REPÚBLICA DE CHILECÁMARA DE DIPUTADOSLEGISLATURA 354ªSesión 6ª, en miércoles 22 de marzo de 2006(Especial, de 16.03 a 18.29 horas) Presidencia de los señores Leal Labrín, don Antonio; y Pérez Arriaga, don José. Secretario, el señor Loyola Opazo, don Carlos. Prosecretario, el señor Álvarez Álvarez, don Adrián.REDACCIÓN DE SESIONESPUBLICACIÓN OFICIAL ÍNDICE I.- ASISTENCIA II.- APERTURA DE LA SESIÓN III.- ACTAS IV.- CUENTA V.- OBJETO DE LA SESIÓN VI.- DOCUMENTOS DE LA CUENTA VII.- OTROS DOCUMENTOS DE LA CUENTAÍNDICE GENERALPág. I. Asistencia 5 II. Apertura de la sesión 9 III. Actas 9 IV. Cuenta 9 V. Objeto de la sesión. - Análisis de resultados de la prueba Simce. Proyecto de acuerdo 9 VI. Documentos de la Cuenta. 1. Informe de la Comisión de Relaciones Exteriores, Asuntos Interparlamentarios e Integración Latinoamericana, recaído en el proyecto aprobatorio del “Acuerdo entre Chile y Perú sobre Cooperación y Ayuda Mutua en materia de prevención y atención de desastres”, suscrito en Lima el 10 de diciembre de 2004. (boletín N° 4085-10) 44 2. Informe de la Comisión de Hacienda, recaído en el proyecto aprobatorio del “Acuerdo entre Chile y Perú sobre Cooperación y Ayuda Mutua en materia de prevención y atención de desastres”, suscrito en Lima el 10 de diciembre de 2004. (boletín N° 4085-10) 47 3. Moción del diputado señor Errázuriz que distribuye votos en blanco en forma proporcional entre los candidatos. (boletín N° 4119-06) 48 4. Moción de los diputados señores Errázuriz; Kast y Verdugo, y de la diputada señora Cubillos, doña Marcela, que permite que solicitud de declaración de bien familiar la realice el cónyuge o la madre en representación del hijo. (boletín N° 4120-07) 48 5. Moción de los diputados señores Ward, Barros, Forni, Lobos, Hernández, Norambuena, Salaberry, y de las diputadas señoras Nogueira y Turres, que establece una reforma constitucional que eleva el quórum para la despenalización del aborto. (boletín N° 4121-07) 49 6. Moción de los diputados señores Ward, Barros, Forni, Lobos, Hernández, Norambuena, Salaberry, y de las diputadas señoras Nogueira y Turres, que agrega un nuevo artículo 345 bis al Código Penal, para que sólo a través de una reforma constitucional se pueda derogar el delito de aborto. (boletín N° 4122-07) 50 7. Moción de los diputados señores Ward; Barros; Hernández; Lobos; Norambuena y Salaberry, y de la diputada señora Turres, que agrega un nuevo inciso cuarto al artículo 117 del Código del Trabajo, permitiendo que las prestaciones pendientes contenidas en el finiquito y desahucio se paguen a sus herederos. (boletín N° 4123-13) 52 VII. Otros documentos de la Cuenta. 1. Comunicación: - De la Jefa de Bancada del Partido por la Democracia por la cual informa los reemplazos permanentes que a continuación se indican: a) El diputado señor Insunza reemplazará a la diputada señora Saa, en la Comisión de Familia; b) El diputado señor Accorsi reemplazará al diputado señor Núñez, en la Comisión de Derechos Humanos, Nacionalidad y Ciudadanía; c) El diputado señor Jiménez reemplazará al diputado señor Leal , en la Comisión de Economía, Fomento y Desarrollo, y d) El diputado señor González reemplazará al diputado señor Escobar, en la Comisión de Educación, Cultura, Deportes y Recreación. 8. Certificado médico acompañado por el Diputado señor Vargas mediante el cual acredita que deberá permanecer en reposo por un plazo de 45 días. I. ASISTENCIA -Asistieron los siguientes señores diputados: (106)NOMBRE (Partido* Región Distrito)Accorsi Opazo, Enrique PPD RM 24Aedo Ormeño, René RN III 5 Alinco Bustos, René PPD XI 59Allende Bussi, Isabel PS RM 29Alvarado Andrade, Claudio UDI X 58Álvarez-Salamanca Büchi, Pedro RN VII 38Álvarez Zenteno, Rodrigo UDI XII 60Araya Guerrero, Pedro PDC II 4Arenas Hödar, Gonzalo UDI IX 48Ascencio Mansilla, Gabriel PDC X 58Barros Montero, Ramón UDI VI 35Bauer Jouanne, Eugenio UDI VI 33Becker Alvear, Germán RN IX 50Bertolino Rendic, Mario RN IV 7Bobadilla Muñoz, Sergio UDI VIII 45Burgos Varela, Jorge PDC RM 21Cardemil Herrera, Alberto IND RM 22Ceroni Fuentes, Guillermo PPD VII 40Correa De la Cerda, Sergio UDI VII 36Cristi Marfil, María Angélica UDI RM 24Cubillos Sigall, Marcela UDI RM 21Chahuán Chahuán, Francisco RN V 14De Urresti Longton, Alfonso PS X 53Delmastro Naso, Roberto IND X 53Díaz Del Río, Eduardo PDC IX 51Díaz Díaz, Marcelo PS IV 7Duarte Leiva, Gonzalo PDC RM 26Egaña Respaldiza, Andrés UDI VIII 44Eluchans Urenda, Edmundo UDI V 15Encina Moriamez, Francisco PS IV 8Enríquez-Ominami Gumucio, Marco PS V 10Errázuriz Eguiguren, Maximiano RN RM 29Escobar Rufatt, Álvaro PPD RM 20Espinoza Sandoval, Fidel PS X 56Estay Peñaloza, Enrique UDI IX 49Farías Ponce, Ramón PPD RM 30Forni Lobos, Marcelo UDI V 11Fuentealba Vildósola, Renán PDC IV 9Galilea Carrillo, Pablo RN XI 59García García, René Manuel RN IX 52García-Huidobro Sanfuentes, Alejandro UDI VI 32Girardi Briere, Guido PPD RM 18Godoy Ibáñez, Joaquín RN V 13Goic Boroevic, Carolina PDC XII 60González Torres, Rodrigo PPD V 14Hales Dib, Patricio PPD RM 19Hernández Hernández, Javier UDI X 55Herrera Silva, Amelia RN V 12Insunza Gregorio De Las Heras, Jorge PPD RM 28Isasi Barbieri, Marta PAR I 2 Jaramillo Becker, Enrique PPD X 54Jarpa Wevar, Carlos Abel PRSD VIII 41Jiménez Fuentes, Tucapel IND RM 27Kast Rist, José Antonio UDI RM 30Latorre Carmona, Juan Carlos PDC VI 35Leal Labrín, Antonio PPD III 5León Ramírez, Roberto PDC VII 36Lobos Krause, Juan UDI VIII 47Martínez Labbé, Rosauro RN VIII 41Masferrer Pellizzari, Juan UDI VI 34Melero Abaroa, Patricio UDI RM 16Meza Moncada, Fernando PRSD IX 52Monckeberg Bruner, Cristián RN RM 23Monckeberg Díaz, Nicolás RN VIII 42Monsalve Benavides, Manuel PS VIII 46Montes Cisternas, Carlos PS RM 26Moreira Barros, Iván UDI RM 27Mulet Martínez, Jaime PDC III 6Muñoz D'Albora, Adriana PPD IV 9Nogueira Fernández, Claudia UDI RM 19Norambuena Farías, Iván UDI VIII 46Núñez Lozano, Marco Antonio PPD V 11Ojeda Uribe, Sergio PDC X 55Olivares Zepeda, Carlos PDC RM 18Ortiz Novoa, José Miguel PDC VIII 44Pacheco Rivas, Clemira PS VIII 45Palma Flores, Osvaldo RN VII 39Pascal Allende, Denise PS RM 31Paya Mira, Darío UDI RM 28Pérez Arriagada, José PRSD VIII 47Recondo Lavanderos, Carlos UDI X 56Robles Pantoja, Alberto PRSD III 6Rojas Molina, Manuel UDI II 4Rossi Ciocca, Fulvio PS I 2Rubilar Barahona, Carla RN RM 17Saa Díaz, María Antonieta PPD RM 17Sabag Villalobos, Jorge PDC VIII 42Saffirio Suárez, Eduardo PDC IX 50Sepúlveda Hermosilla, Roberto RN RM 20Sepúlveda Orbenes, Alejandra PDC VI 34Silber Romo, Gabriel PDC RM 16Soto González, Laura PPD V 13Sule Fernando, Alejandro PRSD VI 33Súnico Galdames, Raúl PS VIII 43Tarud Daccarett, Jorge PPD VII 39Tuma Zedan, Eugenio PPD IX 51Turres Figueroa, Marisol UDI X 57Uriarte Herrera, Gonzalo UDI RM 31Valenzuela Van Treek, Esteban PPD VI 32Vallespín López, Patricio PDC X 57Venegas Cárdenas, Mario PDC IX 48Verdugo Soto, Germán RN VII 37Vidal Lázaro, Ximena PPD RM 25Von Mühlenbrock Zamora, Gastón UDI X 54Walker Prieto, Patricio PDC IV 8Ward Edwards, Felipe UDI II 3 -Concurrió, también, el senador señor Alejandro Navarro. -Asistió, además, el ministro de Educación Pública, don Martín Zilic.- II. APERTURA DE LA SESIÓN -Se abrió la sesión a las 16.03 horas. El señor LEAL (Presidente).- En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión. III. ACTAS El señor LEAL (Presidente).- El acta de la sesión 1ª se declara aprobada. El acta de la sesión 2ª queda a disposición de las señoras diputadas y de los señores diputados. IV CUENTA El señor LEAL (Presidente).- El señor Prosecretario va a dar lectura a la Cuenta. -El señor ÁLVAREZ (Prosecretario) da lectura a la Cuenta. V. OBJETO DE LA SESIÓNANÁLISIS DE RESULTADOS DE LA PRUEBA SIMCE. Proyecto de acuerdo. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Esta sesión ha sido motivada en una presentación suscrita por 41 honorables diputadas y diputados y tiene por objeto conocer y analizar los malos resultados de la prueba Simce realizada a los 4ºs básicos, aplicada los días 8 y 9 de noviembre de 2005. A esta sesión ha sido citado el ministro de Educación, señor Martín Zilic Hrepic. Tiene la palabra, por siete minutos y medio, el diputado señor Maximiano Errázuriz. Cito a reunión de Comités en la sala de lectura. El señor ERRÁZURIZ.- Señor Presidente, en primer lugar, quiero agradecer a los colegas de mi partido y de la Unión Demócrata Independiente que apoyaron la iniciativa de convocar a esta sesión especial y, asimismo, a los parlamentarios de la Concertación que también lo hicieron, porque entendieron que nuestro propósito no es utilizarla para criticar al Gobierno, sino para hacer un análisis serio y objetivo de por qué la calidad de la educación no ha mejorado pese al cuantioso aumento de los recursos destinados a ese fin. Es cierto que los colegios más pobres mejoraron su rendimiento, como lo señalara el ahora ex Presidente Lagos al inaugurar el año escolar en la comuna de La Pintana. Sin embargo, siempre es más fácil que mejoren los que están peor. Lo importante es el promedio y, en este aspecto, no hubo mejoras sustanciales entre 1999 y 2005. Llaman la atención algunos hechos en los que no me detendré, pues prefiero ir en busca de soluciones. Por ejemplo, sorprende que los colegios particulares subvencionados obtuvieran 20 puntos más que los municipales. También sorprende que los municipios deban distraer recursos propios para aportar a la educación, pues los que les entrega el Ministerio de Educación no son suficientes. Sólo por mencionar algunos casos, Puente Alto aporta mil millones de pesos de su presupuesto a educación, lo que equivale al 8 por ciento de su presupuesto; La Pintana, el 7 por ciento de su presupuesto, esto es 700 millones de pesos; Pirque y San José de Maipo, 300 y 100 millones de pesos, respectivamente. Lo mismo ocurre en el resto del país. Por eso, en la sesión celebrada ayer en la Comisión de Educación le pregunté al ministro de Educación si contaba con el apoyo del Ministerio de Hacienda para sacar adelante los proyectos educacionales, pues en esta materia dicha cartera tiene la última palabra. ¿Cómo va a ser lógico que las municipalidades tengan que distraer recursos destinados a inversión local para suplementar la educación? ¿Qué hacen los colegios particulares que deben financiar la educación únicamente con el monto de la subvención que reciben? Otro hecho que llama la atención es que si bien numerosos colegios tienen jornada escolar completa, el resultado de la prueba Simce no refleja un mejoramiento acorde con el tiempo que los niños permanecen en la escuela. Es que no basta con estar más tiempo en el colegio para que la calidad de la educación mejore como por obra y gracia del Espíritu Santo. Todo depende de cómo se aproveche ese tiempo. ¿Cuáles son, a nuestro juicio, las causas y las soluciones al problema de la mala calidad de la educación y al resultado de la prueba Simce 2005? Entre muchas otras, podemos señalar las siguientes: Primero, cualquier reforma educacional debe llevarse a cabo considerando a los profesores en su elaboración y no sólo en su ejecución. Segundo, si bien el Ministerio de Educación, en 2005, entregó un informativo a los padres de los alumnos que rindieron esta prueba, comparando los resultados de su colegio con los de otros del mismo nivel, no existe conciencia sobre el significado de los mismos. Nadie sabe ni entiende en qué se traduce el puntaje de la prueba Simce, en cuanto al conocimiento de materias. Tercero, es necesario fortalecer la participación de los padres en la educación de sus hijos, porque aunque el colegio sea de excelencia académica, nada puede reemplazar la participación de los padres en la educación de sus hijos. Los niños no están más del 10 por ciento de su tiempo en el colegio, de manera que si los padres no se coordinan con el establecimiento educacional, todo el esfuerzo que éste haga no sirve de nada. De ahí que resulte indispensable entregar a los padres, apoderados y profesores mayor información respecto de los resultados de la prueba Simce que se haya rendido, a fin de reforzar aquellas áreas en las cuales los colegios están más débiles, y así el sistema de medición se transforme en una herramienta adecuada para mejorar la educación y no sólo en un elemento de información y comparación entre los colegios. Asimismo, la información relacionada con los resultados de los colegios debe ser entregada a todos los apoderados y no solamente a los padres de quienes rindieron la prueba. También es necesario implementar un sistema de información completa a los padres sobre los resultados de los programas administrados y aplicados por el Ministerio de Educación, con el objeto de que sepan en qué se gastan los recursos y si éstos tienen o no efectos en la calidad de la educación entregada. Es necesario establecer metas y plazos para todos los programas implementados por el Ministerio de Educación, y que éstos sean conocidos por la opinión pública, en especial por los consejos escolares y por los apoderados de cada establecimiento beneficiario. No me extenderé en otras consideraciones, a fin de permitir a otros colegas que puedan ocupar el resto del tiempo previo de 15 minutos. Sólo deseo agregar que gran parte de estas ideas están en el proyecto de acuerdo que vamos a presentar y que espero cuente con un apoyo transversal. No me he querido referir a algunos puntos que podrían resultar conflictivos, como el relativo a la subvención por asistencia y no por matrícula y a la subvención igual para todos, en circunstancias de que la realidad de los estudiantes y de los niveles de educación es distinta. Por cierto, ello requiere un estudio a futuro. Finalmente, si hacemos un esfuerzo conjunto por mejorar la calidad de nuestra educación, también estaremos disminuyendo la cesantía, la delincuencia y muchos otros males cuya causa es, precisamente, la falta de educación y de capacitación. El poder se pierde, la salud también puede perderse y el dinero se va. Lo único que siempre queda es la educación que podamos adquirir o entregar a nuestros hijos. Por eso, confío en que esta discusión no salga del nivel técnico en que la hemos planteado, y en que todos, padres y alumnos, profesores y directores y la comunidad entera, hagamos un esfuerzo por mejorar la calidad de nuestra educación. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Solicito el acuerdo unánime de los señores diputados para autorizar el ingreso a la Sala de la subsecretaria de Educación. No hay acuerdo. Tiene la palabra la honorable diputada señora Marcela Cubillos. La señora CUBILLOS (doña Marcela).- Señor Presidente, hace algunas semanas, pocos días antes de que terminara el gobierno del Presidente Lagos, ocurrió un hecho de características muy distintas a las del 11 de marzo. No vimos a un Presidente sonriente ni relajado, ni a ministros esperando ser felicitados por haber formado parte, según ellos, de un gobierno histórico. El viernes 3 de marzo, pasadas las 20 horas, tratando de que la noticia trascendiera poco y bajándole el perfil al asunto, en un gobierno que se había caracterizado por subir el perfil a casi todos los temas, apareció la ministra de Educación manifestando su “alegría” por lo que ella consideraba “buenos resultados del Simce 2005”. Sin embargo, como ocurrió permanentemente durante el gobierno del Presidente Lagos, cuando la gente se dio cuenta de que los resultados eran malos y no buenos, de que había que estar triste y no contento y de que surgieron críticas y no halagos, el Presidente Lagos se enojó. Pero no lo hizo por no haber cumplido con las promesas electorales o las metas que se había propuesto; tampoco se enojó con la última ministra de la cartera o con el ex ministro, Sergio Bitar, sino con quienes, en ese minuto, tuvieron la osadía de decir la verdad, o más que eso, lo obvio, lo que todos veían, menos las autoridades: esto es, que los resultados eran malos. Por eso, espero que esa forma de enfrentar los problemas en educación sea parte del pasado. No estamos dispuestos a avalar la campaña de desinformación practicada durante todos estos años de gobierno de la Concertación, en que, sin siquiera sonrojarse, nos han dicho que la reforma avanza a paso firme, en circunstancias de que la verdad es que tambalea y sus debilidades son evidentes. Al señor Cristián Cox, encargado de hace años de esta cuestión en el ministerio, jamás se le escuchó una evaluación, una autocrítica o un balance realista, de cara, no a los parlamentarios, sino a los padres de familia y a la sociedad. Mientras el gasto en educación aumenta considerablemente, los resultados de la última prueba Simce demuestran, de manera dramática, la existencia de tres problemas. En primer lugar, un estancamiento en el aprendizaje. No podría decirse que la brecha ha disminuido. Eso sería relevante sólo si fuera acompañado de un mejoramiento en el promedio del país; en segundo lugar, poca efectividad en la inversión, y, en tercer lugar, lo más relevante, a mi juicio, falta de rendición de cuentas por parte de los responsables de las políticas educacionales. Este último aspecto reviste la mayor gravedad, por cuanto es imposible exigir a los directores de establecimientos educacionales, a sus profesores e, incluso, a los estudiantes, que rindan cuenta de sus resultados si ni siquiera esto es promovido por el Ministerio de Educación. Son muy pocos los programas que tienen metas y plazos conocidos y respecto de los cuales la opinión pública pueda exigir cuentas. Y ello es más grave aún, por cuanto nuestro sistema educativo se basa en la libertad y en el derecho que tienen los padres a elegir la educación de sus hijos. Por lo tanto, la información, la transparencia y el acceso a esa información son esenciales. Así, resulta fundamental conocer, en el inicio de este nuevo gobierno, qué metas se plantean y en qué plazos pretenden alcanzarlas. Nos pidieron, y accedimos gustosos, que esta sesión se postergara para que el nuevo ministro de Educación tuviera todos los antecedentes relativos al Simce 2005. Pero, sinceramente, más que un ministro que, a dos semanas de asumir su cargo, pueda conocer en detalle toda la información sobre programas, presupuestos y planes, me interesa saber si este nuevo gobierno va a tener una actitud nueva; es decir, que frente a un problema determinado, primero, asuma su existencia, lo enfrente con seriedad y, luego de cierto tiempo, proceda a su evaluación para determinar cómo fue abordado, si los mecanismos implementados le dieron solución, y cuáles fueron los resultados. En definitiva, una actitud nueva. Es cierto que hoy sólo se inicia un nuevo gobierno de una vieja Concertación que lleva años gobernando, pero uno podría pensar que si han fracasado en mejorar la calidad de la educación, van a seguir fracasando y que las promesas que han quedado incumplidas continuarán como tales. Pero creo que no. Puede ser legítimo y necesario plantear estas dudas en períodos de campañas electorales. Sin embargo, ante un gobierno que recién se inicia y frente a una materia tan delicada como ésta, no me parece legítimo hacerlo. Ante el drama que vive la educación chilena, al gobierno que se inicia debemos concederle, al menos, la posibilidad de volvernos a ilusionar, de hacernos creer que ahora sí las cosas empezarán a funcionar para la educación. Es para eso, para metas realistas, planes eficientes, evaluaciones con resultados, avances significativos y concretos; para programas transparentes, que se evalúen periódicamente, de cara a los padres de familia y a toda la sociedad para poner a nuestros niños en el primer lugar de las prioridades, que desde aquí queremos decirle a la Presidenta Michelle Bachelet y a su ministro de Educación, que para todo ello va a contar con el más irrestricto apoyo de los parlamentarios de la UDI. Pero no queremos más retos, no más soberbia, no más intentos de ocultar la realidad de un problema que está en la base de la desigualdad dramática con que aún crecen y viven miles de chilenos. