-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/653520/seccion/akn653520-po1-ds22-ds24-ds30
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/2678
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- rdf:type = bcnres:Participacion
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/2
- rdf:value = "
El señor MARTÍNEZ .-
Señor Presidente , en el criterio de quien habla, éste es un agregado esencial a la Carta Fundamental.
Las bases de la nacionalidad y de nuestras instituciones requieren una protección de rango constitucional de tal manera clara que permita desarrollar acciones, ahora y a futuro, para impedir el flagelo de la droga. Si algo destruye más la cohesión social, la nacionalidad y la imagen de un país frente al problema de las drogas ilícitas y los estupefacientes, es una actitud indefinida y poco enérgica ante la terrible amenaza que ella representa para nuestra comunidad.
Si uno analiza los informes de Paz Ciudadana, de Carabineros y de otros organismos privados y públicos sobre la incidencia delincuencial, descubrirá que lo que está deteriorando la convivencia ciudadana y provocando una pérdida absoluta de confianza en las autoridades y en su acción para impedir la penetración de este flagelo son justamente el tráfico de drogas, el microtráfico y la distribución en las poblaciones.
En mi opinión, se está perdiendo una oportunidad increíblemente positiva, no sólo de dar esta señal -como han expresado otros colegas-, sino además, de sentar las bases de una acción más enérgica a futuro, máxime cuando en el campo internacional se van a comenzar a exigir a Chile respuestas frente a los compromisos que ha firmado. Tal respuesta tiene que ser coherente. Entonces, nada mejor que establecer claramente en la pirámide de las leyes, en cuya cima se encuentra la Constitución, el rechazo al tráfico ilícito y a sus implicancias.
El pensar a futuro obliga a que esa materia se incorpore a la Carta, sin que ello signifique que se esté alterando el concepto de texto básico y rector. Y si alguien cree que por agregarla se está pensando en un reglamento constitucional, no hay duda de que está equivocado, ya que ésa no es la idea.
Mi voto es positivo. Considero altamente favorable que este asunto se incluya en nuestra Carta Fundamental, porque es una definición para el futuro. No nos quejemos si después aumentan la delincuencia, la violencia, la drogadicción en los colegios, y otros fenómenos de ese tipo, porque, habiendo tenido la llave para impedirlo, no la hemos sabido utilizar.
Voto que sí.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/653520
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/653520/seccion/akn653520-po1-ds22