REP�BLICA DE CHILE DIARIO DE SESIONES DEL SENADO PUBLICACI�N OFICIAL LEGISLATURA 346�, EXTRAORDINARIA Sesi�n 11�, en martes 30 de abril de 2002 Ordinaria (De 16:20 a 18:4) PRESIDENCIA DEL SE�OR ANDR�S ZALD�VAR, PRESIDENTE SECRETARIOS, LOS SE�ORES CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR Y SERGIO SEP�LVEDA GUMUCIO, SUBROGANTE ____________________ � N D I C E Versi�n Taquigr�fica P�g. I.ASISTENCIA......................................................................................................... II.APERTURA DE LA SESI�N............................................................................... III.TRAMITACI�N DE ACTAS IVCUENTA............................................................................................................... Acuerdos de Comit�s................................................................... V.ORDEN DEL D�A: Proyecto de ley, en segundo tr�mite, que modifica la ley N� 19.220, que regula el establecimiento de bolsas de productos agropecuarios (1640-01) (se aprueba en particular) Proyecto de ley, en tr�mite de Comisi�n Mixta, que modifica la ley N� 18.7000, en materia de reclamaciones electorales y otros aspectos procesales (2810-07) (se aprueba su informe) Proyecto de acuerdo que modifica el art�culo 38 del Reglamento del Senado, en lo relativo al lugar en que pueden sesionar las Comisiones (S 606-09 y S 608-09) (se aprueba en general y particular) VI. INCIDENTES: Peticiones de oficios (se anuncia su env�o)................................................... Satisfacci�n por mantenimiento de retenes en zonas rurales de Quinta Regi�n. Oficios (observaciones del se�or Romero) Vulneraci�n de normativa protectora del az�car. Oficio (observaciones del se�or Larra�n) Situaci�n pol�tica de Chile en contexto sudamericano (observaciones del se�or Prokurica) Reconstrucci�n de juzgados y Corte de Apelaciones de Coihaique. Oficios (observaciones del se�or Horvath) Petici�n de antecedentes sobre costos de Empresa de Servicios Sanitarios de Ais�n. Oficio (observaciones del se�or Horvath) Distribuci�n de recursos a servicios de salud. Oficio (observaciones del se�or Garc�a) Conmemoraci�n de D�a Internacional del Trabajo (observaciones del se�or N��ez) Afirmaciones de Senador se�or Prokurica sobre falta de estadistas y exceso de politiqueros (observaciones del se�or Mu�oz Barra) Acuerdo con Uni�n Europea. Oficio (observaciones del se�or Mu�oz Barra) VERSI�N TAQUIGR�FICA I. ASISTENCIA Asistieron los se�ores: --Aburto Ochoa, Marcos --Arancibia Reyes, Jorge --�vila Contreras, Nelson --Boeninger Kausel, Edgardo --Canessa Robert, Julio --Cantero Ojeda, Carlos --Cariola Barroilhet, Marco --Chadwick Pi�era, Andr�s --Coloma Correa, Juan Antonio --Cordero Rusque, Fernando --Espina Otero, Alberto --Fern�ndez Fern�ndez, Sergio --Flores Labra, Fernando --Foxley Rioseco, Alejandro --Frei Ruiz-Tagle, Carmen --Frei Ruiz-Tagle, Eduardo --Garc�a Ruminot, Jos� --Gazmuri Mujica, Jaime --Horvath Kiss, Antonio --Larra�n Fern�ndez, Hern�n --Lavandero Illanes, Jorge --Mart�nez Busch, Jorge --Matthei Fornet, Evelyn --Moreno Rojas, Rafael --Mu�oz Barra, Roberto --Naranjo Ortiz, Jaime --Novoa V�squez, Jovino --N��ez Mu�oz, Ricardo --Orpis Bouch�n, Jaime --P�ez Verdugo, Sergio --Parra Mu�oz, Augusto --Pizarro Soto, Jorge --Prokurica Prokurica, Baldo --R�os Santander, Mario --Romero Pizarro, Sergio --Ruiz-Esquide Jara, Mariano --Sabag Castillo, Hosa�n --Stange Oelckers, Rodolfo --Vega Hidalgo, Ram�n --Viera-Gallo Quesney, Jos� Antonio --Zald�var Larra�n, Adolfo --Zald�var Larra�n, Andr�s --Zurita Camps, Enrique Concurri�, adem�s, el se�or Ministro del Interior. Actu� de Secretario el se�or Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el se�or Sergio Sep�lveda Gumucio. II. APERTURA DE LA SESI�N --Se abri� la sesi�n a las 16:20, en presencia de 20 se�ores Senadores. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesi�n. III. TRAMITACI�N DE ACTAS El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Las actas de las sesiones 9� y 10�, ordinarias, en 16 y 17 de abril del a�o en curso, respectivamente, se encuentran en Secretar�a a disposici�n de los se�ores Senadores, hasta la sesi�n pr�xima, para su aprobaci�n. IV. CUENTA El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretar�a. El se�or SEP�LVEDA (Prosecretario).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas: Mensaje De Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, mediante el cual retira la urgencia y la hace presente, nuevamente, en el car�cter de "simple", respecto del proyecto que modifica la dependencia del Liceo Manuel de Salas desde la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educaci�n a la Universidad de Chile (Bolet�n N� 2.839-04). --Queda retirada la urgencia, se tiene presente la nueva calificaci�n y se manda agregar el documento a sus antecedentes. Oficios De Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, mediante el cual solicita que se disponga lo necesario para que el Congreso Nacional se re�na en Congreso Pleno el 21 de mayo pr�ximo, a fin de abrir sus sesiones ordinarias y recibir, en esa oportunidad, la cuenta del estado administrativo y pol�tico de la Naci�n, en cumplimiento de lo dispuesto en el inciso tercero del art�culo 24 de la Carta Fundamental. Para tal efecto, propone que la mencionada sesi�n sea convocada para las 10 horas del d�a anteriormente indicado. --Se accede a lo solicitado. Dos de la Honorable C�mara de Diputados: Con el primero, comunica que ha aprobado, en los mismos t�rminos en que lo hizo el Senado, el proyecto que establece el sistema de jueces de turno y de dedicaci�n exclusiva en materia penal e introduce modificaciones a la tramitaci�n de la segunda instancia (Bolet�n N� 2.850-07). --Se manda comunicar a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica. Con el segundo, comunica que accedi� a la solicitud del Senado en orden a archivar el proyecto que concede la nacionalidad chilena, por especial gracia, al se�or Hugo Saucedo Vaca (Bolet�n N� 1.885-17). --Se toma conocimiento y se manda archivar el documento junto a sus antecedentes. Del Excelent�simo Tribunal Constitucional, mediante el cual remite copia autorizada de la sentencia dictada en el control de la constitucionalidad del proyecto que crea nuevas Salas en las Cortes de Apelaciones de Santiago, San Miguel, Valpara�so y Concepci�n (Bolet�n N� 2.852-07). --Se manda comunicar el proyecto a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica. Cuatro del se�or Ministro del Interior: Con el primero, responde un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Moreno, sobre la posibilidad de restituir a la comuna de Placilla, Sexta Regi�n, la dotaci�n de Carabineros que fue retirada. Con los tres siguientes, contesta igual n�mero de oficios enviados en nombre del Honorable se�or Horvath: el primero, referido a la asignaci�n de fondos a las entidades pertinentes para enfrentar los da�os provocados por el temporal que afect� a la Regi�n de Ays�n, el 14 de marzo de este a�o, y los dos �ltimos, relacionados con los efectos sociales y econ�micos que la marea roja ha provocado en las regiones australes del pa�s. De la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores, mediante el cual responde un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Viera-Gallo, en orden a que nuestro pa�s, sumando esfuerzos con otras naciones, pueda contribuir decididamente a la paz del Medio Oriente. Del se�or Ministro Secretario General de la Presidencia, por medio del que contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Moreno, relativo a la situaci�n que afecta a los productores nacionales de leche. Tres del se�or Ministro de Obras P�blicas: Con los dos primeros, responde a sendos oficios enviados en nombre del Honorable se�or Larra�n: uno, referido al incremento de tarifas del servicio de agua potable en las provincias de Linares y Cauquenes, y el otro, sobre el Plan de Inversiones en Obras P�blicas que ejecutar� el Ministerio a su cargo durante este a�o, en las provincias antes se�aladas, y Con el tercero, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Stange, relacionado con la construcci�n de un camino desde el puente sobre el R�o Cocham� hasta el fundo Angostura, en la D�cima Regi�n. Dos del se�or Subsecretario de Desarrollo Regional y Administrativo: Con el primero, da respuesta a un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Horvath, acerca de la falta de suministro de energ�a el�ctrica en la localidad de Tapera, comuna de Lago Verde, Und�cima Regi�n. Con el segundo, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Romero, referido al n�mero de subsidios a los servicios b�sicos facturados por cada regi�n, en los �ltimos cinco a�os. Del se�or Subsecretario de Planificaci�n y Cooperaci�n, por medio del cual contesta un oficio enviado en nombre de la Honorable se�ora Frei, sobre el Programa de Subsidios al Consumo de Agua Potable y Servicio de Alcantarillado de Aguas Servidas. Cuatro del se�or Subsecretario de Transportes: Con el primero, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Larra�n, relacionado con la necesidad de establecer una plan de seguridad para la v�a f�rrea que se extiende desde Santiago al sur del pa�s; Con el segundo, da respuesta a un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Horvath, relativo a la eventual exigencia de instalaci�n de tac�grafos en buses destinados al transporte de pasajeros en la Und�cima Regi�n; Con el tercero, responde un oficio enviado en nombre del ex Senador se�or Lagos, acerca de una situaci�n que, en su oportunidad, preocupaba a los trabajadores mar�timos portuarios de Iquique, y Con el �ltimo, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Fern�ndez, relativo a la inquietud manifestada por la Asociaci�n Gremial de Empresarios de Taxis Colectivos de Punta Arenas (TACOPA), en lo tocante al proyecto que modifica la ley N� 18.502, sobre impuesto al gas. Del se�or Superintendente de Servicios Sanitarios, mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre de la Honorable se�ora Frei, referido a las alzas tarifarias decretadas por la Empresa de Servicios Sanitarios de Antofagasta S.A. Del se�or Director Nacional de Aduanas, por medio del cual responde un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Romero, respecto a las medidas que debieran adoptarse para hacer m�s expedita la atenci�n y el funcionamiento del Complejo Fronterizo Los Libertadores. Del se�or Director Nacional de Vialidad, en virtud del cual da respuesta a un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Horvath, sobre la normas de navegaci�n y las facilidades concedidas a las embarcaciones que surcan el Lago O'Higgins. Del se�or Gobernador Provincial de Chilo�, mediante el cual contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Horvath, relacionado con la difusi�n de los beneficios que contempla la ley N� 19.776, sobre regularizaci�n de la posesi�n y ocupaci�n de inmuebles fiscales. Dos del se�or Jefe de Gabinete del General Director de Carabineros: Con el primero, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Horvath, relativo a los incendios forestales que afectaron a distintas regiones del pa�s, y Con el segundo, contesta un oficio enviado en nombre del Honorable se�or Moreno, sobre la restituci�n de la dotaci�n de Carabineros del Ret�n Placilla, provincia de Colchagua. --Quedan a disposici�n de los se�ores Senadores. Informes Segundo informe de la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, e informe de la Comisi�n de Hacienda, reca�dos en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la Ley Org�nica Constitucional de la Contralor�a General de la Rep�blica (Bolet�n N� 2.610-07). De la Comisi�n de Educaci�n, Cultura, Ciencia y Tecnolog�a, reca�do en el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la dependencia del Liceo Manuel de Salas desde la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educaci�n a la Universidad de Chile, con urgencia calificada de "simple" (Bolet�n N� 2.839-04). De la Comisi�n de Transportes y Telecomunicaciones, reca�do el proyecto, en segundo tr�mite constitucional, que crea el Registro Nacional de Transporte de Carga Terrestre (Bolet�n N� 2.590-15). --Quedan para tabla. Moci�n De los Honorables se�ores Lavandero y Zald�var, don Andr�s, mediante la cual inician un proyecto que establece la inembargabilidad de los bienes