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del comité del Partido Socialista, tiene la palabra el diputado Fulvio Rossi. El señor ROSSI.- Señor Presidente, no deja de llamar la atención la intervención del diputado Errázuriz, quien dijo que éste es un debate técnico, en contraste con la diputada Cubillos, quien expresó que no van a aceptar ni arrogancias ni soberbia, y con la actitud de la UDI, que impidió el ingreso a la Sala de la subsecretaria de Educación. No sé de qué ánimo de colaborar o tolerar se trata. Si ésta es una discusión técnica, no entiendo por qué un diputado de la UDI manifestó su oposición para impedir que ingrese a la Sala la subsecretaria de Educación, sobre todo si estamos discutiendo un tema tan importante como es la calidad de la enseñanza en Chile. Lo lamento mucho. Eso no se condice con el ánimo de colaborar o tolerar. En una materia como ésta es bueno entender primero cuáles son los problemas, reconocer los avances y asumir la responsabilidad respecto de las conductas políticas que se han adoptado luego de que en esta Sala se han discutido proyectos importantes respecto de la cobertura y la calidad de la educación. No se puede desconocer el aumento de la cobertura durante estos años. Hoy, prácticamente es del ciento por ciento en educación básica y más del 90 por ciento en educación media. Ocurre lo mismo en kinder, pero, además, hay una propuesta al respecto. Para la Presidenta Bachelet, aumentar la cobertura en educación parvularia es una materia relevante por la importancia que se da a la educación inicial y a la estimulación temprana en relación con los resultados académicos futuros. Por otra parte, todos conocemos el impacto que ha tenido la implementación de la jornada escolar completa y la cantidad de recursos que se han dispuesto para esos fines. Hoy, el 4 por ciento del producto interno bruto está destinado a educación; si se incorpora el aporte privado, se llega a más del 7 por ciento. Es cierto que es insuficiente, pero se ha avanzado mucho. Basta ver lo que sucede en la educación superior: de cada diez jóvenes que ingresan a ella, siete son la primera generación que pasa por la universidad; o sea, el 70 por ciento de los padres de esos estudiantes nunca pisó la universidad. Por lo tanto, cuando se discuten materias como ésta es bueno reconocer que tenemos problemas. ¡Ahí está la evaluación del Simce! Pero también se deben reconocer los importantes avances que ha habido. Sin ir más lejos, desde el punto de vista del acceso a las tecnologías, a internet, hay un ejemplo muy claro: en los últimos seis años ha disminuido el número de alumnos por computador de 57 a 30, prácticamente en cincuenta por ciento. En cuanto al acceso a la educación superior, este año entraron 600 mil estudiantes, de los cuales 170 mil reciben beneficios para sus estudios. En 1990, esa cifra no llegaba ni a 70 mil. Sin embargo, la prueba Simce demuestra problemas de calidad en la educación básica. ¿Por qué digo que uno tiene que asumir las posturas que ha adoptado en el pasado? Porque, la Oposición, por ejemplo, torpedeó la concursabilidad de los directores, cuando se discutió el proyecto sobre jornada escolar completa. Sabemos que el director es clave para el rendimiento académico y para la formación académica de los estudiantes. Si el nivel de escolaridad materna es el principal factor que incide en el rendimiento académico, lo importante es que los padres -así lo señaló el diputado Errázuriz- se incorporen al proceso educativo. En definitiva, en su oportunidad el proyecto no fue aprobado con un apoyo mayoritario de la Alianza por Chile. Respecto de la exclusión o segregación, el diputado Errázuriz señaló que le sorprendía que los estudiantes particulares subvencionados tuviesen 20 puntos más en promedio que los de la educación municipal. A mí no me sorprende nada. Lo que ocurre hoy es muy claro: hay segregación y selección de alumnos. Los alumnos en riesgo social, los vulnerables, los que tienen problemas en la casa y de otro tipo son segregados y terminan en la educación municipal, a la cual deberían destinarse más recursos. Por eso, el entorno de un estudiante es tan determinante en su rendimiento. Por ello, no debe extrañar a nadie que un alumno que asiste a una escuela pobre en una comuna pobre tenga menos resultados en el Simce que uno que estudia en un establecimiento particular subvencionado. ¿Qué pasó cuando se discutió la obligatoriedad de que el 15 por ciento de los estudiantes en riesgo social fueran incorporados a los establecimientos particulares subvencionados? ¿Quién se opuso? ¿Quién adujo la libertad de enseñanza? La Oposición. Entonces, insisto en que hay que ser serio y hacerse cargo de las decisiones que se toman en materias como ésta. Sinceramente, siento que hay que hacer un esfuerzo importante. Tenemos claro que hay que avanzar en el mejoramiento de la calidad de la educación, ya que es fundamental para el desarrollo del país y para la igualdad de oportunidades. La Presidenta Bachelet dio señales concretas al respecto cuando señaló que es fundamental para la educación aumentar la cobertura y la calidad de la educación parvularia. Sabemos que hay que estimular al niño desde que nace y que su alimentación es fundamental. Hoy se dan un millón doscientas mil raciones alimenticias en las escuelas para esa misma cantidad de niños. También es necesario avanzar en relación con la intervención de la educación municipalizada. Los municipios son muy diversos en cuanto a la cantidad de recursos que manejan y a la gestión, eficacia y prioridades que tienen. Por eso, una experiencia bastante exitosa y que ojalá podamos analizar en la Comisión de Educación fue la de la Región Metropolitana, donde la seremi de educación intervino 66 escuelas con malos resultados con el objeto de evaluar las técnicas educativas, los modelos de aprendizaje y el trabajo con los directores. Finalmente, los resultados del Simce mejoraron de un año a otro. Sin duda, por ahí va la cosa. Por último, es importante poner el tema en debate y priorizarlo absolutamente. Una buena ocasión para ello será el proyecto de ley radicado en la Comisión de Educación respecto de la subvención diferenciada. Estoy convencido de que hay que poner más recursos donde hay menos, como también que es necesario incorporar a los padres y apoderados al proceso educativo, mejorar la calidad de los profesores y trabajar con los directores. Por eso, es muy relevante que haya meritocracia en el nombramiento de los directores. Como señaló el diputado Errázuriz, ojalá este debate sea más técnico y con menos soberbia y, por lo mismo, otra vez se permita la entrada de la subsecretaria de Educación a una sesión como ésta. He dicho.El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité de la Unión Demócrata Independiente, tiene la palabra el diputado señor Sergio Bobadilla. El señor ORTIZ.- Señor Presidente, ¿me permite? En mi calidad de jefe subrogante de Sala de la bancada de la Democracia Cristiana, me gustaría proponer, como ya intervino un diputado de Renovación Nacional, otro de la Unión Demócrata Independiente y un tercero del Partido Socialista, que antes del diputado Sergio Bobadilla, hiciera uso de la palabra algún diputado de mi bancada.El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Señor diputado, los dos primeros diputados hicieron uso de la palabra en el llamado “tiempo previo de 15 minutos”.El señor ORTIZ.- Señor Presidente, en ese caso, si es posible, solicito que escuchemos la exposición del ministro de Educación. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Eso lo haremos inmediatamente después de la intervención del diputado Sergio Bobadilla, si lo estima el señor ministro. Tiene la palabra el diputado señor Bobadilla. El señor BOBADILLA.- Muchas gracias. Señor Presidente, en mi primera intervención en la Sala quiero expresar que, en mi concepto, los resultados de la prueba Simce muestran, una vez más, que los conocimientos y aprendizajes de los estudiantes no han obtenido avances significativos, a pesar de la enorme cantidad de recursos que se ha invertido para el desarrollo de programas en esa área. Esos resultados son el fiel reflejo del fracaso de las medidas adoptadas por los gobiernos de la Concertación, las que traen como consecuencia el estancamiento de los índices de conocimientos y aprendizaje, mostrados en las últimas pruebas y mediciones efectuadas. Sin duda, el ministro de Educación puede justificar la inversión en este verdadero saco roto que es la educación, pero la verdad es una sola. Los resultados de la última medición Simce muestran la poca efectividad de los recursos invertidos en educación. A partir de los noventa, se han cuadruplicado los recursos, pero los resultados no mejoran. Por el contrario, empeoran. Por eso, una vez más, hacemos notar el hecho de que el solo aumento de los recursos económicos no trae, de manera automática, una mejora en los resultados de la educación. Después de los resultados entregados el 2000, respecto de la medición realizada en 1999, se sacaron distintas conclusiones, se hicieron análisis, se destinaron recursos y se formaron comisiones, todo ello tendiente a mejorar los resultados y la calidad de la educación de nuestros estudiantes. La ministra de la época, Mariana Aylwin, se comprometió, en septiembre de 2000, a reducir, por lo menos a la mitad, los aprendizajes deficientes en lenguaje y matemáticas que, en ese entonces, llegaban a 19 y 32 por ciento, respectivamente. Con la finalidad de cumplir con dicha promesa se crearon distintas comisiones, se hicieron pomposas conferencias de prensa y se destinaron millones y millones de pesos, todo justificado por la urgente finalidad de mejorar la educación de los chilenos. A modo de ejemplo, podemos decir que se realizaron campañas como la de las escuelas críticas; se invirtió en informática educacional y se capacitó a los profesores. Han pasado cinco años, en los cuales se han invertido más de 2 mil millones de dólares en infraestructura. En todas las oportunidades posibles les hemos hecho ver a las autoridades lo inútil de sus medidas y, como siempre, se nos ha acusado de politizar el tema, de querer sacar provecho de él; pero hoy, cuando el plazo autoimpuesto por la ministra de ese entonces se cumple, es tiempo de analizar los resultados. Los puntajes en lenguaje y matemática sólo se mantuvieron, sin mostrar aumentos significativos. Si analizamos los resultados más bajos, aquellos en que se aseguró que disminuirían a la mitad, vemos que en matemática, lejos de mejorar, los índices de desconocimiento aumentaron, llegando a 35 por ciento. En el resto de las asignaturas los porcentajes se mantuvieron. Si analizamos el resultado de la prueba Simce desde la perspectiva del nivel socioeconómico, si bien la brecha entre los que tenían mejores y peores resultados disminuyó, a nivel de establecimientos, los colegios particulares siguen presentando mejores resultados que el resto. La diferencia de éstos respecto de los colegios municipales alcanza los 60 puntos. Lo anterior no sólo significa el fracaso de las medidas planteadas por las autoridades, sino que trae graves consecuencias para el desarrollo del país, ya que la preparación de nuestros futuros profesionales está quedando rezagada, lo que nos pone en desventaja frente a otros países. Como muy bien se dijo, esta sesión se realiza con una semana de retraso, por cuanto el nuevo ministro necesitaba tiempo para informarse de los distintos antecedentes que podrían explicar estos malos resultados y los escasos avances educacionales. Ya es tiempo entonces de escuchar respuestas de por qué el sistema de educación, implantado con bombos y platillos, hoy está mostrando su fracaso. Pese a que se han destinado millones y millones de pesos, los malos resultados aún persisten y la enorme brecha entre la educación privada y la pública se mantiene. Esperamos escuchar respuestas claras, diagnósticos certeros y, lo más importante, medidas concretas que permitan saber con certeza que el Gobierno no va a seguir improvisando en esta materia, sino, por el contrario, de una vez por todas, se dará la importancia que tiene la educación para el país. Por último, es prioritario revisar la forma en que se utilizan los recursos en educación. Es necesario examinar los programas y las medidas adoptadas, en términos de su efectividad y eficiencia. Para esto es esencial que las metas sean claras, que se asignen responsabilidades, que se creen mecanismos de rendición de cuentas por desempeño en los casos que corresponda. Para finalizar, debemos reconocer que el ministro viene recién llegando. Le deseamos éxito a él y a su equipo por el bien de nuestros niños y del país. En nosotros encontrará un apoyo decidido en todas aquellas materias que apunten a mejorar la calidad de la enseñanza y que no atenten en contra de su libertad. También quiero expresar que si se fijan metas, que éstas se conozcan y se sepa si se cumplieron o no. Y si no se cumplen, que existan responsables, porque durante dieciséis años se ha invertido mucha plata en educación, los resultados todavía no se ven ni tampoco conocemos a los responsables de ese fracaso. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- A continuación, tiene la palabra el ministro de Educación, señor Martín Zilic. El señor ZILIC (ministro de Educación).- Señor Presidente, agradezco a los diputados de la UDI la invitación a esta sesión para explicar los resultados del Simce y por haberme dado una semana más para informarme sobre el tema, puesto que me parecía un despropósito que lo hiciera la semana pasada, a dos días de haber asumido la cartera. En primer lugar, quiero hacerme cargo de la crítica en cuanto a que hemos aumentado en forma importante los insumos sin que hayan mejorados los productos. Hay innumerables estudios realizados en Estados Unidos y en Europa que demuestran que, tratándose de educación, no hay una relación directa entre insumo y producto. Si hablamos de cobertura, sí; pero cuando hablamos de calidad, los procesos complejos de la educación no siempre permiten que el aumento de los insumos vaya acompañado del aumento de los productos. Es verdad. El gasto público en educación ha subido a casi el 20 por ciento y estamos en más de 4 por ciento del producto interno público. Si a eso agregamos el aporte privado, llegamos a más de 7 por ciento del PIB en educación. Pero casi el 65 por ciento de este producto se entrega en subvenciones a los sectores público y privado. En los últimos años, hemos aumentado de 11.712 pesos a más de 34 mil pesos la subvención por alumno en el sistema escolar, en tanto que hemos aumentado el sueldo de los profesores de 274 mil pesos a más de 700 mil pesos. Ésas son cifras reales que podemos exhibir. En cuanto a cobertura, en educación preescolar hemos sobrepasado el 20 por ciento, en 1990, y llegado a más del 35 por ciento, en 2003. En educación básica hemos alcanzado casi la cobertura completa: 99,0%; en educación media estamos sobre el 92 por ciento, y en la educación superior logramos el 37,5 por ciento. Es decir, que hoy, en la educación superior hay más de seiscientos mil estudiantes nuevos. El porcentaje de población entre catorce y diecisiete años que no asistía a la educación, en 1990, era cercano al 20 por ciento. Hoy ese porcentaje alcanza al 7,2 por ciento. La deserción escolar, a comienzos de la década de los noventa, era superior al 15 por ciento y hoy es cercana al 7 por ciento; es decir, la hemos disminuido a la mitad. Ahora, si consideramos a los estudiantes universitarios -a quienes se refirió el diputado Rossi-, hoy tenemos más de 600 mil estudiantes. De 245 mil estudiantes universitarios, en 1990, 72 mil recibían ayuda del Estado; hoy son más de 160 mil los que la reciben. ¿Cuánto hemos subido la ayuda directa? De 28 mil millones de pesos, en 1990, a 124 mil millones de pesos, en 2005, porque sin ella esos muchachos hoy no podrían estar estudiando en una universidad. En 1990, teníamos 72 mil estudiantes en educación de adultos; hoy tenemos 348 mil. Así estamos respondiendo a la deuda histórica que tenemos con el país, que nos indica, en la actualidad, que hay más de cinco millones de chilenos que no han terminado la educación media. Ese no es un problema de los gobiernos de la Concertación solamente. Tenemos que mejorar las condiciones de aprendizaje. En 2005, entregamos más de diez millones de textos escolares a tres millones de estudiantes. Todos los estudiantes de educación básica tienen textos escolares entregados por el Estado y ése es un salto enorme. En alimentación, hoy tenemos a más de un millón doscientos mil estudiantes que la reciben todos los días en los colegios. Si queremos entrar a la sociedad del conocimiento, al mundo global, tenemos que entregar más computadores. ¿Cuántos alumnos había por computador en la red enlaces en 2000? Cincuenta y siete alumnos. En 2006, hay treinta alumnos por computador. Hemos conectado a más de tres mil ochocientas escuelas a banda ancha; es decir, el 34 por ciento. Esto significa que, en el primer quintil, el 83,6 por ciento de los niños tienen acceso al computador sólo en el colegio. Si no hubiésemos hecho esta implementación, esos niños no tendrían ninguna posibilidad de entrar al mundo de la informática. Hemos aumentado la cobertura en Jornada Escolar Completa, JEC. Tenemos a más de dos millones de estudiantes y a más del 80 por ciento de las escuelas con JEC. Esas son las bases para discutir el Simce. ¡Por favor, miremos la segregación que se produce en los cinco grupos socioeconómicos! En el nivel socioeconómico bajo, 8 por ciento de alumnos: estudio de la madre, 7; padre 7. En el medio bajo, 28 por ciento de alumnos: madre, 9; padre, 9. En el medio, 36 por ciento de alumnos: madre, 11; padre, 11. En el medio alto, 20 por ciento de alumnos: madre, 14; padre, 14, y en el alto, 7 por ciento de alumnos: madre, 16; padre, 16. Es decir, los iguales se casan con los iguales. Esto muestra la gran segregación que hay en nuestro sistema escolar y, evidentemente, estos grupos se basan en su ingreso socioeconómico. Si observamos los resultados del Simce del 2002 y del 2005, en lenguaje subimos 4 puntos; matemática tendió a estabilizarse y se mantuvo estable; en comprensión del medio hubo un salto importante de 251 a 257. Es un dato estadísticamente significativo. Se puede ver que los promedios en lenguaje, en matemática y en comprensión del medio van subiendo de acuerdo con el nivel socioeconómico de los padres, y también con el subsidio y los aportes que se entregan a las escuelas. Si miramos la evolución de resultados de cuarto básico, en las primeras tres columnas de la izquierda está el resultado del Simce de 1999, que es el base de los doscientos cincuenta puntos. ¿Qué sucedió en 2002? Hubo aumento en lenguaje y en comprensión del medio, y una disminución en matemática. En las columnas del 2005 se ve claramente que lenguaje, que subió el 2002, volvió a subir claramente el 2005, y que comprensión del medio, que también subió el 2002, volvió a subir significativamente el 2005. Matemática se mantiene estable y ahí tenemos un problema. Lo reconocemos como tal. Si consideramos al mismo universo de estudiantes en las tres mediciones, en comprensión del medio y lenguaje hay un aumento significativo; en matemática, tenemos una estabilización, se da una variación de un punto respecto del anterior. Podemos apreciar que el esfuerzo lo hicieron los niños de bajo nivel socioeconómico, del nivel medio-bajo. En las escuelas más vulnerables se produce el salto más significativo, que es de 7 puntos en lenguaje; se mantiene un aumento de 2 