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- rdf:value = " RECEPCIÓN A PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE LOS COMUNES DE CANADÁ, SEÑOR PETER MILLIKEN.
El señor MOREIRA ( Vicepresidente ).- Señoras diputadas y señores diputados, la Cámara de Diputados recibe a los representantes de la Cámara de los Comunes de Canadá.
-Ingresan a la Sala la señora Alejandra Sepúlveda, Presidenta de la Cámara de Diputados; con el señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá, y la delegación que lo acompaña.
-Aplausos.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Excelentísimo señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá, honorables diputados que lo acompañan, honorable Cámara:
Es motivo de gran alegría para la Cámara de Diputados, que me honro en presidir, recibir al Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá y a los miembros del Parlamento que lo acompañan.
Es bueno para los pueblos que nos han entregado un mandato, que sus representantes se junten para intercambiar experiencias y compartir anhelos que los unen. Es bueno también que, en un mundo marcado por la globalización e interdependencia, los parlamentarios de regiones geográficas tan distantes nos reunamos a compartir y a evaluar problemas que aquejan al ciudadano común, que tantas veces espera de nosotros respuestas concretas a su vida cotidiana.
Si alguien piensa que las comunicaciones virtuales pueden sustituir esta reunión, nosotros afirmamos que nada podrá jamás reemplazar el encuentro personal y la acogida calurosa y fraterna que se da entre personas que tienen la alta misión de representar y legislar para sus pueblos.
Nunca antes en la historia esto fue tan importante. Ligados por acuerdos de libre comercio que hacen que nuestras economías se unan en esfuerzos comunes de desarrollo e intercambio, éstas suscitan a su vez nuevos problemas como la situación interna de nuestras pequeñas y medianas empresas, la promoción de los derechos laborales, la situación de las minorías étnicas y los nuevos flujos migratorios que, de no abordarse de manera conjunta, alcanzarían dimensiones continentales y planetarias.
Al reunirnos hoy en este Congreso, queremos reanudar un diálogo que ya hemos cultivado en múltiples encuentros continentales, tales como el Foro Interparlamentario de las Américas.
Canadá, nación formada por un crisol de culturas y etnias a lo largo de su historia, tiene mucho que aportar a naciones como la nuestra que comienza a enfrentar problemas de integración interna, de desarrollo sustentable en zonas de conservación y de biodiversidad.
No menos importante es que países como el nuestro, en el sur profundo de América, dialogue con un país del hemisferio norte en el desafío que representa el desarrollo de una vida más humana en este inicio del tercer milenio.
En estos días, cuando Chile ha vivido la peor catástrofe de su historia, que ha golpeado a tantas familias con la pérdida de seres queridos y la destrucción de buena parte de nuestro aparato productivo, hemos sentido la cercanía de Canadá y de tantas naciones que han querido manifestar su solidaridad en esta hora de aflicción para tantas familias de nuestra patria.
Canadá, con su enorme desarrollo en la tecnología del uso de la madera, abre un campo interesante en la cooperación que tanto necesitamos para la reconstrucción de las zonas devastadas por el terremoto y maremoto.
En esta Corporación encontrarán siempre un lugar de diálogo y de cooperación para estrechar lazos de fraternidad entre nuestras naciones y para enfrentar los desafíos de nuestros pueblos.
Sin duda, está en nuestras manos continuarlo.
¡Bienvenidos!
(Aplausos).
Tiene la palabra el señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá.
El señor MILLIKEN (Traducción de su discurso pronunciado en inglés).- Señora Presidenta , señores Vicepresidentes, miembros de la Cámara de Diputados, señor embajador, colegas, damas y caballeros:
Para mí, es un gran privilegio estar hoy aquí para dirigirme a la Cámara de Diputados, en la conmemoración del histórico Bicentenario. ¡Felicitaciones por los 200 años de independencia! Ésta es una excelente oportunidad para traerles los saludos y buenos deseos de mis colegas, los miembros de la Cámara de los Comunes de Canadá, algunos de los cuales me han acompañado en este viaje a Chile. Hoy está presente un miembro de cada uno de los cuatro partidos políticos reconocidos en nuestra Cámara: el señor Wayne Easter, del Partido Liberal de Canadá; el señor Michel Guimond, del Bloque de Quebec; la señora Denise Savoie, del Nuevo Partido Democrático de Canadá, y el señor Bruce Stanton, del Partido Conservador de Canadá, que es el partido gobernante.
En nombre de ellos y en el mío propio, les expreso mi gratitud por la calida bienvenida y la hospitalidad que hemos recibido desde que llegamos ayer a vuestro hermoso país.
