�or Presidente, como es l�gico, vamos a aprobar el proyecto; pero al respecto quiero hacer un poco de historia, porque puede quedar la sensaci�n de que los trabajadores s�lo logran sus reivindicaciones por el uso de la fuerza. La iniciativa empieza a gestarse el a�o 2001, cuando por primera vez los servidores de la Direcci�n del Trabajo plantean formalmente sus peticiones al Gobierno. En esa oportunidad, se form� una comisi�n entre los empleados y las autoridades del trabajo. Despu�s de muchas discusiones, se lleg� a un acuerdo, el cual, concretamente, no fue aceptado por la Direcci�n de Presupuestos. Cuando se desconoce un acuerdo en el cual han participado autoridades del Gobierno �concretamente en el �mbito del trabajo-, que impide solucionar un problema, a los trabajadores no les queda otra alternativa que la huelga. Por eso, iniciaron un largo movimiento, que por cierto da�� a muchos de los que no pudieron concurrir a defender sus derechos a la Direcci�n del Trabajo. Pero debe quedar constancia de que la culpa no fue de ellos. A pesar de todo, aceptaron un proyecto que no fue el que hab�an logrado concretar con las autoridades laborales ni satisfac�a sus aspiraciones; sin embargo, pusieron fin a su conflicto, y hoy d�a esperan que la iniciativa en debate �ojal�- se apruebe con rapidez, para que empiece a surtir efecto a partir del 1� de diciembre. --(Aplausos en tribunas). El se�or LARRA�N (Presidente).- Quiero solicitar a quienes nos acompa�an en esta oportunidad que mantengan silencio y el debido respeto, porque mientras m�s interrupciones haya, m�s se demora la sesi�n. Tampoco pretendemos que nos dejen sesionar en privado. Deseamos que escuchen el debate pero con el debido respeto, para que los se�ores Senadores puedan intervenir. Tiene la palabra el Honorable se�or R�os. El se�or R�OS.- Se�or Presidente, los estudiosos del sistema de econom�a social de mercado sostienen, con raz�n, que �ste requiere dos fundamentos esenciales para que se desarrolle en plenitud y con la justicia que corresponde. El primero es establecer toda la normativa institucional que permita el desarrollo y la imaginaci�n creadora de las personas, a fin de que se transformen en motor de desarrollo de cada uno de los individuos que viven en una sociedad; y, el segundo, tener un Estado eficiente, oportuno y transparente. Esos son los elementos que se entregan como responsabilidad al Estado. Por eso, entonces, siempre hay que tener presente c�mo se van generando las acciones del ente p�blico en relaci�n con determinados problemas, en este caso los del servicio del trabajo. A pesar de que puedan darse muchas explicaciones con respecto a qu� motiv� el proyecto en an�lisis y c�mo en definitiva se gener�, no cabe duda de que �l fue precedido de un conflicto laboral, el cual pudo haberse resuelto perfectamente antes, discutirse dos o tres meses atr�s y resolverse incluso en condiciones mejores. La Comisiones de Trabajo y de Hacienda, unidas, desarrollaron su labor en breve tiempo -media hora-, con pocos detalles y sin mayor debate. El proyecto establece, de hecho, un reajuste de cinco por ciento y permite en alguna forma hasta 12 por ciento, a trav�s de una asignaci�n de est�mulo. Al respecto, quiero se�alar que usualmente siempre he votado en contra de asignaciones de est�mulo; pero s� he votado a favor los reajustes. Me habr�a gustado que la iniciativa hubiese propuesto un aumento de las remuneraciones de hasta 12 por ciento. Si se hubiera aplicado este porcentaje, no se entregar�a tal asignaci�n. Porque no existe nada m�s complicado y comprometedor que establecer f�rmulas para determinar qu� trabajador actu� mejor que otro, dado que se dan muchas situaciones de car�cter subjetivo. Se me ha informado que las metas y objetivos que permitir�n la asignaci�n de ese est�mulo regir�n m�s bien en �reas completas. Una Senadora en la Comisi�n dec�a, con raz�n, que por el hecho de que muchas personas no cumplen sus responsabilidades, el resto de los trabajadores cargaba con ellas. Es posible. Son varios los motivos para pensar que, en definitiva, pueden ser otros los caminos para sancionar, eventualmente, a quienes no realizan bien su labor; pero no discriminar respecto de la entrega de est�mulos. �ste es un elemento cuya doctrina deberemos estudiar alg�n d�a, para ponernos finalmente de acuerdo en la situaci�n remuneracional de los empleados p�blicos, que es tan importante. Votaremos a favor el proyecto. Lo haremos pensando que, en realidad, el reajuste debiera superar el diez por ciento promedio de todos los trabajadores. Entendemos que eso ser� factible y esperamos que ello se concrete a trav�s de una f�rmula en que no existan circunstancias que comprometan el ingreso mensual o anual de los afectados. No es admisible que una persona reciba un a�o cierta cantidad por asignaci�n de est�mulo y al siguiente, menos. Porque los compromisos que se van asumiendo en la vida familiar no tienen definiciones distintas a las que fueron establecidas en un contrato de compra de casa o de lo que sea. No es aconsejable, por lo tanto, que un trabajador en el a�o tenga una remuneraci�n de tantas unidades de fomento y al siguiente las vea disminuidas por no obtener la asignaci�n de est�mulo. Esto no me parece bien, pues produce da�o en la paz de la familia y en las relaciones de la misma. Por tales motivos, soy y ser� siempre contrario a las asignaciones de est�mulo. Por las consideraciones planteadas, reitero que votaremos a favor de la iniciativa. El se�or LARRA�N (Presidente).- Antes de ofrecer la palabra al �ltimo inscrito, solicito la autorizaci�n del Senado para que ingrese a la Sala don Marcelo Albornoz, asesor del se�or Ministro del Trabajo. --Se accede. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Viera-Gallo. El se�or VIERA-GALLO.- Se�or Presidente, el art�culo 6� del proyecto, que faculta al Presidente de la Rep�blica para dictar un reglamento, a mi juicio est� de m�s. Porque esa atribuci�n se halla en el N� 8 del art�culo 32 de la Constituci�n Pol�tica. Es decir, tal precepto no se justifica. Pero hay otro problema: se hace una larga enumeraci�n de puntos que el Jefe del Estado tendr�a que reglamentar, pero no estoy seguro de que algunos de ellos no sean materia de la ley. Sobre el particular, por lo menos, quiero dejar constancia de que el Primer Mandatario abdica de sus facultades, porque eso lo puede regular sin necesidad de consultar al Congreso. Adem�s, es probable que respecto de algunas de tales materias el decreto o reglamento que se dicte sea objetado por la Contralor�a, porque es tan amplia la lista de cosas que el Presidente tendr�a que reglamentar, que algunas podr�an caer en el �mbito exclusivo de la ley. Por lo tanto, ser�a l�gico eliminar el art�culo 6�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. Por tratarse de un proyecto con urgencia calificada de "discusi�n inmediata" se votar� en general y particular a la vez. Adem�s, hago presente que el art�culo 7� requiere para su aprobaci�n el voto conforme de 27 se�ores Senadores. Alg�n se�or Senador desea fundar el voto? En votaci�n electr�nica. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba en general y particular el proyecto (37 votos a favor), dej�ndose constancia de que el art�culo 7� cont� con el qu�rum constitucional requerido. Votaron por la afirmativa, los se�ores Aburto, Arancibia, Boeninger, Bombal, Canessa, Cariola, Chadwick, Coloma, Cordero, Espina, Fern�ndez, Foxley, Frei (do�a Carmen), Frei (don Eduardo), Garc�a, Horvath, Larra�n, Matthei, Moreno, Naranjo, Novoa, Ominami, Orpis, P�ez, Parra, Prokurica, R�os, Romero, Ruiz (don Jos�), Ruiz-Esquide, Sabag, Silva, Stange, Vega, Viera-Gallo, Zald�var (don Andr�s) y Zurita. El se�or LARRA�N (Presidente).- En consecuencia, por la unanimidad de los presentes, queda aprobado y despachado el proyecto en este tr�mite. --(Aplausos en tribunas). REPROGRAMACI�N DE DEUDAS A FONDOS DE CR�DITO SOLIDARIO El se�or LARRA�N (Presidente).- Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, relativo al establecimiento de facultades para la Tesorer�a General de la Rep�blica y a la modificaci�n de la ley N� 19.848, sobre reprogramaci�n de deudas a los Fondos de Cr�dito Solidario, con informes de las Comisiones de Educaci�n y de Hacienda y urgencia calificada de "suma". --Los antecedentes sobre el proyecto (3712-04) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 13�, en 16 de noviembre de 2004. Informes de Comisi�n: Educaci�n, sesi�n 18�, en 1 de diciembre de 2004. Hacienda, sesi�n 18�, en 1 de diciembre de 2004. El se�or HOFFMANN (Secretario).- La Sala, en sesi�n de 16 de noviembre del a�o en curso, autoriz� a la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a para discutir la iniciativa en general y en particular a la vez. Sus objetivos principales son mejorar la recuperaci�n de los fondos entregados por concepto de cr�dito solidario universitario y extender los mecanismos de la ley N� 19.848 al conjunto del sistema, haci�ndolos aplicables a todos los deudores de dichos fondos y no tan s�lo a quienes han reprogramado. La Comisi�n de Educaci�n aprob� en general y en particular el proyecto por la unanimidad de sus integrantes, Honorables se�ores Fern�ndez, Moreno, Mu�oz Barra, Ruiz-Esquide y Vega, en los mismos t�rminos en que lo hizo la C�mara de Diputados. Por su parte, la Comisi�n de Hacienda tambi�n aprob� la iniciativa en general y en particular por la unanimidad de sus miembros, Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger, Foxley, Garc�a y Ominami, en los mismos t�rminos en que lo hizo la de Educaci�n. El texto que se propone se transcribe en las p�ginas del informe de la Comisi�n de Hacienda. El se�or LARRA�N (Presidente).- En la discusi�n general y particular del proyecto, tiene la palabra el Presidente de la Comisi�n de Educaci�n, Honorable se�or Moreno. El se�or MORENO.- Se�or Presidente, como bien se inform�, el proyecto en debate consta s�lo de dos art�culos y recoge una inquietud que, en el fondo, ha estado presente en todos los sectores de la vida nacional, como consecuencia de que, dado el incremento en la demanda por educaci�n superior en el curso de los diez �ltimos a�os, pr�cticamente se ha duplicado el n�mero de alumnas y alumnos en el sistema de educaci�n universitaria. O sea, la mayor cobertura �lo que es muy positivo- genera una fuerte demanda. Muchos han recibido cr�dito solidario para financiar sus estudios; pero, por desgracia -quiz�s haci�ndose eco de una costumbre que deber�a erradicarse-, siempre creyeron, probablemente basados en la vieja idea de que la educaci�n en algunas universidades era gratuita, que la obligaci�n contra�da no se pagaba. Y ocurre que en la actualidad la morosidad inhibe que nuevas generaciones accedan al beneficio, sobre todo las de clase media o las de origen muy modesto, pues, aunque tengan cierta capacidad de pago, requieren beca para sus estudios superiores; sin embargo, no hay recursos para ello. Desde ese punto de vista, se propone un mecanismo que, con respeto de lo existente -vale decir, el pago de 5 por ciento de la renta neta para servir el cr�dito solidario-, permita a la Tesorer�a General de la Rep�blica retener la parte morosa de la deuda; o sea, la cuota no cancelada. Ese organismo tiene un sistema establecido respecto de los profesionales de libre elecci�n, o de personas que trabajan sobre la base de la declaraci�n previa y retenci�n de impuestos que se devuelven posteriormente. El a�o pasado dicho Servicio restituy� tributos pagados a un n�mero superior a 20 mil contribuyentes que aparecen en la lista de morosos del cr�dito solidario. No se plantea al deudor la exigencia de completar la totalidad del pago, sino solamente que se le descuente de la eventual devoluci�n de impuestos lo correspondiente a la cuota morosa. A la unanimidad de la Comisi�n esto le pareci� de sentido com�n. Hubo una segunda propuesta que no fue aceptada por la Comisi�n, la que recomend� recogerla en el reglamento. Consist�a en permitir que, mediante el sistema de informaci�n del Servicio de Impuestos Internos en materia de declaraci�n de la renta, se ponga a disposici�n de la Tesorer�a la parte que eventualmente pudiera retener, con el objeto de recalcularla sobre la base del ingreso real de la persona y no de la deuda en mora. Se estim� que no era prudente la incorporaci�n de ese sistema en la ley, pero se propuso que el Ejecutivo lo reglamentara y agregase un mecanismo de transparencia. Por lo expuesto, solicitamos que la Sala apruebe la iniciativa, primero, por ser de justicia; segundo, porque mantiene el sistema en funcionamiento y, por �ltimo, permite recuperar una cantidad importante de dinero que, a lo menos, posibilitar� dar becas a unas mil personas m�s en el 2005. De all� que la calificaci�n de "suma urgencia" nos ha parecido pertinente, para poder implementar el sistema en el curso del a�o acad�mico que comienza el pr�ximo 1 de enero. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Mu�oz Barra. El se�or MU�OZ BARRA.- El Presidente de la Comisi�n fue muy claro, y me resta se�alar simplemente que, si el procedimiento hubiera estado en vigencia, el Estado habr�a recuperado la no despreciable suma de 4 mil millones de pesos, que indudablemente habr�an sido un paliativo muy importante para las presiones por cr�dito de aproximadamente 100 mil j�venes. Quiero destacar lo positivo que resulta en este aspecto que el Servicio de Impuestos Internos est� facultado para dar a conocer a las administradoras de estos fondos los ingresos de los profesionales, como una manera de evitar la entrega de informaci�n que no corresponda a la realidad. Por lo tanto, nosotros tambi�n daremos nuestro voto afirmativo al proyecto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, en la ma�ana de hoy la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a estuvo analizando otros temas relacionados con el financiamiento de los cr�ditos universitarios. En el fondo, lo que se pretende es ir redondeando la idea central de que exista seguridad en cuanto a que los dineros del Estado sean bien aprovechados. Eso dice relaci�n a la ligaz�n con las leyes sobre acreditaci�n, a beneficiar a quienes cumplen realmente con sus obligaciones y que tienen antecedentes acad�micos suficientes como para merecer el cr�dito y, al mismo tiempo, a involucrar a las universidades en proyectos futuros para la recuperaci�n de recursos, de manera tal que no sea simplemente un modo de disponer de m�s dinero, sin preocuparse de si deben o no deben responder de lo que la sociedad chilena, a trav�s del Estado, les entrega. Por eso, los Senadores de estas bancas apoyaremos la iniciativa. El se�or LARRA�N (Presidente).- El �ltimo orador inscrito es el Honorable se�or Fern�ndez. El se�or FERN�NDEZ.- Se�or Presidente, vamos a respaldar el proyecto, por cuanto parece razonable y l�gico que si una persona recibe del Fisco la devoluci�n de parte de sus impuestos, se descuente lo que adeuda. Porque ser�a tremendamente injusto recibir por un lado la devoluci�n de tributos y por otro no pagar lo solicitado como cr�dito. Como muy bien se�al� el se�or Presidente de la Comisi�n, lo que se imputar� a la devoluci�n de impuestos es solamente la cuota morosa, porque las dem�s no son exigibles. Deber�n pagarse dentro de plazos que -no lo olvidemos- son muy largos y a un inter�s razonable. Incluso el pago mensual no puede exceder determinado porcentaje de la renta. Por ello, el proyecto me parece positivo, pues va a significar m�s cr�dito para muchos estudiantes modestos. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. �Alg�n se�or Senador desea fundar el voto? En votaci�n electr�nica. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Se ha pedido dejar constancia de que el Honorable se�or Coloma manifest� encontrarse pareado. �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba en general y particular el proyecto (33 votos a favor y un pareo), y queda despachado en este tr�mite. Votaron por la afirmativa los se�ores Aburto, Arancibia, Boeninger, Bombal, Canessa, Chadwick, Cordero, Espina, Fern�ndez, Frei (do�a Carmen), Frei (don Eduardo), Garc�a, Horvath, Larra�n, Matthei, Moreno, Mu�oz Barra, Naranjo, Novoa, N��ez, Ominami, Orpis, Parra, Prokurica, R�os, Romero, Ruiz (don Jos�), Ruiz-Esquide, Sabag, Silva, Viera-Gallo, Zald�var (don Andr�s) y Zurita. No vot�, por estar pareado, el se�or Coloma. MODIFICACI�N DE C�DIGO DE AGUAS El se�or LARRA�N (Presidente).- Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica el C�digo de Aguas, con segundo informe de la Comisi�n de Obras P�blicas; segundo informe de la Comisi�n de Hacienda; nuevo segundo informe de la Comisi�n de Obras P�blicas; informe de la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, acerca del qu�rum con que debe aprobarse el art�culo 147 bis, contenido en el n�mero 23 del art�culo 1� de la iniciativa, y certificado emitido por la Comisi�n de Obras P�blicas, referido a la proposici�n de la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, sobre el qu�rum de aprobaci�n del referido art�culo 147 bis. --Los antecedentes sobre el proyecto (876-09) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 26�, en26 de agosto de 1997. Informes de Comisi�n: Obras P�blicas, sesi�n 5�, en 17 de octubre de 2000. Constituci�n, sesi�n 5�, en 17 de octubre de 2000. Hacienda, sesi�n 5�, en 17 de octubre de 2000. Obras P�blicas (segundo), sesi�n 17�, en 30 de noviembre de 2004. Hacienda (segundo), sesi�n 17�, en 30 de noviembre de 2004. Obras P�blicas (nuevo segundo), sesi�n 17�, en 30 de noviembre de 2004. Constituci�n, sesi�n 17�, en 30 de noviembre de 2004. Certificado de Obras P�blicas, sesi�n 17�, en 30 de noviembre de 2004. Discusi�n: Sesiones 8� y 9�, en 7y 8 de noviembre (queda pendiente su discusi�n general), y 15�, en 5 de diciembre de 2000 (queda pendiente su votaci�n general); 18�, en 13 de diciembre de 2000 (se aprueba en general). El se�or LARRA�N (Presidente).- Solicito el asentimiento del Senado para que ingresen a la Sala el Subsecretario del Ministerio de Obras P�blicas, don Clemente P�rez; el Director General de Aguas, se�or Humberto Pe�a; el Subdirector General de Aguas, don Rodrigo Weisner, y el ingeniero asesor, se�or Sergio Ar�valo. --Se accede. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- El Ejecutivo hizo presente la urgencia para el despacho de la iniciativa, calific�ndola de "suma". El proyecto fue aprobado en general en sesi�n de 13 de diciembre del a�o 2000. Cuenta con un segundo informe y un nuevo segundo informe de la Comisi�n de Obras P�blicas, y con un segundo informe de la de Hacienda. Ambas Comisiones dejan constancia, para los efectos reglamentarios, de que no fue objeto de indicaciones ni de modificaciones el art�culo 2� del proyecto, el que conserva el mismo texto que la Sala aprob� en general. Por lo tanto, dicha disposici�n debe darse por aprobada, en conformidad a lo dispuesto en el inciso primero del art�culo 124 del Reglamento de la Corporaci�n, salvo que alg�n se�or Senador, contando con la unanimidad de los Senadores presentes, solicite someterla a discusi�n y votaci�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Si le parece a la Sala, se dar� por aprobado el art�culo 2� del proyecto. --Se aprueba por unanimidad. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Las dem�s constancias reglamentarias se describen en los respectivos informes. Cabe destacar que la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento formul� una proposici�n respecto del qu�rum con que debe aprobarse el art�culo 147 bis, contenido en el n�mero 23 del art�culo 1� de la iniciativa, se�alando que dicha disposici�n debe ser votada como norma de ley com�n, pero que el art�culo 147 ter, que corresponde a un desglose del anterior art�culo 147 bis, tiene el car�cter de norma org�nica constitucional. La Comisi�n de Obras P�blicas dio su aprobaci�n a esa propuesta por la unanimidad de sus miembros presentes, Senadores se�ores Cordero, Horvath, Sabag y Stange. Las modificaciones efectuadas por las Comisiones informantes fueron acordadas por unanimidad, con excepci�n de cinco de ellas, las cuales ser�n puestas en discusi�n en su momento por el se�or Presidente. Las enmiendas acordadas por unanimidad deben ser votadas sin debate, seg�n dispone el inciso sexto del art�culo 133 del Reglamento, salvo que alg�n se�or Senador, antes del inicio de la discusi�n en particular, solicite debatir la proposici�n de la Comisi�n respecto de alguna de ellas o que hubiere indicaciones renovadas, lo que no ha ocurrido. Los numerales 16 (en cuanto a los art�culos 129 bis 10 al 129 bis 18, ambos inclusive), 18, 23 (con relaci�n al art�culo 147 ter), 29, 35 y 39, del art�culo 1� del proyecto, que fueron acordados por unanimidad, revisten el car�cter de normas de qu�rum de ley org�nica constitucional, por lo que requieren para su aprobaci�n 27 votos favorables. Finalmente, Sus Se�or�as tienen a la vista un bolet�n comparado que transcribe las diversas etapas que esta iniciativa ha cumplido durante su larga tramitaci�n, tanto en la Sala como en las Comisiones informantes, figurando en la �ltima columna el texto final que se propone al Senado. El se�or LARRA�N (Presidente).- En la discusi�n particular del proyecto, corresponde en primer t�rmino que todas las enmiendas acogidas por unanimidad sean aprobadas sin debate, salvo que alg�n se�or Senador solicite someter a discusi�n un art�culo espec�fico o que existan indicaciones renovadas. Hasta ahora, ning�n se�or Senador ha pedido abrir debate sobre ellas y no hay indicaciones renovadas. Entonces, si le parece a la Sala, se votar�n todos los preceptos se�alados por el se�or Secretario que fueron aprobados por unanimidad, especialmente los que son materia de ley org�nica constitucional y que, por lo tanto, requieren qu�rum especial. Para dejar constancia de ello, se proceder� a tomar votaci�n electr�nica. La se�ora MATTHEI.- �Cu�les son esos art�culos, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- El se�or Secretario leer� los art�culos que requieren qu�rum. La se�ora MATTHEI.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra, Su Se�or�a. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, �ste es un proyecto muy largo y complicado. Me gustar�a que todos los se�ores Senadores tuvi�ramos a la vista un documento donde aparezcan los preceptos que vamos a votar y la p�gina tanto del bolet�n comparado como del informe donde ellos figuran. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Yo los leer�, Su Se�or�a. El se�or LARRA�N (Presidente).- Antes de proceder a la votaci�n, se informar� qu� art�culos debemos votar. As� ser� m�s f�cil entender que los restantes se dar�n por aprobados por unanimidad y que respecto de otros preceptos se registrar� la votaci�n, dado que requieren qu�rum especial. A continuaci�n, el se�or Secretario dar� cuenta de los preceptos que corresponde analizar en forma separada, para que cada uno de los se�ores Senadores tenga claro que el resto se dar� por aprobado. Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En primer lugar, la proposici�n que hace la Comisi�n de Hacienda en su segundo informe respecto del art�culo 129 bis 9 fue aprobada por tres votos contra uno. Votaron a favor los Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger y Garc�a; en contra se pronunci� el Honorable se�or Sabag. La segunda modificaci�n recae en el n�mero 6 del art�culo 140 nuevo, propuesto por la Comisi�n de Hacienda en su segundo informe, y se�ala: "6. Una memoria explicativa en la que se justifique la cantidad de agua que se necesita extraer, seg�n el uso que se le dar�.". La Comisi�n de Obras P�blicas, en su nuevo segundo informe, propone reemplazar, en el art�culo 140, nuevo, ese n�mero 6 por otro que indica. La norma fue aprobada por cuatro votos a favor (Honorables se�ores Cordero, Eduardo Frei, Horvath y Sabag) y uno en contra (Senador se�or Stange). En seguida, en el N� 18, la letra a) del art�culo 147 bis, propuesta en el nuevo segundo informe de la Comisi�n de Obras P�blicas, fue aprobada con modificaciones por tres votos a favor (Senadores se�ores Eduardo Frei, Horvath y Sabag) y dos en contra (Honorables se�ores Cordero y Stange). Por otra parte, la letra b) del mismo numeral fue aprobada por cuatro votos a favor (Honorables se�ores Cordero, Eduardo Frei, Horvath y Sabag) y una abstenci�n (Senador se�or Stange). La se�ora MATTHEI.- �Hay disposiciones transitorias aprobadas por mayor�a? El se�or LARRA�N (Presidente).- El se�or Secretario lo informar�. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Lo revisar�, se�ora Senadora. Luego, se halla la indicaci�n N� 368, que modifica el art�culo 314. �sta fue aprobada por 4 votos contra 1. Votaron favorablemente los Honorables se�ores Boeninger, Cordero, Frei (don Eduardo) y Stange, y se opuso el Senador se�or Horvath. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, podr�amos ver despu�s los art�culos transitorios. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Estoy revisando, se�ora Senadora, y, hasta el momento, todas las disposiciones transitorias figuran aprobadas por unanimidad. El se�or ROMERO.- Se�or Presidente, quiero hacer una consulta. El se�or LARRA�N (Presidente).- Primero concluyamos el an�lisis de las normas transitorias, para determinar si algunas de ellas deben ser debatidas. Aparentemente, no las hay y ning�n se�or Senador ha pedido votar una o varias en forma separada. Tiene la palabra la Senadora se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, solicito que primero discutamos los art�culos permanentes y, despu�s, analicemos las disposiciones transitorias, porque lo que resolvamos acerca de aqu�llos incidir� en las �ltimas. El se�or LARRA�N (Presidente).- Se ha propuesto votar separadamente las normas transitorias. La se�ora MATTHEI.- Pero despu�s de las permanentes. El se�or LARRA�N (Presidente).- Por supuesto. En el orden que corresponde. As� se proceder�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Romero. El se�or ROMERO.- Se�or Presidente, quiero solicitar votaci�n separada respecto del art�culo 147 bis, en lo relativo a la memoria explicativa se�alada en el art�culo 140. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Su Se�or�a se refiere al art�culo que la Comisi�n de Constituci�n estim� que deb�a aprobarse como norma de ley com�n y no con un qu�rum especial? El se�or ROMERO.- No. Es el que trata acerca de la memoria explicativa y de ciertas facultades discrecionales. No quiero adelantar el debate sobre el tema, se�or Presidente. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Es la misma disposici�n, se�or Senador. Corresponde al N� 23 del art�culo 1� del proyecto. La se�ora MATTHEI.- Es el N� 19, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Efectivamente. Lo que pasa es que, en el n�mero 6 del art�culo 140 (N� 19), se menciona por primera vez la referencia a la memoria explicativa que deber� acompa�ar el solicitante. Y, posteriormente, el art�culo 147 bis (N� 23) trata la misma materia y hace una remisi�n a aquella disposici�n. Entiendo que el Senador se�or Romero est� pidiendo que, cuando se vea el art�culo 140, tambi�n se analice el 147 bis. Si le parece a la Sala, as� procederemos. Queda claro, entonces, cu�les son las disposiciones que se van a discutir: las aprobadas por mayor�a, que fueron mencionadas por el se�or Secretario; las que han sido solicitadas para ser votadas separadamente, que son el art�culo 147 bis y el 140, y los art�culos transitorios. Hecha la aclaraci�n, corresponde votar, sin debate, las dem�s modificaciones, que fueron acordadas por unanimidad en la Comisi�n. Lo haremos mediante votaci�n electr�nica, pues algunas disposiciones, como lo se�al� el se�or Secretario, para ser aprobadas requieren qu�rum de ley org�nica constitucional, o sea, del voto conforme de 27 se�ores Senadores. En votaci�n electr�nica. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueban (36 votos a favor), dej�ndose constancia de que se reuni� el qu�rum constitucional requerido. Votaron los se�ores Aburto, Arancibia, �vila, Boeninger, Bombal, Canessa, Cariola, Chadwick, Coloma, Cordero, Espina, Fern�ndez, Frei (do�a Carmen), Frei (don Eduardo), Garc�a, Horvath, Larra�n, Mart�nez, Matthei, Moreno, Novoa, N��ez, Ominami, Orpis, P�ez, Parra, Prokurica, R�os, Romero, Ruiz (don Jos�), Ruiz-Esquide, Sabag, Vega, Viera-Gallo, Zald�var (don Andr�s) y Zurita. El se�or LARRA�N (Presidente).- A continuaci�n, analizaremos los art�culos que no fueron acordados de forma un�nime y aquellos respecto de los cuales se solicit� votaci�n separada. Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Corresponde tratar el art�culo 129 bis 9, que fue aprobado en la Comisi�n de Hacienda por 3 votos contra 1. Votaron favorablemente los Senadores se�ora Matthei y se�ores Boeninger y Garc�a. Lo hizo en contra el Honorable se�or Sabag. La modificaci�n que se debe discutir es la propuesta por el referido �rgano t�cnico en su segundo informe. Aqu�lla se inicia de la siguiente forma: "En su inciso tercero, eliminar la frase "o bien que por decisi�n de la autoridad hayan sido declarados agotados.", etc�tera, y se extiende hasta la constancia de la votaci�n a que ya hice alusi�n. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, retiro mi voto en contra. El se�or LARRA�N (Presidente).- En ese caso, ahora habr�a unanimidad para aprobar el art�culo. Si le parece a la Sala, lo dar�amos por aprobado. El se�or �VILA.- Yo no doy la unanimidad, se�or Presidente. --Se aprueba el art�culo 129 bis 9, con el voto en contra del Honorable se�or �vila. La se�ora MATTHEI.- �Me permite, se�or Presidente? Quiz�s es bueno que la Sala sepa qu� se vot�. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, en este proyecto de ley se aprob� -y por unanimidad- el pago de una patente por el no uso de las aguas. �Qu� sucede? Por lo general, aqu�llas se otorgan en forma gratuita. Hay gente que pide much�sima m�s de la que necesita, pero no la usa ni permite que otros lo hagan, con lo cual el recurso va a dar al mar. Eso es lo que se quiere evitar. Y por ello se determina el pago de una patente para las personas que tienen aguas y no las usan. Sin embargo, se hacen excepciones sobre el particular. Por ejemplo, una central hidroel�ctrica que pide aguas no consuntivas -es decir, las que no se consumen y posteriormente son restituidas al lugar de origen- no puede desarrollarse, ni llevar a cabo sus planes, ni contratar ingenieros, ni hacer nada si no cuenta en forma previa con derechos respecto de ellas. Pero, al mismo tiempo, es posible que la ejecuci�n de todos esos planes y la construcci�n de la correspondiente planta demoren bastantes a�os. Entonces, lo que se hace en el fondo es otorgar tiempo a la central para la construcci�n y permitirle, cuando la haya concluido, recuperar el dinero pagado en patentes por no haber utilizado las aguas. En el caso de los agricultores, se presume de derecho que usan las aguas si tienen las correspondientes obras de captaci�n. �Por qu�? Porque es posible que, por ejemplo, en alg�n minuto baje muy fuertemente el precio de un cultivo o que otro se hiele y que por ello no las usen. Pero si han invertido y cuentan con las referidas obras, se entiende que est�n utiliz�ndolas. Se�or Presidente, hubo votaci�n dividida en lo que respecta a las empresas sanitarias. �stas tienen la concesi�n de cierta �rea geogr�fica y se hallan obligadas por ley a dar agua dentro de aqu�lla a quien lo solicite. Para cumplir esa obligaci�n legal, generalmente compran con anticipaci�n derechos de aprovechamiento, previendo cu�les ser�n el crecimiento de la ciudad y el incremento del consumo. Entonces, de la misma forma como se except�a durante un per�odo a las empresas hidroel�ctricas cuando adquieren en forma anticipada derechos de esa �ndole para construir una central, se excepciona por cierto tiempo a las empresas sanitarias que hayan hecho lo propio, pero en la idea de que los derechos pertinentes no son para especular, sino que se encuentran en concordancia con el aumento del consumo que se prev� en la regi�n respectiva. Sobre eso nos pronunciamos, se�or Presidente. Hubo un voto en contra justamente por lo relativo a las empresas sanitarias, pero fue retirado. En definitiva, creo que el art�culo despachado es razonable. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Gracias por su explicaci�n, se�ora Senadora. Con la venia de la Sala, tiene la palabra el se�or Subsecretario de Obras P�blicas, quien solicit� intervenir. El se�or P�REZ (Subsecretario de Obras P�blicas).- Se�or Presidente, s�lo quiero complementar lo manifestado por la Senadora se�ora Matthei. La norma de que se trata, originada en una indicaci�n del Honorable se�or Garc�a, permite exceptuar del pago de la patente por no uso a las empresas sanitarias, pero s�lo respecto de los derechos que, con certificaci�n de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, sean necesarios para el pr�ximo plan de desarrollo. Esto es, evidentemente, para que aqu�llas no sobreinviertan, pues eso puede llevar a un alza de las tarifas. El precepto tiene esa restricci�n. Es decir, otorga un beneficio s�lo en cuanto a los derechos de aguas certificados como necesarios para los pr�ximos cinco a�os. El se�or LARRA�N (Presidente).- Debo advertir a la Sala que la disposici�n ya est� aprobada. Tiene la palabra el Honorable se�or Garc�a. El se�or GARC�A.- Se�or Presidente, s�lo deseo decir, para evitar interpretaciones equivocadas, que la indicaci�n fue planteada en tales t�rminos. O sea, se exceptuaba a las empresas sanitarias en lo concerniente a las aguas que formaban parte de su programa de desarrollo, con debida aprobaci�n de la mencionada Superintendencia. El se�or LARRA�N (Presidente).- La norma ya fue aprobada, con el voto en contra del Senador se�or �vila. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, �me permite sustentar mi posici�n en una sola frase? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or �VILA.- Mi desacuerdo con la disposici�n deriva de la gratuidad de los derechos de aguas, cualesquiera sean las circunstancias, cualquiera sea el uso, cualquiera sea el destino. La se�ora MATTHEI.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Se�ora Senadora, la Mesa no quiere abrir debate sobre la materia, para que podamos avanzar. El Honorable se�or �vila simplemente deseaba dejar constancia de su punto de vista. La se�ora MATTHEI.- Bien, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En seguida, corresponde ocuparse en la proposici�n de la Comisi�n de Obras P�blicas consistente en sustituir, en el art�culo 140 nuevo, el n�mero 6 por el que indica. El n�mero de reemplazo fue aprobado por 4 votos a favor (Honorables se�ores Cordero, Eduardo Frei, Horvath y Sabag) y 1 en contra (Senador se�or Stange). La se�ora MATTHEI.- Pido la palabra. El se�or LARRA�N (Presidente).- Sugiero a la Sala discutir este precepto en relaci�n con el art�culo 147 bis -al que se hizo referencia para pedir votaci�n separada-, pues ambos tratan la misma materia. --As� se acuerda. El se�or LARRA�N (Presidente).