-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/640464/seccion/akn640464-po1-ds6-ds17
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1925
- rdf:type = bcnres:Participacion
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/1
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/1925
- rdf:value = "
El señor ÁLVAREZ (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Alfonso de Urresti.
El señor DE URRESTI.-
Señor Presidente , es importante que este debate avance en una materia que la ciudadanía nos está requiriendo desde hace mucho tiempo: la regulación de la instalación de antenas emisoras y transmisoras de servicios de telecomunicaciones.
Si recogemos las opiniones formuladas en este día, constataremos claramente que estamos ante un proyecto que se queda corto, porque no aborda una serie de aspectos fundamentales que sería conveniente discutir. También es importante y se ha reiterado en forma permanente- que el Ejecutivo le ponga la urgencia que requiere esta iniciativa.
Es tiempo de apurar el tranco y de tomar en serio el tema de la proliferación de las antenas, que prácticamente ha modificado el paisaje de innumerables zonas urbanas. Incluso, se ha llegado a situaciones aberrantes, como instalar antenas en copas de agua potable. De hecho, en la comuna de Paillaco se instaló una en la copa de agua. Los vecinos presentaron un recurso de protección, pero perdieron.
Además, se han instalado antenas cerca de colegios y en diferentes barrios. Repito: es realmente una situación aberrante. En las zonas rurales también hemos visto la instalación de tales aparatos en lugares sagrados de comunidades indígenas.
Sin duda, hay que avanzar más en el debate, pero también se debe dar urgencia al proyecto, por la importancia que tiene para la ciudadanía.
Es necesario seguir con la discusión de ciertos aspectos fundamentales, para despejar las dudas. Por ejemplo, me interesa destacar el principio preventivo. En un inciso del proyecto se establece que “cualquier persona podrá solicitar, a su costa, a la Subsecretaría de Telecomunicaciones, la realización de mediciones de los sistemas radiantes de telecomunicaciones respecto de su densidad de potencia, los niveles máximos de exposición a campos electromagnéticos, la frecuencia y características técnicas de los sistemas radiantes.”.
En este caso, es necesario aplicar el principio preventivo. Es precisamente a las empresas a quienes corresponde establecer y debiera quedar rotulado en cada antena- cuál es la exposición y radiación que provocará cada una de ellas. No podemos establecer que esas mediciones se hagan a costa de los vecinos ya afectados o de algún ciudadano consciente. Esto tiene que establecerse en una norma propia, de entrada, acorde con el principio preventivo. ¿Por qué, como ciudadano, debo requerir a la autoridad? Es justamente la autoridad quien, previamente, debe normar y regular estas situaciones.
Más allá de los discursos de cada diputado , estimo que el Ejecutivo debe poner urgencia al proyecto, pero también tenemos que impedir digámoslo con mucha claridad- que las empresas instalen un lobby atroz en el Congreso Nacional y en muchos otros lugares, para dilatar la tramitación de este proyecto y seguir con la instalación de antenas, que saturan algunas zonas.
No existe coordinación alguna entre las empresas -ya lo señaló un diputado que me antecedió en el uso de la palabra- y, en muchos lugares, en una cuadra hay dos o tres antenas de diferentes compañías. ¿Quién regula esa situación? Obviamente, no pueden ser los vecinos, sino la autoridad. Es necesario dar claridad al respecto. Hay que apurar el tranco, pero, por otro lado, también se debe enviar en mensaje claro y preciso a los lobbystas. ¿Por qué los ciudadanos deben estar esclavizados por la voluntad de estas empresas que, por ahorrarse algunos pesos, instalan antenas en zonas absolutamente residenciales?
Aprovecho la oportunidad de informar al señor ministro que en muchos lugares se arriendan casas completas para instalar una antena, de manera clandestina, durante la noche. Por ejemplo, en el barrio El Bosque, de la ciudad de Valdivia, durante un fin de semana apareció una antena de treinta metros, instalada durante la noche. Los vecinos salen de la ciudad durante un fin de semana y al volver se encuentran con una antena, que afea el lugar, baja la plusvalía de sus propiedades y afecta el entorno.
Es necesario que la autoridad sea más activa y se anticipe a los hechos y no simplemente circunscribir a la Dirección de Obras la medición o establecimiento de la base en que se instalará la antena. Incluso, existe jurisprudencia al respecto, pues algunos fallos han permitido que, por esa vía, al menos se haya logrado frenar la instalación de algunas antenas o que se paguen algunos derechos.
Obviamente, hay que entregarle facultades a la Dirección de Obras, pero también hay que darle protagonismo a los ciudadanos. ¿Por qué la ley de alcoholes le da protagonismo a las juntas de vecinos -algo muy importante- en relación con esa materia, que en muchas oportunidades cambia radicalmente la convivencia en un barrio? ¿Por qué no se tiene el mismo criterio respecto de las antenas? ¿Es más fuerte el lobby de estas empresas? Debemos traspasar autonomía y capacidad de decisión a las juntas de vecinos y a las uniones comunales de juntas de vecinos, porque ahí se encuentra la única forma de prevenir y anticiparse a la instalación indiscriminada de antenas.
¡No nos digan -como pretenden argumentar algunos lobbystas- que es importante continuar con la instalación de antenas para lograr la conectividad! La telefonía móvil ha ayudado mucho a romper el aislamiento de las personas, pero no puede desarrollarse a costa de la calidad de vida de muchos ciudadanos, comunidades indígenas o vecinos que han invertido en su casa y que, de la noche a la mañana, les han instalado esas antenas.
Por lo tanto, hay que apurar el tranco con este proyecto. El Ejecutivo debe darle la urgencia que requiere, porque en todas las ciudades existe un sentimiento transversal de molestia por esta situación, pero también hay que estar atentos al lobby que se despliega, para que las empresas no se escuden detrás de sus lobbystas veo algunos en las tribunas para apurar la instalación de antenas, disfrazándolas de palmeras o adornándolas con ramas u otros ornamentos. Siguen siendo antenas y siguen provocando preocupación en los ciudadanos.
Por ello, nuestro Gobierno tiene que calificar este proyecto con la urgencia que se necesita, para despacharlo de una vez por todas y que los ciudadanos tengan, al menos, la tranquilidad de que legislamos para ellos y no en función de los lobbystas, que van a seguir trabajando en pos de sus intereses personales. Hay que legislar para el bienestar de la ciudadanía.
He dicho.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/640464
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/640464/seccion/akn640464-po1-ds6