REPUBLICA DE CHILE CAMARA DE DIPUTADOS LEGISLATURA 332ª, EXTRAORDINARIA Sesión 55ª, en martes 19 de marzo de 1996 (Ordinaria, de 11 a 14.17 horas) Presidencia de los señores Estévez Valencia, don Jaime, y Chadwick Piñera, don Andrés. Secretario, el señor Loyola Opazo, don Carlos. Prosecretario, el señor Zúñiga Opazo, don Alfonso. ÍNDICE I.- ASISTENCIA II.- APERTURA DE LA SESIÓN III.- ACTAS IV.- CUENTA V.- ORDEN DEL DÍA VI.- INCIDENTES VII.- DOCUMENTOS DE LA CUENTA VIII.- OTROS DOCUMENTOS DE LA CUENTA ÍNDICE GENERAL Pág. I.Asistencia5 II.Apertura de la sesión7 III.Actas7 IV.Cuenta7 Renuncia y elección de Vicepresidentes de la Corporación7 Designación del Diputado señor Carlos Valcarce como Vicepresidente del Parlatino8 Respaldo de la Cámara de Diputados a designación de don Francisco Orrego Vicuña como miembro de la Corte Internacional de Justicia9 Acuerdos de los Comités sobre la Tabla9 V.Orden del Día. Modificación del D.L. Nº 2.695, de 1979, que regulariza la posesión de la pequeña propiedad raíz. Veto12 Abolición del trabajo de los menores de quince años. Primer trámite constitucional. (Continuación) 15 VI.Incidentes. Realización de comicios comunales en fechas diferentes, por regiones. Oficio34 Aplicación de la ley Nº 19.265. Oficio35 Medidas definitivas para paliar los efectos de la sequía en Coquimbo. Oficios36 Antecedentes sobre solución a carencia de agua en Arica y Parinacota. Oficio37 Aplicación de medidas anunciadas por el Ministerio de Agricultura. Oficio37 Propuesta de incorporación de provincia de Chacabuco a Región Metropolitana37 Reiteración de irregularidades en adquisición de terrenos por Serviu de la Región del Maule. Oficio39 Problemas derivados de la sequía en la Cuarta Región. Construcción de embalse Puclaro40 Modernización de la Agricultura. Oficio41 Pág. VII.-Documentos de la Cuenta. 1.Oficio de S.E. el Presidente de la República por el cual retira y hace presente la urgencia, con calificación de “suma”, para el despacho del proyecto que moderniza el sistema de remuneraciones del personal del Ministerio de Obras Públicas, de sus servicios dependientes y del Instituto Nacional de Hidráulica (boletín N° 1767-09).44 2.Oficio de S.E. el Presidente de la República mediante el cual retira y hace presente la urgencia, con calificación de “simple”, para el despacho del proyecto que modifica el decreto ley N° 701, de 1974, sobre fomento forestal (boletín N° 1594-01).44 3. Oficio del Senado, por el cual comunica que tomó conocimiento del rechazo de la Cámara de Diputados a las modificaciones propuestas al proyecto que amplía las facultades de la Dirección del Trabajo, y del nombre de los señores Diputados que integrarán la Comisión Mixta que deberá formarse de conformidad con lo dispuesto en el artículo 68 de la Constitución Política de la República (boletín N° 1464-13).45 4. Informe de la Comisión de Agricultura, Silvicultura y Pesca, recaído en el proyecto que crea un sistema de certificación de calidad para las frutas y hortalizas frescas de exportación (boletín N° 1348-01)(S).45 5. Moción de los Diputados señores Ojeda, Pizarro, Ortiz, Allamand, Orpis, Gajardo, Tohá y señoras Matthei y Prochelle y señorita Saa, que autoriza la construcción de un monumento, en la ciudad de Osorno, en memoria del arquitecto y deportista Mario Recordón Burnier (boletín N° 1819-04). 62 VIII. Otros documentos de la Cuenta. 1.Oficios: Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción. Del Diputado señor Sabag, auditoría de las últimos tres etapas de la Cooperativa de Comercialización y Distribución Cerro Cayumanqui Quillón Ltda. Ministerio de Defensa Nacional. Del Diputado señor Coloma, destacamento policial en Melipilla. Ministerio de Obras Públicas. Cuadro resumen de oficios remitidos en el mes de febrero a Parlamentarios y autoridades en general. Ministerio de Agricultura. Del Diputado señor Reyes, situación actual de las Hijuelas Inca Oriente y Canelos. I. ASISTENCIA. Asistieron los siguientes señores Diputados: (103) --Acuña Cisternas, Mario --Aguiló Melo, Sergio --Alvarado Andrade, Claudio --Álvarez-Salamanca Büchi, Pedro --Allamand Zavala, Andrés --Allende Bussi, Isabel --Arancibia Calderón, Armando --Ascencio Mansilla, Gabriel --Ávila Contreras, Nelson --Aylwin Azócar, Andrés --Aylwin Oyarzún, Mariana --Balbontín Arteaga, Ignacio --Bartolucci Johnston, Francisco --Bayo Veloso, Francisco --Bombal Otaegui, Carlos --Caminondo Sáez, Carlos --Cantero Ojeda, Carlos --Cardemil Herrera, Alberto --Ceroni Fuentes, Guillermo --Coloma Correa, Juan Antonio --Correa De la Cerda, Sergio --Cristi Marfil, María Angélica --Chadwick Piñera, Andrés --De la Maza Maillet, Iván --Dupré Silva, Carlos --Elgueta Barrientos, Sergio --Elizalde Hevia, Ramón --Encina Moriamez, Francisco --Errázuriz Eguiguren, Maximiano --Escalona Medina, Camilo --Espina Otero, Alberto --Estévez Valencia, Jaime --Ferrada Valenzuela, Luis Valentín --Fuentealba Vildósola, Renán --Gajardo Chacón, Rubén --Galilea Vidaurre, José Antonio --García García, René Manuel --García Ruminot, José --García-Huidobro Sanfuentes, Alejandro --Girardi Lavín, Guido --Gutiérrez Román, Homero --Hamuy Berr, Mario --Hernández Saffirio, Miguel --Huenchumilla Jaramillo, Francisco --Hurtado RuizTagle, José María --Jara Wolf, Octavio --Jocelyn-Holt Letelier, Tomás --Jürgensen Caesar, Harry --Karelovic Vrandecic, Vicente --Kuschel Silva, Carlos Ignacio --Latorre Carmona, Juan Carlos --Leay Morán, Cristián --León Ramírez, Roberto --Letelier Morel, Juan Pablo --Letelier Norambuena, Felipe --Longton Guerrero, Arturo --Longueira Montes, Pablo --Luksic Sandoval, Zarko --Makluf Campos, José --Martínez Labbé, Rosauro --Martínez Ocamica, Gutenberg --Masferrer Pellizzari, Juan --Matthei Fornet, Evelyn --Melero Abaroa, Patricio --Montes Cisternas, Carlos --Morales Morales, Sergio --Moreira Barros, Iván --Munizaga Rodríguez, Eugenio --Muñoz Aburto, Pedro --Naranjo Ortiz, Jaime --Navarro Brain, Alejandro --Ojeda Uribe, Sergio --Orpis Bouchón, Jaime --Ortiz Novoa, José Miguel --Palma Irarrázaval, Andrés --Palma Irarrázaval, Joaquín --Paya Mira, Darío --Pérez Lobos, Aníbal --Pérez Opazo, Ramón --Pérez Varela, Víctor --Pizarro Soto, Jorge --Pollarolo Villa, Fanny --Prochelle Aguilar, Marina --Prokuriça Prokuriça, Baldo --Rebolledo Leyton, Romy --Reyes Alvarado, Víctor --Ribera Neumann, Teodoro --Rocha Manrique, Jaime --Rodríguez Cataldo, Claudio --Saa Díaz, María Antonieta --Sabag Castillo, Hosain --Salas De la Fuente, Edmundo --Schaulsohn Brodsky, Jorge --Seguel Molina, Rodolfo --Silva Ortiz, Exequiel --Soria Macchiavello, Jorge --Sota Barros, Vicente --Taladriz García, Juan Enrique --Toha González, Isidoro --Tuma Zedan, Eugenio --Ulloa Aguillón, Jorge --Urrutia Ávila, Raúl --Urrutia Cárdenas, Salvador --Valcarce Medina, Carlos --Valenzuela Herrera, Felipe --Vargas Lyng, Alfonso --Venegas Rubio, Samuel --Viera-Gallo Quesney, José Antonio --Vilches Guzmán, Carlos --Villegas González, Erick --Villouta Concha, Edmundo --Walker Prieto, Ignacio --Wörner Tapia, Martita Con permiso constitucional estuvo ausente el Diputado señor Osvaldo Vega. Asistieron, además, los siguientes Ministros: del Interior, señor Carlos Figueroa; de Justicia, señora Soledad Alvear, y de Transportes y Telecomunicaciones, señor Narciso Irureta, y los Senadores, señores Jorge Lavanderos y Hernán Larraín. II. APERTURA DE LA SESIÓN Se abrió la sesión a las 11.05. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión. III. ACTAS El señor ESTÉVEZ (Presidente).- El acta de la sesión 51ª se declara aprobada. El acta de la sesión 52ª queda a disposición de los señores Diputados. IV. CUENTA El señor ESTÉVEZ (Presidente).- El señor Prosecretario va a dar lectura a la Cuenta. El señor ZÚÑIGA (Prosecretario) da lectura a los documentos recibidos en la Secretaría. -o- RENUNCIA Y ELECCIÓN DE VICEPRESIDENTES DE LA CORPORACIÓN. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Por acuerdo de los Comités parlamentarios, tal como se informó en la sesión anterior, corresponde tratar las renuncias del Primer Vicepresidente, señor José Miguel Ortiz, y del Segundo Vicepresidente, señor Teodoro Ribera, y proceder de inmediato a la elección de sus reemplazantes. ¿Habría acuerdo para aceptarlas? Acordado. La elección de los nuevos Vicepresidentes se realizará en votación secreta, por el sistema de cédulas, y en un solo acto. El señor Secretario procederá a llamar a votar a los señores Diputados. Terminada la votación y verificado el escrutinio: El señor ESTÉVEZ (Presidente).