- En discusi�n. Tiene la palabra a la Honorable se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, solicito que se me conceda m�s tiempo que el que me corresponde. Cuatro minutos no son suficientes, porque el tema es muy complicado e involucra todo. El se�or LARRA�N (Presidente).- Si le parece a la Sala, se acceder� a la solicitud de Su Se�or�a. Acordado. La se�ora MATTHEI.- Muchas gracias. Se�or Presidente, me alegra lo que escuch� reci�n al Senador se�or �vila, porque es lo que a nosotros nos ha guiado siempre: las aguas no tienen por qu� ser gratuitas. Se trata de un recurso productivo muy valioso; y mientras m�s al norte va uno, m�s valioso es. Por lo tanto, estamos absolutamente en contra de que se entreguen gratuitamente. Nosotros defendemos la idea de que, cada vez que alguien pida un derecho de aguas, ello se publicite, para que todo el mundo se entere. Y si otra persona formula igual solicitud dentro de determinado plazo -al respecto, fijamos un t�rmino largo; creo que es de un a�o-, se va de inmediato a remate. Es decir, el Fisco percibir� el producto de �ste y la persona que presente el mejor proyecto y haga la mejor oferta se adjudicar� el derecho de aprovechamiento. No puede ser de otra manera, se�or Presidente, porque de todo lo gratuito se abusa. Y por eso pedimos que siempre -�siempre!- haya mecanismos que lleven finalmente al remate de los derechos de aprovechamiento, en vez de que un funcionario del Estado conceda las aguas gratuitamente. Creemos que el otorgar en forma gratuita un recurso tan valioso como el se�alado tiene varias implicaciones: primero, es injusto; segundo, la gente generalmente pide m�s de lo que necesita, y tercero, ello se puede prestar para todo tipo de transacciones oscuras, a las cuales tambi�n nos oponemos. Se�or Presidente, el problema que se nos present� al principio fue: �los derechos de aguas se conceder�n para cierto uso o se conceder�n no m�s? Pondr� un ejemplo. Una persona pide derecho de aguas para agricultura. Sin embargo, al lado de su propiedad se puede descubrir una mina de oro. Si le dan uso s�lo para labores agr�colas, quedar� impedida de vender el derecho al due�o de ese yacimiento. Y, al final, perder� el pa�s, porque aqu�lla continuar� regando sus lechugas y la mina de oro no podr� desarrollarse por falta del vital elemento. Por eso, un�nimemente, concluimos que el derecho de aprovechamiento debe ser lo m�s flexible posible. Es decir, en determinado momento el agua podr� ser utilizada en la agricultura; con posterioridad podr� venderse el derecho a una empresa sanitaria para que utilice aquel recurso en consumo humano, o bien al due�o de una mina, en fin. Empero, lo importante es que al principio se haya pagado para obtener el derecho. Eso es lo que hemos pedido siempre: que todo sea objeto de remate y que, concluido �ste, el recurso pueda ser destinado al uso m�s rentable y m�s valioso socialmente. Se�or Presidente, �cu�l es la pol�mica con respecto a las dos normas en debate? La Direcci�n General de Aguas ha insistido en que quiere una memoria explicativa -esto es, que al solicitarse agua se diga para qu� se va a usar- y en tener facultad para, ante un pedido de cien litros por segundo, por ejemplo, responder: "No. Usted no necesita m�s de treinta; le doy eso, no m�s"; o "Usted necesita setenta, as� que le doy s�lo esa cantidad", o bien, "Le doy los cien que solicit�". A nuestro juicio, una facultad de tal naturaleza da lugar a cualquier tipo de irregularidades y, adem�s, no ser� necesaria en la medida en que finalmente todo vaya a remate. Nosotros queremos que todo vaya a remate; que el agua nunca sea gratuita, y que no se regalen ni diez, ni veinte, ni treinta, ni cuarenta litros. Propiciamos que se deba pagar por todo, pues de ese modo las personas piden s�lo lo que necesitan. Tal es, b�sicamente, la diferencia que hemos tenido con la Direcci�n General de Aguas. �ste es el �nico art�culo en que no hemos podido ponernos de acuerdo. A nosotros no nos parece adecuado que dicho organismo mantenga la facultad referida, como tampoco que se exija una memoria explicativa. Creemos que da lo mismo para qu� se usa el agua, siempre que se pague por ella en un remate abierto a todos los oferentes, porque de esa manera se va a pagar lo que realmente vale y se asegurar� su utilizaci�n en el proyecto m�s rentable posible. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- �Me permite una interrupci�n, se�ora Senadora? La se�ora MATTHEI.- Con la venia de la Mesa, encantada. El se�or LARRA�N (Presidente).- Exc�seme, se�or Senador, pero la Honorable se�ora Matthei estaba inscrita para intervenir y, a los efectos de desarrollar sus ideas, pidi� m�s tiempo que el que le correspond�a. A quienes quieran hacer uso de la palabra les pido� El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- S�lo quiero precisar... El se�or LARRA�N (Presidente).- Hay varios inscritos. Por tanto, ruego a Sus Se�or�as mantener el orden. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).-...los dichos de la se�ora Senadora respecto de un punto que considero muy importante. Y �se es precisamente el objeto de las interrupciones. El se�or LARRA�N (Presidente).- Pero nuestro tiempo es limitado, se�or Senador. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- Mi interrupci�n ser� muy breve. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- Se�or Presidente, la explicaci�n de la Honorable se�ora Matthei es muy �til. Y creo que con la complementariedad de mi planeamiento se aclarar� a�n m�s el punto. A mi juicio, todo lo dicho por la se�ora Senadora es razonable y est� de acuerdo con el articulado. Pero, sobre la base del art�culo 147 ter, entiendo que la reducci�n que pueda hacer el Director General de Aguas ante una solicitud de derecho de aprovechamiento ser� susceptible de reclamaci�n ante la Corte de Apelaciones de Santiago. Me gustar�a que la se�ora Senadora me precisara si lo entiende en el mismo sentido. O sea, el Director General de Aguas tiene facultad para reducir lo solicitado, pero de su resoluci�n puede reclamarse ante la referida Corte. El se�or LARRA�N (Presidente).- Le dar� dos minutos adicionales a la Senadora se�ora Matthei. Pero en lo sucesivo seguiremos el orden de inscripci�n. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, es efectivo lo se�alado por el Senador se�or Zald�var. Sin embargo, �qu� sucede? El agua que se adquiera -y nosotros queremos que se haga por remate- despu�s podr� utilizarse en lo que se desee. Porque a cada cual le es factible presentar el proyecto que se le ocurra. Alguien puede plantear a la Direcci�n General de Aguas, por ejemplo: "Har� una plantaci�n de mandarinas; voy a dar trabajo a cien mil personas. Esto va a significar un valor agregado salvaje". Aqu�lla responder�: "Perfecto. El proyecto es rentable. Le doy el agua que pidi�". Pero al d�a siguiente esa persona podr� hacer lo que quiera con el agua: no plantar ni una hect�rea, vender su derecho a una mina de oro, etc�tera. �Para qu� pedir, pues, una memoria explicativa si luego no tendr� ning�n efecto porque el agua se podr� utilizar en cualquier cosa? Entonces, lo que hemos se�alado es que, al final, la gente que conozca la ley va a inventar los proyectos m�s incre�bles; pedir� a la Direcci�n General derechos de aprovechamiento; le van a dar agua gratuitamente, y despu�s aqu�llos no se realizar�n. Lo mismo ocurri�, por ejemplo, con las frecuencias radiales de FM: se presentaba un proyecto; se conced�a la frecuencia en forma gratuita, y al d�a siguiente se vend�a en un mill�n de d�lares. Eso pas�. Porque cuando las cosas se dan as� "est� armado el negocio". Por eso nosotros, en vez de otorgar la facultad en comento a la Direcci�n General, queremos que el agua nunca -�nunca!- se entregue en forma gratuita y siempre vaya a remate. De otra manera, ello se presta para inventar proyectos, para hacerse rico a costa del Fisco y, adem�s, para coimas . El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Boeninger. El se�or BOENINGER.- Se�or Presidente, en cuanto a la historia del desarrollo de este proyecto, es fiel el recuerdo que hizo la Honorable se�ora Matthei. Esta iniciativa se discuti� durante muchos a�os, fue muy pol�mica y controvertida, y al final, con el avance del tiempo, se lleg� a consensuar pr�cticamente todas sus disposiciones, excepto la materia en debate y una que otra cosa m�s. Todos estamos de acuerdo en que el agua no debe ser entregada en forma gratuita, porque habitualmente es un bien escaso, m�s en unas partes que en otras. Y por eso la regla general a futuro va a ser el remate. En eso tambi�n tiene toda la raz�n la se�ora Senadora. Ahora, �por qu� la patente por no uso? Porque, como en el pasado las aguas se otorgaron en forma gratuita, durante muchos a�os una enorme cantidad de propietarios de derechos de aprovechamiento adquiridos de esa manera no han utilizado el vital elemento. Entonces, se trata de un castigo, en el sentido de que esas personas paguen la patente por no uso o se desprendan de los derechos pertinentes. Por otro lado, creo que la memoria explicativa es un punto debatible. Tiene raz�n la Honorable se�ora Matthei en cuanto a que resulta factible adquirir un derecho de aprovechamiento y luego venderlo en el mercado de aguas. En consecuencia, uno se pregunta para qu� exigir una memoria de esa �ndole si se puede hacer con el agua algo distinto de lo indicado al principio. Empero -y por eso la relaci�n con el art�culo 147 bis-, despu�s de muchas conversaciones, yo opt� por una indicaci�n, modificatoria de la del Ejecutivo, que consagra la existencia de una memoria explicativa, para desalentar la simple presentaci�n de peticiones de derechos de aprovechamiento sin ninguna intenci�n de usar las aguas en algo determinado. Porque es cierto que alguien, por tener m�s recursos, puede presentar memorias explicativas muy bonitas e impresionantes; pero tambi�n lo es, y sobre todo si la regla general va a ser el remate, que esos casos no son frecuentes. En consecuencia, sin que signifique una facultad burocr�tica de rechazo, pienso que la memoria explicativa resulta �til. Ella implica, simplemente, que exista un antecedente sobre la intenci�n original de uso tenida por quien adquiere el derecho de aprovechamiento. Ahora bien, en el art�culo 147 bis se da una utilizaci�n a la memoria explicativa. Porque hasta este instante ella s�lo constituye un antecedente m�s, que termina en el escritorio del Director de Aguas. As�, en esa norma, producto de la enmienda efectuada a la indicaci�n del Ejecutivo luego del debate habido en el seno de la Comisi�n, se dice que "El Director General de Aguas podr�, mediante resoluci�n fundada," -recalco: fundada- "limitar" (no "rechazar") "el caudal de una solicitud de derechos de aprovechamiento, si manifiestamente no hubiera equivalencia entre la cantidad de agua que se necesita extraer, atendidos los fines invocados," -se reemplaza la expresi�n original, pues, como no hay un problema de aceptaci�n o de rechazo, lo que se hace es invocar un fin- "y los caudales", etc�tera. Por lo tanto, para el evento de una diferencia manifiesta, se faculta al Director de Aguas a los efectos de que, tomando en cuenta siempre una tabla de equivalencias entre caudales y uso, que refleja las pr�cticas habituales, limite la cantidad de agua otorgada mediante un derecho de aprovechamiento. Y eso tiene su correlato posterior en el art�culo, de qu�rum especial, que posibilita un recurso de reclamaci�n. En esas condiciones, y entendiendo que el tema es debatible, en mi opini�n, no deja de ser �til la memoria explicativa. No va a ser la regla general -lo ser� el remate-, pero pone a cubierto del uso de derechos de agua con fines de acumulaci�n. Dadas las imperfecciones de todo mercado, puede no ser balad� la acumulaci�n innecesaria con prop�sitos especulativos. En consecuencia, voy a votar a favor de ambos art�culos. