-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/596809/seccion/akn596809-po1-ds3-ds11
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1224
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- rdf:type = bcnres:Participacion
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/2
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/256
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1224
- rdf:value = " El señor CHADWICK.-
La supresión propuesta parece ser ya irremediable, pues entiendo que fue aceptada por la Cámara.
Aparentemente, se establece un plano de cierta tolerancia, por cuanto los organismos de atención de menores de naturaleza estatal admitirán que cualquier entidad o iglesia, sin discriminación alguna, lleve a sus profesores de religión o moral. Sin embargo, la realidad es muy diferente. La mayor parte de la atención de los menores en situación irregular es efectuada por entidades privadas que -debo repetir una vez más- no tienen más recursos, por lo menos en gran proporción, que los provenientes del erario.
El señor GUMUCIO.-
Hasta este momento no es así-
El señor CHADWICK.-
Es así, señor Senador.
Resulta que el propio Consejo de Defensa del Niño, que es el que hace el mayor número, y todas las entidades religiosas -que constituyen, sin ninguna duda, factor importante en servicios personales, por su vocación religiosa-, todos, sin excepción, carecen de recursos propios. En Chile no existen esas fundaciones que en países extranjeros se van formando por donaciones o legados cuantiosos. En nuestra patria, todo lo que es asistencia social, tiene su origen en el sector público.
Respecto de estas instituciones, el Ejecutivo cierra lo que había abierto el Congreso. Es decir, la tolerancia religiosa, la posibilidad de que esos niños puedan oír la voz del pastor o sacerdote, junto con la del laico, no inspirado en principios teológicos, sino en simples concepciones humanistas. De este modo, no podrán entrar aquellas personas que no tengan el visto bueno de la respectiva congregación de orden religioso, porque son instituciones privadas, aun cuando la subvención del Estado permite asistir y mantener a esos menores.
No se puede hacer nada más que un comentario: ésta es la oreja que le aparece al lobo disfrazado de oveja. Es el viejo principio de la intolerancia religiosa, del sectarismo, del proselitismo, de todo lo que durante muchos años caracterizó nuestras relaciones humanas. Dejémoslos que sigan. No tendremos más que transformarnos en espectadores atentos de lo que ocurrirá con los dineros fiscales.
Por eso, los Senadores socialistas estamos contra la mutilación de este precepto.
El señor GUMUCIO.-
El Honorable señor Chadwick ha basado su argumentación en que todas las instituciones particulares viven única y exclusivamente de los aportes que les otorga el Estado.
El señor CHADWICK.-
Unica y exclusivamente no, señor Senador. En gran porcentaje, sí.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/596809
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/596809/seccion/akn596809-po1-ds3