inmuebles y otros, destinados exclusivamente al funcionamiento de los Cuerpos de Bomberos del pa�s (Bolet�n N� 2.915-07). --Pasa a la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento. (El proyecto no podr� ser tratado mientras no sea incluido en la convocatoria a la actual Legislatura Extraordinaria de Sesiones del Congreso Nacional). Proyecto de acuerdo De los Honorables se�ores Horvath, Larra�n, N��ez, Pizarro, Prokurica, R�os, Sabag y Viera-Gallo, mediante el cual proponen solicitar a Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica que estudie todas las medidas que permitan evitar que las importaciones de productos de acero compitan deslealmente con la producci�n nacional (Bolet�n N� S 611-12). --Queda para el Tiempo de Votaciones de la pr�xima sesi�n ordinaria. Solicitud Del se�or Eugenio Segundo Gonz�lez Gallegos, mediante la cual pide la rehabilitaci�n de la ciudadan�a (Bolet�n N� S 610-04). --Pasa a la Comisi�n de Derechos Humanos, Nacionalidad y Ciudadan�a. Declaraciones de inadmisibilidad Moci�n de los Honorables se�ores Cordero, Horvath, Orpis, Prokurica y R�os, mediante la cual inician un proyecto que deroga diversas disposiciones legales que contemplan la p�rdida del montep�o respecto de las viudas que contraen nuevo matrimonio. --Se declara inadmisible por referirse a una materia propia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, de conformidad a lo establecido en el n�mero 4� del inciso cuarto del art�culo 62 de la Carta Fundamental. Moci�n de los Honorables se�ores Cantero, Chadwick, Larra�n y Prokurica, por medio de la cual inician un proyecto que modifica la ley N� 19.518, sobre estatuto de capacitaci�n y empleo, permitiendo que los contribuyentes del impuesto global complementario descuenten del referido tributo lo invertido en capacitaci�n de los trabajadores. --Se declara inadmisible, de conformidad a lo establecido en el inciso segundo del art�culo 62 de la Carta Fundamental y por referirse a una materia propia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia el Presidente de la Rep�blica, de acuerdo con lo dispuesto en el n�mero 1� del inciso cuarto de la mencionada norma constitucional. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Terminada la Cuenta. El se�or CHADWICK.- Pido la palabra. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- La tiene, Su Se�or�a. El se�or CHADWICK.- Se�or Presidente, le solicito recabar el acuerdo de la Sala para lo que expondr� a continuaci�n. Las Comisiones de Constituci�n y de Salud se encuentran estudiando el proyecto sobre modificaci�n de la Ley de Alcoholes y derogaci�n del Libro Segundo de la ley N� 17.105, que lleva ya mucho tiempo en tr�mite. En el d�a de hoy nos hemos impuesto de la disposici�n del Ejecutivo a patrocinar una indicaci�n que permita regular los horarios de expendio de bebidas alcoh�licas, que constituye un tema muy central de la iniciativa, por lo que deseamos pedir nada m�s que una semana de plazo para indicaciones, con el prop�sito de que sea presentada aquella a que he hecho referencia. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Ya se evacu� el primer informe. El se�or CHADWICK.- S�, se�or Presidente. Se trata de un t�rmino especial, habiendo vencido el que se hab�a fijado para formular indicaciones. Es lo que me inform� el Secretario de Comisi�n. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- �Hay acuerdo para el otorgamiento de un plazo de una semana, o sea, hasta el pr�ximo martes 7 de mayo, a las 12? Acordado. ------------------- El se�or PROCURICA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- S�, se�or Senador. El se�or PROCURICA.- Se�or Presidente, pido que las dos mociones declaradas inadmisibles sean enviadas al Presidente de la Rep�blica y que se le solicite que las incluya en la convocatoria a Legislatura Extraordinaria. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Si le parece a la Sala, as� se har�. Acordado. El se�or Secretario dar� cuenta de los acuerdos de Comit�s. ACUERDOS DE COMIT�S El se�or HOFFMANN (Secretario).- La unanimidad de los Comit�s, en sesi�n del d�a de hoy, adopt� los siguientes acuerdos. 1.- Dar a la tabla de la sesi�n ordinaria del pr�ximo martes 7 de mayo el orden que se se�ala a continuaci�n: tratar primeramente el proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que enmienda la Ley Org�nica de la Contralor�a General de la Rep�blica; en seguida, el proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la dependencia del Liceo Manuel de Salas desde la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educaci�n a la Universidad de Chile, y, por �ltimo, el proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que crea el Registro Nacional de Transporte de Carga Terrestre. 2.- Respecto del convenio con la Uni�n Europea, citar a una sesi�n especial para el pr�ximo mi�rcoles 8 de mayo, de 12 a 14, a fin de escuchar a la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores, y en la que se dar� cinco minutos a cada Senador para formular preguntas, sin posibilidad de ceder el derecho a usar de la palabra. 3.- Si faltare tiempo, continuar en la sesi�n ordinaria de la tarde, despu�s de la Cuenta. 4.- Abrir un nuevo plazo para formular indicaciones al proyecto de ley sobre DICOM, hasta el pr�ximo mi�rcoles 8 de mayo, a las 12. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se toma conocimiento. En lo referente a la sesi�n especial, la idea es que se escuche un informe de la se�ora Ministra y que luego se formulen preguntas. No se realizar�n exposiciones, ni discursos, ni debate. Ello debe quedar claro. Y la Mesa dispone de facultades para llamar la atenci�n en caso de que no se cumpla con lo acordado. V. ORDEN DEL D�A REGULACI�N DE ESTABLECIMIENTO DE BOLSAS DE PRODUCTOS AGROPECUARIOS El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Corresponde ocuparse en el proyecto de ley, en segundo tr�mite constitucional, que modifica la ley N� 19.220, la cual regula el establecimiento de bolsas de productos agropecuarios. --Los antecedentes sobre el proyecto (1640-01) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En segundo tr�mite, sesi�n 59�, en 14 de mayo de 1996. Informes de Comisi�n: Agricultura, sesi�n 5�, en 3 de abril de 2002. Hacienda, sesi�n 5�, en 3 de abril de 2002. Discusi�n: Sesi�n 6�, en 3 de abril de 2002 (se aprueba en general). El se�or HOFFMANN (Secretario).- Se encuentra vencido el plazo otorgado por la Sala para formular indicaciones, de modo que, de acuerdo con lo que establece el art�culo 120 del Reglamento, corresponde dar por aprobada la iniciativa en particular. El se�or ROMERO.- Pido la palabra. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- La tiene, se�or Senador. El se�or ROMERO.- Entiendo, entonces, se�or Presidente, que el tr�mite final y definitivo del proyecto �porque no mediaron indicaciones- se halla plenamente perfeccionado. Me alegro de ello, porque constituye un tema pendiente desde hace muchos a�os, lo que ha impedido que una ley de la Rep�blica sea operable. Y, en ese sentido, quisiera dejar constancia de mi satisfacci�n en la Versi�n Oficial, porque fui uno de los que patrocinaron el proyecto original sobre la bolsa de productos agropecuarios. Gracias. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se proceder�, por lo tanto, conforme al Reglamento. --Queda aprobado en particular el proyecto. MODIFICACI�N DE LEY N� 18.700 EN MATERIA DE RECLAMACIONES ELECTORALES Y OTROS ASPECTOS PROCESALES. INFORME DE COMISI�N MIXTA El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Informe de la Comisi�n Mixta formada en virtud de lo dispuesto en el art�culo 67 de la Constituci�n Pol�tica, en primer tr�mite, reca�do en el proyecto que modifica la ley N� 18.700, Org�nica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, en materia de reclamaciones electorales y otros aspectos procesales. --Los antecedentes sobre el proyecto (2810-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Proyecto de ley: En primer tr�mite, sesi�n 9�, en 17 de octubre de 2001. En tr�mite de Comisi�n Mixta, sesi�n 18�, en 18 de diciembre de 2001. Informe: Mixta, sesi�n 10�, en 17 de abril de 2002. Discusi�n: Sesi�n 9�, en 17 de octubre de 2001 (se aprueba en general y particular). El se�or HOFFMANN (Secretario).- La controversia entre ambas ramas del Congreso se origin� en el rechazo por la Honorable C�mara de Diputados, en el segundo tr�mite constitucional, del proyecto que despach� el Senado. El informe de la Comisi�n Mixta consigna la discusi�n habida en torno de los dos art�culos que conforman la iniciativa, se�alando que el art�culo 1�, que introduce diecisiete modificaciones a la Ley Org�nica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, result� aprobado por la unanimidad de los miembros presentes, Honorables Senadores se�ores Aburto, Chadwick, Espina y Silva, y Honorables Diputados se�ora Soto y se�ores Bustos, Forni y Luksic. El art�culo 2�, que establece la vigencia de las enmiendas contenidas en el art�culo 1�, tambi�n fue aprobado por unanimidad, con la misma votaci�n. En consecuencia, la Comisi�n Mixta, como forma y modo de resolver la controversia suscitada entre ambas C�maras, recomienda acoger el proyecto que consta en el informe. La Secretar�a ha elaborado un texto comparado que Sus Se�or�as tienen a la vista. Finalmente, cabe destacar que la proposici�n requiere ser aprobada con qu�rum de ley org�nica constitucional, esto es, en esta sesi�n, con el voto favorable de 27 se�ores Senadores. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Terminada la relaci�n. Tiene la palabra el Honorable se�or Chadwick. El se�or CHADWICK.- Se�or Presidente, el proyecto se origin� en esta Corporaci�n, donde fue aprobado un�nimemente. El mismo resultado se registr� con posterioridad en la C�mara de Diputados, con la �nica dificultad de que no se alcanz� el qu�rum suficiente, motivo por el cual se envi� a Comisi�n Mixta. En esa �ltima instancia fue acogido r�pidamente y en t�rminos de un consenso -no se introduce modificaci�n alguna a la proposici�n del Senado-, as� que pido que el informe sea despachado por unanimidad. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Si le parece a la Sala, se aprobar� el informe. --Se aprueba, dej�ndose constancia, para los efectos del qu�rum constitucional necesario, de que 34 se�ores Senadores se pronuncian a favor. MODIFICACI�N DE ART�CULO 38 DE REGLAMENTO DEL SENADO El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Proyecto de acuerdo sobre la modificaci�n del art�culo 38 del Reglamento, en lo relativo al lugar en que pueden sesionar las Comisiones. --Los antecedentes sobre los proyectos de acuerdo (S 606-09 y S 608-09) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican: Se dan cuenta en sesi�n 7� y 9� , en 9 y 16 de abril de 2002, respectivamente. Informe de Comisi�n: Constituci�n, sesi�n 10�, en 17 de abril de 2002. El se�or HOFFMANN (Secretario).- El texto fue iniciado en mociones de los Honorables se�ores Cantero, Cordero, N��ez, P�ez y Andr�s Zald�var y de los Honorables se�ores Horvath, Mart�nez, Ominami, Romero y Ruiz. Los proyectos de acuerdo fueron informados por la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, la que rese�a el debate suscitado en su seno, indicando que la unanimidad de los miembros presentes, Honorables se�ores Chadwick, Moreno y Silva, acord� modificar el art�culo 38 del Reglamento en los t�rminos que consigna. Sus Se�or�as tienen a la vista un texto comparado elaborado por la Secretar�a, dividido en cuatro columnas, que contemplan el Reglamento del Senado, las mociones presentadas y lo propuesto por la Comisi�n. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Terminada la relaci�n. Tiene la palabra el Senador se�or Romero. El se�or ROMERO.