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- rdf:value = " CONVENIOS PARA PAGO DE SUBSIDIOS POR ENFERMEDAD DEL SERVICIO MEDICO NACIONAL DE EMPLEADOS.El señor FIGUEROA (Secretario).-
Corresponde tratar el proyecto de la Cámara de Diputados que autoriza al Servicio Médico Nacional de Empleados para convenir con determinadas empresas un sistema para que éstas paguen directamente a sus empleados los subsidios "por enfermedad.
La Comisión, en informe suscrito por los Honorables señores Valenzuela (presidente), Noemi y Luengo, recomienda a la Sala aprobarlo con diversas modificaciones.
Los antecedentes sobre el proyecto figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En segundo trámite, sesión 1ª, en 4 de junio de 1969.
Informe de Comisión:
Salud, sesión 45ª, en 9 de septiembre de 1969.
El señor PABLO (Presidente).-
En discusión general.
Ofrezco la palabra.
El señor REYES.-
Concuerdo con el proyecto, salvo con lo dispuesto en el artículo 1°, en cuanto a que una empresa deberá contar con cien o más empleados particulares para pagar directamente a sus empleados los subsidios por enfermedad. En cambio, el artículo 2º originado en indicación del Honorable señor Olguín dispone que el Servicio Nacional de Salud podrá convenir con las empresas que tengan más de diez obreros, el pago directo por éstas de los subsidios por enfermedad. Como es natural, no hay concordancia alguna entre las cantidades señaladas en ambas disposiciones. Tal vez para el mejor funcionamiento del sistema sería preferible autorizar estos convenios con empresas de cierta importancia, a fin de no abocarse a dificultades de fiscalización.
Rogaría a algún miembro de la Comisión que me diera una explicación al respecto, pues es la única duda que la iniciativa me merece.
El señor OLGUIN.
El objetivo del proyecto es obvio: facilitar el pago de los subsidios por medio de un sistema más expedito.Todos sabemos que el Servicio Nacional de Salud paga ese beneficio a los obreros con un retraso habitual de dos o tres meses, lo cual significa un ir y venir de los recursos correspondientes: desde el patrón al Servicio de Seguro Social, de éste, al Servicio Nacional de Salud, para llegar finalmente a manos del trabajador, quien recibe el subsidio en Caso de reposo por enfermedad.
Soy autor del segundo artículo, tendiente a resolver el problema mencionado. Propusimos un mínimo de diez obreros debido a que el monto de las imposiciones es mayor en el Servicio de Seguro Social; de modo que la cantidad que el patrón debe aportar a este último organismo es de cierta consideración. El empleador pagará directamente el subsidio al obrero, sin peligro de sobregirarse, porque se resarcirá con las imposiciones que debería aportar al instituto previsional.
En cuanto al Servicio Médico Nacional, el aporte a la Caja es más reducido y alcanza a 1%. Debido a ello se fijó una cantidad mayor. Quizás sea factible reducir esta cifra, a fin de que una mayor cantidad de empresas pueda celebrar los convenios de que sé trata, que constituyen un beneficio indudable para los empleados, quienes podrán recibir con mayor rapidez sus subsidios de enfermedad.
Estas razones explican que se hayan colocado cantidades diferentes en lo que respecta a obreros y empleados. Personalmente, soy partidario de establecer cifras similares.
El señor PABLO (Presidente).-
Me parece que hay tres posibilidades de resolver el problema: primero, fijar una cantidad de cien obreros y empleados en las respectivas disposiciones; segundo, establecer diez en ambos casos, y, por último, acordar una cifra intermedia, que podría ser de 20 empleados y 20 obreros.
El señor CONTRERAS.-
Estimamos que esta iniciativa beneficiará a los trabajadores.
De acuerdo con la experiencia que hemos recogido, desde hace bastante tiempo el Servicio Nacional de Salud no cuenta con los recursos necesarios para afrontar el pago de subsidios a los obreros, pues todos sabemos su verdadera situación económica.
