REP�BLICA DE CHILE DIARIO DE SESIONES DEL SENADO PUBLICACI�N OFICIAL LEGISLATURA 350�, EXTRAORDINARIA Sesi�n 1�, en martes 7 de octubre de 2003 (De 16:25 a 18:8) PRESIDENCIA DEL SE�OR ANDR�S ZALD�VAR, PRESIDENTE SECRETARIO, EL SE�OR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR ____________________ � N D I C E Versi�n Taquigr�fica P�g. I. ASISTENCIA......................................................................................................... II. APERTURA DE LA SESI�N............................................................................... III. CUENTA..........................................................................�. Acuerdos de Comit�s.................................�����������. IV. D�AS Y HORAS DE SESIONES ORDINARIAS: V. APROBACI�N DE TABLAS DE F�CIL DESPACHO Y ORDINARIA: Tabla de F�cil Despacho (se aprueba).......................................................... Tabla Ordinaria (se aprueba).................................................................... VI. COMPOSICI�N DE COMIT�S............................................................ VII. F�CIL DESPACHO: Informe de Comisi�n de Vivienda y Urbanismo relativo a estudio realizado en materia de ejecuci�n y mantenci�n de obras de pavimentaci�n urbana, en el cual se formulan determinadas recomendaciones a la Sala (S 679-10)........ VIII. ORDEN DEL D�A: Proyecto de ley, en primer tr�mite constitucional, sobre trabajo en r�gimen de subcontrataci�n, funcionamiento de empresas de servicios transitorios y contrato de trabajo de servicios transitorios (2943-13) (se aprueba en general)............... Proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la Ley General de Urbanismo y Construcciones (2694-07) (se aprueba en general)............. VERSI�N TAQUIGR�FICA I. ASISTENCIA Asistieron los se�ores: --Aburto Ochoa, Marcos --Arancibia Reyes, Jorge --�vila Contreras, Nelson --Boeninger Kausel, Edgardo --Bombal Otaegui, Carlos --Canessa Robert, Julio --Cantero Ojeda, Carlos --Chadwick Pi�era, Andr�s --Coloma Correa, Juan Antonio --Cordero Rusque, Fernando --Espina Otero, Alberto --Fern�ndez Fern�ndez, Sergio --Flores Labra, Fernando --Foxley Rioseco, Alejandro --Frei Ruiz-Tagle, Carmen --Frei Ruiz-Tagle, Eduardo --Garc�a Ruminot, Jos� --Gazmuri Mujica, Jaime --Horvath Kiss, Antonio --Larra�n Fern�ndez, Hern�n --Lavandero Illanes, Jorge --Mart�nez Busch, Jorge --Matthei Fornet, Evelyn --Moreno Rojas, Rafael --Mu�oz Barra, Roberto --Naranjo Ortiz, Jaime --Novoa V�squez, Jovino --N��ez Mu�oz, Ricardo --Orpis Bouch�n, Jaime --Parra Mu�oz, Augusto --Pizarro Soto, Jorge --Prokurica Prokurica, Baldo --Romero Pizarro, Sergio --Ruiz De Giorgio, Jos� --Ruiz-Esquide Jara, Mariano --Sabag Castillo, Hosa�n --Silva Cimma, Enrique --Stange Oelckers, Rodolfo --Viera-Gallo Quesney, Jos� Antonio --Zald�var Larra�n, Adolfo --Zald�var Larra�n, Andr�s Actu� de Secretario el se�or Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el se�or Sergio Sep�lveda Gumucio. Concurrieron, adem�s, los se�ores Ministros Secretario General de la Presidencia, de Educaci�n y del Trabajo y Previsi�n Social. II. APERTURA DE LA SESI�N --Se abri� la sesi�n a las 16:25, en presencia de 30 se�ores Senadores. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesi�n. III. CUENTA El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretar�a. El se�or SEP�LVEDA (Prosecretario).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas: Mensajes Diecis�is de Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica: Con los trece primeros hace presente la urgencia, en el car�cter de "simple", respecto de los siguientes proyectos: 1.- El relativo al Sistema de Inteligencia del Estado y a la creaci�n de la Agencia Nacional de Inteligencia (Bolet�n N� 2.811-02); 2.- El atinente a la importaci�n de las mercanc�as del sector de la Defensa, calificadas como "pertrechos" (Bolet�n N� 3.204-02); 3.- El que modifica la Ley General de Pesca y Acuicultura, con el objeto de perfeccionar la regulaci�n del sector (Bolet�n N� 3.222-03); 4.- El que introduce modificaciones a la ley N� 19.039, sobre privilegios industriales y protecci�n de los derechos de propiedad industrial (Bolet�n N� 2.416-03); 5.- El que modifica la ley N� 19.496, sobre protecci�n de los derechos de los consumidores (Bolet�n N� 2.787-03); 6.- El relativo al fomento de la m�sica chilena (Bolet�n N� 2.287-04); 7.- El que establece un sistema de protecci�n social para familias en situaci�n de extrema pobreza, denominado "Chile Solidario" (Bolet�n N� 3.098-06); 8.- El que establece una nueva ley de matrimonio civil (Bolet�n N� 1.759-18); 9.- El que crea los tribunales de la familia (Bolet�n N� 2.118-18); 10.- El que sustituye la ley N� 19.366, que sanciona el tr�fico il�cito de estupefacientes y sustancias sicotr�picas (Bolet�n N� 2.439-20); 11.- El que establece el R�gimen de Garant�as en Salud (Plan AUGE) (Bolet�n N� 2.947-11); 12.- El que modifica el decreto ley N� 2.763, de 1979, con la finalidad de establecer una nueva concepci�n de la autoridad sanitaria, distintas modalidades de gesti�n, y fortalecer la participaci�n ciudadana (Bolet�n N� 2.980-11), y 13.- El que propone enmiendas a la ley N� 18.933, sobre Instituciones de Salud Previsional (Bolet�n N� 2.981-11). Con el decimocuarto y el decimoquinto hace presente la urgencia, en el car�cter de "suma", respecto de las siguientes iniciativas: 1.- La que permite efectuar anticipos del Fondo Com�n Municipal en los casos que indica, y modifica el decreto ley N� 3.063, de 1979, sobre Rentas Municipales (Bolet�n N� 3.248-06), y 2.- La que introduce modificaciones al C�digo Penal, al C�digo de Procedimiento Penal y al C�digo Procesal Penal en materia de delitos de pornograf�a infantil (Bolet�n N� 2.906-07). --Se toma conocimiento y se manda agregar los documentos a sus respectivos antecedentes. Con el �ltimo solicita el desarchivo del proyecto que crea la comuna de Hualpencillo, en la provincia de Concepci�n, Regi�n del Biob�o, y a la vez incluye la iniciativa en la convocatoria a la actual Legislatura Extraordinaria de Sesiones del Congreso Nacional (Bolet�n N� 1.764-06). --Se accede a lo solicitado. Oficios De Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, mediante el cual, en cumplimiento de lo establecido en el art�culo 25 de la Carta Fundamental, comunica su ausencia del territorio nacional, entre el lunes 29 de septiembre y el domingo 5 de octubre, ambos inclusive, a fin de efectuar una visita privada a los Estados Unidos de Am�rica, haciendo uso de su feriado legal. Asimismo, se�ala que durante el per�odo que dure su ausencia ser� subrogado, con el t�tulo de Vicepresidente de la Rep�blica, por el se�or Ministro titular del Interior, don Jos� Miguel Insulza Salinas. --Se toma conocimiento. Seis de la Honorable C�mara de Diputados: Con el primero remite el mensaje de Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, mediante el cual inicia la tramitaci�n del proyecto de Ley de Presupuestos para el a�o 2004 (Bolet�n N� 3.366-05). Asimismo, y para los efectos de lo establecido en el inciso primero del art�culo 64 de la Carta Fundamental, hace presente que el referido mensaje fue recibido en esa Corporaci�n el 30 de septiembre del a�o en curso. --Pasa a la Comisi�n Especial Mixta de Presupuestos. Con los cinco siguientes comunica que ha otorgado su aprobaci�n a los proyectos que se indican: 1.- El que modifica el art�culo 60 de la ley N� 18.045 y el T�tulo V del C�digo Penal (Bolet�n N� 3.292-07). 2.- El que crea un procedimiento para eximir de responsabilidad en caso de extrav�o, hurto o robo de c�dula nacional de identidad u otro documento de identificaci�n (Bolet�n N� 2.897-07). --Pasan a la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento. 3.- El que modifica la ley N� 18.175, en materia de fortalecimiento de la transparencia en la administraci�n privada de las quiebras, fortalecimiento de la labor de los S�ndicos y de la Superintendencia de Quiebras (Con urgencia calificada de "simple") (Bolet�n N� 3.180-03). --Pasa a la Comisi�n de Econom�a, y conforme a lo dispuesto en el art�culo 74 de la Carta Fundamental, se manda poner en conocimiento de la Excelent�sima Corte Suprema. 4.- El que regula la transferencia y otorga m�rito ejecutivo a copia de la factura (Bolet�n N� 3.245-03), y 5.- El que limita la responsabilidad de los usuarios de tarjetas de cr�dito por operaciones realizadas con tarjetas extraviadas, hurtadas o robadas (Bolet�n N 3.129-03). --Pasan a la Comisi�n de Econom�a. Tres del Excelent�simo Tribunal Constitucional: Con el primero transcribe la resoluci�n dictada por ese Tribunal, en los autos Rol N� 387, relativos al proyecto que modifica la ley N� 19.620, sobre adopci�n de menores, en materia de competencia de los juzgados de menores, solicitando se informe a ese Tribunal acerca del qu�rum de aprobaci�n de los preceptos comprendidos en el art�culo �nico, N�s 10 y 18, y en el art�culo transitorio del proyecto (Bolet�n N� 3.022-07). --Se mand� contestar. Con el segundo remite copia autorizada de la sentencia dictada por ese Tribunal, en los autos Rol N� 387, relativos al proyecto que modifica la ley N� 19.620, sobre adopci�n de menores, en materia de competencia de los juzgados de menores, enviado a ese Tribunal para su control de constitucionalidad (Bolet�n N� 3.022-07). --Se mand� comunicar el proyecto a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica. Con el tercero transcribe la resoluci�n dictada en los autos Rol N� 388, relativos al requerimiento suscrito por 34 Honorables se�ores Diputados, mediante el cual solicitan se declare la inconstitucionalidad del decreto supremo N� 56, del Ministerio de Transportes, de 29 de abril de 2003, publicado en el Diario Oficial de 8 de agosto del mismo a�o. --Se toma conocimiento. Dos de la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores: Con el primero contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Horvath, relativo a la cartograf�a que se publica en Chile y en Argentina sobre el �rea comprendida en el Acuerdo de 1998 para precisar el recorrido del l�mite desde el Monte Fitz Roy hasta el Cerro Daudet, y Con el segundo responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Naranjo, referido a la situaci�n que afecta a la Premio Nobel de la Paz y l�der de la Liga Nacional para la Democracia en Birmania se�ora Aung San Suu Kyi. Tres del se�or Ministro de Hacienda: Con el primero da respuesta a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Horvath, concerniente a la tributaci�n que afecta a la bonificaci�n por contrataci�n de mano de obra; Con el segundo contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Naranjo, tocante a ciertos cobros que ha implementado el BancoEstado para quienes poseen libretas de ahorro, y Con el tercero responde un oficio enviado a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, en nombre del Senador se�or Stange, relativo a la posibilidad de efectuar indicaci�n del tenor que se�ala al proyecto de ley sobre fortalecimiento y perfeccionamiento de la jurisdicci�n tributaria. Del se�or Ministro de Justicia, mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Espina, referido