. . . . . . . . . . . . . . . . " El se\u00F1or SABAG.- Pido la palabra. \n \nEl se\u00F1or PARETO (Presidente).- Tiene la palabra el se\u00F1or Sabag. \n \nEl se\u00F1or SABAG.- Se\u00F1or Presidente, en realidad, otro grupo importante de trabajadores del pa\u00EDs ya tambi\u00E9n hab\u00EDa pedido la censura al Ministro del Trabajo. Me refiero a los trabajadores de Huachipato. Los trabajadores de CAP presentaron su pliego de peticiones a la empresa un mes antes de la fecha de vencimiento del convenio anterior, 1\u00BA de abril del a\u00F1o 1978, de acuerdo con lo convenido en pliego presentado en a\u00F1os anteriores. Se cumplieron ledos los tr\u00E1mites legales y por no haber acuerdo de conciliaci\u00F3n, el d\u00EDa 7 de abril de 1973 los trabajadores declararon la huelga legal. Con la huelga hecha efectiva, hubo peque\u00F1os ofrecimientos, que m\u00E1s que soluciones, lograron crear m\u00E1s dificultades, dada la m\u00E1quina publicitaria del Gobierno y de los partidarios de la UP, para desprestigiar a los trabajadores, tratando de hacerles aparecer como antipatriotas ante el resto de los trabajadores de la provincia y del pa\u00EDs. \nEl principal propulsor de esta situaci\u00F3n fue el propio Ministro del Trabajo, ya que tuvo tiempo para asistir a diversos actos pol\u00EDticos, incluso en la misma provincia de Concepci\u00F3n, y no se preocup\u00F3 mayormente de que una empresa de la importancia de la CAP estuviera paralizada. \nUn d\u00EDa se supo, por la prensa, que el se\u00F1or Figueroa se reunir\u00EDa tres d\u00EDas m\u00E1s tarde con los trabajadores en conflicto, para llevarles un nuevo ofrecimiento. Pese a que \u00E9l fij\u00F3 la hora y el d\u00EDa, lleg\u00F3 a dicha reuni\u00F3n tres horas despu\u00E9s de lo anunciado, protegido por unos doscientos matones a sueldo y m\u00E1s de cien carabineros del Grupo M\u00F3vil vestidos de civil, acompa\u00F1ado por el Ministro Secretario General de Gobierno, se\u00F1or An\u00EDbal Palma, y, por supuesto, con los dirigentes de la Unidad Popular y de los dirigentes sindicales de la empresa a que pertenecen a los mismos partidos. \nEl Presidente del Sindicato \u00DAnico, se\u00F1or Osvaldo Cerda, dio por abierta la asamblea de m\u00E1s de tres mil trabajadores, y el Secretario dio lectura a la nueva proposici\u00F3n de arreglo. Con sorpresa, terminada la lectura de ese otro ofrecimiento, que no era tal, sino lo que ya hab\u00EDa ofrecido, se vot\u00F3 la vuelta al trabajo. Un diez por ciento vot\u00F3 por la vuelta y un noventa por ciento en contra de ella; pero, con un desparpajo incre\u00EDble, el se\u00F1or Cerda dijo: Se vuelve al trabajo. Se levanta la sesi\u00F3n. De inmediato, el se\u00F1or Cerda y el se\u00F1or Figueroa, en compa\u00F1\u00EDa de los dirigentes de la Unidad Popular, que son mayor\u00EDa, salieron arrancando como ratones de cuneta protegidos por su GAP propio, dejando descabezado el movimiento. Y las radioemisoras, inmediatamente, empezaron a llamar a los trabajadores a reintegrarse al trabajo, porque el conflicto hab\u00EDa terminado. \nNo se recuerda en la historia sindical que Ministro alguno haya planificado ni avalado con su presencia una actitud que, de hecho, importa una alta traici\u00F3n a un sector de trabajadores chilenos. \nEl se\u00F1or Ministro, que debe ser el primero en respetar el derecho a la negociaci\u00F3n colectiva contemplado en la ley y la Constituci\u00F3n, permiti\u00F3 la perpetraci\u00F3n de un acto semejante, en circunstancias que se trataba de un conflicto legalmente presentado y discutido y que estaba en un tr\u00E1mite legal, como es la huelga, \u00FAnica herramienta de los trabajadores para conseguir las conquistas por las que, por a\u00F1os, vienen luchando en nuestro pa\u00EDs. \nPosteriormente, los trabajadores, indignados, reunieron m\u00E1s de tres mil firmas para censurar a los dirigentes traidores; y, ante Notario, se entreg\u00F3 dicha censura al presidente y al inspector del trabajo correspondiente. Hasta hoy d\u00EDa, la Inspecci\u00F3n del Trabajo ha tramitado a los trabajadores, pues no ha considerado dicha petici\u00F3n. Mientras tanto, se est\u00E1 persiguiendo a los trabajadores utilizando los recursos ya conocidos en todas las empresas llamadas del \u00E1rea social: amenazas, despidos, etc\u00E9tera. \nPor eso, la acusaci\u00F3n constitucional contra el Ministro se\u00F1or Figueroa se justifica plenamente. El, que fue presidente nacional de la CUT y reelegido, la \u00FAltima vez, en una muy dudosa elecci\u00F3n, pues todos sabemos que los resultados fueron robados pr\u00E1cticamente a los dirigentes de la Democracia Cristiana, se convierte en el peor Ministro del Trabajo de la historia sindical chilena, en el peor reaccionario y traidor, condiciones propias de los resentidos y amargados que gobiernan este pa\u00EDs. \nEn un acontecimiento tan trascendental para un sindicato nacional poderos\u00EDsimo, como es la realizaci\u00F3n de un acto eleccionario relacionado con el eventual t\u00E9rmino de una huelga, la votaci\u00F3n, por lo menos, debiera ser secreta, sobre la base de que les trabajadores presenten su tarjeta de pago u otro sistema que d\u00E9 realmente garant\u00EDas a todos los sectores. \nPor las razones expresadas, voto afirmativamente esta acusaci\u00F3n constitucional. \n \n " . . . . . .