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- rdf:value = " 9.-EMPRESTITOS A LA MUNICIPALIDAD DE SAN MIGUEL.- OBSERVACIONES DEL EJECUTIVOEl señor BALLESTEROS (Presidente).-
En el Orden del Día, corresponde conocer las observaciones formuladas por Su Excelencia el Presidente de la República al proyecto que autoriza a la Municipalidad de San Miguel para contratar empréstitos.
-Las observaciones del Ejecutivo, impresas en el boletín Nº 10.4260, son las siguientes :
Artículo 3º
Ha sido sustituido por el siguiente: "Artículo 3º.- El producto del o los empréstitos deberá ser invertido en los siguientes fines:
PRODUCTO DE LOS EMPRESTITOS
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
En discusión las observaciones del Ejecutivo que consisten en sustituir el artículo 3º del proyecto.
El señor PALESTRO.-
Pido la palabra.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor PALESTRO.-
Señor Presidente, al someter este proyecto a la consideración del Congreso Nacional, lo hice en el buen entendido que correspondía al pensamiento de la Municipalidad de San Miguel, de la que formé parte hasta el año pasado, y, al mismo tiempo, de acuerdo con los informes técnicos que también entregaron las respectivas oficinas de esa Corporación edilicia.
En los dos trámites constitucionales, tanto la Cámara de Diputados como el Senado, aprobaron por unanimidad este proyecto, porque tiende a solucionar una serie de problemas que afectan a la populosa comuna de San Miguel. Dicha comuna, como todos sabemos, ocupa el segundo lugar en Chile, en cuanto al número de sus habitantes, y es, quizás, la más densamente poblada en el país. Por lo demás, es una de las que aporta mayores recursos al erario, ya que cuenta con gran número de industrias, y constituye un núcleo industrial de primerísima importancia, dentro de las actividades nacionales.
Señor Presidente, todos sabemos, especialmente los que hemos sido Alcaldes o Regidores, que las Municipalidades no pueden realizar obras de envergadura si no se les conceden recursos extraordinarios. Por ese motivo, los parlamentarios de todos los distritos del país nos vemos en la necesidad de someter, frecuentemente, proyectos de esta clase a la consideración del Parlamento, a fin de concurrir en ayuda de estos organismos, que son efectiva y verdaderamente democráticos, ya que es justamente dentro de las Municipalidades, en las comunas, donde existe la mayor correspondencia entre vecinos y sus representantes.
Por eso, con profunda extrañeza, hemos visto que el Ejecutivo, a nuestro juicio, sin estudios ni mayores conocimientos, y en forma frívola, a la ligera, ha procedido a vetar el artículo 3º de este proyecto.
Muchos personeros del partido de Gobierno, de la Democracia Cristiana, han manifestado que la suma de dos millones de escudos destinada a la construcción de un barrio cívico, que comprenda el edificio consistorial y un teatro municipal en San Miguel, es exagerada. Pues bien, Su Excelencia el Presidente de la República, accediendo, seguramente, a las peticiones de los dirigentes de la Democracia Cristiana de la comuna, ha procedido a rebajar la suma que, con tal objeto, se contempla en el número primero del artículo 39 del proyecto aprobado por el Congreso Nacional.
Quienes conocen más que el Diputado que habla el problema que representa, en la actualidad, el valor de la construcción, lo que significa edificar en este instante, saben perfectamente que con estos mil millones de pesos, la Municipalidad de San Miguel no alcanzará, ni siquiera, a construir los cimientos del edificio municipal.
El señor OSORIO.-
¡Para dos "mediaguas!
El señor PALESTRO.-
Todos sabemos que, el año pasado, el metro cuadrado de construcción costaba $ 200.000.
La Municipalidad ha gastado varios millones de pesos para que un grupo de ingenieros y arquitectos elaborara los planos y especificaciones correspondientes, a fin de dotar a San Miguel de un edificio municipal que, efectivamente, esté de acuerdo con la importancia de esa comuna. Y ahora resulta que el Gobierno estima que con Eº 1.000.000 basta y sobra para realizar una obra de tanta trascendencia.
Los señores Diputados, especialmente los que representan las provincias de sur y pasan continuamente por la Gran Avenida, se habrán dado cuenta de que es imposible seguir atendiendo al medio millón de habitantes, que constituye la población de la comuna, en esa verdadera "mediagua" que es el actual edificio de la Municipalidad de San Miguel.
Tal vez valga la pena extenderse en consideraciones sobre la observación del número lº del artículo 3º de este proyecto, porque la comuna de San Miguel ha sido blanco de éste, y prácticamente de todos los Gobiernos, por su condición de comuna izquierdista y por su manera especial de enfrentar los problemas. Para nadie es desconocido que ella ha sido muchas veces atacada y vilipendiada, pese a ser una de las comunas más progresistas, no sólo de Santiago, sino que de Chile entero.
El progreso que en ella se observa -pavimentación, alcantarillado, alumbrado público y agua potable- por lo general ha sido el fruto exclusivo del esfuerzo de sus vecinos. Muchas de las obras que con orgullo exhiben los sanmiguelinos se han conseguido después de peleas, mítines y luchas callejeras. Jamás se ha encontrado comprensión ante lo que legítimamente solicitan los vecinos de la comuna, a pesar de que tanto aportan al erario.
Para la aprobación de este proyecto se consiguió el asentimiento unánime de Senadores y Diputados de todos los partidos, los cuales entienden perfectamente la magnitud e importancia de la obra por iniciar. Por eso, le prestaron su aprobación en los dos trámites constitucionales.
Como un alcance a las observaciones que vienen a continuación, en particular al número 7, donde se desconoce totalmente la realidad de la comuna, diré que San Miguel, con los fondos normales consultados en el Presupuesto Nacional, que pagan los propios vecinos, estará en 1966, o a principios de 1967, complemente pavimentada.
La comuna de San Miguel no tiene problemas de alcantarillado, salvo en muy pequeños sectores, los cuales podrán ser dotados de este servicio, como se está haciendo, con los fondos ordinarios del presupuesto municipal. Tampoco sufre grandes problemas de agua potable, y las pocas deficiencias que se observan son inherentes a toda la provincia de Santiago. Del mismo modo, no presenta problemas de alumbrado público, porque incluso, cuando el Diputado que habla fue Alcalde de la comuna, depositó más de cien millones de pesos en la Compañía Chilena de Electricidad, para ir reemplazando, gradualmente, el alumbrado filamento por el de mercurio.
El señor FERNANDEZ.-
No tiene ningún problema, entonces.
El señor PALESTRO.-
Tiene muchos problemas, pero su solución es de resorte fiscal. Su Señoría no conoce la comuna, porque muy pocas veces la visita.
