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El señor BOMBAL.-
Señor Presidente , deseo referirme en esta sesión al proceso de licitación de recorridos, particularmente del metrobús, que se está llevando a cabo en la Región Metropolitana por parte del Ministerio de Transportes y que por estos días se encuentra en su fase de adjudicación final, luego de que la autoridad ya hizo públicas las empresas que se estarían adjudicando tales recorridos.
Sabido es que con ocasión de este proceso han surgido movilizaciones gremiales, las que desafortunadamente la semana recién pasada derivaron en hechos muy lamentables y desacertados, como el bloqueo de las calles de Santiago, lo cual causó graves trastornos a la ciudad y a sus habitantes.
Siempre el uso de la fuerza ilegítima será el peor camino para lograr la solución de un conflicto.
Sabido es también que con ocasión de estos trastornos el Gobierno se encuentra persiguiendo en los tribunales de justicia la responsabilidad de quienes participaron en ese tipo de manifestaciones.
La aplicación de la Ley de Seguridad del Estado ha sido el marco legal escogido por la autoridad para perseguir a los responsables de esta grave alteración del orden público. Admitamos de paso que, lamentablemente, el Gobierno no ha tenido el mismo rigor con violentistas y encapuchados que han sembrado el terror y la destrucción en la zona de la Araucanía, convertida hoy en una de las Regiones que exhiben los mayores índices de pobreza del país.
En medio de todo esto, un amplio despliegue comunicacional oficialista ha intentado demostrar a la ciudadanía que el Gobierno tiene un poder muy grande frente a un gremio. Y, en medio de todo este despliegue, lamentablemente, las verdaderas reclamaciones y los orígenes del conflicto aparecen silenciados.
Por ello, me gustaría fijar algunos de los conceptos que han sido olvidados en lo que es el origen de este conflicto en la licitación de los recorridos, derivado de situaciones anómalas -y más que anómalas- que están rodeando el proceso y que, a mi juicio, revisten mucha gravedad.
El marco de la licitación que provocó los hechos conocidos obedece a un nuevo diseño conceptual del sistema de transporte público que se encuentra impulsando el Gobierno, el que nos parece del mayor interés y trascendencia. En sí, tal proceso -qué duda cabe- parece bien encaminado en su concepción técnica.
Sin embargo, es preciso puntualizar que la selva que vive la ciudad de Santiago en materia de transporte público, si somos justos, no se debe única y exclusivamente a la responsabilidad de los actuales prestadores del servicio. Habría que decir que, a lo menos desde 1990 hasta ahora, una autoridad reguladora ha fijado las actuales reglas del juego en materia de transporte público.
Dicha autoridad ha encabezado, propuesto y resuelto, por lo menos en tres oportunidades, procesos de licitación de ciertos recorridos, que son los mismos que hoy declara fracasados y que, por lo mismo, necesitan una modernización urgente. O sea, es imperioso hacer cambios a lo que se inició hace diez años y que, al parecer, no dio resultados.
Consideramos importante que la autoridad quiera revertir determinado fracaso a través de modernizar el sistema. Pero debemos admitir que los prestadores han actuado sobre la base de una legislación y de una reglamentación dictadas por una autoridad que, en el caos reinante, ella misma reconoce, tiene tanta responsabilidad -no cabe duda- como los prestadores, a quienes se les imputa absolutamente toda la culpa. Por lo tanto, hay responsabilidad, a lo menos, compartida.
Además, importa tener presente que el concepto que ha rodeado a este proceso es el de la modernización de un sector de la economía. Y, por lo mismo, más que en los aspectos del transporte, habrá incidencia en el tratamiento que se va a dar a ese sector, por las consecuencias de una modernización que tendrá un profundo impacto en vastos sectores de la economía.
Ahora bien, requisito indispensable para que la modernización se lleve a cabo es que la autoridad mantenga siempre políticas claras y coherentes, con reglas objetivas, transparentes y categóricas. Es decir, que con posterioridad a una licitación no exista acto discrecional en todo cuanto rodee al proceso mismo. Ningún sector de la economía resiste el embate de cambios irracionales y antojadizos.
Eso es lo que precisamente ha ocurrido en la licitación de los recorridos. Primero, en 1991, se privilegió al empresario individual. Con posterioridad, en 1994, se privilegió la formación de empresas; y, luego, en 1997, nuevamente se privilegió al empresario individual. En siete u ocho años se han aplicado criterios distintos -contradictorios, por cierto- para el proceso de adjudicación de las licitaciones Ello llevó a que Santiago, actualmente, tenga en el transporte urbano un promedio de 1,2 empresas por máquina que circula en la Capital. A eso obedece el caos imperante.
Pero eso no es todo, señor Presidente.