- El señor Secretario dará cuenta del resultado de la votación. El señor LOYOLA (Secretario).- Votaron ochenta y ocho Diputados y se escrutaron ochenta y ocho cédulas. El resultado es el siguiente: Para Primer Vicepresidente, por el honorable señor Francisco Huenchumilla, 85 votos y por el honorable señor Homero Gutiérrez, 1 voto. Hubo 2 votos en blanco. Aplausos. Para Segundo Vicepresidente, por el honorable señor Andrés Chadwick, 56 votos; por el honorable señor Iván Moreira, 10 votos; por la honorable señora Evelyn Matthei, 2 votos; por el honorable señor Pablo Longueira, 1 voto, y por el honorable señor Jorge Soria, 1 voto. Hubo 18 votos en blanco. Aplausos. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- En consecuencia, han sido elegidos Primer Vicepresidente el honorable Diputado señor Francisco Huenchumilla y segundo Vicepresidente, el honorable Diputado señor Andrés Chadwick. Aplausos en la Sala y en las tribunas. Los Diputados señores Huenchumilla y Chadwick pasan a ocupar sus lugares en la testera. El señor RIBERA.- Pido la palabra. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra Su Señoría. El señor RIBERA.- Señor Presidente, pedí hacer uso de la palabra sólo para agradecer a mis colegas, y a Su Señoría en particular, el honor de que fui objeto al permitírseme desempeñar la segunda Vicepresidencia de la Cámara de Diputados durante algo más de un año, que fue una experiencia muy interesante. Espero haber satisfecho las expectativas quizás no todas que los colegas depositaron en mi persona, y agradezco a todos los Diputados no solamente a aquellos que me brindaron su voto en el momento de la elección que con posterioridad me entregaron su experiencia, me traspasaron conocimientos y me ayudaron en la gestión que se me encomendó. Muchas gracias. Aplausos. El señor ORTIZ.- Pido la palabra. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra Su Señoría. El señor ORTIZ.- Señor Presidente, hoy les corresponde a Francisco Huenchumilla y a Andrés Chadwick ser las figuras, porque la Sala ha dado una demostración impresionante de clase política. Me siento feliz y honrado de ser integrante de esta Corporación, puesto que hoy le hemos demostrado a la opinión pública que por sobre nuestras legítimas diferencias partidarias está el compromiso de cumplir los acuerdos que se toman. Por eso, la elección de los Diputados señores Francisco Huenchumilla y Andrés Chadwick a todos nos llena de orgullo, especialmente a los 88 Diputados presentes en la Sala. Creo que este gesto demuestra a nuestros conciudadanos que somos personas que amamos el servicio público y tratamos de practicarlo en todas nuestras actuaciones. Agradezco al colega Jaime Estévez, a Carlos Loyola, a Alfonso Zúñiga y a todos los funcionarios de la Corporación que hicieron posible este hermoso trabajo que me tocó realizar durante ocho meses y siete días; asimismo, a mis 119 colegas parlamentarios, con quienes, sin distinción, tuve la oportunidad de trabajar en conjunto. Por último, agradezco a mi bancada y al partido de toda mi vida, el Demócrata Cristiano, que me dispensaron este alto honor. Gracias infinitas por la experiencia y por todo lo que aprendí durante estos meses. Aplausos. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Aprovecho la oportunidad para reiterar mi agradecimiento personal como lo hice en la sesión en que se dio cuenta de sus renuncias a los Diputados señores Ortiz y Ribera por su trabajo, lealtad, abnegación y permanente espíritu de equipo en el ejercicio de sus cargos. DESIGNACIÓN DEL DIPUTADO SEÑOR CARLOS VALCARCE COMO VICEPRESIDENTE DEL PARLATINO. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Honorable Sala, los Comités parlamentarios han recogido la propuesta unánime de la Comisión de Relaciones Exteriores, Asuntos Parlamentarios e Integración Latinoamericana, en el sentido de nominar, en representación de la Corporación, al Diputado señor Carlos Valcarce Medina como Vicepresidente del Parlamento Latinoamericano, cargo que, por mandato de su reglamentación, le corresponde ejercer a un Diputado chileno. Si le parece a la Sala, se aprobará esta designación. Aprobada. RESPALDO DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS A DESIGNACIÓN DE DON FRANCISCO ORREGO VICUÑA COMO MIEMBRO DE LA CORTE INTERNACIONAL DE JUSTICIA. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- La Comisión de Relaciones Exteriores comunica que ha tomado conocimiento y acogido en forma unánime la decisión del Gobierno de Chile de postular el nombre del señor Francisco Orrego Vicuña como juez de la Corte Internacional de Justicia en las elecciones que tendrán lugar en noviembre del presente año en las Naciones Unidas. Pareciera innecesario detallar el voluminoso currículo académico y profesional del señor Francisco Orrego Vicuña, pues es conocido por todos los señores parlamentarios. Según lo manifiesta la Comisión de Relaciones Exteriores, ha sido profesor, director, conferencista, investigador en diversas universidades chilenas y extranjeras, consultor de diversos organismos internacionales regionales y mundiales, autor de múltiples publicaciones jurídicas internacionales, juez del tribunal administrativo del Banco Mundial, miembro de paneles de conciliadores y árbitro del Centro Internacional para la Solución de Controversias en materia de inversiones, miembro del Comité Jurídico Interamericano, Secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana de Paz, asesor jurídico de los ministerios de relaciones exteriores de América Central; Embajador de Chile ante el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte; miembro de la Comisión de Juristas para la Solución de Controversias en Aladi; Presidente de la Comisión Chilena para la Mediación Papal entre Chile y Argentina y miembro de la Comisión para la Solución de Controversias entre Chile y los Estados Unidos de Norteamérica. Estos son algunos de los cargos públicos a través de los cuales el señor Orrego Vicuña ha demostrado al país y a la sociedad internacional su profunda versación jurídica y condiciones naturales de hombre estudioso y justo. Por eso, junto con acoger la petición unánime de la Comisión de Relaciones Exteriores, propongo a la Sala, con el acuerdo de los Comités, aprobar un proyecto de acuerdo en el cual se comunique a Su Excelencia el Presidente de la República y a los otros parlamentos del mundo el respaldo de la Cámara de Diputados de Chile a la candidatura del señor Francisco Orrego Vicuña al cargo de juez de la Corte Internacional de Justicia. Si le parece a la Sala, así se acordará. Acordado. Aplausos. ACUERDOS DE LOS COMITÉS SOBRE LA TABLA. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Informo a la Sala que los Comités acogieron la solicitud de enviar a Comisión el proyecto que figura en el primer lugar del Orden del Día, que dispone el pago por el uso de las vías urbanas afectas a congestión vehicular. Dicho proyecto muy discutido se refiere a un problema muy relevante que requiere rápida solución, por lo menos en Santiago y otras ciudades del país, respecto del cual se expresaron opiniones discordantes en la sesión pasada, en circunstancias de que se trata de hacer un esfuerzo para lograr un entendimiento que permita la aprobación de una norma unánime. Por tal razón, el señor Ministro de Transportes acogió la petición de la bancada de la UDI y apoyada por todos los Comités. El señor JARA.- Pido la palabra. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra Su Señoría. El señor JARA.- Señor Presidente, quiero dejar expresa constancia de mi rechazo a este acuerdo de los Comités, puesto que no se justifica en absoluto que el proyecto vuelva a Comisión para su discusión general. Lo que correspondía aprobar o rechazar era si establecíamos o no un pago por el uso de las vías declaradas congestionadas por el Ministerio de Obras Públicas. No hay una tercera alternativa, sino sólo dos: establecer el pago o no. En mi opinión, con esta decisión damos una mala señal respecto de un problema que necesariamente había que abordar con mucha seriedad y responsabilidad, como lo estábamos haciendo en la sesión anterior. El perfeccionamiento de las normas restantes se podría lograr en la discusión particular mediante las indicaciones que se formulen; pero no me parece adecuado enviar a Comisión un proyecto que ya se estaba discutiendo en general y respecto del cual el pronunciamiento de los señores Diputados era muy claro. Nada más, señor Presidente. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Para referirse a una cuestión de Reglamento, tiene la palabra el Diputado señor Schaulsohn. El señor SCHAULSOHN.