. . . . . . " \nEl se\u00F1or MART\u00CDNEZ .- \nSe\u00F1or Presidente , desde hace mucho tiempo somos testigos de la situaci\u00F3n que afecta a un grupo de compatriotas, denominados \u201Cdeudores habitacionales\u201D.\n \nLa noticia que el pa\u00EDs conoce, y que es muy usual que as\u00ED sea, muestra protestas y movilizaciones, pero dif\u00EDcilmente va al fondo de asunto. Este hecho crea en parte de la opini\u00F3n p\u00FAblica la idea de que esas personas pretenden aprovecharse de su condici\u00F3n de deudores para obtener ventajas que otros sectores no pueden alcanzar. \nQuienes hemos venido representando la realidad en toda su dimensi\u00F3n, estamos conscientes de que hay un problema creado por el Estado de Chile. Es m\u00E1s, est\u00E1 acreditado que hubo enga\u00F1o. Hoy d\u00EDa es f\u00E1cil decir que esto es un tema de privados, pero no se se\u00F1ala c\u00F3mo llegaron a ello ni tampoco se reconoce que la pol\u00EDtica habitacional aplicada en el pa\u00EDs fue desordenada, discriminatoria e interesada, lo que gener\u00F3 m\u00FAltiples y muy serias dificultades a las personas y sus familias. Tampoco se dice que muchas de las viviendas presentaron, desde sus inicios, serias deficiencias en su calidad, algunas de car\u00E1cter estructural y cuyas reparaciones, para hacerlas habitables, han sido a costa del presupuesto de las propias familias.\n \nCuando se analiza la situaci\u00F3n, se van encontrando hechos objetivos, como la existencia de 100 mil remates en proceso para aquellas familias que no est\u00E1n al d\u00EDa en el pago de sus dividendos, as\u00ED como tambi\u00E9n la diversidad de asignatarios de vivienda social, la imposibilidad de acceder a subsidios y leasings para quienes han sido rematados y desalojados. En fin, una serie de hechos que se traducen en pobreza y, por cierto, en angustia y desamparo, lo que hoy se ve agravado por la crisis econ\u00F3mica y sus efectos en el empleo. No olvidemos que una familia laboralmente activa destina por concepto de pago de dividendos m\u00E1s del 60 por ciento de sus ingresos, lo que hace imposible atender las deudas acumuladas. Imaginemos lo que pasa cuando esa persona est\u00E1 cesante. \nTantas veces lo hemos expresado y es oportuno reiterarlo una vez m\u00E1s: esas personas no quieren gratuidad, no es \u00E9se su objetivo; aspiran a algo m\u00E1s noble: justicia. Eso es lo que vienen pidiendo desde hace mucho tiempo y ahora de manera desesperada. \nPor eso, es imprescindible, tal como lo se\u00F1ala este proyecto de acuerdo, que el pa\u00EDs aborde de una vez por todas, y de manera integral, la realidad de estas familias a trav\u00E9s de una pol\u00EDtica cuyo elemento central sea la protecci\u00F3n de las personas, lo que creemos implica medidas como el rec\u00E1lculo del valor de la propiedad y de la deuda actual derivada de los ahorros realizados y el subsidio recibido, la inclusi\u00F3n en los beneficios que se entreguen a la totalidad de la cartera hipotecaria de vivienda social menor a 1.200 unidades de fomento, la condonaci\u00F3n para las familias con un ingreso real igual o inferior al del tercer quintil y el traspaso de la cartera de los deudores titulares de vivienda social de otras instituciones al Banco del Estado, as\u00ED como tambi\u00E9n dar las facilidades para que aquellas personas cuyas viviendas fueron rematadas y desalojadas, puedan volver a postular a los subsidios, porque no podemos condenarlas para siempre.\n \nAsimismo, y como una medida de justicia, estimamos necesario se reconozca el esfuerzo de aquellas familias que se encuentran al d\u00EDa en el pago de sus dividendos. \nEste proyecto se inserta en el esfuerzo que hemos hecho como C\u00E1mara de Diputados para abordar seriamente este problema y que est\u00E1 refrendado en el protocolo que acompa\u00F1\u00F3 a la ley de Presupuestos de 2009. Por eso, pido el apoyo de todos ustedes para este proyecto de acuerdo.\n \nHe dicho. \n " . .