- Se�or Presidente, el T�tulo I del Reglamento, que se denomina "SEDE DEL SENADO Y LEGISLATURAS ORDINARIA Y EXTRAORDINARIA", es seguido por un P�rrafo 1�, "LOCAL DE SU FUNCIONAMIENTO". El art�culo 1� dispone lo siguiente: "El Senado se reunir� en el recinto destinado a sus sesiones, salvo que las condiciones materiales del edificio no lo permitan. En este caso se reunir� provisionalmente en el que indique el Presidente. "Si el impedimento es motivado por razones de presi�n moral o de fuerza, la mayor�a de los Senadores en ejercicio constituir� cuerpo en cualquier otro lugar dentro del territorio de la Rep�blica donde logre reunirse.". Ahora bien, la Comisi�n propuso sustituir el inciso segundo del art�culo 38 del Reglamento por los que se indican: "Las Comisiones se constituir�n y adoptar�n sus acuerdos en los edificios que ocupe el Senado. "Por acuerdo un�nime de sus miembros, las Comisiones podr�n constituirse, sesionar y adoptar acuerdos en cualquier parte del territorio nacional, dando cuenta mensualmente de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior y trimestralmente a la Sala. "Con todo, podr�n sesionar en una ciudad distinta de aquella en que la Sala celebre sus sesiones s�lo los d�as en que el Senado no se re�na.". Se�or Presidente, no resulta propio hablar de "edificios que ocupe el Senado", porque esta Corporaci�n -de la cual sus Comisiones forman parte- s�lo puede funcionar en su �nica sede, esto es, "en el recinto destinado a sus sesiones", como lo establece el art�culo 1� del Reglamento. A mi juicio, lo anterior hace aconsejable -como lo manifest� en el referido �rgano t�cnico- aclarar ese punto antes de adoptar una decisi�n acerca de la norma propuesta. En definitiva, pienso que si no modificamos el art�culo 1�, este precepto caer� en contradicci�n absoluta y completa con lo sugerido por la Comisi�n como proyecto de acuerdo. En todo caso, participo de la indicaci�n presentada hoy d�a por algunos se�ores Senadores, que consigna: "Por acuerdo de la mayor�a de sus miembros, las Comisiones podr�n constituirse, sesionar y adoptar acuerdos en cualquier parte del territorio nacional, debiendo dar cuenta mensualmente de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior y trimestralmente a la Sala. "Con todo, podr�n sesionar en una ciudad distinta de aquella en que la Sala celebre sus sesiones s�lo los d�as en que el Senado no se re�na.". Dicho planteamiento lo hice presente en esos mismos t�rminos en la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento. Y ahora los reitero sum�ndome a la proposici�n de los Senadores se�ores Novoa, Arancibia, Larra�n y Fern�ndez, autores de la indicaci�n. Me parece que si no adecuamos la norma como lo estoy se�alando, simplemente surgir� una tremenda contradicci�n. Por otra parte, el hecho de flexibilizar la norma en orden a que por acuerdo de la mayor�a de los miembros de una Comisi�n se pueda sesionar en cualquier lugar del pa�s cuando no haya sesiones de Sala, lo considero mucho m�s leg�timo que se�alar perentoriamente que ello es factible hacerlo en alg�n edificio de los tantos que pudiera poseer esta Corporaci�n. Se�or Presidente, el Senado no tiene sucursales ni filiales, sino que es uno solo. Y, de acuerdo con su estructura org�nica institucional, su sede est� en Valpara�so. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or Chadwick. El se�or CHADWICK.- Se�or Presidente, comparto plenamente las fundamentaciones y razones entregadas por el Honorable se�or Romero para los efectos de respaldar la indicaci�n formulada por diversos se�ores Senadores. Deseo explicar que con posterioridad al acuerdo adoptado por la Comisi�n de Constituci�n para introducir las modificaciones que constan en el informe, el Honorable se�or Romero entreg� argumentos que varios Senadores acogimos en dicho �rgano legislativo. Sin embargo, por razones reglamentarias -pues hab�an vencido los plazos- no pudimos realizar tales enmiendas. Por eso, diversos Senadores que participamos en ese debate acordamos hacer presente en la Sala que la voluntad de la Comisi�n, en t�rminos mayoritarios, era aceptar la modificaci�n recogida en la indicaci�n presentada por los Honorables se�ores Fern�ndez, Novoa, Arancibia y Larra�n. Por lo tanto, respaldo plenamente lo manifestado por el Honorable se�or Romero, y s� que otros integrantes de la Comisi�n de Constituci�n participan de este mismo criterio. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Horvath. El se�or HORVATH.- Se�or Presidente, en la proposici�n que figura en el informe, que es una combinaci�n entre dos iniciativas, hay en realidad una contradicci�n en el inciso primero cuando se se�ala que "Las Comisiones se constituir�n y adoptar�n sus acuerdos en los edificios que ocupe el Senado.". Efectivamente, lo anterior carece de sentido pues existe una sede que se encuentra establecida por ley. Incluso, esa norma puede incurrir en un riesgo de inconstitucionalidad. En cambio, considero que el inciso segundo, el cual dispone que "Por acuerdo un�nime de sus miembros," -en forma excepcional, o por mayor�a (esto deber� definirlo la Sala conforme a las indicaciones presentadas)- "las Comisiones podr�n constituirse, sesionar y adoptar acuerdos en cualquier parte del territorio nacional", apunta a la idea de fondo. Es decir, que el Congreso se encuentre en el lugar donde realmente est�n los temas importantes y, adem�s, que su presencia se extienda a lo largo y ancho del pa�s, de acuerdo a su diversidad y a la gran variedad de materias que tratan las diecisiete Comisiones permanentes del Senado. Obviamente, es m�s f�cil que un grupo de Senadores se traslade a un extremo del territorio, que hacer venir a representantes de esa zona a la sede del Congreso Nacional. Eso dar�a un dinamismo much�simo mayor. Por ello, a mi juicio, el eje de todo esto deber�a estar en el inciso segundo, corrigiendo el primero, y en determinar si las Comisiones se constituir�n por acuerdo un�nime, por mayor�a o en forma excepcional. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Moreno. El se�or MORENO.- Se�or Presidente, efectivamente la Comisi�n debati� las distintas opciones que existen en la materia. Creo que nadie busca desmerecer el funcionamiento de la C�mara Alta en su sede normal. Por el contrario, se trata de conciliar dos criterios que han estado dando vueltas y que forman parte de los intentos por mejorar la eficiencia del trabajo de los propios Senadores. El primero apunta al hecho de que en distintas oportunidades algunas Comisiones espec�ficas de esta Corporaci�n deben reunirse en diferentes lugares del territorio nacional con el objeto de tomar conocimiento de los problemas que los afectan. Para quienes representamos a las Regiones, la posibilidad de que las Comisiones tengan realmente el imperio y la facultad de funcionar no s�lo en forma espor�dica, sino que de acuerdo con lo que se establezca en el seno de las mismas, da cierta presencia al Senado, as� como tambi�n vitaliza el funcionamiento de ellas. Como muy bien me acota el Honorable se�or Pizarro, las Comisiones de Medio Ambiente, de Agricultura, de Econom�a y de Miner�a tienen condiciones naturales para trasladarse y conocer la situaci�n de aquellos lugares donde se desarrollan actividades econ�micas en nuestro pa�s. El segundo aspecto dice relaci�n al trabajo que realizamos los Senadores en nuestro contacto con los Ministerios y las reparticiones p�blicas. Normalmente los lunes -o, a veces, los jueves, cuando no hay sesi�n especial- debemos estar disponibles para reunirnos con los responsables de movilizar los proyectos y las materias que involucran nuestra representaci�n en la C�mara Alta. Y, obviamente, resulta positivo que podamos hacerlo en Santiago o en otro lugar del territorio nacional. Sobre el particular, cito el caso concreto de la Comisi�n de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento, la cual est� discutiendo una iniciativa de gran relevancia, como es precisamente la relacionada con el matrimonio civil. Dicho �rgano legislativo necesariamente debe seguir reuni�ndose en esos t�rminos. Por lo tanto, soy partidario de aprobar el proyecto. Adem�s, me sumo a la indicaci�n planteada por los se�ores Senadores en orden a darle mayor flexibilidad, evitando dejarlo amarrado en los t�rminos en que est�. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- �Habr�a acuerdo para aprobar la iniciativa? El se�or ORPIS.- �No, se�or Presidente! El se�or ESPINA.- No. El se�or MART�NEZ.- Pido la palabra. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- La tiene, Su Se�or�a. El se�or MART�NEZ.- Estamos en presencia de tres textos que var�an en aspectos muy s�lidos; por ejemplo, en lo referente al uso o no uso de los edificios que ocupe el Senado. Me parece que la idea de que las Comisiones puedan constituirse en cualquier parte del territorio nacional, proporcionando la correspondiente informaci�n al Senado, es la correcta. Porque no s�lo le da transparencia, sino que adem�s lo acerca a la ciudadan�a en forma incre�ble. En consecuencia, concuerdo con ese planteamiento y lo apoyo. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Espina. El se�or ESPINA.- Se�or Presidente, compartimos la indicaci�n formulada por los Senadores se�ores Novoa, Arancibia, Larra�n y Fern�ndez, que recoge lo expresado por el Honorable se�or Romero durante el debate de la Comisi�n de Constituci�n. Considero que esa norma resuelve el problema de mejor manera que el texto propuesto por dicho �rgano t�cnico. �Por qu�? En primer lugar, porque es necesario dejar claramente establecido que el edificio donde funciona el Senado se encuentra en la ciudad de Valpara�so. Y, en mi opini�n, esto no se modifica, no se altera y hay que mantenerlo. Aqu� est� su domicilio, y no cabe entrar en un debate de otra naturaleza. En segundo t�rmino, porque -como bien se se�al�- la mejor forma de que los miembros de las Comisiones tengan contacto m�s directo con la realidad frente a un problema es visitando el lugar de los hechos, donde para conocer lo que efectivamente sucede tendr�n la posibilidad de entrevistarse con ciudadanos que no pueden concurrir al Congreso a dar su opini�n sobre materias legislativas relevantes. Adem�s, me parece bien que la decisi�n pertinente se adopte por la mayor�a de los miembros de la Comisi�n respectiva, y no por acuerdo un�nime, como se propone en el informe. De esa manera operar� la voluntad mayoritaria, que es la forma como se resuelven las materias en el seno de las Comisiones. Por otro lado, las normas que requieren qu�rum especial para su aprobaci�n son excepcionales y su votaci�n se lleva a cabo en la Sala. No se da el caso de que una iniciativa legal deba votarse con ese qu�rum en Comisi�n, ni aun cuando se trate de Comisiones unidas, cuyos integrantes son m�s numerosos. Por lo tanto, a fin de no alterar una forma de trabajo legislativo lo l�gico es que el acuerdo para sesionar en otro sitio se tome por mayor�a y que recaiga en ciudades donde verdaderamente se puedan adoptar determinaciones correctas. Ojal� que se apruebe por unanimidad la indicaci�n mencionada, que permitir� consensuar una normativa muy �til para el buen funcionamiento del Senado. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- As� lo ped�, Su Se�or�a, pero varios se�ores Senadores solicitaron intervenir. Tiene la palabra el Honorable se�or Mu�oz Barra. El se�or MU�OZ BARRA.