. . . " El se\u00F1or CHADWICK.- \n \n Deseo terminar mis observaciones, despu\u00E9s de hacer presente la excusa de que, por haber llegado atrasado en su oportunidad, no pude dar a conocer con amplitud mis puntos de vista. \nTerminar\u00E9 en seguida. \nPienso que el sistema que sigue el actual Gobierno no es el adecuado; que, a su vez, se est\u00E1 empantanando; que la inflaci\u00F3n ha vuelto a aparecer y ha resultado incontrolada e incontrolable. \nCreo que la econom\u00EDa de mercado, en Chile, es absolutamente incapaz de regular los precios, y que el ejemplo de Suecia, Honorable se\u00F1or Ib\u00E1\u00F1ez, es del todo inadecuado para un pa\u00EDs tan subdesarrollo como el nuestro, porque aqu\u00E9l es el \npa\u00EDs que tiene la segunda productividad en el mundo. \n \nEl se\u00F1or IBA\u00D1EZ.- \n \n Porque all\u00ED todo est\u00E1 en manos de la empresa privada, Honorable Senador. \n \nEl se\u00F1or CHADWICK.- \n \n Si el problema de la empresa privada es un ejemplo que no puede traerse y quitarse as\u00ED, por v\u00EDa incidental. Est\u00E1 dentro de un sistema en que tienen que jugar una estabilidad monetaria, una posibilidad de ahorro, una perspectiva de disciplina del mercado, lo cual falta por completo en Chile. \nEstamos entrando poco a poco a un per\u00EDodo preelectoral en que Chile, nuevamente, so\u00F1ar\u00E1 con que la decisi\u00F3n de las urnas ser\u00E1 el camino que en definitiva tomar\u00E1 el pa\u00EDs. Los \u00FAltimos a\u00F1os han indicado que en la manera como nosotros practicamos la pol\u00EDtica y hacemos las elecciones, en la forma como se llevan estos debates parlamentarios, la gente no aprende nada y sigue movi\u00E9ndose por emociones, condicionada por efectos propagand\u00EDsticos, alentadas sus esperanzas, incluso, por los silencios. Hay primeras figuras que entienden que su deber es no hablar una palabra y de este modo se engrandecen, porque no se comprometen a nada y dejan hablar a todo el mundo, sin decir lo que piensan. Hay primeras figuras que, incluso, dan a entender a sus \u00EDntimos que ni siquiera los interpretan aquellos que invocan sus nombres aqu\u00ED en el Parlamento. Esa manera de actuar, muy democr\u00E1tica en apariencia, no es nada m\u00E1s que el retorno a las formas primarias de un paternalismo absolutamente descontrolado, que s\u00F3lo amenaza traer a Chile una nueva y profunda decepci\u00F3n, y a. quienes militamos en la pol\u00EDtica activa, una frustraci\u00F3n m\u00E1s. \nCreo, sinceramente, que si se considera este art\u00EDculo 12, no se puede decir con seriedad que merezca el menor reparo; no se puede afirmar que tiene alguna conexi\u00F3n con aquel art\u00EDculo 95 ya despachado, que involucra disposiciones normativas para resolver casos absolutamente ajenos los unos de los otros. \nLo que el Ministro de Estado debe hacer, de acuerdo con el sistema intervencionista a que da nacimiento este proyecto, es, naturalmente, mirar de cerca en las cosas importantes, c\u00F3mo se desenvuelve la empresa que el Estado ha tomado en parte bajo su responsabilidad. Debe hacerlo. Suponer corrupciones y lo dem\u00E1s es enturbiar las aguas para no ver claro. \nEn cambio, el art\u00EDculo 12 me parece obvio y sencillo, y nadie puede discutir que, si hay funcionarios fiscales o de otras instituciones del sector p\u00FAblico llamados a fiscalizar o controlar determinadas empresas, esos funcionarios, cualquiera que sea el nombramiento que tengan, no pueden estar en el manejo del negocio que deben fiscalizar. Son posiciones distintas. \nPienso, con honestidad, que es una l\u00E1stima que esta iniciativa, tendiente a regular las sociedades an\u00F3nimas -que, sin duda alguna, constituyen la estructura b\u00E1sica de la capitalizaci\u00F3n privada, porque la empresa de orden individual ya casi es inconcebible una vez que ha alcanzado cierta magnitud-, no haya dejado a los trabajadores una esperanza de llegar a participar por su propio derecho en la empresa que ellos mantienen y hacen prosperar y de que alguna vez el mecanismo de la sociedad an\u00F3nima reserve, a los creadores de las grandes utilidades, una parte de ellas cuando son extraordinarias; ni haya reservado al Estado una funci\u00F3n primer\u00EDsima, como es la de precaver los fraudes tanto en la colocaci\u00F3n de las acciones como en el desarrollo de la vida normal de la sociedad an\u00F3nima. \nEstas eran las objeciones de fondo que dese\u00E1bamos hacer al sistema y al entusiasmo con que se despacha esta iniciativa. Limitados, como estamos, a decir unas pocas palabras, dada la magnitud del tema -s\u00E9 que hay otros se\u00F1ores Senadores que son especialmente concisos y que llegan al extremo de no hablar nunca-,... \n \nEl se\u00F1or GORMAZ.- \n \n \u00A1Peor es hacerlo mal! \n \nEl se\u00F1or CHADWICK.- \n \n ....a pesar de que la galer\u00EDa cree m\u00E1s f\u00E1cil criticar que jugar en la cancha, .... \n \nEl se\u00F1or GORMAZ.- \n \n Eso es en el f\u00FAtbol.' \n \nEl se\u00F1or CHADWICK.- \n \n ....a pesar de eso, debo manifestar que estas disposiciones, engarzadas en un sistema que se ha elaborado de buena fe -porque particip\u00E9 en la Comisi\u00F3n mientras se despachaban los primeros art\u00EDculos-, no son tan f\u00E1ciles de vulnerar. Por eso, quien quiera impugnar el proyecto deber\u00E1 atacarlo en las ideas matrices, fundamentales, que lo inspiran, en la esperanza -que les da aliento- de que la empresa privada, con su estructura r\u00EDgidamente patronal y sometida a la ley del dinero, sea capaz de llevar adelante este desarrollo que Chile ve que no se materializa y que es tan indispensable para que el hombre com\u00FAn tenga un destino un poco mejor y una mayor ilusi\u00F3n. \nPor eso, aprovechando este debate sobre el art\u00EDculo 12 con relaci\u00F3n al 95, me he permitido hacer estas observaciones de car\u00E1cter general. \n " . . . . . . . .