En marzo de 2005, me correspondió hacer una visita oficial similar y estoy muy contento de estar aquí nuevamente.
Antes de proseguir, me gustaría expresar mi más profunda simpatía y mis condolencias al pueblo de Chile, que está sufriendo las consecuencias del devastador terremoto y tsunami que azotaron a vuestro país en febrero. Los canadienses estamos profundamente conmovidos por las pérdidas y dificultades que han debido enfrentar nuestros amigos chilenos, pero también admiramos y respetamos la fortaleza, el coraje y la perseverancia que han demostrado en el trabajo para recuperar, reconstruir y seguir adelante.
Chile es un amigo y socio cercano de Canadá y nos alegra haber sido capaces de apoyar a los más afectados por el terremoto, proporcionando ayuda a través del fondo de asistencia de emergencia humanitaria.
El Gobierno de Canadá y varias empresas canadienses en Chile también se han comprometido activamente en las respuestas de emergencia y han contribuido con más de 10 millones de dólares, a través de donaciones, equipamiento y medidas de apoyo directo.
Durante los meses y años venideros, los canadienses continuaremos trabajando mano a mano con el Gobierno chileno y las comunidades más afectadas para ayudar en su recuperación y reconstrucción. A menudo se dice que, si bien nuestros países están ubicados en extremos opuestos de América, nos parecemos en muchos aspectos. Ambos compartimos el compromiso de hacer un buen gobierno y el estado de derecho, estamos rodeados de una belleza natural asombrosa y hemos sido bendecidos con abundantes e importantes recursos naturales. Asimismo, ambos hemos desarrollado sociedades prósperas y abiertas dedicadas a los valores de la paz, la igualdad y el respeto mutuo.
Como parlamentarios y representantes de nuestros ciudadanos, cumplimos nuestra labor de estrechar los vínculos entre nuestros países. Tanto los parlamentarios canadienses como los chilenos, han participado en una serie de intercambios y, como resultado, hemos sido capaces de compartir experiencias y aprender los unos de los otros.
Desde mi punto de vista, no es para sorprenderse que nuestros países hayan forjado una relación tan fuerte y positiva a través de los años. La fortaleza de nuestra amistad tiene como pilar nuestros valores en común. Chilenos y canadienses compartimos un compromiso con la democracia, los derechos humanos, el libre comercio, la apertura de mercados y la cooperación multilateral, en especial para enfrentar desafíos en pos de la paz mundial y la seguridad, como en Haití, donde hemos estado trabajando juntos desde el 2003.
Sinceramente, espero que los lazos estrechados durante esta visita contribuyan a mantener los valores tan preciados para nuestros países. Estos valores compartidos han liderado la cooperación entre Chile y Canadá en una amplia gama de áreas, incluyendo la ciencia, la tecnología, el medio ambiente, la acuicultura y el desarrollo sostenible de la minería.
Nuestros países están trabajando en temas regionales en la Organización de los Estados Americanos y, a nivel global, en las Naciones Unidas. Además, ofrecemos cooperación internacional dentro del Foro Interparlamentario de las Américas.
Los canadienses siempre hemos creído que la cooperación internacional es la base para asegurar la estabilidad en el mundo. Es cierto que no existen garantías. Por ello son tan importantes los compromisos a largo plazo, no sólo a través de las organizaciones internacionales, sino también a nivel bilateral.
Me emociona que Chile y Canadá hayan desarrollado un exitoso programa de becas y subsidios que permiten el intercambio de estudiantes y profesores entre nuestros países. En particular, el programa de movilización juvenil, iniciado en 2008, ha permitido que más de 850 chilenos trabajen, estudien y viajen por Canadá. Creo que iniciativas como ésas son esenciales para acortar las distancias geográficas entre nuestros países y construir conexiones duraderas.
Uno de los pasos más importantes que Canadá y Chile ha dado con el propósito de salvar esa distancia fue la firma del Tratado de Libre Comercio Canadá-Chile, en 1997, que contribuyó a solidificar y a expandir las relaciones comerciales de nuestras naciones. Gracias a este Tratado, la relación comercial y de inversión entre Canadá y Chile es más fuerte que nunca. Las empresas canadienses han desarrollado una importante presencia inversionista en Chile, incluyendo los sectores de minería, servicios financieros, forestales y energéticos, inversión que continúa expandiéndose y diversificándose hacia nuevas áreas, siempre promoviendo y asegurando la importancia de la responsabilidad social y corporativa.