a los motivos por los cuales a�n no est� funcionando el Servicio M�dico Legal de la comuna de Angol. Seis del se�or Ministro de Obras P�blicas: Con el primero da respuesta a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Cariola, relativo al asfaltado del tramo del camino ripiado que se encuentra en el acceso de la localidad de Puerto Nuevo, que empalma con la ciudad de La Uni�n; Con el segundo contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Fern�ndez, tocante a la terminaci�n de la ruta que une la ciudad de Punta Arenas con el paso internacional de Monte Aymond, en la Duod�cima Regi�n; Con el tercero responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Horvath, concerniente a la incorporaci�n de nuevos antecedentes al denominado "Libro Blanco", y a la entrega de antecedentes del presupuesto asignado a la inspecci�n fiscal durante el presente a�o; Con los dos siguientes contesta igual n�mero de oficios enviados en nombre del Senador se�or Lavandero: el primero, relativo a la rectificaci�n de la ruta tur�stica que unir�a los lagos de la Novena Regi�n, y el otro, referido a los tiempos de espera en las plazas de peaje de rutas concesionadas, y Con el sexto responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Stange, sobre la concreci�n del proyecto denominado "Ruta Inter Lagos", D�cima Regi�n. Dos del se�or Ministro de Salud, mediante los cuales contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Mart�nez, tocante a la posibilidad de incorporar, dentro de las enfermedades catastr�ficas, a la fibrosis qu�stica. Del se�or Ministro de Agricultura, a trav�s del cual responde un oficio enviado en nombre de la Senadora se�ora Matthei, relativo al establecimiento de plan piloto que indica, en el canal Arenalito, comuna de Monte Patria. Del se�or Ministro de Bienes Nacionales, mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Stange, relativo a la regularizaci�n de inmueble que individualiza, en la comuna de Chait�n. Del se�or Ministro de Miner�a, con el cual responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Prokurica, respecto de la situaci�n financiera de la Empresa Nacional de Miner�a. Del se�or Contralor General de la Rep�blica, por medio del cual responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Horvath, con el que solicit� un pronunciamiento de ese organismo respecto de la actuaci�n del se�or Ministro de Vivienda y Urbanismo y de Bienes Nacionales, al impartir determinadas instrucciones al Secretario Regional Ministerial de Bienes Nacionales de la Quinta Regi�n. De la se�ora Contralora General de la Rep�blica, subrogante, en respuesta a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Prokurica, relativo a la revisi�n de los contratos de mejoramiento de las rutas que se�ala, ubicadas en el sector de la cuesta La Dormida. Dos de la se�ora Subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo: Con el primero contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Chadwick, referido al proyecto de alcantarillado de la localidad de Gultro en la comuna de Olivar, Sexta Regi�n, y Con el segundo contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Espina, relativo a diversos proyectos postulados al Programa Mejoramiento Urbano y Equipamiento Comunal por la Municipalidad de Lumaco, Novena Regi�n. Dos del se�or Subsecretario de Marina, mediante los cuales da respuesta a sendos oficios enviados a la se�ora Ministra de Defensa Nacional, en nombre del Honorable se�or Horvath: uno, referido a la correspondencia entre la zonificaci�n del borde costero en la Regi�n de Ais�n con las concesiones de acuicultura, y otro, relativo a la compatibilidad entre �reas aptas para la acuicultura y �reas tur�sticas. De la se�ora Subsecretaria de Vivienda y Urbanismo, por medio del cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Espina, relativo a la posibilidad de entregar en comodato inmueble que individualiza, ubicado en la localidad de Villa Troyo, comuna de Lonquimay, al Cuerpo de Bomberos de esa localidad. Del se�or Superintendente de Instituciones de Salud Previsional, subrogante, en respuesta a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Cantero, tocante a los efectos del t�rmino del convenio suscrito entre la Asociaci�n Gremial de Traumat�logos de Antofagasta y diversas Isapres. Tres del se�or Director General de Obras P�blicas: Con el primero responde un oficio enviado en nombre de la Senadora se�ora Matthei, referido a la posibilidad de construir una nueva copa de agua para el sistema de agua potable rural de la localidad de El Maqui, comuna de Monte Patria, Cuarta Regi�n, y Con los dos siguientes contesta igual n�mero de oficios enviados en nombre del Senador se�or Espina: uno, relativo a la reparaci�n del camino p�blico Santa Julia-Ventrenco, comuna de Curacaut�n, y otro, acerca de la reparaci�n del camino rural que une el sector de Vegas Blancas con la ciudad de Angol. Del se�or Director de Obras Hidr�ulicas, por medio del cual da respuesta a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Orpis, referido al estudio de embalse para los valles de Lluta y Azapa, Primera Regi�n. Del se�or Director General de Concesiones, mediante el cual responde un oficio enviado en nombre del Senador se�or Zald�var, don Andr�s, relativo a los problemas de accesibilidad que afectan a los vecinos del kil�metro 36 de la Ruta 68. Del se�or Director de Relaciones Pol�ticas e Institucionales del Ministerio Secretar�a General de la Presidencia, por medio del cual remite el informe elaborado por la Oficina de Planificaci�n Agr�cola, ODEPA, respecto de las implicancias silvoagropecuarias del Tratado de Libre Comercio entre Chile y Estados Unidos de Am�rica. Del se�or Alcalde de Pur�n, mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Espina, relativo al mejoramiento de la calle principal de esa comuna. Del se�or Director del Servicio de Salud Araucan�a Norte, en respuesta a diversos oficios enviados en nombre del Senador se�or Espina, referidos a la disponibilidad de pr�tesis de ese Servicio, a la n�mina de funcionarios del hospital de Victoria, al monto de la deuda vencida de cada uno de los hospitales dependientes de ese Servicio de Salud, y a las inversiones efectuadas durante 2002 en los hospitales y servicios asistenciales de la provincia de Malleco. Del se�or Director del Instituto Nacional de Deportes de la Novena Regi�n, mediante el cual responde un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Espina, respecto de los motivos por los cuales el proyecto deportivo denominado "Los J�venes y el Deporte por una Vida Sana" no fue seleccionado para ser financiado con recursos del FONDEPORTE 2003. Del se�or Comandante del Distrito Naval de Chilo�, por medio del cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Stange, referido a las concesiones mar�timas entregadas a la empresa R�o Dulce S.A., en el sector de San Antonio, provincia de Quell�n. Del se�or Gerente General de la Empresa de Servicios Sanitarios de la Araucan�a S.A., mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre del Senador se�or Espina, relativo al funcionamiento de un colector en el Barrio Industrial de la comuna de Angol. Del se�or Presidente del Colegio M�dico de Chile A.G., en contestaci�n a un oficio enviado en nombre del Senador se�or Cantero, sobre la posibilidad de que esa entidad gremial otorgue alg�n tipo de financiamiento al XXV Congreso Chileno de Microbiolog�a. Del se�or Director del diario "La Segunda", mediante el cual responde un oficio enviado en nombre de los Senadores se�ores Horvath, Mart�nez y Stange, relativo al contenido del inserto de promoci�n tur�stica incluido en esa publicaci�n el 9 de septiembre pasado. --Quedan a disposici�n de los se�ores Senadores. Comunicaci�n De la se�ora Presidenta de la Asamblea General de la Confederaci�n Parlamentaria de las Am�ricas (COPA), por medio de la cual remite las Actas de la IV Asamblea General de ese organismo, efectuada en Ixtapan de la Sal, M�xico, en noviembre de 2002. --Queda a disposici�n de los se�ores Senadores. Solicitudes De los se�ores Julio Alberto Saavedra Moscoso y Claudio Danilo Fuentes Araya, mediante las cuales piden la rehabilitaci�n de sus ciudadan�as (Boletines N� S 698-04 y S 699-04, respectivamente). --Pasan a la Comisi�n de Derechos Humanos, Nacionalidad y Ciudadan�a. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Terminada la Cuenta. Acuerdos de Comit�s El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- El se�or Secretario dar� cuenta de los acuerdos adoptados por los Comit�s. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Los Comit�s, en sesi�n de hoy d�a, por unanimidad, acordaron lo siguiente: 1.- Dedicar la sesi�n del pr�ximo martes 14, de 16 a 20, suprimiendo la Hora de Incidentes, al tratamiento y despacho de las modificaciones a la Constituci�n Pol�tica que la Comisi�n respectiva haya aprobado por unanimidad. 2.- Enviar a la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento -a petici�n de la misma-, para un nuevo primer informe, el proyecto relativo a pornograf�a infantil, a fin de conocer otras proposiciones surgidas en ella, y solicitar el acuerdo del Senado para que dicha Comisi�n pueda sesionar paralelamente con la Sala, con el objeto de tratar y despachar la iniciativa en el primer lugar de la Tabla de ma�ana. 3.- Anunciar que despu�s de la Cuenta de la sesi�n de ma�ana, el Vicepresidente del Senado, Honorable se�or Bombal, en nombre de la Corporaci�n, rendir� homenaje en memoria del ex Senador don Fernando Ochagav�a Vald�s, recientemente fallecido. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Su Se�or�a ser� el �nico orador y rendir� el homenaje en representaci�n de todos los se�ores Senadores. IV. D�AS Y HORAS DE SESIONES ORDINARIAS El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Conforme a lo dispuesto en el art�culo 63 del Reglamento, corresponde designar los d�as y horas para las sesiones ordinarias semanales. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Los Comit�s proponen fijar los martes y mi�rcoles, de 16 a 20, para celebrar las sesiones ordinarias, y los jueves, cuando fuere necesario. --As� se acuerda. V. APROBACI�N DE TABLAS DE F�CIL DESPACHO Y ORDINARIA El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Corresponde, a continuaci�n, aprobar la Tabla de F�cil Despacho y la Ordinaria. El se�or HOFFMANN (Secretario).- En la Tabla de F�cil Despacho, se propone el informe de la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo que da cuenta de un estudio realizado en materia de ejecuci�n y mantenci�n de obras de pavimentaci�n urbana, y formula determinadas recomendaciones a la Sala. En la Tabla del Orden del D�a se incluyen las siguientes materias: 1.- Proyecto de ley sobre el trabajo en r�gimen de subcontrataci�n, el funcionamiento de las empresas de servicios transitorios y el contrato de trabajo de servicios transitorios. 2.- Proyecto que modifica la Ley General de Urbanismo y Construcciones, en lo relativo al contrato de promesa de compraventa de inmuebles y criminaliza conducta constitutiva de estafa en el art�culo 470 del C�digo Penal. 3.