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- rdf:value = " El señor ULLOA (Vicepresidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Carlos Olivares .
El señor OLIVARES.-
Señor Presidente, estamos frente a un proyecto de ley que pretende entregar más recursos públicos al fracasado Plan Transantiago, bajo la modalidad de un subsidio para el transporte público.
De la sola lectura de la iniciativa, nos podemos dar cuenta de que lo único que le interesa al ministrode Transportes y Telecomunicaciones es lograr el financiamiento del Transantiago, y que el subsidio al transporte público de regiones es sólo un pretexto para que el proyecto sea aprobado en la Cámara.
Aquí se dijo que los recursos servirán para mejorar el transporte público en Santiago. Afirmo, enfáticamente, que eso no es verdad. En el proyecto no hay una sola línea que diga eso. Lo aseveró el propio ministro, señor René Cortázar , en la Comisión de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones: Este proyecto de ley es un subsidio al transporte público y no tiene por qué hablar de disminuir transbordos, de los tiempos de espera o de la congestión del Metro.
De ahí, se deduce que con la iniciativa se busca financiar un sistema de mala calidad, que no respeta a los usuarios, que mantiene a la gente en constante tensión y, lo peor, que no se ve posibilidad alguna de que vaya a mejorar.
El proyecto nada expresa acerca de la modificación de las mallas de recorridos, del aumento de la frecuencia de los buses o de cómo resolver la congestión del Metro. En suma, de cómo mejorar el servicio. Tampoco expresa nada sobre los incumplimientos de los operadores respecto del servicio a los usuarios y de las obligaciones con sus trabajadores.
De todos es conocido que el administrador financiero del Transantiago no ha cumplido con los requerimientos tecnológicos que por contrato está obligado a proporcionar. Uno se pregunta, ¿hasta cuándo vamos a seguir entregando dinero a un sistema fracasado?
El ministro de Transportes prometió que en diciembre de 2007 el déficit del Transantiago estaría en alrededor de 13 millones de dólares. Pues bien, hoy el déficit en promedio es de 40 millones de dólares al mes. Y nada nos asegura que la situación vaya a mejorar.
Represento a las comunas de Cerro Navia , Lo Prado y Quinta Normal, las que han sido duramente golpeadas con la implementación de este plan de transportes. Vivo en Quinta Normal y debo aclarar que la gente ya no cree que entregando más plata pueda mejorar su situación.
Hagamos de una vez lo que la gran mayoría de los usuarios del transporte público quiere: un servicio de calidad. Para ello, debemos terminar con el Transantiago, con un plan que fracasó y que en su momento, hace más de tres años, en este mismo hemiciclo, denuncié lo que sucedería.
No puede haber términos medios. Donde se ha implementado el modelo de licitación de transporte público éste ha fracasado, porque se ha hecho un diseño de laboratorio alejado de la realidad.
Si se requiere de un subsidio, se debe entregar a todos los chilenos por igual. Pero teniendo presente un principio básico: la buena calidad del servicio.
Voy a votar en contra el proyecto, porque no toma en cuenta a las personas y se quiere financiar a las empresas y seguir dando oxígeno a un plan que fracasó.
Votaré en conciencia y defenderé a quienes hacen largas caminatas, a quienes le quitan horas al descanso y a sus familias por culpa de quienes diseñaron, implementaron y ahora defienden este fracaso.
También votaré en contra, porque la gente de mi distrito me lo pidió, porque lo que ellos quieren y necesitan me obliga más que lo que puedan decir algunos que cierran los ojos a la realidad y son obsecuentes a la hora de defender sus errores.
Por todo esto, vamos a decir que no.
He dicho.
"