puntos en matemática, y se aumenta en comprensión del medio. Lo mismo ocurre en el nivel medio-bajo, pero en el medio-alto se produce una caída en lenguaje. Me habría gustado que la brecha hubiese disminuido, pero no porque aumentaron los colegios más pobres y disminuyeron los menos vulnerables, sino porque estos últimos también hubiesen dado un salto significativo; pero tenemos que decir que los que hicieron el peso del aumento del Simce fueron los colegios más pobres. En lenguaje, si vemos el sector más pobre, los colegios municipalizados aumentaron en 7 puntos y, los particulares subvencionados, en 4. En matemática y en comprensión del medio vemos que, nuevamente, los colegios municipales dieron un salto más significativo que los particulares subvencionados. Con esto, no quiero decir que los municipales sean mejores que los particulares subvencionados, pero que nadie diga tampoco que los particulares subvencionados son mejores que los municipales. En los resultados regionales, vemos que una gran cantidad de regiones se mantiene; otra muy importante aumenta y sólo la Duodécima baja significativamente en matemática. Es evidente que debemos estudiar seriamente qué pasó con matemática en esa región para revertir ese mal resultado. En distribución de puntajes, si bien existe un aumento del promedio en la medida en que van subiendo los grupos socioeconómicos, la dispersión y la variación de los resultados en cada uno de los esos grupos es tan grande que, en el grupo de los colegios más pobres, se dan resultados que son tan buenos o mejores que los que se dan en los de niveles socioeconómicos altos, lo que demuestra que, con empeño, se puede. Esta gráfica, que es de 2000, nos muestra la poca efectividad que se produce en el sistema. Por una parte, tenemos colegios más vulnerables, pero con mejores resultados y, por otra, una concentración bastante elevada de colegios de clase alta, con subsidios cercanos a los 180 mil pesos, pero que obtienen menores puntajes. Es decir, son más ineficientes que los colegios pobres, que con 30 mil pesos de subsidio obtienen resultados altos. Podría cansarlos con ejemplos. Las escuelas de Combarbalá y Quillón, que son comunas pobres con colegios también pobres, en lenguaje han tenido un alza enorme y sin contar con apoyos extraordinarios. ¿Por qué? Porque los profesores, los alumnos y la comunidad entera puso un empeño mayor. Se ha dicho que los niños que están en el nivel inferior de 4° básico no saben leer y no entienden nada de matemática. Ellos son capaces de responder 12 de 37 preguntas en lenguaje, y 14 de 33 en matemáticas. Si las hubieran tirado al achunte, dicho en forma académica, al azar, hubieran contestado cinco de cada una de ellas. Se les hicieron una serie de preguntas tipo. Una de ellas consistió en preguntarles cuánto era la sumatoria de dos elementos de cinco que se les daban con sus respectivos precios. La pregunta fue respondida por todos los niños del nivel inferior, de aquellos que sacaron menos puntaje. Eso quiere decir que comprendieron lo que se les preguntaba, que sabían leer y que podían hacer sumas simples. La experiencia de aprendizaje ha sido muy sencilla: el LEM, lectoescritura y matemática y la asistencia técnica a las llamadas escuelas críticas. Para medir la estrategia del LEM, entre 2004 y 2005, la Pontificia Universidad Católica realizó unas pruebas a 56 mil alumnos, tomados de un universo de 220 escuelas de entre las regiones Quinta, Octava y Metropolitana. Esta evaluación mostró que los estudiantes adscritos al programa LEM tuvieron mejores resultados. Lo mismo sucedió con las escuelas críticas. Fueron medidas 66 escuelas, de 2002 a 2005. Los criterios de selección fueron: que tuvieran bajo puntaje en el Simce de 1999, que fueran escuelas de alta vulnerabilidad, es decir, escuelas pobres, y que pertenecieran a la Región Metropolitana. Se privilegiaron lenguaje y matemática, y para la medición se contrataron instituciones externas, como la Fundación Chile, la Pontificia Universidad Católica, y otras. Los resultados están a la vista. Esas escuelas aumentaron 15 puntos en lenguaje; 13 en matemática y 17 en comprensión del medio. Pero las escuelas que no recibieron esa asistencia también dieron un salto significativo -en 8, 4 y 9 puntos, respectivamente-, el que no fue tan alto como las otras porque eran pobres. Insisto, el Estado ha hecho un esfuerzo brutal, focalizado hacia los más pobres. Esta era nuestra responsabilidad, y hemos aumentado notablemente el conocimiento de los niños en los estratos más bajos. La evidencia internacional muestra que los resultados de las pruebas no se elevan año a año. El Timss, de 1999 a 2003, nos muestra que la gran mayoría de los países mantienen sus puntajes en matemática y en ciencias. También nos señala que algunos países bajaron los puntajes y que muy pocos lo subieron. Es decir, en este tipo de pruebas hay estabilidad en los puntajes. Quiero hacer hincapié en que la calidad de la educación no pasa por poner más recursos para obtener mejores resultados. No hay relación directa entre insumo y resultado, y no la habrá si es que no actuamos sobre todo el sistema. Por eso, llamo a hacernos cargo de todo el sistema. Debemos actuar para resolver la iniquidad en los ingresos. En la sociedad de aprendizaje hay claro consenso de que los niños aprenden en el colegio sólo un 30 por ciento. El 70 por ciento restante es responsabilidad de la sociedad. No cabe duda de que todo es importante: el contexto social, el financiamiento, el acceso, los programas; cómo llegamos directamente con nuestra reforma a la escuela, al aula; cómo involucramos a profesores, padres y apoderados, a los medios de comunicación, a la televisión; en definitiva, cómo involucramos a la sociedad entera. Los nuevos desafíos están presentes y la Presidenta, señora Bachelet, ha sido muy clara al decir que debemos estimular precozmente a los niños. Hay una tarea en este aspecto y espero contar con el apoyo de ustedes para llevarla adelante. Los estudios del Simce reflejan claramente que los niños estimulados precozmente, que asisten a prekinder y kinder, obtienen entre veinte y más puntos en este sistema de medición. Debemos actuar en pro de la equidad, donde tenemos problemas no resueltos, como la integración social y, especialmente, la calidad de la educación. Espero que todos hagamos el esfuerzo. El gran desafío de hoy es cómo nos insertamos en las ciencias y la tecnología; cómo creamos innovación, nuevos conocimientos y nuevos consensos. Mi voluntad más clara es participar con esta Cámara en todas las discusiones posibles, con el objeto de generar en los años venideros una política de Estado para la educación. Los países desarrollados han avanzado creando verdaderos estándares sobre los cuales hacen mediciones externas y objetivas que tienen consecuencias para los sostenedores de la educación. Ese es el tema que debemos debatir y eso no atenta contra la libertad de la educación. Países extraordinariamente liberales, como Holanda, tienen sistemas muy férreos de reconocimiento y de búsqueda de la calidad, a través de mediciones permanentes en todos los colegios, para determinar el valor agregado de la educación en los niños. El World Economic Forum, de 2005, nos despertó un día diciéndonos que éramos el primer país del mundo en competitividad macroeconómica. Sin embargo, en educación estamos en el lugar 42, y de ello debemos hacernos cargo. No quiero meter la cabeza en la arena, pero el Gobierno no puede enfrentar este tema solo; no sirve que la Oposición nos critique, porque es tarea de todos, en conjunto. Para dar el gran salto hacia el futuro, Chile invierte 35 dólares per cápita en ciencia y tecnología, lo que representa el 0.7 por ciento de su producto interno bruto. El Consejo de Europa le ha puesto a sus países, como tasa mínima para 2010, 3 por ciento del PIB. En los países desarrollados, la parte más importante del PIB que se invierte en investigación, en educación y en ciencia y tecnología, proviene del sector privado. En Finlandia, que invierte más del 3 por ciento del PIB, el 70 por ciento proviene del sector privado; el 30 por ciento restante del estado. En Chile todavía estamos en cifras de 0.7, pero cerca del 80 por ciento es puesto por el sector público y apenas el 20 por ciento por el privado. Concuerdo con Francis Fukuyama, en el sentido de que para construir una sociedad sólida es necesario invertir fuertemente en ciencia y tecnología y educación, ambos, pilares fundamentales para generar las posibilidades de un desarrollo productivo armónico que llegue a todos. La carrera del conocimiento tiene que ser corrida por todos y no por unos pocos. Esa equidad en el desarrollo tiene que ayudarnos a construir el pilar de la democracia, porque en este proceso debemos participar todos. El cuarto pilar es la no exclusión a la integración social. Estos cuatro pilares son débiles si no se sustentan en una educación sólida y fuertemente estructurada, y para eso pedimos el apoyo de todos ustedes. No he venido a justificar lo que hemos hecho, pero queremos que entendamos, como alguien me comentaba recién, que entre todos hemos construido el hardware y que ahora debemos construir el software. Construir el hardware y extenderlo a todo el país, para tener hasta en su último rincón escuelas dignas, es caro. Quiero recordar a muchos diputados lo indignas que eran algunas escuelas para los profesores y para los alumnos al inicio de los noventa. Me tocó vivirlo en 1994, época en que ocupé el cargo de intendente en la región del Biobío, y realmente su condición era impresionante. En la actualidad, ese problema lo tenemos prácticamente solucionado. Por lo tanto, hoy no discutimos respecto de la cobertura, sino sobre la calidad de la educación. Es evidente que cuando discutimos sobre cobertura hay más probabilidades de alcanzar consenso, porque no se debaten temas valóricos ni se plantean juicios éticos ni morales. El conocimiento está constituido por hechos y juicios de valor. Espero que para todos, tanto de oposición como de gobierno, los hechos sean iguales, porque así son, de manera que nos puedan acercar unos a otros. Confío en que los juicios de valor sobre la educación no nos enfrenten, sino que nos sirvan para tener un juicio de valor como país, en cuanto a que la educación es lo más importante para construir en el futuro. Ésa es mi invitación. Agradezco sinceramente a los diputados de la UDI que hayan pedido esta sesión especial, porque nos permite comenzar un diálogo que esperamos sea fructífero en los próximos años. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Partido por la Democracia, tiene la palabra la diputada señora Ximena Vidal. La señora VIDAL (doña Ximena).- Señor Presidente, agradezco al ministro de Educación su completa presentación respecto de las diferencias de calidad educativas, que no queremos que existan en el país. Asimismo, me alegra haber escuchado al diputado señor Errázuriz decir que quiere poner este debate a nivel de ideas, no al de la discusión mediática que propone la UDI. No confundamos nuestros roles. No tenemos que vender diarios ni competir por el rating de las noticias y de los noticieros. No somos el cuarto poder, sino representamos el poder ciudadano, de manera que debemos buscar las respuestas adecuadas para mejorar la educación. Querámoslo o no, somos un referente. Por lo tanto, como lo han señalado algunos señores diputados, tenemos que discutir este tema técnica y políticamente. Repetir majaderamente “los malos resultados del Simce y de la educación” es tratar de colocar un mensaje en la opinión pública que no coincide con la realidad de los hechos. Se pueden demostrar los avances y los problemas en el área educativa. Allí debemos apuntar para seguir creando nuevas fórmulas ante las diversas realidades educativas de Chile. Porque falta mucho por hacer, estamos trabajando desde nuestros distintos escenarios, con los roles que a cada uno nos toca interpretar, para lograr más y mejores resultados en la educación dirigida a nuestros niños y jóvenes. Se dice que hemos casi triplicado la inversión en educación desde 1990 y no hemos avanzada casi nada en los resultados del Simce. Nosotros respondemos que la inversión en educación se ha destinado a lograr un piso mínimo de cobertura y calidad de condiciones para el aprendizaje para todos los niños del país. El aumento de la inversión en educación ha permitido entregar una educación más digna a cada estudiante de Chile. Se ha aumentado la cobertura educacional y disminuido la exclusión y la deserción escolar. Hemos avanzado, pero no todo cuanto quisiéramos. Continuamente se afirma que Chile debe competir de igual a igual y compararse con los países más desarrollados y que sus recursos humanos deben formarse con un nivel de calidad similar. Sin embargo, se invierte por cada alumno menos de la mitad de lo que invierten esos países. Algunos datos entregados por el Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, Piie, señalan que se invierten 2 UF por alumno al mes, en circunstancias de que debiéramos invertir como mínimo 4 UF. Aquí estamos hablando del tema de fondo, la redistribución del ingreso. Como es razonable, resulta difícil alcanzar a países que no solamente van mucho más adelante, sino que continuamente invierten en mejorar más que nosotros. Se afirma que la educación del país está estancada. A eso respondemos que la calidad de la educación no es sólo la calidad en los resultados. El Sistema de Medición de la Calidad de la Educación, Simce, mide sólo algunos temas de la educación, específicamente el aprendizaje de contenidos que forman parte de las materias escolares: lenguaje, matemática, comprensión del medio, etcétera. Pero ése es sólo el 30 por ciento de la evaluación completa de la educación. Si bien se observa que los resultados del Simce se han mantenido estables, aunque con leves alzas en las últimas mediciones, debiera ser visto como un logro en un sistema educativo que ha experimentado una fuerte expansión en su matrícula, debido a la mayor cobertura. En este sentido, el sistema atiende actualmente a 665 mil niños y jóvenes más de los que atendía en 1990. La gran mayoría de esos niños y jóvenes provienen de los sectores más pobres y postergados del país. Se expresa que la educación municipal es de mala calidad y que la educación particular subvencionada es mejor. A eso respondemos que el problema de fondo es cómo lograr que todas las escuelas, independientemente de su dependencia, aseguren una educación de calidad para todos los niños del país. El problema de la calidad es transversal a todas las dependencias, incluso para las particulares pagadas. Estas escuelas, a pesar de todos los recursos y flexibilidades con que cuentan, obtienen resultados deficientes en comparación con las escuelas promedio de países desarrollados. Se manifiesta que la formación de los profesores no tiene el nivel que demanda el sistema educacional del país. Al respecto, señalamos que estamos en el proceso de mejorar la calidad de la educación. Eso depende de un cambio cultural de todos, específicamente de los actores protagónicos de este sistema. Se indica que no se puede ocupar la pobreza como una justificación de los malos resultados del Simce. Nuestra respuesta es que la pobreza no es una excusa, sino una realidad. Existe un problema estructural en el sistema de financiamiento de la educación escolar: los que más necesitan, reciben menos. El gasto por alumno es desigual. A medida que aumenta el nivel socioeconómico de las familias, mayor es el financiamiento por alumno que recibe la escuela, ya sea vía financiamiento compartido o una mayor matrícula en el caso de los particulares pagados. Aquí es donde tenemos que avanzar. No debemos olvidar el tema de la redistribución del ingreso. Ahí nos aprieta el zapato; ésa es la piedra que debemos sacar del zapato, y ser capaces de avanzar con el nuevo gobierno. Es posible que la Oposición y la Concertación se pongan de acuerdo para avanzar en este tema primordial. Se nos señala que la subvención por alumno es insuficiente y que se requiere el doble de recursos. Sostenemos que si bien el monto del financiamiento es un tema en discusión, es importante asegurar el uso eficiente de los recursos disponibles de la gestión. Eso es absolutamente imprescindible de hacer para cuidar la inversión. El Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, Piie, señala que, basándose en los resultados entregados, resulta evidente la pertinencia de aumentar el financiamiento de las escuelas municipales, ya que ha demostrado ser el más eficiente para mejorar el aprendizaje de los niños más pobres de nuestro país. Al respecto, es importante estudiar la experiencia de asesorías y de apoyo externo que recibieron las llamadas “escuelas críticas” de la Región Metropolitana. Sin embargo, la evidencia internacional demuestra que los programas específicos de apoyo deben funcionar sobre la base de un sistema de financiamiento universal y suficiente para cubrir las necesidades básicas en la educación de los niños. En estas condiciones, podemos aspirar a un mejoramiento progresivo y sólido, y que incorpore a todas las variables para hacer permanente la comprensión en cuando a que la educación es un conjunto de factores y esfuerzos de todos los actores sociales. La falta de equidad en el modelo que se implementa día a día requiere de constantes evaluaciones y de miradas que nos muevan a acciones concretas y decisivas en este sentido. El desequilibrio económico y la distribución del ingreso en Chile tienen su consecuencia en el modelo educacional y en los efectos y resultados que se producen. Por eso, no nos puede extrañar que la falta de equidad y los fallos en los modelos repercutan en el aprendizaje y asimilación de los contenidos de los programas. Más recursos y mejor uso de ellos; docentes de aulas remunerados de manera más digna; niños y jóvenes descubriendo el mundo y la sociedad que habitan a través de la educación, son los objetivos que deben tenerse presentes en cada acción que realicemos. No olvidemos que los derechos civiles más importantes logrados en las sociedades democráticas se relacionan con el acceso a una educación justa, digna, de calidad y acorde con las exigencias y desafíos del país, inserto en una comunidad cada vez más global. Así es el mundo educativo que queremos construir en Chile. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo de Renovación Nacional, tiene la palabra el diputado señor Germán Verdugo. El señor VERDUGO.