Hemos sido testigos de la exigencia de requisitos impuestos con posterioridad a las licitaciones, como instalación de cobradores automáticos que no se implementan y luego se desechan; de cabinas segregadas; de cámaras visuales al interior de los buses; de bloqueadores de puertas, y de diversos elementos que, por cierto, representan gastos importantes. Señalemos tan sólo que un cobrador automático vale seis millones de pesos, que deben ser costeados por el propietario del vehículo.
En todo este proceso ha habido muchísimos ires y venires muy contradictorios, que no responden a políticas claras. Por lo mismo, celebramos que hoy en día la autoridad intente al menos un sistema que ordene lo que en su momento también contribuyó a desordenar.
Hoy se encuentra en marcha el proceso de licitación del Metrobús. Ese sector se diferencia sustancialmente del de los empresarios microbuseros de recorridos en Santiago, conocidos como los "buses amarillos". Metrobús cumple una función de acercamiento de los pasajeros al Metro y constituye un transporte de gran prestigio entre los usuarios, precisamente porque sus recorridos son cortos y se cumplen a la hora; sus máquinas tienen tecnología no inferior al año 2000; poseen cobradores automáticos (los mismos que ahora serán reemplazados) y cámaras de videos dentro de los chasis, y, lo que es más importante para los pasajeros, cobran una tarifa esencialmente inferior a la de los buses de recorrido normal.
El señor Presidente , como Senador por Santiago , debe de saber que el servicio mencionado -que se verifica con mucha eficiencia, según declaraciones de quienes lo usan- es de vital importancia para las comunas que Su Señoría representa.
Pues bien, tal sector del transporte fue elegido por la autoridad para iniciar el proceso de licitación en cuestión. Es de celebrar que, por haber trabajado tan bien, se lo privilegie, escogiéndolo para el inicio de la modernización. Sin embargo -aquí está lo más delicado-, a nuestro juicio, el proceso de licitación de recorridos se encuentra viciado.
Se ha acreditado que las bases del proceso de licitación del Metrobús a que llamó el Gobierno circulaban por Santiago con a lo menos 15 días de anticipación a su venta oficial. Según consta en avisos publicados por la prensa, las bases de licitación fueron vendidas a los oponentes entre los días 15 y 26 de abril de 2002, de lunes a viernes, entre las 9 y las 14, en el Departamento de Contabilidad y Finanzas de la Subsecretaría de Transportes, en Amunátegui 139, primer piso, en la Capital. Y se agregaba que, a partir del 15 de abril de 2002, las bases se publicarían en el sitio Web del Ministerio y que su valor de venta era cinco unidades tributarias mensuales.
No obstante lo anterior, consta que copia de las mismas bases que originalmente se vendían, circulaban por Santiago , habiendo sido protocolizadas con fecha 28 de marzo ante notario.
Señor Presidente , si esa anomalía es grave, todavía hay más.
El proceso de licitación en sí fue cambiado en a lo menos dos oportunidades. Y las modificaciones significaron en la práctica excluir del proceso a muchos actuales prestadores del servicio, ya que en las bases originales se exigía determinado capital a cada licitante para optar por una unidad de negocio. Luego tal exigencia fue reducida exactamente a la mitad, sin que pudieran postular quienes en un comienzo no calificaron en el proceso.
Otra modificación que se impuso en el tiempo tuvo que ver nada menos que con la supresión de recorridos actuales, sin que hubiera mediado una razón técnica que lo justificara, quedando fuera de licitación recorridos hoy existentes -que constaban en las bases iniciales-, con el consiguiente perjuicio para vecinos de las comunas de La Reina, La Florida y Puente Alto, entre otras.
Pero todas estas modificaciones rompen los principios sobre estricta sujeción a las bases e igualdad de los licitantes, fundamentales en toda licitación.
Hay más, señor Presidente : durante el proceso de recepción y apertura de las ofertas, una de las empresas, que se estaría adjudicando la licitación, presentó su postulación en un archivador y no en un documento anillado. Y esto -contrariamente a como ha pretendido sostenerlo el Subsecretario de Transportes- no es menor, ya que se trataba de una exigencia de las mismas bases. En efecto, el artículo 3.7.3 establecía precisamente que, para garantizar que no hubiese ninguna adulteración en la documentación exigida, las propuestas debían estar anilladas o empastadas. Y resulta que una de las empresas que se la adjudican presenta su oferta en un archivador.
¿Por qué tiene importancia lo que le acabo de señalar? Porque, en los hechos, la autoridad debió haber descalificado al oferente por estar fuera de lo estipulado en las bases, lo cual -repito- no era un hecho menor y correspondía a una exigencia de aquéllas.