Por estas razones, estimamos que esta poda, este recorte radical del cincuenta por ciento de los fondos destinados a la construcción del edificio municipal de la comuna, constituye una burla. Los mismos arquitectos de la Dirección de Obras Municipales de San Miguel nos han manifestado que los mil millones de pesos no alcanzarán ni para los cimientos. Sabemos que el metro cuadrado de construcción vale, en la actualidad, 250 mil pesos.
Como conocemos la magnitud de este proyecto, abundaremos un poco más en la materia. Cuando solicitamos esos dos mil millones de pesos, existía el propósito de financiar las expropiaciones necesarias para construir un verdadero barrio cívico, donde se agruparían todas las oficinas públicas de la comuna, de modo que los vecinos pudieran efectuar todas sus diligencias y tramitaciones en el mismo edificio, en un par de cuadras a la redonda, sin tener para ello que andar de arriba a abajo, en micros.
Por lo tanto, si existiera equidad y consecuencia con lo resuelto en los diversos trámites constitucionales, es decir, cuando se aprobó por unanimidad este proyecto, creo que la Honorable Cámara debería rechazar el veto del Ejecutivo. Por desgracia, sabemos de antemano cuál será el resultado de la votación.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Ha terminado el tiempo del primer discurso de Su Señoría. Puede continuar en el tiempo de su segundo discurso.
El señor PALESTRO.-
Sabemos positivamente que la representación democratacristiana, y es natural que lo haga, a pesar de no estar en la Sala el Honorable señor Alfredo Lorca, aprobará la observación formulada por el Ejecutivo al número 1 del artículo 3º. Pero los Diputados socialistas, por estimar que ella no favorece, ni con mucho, a la Municipalidad de San Miguel, nos abstendremos.
Consideramos que, en este veto, no se soluciona el gravísimo problema que está afrontando esa Municipalidad, en cuanto a capacidad de sus locales, y a las condiciones de comodidad y limpieza que debe reunir para que trabajen sus funcionarios, y atender como corresponde al gran número de habitantes de la comuna de San Miguel.
Por estas razones, en caso de que los Honorables Diputados de la Democracia Cristiana no nos acompañen en esta posición, los parlamentarios socialistas nos abstendremos de votar esta observación del Ejecutivo.
Eso es todo.
El señor FERNANDEZ.-
Pido la palabra.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor FERNANDEZ.-
Señor Presidente, es una lástima que sean infundadas las ilusiones que se hacía el Honorable colega señor Palestro, con respecto a la ausencia, en esta sesión, del Honorable señor Alfredo Lorca. Pero la verdad es que no es necesario que esté presente en la Sala el jefe de los Comités parlamentarios de la Democracia Cristiana para que los Diputados de nuestro partido tengamos plena conciencia de la forma cómo votamos y las razones por las cuales lo hacemos. Y, justamente, en esta materia, que hoy día nos corresponde despachar...
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor FERNANDEZ.-
...existen plenas y justificadas razones para que los parlamentarios votemos favorablemente el veto de Su Excelencia el Presidente de la República. Más aún, debo señalar que, mediante nuestra iniciativa, la de los parlamentarios democratacristianos del Tercer Distrito, de común acuerdo con el señor Gobernador del departamento "Pedro Aguirre Cerda" y con el señor Subsecretario de Hacienda, se ha elaborado este veto, porque creemos que mejora sustancialmente el proyecto aprobado por el Congreso Nacional.
Hay aquí dos puntos que es necesario aclarar. En primer término, debo declarar, porque nos gusta ser sinceros...
El señor OSORIO.-
¿Por qué no actuaron así cuando se discutió el proyecto?
El señor FERNANDEZ
.....en nuestras apreciaciones, que a los parlamentarios que formamos mayoría en esta Corporación no nos inspira confianza la forma como se maneja la Municipalidad de San Miguel.
El señor PALESTRO.-
La Contraloría ha intervenido en más de veinte oportunidades y no ha comprobado irregularidad alguna.
El señor FERNANDEZ.-
No hay confianza política en el manejo de los fondos de esa Municipalidad.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor FERNANDEZ.-
Una Corporación Edilicia, que actúa con criterio político partidista, que ni siquiera ha sido capaz de solucionar el problema de la basura, en circunstancias que la gente del Departamento de Aseo es militante del Partido Socialista, no debe manejar fondos.
Por eso, porque desconfiamos del manejo de los dineros del Municipio de San Miguel, del trato que se da al personal y del abuso político que hacen de los cargos muchos Regidores elegidos por el pueblo, buscamos la manera de modificar lo aprobado anteriormente.
En segundo lugar, se ha dicho que el Gobierno y la Democracia Cristiana se oponen a que la Municipalidad de San Miguel use el préstamo aprobado en esta Administración con los votos de los parlamentarios democratacristianos. Esto no es efectivo. Desde luego, es necesario aclarar que la cantidad de Eº 5.000.000, se mantiene en el veto del Ejecutivo. Claro está que, dentro de nuestro criterio popular, debemos preocuparnos por las necesidades inmediatas de la gente, y no por la construcción de grandes edificios que más que nada estarían destinados a servir las ambiciones políticas de ciertos sectores. Por eso queremos que el dinero se use directamente en las impostergables necesidades de los habitantes de San Miguel, con quienes compartimos muchas horas de lucha y de sacrificios políticos, y que en este momento respaldan la acción del Gobierno.
Probablemente al Honorable señor Palestro le duela que el Presidente de la República haya obtenido una abrumadora mayoría de votos en la comuna de San Miguel. Donde Su Señoría era rey, señor, cacique y soberano, hoy campean los Diputados de la Democracia Cristiana, porque cuando van por allá se sienten como en su casa, porque ese pueblo está con nosotros.
En cuanto al proyecto, a título de ejemplo, ¿qué dice el número 7) del artículo 3º Que en la adquisición de terrenos para construcción de poblaciones para empleados y obreros se destina Eº 1.000.000.- ¿Pero quién controlará y administrará esta cantidad? ¿Qué terrenos se comprarán y qué casas se construirán? Sobre todo, ¿a quién se entregarán?
Con absoluta certeza, a los militantes del Partido Socialista de la comuna de San Miguel, especialmente a los empleados y obreros de ese Municipio controlado políticamente por ese partido.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor FERNANDEZ.-
El Gobierno observa la partida de Eº 1.000.000, pero, en cambio, destina Eº 1.900.000, que es mucho más, para trabajos de mejoramiento urbano de las poblaciones de esa comuna, dinero que será administrado por la Dirección de Pavimentación Urbana y por la Dirección de Obras Sanitarias, porque los problemas de la Municipalidad de San Miguel sólo se solucionarán si se logran complementar con los planes del Supremo Gobierno.
Queremos que el dinero sea usado directamente en beneficio de los trabajadores y pobladores de la comuna y no que se enrede en la entelequia de las realizaciones. La gente quiere ver las obras. Como digo, se trata de una Municipalidad que ni siquiera ha sido capaz de solucionar el problema de la basura. Por eso votaremos favorablemente el veto del Ejecutivo, que permitirá la realización de muchas de estas obras, porque, afortunadamente, la autorización no se concede para los hermanos Palestro, sino para las instituciones del Estado, que realmente nos merecen confianza.