- Se�or Presidente, quiero hacer resaltar la elegancia de estos dos proyectos de acuerdo. Y digo "la elegancia" porque lo impl�cito en ellos es otra cosa que, al parecer, se evita explicitar. Yo lo har� a continuaci�n. Reitero que ambas iniciativas son sumamente elegantes. Sin embargo, lo que realmente implican es una idea que ha estado rondando pr�cticamente desde 1990 hasta la fecha: el traslado del Parlamento a Santiago. �sa es la verdad, y creo que dentro de la posibilidad reglamentaria que tenemos de expresar nuestras opiniones la m�a es v�lida. Entre 1990 y 1995 mi voto siempre fue incondicionalmente por la permanencia del Congreso en Valpara�so. Con posterioridad me di cuenta de que era una utop�a y de que esa buena idea se perdi�, aunque no era imposible. Por eso, con el Senador se�or Horvath presentamos una moci�n con el objeto de construir una ciudad c�vica en Valpara�so o en sus alrededores. Esto no era una utop�a, porque tomando en cuenta todos los bienes que la institucionalidad c�vica y pol�tica del Ejecutivo posee en Santiago se pod�an comprar muchos terrenos aqu� en Valpara�so o en las zonas aleda�as y levantar una sociedad c�vica modern�sima. ��sa es la verdad! Las iniciativas que hoy estamos analizando, donde muy inteligente y elegantemente se establece que las Comisiones podr�n constituirse en cualquier parte del pa�s, significan entregar una se�al respetuosa al pa�s; pero en el fondo implican -repito- buscar caminos para ir trasladando de a pedacitos el Congreso a Santiago. Ahora, se�or Presidente, voy a plantear lo siguiente. Mi voto est� disponible para cuando el Ejecutivo env�e al Senado un proyecto de ley en orden a trasladar el Parlamento a la Capital. Y lo respaldar� porque no es factible que el Senado o la C�mara de Diputados funcionen con normalidad, si todo el poder pol�tico se encuentra en Santiago. Aclaro que mi pronunciamiento favorable recaer� en el eventual proyecto que se env�e para trasladar el Congreso a la Capital. Pero no me parece justo crear en esta ocasi�n una verdadera babel, porque como los martes se sesionar� en Valpara�so los Senadores de Regiones, que alojamos permanentemente aqu�, deberemos partir a Santiago corriendo en la noche para asistir a las Comisiones los mi�rcoles en la ma�ana, volver de carrerita al Parlamento y luego regresar all�. Este constante ir y venir ser� francamente una locura. En caso de que se apruebe el texto sustitutivo propuesto por la Comisi�n de Constituci�n, ser�a partidario de acoger la indicaci�n al inciso segundo formulada por algunos se�ores Senadores. Y si en el inciso tercero se eliminara la expresi�n "Con todo", quedar�a as�: "Podr�n sesionar en una ciudad distinta de aquella en que la Sala celebre sus sesiones, s�lo los d�as en que el Senado no se re�na.". En esa forma se dar�a la sensaci�n de que verdaderamente todos creemos lo que aqu� se ha dicho: "�Ah, los Parlamentarios llegar�n hasta la ciudadan�a: viajar�n a las Regiones para escuchar a sus habitantes!". Pero como eso no es verdad, anuncio que me pronunciar� en contra. Tal vez sea el �nico Senador que proceda as�, pero estimo que lo que est� en juego es otra cosa. Lo propuesto es simplemente una pirotecnia destinada a ir afianzando algo con lo cual concuerdo, pero derechamente, no por esta v�a lateral. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Vega. El se�or VEGA.- Se�or Presidente, yo miro el problema desde un punto de vista m�s pr�ctico. Desde hace varios a�os hemos venido sosteniendo lo complejo que resulta analizar proyectos que necesitan el apoyo de la opini�n t�cnica de muchos. Desgraciadamente, esos muchos no se hallan en Valpara�so. Yo vot� a favor de la sede del Congreso en esta ciudad, pero considero que los integrantes de los �rganos t�cnicos deben movilizarse. La Comisi�n es una herramienta de trabajo encargada de estudiar los proyectos en sus aspectos t�cnicos, que con frecuencia son sumamente multifac�ticos y requieren de una ayuda que a veces en esta ciudad no se encuentra. Por ello, desde la perspectiva de la eficiencia, es absolutamente leg�timo que las Comisiones puedan reunirse en Regiones, y no s�lo en la Capital. En varias oportunidades he debido trabajar en otros lugares del territorio y en todas ellas eso contribuy� a la eficiencia y prop�sito de la correspondiente iniciativa legal. No obstante lo anterior, recuerdo que a comienzos del mes pasado se trat� la proposici�n de archivo de un total de 41 proyectos. Si en aras de mayor eficiencia procuramos reunirnos en Santiago o en cualquier otra Regi�n de Chile -lo estimo leg�timo-, con propuestas como la indicada no se satisface la necesidad del Senado de dar t�rmino a las distintas iniciativas y materializarlas. Hasta hace poco hab�a 216 proyectos en tr�mite. De ellos, 50 � 60 se mandaron al archivo. Y, no obstante que requirieron el trabajo de diferentes expertos y cumpl�an una necesidad del desarrollo nacional, sea econ�mica, social o pol�tica, quedar�n archivados sin que nadie los reeval�e. A mi juicio, deber�amos enfrentar el problema y analizar esos proyectos, volver a evaluarlos, efectuar una reingenier�a de los procedimientos vigentes en esta Corporaci�n y de alguna manera ponerlos en marcha nuevamente. Otro problema paralelo al mencionado (y una de las razones por las cuales se enviaron al archivo esos 50 � 60 asuntos) es la carga de trabajo de cada Comisi�n. La de Constituci�n, Legislaci�n, Justicia y Reglamento tiene en estudio 60 proyectos, que se dividen en dos: reglamentaciones y justicia, y constituci�n. O sea, en la pr�ctica hay dos Comisiones. Me pregunto si es adecuada tal divisi�n, en circunstancias de que existen Comisiones con un solo proyecto para su estudio, o ninguno, y 6 � 7 de ellas tienen alrededor de 10. En consecuencia, el trabajo fuera de la sede del Parlamento no fomentar� de modo importante la eficiencia de la labor que realizamos. Ser�a menester tomar una serie de medidas tendientes a poner en marcha un sistema destinado a equilibrar un poco el trabajo del resto de las Comisiones con estos cuarenta proyectos, que son importantes, entre ellos el relativo a astronom�a, por ejemplo; el llamado "ALMA en el norte de Chile, e inclusive el que ahora estamos discutiendo en la Sala, que es de gran importancia. Hay otros, como el relativo a fomento de otros sistemas astron�micos, que son muy costosos y que esperan convertirse en ley. Debe agregarse el proyecto sobre m�sica chilena, el que modifica el C�digo de Aguas, el concerniente al bosque nativo, el de los pueblos ind�genas, el relacionado con el voto de ciudadanos chilenos que viven en el extranjero desde 1991, etc�tera. Carecemos de un sistema o de un departamento o de una comisi�n para evaluar tales iniciativas, asignar prioridades, conversar con los Ministerios pertinentes y energizarlas nuevamente para ponerlas en el flujo de estudios de cada una de las Comisiones. En resumen, en primer t�rmino estoy de acuerdo en que las Comisiones sesionen en las distintas regiones del pa�s; ello constituye una necesidad por la complejidad de ciertos proyectos. En segundo lugar, estimo imprescindible organizar un departamento o una comisi�n especial, que a mi juicio deber�a trabajar bajo la direcci�n del se�or Vicepresidente, para posibilitar el an�lisis de las iniciativas que se encuentran en desarrollo, asign�ndoles las correspondientes prioridades para revalidarlas y situarlas dentro del proceso de desarrollo. Ello, porque todas ellas son importantes para el desarrollo de Chile. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Orpis. El se�or ORPIS.- Se�or Presidente, no di la unanimidad, no s�lo por el tenor de la indicaci�n, sino tambi�n por lo propuesto; es decir, estoy de acuerdo con el texto vigente. Al respecto, entregar� mis fundamentos. Nunca el Parlamento va a alcanzar relevancia mientras se mantenga una discusi�n permanente sobre el lugar en que funcione, o si comienza a trasladarse de a poco. S� tendr� importancia y trascendencia el d�a en que claramente se establezca su sede y as� lo entienda el pa�s entero. Entonces vendr�n a sus �rganos de estudio los t�cnicos, el Ejecutivo y todas las autoridades. �ste es un asunto pendiente. Mientras se mantenga en estado h�brido, cada vez tendr� menor importancia. A mi juicio, independiente del lugar en que se encuentre el Congreso, los acuerdos de las Comisiones deben tomarse en la sede del Parlamento. Se podr� visitar las distintas regiones o trasladarse a diversas localidades; pero el lugar natural para tomar decisiones es �ste. El texto vigente no impide en caso alguno que las Comisiones viajen a las regiones, en visitas de car�cter excepcional. Lo que ocurre es que los acuerdos de esas Comisiones deben tomarse en la sede del Congreso, sin considerar el lugar en que �ste trabaje. Siempre he estado por la permanencia de la sede en Valpara�so, porque creo que constituye un s�mbolo regional; pero me parece que con el sistema h�brido de no tomar las decisiones que corresponde, se le hace el peor favor al Poder Legislativo. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Senador se�or N��ez. El se�or N��EZ.- Se�or Presidente, estamos retrotrayendo la situaci�n a un debate que ya tuvimos hace dos a�os y medio. Entiendo perfectamente a los nuevos Honorables colegas que no participaron en �l. Pero el asunto ha originado largas discusiones, que nadie quiere repetir. Quienes hemos presentado la moci�n, lo hicimos nada m�s que para facilitar las cosas. Hay una resoluci�n del Senado conforme a la cual hemos solicitado al Presidente de la Rep�blica que, en alg�n instante, cuando �l lo estime conveniente, env�e un proyecto relativo a la cuesti�n de la sede del Parlamento. Pero la discusi�n ya est� cerrada, aunque algunos hayamos venido planteando desde un principio la necesidad de que las C�maras vuelvan a Santiago. Sin embargo, �se es otro tema. No estamos en la idea de volver a hablar sobre un tema ya resuelto. Lo �nico que hemos tratado de proponer algunos �lo que es perfectamente posible de modificar sobre las base de las indicaciones presentadas por el Senador se�or Romero y otros Honorables colegas- es regularizar algo obvio: algunas Comisiones ya funcionan en Santiago. Regularicemos eso. Hagamos posible que all� tomen acuerdos, los que se pueden ratificar posteriormente en la sede oficial. Se trata nada m�s que de eso. Si, adem�s, podemos sesionar en otros lugares del pa�s �como lo propone el Senador se�or Romero-, estoy de acuerdo. Lo que no apruebo es su indicaci�n consistente en que tengamos que rendir cuentas mensualmente a la Comisi�n de R�gimen Interior. �sta es responsable de atender problemas administrativos, como Su Se�or�a lo sabe, por cuanto fue Presidente del Senado. Por eso no me gusta la idea. R�gimen Interior no tiene mucho que ver con el trabajo propiamente legislativo. Sobre las Comisiones que funcionen en Santiago o en otros lugares del pa�s (espero que la de Miner�a, que presido, pueda hacerlo pronto en Copiap� y en Antofagasta), es perfectamente posible que tomen acuerdos de los cuales se informar� a los miembros de ellas que no asistan, o a los Comit�s, si as� se estima conveniente, pero no a la Comisi�n de R�gimen Interior, porque no me parece pertinente. En cuanto a informar trimestralmente a la Sala, pienso que con ello nos estar�amos "pisando la cola"; no vamos a entregar esa informaci�n. Me parece bien la idea de que podamos sesionar en cualquier lugar del territorio; y regularizar la situaci�n referente a la sede de Santiago, porque ya hay Comisiones que trabajan all� frecuentemente. Si no lo hacemos, eso se podr�a calificar como de hipocres�a, porque muchas est�n sesionando all� en una u otra proporci�n. Ellas realizan un muy buen trabajo. Todos estamos contestes en que debemos aprovechar los d�as lunes y jueves. Si podemos avanzar en algunas materias y profundizar su an�lisis con los materiales de que disponemos en Santiago y que no est�n ac�, miel sobre hojuelas, porque ello significa que mejoraremos el proceso legislativo. Insisto: nadie pretende discutir nuevamente la ubicaci�n de la sede del Congreso a prop�sito de estas indicaciones. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Zurita. El se�or ZURITA.- Se�or Presidente, creo que estamos debatiendo sobre una modalidad de trabajo que, en el hecho, ya est� funcionando. Me asalta una duda: si las Comisiones hubiesen seguido funcionando en la Casa de Velasco y no en el viejo edificio del Congreso, �habr�a surgido esta indicaci�n? Me asaltan dudas. Creo que el trabajo de Comisiones en Santiago tiene una raz�n de ser. Es que el tiempo no alcanza aqu�. Sin embargo, all� se logran los acuerdos, y hay que venir a Valpara�so a "santificarlos", por as� decir. La indicaci�n en debate pone t�rmino a una farsa, porque sencillamente los acuerdos de all� son tan v�lidos como los adoptados aqu�. Apoyo la indicaci�n. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Novoa. El se�or NOVOA.- Se�or Presidente, s�lo quiero se�alar que no est� presente ac� la idea de abrir debate sobre la ubicaci�n de la sede del Congreso. Soy partidario de que �ste permanezca en Valpara�so, pero �sa es una materia ajena al objeto de la moci�n. �sta trata, b�sicamente, de facilitar el trabajo de las Comisiones y de reconocer en el Reglamento algo que ocurre, ya que hay proyectos de ley que, por su complejidad, requieren de un trabajo permanente de las Comisiones, y de hecho �stas funcionan en Valpara�so y en Santiago. Tambi�n hay materias de estudio que se resolver�an mucho mejor en la regi�n respectiva. �se es el prop�sito. Por otra parte, el incluir en esta norma reglamentaria la idea de que se informe a la Comisi�n de R�gimen Interior tiene por objeto lo siguiente: la realizaci�n de sesiones de Comisi�n fuera de la sede del Congreso importa transporte y vi�ticos para el personal. Me parece conveniente que la Comisi�n de R�gimen Interior est� peri�dicamente informada de los gastos en que se incurre por tales conceptos. Tengo entendido que �se es el prop�sito, �nica y exclusivamente. Desde ese punto de vista, el informe trimestral a la Sala podr�a omitirse, ya que el objetivo de informar a la Comisi�n de R�gimen Interior es cuidar los aspectos de tipo administrativo y financiero. Por eso, estoy de acuerdo con eliminar el informe trimestral, porque no tiene sentido que la Sala entre a discutir cu�ntas veces se reuni� una Comisi�n en Valpara�so y cu�ntas en otro lugar fuera de la sede oficial. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Gazmuri, �ltimo inscrito. El se�or GAZMURI.- Se�or Presidente, voy a votar favorablemente la proposici�n del Senador se�or N��ez en el sentido de que se fusionen las dos indicaciones. Entiendo que se trata de un asunto pr�ctico; nada de fondo respecto de la ubicaci�n del Congreso. Sobre tal materia cada uno tiene su opini�n. Comprendo que el efecto pr�ctico b�sicamente ser� mejorar el trabajo de las Comisiones, y que trabajaremos en Santiago y en Valpara�so. En ese sentido, estando de acuerdo con que tambi�n se pueda sesionar en otras regiones del pa�s, desde el punto de vista comunicacional no me parece que esto se presente como lo que esencialmente no es, en el sentido de que va a ser infrecuente el funcionamiento en regiones, para no generar expectativas que despu�s no se van a cumplir. No nos hagamos trampa nosotros mismos. De hecho, ello ha ocurrido por ser necesario. Yo en m�s de alguna oportunidad he participado en una Comisi�n que no funcion� en el edificio del Congreso; pero el efecto pr�ctico de la enmienda al Reglamento es que se va a mejorar mucho el trabajo del Senado. Porque, en verdad, este corre y vuelve entre Santiago y Valpara�so hace que en la semana perdamos dos d�as por lo menos, que podr�an ser aprovechados por algunas Comisiones. Y creo que �sa es suficiente explicaci�n como para aprobar el proyecto. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Sabag. El se�or SABAG.- Se�or Presidente, no cabe duda de que el debate ha enriquecido las ideas para poder llegar a un acuerdo quiz�s un�nime. Ha sido muy clara la exposici�n del Honorable se�or N��ez en el aspecto de la rendici�n de cuentas, pero el Senador se�or Novoa lo ha aclarado, yo dir�a, muy pertinentemente. Es evidente la necesidad de rendir cuenta a la Comisi�n de R�gimen Interior, porque, al sesionar fuera de la sede oficial se incurre en gastos, los que deben ser conocidos por dicho organismo. Y coincido tambi�n plenamente con Su Se�or�a en cuanto a que la rendici�n de cuentas a la Sala estar�a absolutamente de m�s, raz�n por la cual propongo concretamente que eso se elimine. En todo caso, lo que debatimos es c�mo normalizar algo que en la pr�ctica hemos estado haciendo por la adecuada marcha del Senado. Muchas Comisiones han sesionado los lunes, los jueves y los viernes, y lo �nico que han debido hacer despu�s es ratificar sus acuerdos. Yo dir�a que con lo propuesto daremos facilidades a un sinn�mero de funcionarios p�blicos que por el hecho de venir a Valpara�so pierden todo el d�a, lo que resta eficiencia a su desempe�o. Por lo tanto, aqu� no est� en discusi�n sino el dar una mayor eficiencia al trabajo parlamentario, y fundamentalmente a las Comisiones. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Parra. El se�or PARRA.- Se�or Presidente, no cabe duda de que la racionalidad y el realismo aconsejan aprobar la reforma presentada. Y no cabe duda tambi�n de que la mejor f�rmula es la que se introduce mediante una nueva indicaci�n al proyecto de acuerdo en debate. No obstante ese convencimiento, me voy a abstener en la votaci�n, porque tengo dudas respecto a la constitucionalidad de la reforma. Mis dudas surgen, en primer lugar, del texto del art�culo 60, n�mero 17, de la Constituci�n Pol�tica, que reserva a la ley la fijaci�n del lugar donde el Congreso Nacional debe efectuar sus sesiones, lo que abarca naturalmente no s�lo las sesiones de Sala, sino tambi�n las de Comisiones. La ley 18.678 cumpli� tal mandato constitucional y fij� como domicilio del Congreso y como sede de sus sesiones la ciudad de Valpara�so. La ley 18.918 sirvi� de base para la dictaci�n del Reglamento que separadamente dicta cada una de las C�maras del Congreso y que no constituye naturalmente una ley. Y en el texto de esa normativa, en sus art�culos 2� y 4�, encontramos claramente definido el campo normativo que puede abarcar el Reglamento, en este caso, del Senado. No me parece que por la v�a reglamentaria podamos modificar una norma legal. Por el contrario, creo que lo que habr�a correspondido en este caso es modificar el art�culo 1� de la ley 18.678. Sin embargo, sin hacer reserva de constitucionalidad, lo �nico que hago es salvar mi propia duda en esta materia; y por esa raz�n me voy a abstener en la votaci�n. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Sin perjuicio de la abstenci�n y votos en contra anunciados, y de las intervenciones habidas, quiero consultar a la Sala si respecto de la indicaci�n de los Senadores se�ores Romero, Novoa, Arancibia, Fern�ndez y Larra�n, hay voluntad para aprobar que la cuenta que deber�n dar las Comisiones sea entregada a la Comisi�n de R�gimen y con car�cter trimestral, en vez de mensual. �Habr�a acuerdo? El se�or ROMERO.- �Me permite una moci�n de orden, se�or Presidente? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- S�, se�or Senador. El se�or ROMERO.- Yo creo que ante el debate producido, lo que corresponde es que el proyecto vuelva a la Comisi�n, a fin de que nos haga una proposici�n... El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- No, si es una cosa muy f�cil. Para qu� un debate mayor, cuando hay acuerdo. Basta con se�alar: "debiendo dar cuenta trimestral de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior". �Habr�a acuerdo? El se�or MU�OZ BARRA.- �Me permite, se�or Presidente? El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra Su Se�or�a. El se�or MU�OZ BARRA.- Se�or Presidente, hubo un planteamiento de un se�or Senador, quien inclusive expres� dudas de constitucionalidad. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- La Mesa no tiene dudas al respecto. El se�or MU�OZ BARRA.- De tal manera que lo insinuado por el Senador se�or Romero, a mi juicio, es factible: que los proyectos vuelvan a Comisi�n. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se�or Senador, yo no tengo dudas de constitucionalidad y tampoco las tuvo la Comisi�n de Constituci�n, que despach� el proyecto. El se�or MORENO.- As� es, se�or Presidente. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Por lo tanto voy a someter a votaci�n el proyecto de acuerdo y luego la indicaci�n, a la que luego se le podr�n hacer las correcciones del caso. El se�or MU�OZ BARRA.- Pido votaci�n nominal. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- De acuerdo. En votaci�n nominal el proyecto de acuerdo. El se�or HOFFMANN (Secretario).- El se�or Presidente ha puesto en votaci�n general el proyecto de acuerdo sobre la base del texto que Sus Se�or�as tienen a la vista. --Se aprueba en general el proyecto de acuerdo (31 votos contra 5 y una abstenci�n). Votaron por la afirmativa los se�ores Aburto, Canessa, Cantero, Cordero, Chadwick, Espina, Fern�ndez, Flores, Foxley, Frei (do�a Carmen), Frei (don Eduardo), Gazmuri, Horvath, Larra�n, Lavandero, Mart�nez, Matthei, Moreno, Naranjo, Novoa, N��ez, P�ez, Pizarro, Romero, Ruiz-Esquide, Sabag, Vega, Viera-Gallo, Zald�var (don Adolfo), Zald�var (don Andr�s) y Zurita. Votaron por la negativa los se�ores Garc�a, Mu�oz Barra, Orpis, Prokurica y R�os. Se abstuvo el se�or Parra. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Como se expres�, los Honorables se�ores Romero, Novoa, Arancibia, Larra�n y Fern�ndez formularon indicaci�n para sustituir el art�culo �nico por el siguiente: "Sustit�yese el inciso segundo del art�culo 38 del Reglamento del Senado, por los siguientes: "Por acuerdo de la mayor�a de sus miembros, las Comisiones podr�n constituirse, sesionar y adoptar acuerdos en cualquier parte del territorio nacional, debiendo dar cuenta mensualmente de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior y trimestralmente a la Sala.". "Con todo, podr�n sesionar en una ciudad distinta de aquella en que la Sala celebre sus sesiones s�lo los d�as en que el Senado no se re�na.". Por nuestra parte, con el se�or Vicepresidente presentamos indicaci�n para reemplazar en el inciso segundo del referido texto, la frase: "debiendo dar cuenta mensualmente de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior y trimestralmente a la Sala" por la siguiente: "debiendo dar cuenta trimestralmente de la realizaci�n de estas sesiones a la Comisi�n de R�gimen Interior". --Con la misma votaci�n anterior, se aprueban ambas indicaciones, y queda despachado el proyecto de acuerdo. El se�or N��EZ.- Se�or Presidente, al final del inciso cuarto habr�a que sustituir la frase "s�lo los d�as en que el Senado no se re�na" por "s�lo los d�as en que el Plenario del Senado no se re�na", porque la palabra "Senado" comprende todo, incluso las Comisiones. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene raz�n, pero, en vez de "Plenario del Senado", resulta m�s apropiado hablar de "la Sala del Senado". La Secretar�a har� las adecuaciones redaccionales correspondientes. --As� se acuerda. Terminado el Orden del D�a. VI. INCIDENTES PETICIONES DE OFICIOS El se�or HOFFMANN (Secretario).- Han llegado a la Mesa diversas peticiones de oficios. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Se les dar� curso en la forma reglamentaria. ------------------ --Los oficios cuyo env�o se anuncia son del tenor siguiente: De los se�ores CARIOLA, CHADWICK, CORDERO, ESPINA, GARC�A, HORVATH, LARRA�N, MORENO, MU�OZ BARRA, NARANJO, ORPIS, P�EZ, PARRA, PROKURICA, R�OS, ROMERO, RUIZ-ESQUIDE, SABAG, STANGE, VIERA-GALLO Y ZALD�VAR (DON ANDR�S): A S.E. el Presidente de la Rep�blica, solicit�ndole la MODIFICACI�N DE NORMATIVA QUE REGULA LA COMISI�N DE DISTORSIONES Y LA ADOPCI�N DE MEDIDAS CONTRA EL PROTECCIONISMO EN EL MERCADO INTERNACIONAL. De la se�ora FREI (do�a Carmen): A la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores, recab�ndole INFORMACI�N SOBRE IMPLICANCIAS DE TRATADO CON UNI�N EUROPEA EN LA ECONOM�A CHILENA, EN ESPECIAL EN LO RELATIVO A PESCA ARTESANAL Y PEQUE�A Y MEDIANA MINER�AS. Del se�or HORVATH: A los se�ores Ministros de Relaciones Exteriores y de Obras P�blicas y al se�or Director Nacional del Servicio Nacional de Turismo, acerca de INCLUSI�N DENTRO DE CAMINOS MENORES DE INTEGRACI�N FRONTERIZA POR MEJORAR O REALIZAR EL QUE UNE SECTOR DE CANDELARIO MANSILLA CON FRONTERA ARGENTINA EN RIBERA SUR DEL LAGO O'HIGGINS (Und�cima Regi�n). Del se�or MORENO: Al se�or Intendente de la Sexta Regi�n, acerca de ESTADO DE AVANCE DE PROYECTOS SOBRE CONSTRUCCI�N DE GIMNASIO MUNICIPAL; MANTENCI�N DE �REAS VERDES, DE EDIFICIOS MUNICIPALES Y DE PINTURAS PEATONALES, Y PODA Y FORMACI�N DE �RBOLES, TODOS EN GRANEROS (Sexta Regi�n). Del se�or ROMERO: A la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores, solicit�ndole interceder ante las autoridades argentinas para levantar PROHIBICI�N DE COMPRA DE LIEBRES SIN FAENAR PARA SU INTERNACI�N A COIHAIQUE (Und�cima Regi�n). ----------------- El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En Incidentes, el primer turno corresponde al Comit� Mixto Uni�n Dem�crata Independiente e Independientes, que ha cedido el tiempo necesario al Honorable se�or Romero. Tiene la palabra Su Se�or�a. SATISFACCI�N POR MANTENIMIENTO DE RETENES EN ZONAS RURALES DE QUINTA REGI�N. OFICIOS El se�or ROMERO.