. " \nEl se\u00F1or MONTES.- Se\u00F1or Presidente, suscribimos el proyecto en discusi\u00F3n y, por ello, compartimos sus normas. \nFundamentalmente, ahora no queremos entrar en disquisiciones acerca de los procedimientos que cada partido emplea para la nominaci\u00F3n de sus candidatos a tal o cual elecci\u00F3n, ni en calificativos que, a nuestro juicio, podr\u00EDan merecer determinadas colectividades. \nSi bien es cierto que puede aprovecharse la ocasi\u00F3n para plantear ese tipo de problemas, pensamos que es preferible dedicarse a examinar m\u00E1s concretamente el contenido de esta proposici\u00F3n legal. Sin embargo, pedimos sin que ello signifique en manera alguna tratar de coartar el derecho de nadie, ni mucho menos impedir que alguien exprese lo que le venga en gana con relaci\u00F3n a estos problemas que a nosotros, los comunistas, no nos interpreten otros partidos, porque, al fin y al cabo, si alg\u00FAn derecho tenemos es el de resolver nosotros mismos nuestros problemas, en la forma que soberanamente decidamos. \nCuando el Honorable se\u00F1or Dur\u00E1n se\u00F1ala que los partidos marxistas act\u00FAan de cierta manera y que las colectividades pol\u00EDticas denominadas por \u00E9l democr\u00E1ticas proceden en tal o cual forma, el se\u00F1or Senador, sin lugar a dudas, expresa un juicio enteramente personal, que nosotros l\u00F3gicamente no podemos aceptar ni compartir. \nDec\u00EDa que nosotros reclamamos, a lo menos, el derecho a interpretar lo que somos, lo cual no es \u00F3bice para que cada cual, con el leg\u00EDtimo derecho que le asiste, pueda opinar de modo cr\u00EDtico al respecto. De ninguna manera nos oponemos a ello; pero del mismo modo ejercemos nuestro derecho para se\u00F1alar muy claramente que no compartimos esos puntos de vista, repetidos en forma m\u00E1s o menos constante en esta Sala y en otros lugares, tanto por el Honorable se\u00F1or Dur\u00E1n y su partido como por los partidos de la Derecha en general, con un prop\u00F3sito del que ellos nos acusan frecuentemente: tratar de deformar la realidad, para presentar ante la opini\u00F3n ciudadana un cuadro que no corresponde a los hechos ni a las colectividades y organizaciones de las cuales formamos parte. Porque es claro que, al hablar del modo en que lo hace el Honorable se\u00F1or Dur\u00E1n, de partidos marxistas entre comillas, se trata de significar en el t\u00E9rmino algo m\u00E1s o menos tenebroso, macabro y antidemocr\u00E1tico, con el objeto de dar la sensaci\u00F3n, aqu\u00ED y afuera, de la manera m\u00E1s clara posible, que los partidos marxistas son ajenos a la experiencia democr\u00E1tica y que los partidos democr\u00E1ticos son los que representa el Honorable se\u00F1or Dur\u00E1n. Nuestra respuesta es que tal interpretaci\u00F3n corresponde \u00FAnicamente a lo que el Honorable se\u00F1or Senador piensa, lo que est\u00E1 muy lejos de la realidad, de la pr\u00E1ctica y de la manera de actuar de tal o cual partido de entre los llamados marxistas. \nNo queremos expresar ahora la opini\u00F3n nuestra acerca de qu\u00E9 es lo democr\u00E1tico y qu\u00E9 lo antidemocr\u00E1tico, porque probablemente tampoco en esta materia nos pondremos de acuerdo con el Honorable se\u00F1or Dur\u00E1n. Tenemos concepciones distintas acerca de lo que eso significa. Y nosotros sostenemos hoy d\u00EDa que estamos profunda y leg\u00EDtimamente convencidos de que, en efecto, nuestra organizaci\u00F3n, su desarrollo, su camino y sus objetivos son evidentemente los m\u00E1s democr\u00E1ticos. \nEn cuanto a las proposiciones hechas en torno de este proyecto de ley, los comunistas queremos recordar que suscribimos una iniciativa legal que fue producto de un acuerdo que nosotros respetamos y que ahora estamos por aprobar. Sin embargo, en el curso de la tramitaci\u00F3n parlamentaria, como es l\u00F3gico, posible y a veces necesario, se han introducido modificaciones con las perspectivas de cada cual, con el objeto de mejorar, seg\u00FAn su juicio o criterio, las normas del proyecto. \nFrente a las nuevas proposiciones, queremos dejar muy claramente establecido que nuestro criterio ya no est\u00E1 ni puede estar sujeto a la firma responsable que colocamos al pie del documento original, y que con respecto a cada indicaci\u00F3n o formulaci\u00F3n nueva podemos manifestar posiciones favorables o contrarias o, por lo menos, nuestras dudas. Quiero dejar lo anterior perfectamente en claro, a fin de que no se nos diga que nos saltamos a pie juntillas alg\u00FAn tipo de disposiciones incluido en el acuerdo, al pie del cual estampamos nuestra firma, que representa la aceptaci\u00F3n de los Senadores comunistas. As\u00ED, por ejemplo, en el art\u00EDculo 19 bis que se agrega a la Ley General de Elecciones se han introducido algunas enmiendas respecto de las cuales deseamos expresar muy brevemente nuestro criterio. \nEn primer lugar, queremos decir que la base fundamental del proyecto la constituyen