El señor PALESTRO.-
Pido la palabra, señor Presidente.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Como el Honorable señor Palestro ha hecho uso del tiempo de sus dos discursos, solicito el asentimiento unánime de la Sala para concederle la palabra.
El señor ACUÑA.-
Pido la palabra, señor Presidente.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor ACUÑA.-
Concedo una interrupción al Honorable señor Palestro, señor Presidente.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Su Señoría olvida que, reglamentariamente, ni aún por la vía de la interrupción puede usar de la palabra el Honorable señor Palestro.
Por eso la Mesa solicita el asentimiento unánime de la Sala para concedérsela.
Si le parece a la Honorable Cámara, se le concederá por cinco minutos.
Acordado.
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor PALESTRO.-
Señor Presidente, es muy posible que el Honorable señor Fernández no sepa que la construcción del edificio de la Embajada de Chile en Buenos Aires, costará la módica suma de cuatro mil millones de pesos, y que el de San Miguel tan sólo costaría un millón de escudos y serviría a una Municipalidad que cuenta en su comuna con cerca de medio millón de habitantes. Este solo antecedente destruye el espíritu de sobriedad espartana de que hace gala el colega Fernández, porque en el extranjero se construirá una Embajada de cuatro millones de escudos para saraos y recepciones y, en cambio, a la comuna más popular e industrial de Chile, después de la de Santiago, se le niega un millón de escudos para que cambie su "mediagua" por un edificio moderno.
Nunca ninguna mayoría de Izquierda, de esta Izquierda que tanto le duele al señor Fernández, se preocupó antes de construir un nuevo edificio consistorial, porque todo el dinero se destinaba, desde 1938 a esta parte, a las obras de adelanto comunal y habitacional, que ahora parece negar el Honorable Diputado.
En cuanto al aseo de la comuna de San Miguel, este es un problema de toda la provincia. El Alcalde de Santiago, señor Fernández, que no sé si es pariente de Su Señoría, se ha visto abocado al problema de toneladas de basura en las calles San Diego, Arturo Prat, Lord Cochrane, en todas partes. Por eso no hay que escupir hacia arriba para que no caiga en la cara. Hasta el Presidente de la República se preocupó de este problema en la Plaza de la Constitución, cuando se entregaron 40 camiones para el aseo de la comuna de Santiago. Y el propio Alcalde dijo que debía haber una flota de 120 camiones.
Además, el señor Fernández, que tanto "ratonea" por los Ministerios, tiene la obligación de saber, porque es Diputado de Gobierno, que desde 1961 no se autoriza ninguna importación de vehículos para el aseo. Siendo Alcalde de la comuna de San Miguel, ocupé todo el año 1964 porque hasta en eso se hizo política durante la campaña presidencial- en solucionar el problema de la basura, que no es "sanmiguelina" sino nacional. Después de un año de trámites, el señor Mackenna, Ministro del señor Alessandri, ordenó la entrega de 150 mil dólares para la importación de diez camiones y dos regadores. Sin embargo, hasta ahora, nada se ha conseguido. Los Diputados de entonces y de ahora habrán visto en la prensa que la Municipalidad de San Miguel solicita cotizaciones de camiones a cualquier casa comercial, para compras al contado. Así lo expresan los avisos: "al contado", porque esta Municipalidad, siempre, en forma preferente, ha destinado fondos para solucionar el problema de la basura, que es uno de los más graves que afronta no sólo San Miguel, sino Chile entero, incluida la comuna de Santiago. También aquí el Alcalde, el señor Fernández, uno de los militantes más brillantes de la Democracia Cristiana, se ha visto abocado a este problema.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor PALESTRO.-
No pongo en duda la capacidad ni la prosapia del apellido del señor Fernández; sólo quiero decir, que en el Primer Distrito de Santiago, la basura también está botada en las calles como en las demás comunas. O sea, la zona que lógicamente debería ser la más aseada, se ve tan sucia como las de San Miguel, Conchalí, Quinta Normal, Barrancas y otras partes de Chile. De manera que éste no es un problema de San Miguel, exclusivamente.
Ahora, parece que al Honorable señor Fernández le "duelen" los hermanos Palestro. Seguramente debe ser porque Su Señoría conserva reminiscencias conservadoras. Pero esa comuna dejó de ser conservadora el año 1938, cuando el Frente Popular barrió con la Derecha y ahora con los "momios", viejos y nuevos.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor ZEPEDA COLL.-
¡Pero vamos a resucitar con fuerza!
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Ruego a los señores Diputados se sirvan guardar silencio.
El señor PALESTRO.-
Parece que mi intervención sirvió para resucitar a los "momios".
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Honorable señor Palestro, Su Señoría sabe que está prohibido hacer alusiones personales.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor PALESTRO.-
Lamento que se hayan enojado "los momios".
Señor Presidente, en forma muy sutil el Honorable señor Fernández se refirió al manejo de los fondos de la Municipalidad de San Miguel. Su Señoría sabe que cada vez que un Alcalde o Regidor cae en un desliz por ocupación de fondos en alguna obra comunal, interviene de inmediato la Contraloría. En general, los ediles corren el riesgo de andar en la cuerda floja y de que sus actuaciones sean intervenidas por la Contraloría. Y de ahí a la cárcel hay un solo paso.
Cada vez que hay la posibilidad de un escándalo en la comuna de San Miguel, interviene la Contraloría. Y cualquiera que haya sido el Alcalde o Regidor que ha estado a la cabeza de la comuna, nunca se ha encontrado nada. Y no es porque no hayan hecho bien cualquier "negociado" o sin vergüenzura, sino porque jamás se les ocurrió hacerlo ni a los comunistas, ni a los socialistas ni a los buenos radicales de aquellos tiempos en la comuna de San Miguel.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
¿Me permite, Honorable Diputado?
Ha terminado el tiempo concedido a Su Señoría.
Tiene la palabra el Honorable señor Silva Ulloa; y, a continuación el Honorable señor Fernández, en el tiempo de su segundo discurso.
El señor SILVA ULLOA.-
Señor Presidente, me parece que no hay precedentes en el Congreso acerca de un veto como el que conoce en estos instantes la Cámara, porque todos los partidos, incluso el de Gobierno, la Democracia Cristiana, han pontificado siempre sobre el respeto a la autonomía municipal. Pero la verdad es que ahora, mediante las observaciones a los números 5) y 6) del artículo 3º, se obliga a la Municipalidad de San Miguel a actuar en la forma determinada por el Ejecutivo.
