. . . . . . . " \nEl se\u00F1or ESPINA.- Se\u00F1or Presidente , me parece muy importante el recuerdo que ha hecho el Honorable se\u00F1or Kuschel con respecto al informe que a\u00F1os atr\u00E1s analiz\u00F3 una materia extraordinariamente relevante.\n \nCoincido en que el caso de denuncia de colusi\u00F3n en contra de tres cadenas de farmacias, conocido hace algunas semanas, reviste especial gravedad. Ello, porque es de la esencia de un modelo de econom\u00EDa social de mercado la libre competencia, as\u00ED como de esta \u00FAltima lo es el respeto a la fe p\u00FAblica. \nEs decir, la libre competencia funciona en la medida que quienes est\u00E9n dispuestos a entrar a las reglas del juego compitan lealmente con el prop\u00F3sito de intentar vender los productos de la mejor calidad al menor precio. Y cuando tal relaci\u00F3n se rompe, se afecta la credibilidad en un modelo que trae progreso a las sociedades si sus reglas se respetan. \nEn ese sistema el Estado no es neutral. Es cierto que cumple un rol subsidiario, pero ello no significa que no haya que poner el acento en lo que tiene que hacer, y no solo en lo que no debe realizar.\n \nEl Estado debe efectuar a lo menos dos cosas: primero, ser eficiente en el uso y distribuci\u00F3n de los recursos que pertenecen a todos los chilenos (porque de ellos provienen); y, en segundo lugar, actuar donde las normas de la libre competencia no sean capaces de resolver problemas sociales acuciantes y graves. \nPero, sobre todo, el Estado ha de regular adecuadamente a fin de que se respeten las reglas del juego.\n \nSe\u00F1or Presidente , cuando se critica a la Administraci\u00F3n P\u00FAblica por actos de corrupci\u00F3n, y ello se se\u00F1ala clara y categ\u00F3ricamente, no puede haber un doble est\u00E1ndar. Deben criticarse con la misma fuerza y decisi\u00F3n los actos corruptos que se cometen en la empresa privada. Y precisamente por ser tales, gran parte de las legislaciones del mundo tipifican con sanciones penales los actos de colusi\u00F3n, porque significan concertarse en forma fraudulenta para alterar las normas de la libre competencia en perjuicio de los usuarios, y en el caso que nos ocupa, de quienes reciben nada menos que medicamentos.\n \nAl Tribunal de Defensa de la Libre Competencia le corresponder\u00E1 determinar la efectividad de las denuncias, y, posteriormente, a la Corte Suprema. Pero hay un hecho evidente: una de las cadenas de farmacias involucradas confes\u00F3 formar parte de una colusi\u00F3n, antecedente que gatilla finalmente el que hoy d\u00EDa exista el proceso de connotaci\u00F3n p\u00FAblica a que nos hemos referido.\n \nObviamente, los tribunales deber\u00E1n resolver sobre el particular y las partes tendr\u00E1n derecho a exponer sus puntos de vista. Mas, frente a tal situaci\u00F3n no es posible ser neutral y, por lo tanto, es preciso manifestar que deben sancionarse con la misma fuerza los actos irregulares cometidos tanto en el sector privado como en el sector p\u00FAblico, sobre todo si en ellos est\u00E1 en juego la fe p\u00FAblica. \nJunto con los Honorables se\u00F1ores Chadwick , Cantero , Garc\u00EDa , Horvath , Allamand y otros Senadores presentamos un proyecto que tiene por finalidad sancionar penalmente la colusi\u00F3n, como ocurre en muchos pa\u00EDses del mundo. Y no hay que tenerle miedo a establecer una normativa de tal naturaleza, porque se trata de un acto de defraudaci\u00F3n a la fe p\u00FAblica.\n \nNo quiero referirme al caso particular en comento, porque -repito- tendr\u00E1 que ser resuelto por la justicia. Pero digamos las cosas como son: se ha afectado la credibilidad de un sistema en el que yo, a lo menos, creo profundamente. \nPor lo tanto, en esta materia debemos proceder en forma categ\u00F3rica, clara y sin doblez. \nEn seguida, la incorporaci\u00F3n de la delaci\u00F3n compensada -con esto termino, se\u00F1or Presidente - representa un gran acierto. Porque mediante esa norma el Estado declara: \"Con tal de que se desarticule una red organizada en perjuicio de los usuarios, estoy dispuesto a aminorar la sanci\u00F3n al involucrado que confiese el hecho\". Se trata de una herramienta que habr\u00E1 de ponerse en pr\u00E1ctica y perfeccionarse, pero, sin duda, constituye un avance importante para descubrir casos de colusi\u00F3n, que representan acciones corruptas en las cuales la prueba siempre es muy dif\u00EDcil.\n \nEn consecuencia, se\u00F1or Presidente, el hecho de que las instituciones funcionen como corresponde, lejos de debilitar el modelo de econom\u00EDa social de mercado, lo fortalece. \nNo es pertinente adelantar culpabilidades, porque en una democracia y en un Estado de Derecho ellas deben ser resueltas por los tribunales. Pero s\u00ED lo es el tener conciencia de que cuando estos actos se cometen en el sector p\u00FAblico o en el privado debemos ser claros y categ\u00F3ricos en orden a no aceptar que ello contin\u00FAe ocurriendo.\n \nHe dicho. \n " .