- Señor Presidente, quiero saber si la presunta unanimidad se refiere a la Comisión o a la Sala. No entiendo el alcance del acuerdo de los Comités. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Fue acuerdo unánime de los Comités parlamentarios. El señor SCHAULSOHN.- Entiendo el alcance del acuerdo de los Comités; pero creí entenderle que se buscaría unanimidad en torno al texto del proyecto. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- No, señor Diputado, respecto de la idea de legislar. Lo que está detrás del acuerdo quizás el señor Ministro podría explicarlo es lograr un consenso muy amplio respecto de la idea de legislar, o recoger ciertas inquietudes. Entiendo que el proyecto volverá a la Comisión de Obras Públicas y Transportes para ser tratado en una sola sesión, de manera que la Sala pueda discutirlo en los próximos días. Tiene la palabra el señor Ministro. El señor IRURETA (Ministro de Transportes y Telecomunicaciones).- Señor Presidente, en primer lugar, el Gobierno tiene el mayor interés en acelerar el despacho de este proyecto, que por diferencias muy explicables, ha permanecido un tiempo más que suficiente en la Cámara, y en los próximos días esperamos renovar su urgencia original. Asimismo, nuestro interés es que un proyecto de esta naturaleza reúna el mayor número posible de opiniones favorables. Digo esto porque, aunque no estuve presente en la sesión pasada, tuve la posibilidad de seguirla a través del canal de televisión que transmite las sesiones de la Cámara y quedé realmente preocupado porque en el debate que se desarrolló después del informe del Diputado señor Octavio Jara hubo opiniones discordantes de mucho peso. Por lo tanto, me pareció conveniente abrir un pequeño espacio y hacer un esfuerzo que nos permita llegar a un acuerdo más amplio, el cual, a raíz de algunas conversaciones sostenidas con diversos sectores de la Cámara, creo posible, y entiendo que en ello se origina el acuerdo tomado por los Comités. De modo que el Gobierno comparte esta decisión y espera que el tiempo que el proyecto permanezca en Comisión sea el más breve posible. Por otra parte, debido a la preocupación que suscita la congestión vehicular, mucha gente cree que la tarificación vial es la solución al problema. Sin embargo, quiero llamar la atención acerca de que ella es una de las muchas soluciones en que se está trabajando y que, por lo menos frente al problema de estos días, no será una solución inmediata, porque, como es obvio, el proyecto, después de ser despachado por la Cámara pasará al Senado, lo que tomará algún tiempo más. Es todo lo que quería decir, señor Presidente. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Señores Diputados, les recuerdo que no puedo permitir debate sobre esta materia. El artículo 61 del Reglamento establece: “Ningún Diputado podrá oponerse a los acuerdos a que hayan llegado los Jefes de los Comités con el Presidente de la Cámara, cuando hayan sido adoptados por todos ellos y por unanimidad. La oposición que se haga se tendrá por no formulada y no será admitida a debate alguno.” Por lo tanto, no me es posible prolongar este debate. Para referirse a un problema reglamentario distinto de éste, tiene la palabra el Diputado señor René Manuel García. El señor GARCÍA (don René Manuel).- Señor Presidente, lo que pasa es que, reglamentariamente, todos tenemos derecho a emitir nuestra opinión. En esa oportunidad fuimos los Comités de Renovación Nacional y de la UDI quienes pedimos que el proyecto pasara a Comisión. Su Señoría sabe que la idea de legislar se aprobó por unanimidad. En lo que no estamos de acuerdo es con el fondo del proyecto porque tal como lo dijo el Ministro no es la solución. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Señor Diputado, no puede argumentar. El señor GARCÍA (don René Manuel).- Es decir, adherimos íntegramente a lo que él ha dicho: la solución va por otro lado. Por lo tanto, no hay que entrar en discusiones y acatar el acuerdo de los Comités, porque sería la primera vez que se rechaza un acuerdo unánime de ellos. La Mesa debe hacer cumplir el Reglamento, y punto. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Su Señoría podría ayudar no interviniendo sobre el fondo del asunto. Tiene la palabra, por último, el Diputado señor Montes. El señor MONTES.- Señor Presidente, no argumentaré en contra de la decisión de los Comités, porque entiendo que no es el momento para hacerlo. Sin embargo, creo que no se ha respetado el procedimiento de debate de cualquier proyecto, porque en el segundo informe podríamos haber seguido buscando puntos de acuerdo. En todo caso, también quiero solicitar que el proyecto vuelva a la Comisión de Hacienda, de manera que si se formulan nuevas indicaciones, también sean tratadas por ella. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Señor Diputado, si se aprobara alguna indicación relacionada con Hacienda, el proyecto debe ir forzosamente a esa Comisión antes de volver a la Sala. Asimismo, respecto del despacho de proyectos que están pendientes desde hace bastante tiempo, los Comités acordaron votar, a más tardar al término del Orden del Día, los proyectos signados con los números 2 y 3: el primero se refiere a las observaciones del Presidente de la República al proyecto que fija normas para regularizar la posesión de la pequeña propiedad raíz entiendo puede ser de fácil despacho; segundo, el que establece la abolición del trabajo de los menores de 15 años, de largo debate en la Cámara. Tiene la palabra el Diputado señor Walker. El señor WALKER.- Señor Presidente, entiendo que existe acuerdo para tratar mañana, a las 12 horas, el informe de la Comisión de Defensa Nacional sobre el Servicio Militar. Si dicho acuerdo sigue vigente, pido por su intermedio el acuerdo de la Sala para que se le invite y se le permita ingresar a la Sala al Subsecretario de Guerra, señor Jorge Burgos, quien ha estado a cargo del tema, a fin de conocer su opinión. En todo caso, solicito a la Mesa que confirme si mañana se tratará dicho tema. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Señor Diputado, efectivamente, mañana se tratará ese tema a las 12 horas, y entiendo que el señor Burgos acompañará al Ministro de Defensa Nacional. En ese caso, no creo que exista dificultad para autorizar su presencia en la Sala. Se podría adoptar el acuerdo de que si viene con el señor Ministro de Defensa, él está también invitado. Si viene solo, se produciría una situación distinta a la que aceptamos por costumbre. Tiene la palabra el Diputado señor Longueira, sobre Reglamento. El señor LONGUEIRA.- Señor Presidente, sólo quiero consultar si ingresó a la Corporación el informe con las proposiciones de la comisión mixta respecto del proyecto de ley sobre concesiones de obras públicas. De ser así, me gustaría que se considerara la posibilidad de incorporarlo en Fácil Despacho de este jueves, antes de la semana distrital, pues esas proposiciones fueron aprobadas en forma unánime por los integrantes de la comisión. Es importante agilizar el trámite de este proyecto. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Con todo gusto se accederá a lo solicitado una vez que ingrese oficialmente el informe a la Cámara. -o- V. ORDEN DEL DÍA MODIFICACIÓN DEL D.L. Nº 2.695, DE 1979, QUE REGULARIZA LA POSESIÓN DE LA PEQUEÑA PROPIEDAD RAÍZ. Veto. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Corresponde tratar, en primer lugar del Orden del Día, la observación del Presidente de la República al proyecto de ley que modifica el decreto ley Nº 2.695, de 1979, que fija normas para regularizar la posesión de la pequeña propiedad raíz. Diputado informante de la Comisión de Recursos Naturales es el señor Elgueta. Antecedentes: Informe de la Comisión de Recursos Naturales, boletín Nº 1217-12 (S), sesión 52ª, en 12 de marzo de 1996. Documentos de la Cuenta Nº 4. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Elgueta. El señor ELGUETA.