Sería funesto sentar tal precedente, si consideramos como forma permanente la autonomía municipal. ¿Qué ocurre, por ejemplo, con la sustitución propuesta en el número 5) ? Se dice: "Para aportar a la Dirección de Deportes del Estado, para que ésta por sí o por otros Servicios ejecute obras destinadas a habilitar campos deportivos en la comuna, mejores los estadios municipales o construya nuevos estadios". O sea, se obliga a la Municipalidad a aportar Eº 1.000.000 para que los administre la Dirección de Deportes del Estado, que debe cumplir otras finalidades y manejarse con otros recursos.
Distinto habría sido si la propia Municipalidad hubiera planteado en su proyecto que se le autorizara o se le facultara para realizar dichas obras. Directa o indirectamente podría hacerlo, no a través de la Dirección de Deportes del Estado, sino por el organismo encargado de construir estadios, que es el Ministerio de Obras Públicas.
En seguida, en el número 6) nos encontramos con la misma novedad. Por medio de él se destinan 1.900.000 escudos para que la Municipalidad de San Miguel los aporte a la Dirección de Pavimentación Urbana, a la Dirección de Obras Sanitarias u otros Servicios.
Es evidente que esta disposición significa un atropello a la autonomía municipal, que nosotros no podemos aceptar.
Me agrada cuando algún Honorable colega habla con absoluta franqueza; y, en este caso, reconozco que el Honorable señor Fernández ha manifestado su opinión con mucha sinceridad.
Ha dicho que la disposición mencionada se redactó en los términos en que viene concebida, porque la Municipalidad de San Miguel está manejada por socialistas y comunistas, que constituyen mayoría.
El señor AYLWIN (don Andrés).-
Y proceden en forma sectaria.
El señor SILVA ULLOA.-
Por mi parte, podría decirle que existen en el país otras Municipalidades, manejadas por democratacristianos, donde las cosas no andan muy bien...
Un señor DIPUTADO.-
¡No puede ser...!
El señor SILVA ULLOA.-
...y cuyos recursos no han sido bien invertidos.
Concretamente, me refiero a algunas de la provincia de Antofagasta. Sabe la Honorable Cámara que recientemente ha habido una polémica por la prensa entre los Alcaldes democratacristianos de las Municipalidades de Antofagasta y de Calama.
A confesión de parte, relevo de prueba. Aquí se trata de una pelea entre Alcaldes...
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor SILVA ULLOA.-
...que pertenecen a un mismo partido político.
Considero funesto este precedente. Existen numerosos proyectos, hoy convertidos en leyes, presentados por Honorables colegas democratacristianos, en virtud de los cuales se destinan recursos para que las Municipalidades los inviertan en rubros análogos a los señalados en los números 5) y 6).
Esto no lo podrá desmentir el Honorable señor Lorca. Su Señoría, en el período legislativo pasado, en que no tenía la responsabilidad de dirigir a 82 señores Diputados, sino que sólo era uno de los miembros democratacristianos que integraban esta Honorable Cámara, presentó diversos proyectos de leyes tendientes a autorizar empréstitos en favor de distintas municipalidades para que, de acuerdo con su autonomía, ellas realizaran las obras que habían programado.
Me parece que este es el procedimiento lógico, porque la Municipalidad representa el gobierno comunal, el cual ha sido generado democráticamente. Debe respetarse, entonces, lo que este gobierno comunal ha acordado, en conformidad con todos...
El señor FERNANDEZ.-
Con la actual mayoría, que representa la voluntad del pueblo.
El señor PALESTRO.-
La mayoría sigue siendo la misma y ha contado con el voto favorable del Regidor de su partido y Su Señoría lo sabe.
El señor SILVA ULLOA.-
Señor Presidente, creo que, en más de una oportunidad, me he referido a esta mayoría de la Democracia Cristiana. No me agrada volver sobre lo mismo; pero el Honorable señor Fernández tiene que reconocer que, debido a que la ley electoral vigente no cumple con el precepto constitucional que establece la proporcionalidad en la representación de los partidos, la Democracia Cristiana tiene la mayoría de que dispone en la Honorable Cámara. Para demostrarlo bastaría señalar nada más que un ejemplo: en la provincia de Valparaíso, que representa el Honorable señor Ballesteros, Presidente de la Corporación, la Democracia Cristiana cuenta con el 50% de los votos, en cifras redondas; sin embargo, tiene nueve de los doce Diputados de esa circunscripción, lo cual demuestra la verdad de lo que sostengo. Una ley electoral, que no cumple con el precepto constitucional, ha permitido que la Democracia Cristiana, con el 40 y tanto por ciento de la votación general del país, tenga, en la Honorable Cámara, el 70% de los Diputados.
El señor VALENZUELA VALDERRAMA (don Héctor).-
Si Sus Señorías obtuvieran el 50% de la votación, tendrían el mismo número de Diputados que nosotros.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Ruego a los señores Diputados se sirvan guardar silencio.
El señor SILVA ULLOA.-
De tal manera, que no se puede sostener que el Gobierno, a través del veto, está facultando para atropellar en forma tan evidente la autonomía municipal. Yo no he discutido las cifras, porque no conozco la situación de la comuna de San Miguel, pero sí impugno el principio, que me parece funesto; por eso, estimo que no debemos aceptar el predicamento del Ejecutivo.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Fernández, en el tiempo de su segundo discurso; y a continuación, los Honorables señores Millas y Turna.
El señor FERNANDEZ.-
Señor Presidente, el Honorable señor Palestro ha querido comparar la eficiencia de la Municipalidad de Santiago y de su Alcalde, con la de la Municipalidad de San Miguel.
El señor PALESTRO.-
No he pretendido eso.
El señor FERNANDEZ.-
Yo quisiera recordar solamente que, si bien nuestro correligionario señor Manuel Fernández es desde hace muchísimos años Regidor de la Municipalidad de Santiago -seguramente el más antiguo-, hace sólo poco más de un año que asumió el cargo de Alcalde de esa corporación.
Sin embargo, en San Miguel, como Su Señoría lo ha reconocido, las fuerzas de Izquierda, que dice representar, gobiernan la Municipalidad desde 1938. Es tiempo suficiente para que se hubiera solucionado el problema de la basura, uno de los tantos que aquejan a la ciudadanía de esa comuna.
El señor PALESTRO.-
Son problemas nacionales.
El señor FERNANDEZ.-
En segundo lugar, quiero decir que a los demócrata-cristianos no nos duele que haya Municipalidades izquierdistas. Ojalá hubieran muchas. No debe olvidarse que en diversas ocasiones hemos administrado, conjuntamente con Regidores socialistas y comunistas, muchas Municipalidades izquierdistas del país y que no hemos vacilado en dar nuestros votos para que lo sean.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor FERNANDEZ.-
Pero hay izquierdismo e "izquierdismo". Como muy bien lo acotaba un Honorable colega, el izquierdismo de la Municipalidad de San Miguel es sectario, sin caridad humana y está lejos de lo que el pueblo quiere que sea; es decir, que esté al servicio desinteresado y patriótico de los auténticos intereses populares de la comuna.
