-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802/seccion/akn588802-po1-ds11
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802/seccion/akn588802-po1-ds11-ds14
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802/seccion/akn588802-po1-ds11-ds13
- bcnres:tieneSeccionRecurso = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802/seccion/akn588802-po1-ds11-ds12
- bcnres:tieneTramiteConstitucional = bcnbills:SegundoTramiteConstitucional
- dc:title = "DENOMINACION DE FERNANDO SANTIVAN A LICEO COEDUCACIONAL DE PANGUIPULLI."^^xsd:string
- rdf:type = bcnses:SeccionProyectoDeLey
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/3060
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/321
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1139
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/544
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/3112
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/4403
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1617
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/322
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1178
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/616
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/323
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1450
- bcnres:tieneMateria = http://datos.bcn.cl/recurso/tema/educacion-publica
- bcnres:tieneMateria = http://datos.bcn.cl/recurso/tema/panguipulli
- bcnres:tieneTramiteReglamentario = bcnbills:DiscusionGeneralYParticular
- bcnres:tieneResultadoDebate = bcnres:seApruebaEnGeneralYParticular
- bcnres:tieneTerminoLibre = http://datos.bcn.cl/recurso/tema/denominacion-liceo
- rdf:value = " DENOMINACION DE FERNANDO SANTIVAN A LICEO COEDUCACIONAL DE PANGUIPULLI.
El señor FIGUEROA (Secretario).-
Proyecto de ley de la Cámara de Diputados que denomina Fernando Santiván al Liceo Coeducacional de Panguipulli y cambia el nombre a otro establecimiento educacional.
La Comisión de Educación Pública, en informe suscrito por los Honorables señores Carmona (Presidente), García, Montes y Valenzuela, recomienda aprobar el proyecto, que consta de dos artículos, en los mismos términos en que lo hizo la Cámara de Diputados.
Los antecedentes sobre el proyecto figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En segundo trámite, sesión 57ª, en 29 de agosto de 1972.
Informe de Comisión:
Educación, sesión 61ª, en 31 de agosto de 1972.
El señor PAPIC (Vicepresidente).-
En discusión general el proyecto.
Ofrezco la palabra.
El señor TEITELBOIM.-
El Honorable señor Jorge Montes expresó, en el seno de la Comisión de Educación Pública, la opinión favorable de los Senadores comunistas en torno de este proyecto que, en su parte inicial, da el nombre de Fernando Santiván al Liceo Coeducacional de Panguipulli. Por cierto, apoyaremos con entusiasmo esta iniciativa, pues creemos que hace justicia.
Fernando Santiván es uno de los máximos escritores vivos de la literatura nacional. Tiene, en estos momentos, 86 años.
Su obra avanza caudalosa como un río del Sur. Sigue en la brecha uno de los escasos sobrevivientes de la llamada Generación de 1900.
Un gigante bondadoso.
Nació lo que resulta sintomático el mismo año que Mariano Latorre y Pedro Prado, cuyos nombres también deberían individualizar a sendos liceos, porque son figuras cumbres de nuestras letras. Mariano Latorre, además, durante muchos años se desempeñó como Director del Instituto Pedagógico. Por lo tanto, fue un forjador principal de generaciones enteras de profesores secundarios.
Digo que es justo, además, el proyecto en estudio, porque Fernando Santiván no ha sido nunca un escritor prisionero en torre de marfil ni provino de familia acaudalada. En alguna parte de su obra autobiográfica, en Las Confesiones de Enrique Samaniego, dice muy concisamente: He conocido la miseria y también el hambre.
Me alegra su amistad. Es un ser ricamente humano, de recia complexión física, pero de una bondad y de cierta ingenuidad, que brota de su palabra y de sus ojos claros, a mi juicio, muy propias de un espíritu rebosante de ternura.
Me ha tocado compartir trajines de diversa índole con él, y sé que, a diferencia de otros literatos, no es hombre que gire en torno de su propia persona, que hable en términos de autoalabanza o que exija elogios de extraños.
Es parte de nuestra historia. Su obra fundamental, Las Memorias de un Tolstoiano, sólo se compara en Chile a Recuerdos del Pasado, de Pérez Rosales, por la fuerza vital y colorida con que describe el ambiente nacional de su época.
Campesino tolstoiano.
Es un hombre austral. Nació en la pequeña ciudad de Arauco. Pero su raíz rezuma esencias hispánicas.
En 1952, creo, hizo su primer viaje fuera del país. Era ya entonces un hombre maduro. Fuimos vecinos en la larga travesía aérea. Anduvimos juntos por China y, también, por la Unión Soviética. El quería hacer dos peregrinaciones. Una a la tumba de su maestro literario, León Tolstoi. A principios de siglo, junto con su cuñado de entonces, Augusto d’Halmar, y con el pintor Ortiz de Zárate, fundó la Colonia Tolstoiana en Chile, animada de utópico humanitarismo y ansia de unir el sentido estético de la vida con el servicio al pueblo.
Quería, repito, visitar la tumba de Tolstoi, y conocer también el solar nativo de donde salieron sus antepasados, en Castilla: la casa de Torrelavega. Pudo hacerlo. Estaba feliz este hombre, a quien muchas veces se ha acusado de apasionado y de iracundo, pero que en el fondo alienta un espíritu cristiano, romanticismo y amor por los demás.
Creo que está muy bien que un establecimiento educacional recoja su nombre, pues él ha mostrado un fervor didáctico muy grande.