Sin embargo, no sólo no se le descalificó, sino que le adjudicaron varias unidades de negocios. Además, esa misma empresa originalmente ofreció prestar el servicio con buses a gas licuado, tecnología no disponible en la actualidad. Y, curiosamente, hoy la oferta ha sido modificada y la aludida empresa, que se adjudicó varios recorridos, aparece ofertando tecnología de diésel y no de gas licuado.
De ahí la relevancia de la exigencia del anillado. Uno podría presumir claramente que hubo tras bambalinas algún cambio de la oferta. Además, señor Presidente , quienes participaron en el mismo proceso, no obstante haberla solicitado, no han podido obtener hasta la fecha copia íntegra del acta de apertura de la propuesta, lo cual resulta curioso.
Por otra parte, no parece razonable que, de los 32 servicios de Metrobús que actualmente funcionan en Santiago, sólo uno hubiera postulado a la licitación. Y pese a haber ofrecido seis vehículos que circulan con gas natural -en su momento el propio Gobierno elogió públicamente la aparición de ellos, en un acto realizado en la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de La Moneda-, la empresa del caso, curiosamente, queda descalificada frente a otra que ofreció buses con tecnología antigua, a petróleo.
Sorprendente, por decir lo menos.
Eso no es todo: la prensa del fin de semana informa -sin que hasta la fecha nadie lo haya desmentido- informa que la empresa a la que le adjudicaron siete unidades de negocios no posee crédito, ni está ni estaría en condiciones de cumplir con lo propuesto. "Entre las tres empresas" -cito al diario "La Tercera" del domingo 18 de agosto, sin que hasta la fecha ello se negara- "que se preadjudicaron la licitación de Metrobús está una" -la nombra- "que postuló con cerca de 170 máquinas nuevas. El asesor de la empresa dijo que el 60 por ciento de los vehículos estaba encargado a la brasileña Agrale y que el resto se pidió a Mercedes Benz .". Y aquí viene lo sorprendente: "Ambas empresas proveedoras negaron la existencia de los pedidos. La coordinadora de exportaciones de la firma brasileña dijo que no se les ha hecho llegar ninguna carta de crédito". Otro tanto sostiene el Jefe de la División de Buses de la empresa Kaufmann, al afirmar que en ella no hay pedido de buses.
En otro diario de Santiago se publica que se trata de una empresa constituida con un capital de un millón de pesos y que por escritura se establece que al cabo de 120 días tiene que aumentarlo a 2 mil 300 millones. Es decir, ella se constituye en junio del 2001 y se obliga a que con posterioridad -naturalmente, en el evento de ganar la licitación- incremente el capital en 2 mil 300 veces. Es la misma empresa que no tiene crédito, según se establece públicamente, lo que no ha sido desmentido.
Señor Presidente , otra de las empresas que se estarían adjudicando la licitación se constituyó en septiembre del año 2001, con un capital de 300 mil pesos. ¡Con tal suma de dinero a lo más se podría adquirir un juego de neumáticos!
Las autoridades de Gobierno señalaron que la misma empresa que se adjudicó la licitación estaría vinculada a capitales foráneos. Se habla de un socio español, quien aportaría los buses que se requieren. Curioso que un extranjero escoja como socio a un chileno que aporta como capital sólo 300 mil pesos en un negocio que supone inversiones de gran envergadura. Extraño, raro, por decir lo menos. Y resulta que esa empresa que se estaría adjudicando la licitación, según lo dice la propia autoridad, se constituyó para tal efecto recién en septiembre del 2001.
Deseo solicitar, señor Presidente , que se inserte en esta parte de mi discurso copia de la escritura de constitución de la sociedad, para que se consigne en la Versión Taquigráfica, dado lo sorprendente y curioso que ello resulta, sobre todo en lo relativo a la composición de sus accionistas.