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Romero. El se�or ROMERO.- Se�or Presidente, la facultad del art�culo 147 bis se aparta enteramente de lo que consider�bamos un gran acuerdo entre las Comisiones y el Gobierno en cuanto a objetivizar y evitar la discrecionalidad. En virtud de ella, ahora, por decreto y entre cuatro paredes, se va a determinar qu� es lo �ptimo que puede pedir cada persona para satisfacer sus necesidades. Entonces, por una parte, se pierde absolutamente la fe en el sistema de la patente por el no uso. Si se acredita que no se justifica la solicitud de agua, se va a cobrar patente por no uso. Entonces, aqu� se constata una contradicci�n entre el sistema de patente por no uso y la discrecionalidad, que se presenta bajo la t�pica decisi�n burocr�tica, en cuanto a que no habr�a equivalencia entre la cantidad de agua requerida, atendidos los fines invocados por el peticionario, y las pr�cticas habituales en materia de aprovechamiento de agua. Pregunto si con las nuevas t�cnicas de regad�o existentes es posible o no que nos encontremos con tremendas diferencias, incluso de un a�o para otro, respecto de esas pr�cticas. Y se confirma la posici�n de la Senadora se�ora Matthei y, en cierto modo, la del propio Honorable se�or Boeninger, quien nos hablaba de tratar de mejorar una disposici�n, en vista de que manifiestamente debe haber una falta de equivalencia entre la cantidad de agua que se necesita extraer, atendidos los fines invocados, y las pr�cticas habituales. En mi opini�n, esta norma ser� burlada y se har� imposible la fiscalizaci�n, ya que todo el mundo va a pedir derechos de agua para proyectos que m�s la requieran y, luego, la utilizar�n para otros fines que menos la necesiten. Ello terminar� perjudicando directamente a los agricultores, que son los que precisan mayor cantidad de derechos de agua consuntivos. Se�or Presidente, la experiencia nos indica que estas facultades administrativas son enteramente negativas, porque sirven para cualquier cosa. Por ejemplo, para dilatar la definici�n de los proyectos de regad�o. Hoy, si se hace una encuesta respecto de lo que ha ocurrido con los proyectos de riego, nos vamos a encontrar con sorpresas notables. Hay concursos de riego que no se resuelven, por la no determinaci�n de aspectos t�cnicos, entre comillas, impidiendo que haya certeza acerca de cu�ndo se definir�n. No quiero entrar en detalles, pero creo que esta realidad se presenta a lo largo y ancho de todo el pa�s. Pienso que estamos frente a una tremenda inconsecuencia y a una disposici�n que va a ser un verdadero caj�n de sastre, desde donde emerger�n situaciones que no se compadecen con la objetividad que requiere este tipo de materias. En ese aspecto, prefiero los remates de agua, o cualquier sistema similar, pero no dejar entregada esta facultad a la discrecionalidad y arbitrio administrativos, cuya aplicaci�n siempre conlleva aspectos muy negativos. Considero que esta atribuci�n, del todo discrecional, no se compadece con el acuerdo que, seg�n se me se�al�, se hab�a alcanzado. Ello coloca el proyecto en una posici�n completamente distinta de la que hab�amos pensado que se iba a plantear. En ese sentido, quiero pedir la opini�n del se�or Subsecretario para saber si �sa es la pol�tica del Ministerio. El se�or LARRA�N (Presidente).- El se�or Subsecretario ha solicitado la palabra. Luego, se la ofreceremos. Tiene la palabra el Honorable se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, una de las modificaciones fundamentales que se introducen en el C�digo de Aguas es precisamente mediante este art�culo. �C�mo se solicitan los derechos de agua seg�n la ley vigente? Basta llenar una solicitud, sin explicar nada. De ese modo, se ha llegado a la apropiaci�n de todas las aguas del pa�s. Estamos proponiendo esta enmienda para impedir eso. Y las personas que han adquirido los derechos de agua son las que la han vendido en millones de d�lares, sin que el Estado reciba un peso. Es m�s. Muchos tienen acaparados los derechos de agua sin usarlos. Como constituye un derecho de propiedad, a prop�sito del estudio de esta iniciativa hemos estado viendo la posibilidad de que paguen patente por el no uso. La modificaci�n esencial consiste en impedir que contin�e ocurriendo mismo. Es decir, el que necesita un derecho de agua ha de especificar para qu� lo quiere. Si tiene cuatro hect�reas y pretende regarlas, debe pedir agua para esa superficie, por lo menos la primera vez. Despu�s, evidentemente puede venderla. No obstante, la autoridad podr� decir: "Yo se la di porque me dijo que iba a regar cuatro hect�reas". Posteriormente, la persona podr� vender el derecho o hacer lo que desee. Ahora bien, si hay m�s de un solicitante para una misma agua, entonces se va a remate. Pero no los hay, �por qu� se va a ir a remate? En ese caso, la Direcci�n General de Aguas concede el derecho lisa y llanamente. Pero si existe m�s de un interesado, siempre se va a remate. La idea es que la primera vez se diga para qu� se pide el derecho. Ello no significa que el agua tendr� que destinarse al riego de las cuatro hect�reas. La puede vender, o usarla en una industria, o para cualquier otra cosa. No queda limitado. Hoy d�a se han apropiado de todas las aguas del pa�s sin ninguna explicaci�n, sin tener un proyecto y ni siquiera tierra en las u�as. Eso lo deseamos modificar. Si se solicitan 10 litros por segundo, debe se�alarse, en una primera instancia, en qu� se emplear�n. �se ha sido el �nico problema de esta reforma del C�digo de Aguas y me interesa aclararlo. Con la venia de la Mesa, le concedo una interrupci�n a la Senadora se�ora Matthei. El se�or LARRA�N (Presidente).- Puede hacer uso de ella Su Se�or�a. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, todos concordamos en que es una aberraci�n obtener derechos de agua en forma gratuita. El remedio para eso es el remate. Porque en la memoria explicativa uno puede poner lo que se le d� la gana. Se puede inventar cualquier proyecto y despu�s no llevarlo a cabo o vender las aguas al d�a siguiente. Por eso, la Direcci�n General de Aguas, ante una solicitud de 100 litros, no debiera tener posibilidad de decir: "Doy 50, porque, seg�n la memoria explicativa, necesita 50". En mi opini�n, no debiera entregarse gratuitamente ni un litro. Nada. �Qu� es lo que sucede, se�or Presidente? Que no es f�cil determinar cu�ndo hay m�s de un demandante de agua. El principal problema consiste en precisar si el agua que est� 100 metros m�s arriba es la misma que la ubicada 100 metros m�s abajo. Entonces, la Direcci�n General de Aguas siempre acudir� al resquicio de decir: "Hay un solo interesado por esas aguas, porque el otro est� pidiendo el derecho para las de 100 � 200 metros m�s arriba. Por lo tanto, �sta es una demanda por unas aguas distintas de las otras". En consecuencia, no se va a remate y la autoridad administrativa determina cu�nta agua se da, y esto es lo que queremos evitar. En la medida en que se establezca esa facultad, siempre habr� tentaci�n de usarla. Si ella no existe, siempre se ir� a remate. Por eso, somos partidarios de que invariablemente haya remate. A nadie se le puede dar agua gratuitamente, salvo a los campesinos, excepci�n que se halla debidamente contemplada en la ley en estudio. Los peque�os campesinos son los �nicos -�los �nicos!- que debieran recibirla sin costo. Los dem�s deben ir a remate. En el fondo, aqu� no estamos ante la posibilidad de dar a nadie agua en forma gratuita. Las opciones son: o se otorgan facultades discrecionales a la Direcci�n General de Aguas, caso en el cual podr�a decir: "Usted me pidi� 100, pero s�lo le doy 20" -con todo lo que eso significa-; o no entregarla gratuitamente a nadie, salvo la excepci�n referida, y rematar todos los derechos de agua. Preferimos la �ltima soluci�n. Gracias, se�or Senador. El se�or LARRA�N (Presidente).- Recupera la palabra el Honorable se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, puede darse el caso de que en un sector haya un solo interesado en adquirir los derechos de agua. En ese evento, la solicitud respectiva se debe publicar, y si nadie m�s presenta una petici�n sobre las mismas aguas, entonces la autoridad administrativa las concede en forma gratuita al �nico demandante. Pero si hay otro, esos derechos se rematan. As� est� contemplado en la normativa: siempre se subastar�n los derechos de agua cuando exista m�s de un peticionario. En caso contrario, el Director de Aguas los conceder� al �nico interesado de acuerdo con la memoria explicativa, que especificar� que el agua se utilizar�, por ejemplo, para regar 50 hect�reas, y se dar� el caudal que corresponda; o para el funcionamiento de una planta hidroel�ctrica de 10 kilowatts, y se dar� para este fin. En definitiva, se debe explicar para qu� se desea. Sin embargo, los derechos sobre esas aguas no quedan sujetos a dicha memoria explicativa. Con posterioridad, se pueden vender libremente. Pero, por lo menos, la primera vez el interesado debe indicar en qu� se utilizar�n las aguas, y la autoridad, especificar las razones para otorgar el derecho. Gracias, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, quiero entender que la nueva normativa que votamos hoy representa un avance respecto de lo vigente. Eso nadie lo puede discutir. Sin embargo, para comprender bien las razones de esta reforma y de sus consecuencias, har� algunas observaciones y una pregunta. Hasta la fecha -seg�n las explicaciones dadas-, el requirente recibe el derecho de agua, lo guarda y hace con �l lo que desea, que la mayor�a de las veces es nada. Todos sabemos que en esta materia algunas empresas hidroel�ctricas y personas naturales han dado examen de excelencia. Por eso, en Chile las aguas est�n quedando en manos de algunas personas. En segundo lugar, cualquiera que haya estudiado el futuro del mundo sabe que lo m�s probable es que la pr�xima gran guerra sea por el agua. Tercero, siempre he sostenido que el agua es un bien nacional de uso p�blico (o como se quiera denominar), pero sujeto b�sicamente al bien com�n del pa�s. Por lo tanto, al Estado, como ejecutor del bien com�n -con el debido respeto por los derechos particulares y con la excelencia con que se debe actuar- y m�s all� de los abusos que puedan cometerse, le corresponde regular de alguna manera el sistema de otorgamiento de las aguas. Sobre el particular, se ha tratado esta tarde de mostrar con mucha fuerza la manera en que se pueden perpetrar abusos. Pero no olvidemos que el padre Arist�teles dijo que el abuso no inhabilita el uso. En consecuencia, por mucho que se crea que se han cometido errores fundamentales, ellos deben precaverse en la respectiva ley y no inhabilitar al Estado para ser el administrador de este bien com�n. Hasta el momento, tengo claro que la situaci�n existente nadie la puede sostener. No obstante, el marco legal propuesto ahora debe determinar qui�n recibe el agua. Al respecto, se han planteado dos procedimientos: uno, el remate de los derechos de agua, y otro, el pago de una patente. La se�ora MATTHEI.- No. El dominio sobre los derechos de agua. El se�or ROMERO.- Se est� avanzando en la patente. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Conforme. Pero el procedimiento es para que se pague un monto. La se�ora MATTHEI.- �C�mo va a pagar la patente? Es lo mismo. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Por eso lo digo. El se�or LARRA�N (Presidente).- Les ruego a Sus Se�or�as no interrumpir. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, lo que estoy tratando de decir es que se ha pretendido corregir lo vigente sobre la base de que a nadie se otorgar� gratis los derechos de agua. En eso estamos. Tambi�n se ha sostenido con absoluta claridad que la primera vez que se concede el derecho -como se�al� el Honorable se�or Sabag- se debe efectuar un pago (lo cual representa un avance en la materia), pero despu�s -y a eso apunta mi pregunta, que prefiero formular aunque parezca ignorante-, quien recibi� tal derecho puede hacer un sayo con el agua. �Es as�? La se�ora MATTHEI.- �Hacer qu�? El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Hacer con el agua lo que se desee. La se�ora MATTHEI.- As� es. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Yo creo que es imposible sostener eso. Exc�seme, se�or Presidente, es probable que mi opini�n parezca risible a algunas personas, al igual que a m� me parecen risibles otras ideas. A mi juicio, �sa es la falla fundamental de lo que estamos discutiendo, porque si es verdad que el agua es un bien nacional, que ser� de mucha escasez en el futuro y que las personas � La se�ora MATTHEI.- �Me concede una interrupci�n, se�or Senador? El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Con todo gusto. El se�or LARRA�N (Presidente).- Con la venia de la Mesa, tiene la palabra la Honorable se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Esta discusi�n fue muy larga y Su Se�or�a tiene mucha raz�n. Era bastante inaceptable que, por ejemplo, se diera un derecho para la agricultura y que despu�s se vendiera para otros fines. Lo concreto es que se decidi� que en alg�n momento ello pod�a ser bueno para el pa�s, porque si se otorga un derecho para un sector agr�cola y al lado se descubre una mina de oro, jam�s se van a devolver las aguas al Estado, porque �ste nunca las va a ceder a la mina -�para qu� lo har�a?-, y �sta no se desarrollar�. Por lo tanto, la �nica forma en que podr�a hacerlo es mediante la venta del derecho, y si bien el titular de �ste obtiene una ganancia, el pa�s tambi�n la obtiene. Muchas gracias. El se�or LARRA�N (Presidente).- Recupera la palabra el Honorable se�or Ruiz-Esquide. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, creo que esa l�gica, aparentemente muy razonable, no se puede aplicar respecto del agua por una raz�n muy simple. Si �sta es un bien nacional, que va a ser escaso -tema extensamente discutido- y que es importante en la zona norte, pero tambi�n en el sur, quien adquiere el agua tiene un derecho limitado por el bien com�n, de acuerdo con la misma argumentaci�n de la se�ora Senadora. Pero si aqu�l se compra en diez y despu�s se vende en cien, me parece inadecuado, porque no se puede negociar con el agua. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ha terminado su tiempo, Su Se�or�a. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Exc�seme, se�or Presidente, deme unos segundos m�s. Sea benevolente con el �nico opositor al sistema general que se propone. El se�or LARRA�N (Presidente).- Ya se los di, pero puede terminar, se�or Senador. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- En esas condiciones, estimo razonable que la primera vez se pague y se admita la declaraci�n de que las aguas ser�n ocupadas para determinado fin, pero si �ste cambia, no me parece l�gico que una persona gane dinero con un bien de todo el pa�s. �As� de claro! Y, peor a�n, si ma�ana se remata o se vende para destinarla a otro prop�sito, todos sabremos qui�nes la van a comprar, y de nuevo no la tendr�n los agricultores. �Y bien saben los de mi tierra que no se compite con la ENDESA! Me alegro de que en esta materia se haya avanzado; pero como esta legislaci�n no se va a volver a modificar tal vez en este decenio, lamento much�simo que ese avance sea tan insuficiente que deja pendiente un forado descomunal. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- El se�or Subsecretario de Obras P�blicas ha solicitado autorizaci�n para hacer uso de la palabra. Si le parece a la Sala, se acceder�. Acordado. Tiene la palabra el se�or Subsecretario. El se�or P�REZ (Subsecretario de Obras P�blicas).- Se�or Presidente, creo que hoy d�a ha ocurrido algo muy importante: se ha aprobado por unanimidad una reforma al C�digo de Aguas que va a permitir la correcci�n de situaciones -como todos han concordado- bastante desafortunadas. Actualmente, se utiliza s�lo el 19 por ciento de los derechos constituidos. Si se constituyeran todos los derechos solicitados, tendr�amos que producir cinco veces el agua existente entre los r�os de todo el pa�s. Y si hoy entreg�ramos todos los derechos pedidos, habr�a un solo solicitante: una empresa generadora que tendr�a 80 por ciento de los derechos no consuntivos. Entonces, lo importante es que todas las opiniones han coincidido en el prop�sito de corregir esta situaci�n. Se ha alcanzado un gran acuerdo, como dijo el Honorable se�or Romero. Durante muchos meses los Senadores de las Comisiones de Hacienda y de Obras P�blicas trabajaron con los gremios. Y se acaba de aprobar por unanimidad gran cantidad de art�culos que representan una profunda reforma al C�digo de Aguas. Esta discusi�n lleva doce a�os, no por burocracia ni por negligencia, sino simplemente por falta de consenso sobre c�mo modificar la legislaci�n vigente. Lo interesante es que se han aunado criterios en todo lo sustantivo. Ahora se est� debatiendo algo menos relevante de lo que pareci� en un primer momento. Y quiero decir por qu�: porque la reforma -y creo que todos concuerdan en ello- versa sobre dos puntos fundamentales, el primero de los cuales es que el principal mecanismo de constituci�n de derechos es el remate. Ello se recoge aqu� en el Senado; inicialmente la norma no ven�a as�. Dicho elemento es b�sico: no a la gratuidad del agua. Y no a todas las consecuencias negativas que eso genera. La segunda modificaci�n esencial es que a la patente por no uso se le incorporaron una serie de optimizaciones que nos dan tranquilidad y confianza en cuanto a que funcionar� bien. Ahora se discute, entonces, sobre un tema importante para nosotros, pero m�s bien secundario respecto de toda la reforma que se acaba de aprobar. Hecha la contextualizaci�n, paso a explicar el motivo para debatir el texto que nos ocupa. Efectivamente, tal como se plante� en las dos Comisiones, llegamos a un gran consenso y dijimos: "�ste es el �nico aspecto en que hay discrepancia". La redacci�n en an�lisis es producto de la enmienda de una indicaci�n del Ejecutivo y de una proposici�n del Senador se�or Boeninger, apunt�ndose a generar una coincidencia respecto del �nico punto, repito �ello siempre se expres� abiertamente-, en que hab�a diferencias. En primer lugar, se consigna un umbral. La memoria explicativa s�lo se exigir� a los medianos y grandes solicitantes -no a los peque�os-, o sea, a quienes pidan derechos de agua consuntivos superiores a 10 litros por segundo, desde la Primera Regi�n hasta la Metropolitana, y a 50 litros por segundo, desde la Sexta a la Duod�cima. �Por qu�? Porque exist�a el temor de que se premiara a la empresa que pod�a elaborar una buena memoria explicativa, frente al peque�o agricultor, que no sabr�a por d�nde partir para justificar su solicitud. En segundo t�rmino, la redacci�n �que buscaba el consenso, reitero, por eso la defendemos-, con el fin de evitar arbitrariedades, establece que existir� un formulario, el cual se publicar�. Es decir, ser� algo muy f�cil de materializar. Adem�s, la memoria se presentar� como una declaraci�n jurada. Se contar� con una tabla, asimismo �ello tambi�n ser� p�blico-, que reflejar� las pr�cticas habituales. Evidentemente, el riego en la Octava Regi�n es de menor intensidad que el de la Cuarta, donde por lo general se encuentra tecnificado. Tales datos deben recogerse en la tabla. Y resulta f�cil lograr un acuerdo al respecto. En tercer lugar, es necesario tener presente el inciso final del art�culo 149 propuesto. Cabe recordar que se registr� un consenso en el sentido de que la justificaci�n es para constituir el derecho, pero no configura una especie de hipoteca o prenda que lo sigue, en orden a que si alguien planta kiwis y despu�s desea cambiar a la producci�n de uva debe ir a la Direcci�n General de Aguas. Ello se aclara en la norma reci�n citada, la cual expresa: "Sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso segundo del art�culo 147 bis," �el que nos ocupa- "el derecho de aprovechamiento constituido de conformidad al presente art�culo, no quedar� en modo alguno condicionado a un determinado uso y su titular o los sucesores en el dominio a cualquier t�tulo podr�n destinarlo a los fines que estimen pertinentes.". Lo anterior resulta razonable. Y lo que se est� discutiendo es c�mo se constituye el derecho de propiedad sobre el aprovechamiento de aguas. Pero, una vez constituido, indudablemente tiene todas las garant�as del derecho de propiedad consagrado en la Ley Fundamental. Por �ltimo,� El se�or LARRA�N (Presidente).- Concluy� su tiempo, se�or Subsecretario. El se�or P�REZ (Subsecretario de Obras P�blicas).- Disc�lpeme, se�or Presidente. Termino en seguida. Asimismo, para evitar cualquier tipo de arbitrariedad -porque nosotros, como Ministerio de Obras P�blicas o Direcci�n General de Aguas, somos los que menos deseamos exponernos a que se nos atribuya alguna-, se dispone que s�lo se podr� limitar la solicitud en aquellos casos en que haya manifiesta diferencia entre lo declarado como necesario y lo que realmente se requiere. Como dije -y s�lo para responder al Senador se�or Romero-, se ha buscado una redacci�n de consenso para el �nico tema en el que nunca nos pusimos de acuerdo. Creemos que con esta norma y con los art�culos que he mencionado nos hacemos cargo de los temores de que pueda incurrirse en alguna arbitrariedad. Hay algo que no he dicho y que es muy importante: lo expuesto debe contextualizarse en el sentido de que s�lo se aplicar� cuando no exista remate -en la mayor�a de los casos, queremos que lo haya-, vale decir, cuando no medien dos o m�s solicitudes incompatibles que obliguen a efectuarlo. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- �Me permite, se�or Presidente? Deseo hacerle una pregunta al se�or Subsecretario. El se�or LARRA�N (Presidente).- Lo lamento, Su Se�or�a, pero finaliz� el tiempo del se�or P�rez. Hay muchos oradores pendientes y debo respetar su derecho y el orden en que se inscribieron. Ellos son los Senadores se�ores Horvath, Carmen Frei, Parra, Andr�s Zald�var y Moreno. Tiene la palabra el Honorable se�or Horvath. El se�or HORVATH.