En Canadá, los beneficios de nuestra más estrecha relación con Chile son claramente evidentes. No sólo podemos disfrutar de los exquisitos vinos chilenos, sino también contamos cada vez con más frutas y verduras chilenas para abastecernos durante nuestros largos y fríos meses de invierno. Espero que sus exportaciones continúen aumentando.
Con el fin de solidificar aún más nuestras relaciones económicas, nuestro Primer Ministro , señor Stephen Harper, y la ex Presidenta de la República , señora Michelle Bachelet, suscribieron el Acuerdo Marco de Asociación Chile- Canadá, en 2007, cuando se cumplían 10 años del Tratado bilateral de libre comercio.
Esperamos seguir trabajando con ustedes para continuar expandiendo las relaciones económicas entre Canadá y Chile y para promover niveles aún mayores de inversión e intercambio comercial en beneficio de nuestros países.
Chile es uno de los socios más cercanos de Canadá en América y con quien compartimos muchas ideas. Chile es un aliado importante para nosotros y un brillante ejemplo de estabilidad política y apertura económica para sus países vecinos. De hecho, expandir las relaciones con Chile así como con otros países de América es un objetivo primordial de la política exterior del Gobierno de Canadá.
Las metas de Canadá en este hemisferio incluyen promocionar los valores de la libertad, la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho; construir economías sustentables, incrementando los lazos de inversión e intercambio comercial y enfrentar nuevos desafíos transversales de seguridad.
Canadá ve a Chile como un socio clave en el logro de estos objetivos, tanto en la región como a nivel mundial. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para felicitar a Chile por ser el primer país de Sudamérica en acceder a la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo, en diciembre de 2009. Canadá espera trabajar con ustedes en este importante foro dedicado a la promoción e intercambio de mejores prácticas en la política pública.
Por último, permítanme expresar una vez más el honor y el privilegio que significa para nosotros dirigirnos a ustedes esta tarde. Tanto mis colegas aquí presentes como los que están en Canadá esperan trabajar en conjunto con el Presidente Piñera y con todos los parlamentarios chilenos para continuar estrechando los lazos entre Canadá y Chile.
Sepan que los canadienses están con el pueblo chileno para enfrentar los desafíos que hay por delante.
¡Felicitaciones por el Bicentenario y les deseo salud, amor y tiempo para disfrutar!
-Aplausos.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Agradecemos la presencia del señor Milliken y de la delegación que lo acompaña.
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El señor MOREIRA ( Vicepresidente ).- Señoras diputadas y señores diputados, la Cámara de Diputados recibe a los representantes de la Cámara de los Comunes de Canadá.
-Ingresan a la Sala la señora Alejandra Sepúlveda, Presidenta de la Cámara de Diputados; con el señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá, y la delegación que lo acompaña.
-Aplausos.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Excelentísimo señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá, honorables diputados que lo acompañan, honorable Cámara:
Es motivo de gran alegría para la Cámara de Diputados, que me honro en presidir, recibir al Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá y a los miembros del Parlamento que lo acompañan.
Es bueno para los pueblos que nos han entregado un mandato, que sus representantes se junten para intercambiar experiencias y compartir anhelos que los unen. Es bueno también que, en un mundo marcado por la globalización e interdependencia, los parlamentarios de regiones geográficas tan distantes nos reunamos a compartir y a evaluar problemas que aquejan al ciudadano común, que tantas veces espera de nosotros respuestas concretas a su vida cotidiana.
Si alguien piensa que las comunicaciones virtuales pueden sustituir esta reunión, nosotros afirmamos que nada podrá jamás reemplazar el encuentro personal y la acogida calurosa y fraterna que se da entre personas que tienen la alta misión de representar y legislar para sus pueblos.
Nunca antes en la historia esto fue tan importante. Ligados por acuerdos de libre comercio que hacen que nuestras economías se unan en esfuerzos comunes de desarrollo e intercambio, éstas suscitan a su vez nuevos problemas como la situación interna de nuestras pequeñas y medianas empresas, la promoción de los derechos laborales, la situación de las minorías étnicas y los nuevos flujos migratorios que, de no abordarse de manera conjunta, alcanzarían dimensiones continentales y planetarias.
Al reunirnos hoy en este Congreso, queremos reanudar un diálogo que ya hemos cultivado en múltiples encuentros continentales, tales como el Foro Interparlamentario de las Américas.
Canadá, nación formada por un crisol de culturas y etnias a lo largo de su historia, tiene mucho que aportar a naciones como la nuestra que comienza a enfrentar problemas de integración interna, de desarrollo sustentable en zonas de conservación y de biodiversidad.