- Se�or Presidente, en esta oportunidad quiero destacar el reciente anuncio del se�or General Director de Carabineros en orden a suspender la ejecuci�n del plan de redestinaci�n del contingente policial, el cual, entre otras cosas, contemplaba el cierre de un importante n�mero de retenes a lo largo del pa�s. En efecto, respecto de las unidades de Quebrada de Herrera y Rinconada de Guzmanes, en la comuna de Putaendo, y los de Valle Hermoso, Catapilco, Chincolco, Alicahue y Placilla, en la provincia de Petorca, estaba considerado terminar con su actual servicio y ubicaci�n, a fin de distribuir de otra forma el recurso humano de la polic�a. A ra�z de lo anterior, mediante diferentes reuniones en terreno con sectores vecinales y atendiendo la opini�n de los Alcaldes de Petorca, Putaendo, La Ligua, Cabildo y Zapallar, pude constatar el sentimiento de frustraci�n y decepci�n que se estaba apoderando de los vecinos de dichos sectores, dado que la permanencia por a�os de los cuarteles policiales hab�a hecho que �stos se constituyesen en un s�mbolo o se�al de seguridad vecinal para quienes viven en zonas rurales y apartadas de los centros urbanos. Es as� como ya el a�o pasado, en el mes de octubre, pude plantear mis aprensiones sobre el caso al General de la Quinta Zona de Carabineros aqu� en Valpara�so, encontrando comprensi�n en �l sobre este asunto, pero tambi�n comprob� que la resoluci�n del eventual traslado de los retenes a�n estaba estudi�ndose por instancias superiores. Del mismo modo, la semana pasada tuve la ocasi�n de reunirme con el se�or Ministro del Interior, don Jos� Miguel Insulza, a quien le reiter� tales conceptos, que a mi parecer eran atinentes para evitar la concreci�n de la referida medida de traslado de las unidades de los sectores rurales. Por ello, se�or Presidente, el anuncio del General Cienfuegos de haber "escuchado el clamor ciudadano" nos tiene muy satisfechos, ya que pudimos ser parte de los muchos puentes que diversos sectores tendieron para que el cierre de los retenes no se concretara. Quiero destacar, asimismo, que este episodio ha sido una oportunidad en que Carabineros de Chile ha visto revalorada su posici�n, pues se pudo comprobar que en las localidades rurales y apartadas la ciudadan�a ve el trabajo policial como un elemento permanente en su diario vivir, que se impone por presencia, y que la labor del carabinero no s�lo adquiere dimensiones policiales, sino que adem�s presenta ribetes sociales, deportivos, de salubridad e incluso tur�sticos. Quienes tenemos el mandato de representar a vastos sectores ciudadanos no podemos dejar de valorar que esta decisi�n es tambi�n una se�al de respeto y reconocimiento por quienes han optado por un estilo de vida que mantiene lo mejor de nuestras tradiciones y de un Chile y una ruralidad que son sin�nimo de gente esforzada, trabajadora, humilde y honrada. Por ello, se�or Presidente, quien habla no puede dejar de mencionar en este Hemiciclo que sus amigos de Valle de Los Olmos, Chincolco, Quinquimo, Valle Hermoso, Placilla, Catapilco, Rinconada de Guzmanes, El T�rtaro, Alicahue y Quebrada de Herrera, recibir�n esta noticia con alivio, con tranquilidad y con la esperanza de que las pol�ticas p�blicas se acerquen efectivamente a la gente y no promuevan la migraci�n de la gente del campo a la ciudad y, en definitiva, el t�rmino de una manera de ver y sentir la vida, como es el orden rural. Solicito, se�or Presidente, que se oficie a los Alcaldes y Concejales de Petorca, Putaendo, Cabildo, La Ligua y Zapallar transcribi�ndoles mis palabras. Muchas gracias. --Se anuncia el env�o de los oficios solicitados, en nombre del se�or Senador, en conformidad al Reglamento. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Larra�n. VULNERACI�N DE NORMATIVA PROTECTORA DEL AZ�CAR. OFICIO El se�or LARRA�N.- Se�or Presidente, creo que para todos los miembros de esta Corporaci�n el problema del az�car es un tema conocido. Como se recordar�, desde hace muchos a�os existen las bandas de precios, que tienen como prop�sito estabilizar el valor de los productos acogidos a ellas, que son el trigo, la harina de trigo, el aceite -u oleaginosas- y el az�car. Gracias a ellas durante muchos a�os este �ltimo producto ha estado, de alguna manera, resguardado de la volatilidad que presentan sus precios. Sin embargo, por la gravedad que ha llegado a alcanzar tal situaci�n -el mercado internacional del az�car es uno de los m�s intervenidos en el mundo-, fue necesario dictar una ley complementaria que autorizara, para el caso de este producto, el aumento de las salvaguardias �que permite, incluso, la Organizaci�n Mundial del Comercio- hasta el 98 por ciento del arancel, con el fin de evitar que las mercanc�as que ingresan a Chile afecten y alteren el precio del az�car nacional. A pesar de lo dif�cil que fue ese debate legislativo -que gener� mucha inquietud-, hemos podido constatar en los �ltimos meses que, no obstante las bandas de precios y la ley que autoriza elevar las salvaguardias hasta el 98 por ciento �ello posibilita un cultivo que asegura la estabilidad y actividad de miles de remolacheros y de trabajadores en la industria azucarera-, en el hecho, por decisiones adoptadas al interior de la Direcci�n de Aduanas, se est� burlando la legislaci�n vigente. �Por qu�, se�or Presidente? Por la sencilla raz�n de que est� llegando a Chile, desde distintos puntos del extranjero, az�car mezclada con otros elementos. Y, pese a que las mezclas pueden tener un 98 � 99 por ciento de aqu�lla, por la circunstancia de que vienen con cacao, con alg�n producto c�trico o de otro tipo, en la Direcci�n de Aduanas no las est�n catalogando bajo la glosa del az�car, sino que entran simplemente por otras glosas y, por lo tanto, no se les aplican ni las bandas de precios ni las cl�usulas de salvaguardia vigentes. �Qu� significa eso? Que ingresan con un arancel de 7 por ciento que pagan todos los art�culos provenientes del extranjero, burlando de esta forma la normativa actual, que busca dar estabilidad y resguardo a nuestros remolacheros, a nuestros productores y a la industria del az�car frente a la actitud proteccionista internacional que existe en este �mbito. Por tales motivos, se�or Presidente, creo que no es posible permanecer indiferente ante una situaci�n que est� amenazando de nuevo la subsistencia del cultivo de la remolacha en el pa�s y, consecuentemente, la de la propia industria azucarera. De mantenerse estas pr�cticas, todos los esfuerzos legislativos que se han hecho en esta materia quedar�n superados por los acontecimientos. Por eso, se�or Presidente, quiero hacer notar que es imperioso que la Direcci�n de Aduanas revise su procedimiento y entienda que cuando un producto es en esencia el mismo que aquel cautelado y resguardado por una legislaci�n especial, �sta no puede ser burlada bajo el pretexto de que ese producto entra combinado con otro y que, por lo tanto, se lo considera dentro de una glosa distinta, sin quedar sujeto a los aranceles que realmente corresponder�a aplicar. A nadie escapa que cuando un producto est� compuesto en 99 por ciento de una materia determinada, no puede pasar bajo un mecanismo alternativo, porque ello constituir�a una burla a nuestra legislaci�n. Lamentablemente, en varios casos la referida repartici�n ha acogido esas solicitudes y, de hecho, est�n ingresando numerosos de estos productos. �Qu� significa esto? Que muchas industrias nacionales que necesitan del az�car, en lugar de adquirir la que se produce en Chile, y para la cual existen normas especiales, simplemente est�n comprando mercader�as que se importan como mezclas. La Comisi�n de Agricultura del Senado, en conocimiento de esta situaci�n, envi� hace tres o cuatro semanas un oficio al se�or Ministro de Hacienda solicit�ndole que se revisara ese proceder. Lamentablemente, ello todav�a no ha ocurrido. Por lo tanto, la situaci�n se ha agravado, por la sencilla raz�n de que la industria azucarera comienza a enfrentar dificultades para colocar su producto. Por lo mismo, a los productores de remolacha, que empiezan a recibir sus liquidaciones a contar del mes de mayo, se les podr�n aplicar cl�usulas en virtud de las cuales, en lugar de percibir 47 d�lares por tonelada, como les corresponde, se les terminar� pagando 39, lo que significa simplemente que no podr�n cubrir sus costos. Como no es aceptable tal situaci�n, debemos atacarla en su origen. El Servicio Nacional de Aduanas no ha sabido entender que este producto, que entra mezclado, debe ser considerado como az�car, porque de lo contrario se burla de una manera demasiado obvia y violenta nuestra legislaci�n. Por los antecedentes expuestos, se�or Presidente, solicito que se oficie, en mi nombre, al se�or Ministro de Hacienda, con el fin de hacerle presente esta delicada situaci�n, porque no obstante todos los esfuerzos realizados por el Ejecutivo al presentar la iniciativa de ley que mencion� y que fue finalmente aprobada por el Parlamento, est� siendo transgredida por decisiones que merecen el m�s absoluto rechazo. Pido, entonces, que se rectifique ese procedimiento, de modo tal que todos los productos que entren al pa�s como mezclas que contengan un porcentaje superior a 95 � 97 por ciento de az�car sean considerados como tal y se les apliquen los aranceles correspondientes. S�lo as� no se burlar� la ley y se cumplir� el objetivo tenido en vista por el legislador cuando extendi� al az�car y a las bandas de precios que la cautelaban las salvaguardias aprobadas por ley el a�o pasado. Por todas estas consideraciones, solicito que se curse la petici�n que acabo de formular. --Se anuncia el env�o del oficio solicitado, en nombre del se�or Senador, con la adhesi�n de los se�ores Garc�a, Prokurica y Horvath, de conformidad al Reglamento. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En el tiempo del Comit� Renovaci�n Nacional, tiene la palabra el Honorable se�or Prokurica. SITUACI�N POL�TICA DE CHILE EN CONTEXTO SUDAMERICANO El se�or PROKURICA.- Se�or Presidente, el panorama regional sudamericano est� mostrando evidentes se�ales de inestabilidad y fragmentaci�n en algunas sociedades y naciones como Argentina y Venezuela. En ese mismo rumbo aparecen pa�ses como Ecuador y Per�, en donde se anuncia un peligroso descenso de la popularidad de sus Presidentes y de la clase pol�tica. Ante la delicada situaci�n de naciones cercanas, en Chile �en especial las autoridades representativas-, debemos hacer un esfuerzo por prevenir cualquier s�ntoma de contagio que nos pueda afectar. Parte de la funci�n que debemos cumplir como Senadores es justamente la de advertir estos peligros, para aplicar las acciones que correspondan y evitar as� caer en el desmembramiento social. Obviamente, la situaci�n nacional dista mucho del cr�tico espect�culo que viven nuestros vecinos. Chile no es Venezuela, pero, sin duda, no es el �ptimo que todos queremos para nuestra patria. Observamos algunos s�ntomas que necesariamente debemos detener. Vemos cada vez m�s divisiones, un esp�ritu polarizador y una creciente falta de respeto hacia nuestras autoridades. Escisiones, pugnas, diferencias y descalificaciones permanentes son una pr�ctica habitual respecto de las autoridades. En lo pol�tico, observamos al Gobierno, y particularmente, al Presidente Lagos, llamando a enfrentar a la Derecha, respondiendo airadamente al �nimo confrontacional que algunos pol�ticos quieren instaurar en nuestra democracia. As�, el Ejecutivo busca m�s bien l�neas de desencuentro que puntos de acuerdo que nos permitan avanzar y reimpulsar el desarrollo; est� proponiendo proyectos que le permitir�an obtener beneficios pol�ticos, en lugar de generar un verdadero beneficio colectivo. En la Concertaci�n, apreciamos ese mismo �nimo beligerante y conflictivo, y en la Alianza por Chile tampoco escapamos a esa situaci�n. En s�ntesis, est� imperando la pr�ctica de la imposici�n y el enfrentamiento por sobre la disuasi�n y el consenso, que es lo que caracteriza a las democracias. Esta pr�ctica de la imposici�n se nota en especial en el modo en que discurren las discusiones val�ricas en nuestro pa�s. Lo mismo sucede con el conflicto mapuche, por citar otro ejemplo, y con cualquier otro grupo de poder que, para conseguir sus objetivos, se toma los caminos, provoca incendios o recurre a m�todos de fuerza. Vemos, entonces, que en el pa�s faltan estadistas y sobran politiqueros; escasean l�neas comunes y sobran diferencias. A la inversa de lo que se hab�a especulado y de lo que muchos pens�bamos, el per�odo que sigui� a la elecci�n parlamentaria de diciembre, en donde hubo un debate, una presi�n y una competencia pol�tica, no se ha caracterizado por una realizaci�n presidencial. Todo lo contrario, se abri� espacios a la hegemon�a de posiciones extremas, donde la figura y potestad del Presidente de la Rep�blica se ha visto entrampada en la lucha de los partidos por definir el rumbo de la gesti�n gubernamental, sin que el Mandatario pueda demostrar su calidad de estadista, lo que socava los fundamentos b�sicos del ejercicio del poder. No hemos superado, entonces, la etapa m�s conflictiva de nuestra vocaci�n pol�tica y hemos intensificado la presi�n medi�tica sobre situaciones inentendibles para la