- Proyecto sobre modificaci�n del C�digo del Trabajo, en lo atinente al descanso dominical. 4.- Proyecto que modifica el C�digo Org�nico de Tribunales en lo relativo a la designaci�n de notario alterno o adjunto, originado en moci�n de los Senadores se�ores Aburto, Chadwick, Espina, Moreno y Silva. 5.- Proyecto que modifica el C�digo Penal, el de Procedimiento Penal y el Procesal Penal, en materia de delitos de pornograf�a infantil. 6.- Proyecto de reforma constitucional que introduce diversas modificaciones a la Carta Fundamental. --Se aprueban. VI. COMPOSICI�N DE COMIT�S El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- El se�or Secretario dar� cuenta de la composici�n de los Comit�s. El se�or HOFFMANN (Secretario).- Los Comit�s Parlamentarios estar�n constituidos de la siguiente manera: Partido Dem�crata Cristiano: Senadores se�ora Carmen Frei Ruiz-Tagle y se�or Jorge Lavandero Illanes. Comit� Mixto Uni�n Dem�crata Independiente e Independientes: Senadores se�ores Jovino Novoa V�squez Jorge Arancibia Reyes. Partido Renovaci�n Nacional: Senadores se�ores Sergio Romero Pizarro y Baldo Prokurica Prokurica. Partido Socialista: Senadores se�ores Ricardo N��ez Mu�oz y Jos� Antonio Viera-Gallo Quesney. Partido Por la Democracia: Senadores se�ores Roberto Mu�oz Barra y Fernando Flores Labra. Comit� Institucionales 1: Senadores se�ores Ram�n Vega Hidalgo y Julio Canessa Robert. Comit� Institucionales 2 e Independiente: Senadores se�ores Enrique Zurita Camps y Enrique Silva Cimma. -------------- El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Propongo fijar las 18:30 como hora de t�rmino de la presente sesi�n. --As� se acuerda. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Adem�s, anuncio que ma�ana se tratar� en la tabla de F�cil Despacho, seg�n lo propuso por unanimidad la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, el proyecto que modifica el C�digo Org�nico de Tribunales en lo relativo a la designaci�n de notario alterno o adjunto, que figura en el cuarto lugar del Orden del D�a. VII. F�CIL DESPACHO EJECUCI�N Y MANTENCI�N DE OBRAS DE PAVIMENTACI�N URBANA. INFORME DE COMISI�N DE VIVIENDA Y URBANISMO El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- De conformidad con el acuerdo adoptado por el Senado con fecha 9 de septiembre reci�n pasado, corresponde ocuparse en el informe de la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo relativo al estudio realizado en materia de ejecuci�n y mantenci�n de obras de pavimentaci�n urbana, en el cual se formulan determinadas recomendaciones a la Sala. (Bolet�n N� S 670-10) --Los antecedentes sobre el informe (S 679-10) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Sesi�n 1�, en 7 de octubre de 2003. El se�or HOFFMANN (Secretario).- La Comisi�n informante deja constancia en este documento de que las materias que analiz� son las relativas a las competencias y responsabilidades de los municipios, los Servicios de Vivienda y Urbanismo y otros organismos p�blicos; la necesidad de racionalizar el uso de los recursos p�blicos que se destinan tanto a obras de ejecuci�n como de mantenci�n de la pavimentaci�n urbana, y la conveniencia de revisar las pol�ticas y programas vigentes en materia de conservaci�n y mantenci�n de las obras de pavimentaci�n. El mencionado informe formula, finalmente, las conclusiones que hace presentes a la Sala. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En discusi�n. Ofrezco la palabra. Tiene la palabra el Honorable se�or Prokurica. El se�or PROKURICA.- Se�or Presidente, los miembros de la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo han venido planteando diversas inquietudes referidas a la ejecuci�n y mantenci�n de las obras de pavimentaci�n urbana en el pa�s. Por lo tanto, durante diez sesiones se han abocado al estudio de dichas inquietudes, relacionadas espec�ficamente con aspectos tales como la necesidad de dimensionar las carencias existentes en esta �rea a lo largo del territorio; examinar sus distintas fuentes de financiamiento; conocer las innovaciones tecnol�gicas que se han ido produciendo en los �ltimos a�os, y detectar las duplicidades y vac�os que se producen en el plano administrativo. En atenci�n al inter�s que estos asuntos suscitan, la Comisi�n resolvi� analizarlos con el fin de realizar una evaluaci�n objetiva y lo m�s completa posible, quedando as� en condiciones de plantear posteriormente al Senado y a las autoridades pertinentes las recomendaciones que resultaren del caso. En sustancia, los puntos que se determin� necesario considerar son los siguientes: a) Las competencias y responsabilidades de los municipios, los SERVIU y otros organismos p�blicos en esta materia. b) La necesidad de racionalizar el uso de los recursos p�blicos que actualmente se destinan tanto a obras de ejecuci�n de pavimentos como a las de su mantenci�n, de manera de beneficiar con ellas a un mayor n�mero de personas y optimizar el uso de estos fondos, incluyendo la posibilidad de buscar f�rmulas de pavimentaci�n alternativas. c) La conveniencia de revisar las pol�ticas y programas vigentes en materia de conservaci�n y mantenci�n de las citadas obras de pavimentaci�n. El an�lisis de estas materias se efectu� a lo largo de diez sesiones, como dije anteriormente. En ellas se escuch� la opini�n de diversas autoridades y especialistas que ilustraron a la Comisi�n desde el punto de vista de sus respectivas experiencias y especialidades. Tambi�n concurrieron expertos en tales materias, como los se�ores Alejandro Hormaz�bal y Gonzalo B�ez, profesionales de la Unidad de Asesor�a Presupuestaria del Senado; don Carlos Guzm�n y don Ariel Huenchull�n, ingenieros especialistas en sistemas de pavimentaci�n alternativos; don Hern�n de Solminihac, Jefe de la Direcci�n de Investigaci�n Cient�fica y Tecnol�gica de la Pontificia Universidad Cat�lica de Chile; don Eusebio Herrera Carvajal, Subdirector de Pavimentaci�n y Obras Viales del SERVIU Metropolitano; don Marcelo Longaz, Jefe del Departamento de Obras Urbanas del Ministerio de Vivienda y Urbanismo; don Sergio Jara Duhalde, empresario del �rea, y la investigadora del Instituto Libertad y Desarrollo, se�orita Bettina Horst. Del mismo modo, se conoci� la opini�n del se�or Oscar Videla Castro, Jefe del Centro de Asistencia T�cnica de la Facultad de Ingenier�a de la Pontificia Universidad Cat�lica de Valpara�so, y se consideraron los informes de algunas intendencias regionales que llegaron a la Comisi�n. Por otra parte, �sta recab� antecedentes de tipo legal, t�cnico y presupuestario. Tuvo a la vista, asimismo, un proyecto de acuerdo que la C�mara de Diputados aprob� con fecha 20 de marzo del a�o en curso, referente a la misma materia. La totalidad de los antecedentes consta en el informe de que ha hecho menci�n el se�or Presidente. Cabe hacer notar que, como regla general, en materia de ejecuci�n y mantenci�n de obras de pavimentaci�n act�a una gran diversidad de instituciones. En efecto, en las distintas regiones de nuestro pa�s se advierte la intervenci�n del Ministerio de Vivienda y Urbanismo a trav�s de los distintos SERVIU, de los gobiernos regionales, de las municipalidades, del Ministerio de Planificaci�n y Cooperaci�n a trav�s de las Secretar�as Ministeriales Regionales, del Ministerio del Interior por medio de la Subsecretar�a de Desarrollo Regional y Administrativo, y del Ministerio de Obras P�blicas mediante las Direcciones de Vialidad y de Obras Hidr�ulicas. Lo anterior pone de manifiesto que las responsabilidades y competencias se encuentran diseminadas en distintas entidades, como fruto de un dise�o organizacional que conduce inevitablemente a la dispersi�n y, a veces, a la dualidad. Parece necesario, entonces, adoptar una decisi�n de fondo en cuanto a cu�les organismos tendr�n la titularidad de las responsabilidades en la materia en estudio, y luego introducir las medidas correctivas tendientes a concentrar en ellos dichas tareas. La Comisi�n estima que las responsabilidades, hoy repartidas en distintos organismos, deber�an radicarse en los niveles m�s cercanos a los conflictos y a la propia ciudadan�a afectada que, en la pr�ctica, son los gobiernos regionales y las municipalidades. En cuanto a los gobiernos regionales, su Ley Org�nica Constitucional les entrega una diversidad de funciones en materia de ordenamiento territorial. Espec�ficamente lo hace con relaci�n al sistema de asentamientos urbanos, con la dotaci�n y mantenimiento de obras de infraestructura, con la adecuada prestaci�n de servicios de transporte y con el desarrollo de �reas rurales y localidades aisladas. El art�culo 20 de la misma ley establece las herramientas necesarias para poner en pr�ctica dichas funciones. Por su parte, tambi�n los municipios pueden desarrollar funciones relacionadas con la vialidad urbana y rural, en forma directa o en colaboraci�n con otros �rganos de la Administraci�n. Ahora bien, no obstante que legalmente estos organismos -gobiernos regionales y municipios- disponen de un marco de atribuciones, que como punto de partida puede parecer adecuado, proceder�a efectuar los ajustes legales del caso para centralizar de manera clara y exclusiva las aludidas responsabilidades �nicamente en aquellas dos gamas de instituciones; y adem�s entregarles, como lo han planteado sus distintos directivos, los correspondientes recursos, porque tanto los gobiernos regionales como los directores de las organizaciones municipales han expresado el temor en cuanto a que habitualmente se les transfieren responsabilidades sin proporcionarles los medios para cumplirlas. 2.- Existencia de una normativa abundante y confusa La multiplicidad de organismos involucrados a que se ha aludido en el punto anterior se encuentra prevista y sancionada en una diversidad de normas. Entre ellas figuran las Leyes Org�nicas de los Ministerios de Vivienda y Urbanismo, y de Obras P�blicas; las Leyes Org�nicas Constitucionales de Gobierno y Administraci�n Regional y de Municipalidades; diversas leyes especiales sobre pavimentaci�n; la ley que consagra las funciones y atribuciones de la SUBDERE, y varias otras. A ellas se agregan cada a�o las respectivas Leyes de Presupuestos del sector p�blico. La existencia de esta abundante cantidad de normas da lugar a la superposici�n de objetivos y a la asignaci�n paralela de recursos y, por consiguiente, a la p�rdida de efectividad y de eficiencia en la ejecuci�n de tan importante funci�n. La Comisi�n estima indispensable, en consecuencia, simplificar y sistematizar este conjunto de disposiciones, de modo que queden vigentes �nicamente las que sean necesarias. 3.- Dispersi�n de responsabilidades La Comisi�n observ� que, en la pr�ctica, la comunidad desconoce cu�les son las autoridades responsables de la ejecuci�n de las obras de pavimentaci�n urbana, de la coordinaci�n de las mismas, de su mantenci�n y, finalmente, del resarcimiento de los perjuicios ocasionados por accidentes derivados de su mal estado. Se advirti� que existe la creencia general de que son �nicamente los municipios los que deben responder por estas situaciones. As� lo corrobora el importante n�mero de demandas presentadas en contra de los alcaldes. Este error com�n quedar�a atr�s en la medida en que se efect�e una asignaci�n precisa de responsabilidades en esta materia, como se ha planteado precedentemente. Por lo dem�s, esta radicaci�n espec�fica de responsabilidades fluir�a como consecuencia natural de las definiciones de fondo que se han sugerido en los dos numerales anteriores. 