El Honorable señor Palestro ha expresado que el Gobierno desea cercenar los fondos que el proyecto le entrega a la Municipalidad de San Miguel. Esto no es efectivo. En el proyecto del Congreso se le otorgan cinco millones de escudos a esta Municipalidad y en las observaciones del Ejecutivo se le concede esta misma cantidad. Entonces, ¿dónde está el cercenamiento? Pero el Parlamento tiene derecho a asegurarse de que los dineros de la colectividad -para qué hacemos distinción entre recursos de los contribuyentes y del Fisco, cuando son de la Nación- sean administrados en la forma más eficiente posible, de modo que solucionen directamente los problemas del pueblo y no se queden enredados por ahí. ¿Cuál es la realidad? Se ha disminuido en 1.000.000 de escudos los fondos destinados a la construcción de un barrio cívico, porque lo creemos innecesario. Pero se han aumentado en Eº 250.000 los recursos destinados a la adquisición de vehículos para el servicio de aseo, problema que está pendiente y no se ha solucionado.
El señor PALESTRO.-
Para eso hay que tener dólares; no escudos.
El señor FERNANDEZ.-
Se han aumentado los fondos para la construcción de mercados municipales periféricos, para la terminación de estadios municipales y, especialmente, para lo que nosotros denominamos el equipamiento comunitario, y para los servicios esenciales que deben prestarse a toda comunidad.
El señor PALESTRO.-
Eso se realiza con fondos corrientes, ordinarios.
El señor FERNANDEZ.-
Nosotros respetamos la autonomía municipal. . .
El señor PALESTRO.-
¡Se nota!
El señor FERNANDEZ.-
...pero de aquellas corporaciones que se hacen respetar a sí mismas.
Por último, quiero responderle al Honorable señor Silva Ulloa. Su Señoría, al referirse a la integración de esta Cámara, puso como ejemplo el caso de la provincia de Valparaíso y dijo que con el 50% de los votos...
El señor PALESTRO.-
Menos todavía.
El señor FERNANDEZ.-
...los democratacristianos tenemos más del 50% de los Diputados de esa circunscripción. Este es exclusivamente el efecto de la dispersión política de la Oposición a este Gobierno.
¡Ahí tienen el camino! Es muy fácil. Si la Oposición liberal conservadora radical y la de Sus Señorías, socialistas y comunistas, se unieran, la obtención del 50% de los votos les significaría estar representados por el 50% de los Diputados. El otro 50% estaría formado por los Diputados de Gobierno.
No es culpa de la Democracia Cristiana haber presentado una fórmula política que ha concitado el apoyo de la gran mayoría de la opinión nacional. Tampoco somos responsables de que las diversas ideologías y partidos políticos se debatan muchas veces en la anarquía y en la dispersión y no sean capaces de presentar una fórmula que signifique una alternativa concreta para este Gobierno.
Por eso estamos gobernando con amplia mayoría y sirviendo también los intereses del pueblo.
El señor PALESTRO.-
Muchas gracias. Seguiremos los consejos de Su Señoría.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Millas.
El señor MILLAS.-
Señor Presidente, el Honorable señor Silva Ulloa ha llamado la atención sobre aspectos verdaderamente extraordinarios, desconocidos antes en nuestra legislación y contenidos ahora en las observaciones del Ejecutivo al artículo 3º del proyecto de ley en debate.
En efecto, en el Nº 5) de este artículo 3º el Parlamento aprobó la destinación de 200 mil escudos para la terminación de estadios municipales.
El Ejecutivo ha aumentado a un millón de escudos esta cantidad, pero introdujo una modificación sustancial. No se trata de que en la terminación de esas obras se cumplan determinados propósitos. Concretamente se trata de que estos recursos municipales, constituidos por los empréstitos que se entregan a la Municipalidad y que se sirven con el uno por mil de las contribuciones de bienes raíces, sean transferidos al Fisco y dejen de ser municipales. Se propone entregarlos a la Dirección de Deportes del Estado, para que ella cumpla con su finalidad. Ni siquiera se habla del control, tuición, intervención o fiscalización de este organismo en la inversión de esos fondos, sino de su entrega a él. Felizmente, se señala que esa entidad deberá ejecutar las obras en esa comuna. Pero, repito, la gravedad del caso consiste en que los recursos municipales son transferidos al presupuesto de una institución fiscal.
Además, el Ejecutivo adiciona los diversos ítem, suprime algunos y propone que se aporte Eº1.900.000 a la Dirección de Pavimentación Urbana, a la Dirección
de Obras Sanitarias y a otros servicios, en la forma determinada en las leyes orgánicas de esos servicios, tal como se ha establecido en otras leyes, ya que se trata, en este caso, precisamente, de realizar obras de interés comunal. Pero, a diferencia de cualquiera otra legislación sobre la materia, impone una condición extraordinaria: que el plan que elabore la Municipalidad sea ratificado por el Gobernador del departamento Pedro Aguirre Cerda.
Ya no se trata de la tuición ordinaria sobre los acuerdos municipales que corresponde al Intendente de la Provincia, que, en ficción, representa a la asamblea provincial, en determinados aspectos de sus atribuciones, ni de las facultades de fiscalización que competen a la Dirección de Pavimentación Urbana, que elabora los presupuestos y habitualmente efectúa la inversión de los recursos municipales. Aquí se transfieren las atribuciones legales de la Municipalidad a una persona, al Gobernador del departamentoPedro Aguirre Cerda.
El Honorable señor Fernández ha argumentado que el Ejecutivo y los parlamentarios de Gobierno estiman que la distribución propuesta en el veto es mejor que la establecida en el proyecto despachado por el Parlamento. Además, ha hecho presente que, a su juicio, es más conveniente que la Municipalidad de San Miguel no determine sobre esta materia, porque le merece reparos.
Pero el problema de fondo es otro. Como Poder colegislador, el Ejecutivo puede intervenir en los debates de las Comisiones de la Cámara y del Senado, a través de los Ministros de Estado, de los directores de servicios, de los Subsecretarios, y dar su opinión en las Salas de ambas Corporaciones, por intermedio de los Ministros. Sin embargo, nos encontramos con que, sólo ahora, sorpresivamente, en el veto, propone una distribución que no sólo es distinta, sino que también establece que algunos de estos fondos dejarán de pertenecer a la Municipalidad e irán a adicionar el presupuesto de una institución fiscal, como es la Dirección de Deportes del Estado.
En verdad, mucho puede perfeccionarse siempre cualquier distribución de recursos provenientes de empréstitos municipales. En este caso, por una parte, hay interés en que se construya un centro cívico para las reparticiones municipales. Por otra, está la necesidad de completar la urbanización de la comuna, en especial en poblaciones como "Campamento La Victoria", "La Legua", "Colón América" y muchas otras. Además, la Corporación de la Vivienda ha estado entregando sin urbanización una serie de poblaciones, como la "San Joaquín Poniente". Todo esto hace conveniente destinar fondos a estas obras.