- Se�or Presidente, la verdad es que sobre este tema recay� casi todo el peso de los elementos que han estado presentes en la larga discusi�n a que dio lugar la reforma del C�digo de Aguas de 1981. Hoy nos alegramos de escuchar que existe la voluntad pol�tica de que todos paguen lo que realmente vale el recurso en Chile. Hace diez a�os tal discusi�n a�n no era posible ni ten�a sustento pol�tico. El C�digo establece que las aguas son bienes nacionales de uso p�blico susceptibles de un derecho de aprovechamiento y que una vez adquirido puede ser transado libremente. Como bien manifest� el se�or Subsecretario, ese puro factor es el que ha creado la situaci�n actual: primero, un acaparamiento excesivo que supera, incluso, la cantidad de agua de que dispone el pa�s; y segundo, el utilizarlo como una barrera para frenar otras actividades. Este tema entra, por as� decirlo, en la Agenda Pro Crecimiento. La intenci�n clara del proyecto no es la de obtener dinero por el no uso de las aguas, sino incentivar su buena utilizaci�n. En ese sentido hay que entenderlo. Cuando comenz� el debate de la iniciativa en la C�mara de Diputados -varios de los Senadores presentes �ramos miembros de esa rama legislativa y nos toc� participar en su estudio-, ten�a tres objetivos: uno, activar el empleo de las aguas a trav�s del pago de una patente por no uso; dos, generar un caudal de car�cter ecol�gico, ya que la entrega de aguas en forma indiscriminada, debido a su gratuidad, estaba llegando al extremo de secar las principales cuencas del pa�s y, por ende, a afectar los ecosistemas y todo el procedimiento, esto es, no s�lo los recursos naturales sino tambi�n la cultura asociada a ellos, y tres, lograr un manejo integrado de las cuencas. El tercer punto se encuentra pendiente y, a mi juicio, es de extraordinaria relevancia para poder ordenar en forma din�mica y participativa las distintas opciones, tanto de uso del agua, como de uso y no uso de las cuencas completas. Porque esto, en definitiva, afecta la cantidad y calidad del recurso. Por lo anterior, tal como se indic�, durante la tramitaci�n de la iniciativa en el Congreso �y, en particular, en el Senado- se alcanzaron una serie de acuerdos con cada uno de los sectores involucrados: minero, agr�cola, energ�tico. �ste finalmente estuvo dispuesto a devolver derechos de agua equivalentes a m�s de 300 megawatts, para que se puedan desarrollar otras actividades proyectadas a lo largo y ancho del pa�s, en especial en la zona sur. Deseo insistir en que la patente no guarda relaci�n con el valor econ�mico del agua. Constituye un incentivo para usar el elemento; pero no se aplica exactamente un valor transaccional de mercado. En cuanto al asunto espec�fico de la memoria, pienso que ah� est� la clave. Si no se exige una memoria explicativa, la autoridad carecer� de argumento para decir que una solicitud apunta a evitar que se instale otra actividad o a especular en el futuro, a costa de todos los chilenos, en forma gratuita. Y cuando se presenten dos o m�s peticiones sobre unas mismas aguas, sin que �stas sean suficientes, se ir� al remate, con todos los beneficios y la transparencia que aqu� se han destacado. Ahora bien, en �reas de inter�s p�blico, como la acuicultura, se deber� pagar una patente y entregar un proyecto. Si �ste no se ejecuta en dos a�os, la persona pierde la concesi�n. O sea, existen otras f�rmulas que funcionan bastante bien. Pienso que no se debe sobredramatizar en esta materia, se�or Presidente. La memoria, adem�s, queda sujeta a un formulario muy simple. Y si el interesado considera que ello no satisface su derecho, podr� recurrir a un mecanismo de apelaci�n absolutamente transparente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra la Honorable se�ora Frei. La se�ora FREI (do�a Carmen).- Se�or Presidente, entiendo el largo tiempo que ha tomado, tanto en el Senado como en la C�mara de Diputados, el estudio del proyecto, porque el agua es un bien escaso en nuestro pa�s y �ste, adem�s, es tan diferente. Si en un C�digo de Aguas se desea considerar al mismo tiempo la realidad del norte, donde se halla el desierto m�s seco del mundo, y la del sur, donde llueve todos los d�as, ello resulta tremendamente complejo. Y, por eso, comprendo las numerosas dificultades que se han enfrentado. Ahora bien, creo que es bueno llegar a un acuerdo. Me parece que lo que tenemos es peor que lo planteado en el texto. Pero tambi�n observo que la iniciativa en an�lisis no contiene soluciones que me dejen conforme en relaci�n con la Regi�n que represento. Primero, �c�mo se pueden recuperar los r�os? Todos estudiamos, en la geograf�a nacional, que el Loa, en el desierto, es el m�s largo de Chile, etc�tera. Hoy se halla sin agua. Parte importante de ese elemento pertenec�a a los pueblos atacame�os, que lo vendieron a las compa��as mineras, de modo que es imposible recuperarlo. Ellas siempre van a salir ganando. Obviamente, si se va a un remate -y es una de las consultas que deseo formular-, �qu� seguridad puede tener un aillo, una comunidad de esa zona, frente a una minera grande? �Qui�n va a fijar las reglas del juego? La minera se lo "comer�" entero. Adem�s, despu�s, si se desea interponer un recurso, es necesario presentarlo ante la Corte de Apelaciones de Santiago. Cabe imaginar lo que ello significa. �Se hallan lej�simo de San Pedro de Atacama, adonde llegar ya es una odisea, y tienen que venir a la Corte de Apelaciones de Santiago! Me parece que lo anterior, dentro de la regionalizaci�n, no es posible. Otra cuesti�n que no deja de ser muy complicada es la de las aguas subterr�neas. En 1992 logr� pasar aqu�, en el Senado, una iniciativa que permiti� conservarlas, as� como los bofedales, para la Primera y Segunda Regiones. �Cu�l ha sido la realidad? A pesar de esa ley, se saca el recurso de distintas maneras. Hay aguas fre�ticas, en el norte, que no se recuperan y que se est�n usando. �Qu� hacemos al respecto? �La legislaci�n en estudio contempla alg�n castigo o multa, o bien, por �ltimo, una patente por concepto de ellas, que son las que mantienen los bofedales y las vegas de esa zona? Por eso se observan ahora tan pocos cam�lidos y otras especies, ya que al elemento se lo van "comiendo" por otro lado. Entonces, me encuentro en una disyuntiva bien dif�cil. Entiendo que con la normativa en estudio se avanza de alguna manera, porque lo actual es peor. Pero, �c�mo poder hacerlo para abrigar la seguridad de que se contemple la situaci�n de los peque�os? Muchas veces �stos no lo son tanto, pero los pasan a llevar, y va el grande y pretende comprarles las aguas. Y a veces son ignorantes y las venden. Y, despu�s, recuperarlas� Reitero que, para la Senadora que habla, la situaci�n es harto complicada, porque no se est�n protegiendo muchas de las aguas del norte, de los oasis, y parte importante de las pertenecientes a los aillos. Como dice el Honorable se�or Horvath, debemos contar con una pol�tica clara respecto de las cuencas de nuestros r�os. Y es algo que tampoco veo muy claro. En consecuencia, se�or Presidente, surge la pregunta de qu� hacer. Por un lado, a lo mejor la normativa es buena para el sur, pero no tanto para el norte. Y la Senadora que habla no est� dispuesta a que en el norte exista s�lo la miner�a. A mi juicio, esta �ltima es muy importante, pero la agricultura y los oasis tambi�n son fundamentales. Y el r�o Loa debe recuperarse. Hasta el momento, ello conforma una odisea. Y con esta reforma al C�digo de Aguas no veo que tal prop�sito se pueda lograr. No s�, entonces, qu� respuestas puedo obtener a estas alturas del di�logo, se�or Presidente. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Parra. El se�or PARRA.- Se�or Presidente, tal vez no vale la pena alargar tanto la discusi�n, despu�s de 12 a�os de tramitarse un proyecto de ley que es indispensable pero que ha tenido tantas dificultades para su sanci�n final. Formulo la siguiente pregunta al Honorable Senado: �cu�l va a ser el efecto pr�ctico de la disposici�n? Hoy d�a, sobre la mayor parte de los cauces hay constituidos derechos de aprovechamiento que muchas veces cubren �ntegramente la posibilidad que aqu�llos brindan. En consecuencia, lo que har� el texto que nos ocupa es activar ese mercado, por una parte, y en cuanto al remanente, por la otra, sobre el cual ellos a�n no se configuran, permitir� alg�n grado de regulaci�n proveniente de la Direcci�n General de Aguas. Pienso, por lo tanto, que estamos en presencia de un m�nimo indispensable para proteger, siquiera en el margen, el bien com�n y el inter�s colectivo. Como lo manifest� con ocasi�n de la discusi�n general del proyecto, estimo que el C�digo de los a�os ochenta es el texto m�s marcadamente liberal, de corte m�s ideol�gico, generado durante esa d�cada en el campo de los recursos naturales y, en general, de la actividad econ�mica. No comparto para nada su enfoque. Considero que dista mucho de ser una buena normativa. Me parece fundamental restituir, en parte siquiera, las facultades que el C�digo de 1931 otorgaba a la administraci�n, a trav�s de la Direcci�n General de Aguas, por los criterios que lo inspiraban. Ese ordenamiento conten�a, entre otras cosas, una prelaci�n en cuanto al uso que se pod�a hacer del recurso y una afectaci�n consecuencial de los derechos de aprovechamiento que se constituyeran, permiti�ndose la fiscalizaci�n por �rganos del Estado y no por las organizaciones de usuarios, como hoy d�a ocurre. En consecuencia, creo que estamos en presencia de una reforma muy modesta y que la disposici�n sugerida en el art�culo 147 bis, complementada con la del art�culo 147 ter, que establece la facultad del solicitante para apelar de las resoluciones, es un m�nimo en la l�nea de proteger los intereses generales. He dicho. El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Andr�s Zald�var. El se�or ZALD�VAR (don Andr�s).- Se�or Presidente, reitero que hemos entrado a discutir casi el C�digo completo, porque nos estamos ocupando en la filosof�a misma de lo que debe contener. Cuando comenz� el debate sobre la reforma actual, hubo dos planteamientos, precisamente, que iban a conformar el camino por el cual se deb�a elaborar la legislaci�n. Uno de ellos, dotado de legitimidad, es el que han expresado varios se�ores Senadores en el sentido de que las aguas se pagan. "El que toma agua, la paga", quienquiera que sea: agricultor, minero, sanitaria, hidroel�ctrica, etc�tera. Lo que no puede continuar -y en eso s� que hubo acuerdo- es el abuso, como dec�a el Honorable se�or Parra, de la posibilidad que se otorga a una persona para pedir derechos y no usarlos. En el an�lisis se lleg� al sistema de m�s bien sancionar el no uso de las aguas. �Y por qu� raz�n? Porque, abandon�ndose la tesis del pago, se estim� que se lleva a cabo un aprovechamiento indebido de algo que se solicita al Estado para poder ser usado en beneficio de una determinada actividad. Y por eso se estableci� la patente, que es lo que viene en el proyecto. La discusi�n no se puede hacer en cuanto a si acaso hay remate o no lo hay. �ste existe, en el C�digo actual, cuando se registra m�s de un interesado en un mismo derecho de aprovechamiento, lo cual se mantiene. Pero no se estableci� �es lo que dec�a la Senadora se�ora Matthei- que todos esos derechos se sometan a tal procedimiento, es decir, que, sobre la base de tantos derechos de aprovechamiento en tal sector, se realicen las publicaciones pertinentes y se pregunte qui�n quiere comprar. No se aplic� esa filosof�a. Ella no se encuentra en el proyecto, ni es posible establecerla, porque estamos en el segundo tr�mite, ya vencieron los plazos para indicaciones y ser�a preciso modificar todo aquello en que hemos trabajado durante 10 a�os, para establecer un mecanismo diferente. Lo �nico que se debe resolver ahora, sobre la base de lo aprobado y de que se desea establecer el pago de patente por el no uso, es si la petici�n de un derecho de aprovechamiento no podr�a ser limitada de acuerdo con el n�mero 23 del art�culo 19 de la Carta -y lo discutimos en la Comisi�n de Constituci�n-, de modo que no corresponder�a que el Director General de Aguas la respondiera negativamente. En la Comisi�n de Constituci�n se concluy� por unanimidad que no se infring�a el n�mero 19, porque no se constituye un derecho de propiedad propiamente tal cuando se pide un derecho de agua o de aprovechamiento. Se dijo que, por ser una mera expectativa, la autoridad pod�a decretar limitaciones. Es lo que consigna el art�culo 147 bis. En �l se establece la facultad, la cual puede ser ejercida por alguien. Se dice que la decisi�n del Director de Aguas podr�a ser arbitraria o que incluso podr�a haber corrupci�n. A mi juicio, no corresponde actuar sobre la base de que cuando se da una atribuci�n a una autoridad estatal �sta, autom�ticamente, debe quedar sujeta a control, conforme al principio de mala fe o de que esa persona va a ejercer acciones contrarias a la ley o en beneficio propio. Entonces, �qu� se dice en la norma? Que el Director de Aguas puede limitar el derecho de aprovechamiento, para lo cual