No menos importante es que países como el nuestro, en el sur profundo de América, dialogue con un país del hemisferio norte en el desafío que representa el desarrollo de una vida más humana en este inicio del tercer milenio.
En estos días, cuando Chile ha vivido la peor catástrofe de su historia, que ha golpeado a tantas familias con la pérdida de seres queridos y la destrucción de buena parte de nuestro aparato productivo, hemos sentido la cercanía de Canadá y de tantas naciones que han querido manifestar su solidaridad en esta hora de aflicción para tantas familias de nuestra patria.
Canadá, con su enorme desarrollo en la tecnología del uso de la madera, abre un campo interesante en la cooperación que tanto necesitamos para la reconstrucción de las zonas devastadas por el terremoto y maremoto.
En esta Corporación encontrarán siempre un lugar de diálogo y de cooperación para estrechar lazos de fraternidad entre nuestras naciones y para enfrentar los desafíos de nuestros pueblos.
Sin duda, está en nuestras manos continuarlo.
¡Bienvenidos!
(Aplausos).
Tiene la palabra el señor Peter Milliken, Presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá.
El señor MILLIKEN (Traducción de su discurso pronunciado en inglés).- Señora Presidenta , señores Vicepresidentes, miembros de la Cámara de Diputados, señor embajador, colegas, damas y caballeros:
Para mí, es un gran privilegio estar hoy aquí para dirigirme a la Cámara de Diputados, en la conmemoración del histórico Bicentenario. ¡Felicitaciones por los 200 años de independencia! Ésta es una excelente oportunidad para traerles los saludos y buenos deseos de mis colegas, los miembros de la Cámara de los Comunes de Canadá, algunos de los cuales me han acompañado en este viaje a Chile. Hoy está presente un miembro de cada uno de los cuatro partidos políticos reconocidos en nuestra Cámara: el señor Wayne Easter, del Partido Liberal de Canadá; el señor Michel Guimond, del Bloque de Quebec; la señora Denise Savoie, del Nuevo Partido Democrático de Canadá, y el señor Bruce Stanton, del Partido Conservador de Canadá, que es el partido gobernante.
En nombre de ellos y en el mío propio, les expreso mi gratitud por la calida bienvenida y la hospitalidad que hemos recibido desde que llegamos ayer a vuestro hermoso país.
En marzo de 2005, me correspondió hacer una visita oficial similar y estoy muy contento de estar aquí nuevamente.
Antes de proseguir, me gustaría expresar mi más profunda simpatía y mis condolencias al pueblo de Chile, que está sufriendo las consecuencias del devastador terremoto y tsunami que azotaron a vuestro país en febrero. Los canadienses estamos profundamente conmovidos por las pérdidas y dificultades que han debido enfrentar nuestros amigos chilenos, pero también admiramos y respetamos la fortaleza, el coraje y la perseverancia que han demostrado en el trabajo para recuperar, reconstruir y seguir adelante.
Chile es un amigo y socio cercano de Canadá y nos alegra haber sido capaces de apoyar a los más afectados por el terremoto, proporcionando ayuda a través del fondo de asistencia de emergencia humanitaria.
El Gobierno de Canadá y varias empresas canadienses en Chile también se han comprometido activamente en las respuestas de emergencia y han contribuido con más de 10 millones de dólares, a través de donaciones, equipamiento y medidas de apoyo directo.
Durante los meses y años venideros, los canadienses continuaremos trabajando mano a mano con el Gobierno chileno y las comunidades más afectadas para ayudar en su recuperación y reconstrucción. A menudo se dice que, si bien nuestros países están ubicados en extremos opuestos de América, nos parecemos en muchos aspectos. Ambos compartimos el compromiso de hacer un buen gobierno y el estado de derecho, estamos rodeados de una belleza natural asombrosa y hemos sido bendecidos con abundantes e importantes recursos naturales. Asimismo, ambos hemos desarrollado sociedades prósperas y abiertas dedicadas a los valores de la paz, la igualdad y el respeto mutuo.
Como parlamentarios y representantes de nuestros ciudadanos, cumplimos nuestra labor de estrechar los vínculos entre nuestros países. Tanto los parlamentarios canadienses como los chilenos, han participado en una serie de intercambios y, como resultado, hemos sido capaces de compartir experiencias y aprender los unos de los otros.
Desde mi punto de vista, no es para sorprenderse que nuestros países hayan forjado una relación tan fuerte y positiva a través de los años. La fortaleza de nuestra amistad tiene como pilar nuestros valores en común. Chilenos y canadienses compartimos un compromiso con la democracia, los derechos humanos, el libre comercio, la apertura de mercados y la cooperación multilateral, en especial para enfrentar desafíos en pos de la paz mundial y la seguridad, como en Haití, donde hemos estado trabajando juntos desde el 2003.