Es conveniente meditar en la cantidad de obreros, que establece el artículo 2º, para que una empresa pueda suscribir un convenio. Sin embargo, ¿estarán los patrones en situación de pagar oportunamente los subsidios a sus trabajadores? Formulo esta pregunta porque ni siquiera las grandes empresas prestan la debida atención a sus obreros. Al respecto, debo referirme al convenio existente entre el Servicio Nacional de Salud y la Chile Exploration Company. Todos sabemos que, por lo general, la cantidad de médicos de que dispone la empresa en su hospital es insuficiente, hecho más significativo en el caso de especialistas. Algo similar ocurre en María Elena, empresa que también ha suscrito convenios de atención médica; sin embargo, el centro asistencial carece en la actualidad de pediatras, ginecólogos, oculistas, etcétera. Por eso, los demás profesionales deben atender toda clase de enfermedades, aun cuando no sean de su especialidad. La situación es parecida en Chuquicamata donde un pediatra atiende cuarenta niños en dos horas.
Tengo la seguridad de que el Servicio Nacional de Salud no podrá contar con personal suficiente para fiscalizar a la enorme cantidad de empresas que suscribirán los convenios, a fin de que éstas cumplan oportunamente con el pago de los subsidios.
Tales son las dudas que nos asisten frente al proyecto en debate, sin desconocer su importancia, por estimar que beneficiará a los trabajadores. Por muchas deficiencias que la iniciativa contenga, con toda seguridad será mejor que el actual sistema existente en el Servicio Nacional de Salud, pues hoy día los subsidios se pagan con notorio retraso.
Repito: a los patrones que cuentan con diez obreros les será sumamente difícil cumplir oportunamente las obligaciones que los convenios le impondrán.
Los Senadores comunistas votaremos favorablemente, a pesar de los temores a que hice referencia. Deseamos que se hagan llegar al Servicio Nacional de Salud nuestras quejas respecto de la forma en que algunas empresas, como la Chile Exploration, en Chuquicamata, y la An glo Lautaro, en Tocopilla, cumplen los convenios de atención médica de sus ira bajadores.
El señor LUENGO.-
Las observaciones formuladas a lo largo del debate harán meditar acerca de la conveniencia de aprobar la iniciativa en la forma propuesta. El proyecto pretende facilitar el pago del subsidio a empleados y obreros en caso de enfermedad.
Se ha propuesto que puedan suscribir los convenios las empresas que tengan diez obreros o cien empleados. El Honorable señor Contreras planteó sus dudas acerca de que los patrones que tengan .diez obreros bajo sus órdenes puedan cumplir oportunamente las obligaciones que el convenio les impone.
Por considerar acertadas dichas observaciones, me permito insinuar la posibilidad de fijar en 25, tanto el número de obreros como el de empleados. Tal cifra dará mayores garantías a los trabajadores, pues, como todos sabemos, es la misma que permite formar sindicatos, organismos que seguramente intervendrán y se preocuparán de que las empresas cumplan las disposiciones pertinentes.
El señor GARCIA.-
Los Senadores nacionales concurriremos con nuestros votos a la aprobación de este proyecto que viene a resolver el problema del atraso en el pago de subsidios a los trabajadores enfermos. En la actualidad, éstos enfrentan una verdadera tragedia, porque no pueden realizar las diligencias respectivas y se ven en la necesidad de encargar a otras personas los trámites correspondientes. Finalmente, después de varios meses logran obtener la cancelación del beneficio, que nos ocupa.
Sé de trabajadores que no han podido conseguir el pago de subsidios desde la vigencia de la ley. Por consiguiente, por malo que sea este sistema, será mejor que el actual, a menos que éste se agilice alguna vez y permita a obreros y empleados obtener rápidamente los pagos correspondientes.
En cuanto a las observaciones del Honorable señor Luengo, debo advertir que no es obligatorio que el Servicio Nacional de Salud suscriba estos convenios. Sólo se lo faculta para ello. De modo que corresponderá a este organismo disponer las garantías necesarias para el cumplimiento de las disposiciones de los convenios suscritos por las empresas.