ciudadan�a �en especial para quienes sufren la realidad de la cesant�a y la pobreza-, que se sorprende con el espect�culo que dan los grupos de poder y las organizaciones que manejan el pa�s cuando se discuten cosas que nada tienen que ver con la soluci�n de sus problemas. Sin embargo, la democracia tambi�n ofrece per�odos donde priman incentivos positivos a la cooperaci�n. En tales situaciones, es posible encontrar l�neas transversales para lograr acercamientos que beneficien a todo el pa�s. �stas son, por lo tanto, las mejores oportunidades para realizar los proyectos de bien com�n, sentido �ltimo de la competencia por el poder. Chile tiene, precisamente, la posibilidad de entrar en una etapa como la descrita anteriormente. Y nosotros tenemos el deber, la obligaci�n de aprovecharla, porque, de no hacerlo, los costos sociales nos impedir�n seguir ese camino. A nuestro pa�s le hace falta pacificaci�n nacional. Sin embargo, las elecciones de diciembre pasado configuraron nuevos alineamientos al interior del Parlamento que han generado algunos traumas, dificultando el paso a la cooperaci�n ya anunciada por el Presidente Lagos al definir la Agenda Pro Crecimiento consensuada con el empresariado. M�s all� de los temas econ�micos, es posible hacer un verdadero catastro de los nudos gordianos de nuestra sociedad, a trav�s de los proyectos que esperan la confluencia de voluntades para ser tramitados y despachados. Destaca el proyecto de Ley de Rentas Municipales II, modificaci�n que afecta a una ley org�nica constitucional -requiere de los votos de la Centroderecha para aprobarse- y que busca solucionar el problema generado en la administraci�n de los municipios chilenos que han debido asumir nuevas tareas sin el debido financiamiento. Se debe resolver esta situaci�n y avanzar en la descentralizaci�n de los recursos estatales, ojal�, sin aumentar la carga impositiva de los contribuyentes. En materia judicial, aguardan proyectos como los Tribunales de Familia, paso importante para avanzar en las modificaciones a la legislaci�n sobre matrimonio civil; la creaci�n de nuevas salas en las Cortes de Apelaciones de Santiago, San Miguel, Valpara�so y Concepci�n, y el establecimiento del sistema de jueces de turno y de dedicaci�n exclusiva en materia penal. Estos asuntos son fundamentales para asegurar la justicia a la gente de m�s escasos recursos. Con el objeto de ayudar a detener el narcotr�fico, es necesario e indispensable sustituir la ley N� 19.366, que sanciona el tr�fico il�cito de estupefacientes y sustancias psicotr�picas. En materia de educaci�n y cultura, debatiremos sobre el proyecto que crea el Consejo Nacional de Cultura y el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural, respecto de lo cual se debe privilegiar la creaci�n de una estructura simple, descentralizada y que genere beneficios reales. Tambi�n est� en espera el debate sobre los instrumentos necesarios para fomentar la industria audiovisual y musical, que se expande naturalmente a medida que los pa�ses se desarrollan. En cuanto al fomento tecnol�gico, es fundamental definir posiciones en torno de los acuerdos de la OMC, sobre propiedad industrial. Tambi�n debemos acordar medidas para detener la inercia corruptiva del Estado, fijando las bases de los procedimientos que rigen los actos de la Administraci�n P�blica, y regular las responsabilidades de los directores de las empresas del Estado, limitando sus indemnizaciones. Asimismo, es necesaria la creaci�n de bolsas de productos agr�colas, la recuperaci�n del bosque nativo y fomento forestal; el debate sobre el costo de los servicios que prestan las AFP; el proyecto de ley sobre transparencia, l�mite y control del gasto electoral; el plan b�sico de la salud, y la defensa de los puestos de trabajo de miles de chilenos que podr�an perderse hoy dado que la autoridad no ha adoptado medidas para resguardarlos. Ante la enorme realidad que significa la necesaria convergencia de criterios que debemos buscar para sacar adelante todos esos proyectos, cabe preguntarse: �Qu� haremos quienes tenemos un cargo p�blico? �Nada? Todas las iniciativas mencionadas requieren votos de Centroderecha. Sin embargo, la Concertaci�n da muestras de ignorar la importancia de ese sector. Por ejemplo, al conformar la Mesa de la C�mara de Diputados como lo hab�an hecho en los �ltimos cuatro a�os, lamentablemente, se ha sentado un p�simo precedente para la consecuci�n de la nueva mayor�a que el Gobierno precisa para avanzar. El Ejecutivo se enfrenta, entonces, a la disyuntiva de permanecer entrampado en la indefinici�n interna de la Concertaci�n o cimentar un apoyo transversal para cosechar los frutos de la cooperaci�n. Proponemos, pues, avanzar junto con quienes privilegian el bienestar de Chile por sobre todas las cosas, como es nuestra obligaci�n con los m�s despose�dos. Todav�a podemos parar esta loca carrera, que, a mi juicio, nos puede llevar a un desastre. He dicho. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Horvath. RECONSTRUCCI�N DE JUZGADOS Y CORTE DE APELACIONES DE COIHAIQUE. OFICIOS El se�or HORVATH.- Se�or Presidente, el viernes 12 de abril �ltimo, a la una de la madrugada, hubo en la capital de la Regi�n de Ais�n un incendio de proporciones que, pr�cticamente, destruy� en su totalidad los juzgados y, parcialmente, la Corte de Apelaciones de Coihaique. Por la magnitud del siniestro, se requiere, aparte la investigaci�n de las causas, que el se�or Ministro de Justicia concurra al lugar a fin de buscar la f�rmula para, en general, reponer edificios, y en particular -no hay mal que por bien no venga-, reconstruir la Corte de Apelaciones (se encontraba en condiciones bastante precarias), conforme a su jerarqu�a y necesidades. Adem�s, de acuerdo al calendario para la entrada en vigor de la reforma procesal penal, el 16 de diciembre del presente a�o se cumplir� el plazo para que empiecen a funcionar las fiscal�as y las cortes con los procesos orales. Y la verdad es que el lapso fijado, seg�n se aprecia hasta ahora, sobre todo con el invierno de por medio, es bastante exiguo. En tal virtud, solicito oficiar a los Ministerios de Justicia y de Obras P�blicas (a este �ltimo, en la medida en que est� participando a trav�s de su Direcci�n de Arquitectura) para que proporcionen los antecedentes del caso, el monto de los fondos y los plazos considerados tanto para la reposici�n de los inmuebles pertinentes como para la construcci�n de los edificios nuevos. Asimismo, deseo que el Poder Judicial d� a conocer qu� grado de respaldo tienen los distintos procesos, para prevenir a futuro, en caso de que esto pueda volver a ocurrir. --Se anuncia el env�o de los oficios respectivos, en nombre del se�or Senador, conforme al Reglamento. PETICI�N DE ANTECEDENTES SOBRE COSTOS DE EMPRESA DE SERVICIOS SANITARIOS DE AIS�N. OFICIO El se�or HORVATH.- Se�or Presidente, tuve la ocasi�n de reunirme con representantes de la Empresa de Servicios Sanitarios de Ais�n y debatir lo que se plante� en el Senado acerca del costo y la forma como se regulan los servicios sanitarios en el pa�s. Solicito que se oficie a la EMSSA requiri�ndole el env�o de los antecedentes relativos a la estructura de sus costos, particularmente en cuanto a la incidencia que tienen en ellos la energ�a, la densidad de la red, las conexiones y la recuperaci�n a valor presente de las distintas instalaciones, para buscar en forma conjunta medidas que permitan rebajar sustancialmente las tarifas de los servicios de agua potable y alcantarillado. --Se anuncia el env�o del oficio pertinente, en nombre de Su Se�or�a, conforme al Reglamento. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable se�or Garc�a. DISTRIBUCI�N DE RECURSOS A SERVICIOS DE SALUD. OFICIO El se�or GARC�A.- Se�or Presidente, es de conocimiento p�blico la enorme falencia en que se encuentran los hospitales a lo largo de todo el pa�s. Sabemos que faltan los medicamentos m�s indispensables para afrontar los diversos tratamientos; que a los funcionarios se les disminuyeron sus horas extraordinarias, lo cual ha mermado sustancialmente sus ingresos mensuales, y que, en general, existe un ambiente de des�nimo profundo entre los empleados de los servicios de salud, y particularmente de los hospitales, ante la dif�cil situaci�n econ�mica por la que atraviesan, manifestada tambi�n en un alto endeudamiento. Resulta curioso que en tales circunstancias el Ministerio de Salud, cuando ya estamos a fines de abril, a�n no haya distribuido importantes recursos contenidos en la Ley de Presupuestos. Es el caso de 94 mil 295 millones de pesos del Programa de Prestaciones Valoradas y de 39 mil 989 millones de pesos del Programa de Prestaciones Institucionales. Por lo tanto, solicito oficiar a los se�ores Ministros de Hacienda y de Salud con el prop�sito de que, con extrema urgencia, dispongan la distribuci�n de aquellos recursos entre los distintos servicios de salud del pa�s, para mejorar su situaci�n financiera, e informen sobre la forma como se proceder� a ese respecto. El se�or PROKURICA.- Ruego agregar mi nombre, se�or Presidente. El se�or HORVATH.- Y tambi�n el m�o. --Se anuncia el env�o de los oficios solicitados, en nombre del Senador se�or Garc�a, conforme al Reglamento, con la adhesi�n de los Honorables se�ores Prokurica y Horvath. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- En el tiempo del Comit� Socialista, tiene la palabra el Honorable se�or N��ez. CONMEMORACI�N DE D�A INTERNACIONAL DEL TRABAJO El se�or N��EZ.- Se�or Presidente, el 1� de mayo recordaremos un nuevo aniversario del D�a Internacional del Trabajo, lo que nos trae a la memoria el sacrificio de cientos de m�rtires que murieron luchando por mejores condiciones laborales, expresadas en su �poca en la necesidad de limitar la duraci�n de la jornada diaria a 8 horas. Bastante tiempo ha transcurrido desde el 1� de mayo de 1886. Muchos de los objetivos que movieron a esos trabajadores siguen vigentes en la actualidad, aunque en un escenario diferente, que ha hecho cambiar la naturaleza de los problemas laborales y, desde luego, sus soluciones. Las demandas de las personas son hoy, como ayer, por empleo digno y seguro, salarios justos, seguridad laboral, derechos sindicales y condiciones de trabajo decorosas, en un contexto democr�tico que garantice siempre la posibilidad de representar libremente los intereses de los trabajadores. Este requerimiento se refiere no s�lo a quienes est�n organizados, sino tambi�n a los que laboran en actividades informales, a los que no se hallan sindicados, a los que trabajan en malas condiciones ocupacionales, que coexisten generalmente con la pobreza. Vivimos -como sabemos- una �poca en que la internacionalizaci�n de la econom�a y la mundializaci�n de las relaciones de todo orden constituyen fen�menos que debemos asumir con energ�a y enfrentar con la m�xima claridad intelectual, pol�tica y moral. Es fundamental, en ese sentido, la labor de nuestros Gobiernos y la de los organismos internacionales, como la OIT. En dicho escenario, siempre resulta esencial que el sector empresarial tenga la posibilidad de expresar sus opiniones y vea en el nuevo orden mundial oportunidades de mejorar negocios, pero tambi�n de innovar en la organizaci�n del trabajo y el trato a los trabajadores. Las dirigencias sindicales, a su vez, enfrentan un desaf�o particularmente significativo, dado que hoy las tradicionales relaciones del mundo laboral han cambiado sustantivamente, debido, entre otros factores, a los avances tecnol�gicos que han transformado la naturaleza misma del trabajo. Este creciente proceso de inserci�n internacional de nuestro pa�s y la suscripci�n de tratados de libre comercio -hace pocos d�as firmamos un protocolo que nos permitir� contar con un Tratado de Libre Comercio con Europa- constituyen tambi�n una oportunidad para que las materias laborales sean parte sustancial y muy relevante de los acuerdos que nuestro pa�s suscriba. De esta forma podremos avanzar en la armonizaci�n de las legislaciones laborales, en diversos temas, como la seguridad social, salarios, organizaci�n sindical, etc�tera. La competitividad de un pa�s o de una empresa debe estar signada por la calidad y el mayor valor agregado de sus productos y la productividad de sus procesos, pero no por el menor desarrollo de la legislaci�n laboral. No corresponde que el peso de la modernidad y la integraci�n sea