4.- Aspectos financieros En materia financiera, la Comisi�n estim� pertinente formular diversos planteamientos. En primer lugar, se advirti� que los recursos destinados a pavimentaci�n urbana se encuentran previstos en diversos instrumentos normativos. Entre ellos, se cuentan distintas partidas sectoriales de la Ley de Presupuestos, convenios de programaci�n, inversiones sectoriales de asignaci�n regional y presupuestos municipales. Adem�s, existe la f�rmula de los aportes de vecinos en los proyectos de pavimentaci�n participativa. Por otra parte, la Comisi�n pudo observar que el volumen de recursos destinados a la ejecuci�n de obras de pavimentaci�n y a su mantenci�n es evidentemente insuficiente, lo que conlleva el serio riesgo de que el patrimonio del pa�s en materia de pavimentaci�n, que alcanza a varios miles de millones de d�lares, de no hacerse la mantenci�n respectiva, se deteriore de forma tal que finalmente no existir� la posibilidad de mantenerlo, y habr� que repararlo en su integridad a un costo enorme. Se dice, por ejemplo, que en el �rea Metropolitana se est� invirtiendo aproximadamente el uno por ciento del valor total de las obras de pavimentaci�n. Sin embargo, de acuerdo con todas las normas internacionales, lo �ptimo ser�a invertir por lo menos 5 por ciento para mantener este patrimonio del Estado chileno. 5.- Nuevos m�todos de pavimentaci�n En esta materia, la Comisi�n constat� que existen innovaciones tecnol�gicas distintas y m�s modernas que las com�nmente utilizadas para ejecutar obras de pavimentaci�n. Se comprob� que �stas no s�lo cuentan con un adecuado desarrollo te�rico y pr�ctico en el pa�s, sino tambi�n con las condiciones materiales, el respaldo profesional y la disposici�n empresarial que se necesita para aplicarlas satisfactoriamente. Del mismo modo, se pudo apreciar que estos m�todos se han aplicado con buenos resultados en calles y caminos p�blicos y privados en distintos puntos de nuestro territorio. De hecho, la Comisi�n se constituy� en comunas cuyos pavimentos tienen m�s de siete a�os de duraci�n, las que se han mantenido en regular forma, con el beneficio de que, en virtud de estas nuevas tecnolog�as, pueden costar hasta 50 por ciento menos del valor de los m�todos utilizados hasta ahora. 6.- Falta de coordinaci�n en ejecuci�n de trabajos en v�as p�blicas En �ltimo t�rmino, los antecedentes recogidos por la Comisi�n permitieron comprobar tambi�n la ausencia de una adecuada coordinaci�n entre el sector p�blico y las empresas de servicios del sector privado al momento de ejecutar trabajos que comprometen la utilizaci�n de veredas y calzadas. Es as� como los programas de trabajo de las empresas el�ctricas, sanitarias, de telecomunicaciones y de gas se realizan en cualquier momento, sin concierto u organizaci�n previos, sin ponerlos en conocimiento de los encargados de la mantenci�n del pavimento y -lo que es m�s grave- sin que se cumplan las normas sobre intervenci�n y reparaci�n de los mismos, con el consecuente deterioro de las v�as urbanas, lo cual no significa necesariamente que despu�s de producidos los da�os se hagan efectivas las responsabilidades del caso. Cabe agregar que en la �ltima sesi�n dedicada a este tema, celebrada el 2 de septiembre pasado, la Comisi�n present� sus conclusiones al se�or Ministro de Vivienda y Urbanismo, don Jaime Ravinet, quien puso de manifiesto su apreciable grado de coincidencia con el diagn�stico hecho por ella, y se�al� que las propuestas formuladas ser�n consideradas en futuras iniciativas legales, respecto de cuya elaboraci�n el organismo t�cnico comprometi� desde ahora su apoyo y colaboraci�n. Sin perjuicio de ello, anunci� �despu�s de haber tomado conocimiento de los avances que la Comisi�n hab�a alcanzado en su estudio- que algunos de los aspectos abordados por ella ya fueron acogidos a trav�s de dos medidas concretas que el Ministerio a su cargo ha adoptado: la Resoluci�n N� 3.057, de 1� de septiembre reci�n pasado, y el Oficio N� 1.058, de la misma fecha. La primera modifica el Procedimiento Aplicable al Programa de Pavimentaci�n Participativa, disponiendo que cada SERVIU tendr� que establecer y brindar a las respectivas comunas alternativas de pavimentaci�n de diferente costo, de forma de permitir la elecci�n de soluciones que requieran una menor inversi�n, pero que, al mismo tiempo, mantengan las condiciones de durabilidad, calidad y dise�o. La segunda informa e instruye sobre la realizaci�n del 13� Proceso de Selecci�n de Proyectos del Programa de Pavimentaci�n Participativa. Espec�ficamente, comunica la decisi�n del se�or Ministro de Vivienda y Urbanismo de privilegiar en este Programa la utilizaci�n de pavimentos m�s econ�micos, estableciendo �sta como una f�rmula alternativa a la pavimentaci�n participativa. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, la cuenta del titular de la Comisi�n de Vivienda no s�lo ha sido muy amplia y completa, sino que adem�s refleja el trabajo serio y minucioso que efectu� dicho organismo, al invitar a todos los entes t�cnicos encargados de la materia. Para empezar a conocer el tema, tomamos como base el acuerdo de la C�mara de Diputados, que propon�a, en buen romance, establecer los responsables legales de los pavimentos en las ciudades. Porque ocurre que los alcaldes y las municipalidades, en general, no se sienten responsables de ellos. Y cuando est�n muy deterioradas las veredas o las calles, a lo m�s se limitan a se�alizarlas, con el fin de resguardar su responsabilidad civil sobre esta materia, puesto que cuando hay un accidente m�s o menos serio, la demanda es contra los municipios, que muchas veces han sido condenados por el hecho de no se�alizar las veredas o calles en malas condiciones. Pero la idea de los se�ores Diputados �que yo comparto en buena medida- es que la responsabilidad de los pavimentos de las calles y la mantenci�n de las veredas no es s�lo del SERVIU, sino que tambi�n debe asumirla directamente el municipio. Un alcalde que quiere el progreso de su comuna debe velar por que las v�as p�blicas est�n en buena forma. Se las ingeniar� y presentar� los proyectos a los diversos estamentos existentes en la actualidad, que disponen de los recursos para este tipo de materias. Conozco municipios cuyos alcaldes, con recursos propios, han pavimentado sus calles. En cambio, otros se limitan a se�alar que ello corresponde al SERVIU y no hacen ning�n empe�o por pavimentarlas o mantener en buena forma las veredas. Por eso quisimos establecer la responsabilidad sobre este particular; pero, por sobre todo, quer�amos hacer ver que los municipios poseen todas las facultades. Y as� como se preocupan de la iluminaci�n o de cualquier otro problema comunal, tambi�n deben destinar recursos para la mantenci�n y mejoramiento de veredas y calles. Debo se�alar que el programa con mejor resultado en cuanto a la pavimentaci�n de las calles es sin duda el del pavimento participativo. Ha sido un tremendo �xito. Anualmente, se destinan en la Ley de Presupuestos de la Naci�n m�s o menos 35 mil millones de pesos, lo que permite regularizar alrededor de 280 kil�metros de v�as al a�o. Sin embargo, 3 mil kil�metros de calles no han sido pavimentadas. Con este procedimiento, algunas regiones demorar�n diez a�os en pavimentar todas las suyas; pero, al ritmo actual y con los procedimientos que se emplean en este momento, la Octava Regi�n tomar�a 20. Por eso, la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo, y el Senado a trav�s de la Comisi�n Especial mixta de Presupuestos, a insinuaci�n del Honorable se�or Ominami y de quien habla, propusieron buscar procedimientos de pavimentaci�n m�s baratos, a fin de avanzar m�s r�pido en esta materia. La tecnolog�a necesaria se encuentra disponible desde hace bastante tiempo en Chile y los pa�ses desarrollados la han aplicado con �xito durante muchos a�os. En Estados Unidos y en Europa no colocan 20 � 25 cent�metros de concreto en calles que en su inmensa mayor�a no lo necesitan. �Estamos poniendo pavimento para cien a�os en poblaciones donde el �nico cami�n pesado que transita por sus calles es el de la basura! �Y lo hace una vez a la semana! A ese ritmo lo �nico que conseguimos es enterrar indebidamente la plata donde se pueden ocupar otros sistemas, con costos mucho m�s econ�micos. Hoy se utiliza el proceso de estabilizaci�n qu�mica. En efecto, todas las tierras tienen minerales cuyo an�lisis detecta los que hacen masa. Luego se agregan aditivos, los cuales, al mezclarse con los �ridos correspondientes, dan origen a capas muy duras e impermeables. Sobre eso se vierte imprimante y cuatro cent�metros de asfalto. Como resultado se obtiene un camino capaz de durar 20 � 25 a�os y a un costo reducido a la cuarta parte de la pavimentaci�n tradicional. Se�or Presidente, en tres o cuatro a�os debi�ramos completar la pavimentaci�n de todas las calles de Chile, destinando posteriormente los recursos -hoy no son suficientes- a reparar y mantener las deterioradas, que son muchas. Cabe se�alar que la asignaci�n m�s alta del presupuesto del Ministerio de Obras P�blicas, que tiene a su cargo gran cantidad de kil�metros de caminos, corresponde a la conservaci�n, rubro para el que no dispone nada el Ministerio de Vivienda y Urbanismo. A eso apunta nuestro llamado de atenci�n. Queremos que el progreso derivado de la pavimentaci�n de las v�as p�blicas llegue pronto a todos los habitantes del pa�s, en un plazo razonable y a costos bajos. Por eso, agradezco que el estudio serio y responsable de la Comisi�n de Vivienda se haya acogido muy r�pidamente por el Ministerio del ramo, tema que �ste tambi�n analizaba. De esa manera, se logr� ampliar el plazo de postulaci�n para obras de pavimentaci�n -que normalmente termina el 30 de octubre de cada a�o- hasta el 28 de noviembre, con el fin de que la nueva tecnolog�a -que se dio a conocer a los SERVIU y SEREMI de Vivienda de todo el pa�s y, a trav�s de ellos, a los municipios y a los diversos comit�s de pavimento participativo- se utilice en beneficio de todos. De ser as�, con la misma plata con que se pavimenta un kil�metro podremos pavimentar cuatro kil�metros, lo cual permitir� avanzar mucho m�s r�pido en la soluci�n del problema. Hoy d�a el pavimento no es un lujo; es una necesidad que incide claramente en las condiciones de vida de la ciudadan�a. Se�or Presidente, este informe, que la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo aprob� por unanimidad, que tambi�n fue acogido por el Ministerio del ramo y que ya se comunic� a todos los entes pertinentes, constituye un aporte relevante, y espero que el Senado lo haga suyo. He dicho El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Al Senado no le corresponde aprobar o rechazar el informe; solamente le cabe tomar conocimiento de �l. El se�or �VILA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, mi intervenci�n tiene m�s bien el car�cter de consulta. Me refiero a la posibilidad de incorporar al informe la situaci�n en que permanecen numerosos caminos rurales, a los cuales el Estado, con una importante inversi�n, les puso carpetas asf�lticas. Con el tiempo, si para mantenerlas no se consideran recursos suficientes, que no son muy cuantiosos, radicados en las direcciones de vialidad o en los municipios, van a quedar en condiciones desastrosas, peores que las de antes de la carpeta asf�ltica. Y el Estado, entonces, habr� perdido lastimosamente montos considerables. No es mucho lo que se necesita, pero es preciso asignarlo a instancias encargadas de esa tarea, la que por lo dem�s no involucra un esfuerzo mayor, porque se trata de situaciones espor�dicas que perfectamente pueden ser asumidas, como dije, por los municipios o por las Direcciones de Vialidad. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Queda constancia en la Versi�n Taquigr�fica de la observaci�n del Senador se�or �vila. VIII ORDEN DEL D�A MARCO JUR�DICO PARA TRABAJOS EN R�GIMEN DE SUBCONTRATACI�N Y EN EMPRESAS DE SERVICIOS TEMPORARIOS El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Proyecto de ley, en primer tr�mite constitucional, sobre el trabajo en r�gimen de subcontrataci�n, el funcionamiento de las empresas de servicios transitorios y el contrato de trabajo de servicios transitorios, con informe de la Comisi�n de Trabajo y Previsi�n Social. --Los antecedentes sobre el proyecto (2943-13) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En primer tr�mite, sesi�n 1�, en 21 de mayo de 2002. Informe de Comisi�n: Trabajo, sesi�n 15�, en 29 de julio de 2003. Discusi�n: Sesiones 30�, en 2 de septiembre de 2003 (queda pendiente su discusi�n general); 35�, en 16 de septiembre de 2003 (queda para segunda discusi�n). El se�or HOFFMANN (Secretario).- La relaci�n de esta iniciativa se hizo el 2 de septiembre del a�o en curso. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En la segunda discusi�n, tiene la palabra por siete minutos y medio el Honorable se�or Boeninger. El se�or BOENINGER.- Pido la comprensi�n de la Sala si mi intervenci�n excede ese plazo. En realidad, por culpa m�a no estuve presente en la primera discusi�n. El objetivo principal del proyecto es la formalizaci�n desde el punto de vista de la legislaci�n laboral de las empresas proveedoras de trabajadores temporales, para lo cual incorpora un nuevo cap�tulo al C�digo del Trabajo. Simult�neamente, se trata de establecer una distinci�n clara entre el trabajo en r�gimen de subcontrataci�n -en que un empleador, contratista o subcontratista, ejecuta obras o presta servicios para un tercero, due�o de la obra o faena, con su propio personal, de contrato permanente o indefinido- y la figura n�tidamente diferente del suministro de trabajadores contratados por la empresa proveedora y puestos a disposici�n de la empresa usuaria para realizar labores de tipo temporal, caracter�stica esencial de esta modalidad. No me cabe duda de que ambos objetivos son correctos y requieren de regulaci�n, por lo cual desde ya anuncio mi voto favorable a la idea de legislar. Quiero manifestar, tambi�n, que hay varios temas de enfoque y orientaci�n que resultan definitorios con relaci�n a la naturaleza concreta del marco regulatorio que la ley en proyecto establecer� respecto de estas empresas y de la provisi�n de los trabajadores temporales, y que ser� preciso analizar en el segundo informe. Cabe hacer presente una observaci�n previa a prop�sito del p�rrafo relativo a la subcontrataci�n. Expreso mi convicci�n de que la subcontrataci�n y, en general, la externalizaci�n de faenas y servicios constituyen modalidades esenciales de la organizaci�n contempor�nea del trabajo, por lo cual los resguardos y regulaciones necesarios para evitar que se utilicen como resquicios o como forma de burlar los derechos y la protecci�n que la ley otorga a los trabajadores no debieran traducirse en normas restrictivas que inhiban o desalienten los procesos de externalizaci�n y subcontrataci�n se�alados. En cuanto a las empresas proveedoras de trabajadores temporales y a la normativa que ha de regir la contrataci�n de trabajadores por ellas y a los contratos de puesta a disposici�n de esos trabajadores a una firma usuaria -o sea, los contratos celebrados entre la empresa suministradora de trabajadores y la usuaria, y entre la empresa suministradora de trabajadores y los propios trabajadores que contrate-, son materias que deben regularse, porque hoy d�a operan en un vac�o legal. Sin embargo, me parece que esta necesaria regulaci�n no debe conducir a un tratamiento excesivamente restrictivo o a considerar tan excepcional�sima esta modalidad de trabajo que s�lo cabe autorizarla en casos muy calificados. Es evidente que la provisi�n de personal temporario no est� llamada a constituir una proporci�n elevada de los contratos de trabajo. A mi juicio, se trata de una modalidad m�s de empleo que tiene un rol en la organizaci�n laboral contempor�nea y que, con pleno resguardo de los derechos de los trabajadores, puede hacer aportes significativos tanto en procesos de inversi�n ligados a nuevos proyectos o en expansi�n de actividades como tambi�n en el aprovechamiento de momentos favorables y transitorios de mayor demanda, para citar s�lo ejemplos manifiestos. A lo anterior a�adir�a la ejecuci�n de labores transitorias por naturaleza: actividades de temporada, como las agr�colas o forestales; el inicio de operaciones de una empresa nueva, y la realizaci�n de faenas urgentes o impostergables que requieren concreci�n inmediata. Es decir, se trata de una modalidad de contrato de trabajo que tiene un nicho no despreciable en la econom�a contempor�nea. En virtud de lo anterior, considero que, en general, las empresas proveedoras de trabajadores temporarios deben ser tratadas como las de cualquier otro tipo e incentivar su formalizaci�n, sin perjuicio de los resguardos especiales -dada la naturaleza de esta actividad- que se requieran para cautelar debidamente los derechos de los trabajadores y la fe p�blica. La constituci�n de una adecuada garant�a, de liquidez inmediata, al inicio del funcionamiento de una compa��a de esta �ndole es, a mi modo de ver, un ejemplo correcto, apropiado, de tales resguardos especiales. No comparto, en cambio -y formular� indicaci�n en este sentido- la norma incorporada por la Comisi�n en orden a que el contrato de puesta a disposici�n de trabajadores que una firma proveedora de servicios temporarios celebre con la empresa usuaria deba ser una r�plica id�ntica al que aqu�lla, a su vez, suscriba con las personas que contrata. Si dicha norma se aprobara sin modificaciones, las empresas de servicios temporarios ser�an meras intermediarias caso a caso, orientadas a buscar trabajadores a pedido en el mercado. Es decir, se transformar�an en verdaderos entes comisionistas por encargo. En esas condiciones, no podr�an contar con personal permanente, efectuar capacitaci�n ni una serie de otras actividades que ser�a deseable que realizaran. Seguramente, la preocupaci�n que dio origen a la disposici�n propuesta tiene que ver con el temor de que algunas usuarias monten empresas paralelas de provisi�n de trabajadores temporarios, para evitar el empleo de trabajadores con contrato indefinido normal. Pero, en mi opini�n, el resto del articulado hace imposible que se produzcan situaciones dolosas de esa naturaleza de manera masiva. Del mismo modo, resulta innecesario y no procede que el Director del Trabajo tenga la facultad de cancelar la inscripci�n del registro de una empresa de servicios temporarios, atribuci�n que ciertamente no posee respecto de ninguna otra clase de sociedad. Asimismo, creo que deben diferenciarse los plazos m�ximos del contrato de servicios temporarios y la posibilidad de renovarlo, al menos por una sola vez, seg�n las causas que lo motivan. No es lo mismo el plazo necesario para desarrollar un proyecto nuevo que la necesidad de mayor dotaci�n generada, por ejemplo, en el caso puntual de una mayor demanda de corto plazo. Por �ltimo, es menester examinar el mecanismo de aplicaci�n de sanciones, con el objeto de asegurar tanto la eficiencia y ejecutividad de ellas como el respeto al debido proceso, materia que, en mi concepto, no se halla suficientemente cautelada en el texto propuesto. En suma, se trata de un proyecto indispensable y oportuno, susceptible de perfeccionamiento en la discusi�n particular. Como dije al comienzo, lo votar� favorablemente en general. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or �vila. El se�or �VILA.- Se�or Presidente, admito que en las circunstancias que vive la implantaci�n de cierto modelo econ�mico una legislaci�n de este tipo resulta inescapable. Es evidente que esta modalidad de trabajo debe quedar sujeta a regulaci�n. El Senador se�or Boeninger ha calificado los servicios transitorios como modalidades esenciales de la organizaci�n del trabajo actual. �Esenciales para qui�nes? �Para qu�? �Cu�l es la naturaleza de esa clase de organizaci�n? A mi juicio, una muy clara y simple: es la forma que se ha concebido para atomizar a los trabajadores, con el prop�sito de que pierdan la calidad de interlocutores v�lidos a trav�s de agrupaciones sindicales fuertes que representen adecuadamente sus intereses. Entre la precariedad del empleo y el ej�rcito de cesantes naufragan los organismos sindicales no s�lo en Chile sino tambi�n en diversos pa�ses del mundo. El r�gimen de subcontrataci�n se ha difundido extraordinariamente y ya no existe un solo espacio de la econom�a donde no se encuentre presente. �Qu� mecanismo podr�amos establecer para que los trabajadores que sean objeto de ese trato mantuvieran, por ejemplo, sus cotizaciones previsionales sin interrupci�n de ninguna �ndole? Dicho sistema est� haciendo estragos en el campo. Muchos campesinos -millones de ellos en el futuro- no tendr�n posibilidad alguna de jubilaciones dignas por cuanto lo primero que hacen las empresas contratistas es negar o burlar sus derechos. Negocian con los due�os de los predios determinadas condiciones; pero luego hacen la ganancia a costa de las imposiciones, que no llegan a las AFP o al Instituto de Normalizaci�n Previsional. Por lo tanto, esos trabajadores quedan completamente desprotegidos. Pregunto: �qu� disposiciones se podr�an incorporar para que esa forma organizacional del trabajo -que algunos llaman "moderna", pero que es simplemente abusiva- no genere las situaciones de injusticia que se�alo? �Por supuesto que esa clase de organizaci�n es muy c�moda para algunos empresarios! Los desliga totalmente de cualquier compromiso o responsabilidad para con sus trabajadores. Se desentienden de las obligaciones que la ley les impone; las traspasan a un contratista, quien a su vez hace lo propio. Porque aqu�, invariablemente, "el hilo se corta por lo m�s delgado". Entonces, dada la visi�n que objetivamente emana de una situaci�n como la que aborda el proyecto, por supuesto se suscitan sentimientos encontrados. El punto es por qu� hemos llegado a ella; por qu� se permite que se burlen de tal forma los derechos de los trabajadores, quienes sistem�ticamente, en virtud de esto, pierden la capacidad de defenderlos. Por cierto, ello obliga a votar favorablemente la iniciativa, por cuanto se trata de ordenar m�nimamente un caos. El se�or BOENINGER.