Lo grave es que esta distribución se propone como un fardo cerrado. Sin discutir, sin considerar razones, el Ejecutivo formula determinadas proposiciones. Según podemos darnos cuenta, en esto actúan incluso prejuicios. El Honorable colega señor Fernández se ha referido al punto 7 del proyecto despachado por el Congreso, que consignaba la cantidad de 1 millón de escudos para adquirir terrenos destinados a la construcción de poblaciones para empleados y obreros en la comuna. Con el Director de Planeamiento del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, don Juan Honel he visitado los terrenos del futuro Parque Isabel Riquelme. Es un problema gravísimo el que se ha creado en San Miguel por el hecho de que muchas familias sin casa están momentáneamente albergadas en ese lugar, en condiciones horrendas. Si allí se produjera un siniestro, tendríamos que lamentar tragedias terribles. Fuera de esto, gran cantidad de familias sin casa viven, como allegadas, en todas las poblaciones de la comuna. No se encuentran terrenos para resolver este problema habitacional. Entonces, el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo ...
El señor PALESTRO.-
¡Fue indicación del Regidor democratacristiano de San Miguel!
El señor MILLAS.-
Precisamente, a eso me iba a referir. El Ministerio de la Vivienda y Urbanismo ha planteado que la Municipalidad de San Miguel aporte los terrenos, para él dedicarlos a la "operación sitio" o, en general, a la construcción de viviendas. Esta iniciativa fue acogida por el Regidor democratacristiano y aceptada por todos los demás. Aunque la idea fue resistida al principio en la Municipalidad, porque se estimaba que esto debía ser costeado íntegramente por el Fisco, se consideró conveniente destinar estos fondos a la adquisición de sitios. Por lo tanto, éste era un aporte a la realización de un plan habitacional del Gobierno. Si acaso se hubiera conversado más sobre esto, si se hubiera escuchado la opinión de los propios técnicos del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo probablemente, se habría podido encarar en otra forma esta distribución de recursos.
Por otra parte, el Ejecutivo suprime totalmente la construcción de un estadio techado en San Miguel. Sin embargo, allí se ha estado explotando un terreno de propiedad de la empresa "El Melón", del cual se han venido sacando materiales de construcción y que hoy presenta condiciones muy favorables para hacer de él un estadio subterráneo. Convendría construirlo y techarlo, aprovechando el desnivel actual del terreno, como se ha hecho en otras partes del mundo, pues resultaría muy económico. Son también organismos fiscales, como la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, los que tienen diversos proyectos sobre esta materia.
En verdad, en torno de la distribución de estos recursos ha faltado una discusión más amplia y oportuna, con participación de los Diputados democratacristianos del distrito y de los funcionarios de Gobierno, que hubiera permitido despachar un proyecto satisfactorio para todos y atender todas las inquietudes que, desde diversos ángulos, puede plantear cualquier sector de la ciudadanía de San Miguel.
Pero, a juicio de los parlamentarios comunistas, lo más grave es que aquí se establecen modalidades excepcionales, que van en contra del principio de la autonomía municipal.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
¿Me permite, Honorable Diputado? Ha terminado el tiempo de su primer discurso. Puede continuar en el tiempo de su segundo discurso.
El señor MILLAS.-
Gracias.
Nosotros hemos meditado seriamente sobre el peligro que significa la posibilidad de que, aprobada la observación por la mayoría de esta Cámara, pero rechazada en el Senado de la República, ante las razones, muy serias, por las cuales tiene que merecer reparos, quedara la comuna de San Miguel sin ley sobre la materia. En efecto, otros artículos, que no han sido observados, establecen que la inversión de los recursos deberá ceñirse a la distribución determinada en el artículo 3º. Al no haber artículo 3º, ni distribución de los fondos, la ley no podría aplicarse, no sería operante.
Por eso, exactamente igual que los colegas del Partido Socialista, nosotros nos tendremos que abstener en esta materia, pero queremos dejar sentada nuestra protesta. Sabemos que los recursos municipales son muy reducidos y que entre ellos se cuenta el uno por mil de las contribuciones de los bienes raíces, con cargo al cual se financia el servicio de los empréstitos. No es buen procedimiento que el millón de escudos destinado a estadios y a satisfacer necesidades deportivas, sea dedicado a incrementar el presupuesto de la Dirección de Deportes del Estado, que debería efectuar otras obras en la comuna, y sea arrancado del control y de la fiscalización democrática de la Municipalidad de San Miguel. Los colegas democratacristianos y el Gobierno deberían comprender que la Municipalidad es la representante del vecindario de San Miguel. No debieran mirar si el Alcalde es comunista o socialista, o si los Regidores son del "FRAP", sino considerar a la Municipalidad como organismo, con su integración anterior, la de hoy y la de mañana. Lo lógico es que ella administre los campos deportivos de la comuna, de acuerdo con las normas de la Ley de Organización y Atribuciones de las Municipalidades.
Siempre, y aún más claramente, de acuerdo con la ley, recién despachada y promulgada, que ha creado el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, las inversiones en pavimentación, en obras de equipamiento comunitario, se han efectuado a través de organismos como la Dirección de Pavimentación Urbana, la de Obras Sanitarias, etcétera. No es justo que la de San Miguel aparezca como la única Municipalidad de Chile en interdicción, cuyas inversiones tengan que ser realizadas con la anuencia de un funcionario que es el representante del Presidente de la República en el departamento.
Por esto, los parlamentarios comunistas estimamos que esta observación sienta un pésimo precedente, rompe el criterio establecido en toda nuestra legislación sobre la materia y viola el principio de la autonomía municipal.
En defensa de este precedente tan funesto, es pobre argumento señalar la existencia de críticas a la Municipalidad en cuestión. Ellas pueden dar margen a denuncias a la Contraloría General de la República; a observaciones del Intendente de la Provincia, autoridad que, de hecho, en muchas de sus atribuciones representa a la asamblea provincial; a una discusión pública; a una denuncia sobre la inversión de los fondos. Por lo demás, cualquier inversión tendría que ser autorizada por la mayoría municipal. El Municipio de San Miguel está integrado actualmente por un Regidor radical, uno democratacristiano, uno socialista y uno comunista. No hay allí mayoría absoluta de ningún sector en este instante.
Pero, en lugar de entablar un debate democrático sobre la materia, en vez de considerar a ese Municipio como un organismo democrático permanente, se ha preferido establecer normas excepcionales que, en verdad, resultan odiosas.
Por eso, los parlamentarios comunistas nos abstendremos de dar nuestros votos a la observación formulada por el Presidente de la República.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
La Honorable señora Correa le solicita una interrupción.
El señor MILLAS.-
Se la concedo con el mayor gusto.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Puede hacer uso de la interrupción la Honorable Diputada.