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--El documento, cuya inserción se acuerda con autorización del señor Presidente, es del tenor siguiente:
"COPIA DE INSCRIPCIÓN
"( Registro de Comercio )
"En San Bernardo , a dos de Octubre del año dos mil uno, procedo a la siguiente inscripción: "EXTRACTO ARMANDO ULLOA CONTRERAS, Notario Titular de Santiago , con oficio en Lo Barnechea, Avenida José Alcalde Délano 10682 , Local 9, certifica: Por escritura pública de hoy, ante mí, don Estanislao Juan Agustín Insulza Salinas , abogado, Los Jesuitas 705, Depto . 103, Providencia; don Rubén Eduardo Venegas Carrasco , comerciante, Pedro Lira 1.865, La Reina y don Humberto Leonidas Lira Maffioletti , ingeniero civil, Santa Catalina de Chena 1000, San Bernardo , todos compareciendo por sí y en su calidad de socio y mandatario especial, el primero, y socios administradores, los dos últimos, de la sociedad "Venegas e Insulza Limitada", del mismo domicilio anterior, y don Juan Agustín Insulza Court , ingeniero, del mismo domicilio anterior, constituyeron sociedad anónima cerrada denominada "AUTOBUSES LIT S.A.", nombre de fantasía "ALSA S.A.". DOMICILIO: San Bernardo , Región Metropolitana. DURACIÓN: Indefinida. OBJETO: El objeto de la sociedad es a) el transporte terrestre de pasajeros urbano, interprovincial, interurbano e internacional y la venta de pasajes; b) la compra, venta, importación, distribución y arriendo de vehículos de toda clase; c) la construcción, concesión, administración y explotación de terminales de buses y servicios anexos, tales como restaurante, custodia y otros; d) los servicios de turismo nacional e internacional; e) las representaciones de toda clase de marcas, sistemas y productos relacionados en forma directa e indirecta con los objetos anteriores, y f) la compra, venta y arriendo de propiedades. CAPITAL: $ 300.000.- divididos en 297 acciones de la serie A y 3 acciones de la Serie B, ambas series de acciones nominativas, sin valor nominal y de igual valor cada una. Las acciones de ambas series tendrán los mismos derechos, salvo, accionistas serie B, recibirán como dividendo un 30% de las utilidades que se repartan, cualquiera sea el porcentaje de ellas a repartir y diferencia si la hubiere, incrementará dividendos que correspondan a accionistas Serie A; y nombramiento y remoción del Gerente General y determinación de sus remuneraciones, serán acordadas por mayoría de acciones B. Capital íntegramente suscrito y pagado en dinero efectivo conforme indica Artículo segundo transitorio. Otras estipulaciones en escritura social que extracto. Santiago 6 de Septiembre de 2001.". Hay una firma ilegible y un timbre que dice: "ARMANDO ULLOA CONTRERAS. LO BARNECHEA. NOTARIO PÚBLICO". Conforme con el documento que queda agregado al final de este Registro bajo el Nº 115 de este año. Requirente: Demóstenes Rivera Fernández .- AMELIA GALVEZ CARVALLO . Al margen dice lo siguiente: Saneamiento.- Por acta Junta General Extraordinaria de accionistas de Fs. 137 vta Nº 165 de este año, se acordó sanear la escritura cuyo extracto se inscribió al centro, conforme Ley Nº 19.499. San Bdo., 24 de Diciembre del 2001.- A. GALVEZ C.- Por acta Sesión Directorio Número Dos de Fs. 23 Nº 25 de este año, consta designación Gerente General y poderes.- San Bdo., 11 de Febrero del 2002.- A. GALVEZ C.- Modificaciones a Fs. 25 Nº 26 de este año.- San Bdo., 11 de Febrero del 2002.- A. GALVEZ C.- Por Acta Sesión Directorio Número Tres de Fs. 70 Nº 82 de este año, consta elección de Presidente del Directorio , ratificación de la designación del Gerente General y del poder y la designación del Gerente General como secretario.- San Bdo., 10 de Julio del 2002.- ARTURO ARRIAGADA VLADILO .- Cons.Supl.- Conforme inscripción corriente de Fs. 114 Nº 129 del Registro de Comercio del año dos mil uno. SAN BERNARDO, catorce de Agosto del año dos mil dos.-
VIGENCIA
Certifico que la inscripción que en copia precede, no tiene nota al margen que los socios le hayan puesto término. SAN BERNARDO, catorce de Agosto del año dos mil dos.-".
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El señor BOMBAL.-
Señor Presidente , no tengo duda alguna de que el país está frente a un torcido proceso de licitación, en el cual, de modo indubitable, existen graves irregularidades que nos permitirían, incluso, sospechar que pueda existir corrupción.
Por lo mismo, es urgente que se despejen cada una de las interrogantes planteadas públicamente, algunas de ellas ante los Tribunales de Justicia.
Solicito remitir el texto de esta intervención al señor Contralor General de la República y que se oficie al señor Ministro de Transportes con el objeto de que informe al Senado si en alguna de las sociedades adjudicatarias o que se consignan como precalificadas en la licitación de recorridos de Metrobús existe entre sus accionistas vínculo de parentesco con personeros de Gobierno o con quienes ocupen cargos en él.
Concluyo señalando que la modernización del transporte público es algo que valoramos y que, por lo mismo, para llevarla a cabo debe procederse con absoluta transparencia, la misma que, en nuestro concepto, ha faltado notoriamente.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés ( Presidente ).-
Se remitirán los oficios solicitados por Su Señoría, en conformidad al Reglamento.
Hay un aspecto en el que la Mesa tiene dudas: podría ser considerado como acción fiscalizadora lo relativo a las relaciones entre socios y parientes, cuestión que, en todo caso, será objeto de revisión.
El señor BOMBAL.-
Muy bien, señor Presidente.
"
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