- �Me permite una interrupci�n, se�or Senador? El se�or �VILA.- Si el tiempo lo permite, ning�n problema. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Est� acabando su tiempo, se�or Senador. El se�or BOENINGER.- Es una mera aclaraci�n, se�or Presidente. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Con la venia del Senador se�or �vila, puede hacerla. El se�or BOENINGER.- �Es que Su Se�or�a no ha finalizado! El se�or �VILA.- Prefiero concluir, se�or Presidente. Me sorprende que el Ministerio del ramo reaccione en forma tan tard�a frente este cuadro francamente preocupante. Quiz�s debi� concebir un tipo de legislaci�n m�s eficaz para impedir que se consolide un panorama ca�tico desde el punto de vista de los derechos de los trabajadores. No s� si a estas alturas es posible hacer algo para reparar el da�o ya causado. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Gazmuri. El se�or GAZMURI.- Se�or Presidente, votar� favorablemente en general el proyecto, porque concuerdo en que es indispensable regular la contrataci�n de servicios y trabajos supuestamente transitorios. Tengo un conjunto de observaciones que las har� presentes durante la discusi�n particular. Pienso que el tema central radica en determinar con mucha precisi�n qu� son servicios transitorios. La experiencia m�s directa que conozco en estas materias, que es la de la Regi�n del Maule que represento en el Senado, indica que este sistema de contrataci�n se ha usado de manera muy extensiva, b�sicamente en empresas del sector agr�cola donde el car�cter transitorio es lo esencial del giro y no tiene que ver con las modalidades de un mercado laboral moderno, sino con una producci�n todav�a primaria y con un ciclo agr�cola que a su vez est� determinado por una cadena clim�tica. Entiendo que en otras circunstancias, dentro de una econom�a moderna, pueden existir necesidades transitorias y excepcionales de provisi�n de mano de obra. Y frente a esas condiciones de excepci�n, las empresas establecen un contrato v�a terceros. Sin embargo, cuando esta modalidad de contrataci�n se extiende a la mano de obra -entre comillas- normal, sistem�tica y permanente de una empresa, lo �nico que se consigue es debilitar de manera muy arbitraria, a mi juicio, las responsabilidades y las relaciones entre empleador y trabajador. Entonces, tengo la impresi�n de que se trata de aspectos conceptuales fundamentales. De lo contrario, estaremos actuando en nombre de una malentendida modernizaci�n del mercado del trabajo y de una equivocada transformaci�n de la actividad econ�mica, esquemas que ya conocemos y que se han tornado casi en un lugar com�n. O sea, claramente ya no vivimos en las cadenas industriales de la revoluci�n industrial ni en la gran usina de los a�os 60, sometidas a oferta fija, mercados protegidos y demandas previsibles. Adem�s, es evidente que el avance tecnol�gico es mucho m�s acelerado que antes. Por lo tanto, estos cambios modifican de manera sustantiva el mercado del empleo y afectan radicalmente la vieja idea del trabajo permanente realizado por muchos a�os en la misma empresa, lo cual sigue ocurriendo en algunas ramas, aunque no todo es igual y existe mucha diferenciaci�n. Me preocupa el abuso en la utilizaci�n de estas formas de contrataci�n donde no advierto la necesidad de adaptar las empresas a las complejidades de la producci�n moderna, sino b�sicamente la tendencia a debilitar el v�nculo entre empleador y trabajador y, al mismo tiempo, a menoscabar de una u otra manera los derechos laborales, particularmente los relativos a la organizaci�n del empleo que, en mi opini�n, representan un elemento central. No s�lo en el sector agr�cola sino tambi�n en modernas empresas de mi Regi�n -algunas de ellas importantes elaboradoras de madera- he visto que en la misma l�nea de producci�n, no en distintas funciones, existen tres tipos de titulares de contratos. Sin embargo, �stos se hallan sujetos a gesti�n y mando �nicos y no existe obligaci�n productiva de quien supuestamente genera el contrato. Ello carece de toda justificaci�n desde el punto de vista de las exigencias de la empresa y promueve claramente formas de vinculaci�n contractual que tienden a diluir la responsabilidad del empleador o del que contrata mano de obra permanente, no excepcional y en ese sentido no transitoria. Pienso que si logramos clarificar ese concepto podremos llegar a una ley razonable. Si no, aumentaremos la confusi�n y la desprotecci�n en el mundo del trabajo. El se�or BOENINGER.- �Me permite una aclaraci�n, se�or Presidente? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra, Su Se�or�a. El se�or BOENINGER.- Se�or Presidente, ser� muy breve. Para los fines de la historia del debate, simplemente quiero hacer una aclaraci�n ante lo se�alado por el Honorable se�or �vila, que no tiene que ver con lo sustantivo de su exposici�n al comienzo, y que aludi� a lo que yo hab�a manifestado con anterioridad. No he sostenido que sea esencial la provisi�n de trabajadores temporales en las organizaciones laborales contempor�neas. Se�al� que los fen�menos de subcontrataci�n y externalizaci�n s� lo son, pero en empresas que cuentan con trabajadores permanentes. Lo que afirm� respecto de las empresas de trabajo temporal es que �stas tienen un nicho en la econom�a contempor�nea. Pero no me he referido a eso como algo esencial. Gracias, se�or Presidente. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra la Senadora se�ora Matthei. La se�ora MATTHEI.- Se�or Presidente, cada vez que escucho debates sobre modificaciones al C�digo del Trabajo y problemas laborales, y oigo encendidos discursos, como los de ahora, de se�ores Senadores de la Concertaci�n, me pregunto, �por qu� nunca alegan de igual forma respecto de las situaciones que se presentan en el sector p�blico? �Es que acaso solamente los trabajadores de las empresas privadas tienen derechos? �Es que acaso s�lo los empresarios son malos empleadores? �Alguien conoce la realidad del sector p�blico? �Alguien sabe, por ejemplo, que en los hospitales hay trabajadores que pertenecen a la planta, otros est�n a contrata y el resto a honorarios? Aquellos que perciben honorarios carecen de previsi�n y no se les cotiza. Tampoco tienen derecho a licencias m�dicas cuando se enferman, menos a prenatal y posnatal. S�lo en la Regi�n que represento, en los hospitales hay 250 trabajadores en esas condiciones. �Pero de ellos, no se dice nada! �Y es el Gobierno de ustedes, Honorables colegas, el que permite tal situaci�n! Pero ante eso, hay una indiferencia absoluta. Les da lo mismo. �Porque de lo �nico que se trata aqu� es de denostar a los empresarios y de afirmar que hay malos empresarios y qu� se yo! �El peor de todos ellos, sin embargo, en cuanto a contrataci�n, es el Estado! �Es en ese �mbito donde m�s dificultades se registran, donde m�s abusos se cometen, donde, por otra parte, todo se halla distorsionado! Veamos, por ejemplo, cu�les son los turnos de trabajo de los carabineros. �Los que se les imponen para desempe�arse en la calle ser�an ilegales en el sector privado! Si alg�n empresario osara fijarle ese horario a un empleado, probablemente le clausurar�an el establecimiento, adem�s de taparlo de multas previamente. �Alguien ha observado cu�l es el r�gimen laboral de quienes cumplen el tercer turno en los hospitales? No lo conocen. Y, adem�s, les da lo mismo. Porque, en realidad, nunca los ha guiado de verdad la idea de proteger a los trabajadores. Lo �nico que los inspira es c�mo se puede fregar al empresario. Han seguido siempre la l�gica de que los trabajadores son los buenos y los empresarios, los malos. Y cuando en el Estado se act�a mal les da lo mismo. �Nunca he visto a alguien de la Concertaci�n �salvo al Honorable se�or Parra, cuando act�an las comisiones revisoras de cuentas, quien efectivamente ha puesto el dedo en la llaga- alegar porque en el mismo Senado hemos tenido a personas en situaci�n absolutamente ilegal! �La ley de contrataciones no se cumple en el sector p�blico, en ning�n Ministerio y en ninguna repartici�n! �Y qu� han hecho las Secretar�as de Estado? Desgraciadamente, la Direcci�n del Trabajo no puede intervenir, porque, si ello fuera posible, la verdad es que las multas que deber�a cursar ser�an enormes. Entonces, estoy feliz de que se legisle bien respecto de la situaci�n de los temporeros, pero alguna vez debe aplicarse la misma vara al sector p�blico. Porque resulta que este �ltimo se encuentra lleno de gente a honorarios. �As� se la puede contratar y echar cuando da la gana, sin pagar ni un peso de indemnizaci�n! Y es lo que sucede a cada rato. �Algunas de esas personas no se atreven a levantar la voz! �Y lo he visto en el INDAP! Las obligan, a veces, a hacer cosas absolutamente ilegales. �Y c�mo pueden responder negativamente a un llamado telef�nico en que las instruyen en ese sentido cuando saben que si lo hacen no les renuevan el contrato el 30 de diciembre? �Porque eso es lo que est� ocurriendo en el sector p�blico! La verdad es que las diferencias son enormes. En el sector privado, los aguinaldos deben tributar. En el sector p�blico, no. Se pueden dar miles de ejemplos al respecto. Y quisiera que alguna vez, se�or Presidente, nos preocup�ramos realmente de los trabajadores como tales. Porque a la Concertaci�n lo �nico que le interesa son aquellos que lo pasan mal en el sector privado. Los que lo pasan mal en el sector p�blico �que son muchos m�s- le dan lo mismo. �Me gustar�a que alguna vez rigieran las mismas normas! Porque siempre se quiere que cuenten con m�s estabilidad los que se desempe�an en el sector privado, que no los puedan echar, etc�tera. Pero en el sector p�blico aumenta cada vez m�s la proporci�n de personas a contrata o a honorarios. �Y a ellas se las puede despedir en cualquier minuto y sin pagarles ni un peso de indemnizaci�n, a diferencia del otro caso! El doble est�ndar con que se tratan tantas cosas ac� me asquea bastante, a veces. Creo, adem�s, que siempre se recurre a la visi�n de que los trabajadores son los buenos y los empresarios, los malos. Pero, por mi parte, tambi�n he visto malos trabajadores. �Y qu� se ha hecho al respecto? Nada. No se les penaliza de ninguna manera. Y tambi�n los hay. Porque gente buena, gente mala, gente mediocre, gente bienintencionada, gente malintencionada existe en todos los �mbitos: en todas las razas, en todas las religiones, en todas las profesiones, en todas las actividades. Tambi�n entre los trabajadores y tambi�n entre los empresarios. As� que espero, se�or Presidente, que alguna vez podamos sostener en el Senado alguna discusi�n un poco m�s seria y menos cargada ideol�gicamente. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Ruiz. El se�or RUIZ (don Jos�).