La señora CORREA.-
Señor Presidente, sólo quiero hacer presente al Honorable Diputado señor Millas que el aporte a la Dirección de Deportes del Estado se destinará, en todo caso, a construir edificios para la Municipalidad de San Miguel. Entendemos que ése es el objetivo de la disposición. No podemos suponer otra cosa. Tenemos el convencimiento de que los edificios pertenecerán a la Municipalidad de San Miguel. Como el señor Diputado, conocemos las necesidades de esta comuna y sabemos que requiere obras de adelanto. Pero queremos que las inversiones sean controladas y bien hechas.
Nada más.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Puede continuar el Honorable señor Millas.
El señor MILLAS.-
Señor Presidente, desgraciadamente, el texto de la observación del Ejecutivo contradice lo planteado por la Honorable colega.
Si se hubiera determinado que la inversión de los fondos se haría por intermedio de la Dirección de Deportes del Estado, nosotros habríamos estado totalmente de acuerdo. Pero aquí se trata de dar un aporte a este organismo.
Nosotros sabemos cómo administra esa Dirección los campos deportivos. Conocemos los problemas que se han presentado en esta materia en San Miguel y en muchas comunas de Chile. La Dirección tiene un criterio amplio. Por ejemplo, considera las necesidades de toda una provincia. En cambio, en cierto momento, las Municipalidades defienden los intereses de los deportistas de determinadas poblaciones de su propia comuna.
No nos oponemos a que las inversiones se efectúen con todos los controles adecuados, con todas las garantías del caso. Estamos por cualquier disposición de este tipo. Lo que objetamos es que la ley se limite a dar un aporte a la Dirección de Deportes del Estado. Esto no se puede comparar con los aportes a la Dirección de Pavimentación Urbana o a la de Obras Sanitarias, porque en esos casos, está reglamentada legalmente la forma en que dichos servicios administran e invierten los recursos, de lo cual dan cuenta a las Municipalidades.
En todo caso, quisiéramos que la interpretación indicada por la señora Correa fuese la que rigiera en los hechos, en la aplicación de la ley, porque, indudablemente, es demasiado odioso que los recursos municipales se destinen a subvencionar y a facilitar el cumplimiento de sus funciones a instituciones que tienen presupuesto propio.
He dicho.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Turna.
El señor TUMA.-
Señor Presidente, también estimo monstruoso este veto, porque viola las facultades de los Municipios.
Llevo cinco años en esta Cámara y es la primera vez que veo observaciones en las cuales, como ha dicho el Honorable señor Millas, se declara poco menos que en interdicción a una Municipalidad, a la de San Miguel, como si fuera menor de edad. La verdad es que, si yo fuera Regidor de ella, por dignidad no aceptaría siquiera que se aplicara esta ley.
-Hablan varios señores Diputados a la, vez.
El señor TUMA.-
Es increíble que se quiera sentar este precedente, aceptando un veto de esta naturaleza.
Por otra parte, cabe preguntar lo siguiente: ¿por qué la Dirección de Deportes del Estado administrará fondos provenientes de un préstamo que deberá financiar la Municipalidad de San Miguel con sus propios recursos?
Como ejemplo de la iniciativa municipal, cito el caso del Estadio Municipal de Temuco, uno de los mejores del país después del Estadio Nacional. Se construyó con sólo 500 millones de pesos. Al mismo señor Walker, Director de Deportes del Estado, quien asistió a su inauguración, le pareció increíble que esa obra se hubiera ejecutado con tan pocos recursos económicos.
Sé lo que es encomendar la ejecución de algunas obras a ciertas reparticiones públicas. Por ejemplo, los presupuestos que presenta en algunos casos la Dirección de Pavimentación Urbana no responden a la realidad: son tan elevados, que, prácticamente, no pueden realizarse los trabajos. Por desgracia, la ley establece que todas las inversiones y obras públicas deben hacerse a través de organismos como el señalado. La Dirección de Obras Sanitarias presentó en 1962 un presupuesto de 40 millones de pesos para sanear un estero en Loncoche, labor que la Municipalidad de la comuna ejecutó por 7 millones de pesos. Esta misma Dirección tenía un presupuesto de 467 mil pesos por hectárea, para sanear el estero Pumalal en Temuco, o sea un total de más de 260 millones de pesos; en circunstancias que los comuneros harán el trabajo por 30 millones de pesos.
El señor LORCA (don Alfredo).-
Eso no está en San Miguel.
El señor TUMA.-
Por estas razones, estimo que la Municipalidad de San Miguel, es decir, la misma que solicita autorización para contratar préstamos, debe distribuir e invertir esos recursos en la forma que estime conveniente.
Por otra parte, el Honorable señor Fernández nos ha querido dar consejos y normas sobre cómo debemos conducirnos y ganar elecciones y sobre cómo deben actuar las Municipalidades. Pues bien, los Honorables colegas democratacristianos constituyen mayoría en la Cámara y en virtud de ella se sienten respaldados por el pueblo; entonces, me pregunto: si existe mayoría comunista socialista en la Municipalidad de San Miguel, ¿no ha sido la voluntad del pueblo la que determinó esa mayoría? ¿Por qué no se respeta a esa mayoría? ¿Por qué se empiezan a suponer manejos dudosos? ¿Por qué ha habido palabras capciosas?
¿Por qué, al hacerse referencia a inversiones, se dice que el dinero podría quedar enredado entre los dedos, los que se moverían como los del señor Agudiez cuando hace hablar a sus muñecos?
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor TUMA.-
¿Por qué vienen a dictarnos normas sobre esta materia?
Creemos que el debate no se ha desarrollado en les términos respetuosos que merecen las Municipalidades, porque se ha discutido este problema relacionándolo con materias políticas. Estimamos que esas Corporaciones merecen confianza y respeto, ya que sus miembros son elegidos por voluntad popular. En consecuencia, a nuestro juicio, se vulneran las facultades municipales al entregar estos fondos a determinados organismos, sobre todo a la Dirección de Deportes del Estado. Porque según el veto, la Municipalidad de San Miguel pedirá dinero prestado para aportarlo a esa Dirección, la cual no estará obligada a construir el estadio techado.
Por eso, estoy de acuerdo con lo expresado por los Honorables señores Silva Ulloa y Millas, porque, aun cuando el sentido de su redacción fuera distinto, esta observación no corresponde a la realidad.
Estimo que debemos rechazar este veto, porque su redacción no es la usual en la legislación relativa a préstamos municipales.
Nada más.
El señor ARAVENA (don Jorge).-
El Honorable señor Turna no ha leído el proyecto completo.
El señor CABELLO.-
Pido la palabra.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor CABELLO.-
Señor Presidente, después de este debate y de la desconfianza manifestada por algunos parlamentarios democratacristianos acerca de la distribución de estos préstamos en beneficio de la Municipalidad de San Miguel, quiero agregar que también nosotros sentimos bastante desconfianza.
