. . . . "R\u00C9PLICA A ALUSI\u00D3N PERSONAL. (Art\u00EDculo 34 del Reglamento)."^^ . " R\u00C9PLICA A ALUSI\u00D3N PERSONAL. (Art\u00EDculo 34 del Reglamento).\nEl se\u00F1or JEAME BARRUETO (Presidente).- \nPara hacer uso del derecho establecido en el art\u00EDculo 34 del Reglamento, tiene la palabra, por cinco minutos, la diputada Mar\u00EDa Victoria Ovalle. \n \nLa se\u00F1ora OVALLE (do\u00F1a Mar\u00EDa Victoria) .- \nSe\u00F1or Presidente , honorables colegas, de acuerdo con las normas obligatorias para todos y cada uno de los honorables diputados, contenidas tanto en el Reglamento de la honorable C\u00E1mara como en el C\u00F3digo de Conductas Parlamentarias, invoco su debida atenci\u00F3n sobre ciertos asuntos p\u00FAblicos y notorios.\n \nAdem\u00E1s de la sensibilidad y honra personal ofendidas, se ha afectado la reputaci\u00F3n del Poder Legislativo en su imagen p\u00FAblica. Evitar estos hechos es tarea a la que todos estamos obligados; ello en beneficio de la mantenci\u00F3n de la dignidad parlamentaria y del estado de derecho, \u00FAnico garante de la libertad, la probidad y el engrandecimiento de la Rep\u00FAblica.\n \nEn efecto, han sido permanentes los ataques personalizados en esta parlamentaria por otro miembro de esta distinguida Corporaci\u00F3n. Tal actitud, con publicidad, est\u00E1 re\u00F1ida con el decoro m\u00EDnimo a que los parlamentarios estamos obligados a mantener en nuestros actos, tanto privados como p\u00FAblicos. De all\u00ED que solicito la superior consideraci\u00F3n del se\u00F1or Presidente , y la hago extensiva a toda la Mesa de la honorable C\u00E1mara, por las reiteradas, pertinaces, falaces y denostativas provocaciones de que he sido objeto de parte de la colega diputada se\u00F1ora Lily P\u00E9rez .\n \nEn los hechos descritos, que con profusi\u00F3n se dan a conocer en la prensa nacional, con alarma he comprobado que mi persona aparece vinculada a ciertos poderes ocultos e intervenciones indebidas en beneficio de las actividades empresariales de mi c\u00F3nyuge, al punto de existir una confusi\u00F3n en tales actos, que jam\u00E1s he cometido, y en la necesaria transparencia en los gastos que audita la Corporaci\u00F3n. Resulta grav\u00EDsimo que ahora el esc\u00E1ndalo sea la forma de pregonar la falsedad a fin de hacerla aparecer como cierta, para as\u00ED imponerla. Eso ya no tan s\u00F3lo respecto a mi integridad \u00E9tica como persona, sino contra todos los miembros de la C\u00E1mara y a su muy l\u00FAcida presidencia.\n \nLas falsas afirmaciones contenidas en toda la prensa escrita, televisiva y radial pretenden sembrar ya no una simple duda, sino que han venido a perturbar el desarrollo de una instituci\u00F3n de centenaria raigambre democr\u00E1tica, cuyo primer deber es el respeto a la condici\u00F3n humana. \nAs\u00ED las cosas, se ha transgredido permanentemente tanto el esp\u00EDritu como las expresas disposiciones contenidas en los art\u00EDculos 90 y siguientes del Reglamento de la honorable C\u00E1mara. El n\u00FAmero 5\u00BA del art\u00EDculo 90, ep\u00EDgrafe 5\u00BA, \u201CDe las faltas al orden.\u201D, dice lo siguiente: \u201CFaltare al respeto debido a la C\u00E1mara, a los diputados o a los ministros con acciones o palabras descomedidas, o con imputaciones a cualquier persona o funcionario de dentro o de fuera de la C\u00E1mara, atribuy\u00E9ndole intenciones o sentimientos opuestos a sus deberes\u201D.