algunas ideas que prosperaron o se proyectaron hace algunos a\u00F1os, cuando se form\u00F3 el llamado Frente de Saneamiento Democr\u00E1tico, que, entre otras cosas, derog\u00F3 la Ley de Defensa Permanente de la Democracia y modific\u00F3 la Ley Electora], significando realmente un paso adelante, un desarrollo de nuestro sistema democr\u00E1tico. \nAun cuando hubo gente que pens\u00F3 que lo democr\u00E1tico era mantener al margen de la Constituci\u00F3n y de las posibilidades legales a un grupo numeroso de ciudadanos, ya en ese entonces se expresaron de manera muy clara y concreta opiniones diversas en cuanto a qu\u00E9 era democr\u00E1tico para unos y para otros. \nEn aquel tiempo, en lo relativo a la modificaci\u00F3n de la Ley Electoral, se expusieron ideas que, a mi juicio, tienen validez hoy d\u00EDa, en el sentido de que era posible la actuaci\u00F3n unida o la participaci\u00F3n conjunta de dos o m\u00E1s partidos que expresaran corrientes generales de opini\u00F3n m\u00E1s o menos coincidentes. En esa oportunidad se dijo tambi\u00E9n que no era ileg\u00EDtimo pensar sino todo lo contrario que partidos o colectividades con orientaci\u00F3n general com\u00FAn pudieran actuar a trav\u00E9s de corrientes ciudadanas, por decirlo as\u00ED, que pretendieran encauzar a la opini\u00F3n p\u00FAblica en una direcci\u00F3n determinada, tambi\u00E9n com\u00FAn. Yo creo que ese pensamiento tambi\u00E9n se consigna en la base de este proyecto. \nConcuerdo con la formulaci\u00F3n de un se\u00F1or Senador en cuanto a que las' determinaciones no son necesariamente permanentes o no deben existir de una vez y para siempre, porque sin duda que todo cambia en la vida, y tambi\u00E9n los hombres y sus objetivos. Ante los problemas que surgen, puede haber tambi\u00E9n una comunidad de voluntades, de apreciaciones y de perspectivas comunes que no se hab\u00EDan dado un d\u00EDa o una semana antes. Esto tambi\u00E9n es claro. Nosotros no tenemos, sobre todo acerca de la pol\u00EDtica y del aspecto social, una apreciaci\u00F3n en blanco y negro, dir\u00EDa yo, en que todo es s\u00ED o todo es no, por cuanto tambi\u00E9n hay matices. Por lo tanto, creemos que tambi\u00E9n es necesario considerar los problemas propios de la vida. \nPues bien, en el art\u00EDculo 19 bis que se propone en el proyecto., se han introducido, como aqu\u00ED lo dijo muy claramente un se\u00F1or Senador, tres ideas nuevas, no contenidas en la moci\u00F3n original. \nLa primera de ellas es la modificaci\u00F3n del plazo para declarar los pactos, plazo que se eleva de diez a treinta d\u00EDas. Aqu\u00ED surgi\u00F3 una discusi\u00F3n de detalle, en el sentido de que era mejor establecer sesenta d\u00EDas. En cuanto a esta enmienda, no consignada en la iniciativa original, los comunistas estamos de acuerdo; no tenemos ninguna objeci\u00F3n; nos parece que mejora el proyecto. Y no agrego m\u00E1s acerca de esta materia, porque la disposici\u00F3n me parece muy clara y concreta. \nCon respecto a la segunda idea nueva, creo que es un poco m\u00E1s complicada. Para decirlo al rev\u00E9s, es menos simple que la anterior. Me refiero a la disposici\u00F3n que se\u00F1ala que en las declaraciones de pactos deber\u00E1 expresarse el n\u00FAmero m\u00E1ximo de candidatos que podr\u00E1 presentar cada uno de los partidos pactantes. En esta materia tenemos dudas. \nSeg\u00FAn el razonamiento que escuch\u00E9 denantes a un se\u00F1or Senador, se trata de evitar que estos pactos se realicen sobre la base de peque\u00F1os objetivos, entendi\u00E9ndose por peque\u00F1o objetivo el electoral, contingente, inmediato. Los pactos deber\u00EDan tener una raz\u00F3n superior, de destino pol\u00EDtico del pa\u00EDs. Nosotros compartimos esta idea. \nLa duda nuestra, lo que debemos consultar y ver, es que esta segunda proposici\u00F3n no tiene relaci\u00F3n alguna con la idea fundamental del proyecto. Se\u00F1alo, a t\u00EDtulo personal porque ya he dicho que debo consultar sobre esta materia con los otros Senadores de nuestro partido, que en determinadas circunstancias la peque\u00F1a cuesti\u00F3n electoralista puede llevar a no concertar alg\u00FAn pacto si se plantea previamente. Esa es la duda que tenemos. Nos parece que si dos o m\u00E1s colectividades formalizan un pacto teniendo presente como debe ser y como esperamos que sea. los superiores intereses pol\u00EDticos, el pacto no puede quedar sujeto a la determinaci\u00F3n previa de qui\u00E9n o qui\u00E9nes ser\u00E1n los candidatos. Me parece que esto entraba o dificulta en alguna medida el llevar a la pr\u00E1ctica la idea fundamental. \nRepito: respecto de esta innovaci\u00F3n propuesta en la Comisi\u00F3n tenemos dudas, que hemos dado a conocer fundadamente, y anuncio que de votarse en esta oportunidad el precepto respectivo, lo votar\u00EDamos en contra, mientras no disipemos esas dudas o no veamos con m\u00E1s claridad cu\u00E1l es el objetivo perseguido. \n " . . . . . . . . .