-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/2218
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp21
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp17
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp16
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp20
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp14
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp19
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp15
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3-ds6-sp18
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- rdf:type = bcnres:Participacion
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/temporal/1292
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/3414
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/temporal/1292
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/15
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/177
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/2864
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/2435
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/677
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/3123
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/2218
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/322
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/957
- rdf:value = " El señor PRADO.-
Creo que pocas preocupaciones puede haber de más importancia y seriedad que un debate público acerca de un hecho como el que es objeto de esta sesión, que nosotros queremos que se trate con mucha seriedad. Y por eso nos habría gustado la presencia del señor Ministro del Interior. En todo caso, quisiera. ..
El señor LUENGO.-
Pueda concurrir a otra sesión, y lo dice. Podemos acordarla ahora mismo para que venga el señor Ministro en unos días más.
El señor PRADO.-
Ojalá que sea así.
El señor FONCEA.- Nosotros no podemos estar a disposición de un Ministro.
El señor LUENGO.- Si lo acuerda la Sala, es obligación de Su Señoría concurrir a la sesión.
El señor AYLWIN (Presidente).- Ruego a los señores Senadores evitar los diálogos.
El señor PRADO.-
Rogaría al Senador señor Luengo que hiciera gestiones para que asista el señor Ministro, pero que no interrumpiera la sesión.
Duda moral.
Según la prensa y según declaraciones oficiales del señor Ministro del Interior, el día miércoles 29 de marzo, Los conspiradores planeaba, asesinar al Presidente Allende. El título que acabo de leer corresponde a El Mercurio. Según el diario El Siglo, Golpistas planeaban asalto a La Moneda. Ministro del Interior revela alcances criminales del complot. Confesiones. Un detonante para desencadenar la violencia. . . . Según el diario La Nación, Ministro Del Canto contó entretelones del complot: Demencial intento de asesinar al Presidente de la República.
Leo estos títulos sin entrar al análisis de su contenido, porque quiero subrayar que se trata de denuncias que muchas veces se han oído en el país y porque a los Señores que hemos pedido esta sesión nos interesa que este tipo de afirmaciones no queden, frente a la opinión pública del país, como flotando en la nada, con el carácter de un recurso momentáneo que se utiliza en la contienda política para aliviar la tensión del momento. Nos interesa que no se juegue con la vida del Presidente de la República, ni muchos menos con su muerte. Eso interesa que cuando un Ministro del Interior u otro personero importante del Gobierno denuncie un hecho tan serio como éste -no necesito repetir que la seriedad y gravedad del mismo revisten un carácter mucho más hondo y crítico por la situación política que vive el país-; nos interesa, digo, que este tipo de denuncia no quede simplemente en el olvido, como, por desgracia, han quedado algunas que se han tratado demasiado ligeramente aquí, en el Senado, y sobre las cuales creo que deben hacerse algunos alcances.
Nosotros no queremos tomar a broma los atentados contra la vida del Presidente de 3a República. Nos interesa realmente que haya responsabilización, y por eso solicitamos la sesión de hoy.
Lamentablemente, se ha abusado demasiado del recurso de las denuncias, y pasan los meses. Yo quisiera preguntar a los señores Senadores si alguno suele tener noticia de lo que ocurre en definitiva con ellas; si se ha llegado a establecer en algún momento un fundamento mínimo que justifique afirmaciones que han caducado tanta conmoción en el país. No es así.
Por ello he usado la expresión duda moral: porque cuando uno examina a fondo algunas de las denuncias formuladas se da cuenta de que, lejos de tener base, a menudo son increíblemente infundadas.
El señor LUENGO.-
¿Me permite una interrupción, señor Senador?
El señor PRADO.-
Excúseme, señor Senador. Tendrá Su Señoría oportunidad de hablar en este debate, y apenas empiezo a exponer ideas.
El señor LUENGO.-
¡Usted pregunta directamente a los -Senadores!
El señor PRADO.-
No creo que pueda contestarlas Su Señoría, por una serie de razones.
Me referiré a muy pocas denuncias, porque no quiero hacer una larga enumeración, como se suele proceder, tal vez demasiado ligeramente.
El señor LUENGO.-
¿Se refiere al señor Moreno?
El señor PRADO.-
Me refiero al señor Altamirano, Secretario General del Partido Socialista.
Lo ocurrido en el Estadio Chile.
El señor Altamirano hizo una denuncia en marzo de 1971: la de que en el Estadio Chile se había pretendido asesinar al Presidente de la República. Lo dijeron de la misma manera corno lo dijo el señor Ministro del Interior hace pocos días: que en marzo de 1971 quisieron matar a Allende en el Estadio Chile, con dos bombas.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588410/seccion/akn588410-po1-ds3