. . . . " \nEl se\u00F1or VALENZUELA LABBE (don Renato).- \n \nPido la palabra. \n \nEl se\u00F1or VALENZUELA VALDERRAMA, don H\u00E9ctor (Presidente).- \n \nTiene la palabra el se\u00F1or Garay; a continuaci\u00F3n, el se\u00F1or Renato Valenzuela. \n \nEl se\u00F1or GARAY.- \n \nSe\u00F1or Presidente, voy a votar en contra de la supresi\u00F3n propuesta por el Senado. Creo, simplemente, que aqu\u00ED debemos aplicar el proverbio \"lo que abunda no da\u00F1a\". Hemos visto en nuestra pr\u00E1ctica, que es m\u00E1s o menos larga, que a veces por la falta de un art\u00EDculo de este tipo, privamos a la autoridad de un medio para presumir que a sabiendas se proporciona un local para fumadero de opio o el suministro de cualquier otra sustancia nociva. \nA m\u00ED me parece que mientras m\u00E1s podamos hacer en este sentido, m\u00E1s medios vamos a entregarle a la autoridad para que defienda a la sociedad, especialmente a la juventud, de todos estos vicios que estamos viendo en la vida moderna. Esta verdadera locura que vive Occidente, y es la que est\u00E1 haciendo necesaria la aprobaci\u00F3n de todas estas disposiciones, que debemos estudiar hasta la saciedad y en detalle para entregar a las autoridades sanitarias los medios para combatir con eficacia todas estas plagas que tiene nuestra sociedad. \n \n " . . . . . . . .