- Se�or Presidente, no contestar� todo lo planteado por la Senadora se�ora Matthei, pero s� consignar� que si hubiera escuchado mis intervenciones cada vez que nos ocupamos en el tema laboral se habr�a dado cuenta de que me he referido en numerosas ocasiones a los funcionarios p�blicos. Y he afirmado en m�s de una oportunidad que la modernizaci�n del Estado no s�lo pasa por introducir tecnolog�a, m�todos modernos en comunicaciones, sino que tambi�n significa mejorar la calidad de sus servidores y la parte econ�mica. M�s a�n, he presentado iniciativas en el Congreso para superar algunas situaciones de dicho personal, no obstante las escasas atribuciones de que disponemos los Parlamentarios en ese aspecto. Por lo tanto, ... La se�ora MATTHEI.- �Alguna de ellas se ha aprobado? El se�or RUIZ (don Jos�).- Estoy haciendo uso de la palabra ... El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Ruego evitar los di�logos. Pido al se�or Senador que se dirija a la Mesa. El se�or RUIZ (don Jos�).- Se acaba de formular una cr�tica en el sentido de que nosotros no defendemos a los funcionarios p�blicos. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Le reitero que se dirija a la Mesa, Su Se�or�a. El se�or RUIZ (don Jos�).- Por su intermedio, se�or Presidente, aclaro a la se�ora Senadora que me he preocupado de ese sector. Y la prueba de ello es que �ste me lo ha reconocido en p�blico y en privado. Y deseo recordar, tambi�n, que cuando los trabajadores son malos las empresas los echan. �Los echan! �As� de simple! �Por favor, si a veces los echan aunque no sean malos! Ello, por una discusi�n con el empleador, y pierden su trabajo porque le cayeron mal. �Hay trabajadores malos? Claro que los hay. Pero se les castiga. �Y c�mo se castiga al mal empresario? Entonces, deben existir leyes que entreguen resguardo a los trabajadores, pero que tambi�n lo proporcionen a trav�s de la autoridad p�blica. Y subrayo que, efectivamente, el incumplimiento de la legislaci�n laboral es el que ha llevado a la cuesti�n en an�lisis. Hoy, ese ordenamiento no permite que un empleador contrate a trav�s de terceros para su faena. Pero ello se hace. Por lo tanto, la pregunta es qu� se debe modificar en el C�digo del Trabajo para que cese esa realidad. Y despu�s empezaremos a abordar temas adicionales, ya que, desgraciadamente, no se est� legislando en otro sentido. Lo que se intenta, de alguna manera, es regularizar una modalidad que existe de hecho, para que, con restricciones, se pueda operar legalmente. Me inquieta lo que he escuchado en las dos sesiones en que se ha discutido el proyecto, porque justamente ante algunas de las normas que nosotros hemos aprobado -que de alguna manera ponen coto para que la situaci�n en estudio se generalice dentro de la actividad econ�mica-, algunos se�ores Senadores estiman leg�timamente -no tienen por qu� no considerarlo as�, y pueden opinar de otra manera tambi�n-, que se debe tender, por el contrario, a que lo expuesto constituya algo com�n y corriente dentro de la relaci�n laboral y a que se trate de una pr�ctica m�s habitual dentro de la econom�a. Por mi parte, pienso que deben contemplarse todas las restricciones necesarias, que la posibilidad en examen debe acotarse exclusivamente a las faenas que la requieren. El Senador se�or Gazmuri, por ejemplo, hac�a referencia a labores transitorias. Efectivamente, el C�digo del Trabajo, como lo dije en mi intervenci�n de la sesi�n anterior, contiene un conjunto de normas que permiten a un empleador contratar por un tiempo determinado. Es decir, si ello se quiere hacer para un reemplazo por un feriado o por una emergencia en la empresa, �ste perfectamente puede llamar y contratar directamente trabajadores por el per�odo que sea necesario. Lo que sucede es que ya casi medio mill�n de personas proporcionadas por terceros laboran vulnerando las disposiciones del C�digo y tratamos de ver c�mo enfrentamos esa realidad. Y me parece que la forma en que lo estamos haciendo, desgraciadamente, no constituir� la soluci�n. Si hoy no se cumple la normativa vigente, ma�ana, cuando se dicte la iniciativa en estudio, ocurrir� lo mismo. Y un n�mero creciente de trabajadores actuar� al margen de la ley. Por ello, quisiera subrayar que el asunto m�s grave dice relaci�n a las atribuciones para los organismos fiscalizadores, como la Direcci�n del Trabajo; a disposiciones claras que establezcan las facultades que deben ejercer los inspectores del trabajo; y a que no suceda lo que hoy cuando, despu�s de la fiscalizaci�n de la Direcci�n del Trabajo, el empresario apela, llega a los tribunales de justicia y �stos fallan a su favor, en circunstancias de que la ley no permite contratar trabajadores a trav�s de terceros. Entonces, �sa es la dificultad. Y ella, desgraciadamente, no viene resuelta en el proyecto. Ojal� que lo anterior se solucione cuando rija un sistema distinto de procedimiento laboral y que se cuente con elementos que permitan a los trabajadores una buena capacidad de defensa. En la actualidad, conforme a la normativa en vigor y debido al sistema, los trabajadores se hallan en la indefensi�n. Por eso, m�s que nuevas normas en materia laboral, considero que debe respetarse la ley. Si tuvi�ramos tal capacidad, numerosos conflictos se solucionar�an. Hoy d�a recib� a dirigentes de choferes de buses interurbanos, que trabajan gran cantidad de horas. �Cu�les son los controles que hay al respecto? Resulta que los mecanismos establecidos en su oportunidad entre la Direcci�n del Trabajo y las empresas los manejan s�lo estas �ltimas, sin que el referido organismo pueda fiscalizarlos de manera alguna. Y, por lo tanto, no son acatados. �sa es una de las causas de los accidentes en las carreteras. Es decir, necesitamos que se cumpla la ley vigente. Cuando �sta se respete por moros y cristianos, por empresarios y trabajadores, ah� reci�n deber�amos analizar las normativas por modificar, para adecuarnos efectivamente a la legislaci�n del futuro. En mi opini�n, ese tipo de preceptivas legales van a precarizar el empleo en el momento cuando el pa�s est� suscribiendo los respectivos convenios internacionales, lo que ser� complicado, pues las empresas externas van a operar en nuestro medio y sus presiones para no cumplir las reglas internas ser�n superiores a las vigentes. Se�or Presidente, el Senador se�or �vila me solicita una interrupci�n. El se�or �VILA.- S�lo quince segundos. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- S�, porque s�lo le restan dieciocho al Honorable se�or Ruiz. El se�or �VILA.- Quiero decir simplemente que los trabajadores agradecen cuando uno los defiende; los empresarios tambi�n hacen lo propio, a su modo. �Gracias! El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Pr�cticamente ha terminado el tiempo del se�or Senador. Tiene la palabra el se�or Ministro. El se�or SOLARI (Ministro del Trabajo y Previsi�n Social).- Se�or Presidente, quiero responder algunos comentarios de la Senadora se�ora Matthei, sin ning�n prop�sito ideol�gico. Durante el presente a�o, en esta misma Sala se discuti� sobre dos iniciativas vinculadas a los trabajadores del sector p�blico. La primera referente al nuevo trato laboral, y la segunda, a la renovaci�n de la institucionalidad relacionada con el cuerpo directivo para la alta funci�n p�blica. Ambas ten�an el prop�sito de profesionalizar y estabilizar la Administraci�n P�blica chilena y establecer pol�ticas muy activas y potentes en materia de recursos humanos. En primer t�rmino, se trata de permitir que los trabajadores progresen en sus trayectorias laborales en el sector p�blico; y por otra parte, de resolver los asuntos planteados ahora por la se�ora Senadora. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se�or Ministro, la Honorable se�ora Matthei le pide una interrupci�n. El se�or SOLARI (Ministro del Trabajo y Previsi�n Social).- Por cierto, se�or Presidente. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. La se�ora MATTHEI.- Recuerdo que estuve muy a favor de los mencionados proyectos de ley; pero, en realidad, debemos convenir en que ellos fueron m�s bien una reacci�n frente a la corrupci�n y una manera de contar con personal id�neo para disminuir los problemas relativos a horarios, horas extraordinarias, falta de previsi�n y la precariedad que afecta a los servidores p�blicos. El se�or SOLARI (Ministro del Trabajo y Previsi�n Social).- Se�or Presidente, sin perjuicio del origen que pudo tener el debate, en verdad la ley sobre nuevo trato laboral atiende de manera muy exacta los temas expuestos por la se�ora Senadora. Claramente, favorece la estabilidad en el empleo de esos funcionarios; reduce de modo significativo el n�mero de trabajadores sujetos a formas contractuales que no se la brindan; permite combinar la modernizaci�n del sector p�blico con el desarrollo de una carrera profesional al interior del mismo; establece con claridad -as� lo manifest� el Ministro se�or Eyzaguirre al presentar la cuenta de la Hacienda P�blica- amplias pol�ticas de est�mulo tanto individuales como colectivas, pr�cticamente en todas las �reas de la acci�n del Estado. Los trabajadores del sector p�blico han sido los que m�s reajustes reales han recibido durante los �ltimos catorce a�os en Chile y tienen garantizados amplios beneficios. Por tanto, me parece que se encuentra en plena vigencia la posibilidad de combinar el proceso de mejoramiento del sector con la adecuada capacidad de adaptaci�n de los servicios. No vine preparado para esta discusi�n, pero considero que 2003 no es el a�o en que se pueda formular tal tipo de comentarios, porque, probablemente, tales proyectos representan los principales impulsos que se vienen realizando desde 1990 para lograr una nueva condici�n respecto de quienes laboran en el �rea p�blica. En efecto, el n�mero de trabajadores a honorarios se ha reducido en los servicios y Ministerios en proporci�n al total existente. Lo mismo ocurre con los a contrata. Lo anterior se debi� a iniciativas como la que est� en debate, sino de protocolos suscritos junto con la aprobaci�n de los tres �ltimos proyectos de Ley de Presupuestos. Tambi�n es el resultado de los intercambios de opini�n acerca de los contratos a honorarios y varias otras materias, con compromisos de reducci�n de personal para mayor estabilidad laboral. Lamento discrepar del juicio de la se�ora Senadora sobre la materia. En todo caso, el proyecto de ley en discusi�n se refiere a otra tem�tica, que no contradice lo vigente, pues alude a un asunto que carece hoy d�a de soluci�n en el C�digo del Trabajo. No hemos venido ac� a inventar un problema, sino a resolver una confusa situaci�n en ese cuerpo normativo, relativo a una cantidad importante de personas que se desempe�an en condiciones contractuales que no tienen la misma solidez o garant�as que el resto de los trabajadores. Esto se produce, porque laboran de modo circunstancial, temporal. En Chile existe la temporalidad laboral. Es una realidad que no necesariamente se vincula -�ste es un juicio que no requiere demasiados comentarios- con el mercado ni con la globalizaci�n, sino con los ciclos clim�ticos y econ�micos muy marcados de la agricultura nacional y tambi�n de las principales actividades generadoras de empleo, como la construcci�n y el comercio. Por lo tanto, se necesita atender la situaci�n laboral respecto de ciertos trabajadores, a fin de no dejarlos en situaci�n de desequilibrio, de desprotecci�n y de total desamparo. El prop�sito de la iniciativa en debate es, por una parte, abordar un aspecto propio de una econom�a como la nuestra; y por otra, que los nuevos preceptos tengan su contrapartida en materia de protecci�n laboral. Por cierto, nuestro deber es legislar al respecto �no creo apropiado que el Parlamento eluda su obligaci�n sobre el particular-, lo que el Gobierno considera muy necesario. Ello precisamente, porque los tratados de libre comercio significan nuevas ocupaciones. �se es el prop�sito principal de estas iniciativas, que requieren a la vez el cumplimiento adecuado de la ley. El proyecto en debate no se aparta para nada del objetivo de esos instrumentos internacionales, los que generar�n condiciones de empleo que necesitan solidez y legitimidad legal-laboral. �se es el sentido de las normativas que hemos sometido a la consideraci�n del Senado. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Como no hay otros se�ores Senadores inscritos, queda terminada la segunda discusi�n. Se proceder� a votar. La iniciativa requiere para su aprobaci�n el qu�rum de 26 votos. En votaci�n la idea de legislar. --(Durante la votaci�n). El se�or PARRA.- Se�or Presidente, cuando me correspondi� hacer la presentaci�n de este proyecto en la Sala, expres� las razones que llevaron a la Comisi�n de Trabajo y a m� como miembro de ella a aprobarlo en general. No volver� a referirme a esos puntos; pero s� deseo hacer tres reflexiones que me parecen necesarias. La primera es que, con demasiada frecuencia -quiz�s, all� reside el fundamento de la apreciaci�n escuchada a la Senadora se�ora Matthei-, el trabajo es visto s�lo como un factor de costo, olvid�ndose de su dimensi�n humana y social, lo que a uno lo rebela. Esa condici�n es exigible tanto en el �mbito privado como en el p�blico. Quiz�s ning�n Senador desee que el trabajo se realice en condiciones de inestabilidad y de precariedad. Ojal� todos nos comprometi�ramos a que en el sector p�blico, con plantas reales, no sea necesario utilizar los mecanismos de la contrata y del honorario. Felizmente, en esa esfera no se da la modalidad de acci�n laboral a que se refiere la iniciativa en an�lisis. Viviane Forrester, gran escritora francesa contempor�nea, en su obra "El Horror Econ�mico", describe como rasgo sobresaliente de la llamada "modernidad" el estar avanzando a una econom�a sin trabajo. Y una econom�a de esas caracter�sticas es esencialmente deshumanizada, socialmente peligrosa, lo que, sin duda, cambia el rumbo de la historia como hasta aqu� la hemos conocido. Por otro lado, a mi juicio, el proyecto en debate es indispensable, pero en los t�rminos en que se halla planteado. Es decir, aceptando esa modalidad de contrataci�n con un car�cter marcadamente excepcional y, desde luego, cuidando que ella no constituya una nueva fuente de abuso y de precarizaci�n del trabajo. Debe tenerse muy presente que es un error -en el cual desgraciadamente se ha incurrido en varias intervenciones- el confundir dicha modalidad de contrataci�n de trabajo con la llamada "externalizaci�n de servicios". Son cosas totalmente distintas. Respecto de la segunda, no se requiere legislaci�n especial. Bastan las normas actuales del C�digo del Trabajo. Aqu� estamos en presencia de empresas que contratan trabajadores para ponerlos a disposici�n de un tercero en cuyos establecimientos o faenas prestan servicios laborales, d�ndose origen a la denominada "triangulaci�n", la cual presenta varios aspectos peligrosos. Y eso es, precisamente, lo que justifica el car�cter excepcional que este tipo de contrato debe tener. Por esas razones, voto a favor. El se�or HOFFMANN (Secretario).- �Alg�n se�or Senador no ha emitido su voto? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Terminada la votaci�n. --Se aprueba en general el proyecto (26 votos contra 1 y 2 abstenciones). Votaron por la afirmativa los se�ores Arancibia, Boeninger, Bombal, Canessa, Coloma, Cordero, Fern�ndez, Flores, Frei (do�a Carmen), Garc�a, Gazmuri, Horvath, Lavandero, Mart�nez, Matthei, Mu�oz Barra, Naranjo, Novoa, N��ez, Orpis, Parra, Pizarro, Prokurica, Sabag, Stange y Zald�var (don Andr�s). Vot� por la negativa el se�or Ruiz (don Jos�). Se abstuvieron los se�ores �vila y Ruiz-Esquide. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- La Mesa propone fijar plazo para presentar indicaciones hasta el 3 de noviembre, a las 12. Acordado. GARANT�AS PARA CUMPLIMIENTO DE CONTRATO DE PROMESA DE COMPRAVENTA DE INMUEBLES El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la Ley General de Urbanismo y Construcciones, en lo relativo al contrato de promesa de compraventa de inmuebles y criminaliza conducta constitutiva de estafa en el art�culo 470 del C�digo Penal, con informes de las Comisiones de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, y de Vivienda y Urbanismo. --Los antecedentes sobre el proyecto (2694-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 3�, en 10 de junio de 2003. Informes de Comisi�n: Constituci�n, sesi�n 30�, en 2 de septiembre de 2003. Vivienda, sesi�n 30�, en 2 de septiembre de 2003. Discusi�n: Sesi�n 35�, en 16 de septiembre de 2003 (queda para segunda discusi�n). El se�or HOFFMANN (Secretario).- La relaci�n de esta iniciativa se realiz� el 16 de septiembre del a�o en curso. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En la discusi�n general, tiene la palabra el Honorable se�or Prokurica. El se�or PROKURICA.- Se�or Presidente, el proyecto que nos ocupa tiene por objeto obligar a las empresas inmobiliarias o constructoras que edifiquen bienes ra�ces destinados a viviendas, locales comerciales u oficinas, que los caucionen a favor de los promitentes compradores, por un valor igual a la parte del precio del bien ra�z entregado por �ste y que se encuentre previamente determinado en el respectivo contrato de promesa de compraventa. El prop�sito de la moci�n es solucionar la situaci�n que ha afectado a muchas personas que, por ver cumplido su anhelo de la casa propia, han celebrado contratos de promesa de compraventa -que en varias oportunidades ascienden al total del valor de la compraventa prometida- y no cuentan con una cauci�n que los respalde si la empresa cae en insolvencia. De acuerdo con investigaciones practicadas por la justicia ordinaria, se han producido casos de insolvencia artificial, por traspaso de fondos recaudados por esas promesas de compraventa a otros proyectos a cargo de inmobiliarias distintas, todo lo cual perjudica a los promitentes compradores ante tales situaciones. Vale decir, se persigue proteger a quienes compran bienes ra�ces "en verde" -como se denomina habitualmente-, estableci�ndose una garant�a a su favor, de manera que no pierdan sus ahorros. Para tal efecto, se agrega un art�culo 138 bis en la Ley General de Urbanismo y Construcciones, donde se incorpora la obligaci�n de caucionar los contratos de promesa de compraventa, mediante p�liza u otro instrumento similar, aceptado por el comprador. Esta garant�a quedar� incorporada al correspondiente contrato. La falta de cumplimiento de dicha obligaci�n importar� la comisi�n del delito de estafa que prev� el art�culo 470 y sanciona el art�culo 467, ambos del C�digo Penal. Si bien el proyecto en an�lisis tiene que perfeccionarse durante su discusi�n en particular, consideramos que se debe aprobar la idea de legislar, dado el objetivo que pretende, esto es, proteger a los ahorrantes que desean adquirir viviendas propias, locales comerciales u oficinas, confiando plenamente sus recursos a empresas inmobiliarias o constructoras, sin una contraprestaci�n que establezca un equilibrio entre las partes contratantes. Por ello, pido a los se�ores Senadores que aprobemos en general esta iniciativa. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, el proyecto en debate fue aprobado por unanimidad tanto en la Comisi�n de Vivienda y Urbanismo como en la de Constituci�n, Legislaci�n y Justicia. La iniciativa, que acogi� la C�mara de Diputados, corresponde a una moci�n que, como se se�al�, tiene por objeto caucionar las ventas en verde de las casas o departamentos, donde, muchas veces, los compradores pierden todo el pie, porque no existe una medida que los resguarde. Sin embargo, hicimos todas las consultas del caso a los organismos pertinentes, partiendo por el Ministerio de Vivienda, cuyo representante manifest� estar de acuerdo con la idea planteada por el proyecto; despu�s invitamos al Presidente de la C�mara Nacional de Servicios Inmobiliarios; al Presidente de la Asociaci�n de Corredores de Propiedades, don Carlos Avil�s; a don Crist�bal Prado, Secretario Ejecutivo de los Comit�s de Vivienda de la C�mara Chilena de la Construcci�n, y al se�or Ministro de Justicia, todos los cuales expresaron su conformidad con la iniciativa, la que ha sido considerada en diversas instancias, sin ning�n tipo de problemas. S� que algunos se�ores Parlamentarios tienen cierto grado de aprensi�n en el sentido de que esta medida podr�a dificultar la venta de viviendas, pero en la Comisi�n no lo estimamos as�. De todas formas, como ahora corresponde pronunciarse sobre la idea de legislar, si alg�n se�or Senador tuviera dudas al respecto, puede presentar las indicaciones del caso o formular las precisiones correspondientes para que sean analizadas oportunamente. Todos hemos sido testigos de que miles de personas que hab�an estado ahorrando para postular a la compra de una vivienda -algunas incluso la pagaron al contado, como ocurri� en el caso de HABITACOOP- perdieron toda su plata. Se trata, en consecuencia, de brindar un resguardo a gente que nunca ha estado comprometida en negocios y que ha logrado juntar uno o dos millones de pesos para entregarlos como pie para la adquisici�n de una vivienda. Y resulta que hay inescrupulosos, a quienes por sus numerosas deudas les embargan sus pertenencias, que no tienen c�mo responder a familias que, peso a peso han juntado un monto y que lo han perdido a manos de quienes muchas veces no han llevado bien sus finanzas. Como dije, todos hemos encontrado bueno el proyecto, pero si existieren dudas, como ahora s�lo se aprobar� en general, disponemos del plazo suficiente para hacer llegar las indicaciones correspondientes o para invitar a expertos que las aclaren. En todo caso, pido que la iniciativa se apruebe en general, tal como lo hicieron ambas Comisiones. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. --Se aprueba en general el proyecto, con la abstenci�n del Senador se�or Orpis. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Propongo como plazo para presentar indicaciones el lunes 10 de noviembre, a las 12. --As� se acuerda. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Corresponde analizar la iniciativa relativa al descanso dominical. Sugiero limitarnos a la relaci�n del proyecto y dejar pendiente su discusi�n para ma�ana. No hay acuerdo. En consecuencia, la iniciativa se tratar� ma�ana. Se levanta la sesi�n. --Se levant� a las 18:8. Osvaldo Palominos Tolosa, Jefe de la Redacci�n subrogante