Quiero hacer una observación a propósito de las palabras del Honorable señor Contreras. El hospital de la Chile Exploration Company está considerado como uno de los mejores del país, no sólo en cuanto a elementos, sino a las rentas que paga a su personal. No estoy de acuerdo tampoco con su opinión respecto del Hospital que mantiene la empresa El Teniente, pues aunque es bastante inferior a aquél, no puede considerarse deficiente. Digo lo anterior, porque los obreros que se instalarán próximamente en la ciudad de Rancagua han pedido el traslado de dicho establecimiento asistencial, pues no desean ser atendidos en el Servicio Nacional de Salud. Ello demuestra que los asalariados prefieren el hospital de la empresa al del Servicio Nacional de Salud, aunque posea todos los defectos señalados por el Honorable señor Contreras. Por eso están exigiendo su traslado a Rancagua.En síntesis, el proyecto es conveniente, porque resolverá la desesperada situación en que se encuentran algunos sectores de empleados y obreros que no reciben oportunamente el subsidio mediante el mecanismo actual.
El señor VALENZUELA.-
Como han explicado algunos Honorables colegas, la iniciativa en debate reviste extraordinaria importancia, porque facilitará el pago de subsidios en dos servicios importantes por el número de empleados y obreros que deben atender.
Frente a las observaciones formuladas por el Honorable señor García, deseo dejar constancia de que en el breve lapso que lleva en vigencia la ley de Medicina Curativa no alcanza a un año ya se han entregado un millón ochocientos mil "carnets" a los beneficiarios. Es decir, se ha realizado una labor de extraordinaria trascendencia y utilidad en beneficio de los empleados.
La idea de facultar al Servicio Médico Nacional de Empleados para convenir, con las empresas que ocupen más de cien empleados particulares, el pago de subsidios por enfermedad, tiene por objeto agilizar la cancelación de dicho beneficio. Es decir, la iniciativa favorece a quienes requieren la atención que brinda la ley de Medicina Curativa.
En la Comisión de Salud Pública, junto con el Honorable señor Olguín, presentamos una indicación, que originó el artículo 2º del proyecto, a fin de conceder la misma facultad al Servicio Nacional de Salud con relación a los obreros. Nuestro espíritu fue posibilitar, mediante el pago directo, la atención oportuna de los asalariados, quienes, a veces, para tramitar la cancelación de subsidios por enfermedad, deben hacer largos viajes hacia las respectivas instituciones, situación que los perjudica en forma notoria.
Por eso, y considerando las observaciones formuladas por los Honorables señores García y Luengo, me parece que, si hubiera unanimidad, podríamos fijar en 25 el número de empleados y obreros a que se refieren los artículos 1º y 2º. De este modo se haría factible la participación de los sindicatos, que garantizaría a los trabajadores el fiel cumplimiento de los convenios.
Se aprueba en general el proyecto.
El señor PABLO (Presidente).-
Se han presentado diversas indicaciones a esta iniciativa.
Solicito el acuerdo del Senado para tratarlas de inmediato.
Acordado.
Se aprueban los artículos 1° y 2º.
El señor FIGUEROA (Secretario).-
Los Honorables señores Luengo y Contreras formularon indicación para sustituir, en el artículo 1°, la cifra 100 por 25, y en el 2º, 10 por 25.
Se aprueba, con el voto en contra del Honorable señor García.
Se aprueba el artículo 3º en la forma propuesta por la Comisión.
El señor FIGUEROA (Secretario).-
Además, ha llegado a la Mesa una indicación del Honorable señor Aguirre Doolan para consignar el siguiente artículo nuevo:
"La casa patronal del predio denominado Puyara!, en la comuna de San Nicolás, provincia de Ñuble, departamento de San Carlos, recientemente expropiado a su propietariodon Ismael Martín por la Corporación de la Reforma Agraria, deberá ser transferido al Servicio Nacional de Salud a título gratuito, como asimismo el recinto adyacente que han formado su parque, jardines y dependencias.
"El Servicio Nacional de Salud destinará la casa habitación y sus dependencias a la instalación de un Hospital, casa de* reposo y Asilo de Ancianos de la provincia de Ñuble."
El señor PABLO (Presidente).-
La Mesa deplora declarar inadmisible la indicación en este proyecto.
Terminada la discusión de la iniciativa.
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