se requiere la memoria explicativa a que hizo referencia el Honorable se�or Horvath. Es necesaria para que dicho funcionario proceda de acuerdo con las tasas fijadas por un decreto supremo de los Ministerios de Obras P�blicas, de Agricultura y de Econom�a. Hay una pauta para que, seg�n el art�culo 147 bis, se determine si lo solicitado es excesivo o no lo es. Es l�gico que alguna autoridad lo declare as�. �Y qu� otra persona m�s calificada para ello que el Director de Aguas? Si esa autoridad procede de manera arbitraria -porque se ha legislado respecto de la forma en que puede actuar-, autom�ticamente el afectado puede reclamar, como sucede en todo tipo de concesiones. Por ejemplo, en el caso de una solicitud para el espectro radial, existe el derecho a rechazar una decisi�n arbitraria del Subsecretario de Telecomunicaciones, como la negativa de la respectiva concesi�n, pese a haberse cumplido con todos los requisitos. El afectado puede acudir al tribunal para que se rectifique tal decisi�n. Aqu� sucede lo mismo, pues se dispone el derecho a reclamo. O sea, lo que debe resolver el Senado es muy preciso. No podemos entrar a revisar todo el sistema vigente, como el remate, el pago obligado del agua, etc�tera. Podr�a decirse que no se podr� disponer del agua como un derecho patrimonial, pues quien la pida para labores agr�colas no podr� emplearla en una actividad distinta; o que no se podr� vender el derecho a un vecino o a quien desee explotar una mina, como se se�alaba hace un momento. �Claro que podr�a hacerse! Pero ahora no podemos legislar sobre todos esos aspectos, porque tenemos que determinar si damos o no damos la facultad al Director de Aguas para resolver si otorga el derecho de aprovechamiento a una persona cuando no lo justifica. Y eso es lo que involucra el aprobar o rechazar el art�culo 147 bis. Si optamos por la negativa, vamos a quedar en peores condiciones, pues la legislaci�n actual no precisa procedimiento alguno para que el Director de Aguas regule el derecho de aprovechamiento que se solicita. Respecto de eso es lo que tenemos que pronunciarnos ahora. El se�or LARRA�N (Presidente).- Restan dos minutos para el t�rmino del Orden del D�a. Como quedan dos Senadores inscritos, sugiero la pr�rroga de la hora hasta terminar la discusi�n del art�culo y proceder a su votaci�n, salvo que haya un parecer contrario de la Sala. Si no hubiera acuerdo en ese sentido y como el tiempo restante es insuficiente, preferir�a suspender el debate de inmediato y continuarlo en la pr�xima sesi�n. El se�or BOENINGER.- �Puedo hacer un planteamiento, se�or Presidente? El se�or LARRA�N (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Boeninger. El se�or BOENINGER.- Propongo lo siguiente: como la materia de que trata el art�culo 147 bis ha sido debatida latamente, �por qu� no se abre la votaci�n, lo que permitir� a los dos Senadores inscritos fundar el voto, y se dejan las disposiciones pendientes para la pr�xima sesi�n? El se�or LARRA�N (Presidente).- Lamentablemente, no hay acuerdo. Adem�s, algunos se�ores Senadores no quieren que se recojan ahora los pronunciamientos. Si no hay pr�rroga del tiempo, no se puede abrir la votaci�n. Y, en tal caso, prefiero suspender de inmediato el tratamiento del proyecto. Se hallan inscritos para usar de la palabra los Honorables se�ores Moreno y Fern�ndez. Luego de sus intervenciones se votar�. --Queda pendiente la discusi�n particular del proyecto. )------------( El se�or LARRA�N (Presidente).- El Presidente de la Comisi�n de Relaciones Exteriores ha solicitado que el proyecto de modernizaci�n de la Canciller�a sea visto por ella en general y en particular a la vez. Si le parece a la Sala, as� se acordar�. Acordado. )------------( El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminado el Orden del D�a. VI. TIEMPO DE VOTACIONES "D�A DE LA AMISTAD Y LA PAZ ENTRE CHILENOS Y ARGENTINOS". PROYECTO DE ACUERDO El se�or LARRA�N (Presidente).- Corresponde poner en votaci�n un proyecto de acuerdo respecto del cual informar� el se�or Secretario. El se�or HOFFMANN (Secretario).- El se�or Presidente pone en votaci�n un proyecto de acuerdo, propuesto por Su Se�or�a y suscrito, adem�s, por el Senador se�or Adolfo Zald�var, en que se propone presentar una iniciativa de ley -cosa que ya ha hecho tambi�n el se�or Presidente- que denomine el 29 de noviembre como "D�a de la amistad y la paz entre chilenos y argentinos". Se expresa que lo anterior constituir�a un paso m�s en el objetivo de consagrar al Senado como l�der del proceso de integraci�n chileno-argentino. El se�or LARRA�N (Presidente).- Deseo complementar lo dicho con lo siguiente: previo acuerdo de distintos Comit�s, junto con mi par de la otra rama legislativa suscribimos con los Presidentes del Senado y de la C�mara de Argentina una declaraci�n en el mismo sentido, que hace coherencia con el planteamiento del proyecto de acuerdo. El texto propone que el 29 de noviembre �en el �ltimo se cumplieron 20 a�os de celebraci�n del Tratado de Paz y Amistad entre Chile y Argentina- sea declarado como "D�a de la Amistad y la Paz entre Chilenos y Argentinos", lo que mantiene coherencia, como dije, con declaraciones ya suscritas en el mismo sentido. El se�or RUIZ-ESQUIDE.- Se�or Presidente, con anterioridad hice a Su Se�or�a una sugerencia que no veo incorporada al texto del proyecto, entregado hace algunos d�as. El se�or LARRA�N (Presidente).- Fue modificado en la forma propuesta por el se�or Senador. El se�or BOMBAL.- Se�or Presidente, �por qu� no lo da por aprobado por la unanimidad de la Sala? El se�or LARRA�N (Presidente).- Igual hay que registrar la votaci�n, se�or Senador. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or LARRA�N (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba el proyecto de acuerdo por 22 votos a favor. Votaron por la afirmativa los se�ores �vila, Boeninger, Bombal, Canessa, Cordero, Espina, Fern�ndez, Flores, Frei (don Eduardo), Garc�a, Horvath, Larra�n, Mart�nez, Matthei, Moreno, Novoa, P�ez, Prokurica, Romero, Ruiz-Esquide, Sabag y Zurita. VII. INCIDENTES PETICIONES DE OFICIOS El se�or HOFFMANN (Secretario).- Han llegado a la Mesa diversas peticiones de oficios. El se�or LARRA�N (Presidente).-Se les dar� curso en la forma reglamentaria. )------------( --Los oficios cuyo env�o se anuncia son los siguientes: Del se�or GARC�A: Al se�or Subsecretario del Interior, sobre ESTADO DE PROYECTOS POSTULADOS A FONDO SOCIAL "PRESIDENTE DE LA REP�BLICA" DE NOVENA REGI�N. Del se�or HORVATH: Al se�or Contralor General de la Rep�blica, solicit�ndole un PRONUNCIAMIENTO DE LA CONTRALORIA GENERAL DE LA REP�BLICA SOBRE NORMA DE LEY DE ALCOHOLES EN RELACI�N CON DENEGATORIA DE AUTORIZACI�N PARA VENTA DE BEBIDAS ALCOH�LICAS POR PARTE DE CONSEJEROS REGIONALES Y CONCEJALES. Del se�or STANGE: Al se�or Contralor General de la Rep�blica, d�ndole a conocer lo relativo a MODIFICACI�N DE NORMAS CONTRACTUALES Y REMUNERACIONALES A TRABAJADORES DE AEROPUERTO INTERNACIONAL EL TEPUAL, PUERTO MONTT (D�cima Regi�n). El se�or LARRA�N (Presidente).- En Incidentes, los Comit�s Socialista e Institucionales 2 e Independiente no har�n uso de su tiempo. En el tiempo del Comit� Institucionales 1, tiene la palabra el Senador se�or Mart�nez. INEXISTENCIA DE ESTADO DE DERECHO EN CHILE El se�or MART�NEZ.- Se�or Presidente, deseo aprovechar mi tiempo para plantear una reflexi�n ante el Senado de la Rep�blica. En repetidas intervenciones, he venido sosteniendo que en Chile ya no existe el Estado de Derecho. Y quiero reiterar lo anterior con la mayor claridad: no existe desde el momento en que la Corte Suprema, en el ejercicio de su acci�n jurisdiccional, deja de aplicar las leyes de la Rep�blica, conforme a su claro esp�ritu y letra. Llevamos pr�cticamente 20 a�os discutiendo acerca de la validez o no de la Ley de Amnist�a -me refiero a la legislaci�n sobre el per�odo 1973-1978-, que no ha sido abrogada, la cual, en cambio, se encuentra plenamente vigente y ha producido efectos. Un gran n�mero de chilenos se han beneficiado con ella, sin distinci�n de colores pol�ticos. Por otra parte, un crecido n�mero de compatriotas, ex miembros de la Defensa Nacional, est�n presos por el desconocimiento que se ha hecho de la figura de la cosa juzgada. Y es as� como se han reabierto juicios que estaban definitivamente cerrados. A todos ellos no se los beneficia con el principio pro reo, pues se han dictado leyes en favor de quienes cumplen condenas, pero se excluye al personal de la Defensa. Otro aspecto que viene a reforzar el planteamiento de que no hay Estado de Derecho en Chile es que no rige la prescripci�n del delito ni de la pena correspondiente. Esto se ve agravado por la insistencia en aplicar una figura jur�dica inexistente en nuestros c�digos y que la sana l�gica rechaza: que las personas desaparecidas est�n secuestradas en alg�n sitio, suponi�ndose o asumi�ndose que los responsables de la acci�n las mantienen retenidas a buen recaudo y les dan alimentaci�n. Lo anterior se ve agravado por un aspecto muy significativo: el se�or Ministro del Interior no se hace cargo de los individuos secuestrados y que estar�an en cierto lugar del pa�s. Por lo tanto, puede pensarse que en alg�n momento habr�a que acusar constitucionalmente a dicho Secretario de Estado por notable abandono de sus deberes, al no haber dispuesto lo necesario -las fuerzas y los medios del orden que tiene bajo su direcci�n operativa- para la b�squeda y ubicaci�n de quienes, seg�n la Corte Suprema, se encuentran en alg�n lugar. Otros antecedentes duelen m�s todav�a: a muchos de los detenidos por estas causas, al ser llevados a los tribunales, se los somete a tratamientos vejatorios de su dignidad, neg�ndoseles incluso algo tan elemental como ir a los servicios higi�nicos para sus necesidades fisiol�gicas. Y todo ello envuelto en un permanente ataque directo y, a veces, subliminal a la gesti�n y a la �poca en que estuvieron en actividad. Hasta se les desconoce, en algunos casos, su papel de miembros de las Fuerzas Armadas y de Carabineros. Todo esto me lleva a plantear con insistencia y con la mayor claridad que en Chile no existe el Estado de Derecho. Se violan derechamente principios constitucionales, como la igualdad ante la ley. La no aplicaci�n de todos los aspectos jurisdiccionales y jur�dicos que he se�alado es una muestra exacta de que el Estado de Derecho est� vulnerado. Pienso que esta situaci�n tiene que cambiar. Duele profundamente que, en reciente fallo, una de las Salas de la Corte Suprema insin�e incluso que los acusados permanecer�n en la condici�n de detenidos o cumpliendo penas hasta el momento en que aparezcan los desaparecidos, oportunidad en la cual reci�n se aplicar�n las leyes. Esto constituye un hecho extraordinariamente grave, porque aparece una situaci�n poco �tica, en el sentido de que la presi�n del juez llega a tal nivel, que la prisi�n y, m�s que eso, el fallo, es la manera para obtener el antecedente que haga suponer o el fallecimiento o la libertad de la persona retenida. Me duele, porque el principio de igualdad ante la ley no se est� aplicando. Los que sirvieron en la Defensa reciben un tratamiento del todo diferente al del resto de los chilenos, lo cual constituye una injusticia tremenda. Y la injusticia nunca conduce a la paz, sino que introduce situaciones de inestabilidad en la convivencia de los connacionales. Es cuanto quer�a expresar, se�or Presidente. --Ofrecida la palabra sucesivamente a los Comit�s Mixto, Dem�crata Cristiano, Uni�n Dem�crata Independiente y Renovaci�n Nacional, ning�n se�or Senador hace uso de ella. El se�or LARRA�N (Presidente).- Por haber cumplido su objetivo, se levanta la sesi�n. --Se levant� a las 18.42. Manuel Oca�a Vergara, Jefe de la Redacci�n