- Señor Presidente, hemos sido convocados para conocer los problemas que tiene la educación, a propósito de una de las tantas señales que se nos entregan periódicamente. El Simce es una señal de que existe algún tipo de problema o enfermedad en el sistema educacional. No por casualidad el señor ministro es médico. Tengo la plena confianza de que tratará de resolver los problemas que se han planteado. Asimismo, tengo la convicción de que no se podrán resolver los problemas de la educación si no atendemos fundamentalmente a los principales actores del proceso educativo: los profesores. No podemos mejorar la calidad de la educación cuando hay profesores que no pueden jubilar, estando en edad de hacerlo, porque sus ingresos bajarían entre el 50 y el 75 por ciento; cuando algunos obtienen una indemnización de 20 remuneraciones mensuales y otros, nada. En esas condiciones, sin duda, no hay posibilidades de lograr algo si no hay un recambio generacional, que es absolutamente necesario. Por otro lado está el problema de la formación docente. Actualmente, se han formado profesores estudiando los sábados por correo. Es imposible aceptar eso si queremos tener una educación sólida y estructurada, como lo planteó el señor ministro. Existe una experiencia tremendamente provechosa, que creo es aplicable en forma más masiva. Me refiero a los proyectos Montegrande que se implementaron hace algunos años, que fueron elaborados por las propias unidades educativas y seleccionados por el Ministerio de Educación. Se presentaron 257 proyectos, se aprobaron 51, y 43 de ellos fueron extraordinariamente provechosos. Allí se confió en los profesores, en la unidad educativa y en los proyectos elaborados por los profesionales. El gasto fue de 8 mil pesos por aumento de la subvención, y se obtuvo un resultado muy interesante. Creo que esa experiencia se puede retomar y aplicar a las escuelas de enseñanza básica, ya que esto sólo se llevó a cabo en los liceos de enseñanza media. Para la implementación del sistema se puso como condición la administración delegada, es decir, entregar la administración de los recursos a la propia unidad educativa, para que el alcalde no tuviera intervención ni interfiriera respecto de esos recursos. Reitero, esa experiencia debiera retomarse para mejorar, como todos queremos, el proceso educativo, ya que el proyecto costó 400 millones de pesos, como dije, 8 mil pesos por alumno. Creo que si confiamos en los profesores, si les entregamos la capacitación y el perfeccionamiento que requieren y necesitan, vamos a tener mejores resultados. En eso queremos empeñarnos todos: contribuir a que la educación mejore. Conocemos muy de cerca la realidad que viven nuestras escuelas, especialmente en los sectores periféricos. Reconocemos que se ha hecho una gran inversión, sobre todo en infraestructura, pero se olvidó a los profesores, ya que se construyeron comedores y baños para los alumnos, pero no consideró ninguna ventaja ni mejoría para los docentes y, por lo tanto, éstos se sienten disminuidos. La atención principal debería estar orientada a profesores, alumnos y a la situación socioeconómica en la cual se encuentran. Agradezco la presencia del señor ministro. Le deseo buena suerte y puede contar con nuestro apoyo en aquellas medidas en que realmente concordemos. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado Gabriel Silber. El señor SILBER.- Señor Presidente, agradezco la oportunidad para dar la bienvenida a nuestro ministro de parte de mi bancada y desearle el mejor de los éxitos en este cuadrienio que ha comenzado junto a su equipo. Por otra parte, lamentamos la exclusión de la subsecretaria de Educación, porque con su presencia se habría enriquecido el debate. Esperamos que, en lo sucesivo, la lógica de la derecha no sea determinante a la hora de citar a autoridades tan importantes para tratar temas tan relevantes. Entiendo lo importante de esta convocatoria y agradezco la oportunidad de discutir esta materia. No sólo estamos hablando de la coyuntura del Chile de hoy, sino que también, al hablar de la educación, nos referimos a la sociedad que queremos y, de alguna manera, estamos diseñando, perfilando y soñando el Chile que viene. Para ello, debemos tener una cuota de responsabilidad y de objetividad a la hora de plantear el diagnóstico y las propuestas, y tener compromiso con la historia y con lo que hemos hecho. No estoy de acuerdo con lo que acaba de expresar el diputado Errázuriz respecto de la molestia de algunos alcaldes por tener que intervenir en educación. Salta a la vista que desde los 80 años tuvimos un proceso de municipalización en el cual se entregó a los alcaldes, en su condición de sostenedores, la responsabilidad de las políticas a nivel local. A ningún edil debe causarle sorpresa, primero, desde el punto de vista legal y, segundo, por su compromiso ético con los ciudadanos y vecinos de su comuna. La educación debe ser tarea primordial a la hora de fijar un presupuesto. No puede ser que se entienda como prioridad contar con más plazas o más áreas verdes antes de destinar recursos a la educación, máxime cuando la ley de rentas II le dio más de 34 mil millones de pesos a las municipalidades. Señor Presidente, por su intermedio, le digo al señor Errázuriz que uno de los municipios más beneficiados es el de Puente Alto. Espero que su alcalde le dedique con todo gusto dichos recursos a la educación, porque no sólo es su deber, sino también su compromiso. En segundo lugar, al hablar de responsabilidad, pido compromiso con lo que hemos hecho. Lo digo, porque, en estos últimos quince años, según reseñaba el señor ministro, ha habido esfuerzos importantes del gobierno, que ha sido reelegido y valorado por la sociedad debido a los pasos que ha dado en educación. No es menor que de cada diez alumnos que hoy están en la universidad, siete -por primera vez en su generación- den el primer paso en ese nivel educacional. No es menor que actualmente el Estado destine cerca del 4 por ciento de nuestro producto interno bruto a invertir en educación. Si tomamos en consideración el aporte del sector privado, estaremos hablando de cerca del 7 por ciento. No es menor que a diario, cerca de 1 millón 200 mil niños se alimenten en los distintos establecimientos, mediante el programa que realiza la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas, Junaeb; no es menor la inversión pública que ha existido en materia de jornada escolar completa, y también hay que entender que, a la hora de complementar la gran cantidad de recursos existentes, vemos también cuál es su distribución. En este sentido, el Ministerio de Educación destina cerca del 64,5 por ciento de ellos a la entrega de subvenciones a los distintos sostenedores, tanto públicos, por intermedio de las municipalidades, como privados, en este caso, por agentes de las escuelas particulares subvencionadas. Desde el punto de vista presupuestario, existe un importante componente que debería reflejarse a la hora de evaluar, de diseñar quién debe ser el responsable en materia educativa. Creo que los alcaldes y los sostenedores público-privados que participan en este proceso deben ser protagonistas. También es importante reseñar que cerca de 11,5 por ciento de los recursos se destina a las universidades. Por lo tanto, debemos mirar con objetividad y hacer una correcta lectura del Simce, como expresó el señor ministro. No es menor que, en términos generales, al considerar todos los quintiles socioeconómicos, en Chile, sin distinción, los resultados en lenguaje y comunicación hayan aumentado cuatro puntos, y en matemática, un punto. Por lo tanto, hubo un avance. La cobertura es un tema importante, pero también debe serlo la calidad, y estamos dando pasos en ese sentido, porque hubo un crecimiento. Pero es mayor y más gravitante la diferencia al observar lo que ocurre en los medios socioeconómicos medio-bajo y bajo, en los cuales existe una participación del Estado a través del Ministerio y de los municipios. En dichos sectores, las rentas de los padres no superan los 97 mil pesos en el nivel socioeconómico bajo -uno de los que más creció y que dio muestras de mayor esfuerzo en el trabajo de los padres y del cuerpo docente- y los 136 mil pesos en el medio-bajo. En esta materia, existió un aumento significativo: siete y seis puntos en esos sectores, en ambos componentes. A la hora de hablar de resultados y de cifras, hagámoslo con objetividad y con precisión, sin discursos pirotécnicos porque no estamos hablando de lo que pasará en la próxima elección municipal o presidencial, sino de la sociedad, del Chile que viene, del Chile que queremos. Éste es un esfuerzo de todos. Por tanto, a la hora de hablar de educación, hagámoslo con seriedad. Como Concertación, nos preocupa sobremanera lo que viene. Hemos dado pasos gigantescos en materia de cobertura, con el apoyo de todo el país, porque éste no es un esfuerzo sólo del gobierno de turno, sino de toda la sociedad. Pero debemos asumir los pasos con madurez. Por eso, son pertinentes las propuestas para éste cuadrienio. Tenemos en curso el proyecto de ley de subvención preferencial. Existen dos importantes componentes que vienen a reforzar la calidad de la educación: primero, más recursos para quienes más los necesitan. El sector socioeconómico más bajo tendrá mayor subvención respecto de quienes, desde el punto de vista de los ingresos, son apoyados desde la esfera privada. Segundo, la subvención también debe ser medida a base de resultados, del compromiso de los sostenedores, de los objetivos que, como cuerpo educativo, se planteen. De alguna manera, en este cuadrienio que se inicia, los pasos que se den serán significativos a la hora de asumir con madurez y seriedad una discusión en materia de educación. Tampoco es menor la relevante transformación impulsada por el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, al dar de una vez por todas la preeminencia requerida a la educación preescolar. Ya reseñó el señor ministro lo importante que es asumir el tema de la respuesta temprana respecto de nuestros menores. Ahora hay quince o veinte puntos de diferencia -por ejemplo, en la prueba Simce o en otros instrumentos similares- entre los alumnos que tuvieron acceso a educación preescolar y aquellos que no disfrutaron de esa posibilidad. No sólo quiero destacar lo que pasó, sino también empezar a hablar de lo que viene y cómo podemos hacer mejor las cosas. No se trata de autocomplacencia, sino de asumir el tema con madurez, con responsabilidad y con propuestas, en lo que estamos interesados como bancada y como Concertación. Es necesario reseñar una propuesta -que ya se está madurando- y entender definitivamente que la educación no es un tema político ni ideológico; no se trata de discutir si hay más Estado y, por tanto, menos libertad de enseñanza, ni de entender que si queremos mejor educación necesariamente debe haber más recursos en el sector privado, etcétera. De una vez por todas, debe hacerse conciencia respecto de lo importante que es el hecho de que la inversión que hagamos sea efectiva, seria y responsable. Para ello, me gustaría -a propósito de la presencia del señor ministro en la Sala- que en el futuro se discutiera la existencia de una suerte de superintendencia de educación o de instituto autónomo, despolitizado, técnico, que tenga facultades efectivas y que garantice un estándar mínimo de educación, al menos en las áreas de las ciencias, de las matemáticas, de la lectoescritura y de la educación bilingüe, con facultades reales a la hora de fiscalizar qué se hace con ese 64,5 por ciento de recursos que el Estado destina a pagar las subvenciones. Es necesario tener facultades de control, de fiscalización y que hagamos posible la educación no sólo desde el punto de vista de la entrega, sino también de la participación de los padres, de manera seria, responsable y comprometida. No es posible que en algunos colegios se discrimine el acceso a estudiantes por razones de ingreso socioeconómico o por el estado civil de los padres. Necesitamos un ente autónomo, distinto del Gobierno, que se haga cargo de lo que está pasando en educación. Para hablar de este tema, no sólo hay que preocuparse de la fotografía anterior, sino también retomar lo que se ha hecho, insistir en los pasos que ya hemos dado, en este caso, desde la promulgación de la Loce, ley orgánica constitucional de Enseñanza, la cual es necesario revisar porque, como ya señalé, éste no es un tema marcadamente ideológico, sino que debemos entender, al final del día, que este problema debe preocuparnos como sociedad, en conjunto; no se trata de enquistarle al gobierno de turno la responsabilidad de lo que está sucediendo. Insisto en que ésa es una responsabilidad de la sociedad, del Estado, y la Concertación quiere hacerlo presente. He dicho. -Aplausos en la Sala. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo de la Unión Demócrata Independiente, tiene la palabra el diputado señor José Antonio Kast. El señor KAST.- Señor Presidente, cualquier persona que ve lo que está ocurriendo en esta Sala a través del canal de televisión y escuchara solamente a los colegas de la Concertación podría pensar que estamos en el país de las maravillas. Aquí se nos habla de objetividad, pero veo poca en los planteamientos que se nos han formulado. En su intervención, el diputado Rossi adjudica casi toda la responsabilidad en la Oposición. ¡Por favor! ¡Si llevan dieciséis años en el Gobierno! La diputada Ximena Vidal afirma que majaderamente insistimos en la mala calidad de la educación y que no reconocemos nada. Eso no es cierto. Hemos reconocido el aumento en cobertura, en textos, pero existen problemas en la calidad de la concepción y en los contenidos de esos textos, lo cual es conocido por cualquier experto en educación. Más del 50 por ciento del contenido de los textos escolares no son usados por los profesores porque no saben cómo aplicarlo. También manifiestan que seguimos insistiendo en que la calidad de la educación es mala. Como dice un dicho, “la verdad duele”, pero es necesario decirla. El diputado Silber le dice gratuitamente al diputado Errázuriz que los municipios tienen que gastar más recursos. Lo que el diputado Errázuriz sostuvo es que los municipios hoy están gastando gran parte de sus ingresos propios en educación, cuando deberían venir del Estado. Además, agregó que en Puente Alto hay que preocuparse más de la educación. Al respecto, lo invito a conocer lo que ha hecho esa comuna para mejorar la calidad de la educación. Creo que se sorprendería de lo que han logrado, sobre todo si la compara con otras comunas de la Región Metropolitana. Se nos dice que tenemos resultados positivos en el sector socioeconómico bajo. Según la estadística entregada por el ministro de Educación -y le agradezco que acompañe datos-, en ese nivel se registra, en lenguaje, 231 puntos; en matemática, 220 puntos, y en comprensión del medio, 227 puntos. ¡Y se dice que eso es bueno y que se ha avanzado! ¡Por favor! Después de 16 años, con cuatro veces más en gasto. Lamentable y objetivamente esto es una vergüenza. Por otra parte, se dice que van a formular propuestas. Llevamos varios años esperándolas, pero no llegan. La mayoría de las medidas que se están aplicando -en la subvención diferenciada o en la evaluación- son resultado de nuestra insistencia. Se dice que no podemos achacarle culpas al gobierno de turno. No es así, se las achacamos a todos los gobiernos anteriores. El sentido de convocar a esta sesión especial era que no se cumpliera el rito anual del Simce, que consiste en que el primer día se entregan los resultados. Este año se hizo entre gallos y medianoche: un viernes, a las 20.00, para evitar la cobertura de prensa por los malos resultados; el segundo, se expresa que tenemos problemas, pero que estamos en buen camino. Hace 16 años nos dicen lo mismo; el tercero, se anuncian las medidas para solucionar los problemas; el cuarto, se muestran algunos resultados alentadores. En una oportunidad nos hablaron del Programa de las 900 Escuelas, P900. Hoy, del gran avance de las 66 escuelas críticas, pero queremos ver resultados concretos. ¿Qué habría pasado si esos establecimientos no hubiesen tenido el apoyo externo? ¿Habrían avanzado? Como bien dijo el ministro, el tema ya no es la enseñanza del inglés, del chino mandarín o del uso de los computadores -que están casi todos obsoletos y no se pueden cambiar debido al programa existente-, sino la calidad de la educación. Eso es lo que nos debe ocupar. Al respecto, recuerdo a los parlamentarios de la Concertación, los informes del Simce de 1996, 1999, 2002 y 2005, todos con malos resultados. No se trata de cambiar un programa o de que el P900 o el Mece Rural fueron una solución. Ya no estamos para soluciones a la chilena, como arreglar un motor con un alambrito. Aquí hay un fracaso total de la reforma educacional, porque en estos 15 años han egresado estudiantes y no tienen mejores resultados. ¡Ese es un fracaso y hay que reconocerlo! El ministro de Educación está en la mejor de las situaciones. Está comenzando su gestión y le deseamos éxito, aunque siempre se ha dicho que utilizamos este tema políticamente, pero no es así. Queremos mejorar la calidad de la educación, pero, como decía el ministro, ello no sólo se logra en el hardware, sino que en el software. El problema es que éste ya estaba, lo crearon los gobiernos de la Concertación con la reforma educacional, ahora tiene un virus y hay que eliminarlo, pero no se logrará diciendo que se dará un ciento por ciento para alimentación o crédito. El punto es qué aprenden los niños ¿Saben sumar y restar? ¿Saben leer y comprender lo que leen? Hoy, en Chile, la educación básica es un fracaso y debemos reconocerlo. No es una crítica política, es una realidad. Con el objeto de tratar de ayudar con cosas concretas, quiero hacer algunas consultas puntuales: primero, hoy nos ocupa un proyecto de ley bastante importante, que es la modificación del decreto con fuerza de ley N° 2, sobre subvención del Estado a establecimientos educacionales, que le asigna recursos a las escuelas especiales, las escuelas de lenguaje, respecto de las cuales se dice que son un negocio y, por eso, hay que restarle recursos y cambiar las condiciones. A mi juicio, eso atentaría aún más contra la calidad de la educación. Queremos saber si se va a insistir en ese proyecto. Queremos saber cuáles son, hasta la fecha, los efectos y los resultados de cada programa especial aplicado por el Mineduc, pues no los tenemos. La ex ministra de Educación, señora Mariana Aylwin, nos dio los resultados del proyecto Montegrande. En esa oportunidad, se nos entregó un folleto muy bonito y se nos dijo lo óptimo que había sido, pero nunca más se habló de él porque, en realidad, el proyecto había fracasado. Queremos saber cuáles son las cinco medidas básicas de pronta aplicación para corregir los errores de la reforma educacional. Insisto, el software pasa por los contenidos mínimos y por los objetivos transversales que están dentro del concepto de la reforma educacional y que va mucho más allá de una peor o de una mejor construcción. Queremos saber si se van a fijar metas y responsabilidades a los nuevos programas y a sus ejecutores. Si revisamos la historia del ministerio y de todos los programas que se han aplicado, nunca se ha informado la verdad en cuanto a si funcionaron y si quienes los crearon siguen en el ministerio. Les aseguro que casi todos continúan en sus cargos. Queremos saber si se ha pensado en un sistema que permita premiar a los colegios que logran buenos resultados. Hay ejemplos concretos a nivel particular subvencionado. Tengo los resultados de la Sociedad de Instrucción Primaria que, en dos páginas, indican por qué tienen buenos resultados en la prueba Simce: control de velocidad lectora y exámenes permanentes de suma y resta. ¡Son cosas muy básicas! Queremos saber si se harán efectivas las medidas que impliquen más y mejor información a todos los padres y apoderados y cuándo estarán listos los estándares, de manera que la información sea clara, para que los padres entiendan qué implica que sus hijos tengan 200, 220 ó 230 puntos. ¿Qué operaciones matemáticas pueden hacer? ¿Qué velocidad lectora tienen? Creo que el señor ministro está en el mejor momento para introducir cambios. Espero que de aquí en adelante el ministerio de Educación adopte medidas concretas y no efectistas y mediáticas, porque en otras administraciones nos acostumbraron a que por cualquier problema, salía el ministro del ramo en la prensa hablando del chino mandarín, del inglés o de los infartos de los niños en las escuelas, pero, lamentablemente, no avanzamos nada en la calidad de la educación. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité del Partido Radical Social Demócrata, tiene la palabra el diputado señor Alberto Robles. El señor ROBLES.