asumido s�lo por los trabajadores. Es preciso contar con un Estado fuerte y protag�nico que enfrente los enormes costos sociales que implican los fen�menos de reconversi�n productiva y laboral, la movilidad entre las distintas fuentes de trabajo, la externalizaci�n de funciones y la subcontrataci�n. La protecci�n social de nuestros trabajadores y trabajadoras es una tarea ineludible para un Estado moderno. Asegurar una pol�tica de seguridad social justa y equitativa, leyes laborales protectoras, procedimientos judiciales laborales expeditos y acceso a un seguro de desempleo eficaz, son tareas que se hallan todav�a en el orden del d�a. Los Gobiernos de la Concertaci�n han avanzado en esta materia, no obstante la f�rrea oposici�n que han encontrado en la Derecha pol�tica y econ�mica, la cual sigue intentando vincular sistem�ticamente el desempleo que vive nuestro pa�s a las t�midas reformas laborales que hemos podido aprobar. En este sentido, los avances que representa la reforma laboral reci�n aprobada por el Parlamento, sumados al seguro de desempleo y al incremento en recursos para la capacitaci�n laboral, constituyen un esfuerzo que no puede detenerse. Debemos seguir profundizando los cambios reales y verdaderos, con el objeto de reducir la jornada laboral; incentivar la sindicaci�n de nuestros trabajadores; mejorar las condiciones laborales de las temporeras; impedir el trabajo infantil; mejorar los aspectos relativos a la salud ocupacional y al trabajo en altura, entre muchas otras exigencias que demandan los trabajadores. En tal perspectiva, el anuncio hecho recientemente por el Presidente de la Rep�blica, don Ricardo Lagos Escobar, de promover una reforma a nuestro sistema judicial laboral es muy alentador, toda vez que los derechos del trabajo son letra muerta sin la debida protecci�n jur�dica. Espero que un proyecto como el anunciado nos convoque a todos, sin excepci�n, para as� seguir en la senda de mayor dignificaci�n del mundo laboral. Aprovecho esta oportunidad, se�or Presidente, para honrar una vez m�s la memoria de hombres como Clotario Blest y Tucapel Jim�nez, y a trav�s de ellos, la de tantos dirigentes sindicales que murieron luchando por sus ideales, que fueron perseguidos, que sufrieron c�rcel y destierro. Al mismo tiempo, env�o un saludo a todos los trabajadores y trabajadoras de nuestra patria; a la Central Unitaria de Trabajadores, y, en especial, a todas las personas que, encontr�ndose sin ocupaci�n, siguen luchando contra esta adversidad. Muchas gracias. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- Los Comit�s Institucionales 1 e Institucionales 2 no har�n uso de sus tiempos. En el turno del Comit� Mixto, tiene la palabra el Honorable se�or Mu�oz Barra. AFIRMACIONES DE SENADOR SE�OR PROKURICA SOBRE FALTA DE ESTADISTAS Y EXCESO DE POLITIQUEROS El se�or MU�OZ BARRA.- Se�or Presidente, en primer lugar, lamento algunos juicios injustos emitidos por un se�or Senador que me antecedi� en el uso de la palabra, quien plante� que en este pa�s no existen estadistas. Yo quiero se�alar que en Chile tenemos muchos estadistas, tanto en los sectores de Gobierno como en los de Oposici�n. Y, en ese sentido, el Presidente Ricardo Lagos ha sido reconocido como tal a niveles nacional e internacional. En segundo t�rmino, lamento los injustos conceptos vertidos por ese se�or Senador en cuanto a que nuestro pa�s est� lleno de "politiqueros". Entiendo que Su Se�or�a us� esa palabra en forma gen�rica. No creo que haya tenido la osad�a de calificar de politiquero a un solo sector pol�tico de Chile. Quiero entender -repito- que emple� ese t�rmino de manera general y que ello podr�a tocar -si as� fuere- a todos los sectores pol�ticos que funcionan en nuestro sistema democr�tico. ACUERDO CON UNI�N EUROPEA. OFICIO El se�or MU�OZ BARRA.- Se�or Presidente, quiero referirme a un hecho diferente del pesimismo y catastrofismo planteados por un se�or Parlamentario en la hora de Incidentes, que en el fondo es una repetici�n, un eco, de lo que expuso un l�der pol�tico de la Derecha extrema cuando, en forma muy agorera y tal vez antipatri�tica, sostuvo que en Chile no pasar� nada hasta el 2006. Pienso que ning�n chileno -ning�n patriota, yo dir�a- con el coraz�n bien puesto puede permitirse, de manera tan enf�tica, augurar un porvenir de esas caracter�sticas para su pa�s. Sea quien fuere el que est� en el Gobierno, debe concitar el apoyo en todo lo positivo y no ser objeto del viejo dogma consistente en desconocer lo bueno y poner el acento �nicamente en lo que falta por hacer. Al se�alar que existen hechos que dan un ment�s a esos planteamientos me refiero precisamente a que, cuando hab�a una clara ofensiva en contra del Ministerio de Relaciones Exteriores, en general, y de la se�ora Canciller, en particular, el pa�s se entera de manera tremendamente impactada del Acuerdo de Chile con la Uni�n Europea. Al margen de sus repercusiones econ�micas, que podremos analizar m�s adelante, quiero destacar que ese Convenio constituye un �xito pol�tico casi sin precedentes. Algunos lo han comparado con la suscripci�n del Pacto Andino, durante el Gobierno de don Eduardo Frei Montalva; otros, con los Acuerdos relativos a la ALALC, al MERCOSUR, a la ALADI, etc�tera. Con el mayor respeto a nuestros hermanos latinoamericanos, debo manifestar -no puedo ocultar mi satisfacci�n- que, desde hace doce a�os, Chile se encuentra "en otra", est� caminando hacia adelante. Los Tratados del MERCOSUR, la ALADI y otros fueron actos de integraci�n latinoamericana; pero hoy estamos hablando con una gran potencia econ�mica, como es la Uni�n Europea. Por ello, el Acuerdo en comento tiene una significaci�n, no s�lo econ�mica, sino adem�s pol�tica, y de primera magnitud, lo que por s� solo trae aparejadas consecuencias de aquella �ndole. En efecto, que la Uni�n Europea, en las circunstancias que viven algunas naciones hermanas, haya prescindido de la crisis que afecta a Argentina -se refiri� a ella un se�or Senador-, a Venezuela y, en menor grado, a Colombia, y tambi�n, de las preocupaciones que despiertan pol�tica y econ�micamente los restantes pa�ses sudamericanos, prueba que, m�s all� de la guerrilla pol�tica equivocada que atisbamos en Chile -ella no construye, sino que destruye injustamente-, en el exterior existe la m�s perfecta comprensi�n de que nuestra realidad actual constituye una excepci�n de la que deben sentirse satisfechos todos los sectores pol�ticos responsables de este pa�s. Como nuestra econom�a es peque�a, se�or Presidente, bien podr�a la Uni�n Europea concluir que Chile carece de trascendencia e importancia como socio. Por ello, cabe pensar que el Acuerdo en cuesti�n representa, mucho m�s que un gesto pol�tico hacia un pa�s que recuper� su antigua tradici�n democr�tica -si no la hubiese recuperado, la asociaci�n con la comunidad europea no habr�a sido posible- o que una decisi�n econ�micamente importante para Europa, un claro reconocimiento al liderazgo internacional que, sin discusi�n, ejerce el Presidente Lagos, quien -no cabe duda, se�ores Senadores- es todo un estadista. En cambio, Chile no debe caer en tropicalismos ni en exageraciones. M�s vale actuar con prudencia y buscar los antecedentes para opinar en plenitud. Porque no conocemos los detalles; son muy recientes los t�rminos mismos de la asociaci�n. Pero lo que ya se sabe nos da perspectivas optimistas, a diferencia de algunos que ya est�n visualizando nubes grises al analizar este importante tema. Es preciso tener en cuenta, ante todo, que los acuerdos de tal �ndole, como cualquier otra medida econ�mica, no son fines en s� mismos, sino instrumentos para alcanzar una meta, cual es dar m�s amplitud al comercio y, por la v�a de la libertad de �ste, lograr finalmente el desarrollo y mayor bienestar para los chilenos. Desde luego, el Acuerdo en referencia podr�a servir para romper el pesimismo que, ante las dificultades de los �ltimos a�os, se ha apoderado de grandes sectores del pa�s, el cual es fomentado ciertamente, a veces, por peque�os intereses politiqueros, como lo se�al� un se�or Senador. Deber�, pues, producirse un nuevo impulso para Chile. Indudablemente, habr� sectores favorecidos, los m�s, y tambi�n, algunos perjudicados, los menos. Pareciera que el de la pesca es el que menos logra en este Acuerdo. En cambio, productos agr�colas pueden tener un buen impulso, y as�, muchos m�s. Es imposible que nuestro pa�s hubiera podido alcanzar un Convenio como �ste sin efectuar determinadas concesiones. Dig�moslo a tiempo: ello ser�a un mero regalo, y que, como tal, disminuir�a sus efectos econ�micos en un gran porcentaje. Tambi�n es evidente que, en su inicio, se insertar� en el esquema exportador de materias primas casi sin elaborar, con que parti� el actual modelo y del cual no ha podido liberarse. Creemos que hay razones fuertemente ideol�gicas y de intereses en tal sentido. En otro esquema, el Tratado pudo haber servido tambi�n para desarrollar nuestras posibilidades de exportaciones con mayor valor agregado, las que en �l no est�n descartadas ni tienen un obst�culo. Pero en eso nadie nos ayudar�. Somos nosotros mismos los que debemos convencernos de que, si bien la posibilidad de continuar exportando productos primarios o con escasa elaboraci�n es positiva, en alg�n minuto tocar� techo. Ella recibe un fuerte impulso con este Tratado, pero el resto nos corresponde, y si s�lo superamos nuestros ideologismos -hoy radicalmente opuestos a 1970, pero a la larga tambi�n negativos, aunque en menor escala que aqu�llos-, lograremos efectivamente romper el punto en que se deja de ser pa�s en v�as de desarrollo. Pero eso es harina de otro costal. Es un debate que nos negamos a hacer. Es un problema que no tiene por qu� asumir el Estado. Pueden, y deben hacerlo, los particulares, y es de esperar que ellos sepan aprovechar este nuevo impulso y afronten el nuevo desaf�o. Y en este sentido, los sectores que representan -yo dir�a que en mayor proporci�n, porque nosotros tambi�n lo estamos haciendo con la seguridad que implican las pol�ticas del actual Gobierno- tienen que sumarse patri�ticamente a ese esfuerzo. Como dec�a, el Acuerdo es un instrumento important�simo y sumamente valioso, pero tambi�n es un trampol�n para que Chile d� un nuevo salto, bote las negativas alas del pesimismo e ideologismo y vuelva a ser un pa�s que cobija a un pueblo pr�ctico, con enormes ganas de prosperar con estos nuevos aliados y que representa la ayuda poderosa de un continente al que tanto debemos, como es la Europa milenaria. Puede que este Convenio sea seguido o no de otro de libre comercio con Estados Unidos. Obviamente que �ste ser�a igualmente bienvenido porque, con estos dos bastones para caminar en la ruta del progreso, realmente no tendr�amos excusas si no lo logramos. Pero cada uno tiene su valor por s� mismo y, aunque no se llegara a un acuerdo con Estados Unidos, el que pactaremos con Europa por s� solo es suficiente para que, con el esfuerzo interior, podamos recuperar la marcha que no se ha detenido, pero que ha disminuido el rigor al ritmo de las crisis externas a las cuales nos encontramos tan expuestos. La Uni�n Europea nos ha tendido una mano. Nunca a un pa�s ajeno al Viejo Continente se le hab�a dado un trato semejante. �Nunca! Es una distinci�n , y por ello podemos sentirnos orgullosos todos los chilenos. Pero tambi�n es un desaf�o. Incluso va m�s all� de las exportaciones e importaciones f�sicas, pues incluye servicios, tecnolog�as. Es casi una asociaci�n. Es lo m�s que se puede dar a un pa�s que no s�lo no es europeo, sino que est� terriblemente lejos. Debo reconocer que la reacci�n nacional ha sido felizmente de sorpresa positiva y de un�nime contentamiento. Ello tambi�n prueba que a�n Chile es capaz de dejar atr�s la mezquindad pol�tica, lo cual nos confirma que todav�a contamos con reservas espirituales que nos permiten mirar el futuro con optimismo. �Solicito a la Mesa hacer llegar esta intervenci�n a la se�ora Ministra de Relaciones Exteriores, a la cual tambi�n me complazco en felicitar por su gesti�n en este importante Acuerdo. He dicho. --Se anuncia el env�o del oficio solicitado, en nombre del se�or Senador, en conformidad al Reglamento. El se�or ZALD�VAR, don Andr�s (Presidente).- No habiendo otros Comit�s que deseen hacer uso de la palabra, se levanta la sesi�n. --Se levant� a las 18:4. Manuel Oca�a Vergara, Jefe de la Redacci�n