Vivió una experiencia dura cuando adolescente, como alumno de la Escuela de Artes y Oficios de aquel entonces, que llevó a la versión literaria en El Crisol.
La señora CAMPUSANO.-
¿Podría pedir a la Sala un poco de silencio, señor Presidente?
Incluso, pienso que Su Señoría podría poner un poco de atención.
Como ciertos héroes de Chejov.
El señor TEITELBOIM.-Fernando Santivan pasó por todas las profesiones y oficios: corrector de pruebas, vendedor de libros, agricultor pobre, muchas más.Fernando Santiván
Poco antes del centenario de la Independencia, en 1909, publicó una colección de cuentos que renovó el género en nuestro país: Palpitaciones de vida.
Precisamente cuando Chile celebraba un siglo de existencia republicana, ve la luz su primera novela, llamada Ansia, cuyo centro ya no es el Sur, que constituía a la sazón su tema principal, sino su existencia en Santiago, vertida en una obra que más tarde él mismo la calificó como un ensayo difuso, atropellado, como un barbotante ensayo de juventud.
Además de libros tan afamados como Robles, Blume y Compañía y La Hechizada que es entre sus novelas la que ha conocido cierta popularidad folletinesca, creo que la mayor significación de Santiván radica en su producción directa o indirectamente autobiográfica, porque es un hombre inclinado a la confidencia, como se desprende de las llamadas Confesiones de Santiván a veces oculto bajo el nombre de Enrique Samaniego o bien a través de la primera persona de las Memorias de un Tolstoiano.
Fernando Santiván es un hombre terrígeno, con vocación agrícola. Por eso, durante muchos años, vivió a orillas del lago Villarrica. Trabajó allí como colono; que también aspira como ciertos héroes de Chejov, a ser profesor de campesinos. De esa vivencia extrae dos libros: Las escuelas rurales, y una creación literaria, Charca en la Selva.
Novelista de las perdidas tierras vírgenes.
Convive con los trabajadores, comparte la vida ruda de aquella gente que abre las rutas, derribando, talando bosque en la zona meridional del país. Por eso, la novela La Camará gira en el círculo de un grupo de peones camineros que viven la promiscuidad en esas tremendas soledades húmedas de las provincias sureñas. También su libro de relatos El Bosque emprende la marcha responde a la concesión de un civilizador perplejo que percibe el espolón industrializador penetrando y desbrozando tierras de labranza, en medio de las arboledas virginales cerradas de otrora en esa zona donde se practican claros a fin de crear pueblos; pero, también, fomentando la erosión, como caries abiertas en los calveros de la antigua selva.
Es un hombre delicado y fornido de tierras mojadas, de esos típicos pueblecitos verdes y lluviosos característicos de la geografía nerudiana. Es, precisamente, un ciudadano de la región de Panguipulli, un habitante arraigado de Valdivia, una persona que se vincula por la letra y el espíritu a las tradiciones de nuestra patria.
Lo revela, por ejemplo, en un momento, cuando escribe El Mulato Riquelme, novelada descripción de la vida misteriosa y semioculta que de niño lleva Bernardo O’Higgins en Chillán.
Hace veinte años se le concedió el Premio Nacional de Literatura. Pero ha seguido con la pluma en la mano. Así en 1963, en su novela Bárbara, nos ofrece una ancha visión, sin cataratas, de los fines del siglo pasado y del nacimiento de la ciudad de Temuco.
Estimo que hace bien el Senado y que cumple con su deber al dar en vida al Liceo Coeducacional de Panguipulli el nombre de este representativo y auténtico escritor llamado Fernando Santiván.
El señor ACUÑA.-
Pido la palabra.
Señor Presidente, los Senadores del Partido Izquierda Radical queremos expresar, con especial agrado, que apoyamos el proyecto de ley tendiente a rendir homenaje al gran escritor y hombre del Sur Fernando Santiván, por su profunda labor literaria, que lo hizo acreedor al Premio Nacional de Literatura en el año 1952.
Creemos que el Congreso ha hecho bien al concretar este homenaje dando el nombre de ese literato a un establecimiento de enseñanza media como es el Liceo Coeducacional de Panguipulli. Pensamos que este reconocimiento es mucho más grato todavía, si se considera que el escritor mencionado, pese a su avanzada edad actualmente está radicado en Valdivia, sigue desarrollando, en la medida de sus posibilidades físicas, sus inquietudes y afanes literarios y colaborando de manera periódica en diversas publicaciones del país desde luego, en los de la zona, para entregar un acervo literario, su profunda cultura humanística y su espíritu de solidaridad humana.
Por lo tanto, los parlamentarios de estas bancas concurrimos repito con especial agrado a este homenaje.
Al mismo tiempo, quiero aprovechar la oportunidad para solicitar que se oficie, en mi nombre, al Ministro de Educación, pidiéndole que a la brevedad, y por intermedio de la Sociedad Constructora de Establecimientos Educacionales, lleve a la realidad la construcción de un establecimiento moderno y adecuado para las necesidades estudiantiles del departamento de Panguipulli.
Pido el envío de ese oficio y reitero el especial agrado con que concurrimos con nuestros votos a la aprobación del proyecto, al cual adherimos con particular sentido de solidaridad.
-Se anuncia el envío del oficio solicitado, en nombre de los Senadores de la Izquierda Radical, democratacristianos, nacionales y comunistas.
Se aprueba en general y en particular el proyecto.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/588802/seccion/akn588802-po1