- Señor Presidente, desde siempre, los radicales hemos sostenido que “gobernar es educar”. Eso es porque creemos en el rol del Estado en la educación. Todas las familias chilenas de mediados del siglo 20 -las más pobres y las más ricas- sabían que si su hijo era talentoso y se educaba en un colegio público y luego en un liceo público iba a tener la posibilidad de lograr el desarrollo social de su familia. En la actualidad, en el siglo 21, después de la reforma del gobierno militar de Pinochet, que terminó con la educación pública y la envió al mercado, la educación en Chile depende del bolsillo de los chilenos. Eso no es sino que una constatación de lo que está pasando. Las familias de mediados del siglo 20 educaban a sus hijos en los colegios y liceos públicos de Chile y el 90 por ciento de los alumnos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile de 1974 provenía de los liceos públicos de todo el país. Fui compañero de muchos de ellos. Hoy, en el siglo 21, el 90 por ciento de los alumnos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile proviene de colegios privados, como el Saint George y otros. Aquel que se educa en un liceo público casi no tiene opción de llegar a la escuela de medicina de alguna universidad de nuestro país. Si eso se produce por una alteración, a mi juicio, del rol del Estado en la educación, entonces, me parece fundamental revisarlo. En realidad, el gobierno militar tiró la educación al mercado, y hoy tenemos colegios privados que cobran caro para educar a nuestros hijos, pero que aseguran que la educación en esos colegios permitirá que sus alumnos van a llegar a la universidad. La gran mayoría de los colegios particulares subvencionados -no todos- tienen sostenedores que buscan el lucro personal y que pagan mal a los profesores que educan en esos establecimientos. Por otra parte, en los colegios municipalizados la calidad de la educación ha disminuido porque se han mantenido durante mucho tiempo bajo la administración de directores que están “apernados”, dirigidos por los alcaldes en su tiempo. Necesitamos debatir sobre el rol del Estado en la educación y qué enseñanza queremos entregar a nuestros hijos. En países desarrollados, como los de Europa, la educación es una herramienta del Estado, y las personas pagan los impuestos porque saben que el Estado es capaz de brindar una educación uniforme y de calidad a todos los ciudadanos. En Chile, debido a que la economía de mercado se introdujo en la educación -situación que no hemos podido cambiar-, tenemos estas grandes desigualdades que hoy vemos reflejadas en las pruebas Simce. No me cabe ninguna duda de que un muchacho que cursa el 4º año básico en una escuela de Tierra Amarilla difícilmente llegará a tener un avance social, a diferencia de aquel que en la misma región cursa el 4º año básico en el colegio San Lorenzo, que es un establecimiento privado. Comparto lo que ha dicho el ministro de Educación, en el sentido de que hemos hecho un gran avance en infraestructura educacional. Tenemos colegios cada vez mejores. No obstante, lo que debemos hacer ahora con mucha más dedicación es mejorar la calidad de la educación junto con los profesores. Esto es, preocupándonos de que haya universidades que de verdad formen educadores, como lo hicieron las escuelas normales, y que se dignifique la labor del profesor pagándoles una remuneración como corresponde. No más aulas con unidocentes, no más escuelas donde un solo profesor le hace clases a treinta alumnos de 1º a 6º básico. Ello nos permitirá salir del problema que hoy tenemos en educación. Los diputados radicales creemos que el debate sobre esta materia debe ser mucho mayor. El rol del Estado en la educación es un tema que nadie quiere tocar, en circunstancias de que debe ser el pilar de la discusión para avanzar en educación. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo de Renovación Nacional, tiene la palabra el diputado señor Germán Becker. El señor BECKER.- Señor Presidente, a pesar de llevar varios años en la Cámara de Diputados, de todas maneras me asombra la actitud de los parlamentarios de la Concertación, que hacen una defensa absoluta de todas las políticas del gobierno en educación. Tienen cero autocrítica, manifiestan total autocomplacencia, dan a entender que está todo bien y que vamos avanzando. A lo más, le echan la culpa a los municipios o al mercado de los problemas de la educación chilena. Hace algunas semanas, el Presidente Ricardo Lagos destacó que en su gobierno se gastó once veces más en educación. Pero no me cuadran mucho las cifras, imagino que él sumó los aportes que entregaban los municipios y el gasto privado en educación, porque, de acuerdo con el presupuesto nacional, se está gastando cuatro veces más en educación, esto es, 2,5 billones de pesos al año. Todos estamos de acuerdo en que se está gastando más. No obstante, ¿es el objetivo de la educación invertir más recursos en infraestructura? Me parece bien que se invierta en ese aspecto, pero el objetivo final que todos queremos es que se dé una educación de calidad a nuestros hijos, para que puedan desarrollarse plenamente y competir en igualdad de condiciones en este mundo globalizado. ¿Estamos logrando ese objetivo? ¿Estamos dando una educación de calidad a los niños? El ministro mostró unos gráficos donde se veía qué países bajaban o subían sus puntajes en la prueba internacional Timss, pero no dijo en qué lugar estaba Chile. Entre 40 países, en el 38. Los resultados del Simce permanecen bajos y estables; las variaciones son prácticamente insignificantes. Voy hacer una comparación de los resultados desde 1999, es decir, abarcaré todos los años del gobierno del Presidente Lagos. De 1999 al 2005, en lenguaje, cinco puntos más; en matemática, dos puntos menos. En verdad, nos encontramos con un contrasentido: se está gastando cuatro veces más en educación y el objetivo no mejora para nada. El ministro ha señalado aquí que no había una relación directa entre insumo y producto. ¡Pero, ministro -por su intermedio señor Presidente- aumentar cuatro veces el gasto y no mejorar nada el objetivo principal de nuestra educación debería ser una preocupación de todos, incluso, de los parlamentarios de la Concertación! En este nuevo gobierno, es muy importante que el Ejecutivo priorice de mejor manera la inversión en educación. Reconozco que se ha invertido mucho en infraestructura, que se han mejorado los sueldos de los profesores. Es decir, las bases están sentadas, pero tenemos que preocuparnos de la calidad. Señor Presidente, por su intermedio, quiero dar tres ideas al ministro. En primer lugar, es fundamental dar urgencia al proyecto de subvención preferencial -antes se llamaba subvención diferenciada-, el cual estamos esperando hace por lo menos cuatro años. No me parece muy positivo el proyecto como viene, pero haciéndole algunas correcciones se puede mejorar y podemos lograr que los niños de más bajos recursos mejoren su rendimiento. En segundo lugar, mejorar el Sistema de Evaluación Docente, dando incentivos reales a nuestros profesores. No quiere decir mejorar directamente sus sueldos, sino el de quienes lo hagan bien. Tengo en mi poder un trabajo realizado por la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile acerca de las remuneraciones de los profesores en Chile, el cual señala: “En resumen, los resul-tados de este trabajo permiten concluir que el problema fundamental de las remuneraciones de los profesores en el país no es su nivel promedio, sino su estructura. A diferencia de otros profesionales, la varianza de los ingresos laborales de los profesores es muy baja, lo que significa que independientemente de qué tan buen profesional sea, el salario está fijado por consideraciones ajenas al desempeño.” O sea, da lo mismo como se desempeñe el profesor, pues va a ganar siempre lo mismo. En tercer lugar, posibilitar la jubilación de los profesores. Algunos de avanzada edad tienen que seguir trabajando, porque su jubilación es demasiado mala. En el caso de Temuco, ha bajado el número de matriculas en el sector municipal. Hace 10 años teníamos seis mil alumnos más, pero los profesores son los mismos. El municipio tiene que traspasar mil millones al año al sector educación. En eso no concuerdo para nada con el diputado Silber, pues el Estado tiene que proveer todos los recursos para que haya una mejor educación y los municipios no pueden estar obligados a traspasar fondos que deberían gastar en otras cosas. En este momento, más de 100 mil millones de pesos se traspasan desde los municipios al sector educación. Por último, quiero decir al ministro que estamos de acuerdo en que éste es un tema país muy importante y que todos tenemos que trabajar juntos, pero no debemos ser autocomplacientes, sino autocríticos, analizar las cosas y mirar con optimismo el futuro, tareas en las que siempre contará con Renovación Nacional. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado señor Carlos Montes. El señor MONTES.- Señor Presidente, estamos ante una discusión que debería orientar a cómo esta Cámara aporta para mejorar la educación chilena. En ese sentido, ha sido valiosa la realización de esta sesión para analizar los resultados de la prueba Simce. Nosotros vamos a aprobar los dos proyectos de acuerdo, pues creemos que reflejan un cierto espíritu, una cierta intención de avanzar, de lograr un acuerdo y de sacar adelante el asunto. Sin embargo, me preocupa no tener el tiempo suficiente para profundizar en el debate. Entonces, mi primera reflexión: ¿qué es esto de la calidad? Se parte de la base de que no hay calidad, pero no podemos magnificar el Simce. Sabemos que es un sistema de pruebas estandarizadas referidas a una norma con limitaciones. El autor de la prueba Simce en Chile, Robert Glaser, dice que no mide lo que saben los alumnos ni lo que ellos saben hacer. Para eso se requiere otro tipo de evaluaciones. Además, señala que lo único que miden estas pruebas es la capacidad de recordar procedimientos, por ejemplo, en matemática, o reconocer un resultado cuando se dan posibilidades múltiples. Por lo tanto, no confundamos: puntaje en la prueba Simce no equivale a calidad. Esto mide el cómo reaccionan los alumnos frente a ciertas cosas, pero no mide calidad. Calidad no es puntaje. Una educación de calidad tiene que ver, esencialmente, con la capacidad de la institución escolar para facilitar que las personas y, consecuentemente, la sociedad sean mejores, que adquieran conocimientos y desarrollen aptitudes. La calidad educativa no es una actividad centrada en temas: puntajes más o menos altos. Dos o tres puntos más o menos no pueden ser discusión sobre calidad. Incluso, hay autores que señalan que aplicar por fuera a los establecimientos escolares un sistema estandarizado para medirlos, genera grandes distorsiones que, en lugar de ayudarlos a mejorar, los ayuda a empeorar. ¿En qué país donde se aplica esta prueba han mejorado los resultados? ¿Qué ha pasado en los países latinoamericanos y en otros donde se ha aplicado esta prueba? Aquí hay efectos perversos provocados por la prueba. Por eso, no debemos magnificarla. Son lo que son y no más que eso. Por ejemplo, el foco de la educación está orientado a la mejora de los puntajes y no de la enseñanza, que es el fundamento de ella. Se tiende a sacar de los objetivos de la educación cuestiones que son fundamentales, como el desarrollo de la personalidad de los educandos, el respeto entre ellos y hacia la ciudadanía, la postura valórica, la capacidad de acceder en forma independiente a nuevos conocimientos, en fin, el compromiso con la sabiduría. Estas situaciones no son evaluadas por las pruebas sicométricas. En definitiva, lo que es la finalidad esencial de la educación queda a un lado en el proceso educativo, porque no es evaluado. ¿En cuántos colegios hoy se enseña, más que para formar buenos alumnos, para obtener buenos resultados en la Simce? Como dije, aquí se generan fuertes distorsiones, lo cual, sin duda, terminará afectando la igualdad en la educación. Esto es lo primero que quería señalar: no nos compremos el Simce tal como está. Sirve para algunas cosas y para otras no. Respecto de los instrumentos de evaluación, deberemos tenerlos presente dependiendo de cuáles sean los objetivos para la reforma. ¿Qué pasa con nuestra reforma educativa? En ella lo peor son las cuestiones autocomplacientes y autoflagelantes. Está claro que ha habido cosas muy buenas, pero también se debe reconocer que tenemos serios problemas. Entonces, uno puede hacer una valoración crítica. Pretender sobrepolitizar la situación y decir que está todo malo, que nada sirve y todo es un fracaso, no es verdad. Si lo tomamos desde el punto de vista comparativo, o con el análisis que muy bien hace el ministro, hay un conjunto de indicadores. Pero estamos con problemas. Sería absurdo no reconocer que, en Chile, la educación tiene problemas. Por otro lado, el domingo recién pasado, Brünner analizaba la educación chilena desde el punto de vista de lo que implica en la calidad y características de la sociedad. Al respecto, señala: “Para nosotros, por lo tanto, el Simce más vital y decisivo debiera ser un examen de la medida en que la sociedad supera la exclusión escolar y el grado en que abre las puertas de la enseñanza superior. En ambos frentes, el éxito de la reforma es innegable. A partir de allí debemos preocuparnos ahora de la democratización...”. O sea, tenemos que tener una mirada amplia, global, de sociedad. Hay problemas en el sistema escolar. Creo que hay serios problemas en la reforma. Éste es un sistema escolar tremendamente segmentado. Cuando se propuso que no lo fuera, se tomó una serie de medidas que lo segmentaron aún más. Es un sistema inequitativo, desigual. Hay una tremenda desigualdad educativa y severos problemas de calidad en todo tipo de establecimientos, sean particulares, particulares subvencionados o municipales. Los particulares tampoco pasan ninguna prueba comparativa internacional. A partir de este tipo de constataciones es importante volver a discutir globalmente por qué sucede esto y qué proponemos como alternativa. O dicho de otra manera, ha llegado el momento de volver a discutir el informe Brünner, porque tiene errores garrafales: supuso que los niños y los colegios eran iguales y que, a partir de su autonomía, podían competir en igualdad de condiciones. En eso hay un error que, aun cuando se ha corregido en el pensamiento, está en la base del marco común. Deberíamos preguntarnos cuáles son las causas para que la educación, a pesar de todo lo que hemos avanzado, no se pegue el salto enfrentando la segmentación, la inequidad y los problemas de calidad. Hay análisis que indican que el sector público no sirve; que hay que privatizar todo. Es necesario que haya más mercado. Pero, ¡cuidado! Chile es uno de los países donde el 50 por ciento del sistema educacional está en manos de privados. El tema no está en privatizar o no; ésa no es la discusión. Se dice que aquí falta corregir incentivos, corregir fallas de mercado. Veamos qué significa eso. Se dice que los profesores son los culpables. ¡Mucho cuidado con eso! Si los profesores no tuvieran potencial, tendríamos que esperar todo un ciclo de reformación docente. Los profesores tienen un gran potencial, como lo demuestra la experiencia de la Región Metropolitana, sobre todo, porque sobre esa base se dio el gran salto. No tengo tiempo para decir todo lo que la Cámara de Diputados ha diagnosticado y propuesto; sin embargo, nos planteamos muchas cosas. Hubo un acuerdo del Ministerio de Educación con esta Cámara y con el Colegio de Profesores para rebajar la cantidad de alumnos por curso. Eso no se ha cumplido. Legalmente se estableció que para contener la segregación todos los colegios subvencionados deberían tener a lo menos un 15 por ciento de alumnos vulnerables. Ello no se aplicó el 2005 y todavía el Ministerio de Educación no ha hecho nada para asegurar que esa norma se esté cumpliendo. Establecimos una nueva forma de seleccionar a los directores -no entraré en eso-: los consejos escolares. Ello, producto de un debate con la Unicef, con la Unesco, con el ministro Zilic, con mucha gente, porque veíamos que era importante un canal más horizontal de diálogo en las escuelas. Pero el Ministerio ha hecho poco respecto de esto. Los municipios no están funcionando. Hay que aclarar el rol del municipio y el del Ministerio; en fin, el tema tiene que ver con la regulación en general. Todavía estamos con problemas macro en cuanto a la reforma, de organización del sistema tanto en el rol de los actores como en el sistema de financiamiento. Estamos con muchos problemas micro en el aula. Pero la solución no es puramente decir “más incentivos de mercado”, sino analizar el conjunto de materias para ver cómo enfrentarlos. Debemos ser capaces de continuar esto, porque no basta con algunos discursos de cuatro o cinco minutos. Es importante que se constituya una comisión especial, como ya se acordó, para profundizar respecto de los diagnósticos y de las medidas, no para aplicar soluciones simplificadoras, sino para analizar en conjunto el problema y para evaluar los aportes de muchas políticas. Por ejemplo, el financiamiento compartido significa 200 mil millones de pesos, lo mismo que todas las contribuciones del país. Habría que evaluar si eso ha funcionado, qué impacto ha tenido en la calidad de la educación y qué cosas buenas y malas ha tenido. Por su intermedio, señor Presidente, le quiero desear al ministro que le vaya muy bien en su gestión, pero quisiera que esta vez no hubiera acciones aisladas, sino un diagnóstico común con medidas articuladas al más breve plazo. Por tanto, propongo constituir una comisión de trabajo, como ya lo hicimos el 2002, para profundizar sobre las causas de los problemas y, a partir de eso, proponer medidas. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité Unión Demócrata Independiente, tiene la palabra el diputado señor Sergio Correa. El señor CORREA.- Señor Presidente, en tan poco tiempo es muy difícil hacer un análisis a fondo sobre esta materia. Existe un acuerdo general en cuanto a que los resultados de la prueba Simce no son satisfactorios. Reconozco en todo lo que vale lo señalado por el ministro ayer en la Comisión de Educación. Hay un problema serio en la calidad de la educación. Hoy lo repitió. Ésa es una muy buena disposición para entrar al tema de fondo. Para analizar la calidad de la educación es necesario remontarse a la época en que se inició la reforma educacional, como lo señaló el colega Kast. Era una reforma más bien ideológica, trataba sobre contenidos mínimos y objetivos transversales. Ello, sin duda alguna, tenía algunos sesgos ideológicos. Posteriormente, este Congreso aprobó el proyecto de ley sobre Estatuto Docente, lo que contribuyó a rigidizar el tema, especialmente en lo relativo a la educación municipal. Después están las medidas adoptadas durante el gobierno del Presidente Frei al inicio de su mandato, en 1994, cuando se comenzó a aplicar la jornada escolar completa que, por lo demás, fue una muy buena medida. Inicialmente se dijo que terminaría en 2002, pero posteriormente fue prorrogada hasta el 2007. A mi juicio, creo que ello no se podrá cumplir. Pero lo más grave de todo es que, si bien reconocemos que la jornada escolar completa ha permitido avanzar mucho en infraestructura escolar, puesto que las escuelas que se están construyendo son muy buenas, no ha ocurrido lo mismo en lo que dice relación con el profesorado. Aquí hago mías las palabras del colega Germán Verdugo, quien señaló que es imposible llevar a cabo una reforma educacional si no tomamos en cuenta al profesorado, que hoy lo está pasando muy mal. Hay profesores de 75 años o más que siguen trabajando, porque si jubilan se van con la mitad del monto de sus remuneraciones. Por su parte, los alcaldes deben despedir a los profesores a contrata, porque es la única forma en que pueden reducir el déficit originado por las bajas subvenciones que reciben, debido a que cada vez se matriculan menos niños. Por eso, si el problema de fondo no es abordado por nosotros y por el Ministerio, simplemente no lograremos el objetivo que todos queremos, cual es, como dijo el ministro, lograr un desarrollo económico similar al de otros países, lo que, sin duda, pasa por una mejor calidad de la educación. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité del Partido por la Democracia, tiene la palabra la honorable diputada señora María Antonieta Saa. La señora SAA (doña María Antonieta).- Señor Presidente, ante todo, quiero sumarme a la bienvenida al ministro de Educación. Quiero comenzar mi intervención haciendo un reconocimiento a las profesoras y a los profesores de nuestro país, en especial a quienes se desempeñan en los colegios municipales de los sectores más pobres de la sociedad. Respecto del Simce, siempre se tiende a analizar esta prueba mezclando peras con manzanas. Es muy distinto comparar los resultados obtenidos por los colegios particulares privados, que agrupan al 10 por ciento de los estudiantes que pertenecen a los sectores socioeconómicos más altos, con los alcanzados por un colegio rural o una escuela de La Pincoya, donde los problemas familiares marcan a los niños. Más que una competencia o un elemento que es utilizado para descalificar a la educación, el Simce debe ser una herramienta de trabajo en los colegios para ir superando los problemas que se presentan durante el aprendizaje de los educandos. Esto es muy importante, porque el problema se mira como una cuestión catastrófica y no se reconocen los avances, sin considerar que, desgraciadamente, la misión educacional, cual es corregir la cuna, resulta muy difícil, porque todavía marca la orientación de sus vidas. Entonces, tenemos que ese 10 por ciento de los niños, que estudia en los colegios particulares privados, en los cuales la colegiatura tiene un valor de 300, 400 ó 500 mil pesos mensuales, es el que ingresa a la universidad, constituyéndose en una elite. Sin embargo, a pesar de esta mirada exageradamente catastrófica que, en mi opinión y en la de muchos, es utilizada para descalificar a los gobiernos de la Concertación, los resultados de la prueba Simce han ido mejorando, y eso es importante. Pero creo que debemos tener una mirada más concreta y clara con respecto al problema. ¿Cómo se puede comparar la situación de un profesor de un colegio particular pagado del barrio alto con otro de un colegio municipal de La Pincoya, que debe enfrentarse a los miles de problemas que afectan a sus alumnos? ¿Cómo se puede comparar a los colegios particulares, que tienen orientadores, sicólogos y padres con recursos suficientes para atender todas las necesidades de sus hijos, con los colegios municipalizados, que no excluyen a nadie, que no realizan exámenes de admisión ni piden un puntaje mínimo de ingreso? Un profesor municipalizado no sólo debe saber todo lo relativo a su asignatura, sino que también cómo enfrentar los problemas cotidianos de riesgo y violencia a que están expuestos sus alumnos y sus problemas de abandono y carencias, no sólo materiales, sino que también -lo que es más grave- afectivas. Y este profesor sabe que la escuela o el liceo pueden hacer muy poco por apoyarlos más allá de las horas de clases. Con cursos de 45 alumnos -todavía no logramos disminuir esa cifra- estos profesores no disponen de recurso alguno; sólo cuentan con el apoyo de sus colegas a la hora del recreo, en la sala de profesores. Además, los profesores deben soportar el dolor que les causa saber la historia de cada niño y de cada joven, y nada pueden hacer. Entonces, ¿qué hacen? Se desapegan del problema, no se comprometen y se burocratizan.Por eso, es necesario tomar en cuenta todas estas cosas y ver cómo podemos corregir la cuna, junto con la educación. No debemos escandalizarnos por las brechas existentes en nuestra sociedad, que son muy grandes. Por eso digo que no podemos comparar peras con manzanas: a un niño de un colegio particular pagado, cuyos padres pagan 300 mil pesos mensuales, con un alumno de una escuela rural o de un barrio de Renca. Además, a los problemas mencionados, se suma la ineficacia de las administraciones municipales, que no realizan una buena selección de sus directores o que ponen escollos al desarrollo de la educación. Por otra parte, me alegro de los buenos resultados de algunos programas que apuntan al mejoramiento de la educación. Por ejemplo, el programa de escuelas críticas desarrollado en la Región Metropolitana. Felicito al seremi de Educación porque implementó este programa que significó un empuje para los educadores y para los alumnos, que lograron mejorar los resultados en estas pruebas. Pero estas pruebas no son lo más importante en nuestra educación. Quiero decir al ministro de Educación que es necesario devolverle su sentido más profundo. Si queremos que ésta sea de calidad para todos, no es sólo para que cada persona se desenvuelva mejor en el mercado laboral. Nuestra educación debe estar profundamente comprometida con la reconstrucción democrática de nuestra sociedad y con la creación de un sentido de comunidad nacional y de solidaridad entre sus miembros. Esto, que se postula en el currículum propuesto por la reforma educacional, se lleva a cabo vagamente, mediante objetivos transversales, lo que lo hace muy difícil de aplicar y tiene una ponderación muy baja en evaluaciones como el Simce. Tenemos que ser capaces de devolver ese espíritu a la educación y de involucrar a los profesores en la tarea de profunda humanidad de nuestra educación. Exaltar el espíritu democrático y solidario de la educación chilena resulta indispensable para que los profesores sepan y sientan que su misión es trascendente. Eso es tremendamente importante. Además, tenemos que implementar más programas similares al de las escuelas críticas, ayudar a los colegios más vulnerables con equipos multidisciplinarios que apoyen la labor del profesor, integrados por sicólogos y orientadores, como elementos permanentes dentro de la comunidad Educativa. Asimismo, es necesario hacer participar más a los padres e implementar los consejos escolares que democraticen la educación, ya que a pesar de los esfuerzos que se han hecho, aún quedan directores que son verdaderos dictadores en sus escuelas, al no permitir la participación del consejo de profesores ni de los centros de padres, a los cuales sólo utilizan para juntar plata y arreglar las salas, sin involucrarlos en la misión educativa. Por eso, reafirmo que el Simce no es un elemento de comparación; no debe ser utilizado como un elemento de hotelería, esto es, para determinar si un establecimiento educacional es de cinco o de cuatro estrellas. Ojalá que la lectura e interpretación de los resultados del Simce sirvieran para establecer diferentes categorías y no para medir todo el ámbito nacional, como si se estuviera midiendo un solo producto. Para terminar, quiero pedir al ministro de Educación que el Simce debe ser ponderado de distinta manera, que se establezcan distintas categorías, para que no volvamos a comparar peras con manzanas, porque eso conduce al aprovechamiento político y a la descalificación de los profesores chilenos, que hacen un tremendo esfuerzo. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité de Renovación Nacional, tiene la palabra el diputado señor Rosauro Martínez. El señor MARTÍNEZ.- Señor Presidente, creo que esta convocatoria es para analizar el resultado de las pruebas Simce, y lo que se ha señalado aquí es que la inversión en educación se ha más que triplicado, no obstante lo cual el resultado promedio de los cuartos básicos de los establecimientos municipalizados ha sido malo. Hay que decirlo con toda franqueza porque, de otra manera, estaríamos justificando un problema objetivo cuyas consecuencias son extremadamente graves para los estudiantes, para sus familias y también para el país. Hoy es el mal rendimiento de los cuartos básicos; en otro momento fueron los malos resultados de los segundos medios o de los octavos básicos. Antes, eran los resultados de la prueba de aptitud académica, y hoy, los de la Prueba de Selección Universitaria, PSU. Distintas medidas y diferentes niveles y cursos, pero una constante: resultados deficientes. En mi opinión, creo que aquí no se ha requerido el aporte de uno de los actores centrales del proceso educativo: los profesores, quienes cotidianamente están en las salas de clases. Me dirán que en los establecimientos educacionales se han hecho jornadas internas para reflexionar sobre ésta u otras materias, pero los efectos son nulos, porque todo ya está definido y decidido. Observo falta de apertura y de humildad intelectual para escuchar a quienes enfrentan en la práctica el desafío de enseñar. Hay mucha teoría, incluso -hay que decirlo-, mucha copia de experiencias extranjeras; una especie de modas que tratamos de aplicar, sin detenernos a conocer o diagnosticar el problema que deseamos atacar. En múltiples oportunidades he señalado en esta Sala que es urgente determinar con claridad los factores que inciden en la mala calidad de la educación pública que, en mi opinión, es de responsabilidad compartida: de los padres, por cierto, a quienes les asiste un rol preponderante, y, además, del sistema educacional y del Ministerio de Educación en particular. Por ejemplo, en 1997 se dictó un decreto de promoción automática de primero a segundo básico y de tercero a cuarto básico. Con ello se sentó un precedente nefasto, porque aunque el niño no supiera nada, igual pasaba de curso. ¿Y qué pasó? Que tuvieron que pasar cinco años para que esa medida fuera modificada. Y esos niños han dado la prueba Simce. ¿Cómo van a tener buen rendimiento, si no dominan las materias que corresponden a cada curso? Pero lo que es peor es que a esos niños y niñas se les estaba entregando una señal peligrosa, precisamente, en una etapa de su vida en que se forman hábitos. ¿Qué se les estaba diciendo? Algo muy sencillo, pero tremendamente peligroso: que no era necesario esforzarse para alcanzar los objetivos que nos proponemos en la vida. ¿Tienen los profesores alguna responsabilidad en esto? Evidentemente que no. Entonces, que cada uno asuma la suya, y creo que no se ha hecho. Leí, a raíz del magro resultado en matemática, la opinión del presidente de la Sociedad de Matemática de Chile, profesor Víctor Cortés, que pedía a las nuevas autoridades atacar el problema fundamental, que es la formación de los profesores. Esta opinión, que viene de un especialista, confirma lo que modestamente en esta Cámara hemos dicho y pedido, es decir, una revisión completa de los sistemas de formación de los profesores, en particular aquellos programas que forman profesores a distancia y con clases un día a la semana. ¿Es posible formar educadores de esta manera? Me he hecho esta pregunta muchas veces y, sinceramente, creo que no. Démos a las personas que quieran hacer de la pedagogía su vida todas las oportunidades para estudiar, pero con calidad, con rigurosidad, con sistematicidad. De lo contrario, lo que estamos haciendo es un negocio y engañando a esas personas que de buena fe se inscriben en aquellos programas. He conversado con muchos docentes, en diferentes partes del país, y existe coincidencia en señalar como un factor limitante de su labor la sobrecarga de tareas ajenas a su función principal, que es la de enseñar. Pido que al profesor se le deje libre de toda preocupación adicional, para que enfoque su energía, su capacidad y su talento en trabajar con sus alumnos, a fin de que pueda entregarse por completo a la función de enseñar. Hay muchos temas que han sido abordados en esta Sala y son muchas las variables a comentar. Pienso que el ministro, como un hombre de región, tiene una visión más realista y concreta de la situación, y le deseamos el mayor de los éxitos en esta tarea que va en bien del país. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En el tiempo de la Unión Demócrata Independiente, tiene la palabra el diputado señor Gonzalo Arenas. El señor ARENAS.- Señor Presidente, provengo de la Novena Región, que obtuvo el último lugar en los resultados Simce de este año, y represento el distrito Nº 48, de Malleco, que es lejos la provincia más pobre de la zona. Como ejemplo, en Angol, la capital provincial, de diez establecimientos educacionales a nivel municipal, siete obtuvieron bajas en su rendimiento en el Simce. Es decir, la educación no está estancada, sino que va en caída libre. Por lo tanto, si bien se pueden apreciar, a nivel general, grandes avances en las escuelas más pobres, quiero precisar que esas son de la Región Metropolitana, no así de regiones, como la Novena, con alto grado de ruralidad. Pero con independencia del resultado Simce y tratando de centrar un poco la discusión en lo fundamental, que es la calidad de la educación, es imposible hablar de ella en zonas como la provincia de Malleco, con alta tasa de ruralidad, con un sistema de escuelas unidocentes. Le pido al señor ministro que no tome esto como un ataque, sino como una propuesta, porque no quiero que se defienda, sino que la acoja. Realmente es una vergüenza que más de trescientos mil alumnos hoy sigan asistiendo a escuelas de tipo unidocentes, donde concurren niños de primero a sexto básico, con un solo profesor que pasa todas las materias a todos los cursos. Es una realidad preocupante, y por eso pido al señor ministro que estudie alguna forma de superar este problema y establezca como escuelas críticas a todas las escuelas unidocentes. No le podemos pedir calidad a un profesor que tiene que hacer de maestro chasquilla todo el día, no sólo impartiendo clases, sino que viendo además que la escuela no se le caiga a pedazos porque está mal construida o no se ha reparado oportunamente. Si bien las escuelas unidocentes se implementaron en el Siglo XIX con el fuerte componente de ejercer soberanía, una especie de retenes que debían colocarse en el campo para establecer la soberanía del Estado de Chile, hoy en día ese argumento no se sustenta. Por lo tanto, la calidad de la educación pasa a tener una importancia gigantesca. Algunas leyes tuvieron una intención beneficiosa y loable, como, por ejemplo, la de piso rural, que posibilita mantener muchas escuelas unidocentes, pero hoy se han convertido en un incentivo perverso. De hecho, las escuelas unidocentes no tienen razón de existir. En las zonas rurales, se ve a los profesores que acarrean alumnos para que no las cierren y, de esa manera, tener acceso a la subvención. Es más, hay municipios que no quieren cerrarlas porque, en el fondo, pierden una subvención. Por lo tanto, en este poco tiempo que me queda, solicito encarecidamente al señor ministro que se eleve la calidad de la educación unidocente o bien se opte por eliminar dichas escuelas y crear establecimientos educacionales de 1° a 8° básico, incluso con prekinder, kinder, y más adelante con enseñanza media, sin perjuicio de aumentar la eficiencia del transporte de los niños, porque hoy los caminos lo permiten. Es más productivo gastar la plata en mejorar el transporte de los alumnos que en mantener abiertas las escuelas unidocentes. Es muy loable el sacrificio de los profesores de escuelas unidocentes. Se sacan la mugre; son personas con una gran vocación. Por lo tanto, se merecen un poco más de respeto y preocupación por parte de la autoridad. Por ello, señor ministro, solicito formalmente que se realice una reforma profunda a la educación rural, con especial énfasis en las escuelas unidocentes, que representan un porcentaje altísimo en las regiones más pobres, como la Novena, sobre todo la provincia de Malleco. He dicho. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Han llegado a la Mesa los proyectos de acuerdo N°s 22 y 23. El señor Prosecretario va a dar lectura a los pareos.El señor ÁLVAREZ (Prosecretario).- Se han registrado en la Secretaría los siguientes pareos: la señora Tohá, doña Carolina, con don Alfonso Vargas; el señor Quintana con la señora Valcarce, doña Ximena; el señor León con el señor Palma; el señor Álvarez-Salamanca con el señor Bustos, y el señor Latorre con el señor René Manuel García. El señor ORTIZ.- ¿Me permite, señor Presidente? El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Tiene la palabra, señor diputado. El señor ORTIZ.- Señor Presidente, planteé a los diputados Germán Becker y Maximiano Errázuriz que en los considerados del proyecto de acuerdo N° 22 se elimine el punto 3, para aprobar en forma unánime los dos proyectos de acuerdo. Por eso, pido a la Mesa que consulte a la Sala si habría acuerdo para ello. He dicho. La señora CUBILLOS (doña Marcela).- Pido la palabra. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Tiene la palabra su señoría. La señora CUBILLOS (doña Marcela).- Señor Presidente, en atención a que estoy entre los patrocinantes del proyecto de acuerdo N° 22, no estoy de acuerdo en retirar ese considerando. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- No habría acuerdo. El señor Prosecretario va a dar lectura al proyecto de acuerdo N° 22. El señor ÁLVAREZ (Prosecretario).- De los señores Errázuriz, Palma, Delmastro, Becker, Martínez, Kast, Cardemil, Galilea y de las señoras Cubillos, doña Marcela, y Herrera, doña Amelia. “Considerando: Que la educación es la base del progreso armónico de una sociedad. Que el resultado de la prueba Simce 2000, considerado globalmente, en comparación con el de 1999, no guarda relación con el esfuerzo económico hecho por el país en esta área durante dicho lapso. Que, el 2002, el Gobierno se comprometió a reducir a la mitad el porcentaje de estudiantes que obtuvieren resultados deficientes, pero los del año pasado reflejan que no se cumplió el objetivo y que, en algunos casos, las cifras empeoraron. Que el Simce es una prueba hecha en forma profesional, que, para el país, significa un gran gasto. Sirve como método de información en cuanto al nivel en que se encuentra el colegio. Que, en 2004, el Ministerio de Educación hizo llegar un informativo a los padres de los alumnos que rindieron esta prueba, comparando los resultados del colegio con otros del mismo nivel, a fin de que se realizaren jornadas para cotejar tales resultados. Que no existe noción de lo que significan los puntajes del Simce en cuanto al conocimiento de las materias medidas por éste. Que la participación de los padres en la educación de sus hijos es fundamental. Aunque el colegio en que estudian sus hijos tenga excelencia académica, nada sustituye la colaboración de los padres y del colegio en el proceso educativo. La Cámara de Diputados acuerda: Oficiar al ministro de Educación para que se sirva aplicar las medidas siguientes: Poner en conocimiento de los apoderados y profesores mayor información respecto de los resultados de la prueba Simce, de tal manera de reforzar aquellas áreas en que los colegios están más débiles, a fin de que este sistema de medición se transforme en una herramienta para mejorar las educación y no sea solamente un sistema de información y comparación entre establecimientos educativos. Proporcionar los resultados de esta prueba a los padres para que sepan en qué deben reforzar a sus hijos. Dar los resultados de esta prueba a todos los apoderados y no sólo a los padres de aquellos alumnos que la rindieron. Clarificar la información, de tal manera que cualquier persona sepa lo que significan los puntajes, es decir, que los puntajes se traduzcan en función de lo que sabe y no sabe un niño. Implementar un sistema de información completa a los padres sobre los resultados de todos los programas administrados y aplicados por el Ministerio de Educación, para que sepan en qué se gastan los recursos y si éstos tienen o no tienen efectos en la calidad de la educación. Establecer metas y plazos a todos los programas implementados por el Ministerio de Educación, de manera que éstos sean conocidos por la opinión pública, en especial por los consejos escolares y de apoderados de cada establecimiento beneficiario de los mismos.” El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En votación el proyecto de acuerdo. -Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 55 votos; por la negativa, 19 votos. Hubo 8 abstenciones. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Aprobado. -Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados: Aedo Ormeño René; Aguiló Melo Sergio; Allende Bussi Isabel; Alvarado Andrade Claudio; Álvarez-Salamanca Büchi Pedro; Álvarez Zenteno Rodrigo Alejandro; Arenas Hödar Gonzalo; Barros Montero Ramón; Bauer Jouanne Eugenio; Becker Alvear Germán; Bertolino Rendic Mario; Bobadilla Muñoz Sergio; Burgos Varela Jorge; Cardemil Herrera Alberto; Ceroni Fuentes Guillermo; Correa De La Cerda Sergio; Cristi Marfil María Angélica; Cubillos Sigall Marcela; Chahuán Chahuán Francisco; Delmastro Naso Roberto; Egaña Respaldiza Andrés; Eluchans Urenda Edmundo; Enríquez-Ominami Gumucio Marco; Errázuriz Eguiguren Maximiano; Escobar Rufatt Álvaro; Estay Peñaloza Enrique; Forni Lobos Marcelo; Galilea Carrillo Pablo; García-Huidobro Sanfuentes Alejandro; Girardi Briere Guido; Hernández Hernández Javier; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Leal Labrín Antonio; Lobos Krause Juan; Lorenzini Basso Pablo; Martínez Labbé Rosauro; Masferrer Pellizzari Juan; Melero Abaroa Patricio; Meza Moncada Fernando; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Montes Cisternas Carlos; Moreira Barros Iván; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Palma Flores Osvaldo; Paya Mira Darío; Pérez Arriagada José; Robles Pantoja Alberto; Rojas Molina Manuel; Rubilar Barahona Karla; Sule Fernández Alejandro; Turres Figueroa Marisol; Uriarte Herrera Gonzalo. -Votaron por la negativa los siguientes señores diputados: Accorsi Opazo Enrique; Araya Guerrero Pedro; Ascencio Mansilla Gabriel; Díaz Del Río Eduardo; Duarte Leiva Gonzalo; Goic Boroevic Carolina; González Torres Rodrigo; Jaramillo Becker Enrique; Mulet Martínez Jaime; Muñoz D’Albora Adriana; Ojeda Uribe Sergio; Olivares Zepeda Carlos; Ortiz Novoa José Miguel; Saffirio Suárez Eduardo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Tarud Daccarett Jorge; Verdugo Soto Germán; Von Muhlenbrock Zamora Gastón. -Se abstuvieron los diputados señores: Farías Ponce Ramón; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Núñez Lozano Marco Antonio; Saa Díaz María Antonieta; Soto González Laura; Tuma Zedan Eugenio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Patricio. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Se va a dar lectura al siguiente proyecto de acuerdo. El señor ÁLVAREZ (Prosecretario).- Proyecto de acuerdo N° 23, de las señoras Saa, doña María Antonieta, Muñoz, doña Adriana, y Vidal, doña Ximena; y de los señores Olivares, Jarpa, Ortiz, Enríquez-Ominami, Monsalve, Silber y Escobar. “Considerando: Que, para el seguimiento de las políticas educacionales, resulta del más alto interés conocer los resultados de las mediciones efectuadas a través de la prueba Simce, los cuales deben estudiarse en el contexto de la expansión de la cobertura escolar habida en los últimos años y de las profundas brechas de desigualdad que el sistema escolar nacional presenta. Que debe destacarse el aumento en la cobertura del sistema escolar en todos sus niveles, donde la tasa bruta de matrícula es del 100% en Educación Básica y de más del 90% en Educación Media, siendo Chile un país donde se ha avanzado enormemente en garantizar el derecho a la educación de todos los niños, niñas y jóvenes. Que, asimismo, este aumento se constata en la Educación Superior, a la cual actualmente acceden seiscientos mil jóvenes, lo que corresponde a una cobertura del 38%, porcentaje que seguirá creciendo en los próximos años. Que esto ha sido posible por un fuerte y sostenido incremento del gasto público en educación, que hoy representa el 4% del PIB, lo que se aumenta a más del 7% si se incluye el gasto privado en ella. La mayor parte del gasto público se destina a subvenciones (64,9%). Que cabe resaltar las políticas llevadas a cabo en los últimos quince años, que han permitido concentrar los apoyos en los sectores de alumnos más necesitados, proporcionando alimentación y textos escolares gratuitos a todos los estudiantes de los quintiles pobres y de nueva infraestructura escolar, logrando tener a más del 80% de la matrícula en JEC, habilitando accesos a nuevas tecnologías en todas las escuelas y colegios subvencionados, así como a becas, créditos y programas focalizados en las escuelas adonde concurren estos estudiantes. Que, una vez que el país ha logrado niveles de cobertura tan amplios, es natural plantearse desafíos en torno al mejoramiento de la calidad del aprendizaje, lo que es más exigente y demanda políticas específicas. Que, para estos efectos, los resultados de las mediciones de las pruebas de aprendizaje de los alumnos son un elemento de primer orden para extraer conclusiones que ayuden al esfuerzo nacional de mejoramiento de la calidad de la educación. Que, el rendimiento obtenido en la medición Simce para los cuartos básicos de 2005 demuestra los progresos obtenidos en el nivel nacional. Indica avances en lenguaje y comunicación, progresos significativos en comprensión del medio y estabilidad en matemáticas. Que, asimismo, los resultados muestran crecimientos notorios en los promedios de aprendizaje en lenguaje en los sectores bajos y medios bajos, en comprensión del medio en el sector medio bajo, comparados con las mediciones de 2002. Que estos resultados exhiben diferencias importantes en cuanto a la equidad del sistema escolar, pues se reparten entre los niveles socioeconómicos de manera que reproducen las diferencias de origen de los alumnos. Que esta prueba es relevante, también, para indicar cuáles son los desafíos por en-frentar para lograr niveles de calidad deseables. Entre ellos, se encuentra particularmente la necesidad de atender los insuficientes progresos en el aprendizaje de las matemáticas, pese al esfuerzo desplegado. Que es necesario reconocer que los datos internacionales demuestran que es muy difícil dar grandes saltos en la evolución del aprendizaje. En la medición del Timss, por ejemplo, el 80% de los países se mantiene o baja en las pruebas de matemáticas en las mediciones de 1999 y 2003. Chile no escapa a estas tendencias internacionales, manteniendo un mejoramiento progresivo, a pesar del impacto de la expansión de la matrícula, en especial la de los sectores más pobres. Que, a la hora de los desafíos, es menester valorar y reconocer, también, el positivo impacto de los programas ministeriales aplicados entre 2002 y 2005 -(Escuelas Críticas y LEM)- en las escuelas de mayor precariedad educativa, los que han generado un aumento importante de quince puntos en lenguaje, trece en matemáticas y diecisiete en comprensión del medio, en aquellas escuelas que concentran matrícula de los sectores bajos y medios bajos, atendidos fundamentalmente por los establecimientos municipales. Que, para tender a corregir las diferencias de origen socioeconómico de los alumnos, es imprescindible impulsar el aumento de la cobertura en la educación preescolar, clave en la estimulación temprana para el desarrollo integral del niño. La Cámara de Diputados acuerda:1. Reconocer la importancia de que el país conozca y debata acerca de los resultados de las pruebas de medición de aprendizaje de los alumnos en un clima de seriedad técnica y mirada de largo plazo.2. Valorar que los alumnos mantengan y aumenten su aprendizaje de modo notable en algunas de las materias evaluadas, mientras se incrementa significativamente la cobertura, sobre todo con el ingreso al sistema escolar de niños y niñas con mayores necesidades sociales, lo que resulta de los esfuerzos que el país ha desarrollado en aumentar su gasto educacional y llevar adelante la reforma educativa.3. Destacar los mejoramientos del aprendizaje en los sectores socioeconómicos más pobres, así como en aquellos atendidos por el sector municipal, y apreciar, especialmente, los resultados de aquellas escuelas objeto de planes ministeriales focalizados, tales como los de LEM y de escuelas críticas.4. Manifestar su preocupación por las inequidades que aún se mantienen en el sistema escolar y que se reflejan en los aprendizajes disímiles de los alumnos, según sea su nivel socioeconómico.5. Instar al Gobierno a profundizar y extender a todo el sistema escolar los procedimientos de ayuda especial a las escuelas más necesitadas o que atienden a alumnos de niveles socioeconómicos vulnerables, a través del apoyo de universidades y de agencias especializadas, así como promover el aumento de la cobertura en el nivel preescolar.” El señor PÉREZ (Vicepresidente).- En votación el proyecto de acuerdo. -Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 40 votos; por la negativa, 34 votos. Hubo 8 abstenciones. El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Rechazado. -Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados: Accorsi Opazo Enrique; Allende Bussi Isabel; Araya Guerrero Pedro; Ascencio Mansilla Gabriel; Burgos Varela Jorge; Ceroni Fuentes Guillermo; Díaz Del Río Eduardo; Duarte Leiva Gonzalo; Enríquez-Ominami Gumucio Marco; Escobar Rufatt Álvaro; Farías Ponce Ramón; Girardi Briere Guido; Goic Boroevic Carolina; González Torres Rodrigo; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Leal Labrín Antonio; Meza Moncada Fernando; Montes Cisternas Carlos; Mulet Martínez Jaime; Muñoz D’Albora Adriana; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Olivares Zepeda Carlos; Ortiz Novoa José Miguel; Pérez Arriagada José; Robles Pantoja Alberto; Saa Díaz María Antonieta; Saffirio Suárez Eduardo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto González Laura; Sule Fernández Alejandro; Tarud Daccarett Jorge; Tuma Zedan Eugenio; Valenzuela Van Treek Esteban; Venegas Cárdenas Mario; Vidal Lázaro Ximena. -Votaron por la negativa los siguientes señores diputados: Alvarado Andrade Claudio; Álvarez-Salamanca Büchi Pedro; Álvarez Zenteno Rodrigo Alejandro; Arenas Hödar Gonzalo; Barros Montero Ramón; Bauer Jouanne Eugenio; Bertolino Rendic Mario; Bobadilla Muñoz Sergio; Correa De La Cerda Sergio; Cristi Marfil María Angélica; Cubillos Sigall Marcela; Egaña Respaldiza Andrés; Eluchans Urenda Edmundo; Errázuriz Eguiguren Maximiano; Estay Peñaloza Enrique; Forni Lobos Marcelo; Galilea Carrillo Pablo; García-Huidobro Sanfuentes Alejandro; Hernández Hernández Javier; Lobos Krause Juan; Masferrer Pellizzari Juan; Melero Abaroa Patricio; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Moreira Barros Iván; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Palma Flores Osvaldo; Paya Mira Darío; Rojas Molina Manuel; Sepúlveda Hermosilla Roberto; Turres Figueroa Marisol; Uriarte Herrera Gonzalo; Von Muhlenbrock Zamora Gastón. -Se abstuvieron los diputados señores: Aedo Ormeño René; Becker Alvear Germán; Chahuán Chahuán Francisco; Delmastro Naso Roberto; Isasi Barbieri Marta; Martínez Labbé Rosauro; Rubilar Barahona Karla; Verdugo Soto Germán.El señor PÉREZ (Vicepresidente).- Por haber cumplido con su objeto, se levanta la sesión. -Se levantó la sesión a las 18.29 horas.JORGE VERDUGO NARANJO,Jefe de la Redacción de Sesiones. VI. DOCUMENTOS DE LA CUENTA1. Informe de la Comisión de Relaciones Exteriores, Asuntos Interparlamentarios e Integración Latinoamericana recaído en el proyecto aprobatorio del acuerdo entre Chile y Perú sobre cooperación y ayuda mutua en materia de prevención y atención de desastres, suscrito en Lima, el 10 de diciembre de 2004. (boletín Nº 4085-10)“Honorable Cámara: La Comisión de Relaciones Exteriores, Asuntos Interparlamentarios e Integración Latinoamericana pasa a informar sobre el proyecto aprobatorio del Acuerdo entre Chile y Perú sobre cooperación y ayuda mutua en materia de prevención y atención de desastres, suscrito en Lima, el 10 de diciembre de 2004, con el objeto de promover la cooperación y el intercambio de experiencias en materia de gestión de riesgos, reducción de desastres y estudio de amenazas y vulnerabilidades que tengan su origen en un hecho natural o del hombre, según lo define su artículo 1.I. CONSTANCIAS REGLAMENTARIAS PREVIAS. Para los efectos reglamentarios correspondientes se hace constar lo siguiente:1° Que la idea matriz o fundamental de este proyecto de acuerdo es aprobar un tratado internacional que la H. Cámara, conforme lo dispuesto por el N° 1 del artículo 54 de la Constitución Política, sólo puede aprobar o desechar.2° Que este tratado no contiene normas de carácter orgánico constitucional ni de quórum calificado, pero sí de aquellas que deben ser informadas por H. Comisión de Hacienda, como ocurre con el N° 6.3 del artículo 6 que compromete a los Estados Partes a aplicar procedimientos simplificados para el ingreso y salida temporal, sin estar afectos a tasas aduaneras respecto de equipos y medios de socorro utilizados para la asistencia mutua con ocasión de un desastre o catástrofe y para su retorno al país de origen. 3° Que la Comisión aprobó el proyecto de acuerdo en informe por la unanimidad de los HH. Diputados Allende Bussi, doña Isabel; Jarpa Wevar, don Carlos Abel; Moreira Barros, don Iván; Tarud Daccarett, don Jorge, y Villouta Concha, don Edmundo.4º Que Diputado informante fue designada la H. Diputada Allende Bussi, doña Isabel.II. ANTECEDENTES GENERALES.1 El mensaje, en armonía con el preámbulo de este tratado, destaca que Chile y Perú, por su situación y características geográficas, se encuentran permanentemente expuestos a sufrir:a) los efectos de fenómenos destructivos de origen natural, potencialmente dañinos, como sismos, tsunamis, inundaciones, aluviones, avalanchas y otros fenómenos de similar naturaleza, yb) los efectos negativos derivados de la actividad humana y el crecimiento de sus comunidades, tales como accidentes con sustancias peligrosas, radiológicas, incendios forestales, etc., todos los cuales producen severos impactos en la población, afectando su normal desarrollo. En tales circunstancias y atendida la fuerte dinámica de integración bilateral que genera la frontera entre ambos países, se estima que, con la puesta en ejecución de este tratado, la ejecución de programas y actividades conjuntas de cooperación y de intercambio de experiencias en materias de gestión de riesgos en las zonas fronterizas se verá fuertemente reforzada.2) En los últimos años, la H. Cámara ha aprobado tratados bilaterales de cooperación con Perú en materias de seguridad social, de protección del patrimonio cultural y del ejercicio de actividades remuneradas de familiares del personal diplomático y consular acreditado en sus respectivas embajadas.3) Las autoridades competentes para la ejecución del programa serán, por Chile, el Director de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi), de Chile, y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Undeci), de Perú. En Chile, la Onemi es una dependencia del Ministerio del Interior encargada de planificar, coordinar y ejecutar las actividades destinadas a prevenir o solucionar los problemas derivados de sismos o catástrofes, y ejerce las funciones que al Ministerio le competen en virtud del título I de la ley Nº 16.282, en tales situaciones, según lo dispone el decreto ley Nº 369, de 1974, del referido Ministerio. Para los casos en que el sismo o catástrofe se produzca en el extranjero, se autoriza al Presidente de la República para que por decreto supremo fundado disponga la recolección de aportes y envío de ayudas al exterior, como un acto humanitario de solidaridad internacional (artículo 1º de la ley Nº 16.282). Además, al Presidente de la República se le faculta para autorizar por la vía del decreto supremo diversas otras medidas que tienen por objeto hacer efectiva la ayuda a los países afectados por un sismo o catástrofe (artículo 3º de la citada ley).III. RESEÑA DEL CONTENIDO NORMATIVO DEL ACUERDO EN TRÁMITE. Este instrumento consta de nueve artículos que se refieren al objetivo del Acuerdo en los términos antes enunciados (1); a los términos de cooperación y asistencia (2); a las Autoridades Competentes para la ejecución del Programa (3); al establecimiento de Programas de Cooperación (4); a los mecanismos de acción (5); a los mecanismos de ejecución de Programas (6); al uso de información (7); a la solución de controversias (8), y a las cláusulas finales (9). La cooperación y asistencia en los ámbitos de la prevención, mitigación y atención de emergencias y desastres se ejecutará sobre la base de los beneficios mutuos y del interés común en el territorio de ambos Estados, especialmente en las zonas de fronteras, y podrá consistir en el intercambio de especialistas, de expertos; de experiencias y de información y documentación. También podrá consistir en la organización de reuniones de trabajo, talleres, seminarios y conferencias; en el planeamiento, elaboración y realización conjunta de proyectos de investigación sobre identificación de peligros, análisis de vulnerabilidades y evaluación de riesgos; en la interacción entre organismos competentes de las Partes; en el diseño de planes de asistencia mutua para casos de emergencias generadas por desastres en cualquiera de sus territorios; en el diseño de programas de preparación y educación de la población para una respuesta adecuada durante las emergencias, y otras formas de cooperación que las Partes convengan, sin perjuicio de los acuerdos entre organismos pares o equivalentes, de acuerdo a las prácticas usuales. Se precisa que ambas autoridades, en el marco de sus atribuciones legales, coordinarán el empleo de recursos humanos y materiales, públicos y privados, necesarios para cumplir los propósitos de este Acuerdo, las que, además, quedan facultadas para comunicarse directamente entre ellas, informando a sus respectivas Cancillerías de los avances y proposiciones que de ellas surjan. También de conformidad con su legislación interna se comprometen a poner a disposición de la otra Parte, los instrumentos y medios necesarios para asegurar la expedición y eficacia de las actividades programadas. En cuanto a la información que se reciba como resultado de las actividades realizadas en el marco de este Acuerdo, se publicará y utilizará sobre la base de la práctica de cada una de las Partes, a menos que legalmente no pueda ser divulgada o que sus organismos competentes acuerden, por escrito, otra fórmula. Las controversias que se susciten respecto de la interpretación o aplicación del Acuerdo, se procederá por la vía diplomática. Finalmente, cabe señalar que este Acuerdo regirá indefinidamente, y entrará en vigor treinta días después de la última notificación en que una de las Partes comunique a la otra el cumplimiento de sus trámites internos. IV. DECISIONES DE LA COMISIÓN.a) Aprobación del proyecto de Acuerdo. El tratado en informe necesita aprobación del Congreso Nacional por las liberaciones aduaneras que se establecen para el ingreso temporal de equipos y medios de socorro, no obstante que el Presidente de la República tiene atribuciones generales para disponer la solidaridad internacional de nuestro país con un país extranjero en caso de sismo o catástrofe, conforme lo dispuesto por la ley Nº 16.16.282 y el decreto ley Nº 369, de 1974, que creó la Onemi; de modo que la Comisión, con la votación unánime ya anunciada, decidió proponer a la H. Cámara que apruebe el artículo único del proyecto con modificaciones formales de menor entidad que sólo persiguen mencionar el tratado por el título que le dieron los Estados Partes, según consta en el texto sometido a la consideración de la H. Cámara.b) Texto sustitutivo del artículo único del proyecto que propone la Comisión, “Artículo único.