Hemos estado viendo que, así como hay paralelismo sindical, también se está empezando a crear el paralelismo deportivo. Hemos conversado con directivas de instituciones con ciento veinticinco mil asociados, como "ANDABA", que se ha visto perseguida hasta cierto punto por la Dirección de Deportes del Estado, porque no está en su línea. Y esto duele. El Honorable señor Fernández ha dicho que no merece confianza quien no es demócrata-cristiano y no hay que darle...
El señor FERNANDEZ.-
No he dicho eso.
El señor CABELLO.-
Esa es la interpretación que hago de sus palabras y tengo libertad para hacerlo.
También estamos viendo como los deportistas, día a día, formulan reclamos contra los procedimientos de la Dirección de Deportes del Estado. Al Honorable señor Garay le consta que la directiva de "ANDABA" en varias oportunidades ha protestado porque, incluso se ha hablado de suspender campeonatos nacionales, en vista de que esa asociación no está en la línea de esa Dirección. No aceptamos esta actitud. No podemos permitir que se rompa la unidad que existe en el deporte, base de la cultura y salud de nuestro pueblo.
Por eso levantamos nuestra voz para decir que nos abstendremos de votar las observaciones del Ejecutivo al proyecto de ley que autoriza a la Municipalidad de San Miguel para contratar empréstitos. No seríamos sinceros si apoyáramos algo que dividirá al deporte. Nosotros sabemos que en San Miguel y en todo Chile se está ayudando a aquéllos que están de acuerdo con la Dirección de Deportes del Estado. Incluso algunos democratacristianos han llegado a decir que el señor Horacio Walker se está haciendo una plataforma electoral para una próxima candidatura a Senador. Por eso, frente a la desconfianza manifestada por Sus Señorías hacemos presente la nuestra.
-Hablan varios señores Diputados a la vez.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Honorables Diputados, ruego a Sus Señorías guardar silencio.
El señor CABELLO.-
Yo creo que autorizar a una Municipalidad para contratar préstamos y que sean los Gobernadores quienes distribuyan las "dádivas" significará que, más adelante, incluso en la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas y otros organismos se observará previamente la mano a la cual se dará dinero y se buscarán los probables votos. Pero quienes llevamos varios años en el deporte no podemos permitir una división de esta familia que ha sido siempre unida.
El señor FUENTES (don Samuel).-
Pido la palabra.
El señor RIOSECO.-
Pido la palabra.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Samuel Fuentes; y a continuación, el Honorable señor Rioseco.
El señor FUENTES (don Samuel).-
Señor Presidente, me parece que lo más grave del veto de Su Excelencia el Presidente de la República es la facultad que se otorga al Gobernador del DepartamentoPedro Aguirre Cerda para inmiscuirse en la inversión de fondos municipales obtenidos a través de un préstamo. Al respecto apelo al conocimiento de los parlamentarios antiguos, para que prueben, digan o sostengan que en una ley de empréstito se autorizó a un Gobernador o Intendente para distribuir dineros municipales.
A propósito de lo que señaló el Honorable señor Turna, recuerdo que el Gobierno pasado, cuando la Municipalidad de Temuco construía su estadio, no sólo le entregó fondos para terminarlo, sino que, a través de una ley, determinó que ella los invirtiera a su real amaño y saber, de acuerdo con la responsabilidad que tienen todas las Municipalidades de la República.
Me parece una barbaridad autorizar a un Gobernador, con los votos de los Diputados de Gobierno o de otro partido, en un proyecto de esta naturaleza, en una ley de empréstito municipal, que gravará a los contribuyentes de una comuna, para que se inmiscuya en la distribución de los fondos. Esto lo considero una monstruosidad, como decía el Honorable señor Turna.
Creo que Su Excelencia el Presidente de la República no ha reparado en el verdadero alcance del veto. Con la mejor intención, ha creído que obra bien al observar la distribución de los recursos. Pero nosotros, con algún criterio, con alguna responsabilidad, podemos decirle, como en otras ocasiones, que no lo aceptamos, que nos quedamos con el acuerdo municipal, requisito previo para que cualquiera corporación edilicia pueda solicitar empréstitos, el cual además, debe ser autorizado por la asamblea provincial.
En este caso no sólo se está atropellando a la Municipalidad de San Miguel, sino también al Intendente de la provincia, representante de la asamblea provincial.
Por este motivo, llamo la atención de los Honorables colegas de la Democracia Cristiana hacia el hecho de que no deben creer que porque el veto viene con la firma del Presidente de la República están obligados a aceptarlo. Seguramente él no ha reparado en estas cosas. El Excelentísimo señor Frei fue legislador y estoy cierto de que habría rechazado un veto de esta naturaleza, enviado por el señor Ibáñez o por el señor Alessandri, tanto por respeto al fuero parlamentario como por respeto a la autonomía de las asambleas provinciales y de las Municipalidades.
Por estas razones, estamos con el acuerdo de la Municipalidad de San Miguel.
Cedo los últimos dos minutos al Honorable señor Rioseco, señor Presidente.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
Con la venia de Su Señoría, tiene la palabra el Honorable señor Rioseco.
El señor RIOSECO.-
Señor Presidente, por el número 5 de este artículo sustitutivo el Ejecutivo propone que los fondos que el proyecto del Congreso y el acuerdo municipal habían destinado a la construcción del estadio techado y terminación de estadios municipales sean aportados a la Dirección de Deportes del Estado para ejecutar obras destinadas a habilitar campos de deportes en la comuna, -no dice de quién será el dominio- a mejorar los estadios municipales o construir nuevos estadios. Ahora bien, ¿qué sucede en esos estadios directamente administrados por la Dirección de Deportes del Estado?
Mi Honorable colega, el señor Cabello, se ha referido en parte a ello, al expresar que, inclusive, se ha intervenido en las actividades deportivas, impidiendo que se realicen campeonatos de organismos que no le son aceptos o incondicionales, como es el caso del campeonato nacional de fútbol de Los Ángeles, en el cual iban a participar deportistas de los barrios, desde Arica a Magallanes. En esa oportunidad, ya se había conseguido alojamiento en el regimiento y alimentación de parte de la Municipalidad. Sólo faltaba obtener los pasajes, los que serían aportados por la Dirección de Deportes del Estado.
A pesar de la orden del señor Ministro del Interior, esos pasajes no fueron concedidos y, además, se influyó ante los Consejos Locales de Deportes para que no se prestaran canchas fiscales a esos clubes de deportes de los barrios. De manera que la Dirección de Deportes del Estado está procediendo en forma abusiva, por una parte y, por otra, está impidiendo el desarrollo libre del deporte en Chile. .
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
¿Me permite, señor Diputado? Ha llegado la hora de término del Orden del Día.
Solicito el asentimiento unánime de la Sala para votar de inmediato las observaciones del Ejecutivo a este proyecto.
El señor FUENTEALBA.-
No, señor Presidente.
El señor BALLESTEROS (Presidente).-
No hay acuerdo. Quedará pendiente.
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