Sinceramente, espero que los lazos estrechados durante esta visita contribuyan a mantener los valores tan preciados para nuestros países. Estos valores compartidos han liderado la cooperación entre Chile y Canadá en una amplia gama de áreas, incluyendo la ciencia, la tecnología, el medio ambiente, la acuicultura y el desarrollo sostenible de la minería.
Nuestros países están trabajando en temas regionales en la Organización de los Estados Americanos y, a nivel global, en las Naciones Unidas. Además, ofrecemos cooperación internacional dentro del Foro Interparlamentario de las Américas.
Los canadienses siempre hemos creído que la cooperación internacional es la base para asegurar la estabilidad en el mundo. Es cierto que no existen garantías. Por ello son tan importantes los compromisos a largo plazo, no sólo a través de las organizaciones internacionales, sino también a nivel bilateral.
Me emociona que Chile y Canadá hayan desarrollado un exitoso programa de becas y subsidios que permiten el intercambio de estudiantes y profesores entre nuestros países. En particular, el programa de movilización juvenil, iniciado en 2008, ha permitido que más de 850 chilenos trabajen, estudien y viajen por Canadá. Creo que iniciativas como ésas son esenciales para acortar las distancias geográficas entre nuestros países y construir conexiones duraderas.
Uno de los pasos más importantes que Canadá y Chile ha dado con el propósito de salvar esa distancia fue la firma del Tratado de Libre Comercio Canadá-Chile, en 1997, que contribuyó a solidificar y a expandir las relaciones comerciales de nuestras naciones. Gracias a este Tratado, la relación comercial y de inversión entre Canadá y Chile es más fuerte que nunca. Las empresas canadienses han desarrollado una importante presencia inversionista en Chile, incluyendo los sectores de minería, servicios financieros, forestales y energéticos, inversión que continúa expandiéndose y diversificándose hacia nuevas áreas, siempre promoviendo y asegurando la importancia de la responsabilidad social y corporativa.
En Canadá, los beneficios de nuestra más estrecha relación con Chile son claramente evidentes. No sólo podemos disfrutar de los exquisitos vinos chilenos, sino también contamos cada vez con más frutas y verduras chilenas para abastecernos durante nuestros largos y fríos meses de invierno. Espero que sus exportaciones continúen aumentando.
Con el fin de solidificar aún más nuestras relaciones económicas, nuestro Primer Ministro , señor Stephen Harper, y la ex Presidenta de la República , señora Michelle Bachelet, suscribieron el Acuerdo Marco de Asociación Chile- Canadá, en 2007, cuando se cumplían 10 años del Tratado bilateral de libre comercio.
Esperamos seguir trabajando con ustedes para continuar expandiendo las relaciones económicas entre Canadá y Chile y para promover niveles aún mayores de inversión e intercambio comercial en beneficio de nuestros países.
Chile es uno de los socios más cercanos de Canadá en América y con quien compartimos muchas ideas. Chile es un aliado importante para nosotros y un brillante ejemplo de estabilidad política y apertura económica para sus países vecinos. De hecho, expandir las relaciones con Chile así como con otros países de América es un objetivo primordial de la política exterior del Gobierno de Canadá.
Las metas de Canadá en este hemisferio incluyen promocionar los valores de la libertad, la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho; construir economías sustentables, incrementando los lazos de inversión e intercambio comercial y enfrentar nuevos desafíos transversales de seguridad.
Canadá ve a Chile como un socio clave en el logro de estos objetivos, tanto en la región como a nivel mundial. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para felicitar a Chile por ser el primer país de Sudamérica en acceder a la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo, en diciembre de 2009. Canadá espera trabajar con ustedes en este importante foro dedicado a la promoción e intercambio de mejores prácticas en la política pública.
Por último, permítanme expresar una vez más el honor y el privilegio que significa para nosotros dirigirnos a ustedes esta tarde. Tanto mis colegas aquí presentes como los que están en Canadá esperan trabajar en conjunto con el Presidente Piñera y con todos los parlamentarios chilenos para continuar estrechando los lazos entre Canadá y Chile.
Sepan que los canadienses están con el pueblo chileno para enfrentar los desafíos que hay por delante.
¡Felicitaciones por el Bicentenario y les deseo salud, amor y tiempo para disfrutar!
-Aplausos.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Agradecemos la presencia del señor Milliken y de la delegación que lo acompaña.
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