- Apruébase el “Acuerdo de cooperación y ayuda mutua en materia de prevención y atención de desastres” celebrado entre el Gobierno de la República de Chile y el Gobierno de la República del Perú, y suscrito en Lima, el 10 de diciembre de 2004.”.-o- Discutido y despachado en sesión celebrada el 7 de marzo de 2006, bajo la presidencia del H. Diputado Edmundo Villouta Concha (Presidente de la Comisión), y con la asistencia de la H. Diputada Isabel Allende Bussi, y de los HH. Diputados Carlos Abel Jarpa Wevar, Iván Moreira Barros, y Jorge Tarud Daccarett. Sala de la Comisión, a 7 de marzo de 2006. (Fdo.): FEDERICO VALLEJOS DE LA BARRA, Abogado Secretario de la Comisión”.2. Informe de la Comisión de Hacienda recaído en el proyecto aprobatorio del acuerdo entre Chile y Perú sobre cooperación y ayuda mutua en materia de prevención y atención de desastres, suscrito en Lima, el 10 de diciembre de 2004. (boletín Nº 4085-10)“Honorable Cámara: La Comisión de Hacienda informa el proyecto de Acuerdo mencionado en el epígrafe, en cumplimiento del inciso segundo del artículo 17 de la ley N° 18.918, Orgánica Constitucional del Congreso Nacional y conforme a lo dispuesto en los artículos 220 y siguientes del Reglamento de la Corporación. La iniciativa tuvo su origen en la Cámara de Diputados por un Mensaje de S.E. el Presidente de la República. Asistió a la Comisión durante el estudio del proyecto el señor Ricardo de la Barrera, Asesor de la Dirección de Fronteras y Límites del Estado. El propósito del Acuerdo internacional consiste en promover la cooperación y el intercambio de experiencias en materia de gestión de riesgos, reducción de desastres y estudio de amenazas y vulnerabilidades que tengan su origen en un hecho natural o del hombre, especialmente en las zonas de frontera. El Acuerdo consta de un Preámbulo y nueve artículos. En el Preámbulo, se consignan los motivos que tuvieron las Partes para suscribir el Acuerdo. En el artículo 1° se contemplan sus objetivos; en el artículo 2°, se señalan los términos de cooperación y asistencia; en el artículo 3°, se establecen las autoridades competentes para la ejecución del programa; en el artículo 4°, se estipula que los programas de cooperación se concertarán por escrito; en el artículo 5°, se determinan los mecanismos de acción para asegurar la eficacia de las actividades programadas; en el artículo 6°, se precisan los mecanismos previstos para la ejecución de los programas; en el artículo 7°, se consagra, como regla general, la publicidad de la información; en el artículo 8°, se establece la vía diplomática para resolver controversias, y en el artículo 9°, se consignan las cláusulas finales. La Comisión de Relaciones Exteriores, Asuntos Interparlamentarios e Integración Latinoamericana dispuso en su informe que esta Comisión tomara conocimiento del proyecto de Acuerdo y en especial del N° 6.3 del artículo 6° que compromete a los Estados Partes a aplicar procedimientos simplificados para el ingreso y salida temporal, sin estar afectos a tasas aduaneras respecto de equipos y medios de socorro utilizados para la asistencia mutua con ocasión de un desastre o catástrofe y para su retorno al país de origen. En el debate de la Comisión el señor Ricardo de la Barrera señaló que el Convenio en estudio ha sido ratificado por Perú y que, entre otras materias, se persigue facilitar el trámite aduanero para que las ambulancias, carros de bomberos y demás vehículos de emergencia puedan concurrir al país vecino en caso de desastres. Teniendo presente los antecedentes de la iniciativa, la Comisión acordó, por unanimidad, proponer a la Sala de la Corporación la aprobación del texto del proyecto de Acuerdo propuesto por la Comisión Técnica en su informe. Acordado en sesión de fecha 21 de marzo de 2006, con la asistencia de los Diputados señores Ortiz, don José Miguel (Presidente Accidental); Alvarado, don Claudio; Álvarez, don Rodrigo; Becker, don Germán; Cardemil, don Alberto; Dittborn, don Julio; Duarte, don Gonzalo; Insunza, don Jorge; Montes, don Carlos; Robles, don Alberto; Sunico, don Raúl; Tuma, don Eugenio, y Von Mühlenbrock, don Gastón. Se designó Diputado Informante al señor Insunza, don Jorge. (Fdo.): JAVIER ROSSELOT JARAMILLO, Abogado Secretario de la Comisión”.3. Moción del diputado señor Errázuriz. Distribuye votos en blanco en forma proporcional entre los candidatos. (boletín N° 4119-06) “Considerando:1. Que en la elección presidencial de Haití que tuvo lugar en 2006, los chilenos Juan Gabriel Valdés y José Miguel Insulza avalaron la tesis de distribuir los votos en blanco, proporcionalmente, entre los distintos candidatos a la presidencia de la República;2. Que la fórmula es perfectamente repetible en otros países pero, en el caso de Chile, requiere de una ley;3. Que el sistema no debe limitarse sólo a las elecciones presidenciales sino también a las parlamentarias y de concejales, vengo en proponer el siguientePROYECTO DE LEY ARTÍCULO ÚNICO: Los votos en blanco en las elecciones presidenciales, parlamentarias y de concejales se distribuirán proporcionalmente entre los candidatos que hayan participado en la respectiva elección.4. Moción de los diputados señores Errázuriz, Kast y Verdugo y de la diputada señora Marcela Cubillos. Permite que solicitud de declaración de bien familiar la realice el cónyuge o la madre en representación del hijo. (boletín N° 4120-07) “Considerando:1. Que el inciso segundo del artículo 141 del Código Civil, a propósito del inmueble de propiedad de cualquiera de los cónyuges que sirva de residencia principal de la familia, y los muebles que la guarnecen, podrán ser declarados bienes familiares, señala que “esta declaración se hará por el juez en procedimiento breve y sumario a petición de cualquiera de los cónyuges y con la citación del otro»;2. Que puede darse el caso de que el hijo nazca de una convivencia y su madre con ese hijo, vivan en casa del padre del menor;3. Que en la situación descrita, el padre podría enajenar la vivienda que sirve de domicilio a su hijo y a la madre de éste, sin que la madre pueda pedir la declaración de bien familiar porque no es el cónyuge, vengo en presentar el siguientePROYECTO DE LEY ARTÍCULO ÚNICO: Sustitúyese el punto final del inciso segundo del artículo 141 del Código Civil, reemplazándose por una coma y agregándose la siguiente expresión: “o por la madre en representación del menor”, quedando el inciso en la siguiente forma: “Esta declaración se hará por el juez en procedimiento breve y sumario, con conocimiento de causa, a petición de cualquiera de los cónyuges y con citación del otro, o por la madre en representación del menor”.5. Moción de los diputados señores Ward, Barros, Forni, Lobos, Hernández, Norambuena, Salaberry y de las diputadas señoras Nogueira y Turres. Reforma constitucional que eleva el quórum para la despenalizacion del aborto. (boletín N° 4121-07) “El aborto en el sentido jurídico - penal significa dar muerte al producto de la concepción, el bien jurídico protegido es la vida del embrión y el objeto material de protección es el embrión vivo, aún cuando éste presente anormalidades. El derecho a la vida, cuya protección fundamenta la existencia del tipo penal del aborto se encuentra correctamente garantizado, a todas las personas, en el artículo 19 número 1 de la Constitución Política de la República. El contenido global del derecho, que reconoce y protege esta básica garantía constitucional, supone que el derecho a la vida se refiere preferentemente al soporte biológico y psíquico del hombre. Por esta razón, es que el derecho a la integridad física y psíquica de la persona, es el complemento directo de esta misma garantía constitucional. Al regular el delito de aborto a través de un quórum mas elevado para diputados y senadores y no a través de una ley simple, como es en la actualidad, se fortalecería la protección que debe dar la Constitución Política del Estado a la vida del que esta por nacer. 1. Antecedentes Generales: El Código Penal no define el delito de aborto sino que describe las distintas conductas abortivas sancionadas, consecuencia de ello ha sido la doctrina quien lo ha hecho. Para Mario Garrido Montt, es la “interrupción del proceso de gestación mediante la destrucción o muerte del producto de la concepción”, por su parte Alfredo Echeverry, señala que es “la muerte inferida al producto del embarazo que aún no es persona”.2. Normativa Nacional La regulación en nuestra legislación respecto al aborto es la siguiente:a. Constitución Política de la República de Chile Artículo. 19 Nº 1 De los derechos y deberes constitucionales. “El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de las personas. La ley protege la vida del que está por nacer”b. Código Civil, Tít. II, § 1 - Del principio de la existencia de las personas Art. 74: Existencia legal se inicia al nacer; si se muere antes o no se sobrevive ni un momento después, se reputará que nunca existió. Art. 75: La ley protege la vida del que está por nacer; el juez tomará providencias ante denuncias de que peligra; la madre implicada en ello será castigada después del nacimiento. c. Código Penal, Tít. VII, § 1 - El aborto- Artículos 342 al 345: Descripción de las conductas abortivas sancionadas por el Código Penal.1. Aborto causado por tercero no profesional de la salud (con o sin consentimiento de la mujer) 2. Aborto causado por un profesional de la salud 3. Aborto causado por la propia mujer d. Código Sanitario, Libro 1°, Tít. I - De la protección materna infantil. Arts. 16 y 17: protección y vigilancia del Estado, por medio de las instituciones que correspondan, a la mujer durante el embarazo, gratuitamente, si es indigente. Art. 50: los oficiales del Registro Civil deberán comunicar por escrito a la autoridad sanitaria local las defunciones por aborto. Art. 117: los servicios profesionales de la matrona comprenden, entre otros, la atención del embarazo y las actividades relacionadas con la planificación familiar (según modificación Ley 19.536/1997, artículo 7 letra b). Art. 119: no podrán ejecutarse acciones que lleven a provocar un aborto (según modificación de Ley 18,826/1989).e. Reglamento que establece normas sobre esterilización y que deberán cumplir todas las instituciones que comprende el sector salud. (1976). La esterilización no es actividad de regulación de fertilidad. Sólo podrá practicarse por razones de orden médico y por causas médicas puras (enfermedades que se detallan) o que sean aceptadas por una Comisión ‘ad hoc’.PROYECTO DE LEY ARTÍCULO ÚNICO: Para insertar en la Constitución Política un nuevo inciso 3º en el Artículo 19 Nº 1: Artículo 19. La Constitución asegura a todas las personas:1° El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona. La ley protege la vida del que está por nacer. “Solo con el voto favorable de los 3/5 de los diputados y senadores en ejercicio se podrá derogar el delito de aborto”.6. Moción de los diputados señores Ward, Barros, Forni, Lobos, Hernández, Norambuena, Salaberry y de las diputadas señoras Nogueira y Turres. Agrega un nuevo artículo 345 bis, del Código Penal, para que sólo a traves de una reforma contitucional se pueda derogar el delito de aborto. (boletín N° 4122-07) “El aborto en el sentido jurídico - penal significa dar muerte al producto de la concepción, el bien jurídico protegido es la vida del embrión y el objeto material de protección es el embrión vivo, aún cuando éste presente anormalidades. El derecho a la vida, cuya protección fundamenta la existencia del tipo penal del aborto se encuentra correctamente garantizado, a todas las personas, en el artículo 19 número 1 de la Constitución Política de la República. El contenido global del derecho, que reconoce y protege esta básica garantía constitucional, supone que el derecho a la vida se refiere preferentemente al soporte biológico y psíquico del hombre. Por esta razón, es que el derecho a la integridad física y psíquica de la persona, es el complemento directo de esta misma garantía constitucional. Al regular el delito de aborto a través una reforma constitucional y no a través de una ley simple, como es en la actualidad, se fortalecería la protección que nuestra legislación debe dar a la vida del que esta por nacer. 1. Antecedentes Generales: El Código Penal no define el delito de aborto sino que describe las distintas conductas abortivas sancionadas, consecuencia de ello ha sido la doctrina quien lo ha hecho. Para Mario Garrido Montt, es la “interrupción del proceso de gestación mediante la destrucción o muerte del producto de la concepción”, por su parte Alfredo Echeverry, señala que es “la muerte inferida al producto del embarazo que aún no es persona”.2. Normativa Nacional La regulación en nuestra legislación respecto al aborto es la siguiente:a. Constitución Política de la República de Chile Artículo. 19 Nº 1 De los derechos y deberes constitucionales. “El derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de las personas. La ley protege la vida del que está por nacer”b. Código Civil, Tít. II, § 1 - Del principio de la existencia de las personas Art. 74: Existencia legal se inicia al nacer; si se muere antes o no se sobrevive ni un momento después, se reputará que nunca existió. Art. 75: La ley protege la vida del que está por nacer; el juez tomará providencias ante denuncias de que peligra; la madre implicada en ello será castigada después del nacimiento. c. Código Penal, Tít. VII, § 1 - El aborto- Artículos 342 al 345: Descripción de las conductas abortivas sancionadas por el Código Penal.1. Aborto causado por tercero no profesional de la salud (con o sin consentimiento de la mujer) 2. Aborto causado por un profesional de la salud 3. Aborto causado por la propia mujer d. Código Sanitario, Libro 1°, Tít. I - De la protección materna infantil. Arts. 16 y 17: protección y vigilancia del Estado, por medio de las instituciones que correspondan, a la mujer durante el embarazo, gratuitamente, si es indigente. Art. 50: los oficiales del Registro Civil deberán comunicar por escrito a la autoridad sanitaria local las defunciones por aborto. Art. 117: los servicios profesionales de la matrona comprenden, entre otros, la atención del embarazo y las actividades relacionadas con la planificación familiar (según modificación Ley 19.536/1997, artículo 7 letra b). Art. 119: no podrán ejecutarse acciones que lleven a provocar un aborto (según modificación de Ley 18,826/1989).e. Reglamento que establece normas sobre esterilización y que deberán cumplir todas las instituciones que comprende el sector salud. (1976). La esterilización no es actividad de regulación de fertilidad. Sólo podrá practicarse por razones de orden médico y por causas médicas puras (enfermedades que se detallan) o que sean aceptadas por una Comisión ‘ad hoc’.PROYECTO DE LEY ARTÍCULO ÚNICO: Para agregar un nuevo articulo 345 bis al Código Penal. “345 bis: Sólo se podrá por medio de una Reforma Constitucional derogar el delito de aborto contemplado en este párrafo”.7. Moción de los diputados señores Ward, Barros, Hernández, Lobos, Norambuena, Salaberry y de la diputada señora Turres. Agrega un nuevo inciso cuarto al artículo 177, del Código del Trabajo, permitiendo que las prestaciones pendientes contenidas en el finiquito y desahucio se paguen sus herederos. (boletín N° 4123-13)1. Antecedentes generales En primer lugar, se deben tener presentes los siguientes aspectos: El Código Civil regula la sucesión por causa de muerte, entendiendo por ésta un modo que sirve para adquirir los derechos reales y personales o créditos de un difunto, salvo los derechos que ley declara inadmisible. Cuando la sucesión es intestada, la ley señala quienes son los llamados a suceder la masa hereditaria del difunto, el artículo 983 del Código Civil, al respecto establece un orden de sucesión: “Son llamados a la sucesión intestada los descendientes, sus ascendientes, el cónyuge sobreviviente, sus colaterales, el adoptado en su caso y el fisco “ El Código del Trabajo no define el finiquito, sólo establece los requisitos formales que éste debe cumplir para que tenga mérito ejecutivo respecto de las obligaciones allí contenidas. Así debemos entenderlo como un instrumento emanado y suscrito por las partes que celebraron el contrato de trabajo con motivo de la terminación de la relación laboral, donde se deja constancia del cabal cumplimiento de las obligaciones emanadas del contrato, sin perjuicio de las reservas que se puedan efectuar. La característica más importante del Finiquito es su carácter de título ejecutivo, es decir, es un documento que da cuenta de un derecho indubitable, al cual la ley le atribuye la suficiencia necesaria para exigir el cumplimiento forzado de la obligación allí contenida, siempre que se cumplan las formalidades que el propio Código le impone. De esta manera el Finiquito además de contener la causal que pone término a la relación laboral, puede contener obligaciones pendientes entre las partes, que pueden ser gratificaciones, vacaciones, remuneraciones e indemnizaciones. Ahora, si el trabajador fallece existiendo obligaciones pendientes contenidas en el finiquito, sus herederos que hayan tramitado la posesión efectiva de los bienes del causante son legítimos acreedores de lo adeudado. El empleador deberá pagar aquellas prestaciones a sus herederos y en el caso contrario, es decir frente a su negativa, los herederos son sujetos activos para interponer la correspondiente demanda ejecutiva laboral por las prestaciones adeudadas y contenidas en el correspondiente título ejecutivo. En particular, el Código del Trabajo, en lo referido a las remuneraciones establece una garantía para la familia del trabajador que fallece y el artículo 60 del mencionado Código dispone: “En caso de fallecimiento del trabajador, las remuneraciones que se adeudaren serán pagadas por el empleador a la persona que se hizo cargo de sus funerales, hasta la concurrencia del costo de los mismos. El saldo, si lo hubiere, y las demás prestaciones pendientes a la fecha del fallecimiento se pagarán la cónyuge, a los hijos legítimos o naturales o los padre legítimos o naturales del fallecido unos a falta de otro, en el orden indicado, bastando acreditar el estado civil respectivo. Lo dispuesto en el inciso precedente sólo operará tratándose de sumas no superiores a cinco unidades tributarias anuales “ Lo que dispone ésta norma, es que permite a ciertos familiares indicados ser pagados, hasta el límite señalado, sin necesidad de haberse decretado en su favor la posesión efectiva de la herencia, sólo respecto de las remuneraciones.3. Argumentos Se desprende de lo expresado que los herederos, como continuadores legales del causante en la actual regulación tienen derecho a percibir las prestaciones adeudadas y contenidas en el finiquito, pero requieren que en su favor se haya decretado la posesión efectiva. Salvo que se trate de remuneraciones que tienen una regulación especial en el propio Código del Trabajo. Una modificación en esta materia sería permitir que los familiares más directos, cónyuge, hijos y padres del causante, unos a falta de otros, puedan percibir lo adeudado en el finiquito con el sólo hecho de acreditar el estado civil que los vincula con el trabajador fallecido sin realizar el trámite de posesión efectiva de la herencia.PROYECTO DE LEY ARTÍCULO ÚNICO: Incorpórese un nuevo inciso cuarto en el artículo 177 del Código del Trabajo. “Las prestaciones pendientes y contenidas en el finiquito se pagarán al cónyuge, hijos o a los padres del fallecido unos a falta de otro, en el orden indicado, bastando acreditar el estado civil respectivo”.