- Señor Presidente, el veto del Presidente de la República, ya aprobado por el Senado, tiene por objeto suprimir una disposición aprobada en la comisión mixta, relativa a la ampliación de los plazos, de uno a cinco años, cuando la solicitud para el saneamiento de la pequeña propiedad estuviera fundado en un dolo. Se presume que hay dolo cuando, de acuerdo con el artículo 9º del actual decreto ley Nº 2.695, el interesado tuviere a la fecha de presentación de su solicitud la calidad de arrendatario, mero tenedor o haya reconocido dominio ajeno mediante un acto o contrato escrito. En tales circunstancias, el Parlamento, en definitiva, había extendido el plazo de uno a cinco años para darle el carácter de dueño al peticionario; para que caducaran las hipotecas o gravámenes existentes respecto de la propiedad y también para ejercer la acción de dominio, si el propietario se considerara afectado por el saneamiento. Sin embargo, el Presidente de la República, en la fundamentación del veto, sostiene que esa disposición es innecesaria y puede desfigurar los procedimientos de saneamientos, puesto que estimularía la interposición de querellas y, en consecuencia, alterar este plazo de uno a cinco años. Por eso, propone suprimir el inciso segundo del artículo 9º, aprobado por el Congreso, y dejar subsistente el inciso final, que dice: “Si como consecuencia de lo señalado en el inciso primero se interpusiese acción penal y ésta fuere acogida, el tribunal ordenará que se cancele la inscripción de que tratan los artículos 12 y 14”. La inscripción a que se refieren esos preceptos es la relativa al dominio que adquiere el poseedor material, luego de cumplir los requisitos legales y cuando su título ha sido otorgado e inscrito por el Ministerio de Bienes Nacionales. El informe del Senado señala que la disposición tiene rango de ley orgánica constitucional, porque altera la competencia de los tribunales. Después de analizar esta materia, la Comisión de Recursos Naturales, Bienes Nacionales y Medio Ambiente acogió por unanimidad el veto presidencial y propone a la Sala que se apruebe en la forma planteada por Su Excelencia el Presidente de la República. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra el Diputado señor René Manuel García. El señor GARCÍA (don René Manuel).- Señor Presidente, el proyecto es de suma importancia, pero quiero saber quizás lo podría aclarar el Diputado informante si dentro de las excepciones de saneamiento que contiene la iniciativa de ley, donde figuran, entre otros, los inmuebles de propiedad de los gobiernos regionales, municipalidades y servicios públicos descentralizados, podrían considerarse los terrenos indígenas o aquellos que estén dentro de las comunidades. Formulo la consulta porque cualquier persona podría solicitar el dominio de una propiedad que esté dentro de comunidades o terrenos indígenas, lo que sería realmente grave para ellas o para la aplicación de la ley indígena, por cuanto muchos propietarios indígenas no tienen títulos de dominio. En consecuencia ocurriría lo que ha pasado durante mucho tiempo; esto es, que muchas de sus propiedades queden incluidas dentro de estas solicitudes de saneamiento de títulos. Mi pregunta es si existe la posibilidad de que los terrenos que la ley establece como tierras indígenas queden exceptuadas de saneamiento por el solo ministerio de la ley. En consecuencia, pido formalmente que, donde dice “gobiernos regionales”, se incorpore la frase “tierras indígenas”, porque de lo contrario la norma acarrearía problemas posteriores. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Señor Diputado, su petición no es posible, pues se trata de un veto del Presidente de la República. Tiene la palabra el Diputado señor Ulloa. El señor ULLOA.- Señor Presidente, el decreto ley Nº 2.695, dictado durante el gobierno militar, posibilitó la regularización de terrenos cuya posesión, durante muchos años, fue irregular o, dicho de otra manera, ilegal. El veto presidencial no hace otra cosa que volver la norma al estado inicial cuando exista una situación de dolo, tal como lo explicó el Diputado señor Elgueta. Por lo tanto, lo que se desea es mantener el plazo originalmente planteado por el Ejecutivo y establecido en el decreto ley a que hice mención. Anuncio que la bancada de la Unión Demócrata Independiente votará favorablemente el veto presidencial. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Hosain Sabag. El señor SABAG.