El señor JIMÉNEZ.- Señor Presidente, al igual que los colegas que me antecedieron en el uso de la palabra, valoro el proyecto en debate. Siempre he dicho que las personas tienen memoria frágil. Hasta el día de hoy existen quienes niegan el Holocausto. Hace un tiempo, leí en un medio de prensa que, en una manifestación en una ciudad alemana, llegaron alrededor de cinco mil nazis para alabar y recordar a Hitler, al gobierno nazi. A uno le preocupa hasta dónde puede llegar la mente humana, porque a pesar de todos los horrores, de todo lo que se conoce, de lo que ocurrió con niños, con mujeres, con hombres en esa masacre de un pueblo, todavía existen personas que avalan eso y otras que lo niegan, lo cual es preocupante. Creo que el proyecto es de suma importancia. Su objetivo principal es rendir homenaje a las víctimas, a quienes perdieron la vida en forma tan trágica durante esos años. Eso debe quedar en primera página, pero también debe servir para mantener la memoria viva, para que nuestros niños, las nuevas generaciones, conozcan lo que ocurrió y como decía mi colega, sin ningún ánimo de venganza, porque ya han pasado muchos años. El único propósito es que nunca más la humanidad vuelva a repetir un episodio tan horrible como el que se vivió con el régimen nazi. Voy a votar a favor y creo que el proyecto se aprobará en forma unánime, porque, insisto, esto le hace muy bien al alma de la humanidad y también de Chile, por la historia que hemos vivido. He dicho.