\n \nTan evidente y manifiesto es lo que expreso que, sin duda, da lugar a las m\u00E1ximas sanciones all\u00ED contenidas. S\u00F3lo soy una parlamentaria y jam\u00E1s me arrogar\u00E9 el car\u00E1cter de juzgadora. De all\u00ED que, frente a la subjetividad humana, est\u00E1 el Reglamento. Si a\u00FAn aquello no fuera suficiente, el C\u00F3digo de Conductas Parlamentarias es sumamente preciso, ya que en su T\u00EDtulo II, \u201CDe los Deberes\u201D, consagra como imperativo inequ\u00EDvoco las obligaciones a las que todos estamos sometidos, regladas como fundamentales. Tales son, entre otras, las del art\u00EDculo 7\u00BA, letra a): \u201CObrar con honradez y buena fe\u201D.\n \nEstos principios, que se debieran compartir por todos, son precisados en el C\u00F3digo al punto de vincularlos expresamente con la veracidad de los dichos en los hechos y en las afirmaciones o negaciones. \nLa letra b) dispone: \u201CObrar con fraternidad frente a sus colegas, debiendo abstenerse cuidadosamente de expresiones mal\u00E9volas e injuriosas y aludir a antecedentes personales de ella. \nLa letra c) indica: \u201CSer justos y respetuosos en el trato con los ciudadanos, los dem\u00E1s diputados, funcionarios y otras autoridades p\u00FAblicas\u201D. \nLa actitud incontrastable de la diputada en cuesti\u00F3n, que demuestra que ha faltado, transgredido, menoscabado y denostado a mi persona, tanto en mi funci\u00F3n parlamentaria como en mi dignidad humana, no se ha detenido all\u00ED. No satisfecha con las p\u00FAblicas y falsas referencias a la suscrita, hoy no trepida en enlodar la inestimable funci\u00F3n de todos los miembros del Poder Legislativo.\n \nMe supone intereses re\u00F1idos con la honorabilidad del cargo y nos imputa a todos trabas a la transparencia p\u00FAblica. Nadie, en su sano juicio y con rectitud de bien, podr\u00E1 suponer que tales ignominias son ciertas. \u00BFPodr\u00EDa pensarse que todo el Poder Legislativo est\u00E1 compuesto por presuntos rufianes, desinteresados en el cuidado de los fondos p\u00FAblicos, patrimonio de todos los chilenos? \u00BFCu\u00E1ntos a\u00F1os cost\u00F3 que este Parlamento entrase en funciones para que uno de sus integrantes ponga en duda su actuar?\n \n\u00A1Cu\u00E1n f\u00E1cil es hacer perder la credibilidad en las instituciones de la paz, donde deben prevalecer los argumentos y no las ofensas, la inteligencia y no la espuria figuraci\u00F3n, la discusi\u00F3n veraz y profunda, y no la descalificaci\u00F3n maledicente. Atacan al Congreso aquellos que temen a la raz\u00F3n; ofenden a la Naci\u00F3n aquellos que no creen en su dignidad, hoy representada por todos nosotros. \nPor consiguiente, solicito a la honorable C\u00E1mara de Diputados, a los Comit\u00E9s parlamentarios, en particular a la honorable Mesa, que, con el debido acuerdo de la Sala y de conformidad con lo dispuesto en el art\u00EDculo 91 del Reglamento de la Corporaci\u00F3n, se sirvan considerar imponer a la diputada se\u00F1ora P\u00E9rez las sanciones previstas en el se\u00F1alado art\u00EDculo, a las que es merecedora, no en \u00E1nimo de revancha, sino de justicia.\n \nAprovecho esta solemne ocasi\u00F3n en beneficio de la Corporaci\u00F3n, y no en el m\u00EDo propio, para agradecer las muchas y reiteradas muestras de solidaridad y afecto que, con dignidad parlamentaria, me han expresado los colegas de las m\u00E1s diversas bancadas, donde la expresi\u00F3n un\u00E1nime es la inaceptable actitud de quien se pretende erigir como juez absoluto de las personas, incluso de esta instituci\u00F3n. \nFormalmente, pido el pronunciamiento de esta honorable Corporaci\u00F3n, y aprovecho de agradecer las muestras de generosidad humana frente a lo que debe ser considerado como una afrenta mayor al prestigio de todos los integrantes de esta C\u00E1mara. Se ha violentado la lealtad que todos nos debemos en la digna tarea de legislar, que el pueblo nos ha encomendado, entreg\u00E1ndonos su confianza. Chile requiere un Parlamento digno. \u00A1Dignifiqu\u00E9moslo!\n \nHe dicho. \n " . . . . .