- Señor Presidente, es evidente que tiene suma importancia el proyecto que fija normas respecto de las inscripciones de la pequeña propiedad rural; pero no obstante haber sido aprobado por ambas Cámaras, se omitió, en el punto relativo a las facultades, la que permite al juez ordenar la cancelación de las inscripciones que se hubiesen hecho en forma dolosa. Por eso, el veto es absolutamente pertinente y, por supuesto, todos lo vamos a acoger. Ya fue aprobado en el Senado por unanimidad, lo que también debemos hacer en la Cámara. Dispone que, una vez establecida la acción penal pertinente y acogida por el tribunal, éste ordenará la cancelación de las inscripciones que se hubiesen efectuado en forma espuria. Esta es una situación muy clara, pertinente y merece la total aprobación de la Cámara. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Ceroni. El señor CERONI.- No hay duda de que el veto del Presidente de la República apunta en la dirección correcta. Incluso, en la Cámara tuvimos una discusión en relación con esta materia, y justamente el fundamento del veto se planteó como argumento, en el sentido de que estábamos aprobando un proyecto de ley que tenía ese defecto. En el fondo, la iniciativa significaba crear una gran situación de inseguridad jurídica, en cuanto a que los títulos que se adquirieran por medio del decreto ley Nº 2.695 estaban en una condición incierta durante cinco años, lapso en el cual podría haber algún tipo de situación irregular, de fraude, como los que se describen acá. Desde ese punto de vista, la observación del Ejecutivo para corregir esta situación es muy clara y realmente debiéramos haberla acogido y propuesto como iniciativa nuestra en el primer trámite. Por eso, la bancada del PPD va a aprobar el veto. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Cerrado el debate. Entiendo que hay unanimidad para aprobar la observación. Sin embargo, requiere quórum de ley orgánica constitucional, porque da nuevas atribuciones a los tribunales, por lo cual podría someterse a votación al término del Orden del Día, es decir, a las 13:30 horas, aproximadamente. El señor ULLOA.- Señor Presidente, solicito que la votación se efectúe ahora, porque si vamos a esperar hasta las 13:30 horas, podemos encontrarnos con una situación similar. Entonces, como ahora existe un número suficiente de señores Diputados, aunque no en la Sala, pero sí en el recinto de la Cámara, pido que Su Señoría haga sonar los timbres para votar ahora. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Vamos a tocar los timbres por cinco minutos. Pido a los Comités que avisen a los parlamentarios que para aprobar el veto se requiere quórum de ley orgánica constitucional. Transcurridos los cinco minutos: El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Si le parece a la Sala, se aprobará por unanimidad la observación del Presidente de la República, por los más de 70 honorables Diputados y Diputadas presentes, de 119 en ejercicio. Aprobada. ABOLICIÓN DEL TRABAJO DE LOS MENORES DE QUINCE AÑOS. Primer trámite constitucional. (Continuación) El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Corresponde continuar ocupándose del proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que modifica el Código del Trabajo para abolir el trabajo de los menores de quince años. Tiene la palabra el Diputado señor Edmundo Salas. El señor SALAS.- Señor Presidente, el 13 de diciembre pasado, la Comisión de Trabajo aprobó una moción de varios señores parlamentarios para terminar con el trabajo de los niños menores de quince años. En esa oportunidad, aprobé la idea de legislar, con el objeto de que la Sala pudiera tratar este problema, considerado como una lacra de nuestra sociedad, y efectuar una gran discusión sobre la pobreza y el trabajo de los menores. Durante el debate de esta iniciativa, meditaba en los efectos que producirá esta moción unilateral. Digo unilateral porque, para buscar soluciones concretas que permitan terminar con el trabajo de los niños menores de 15 años, quienes muchas veces son explotados, el tema debiera ser abordado no sólo a través de una iniciativa de voluntad de los señores parlamentarios, que es muy loable, sino también por el Gobierno, porque este problema es mucho más de fondo que lo que se indica, ya que afecta a personas y a familias. En caso de aprobarse el proyecto, ¿qué ocurrirá con las madres solteras cuyos hijos llevan algún dinero a su hogar? ¿Qué sucederá con las madres abandonadas por sus esposos, con los niños que no tienen padre, con las familias cuyos padres no cuentan con trabajo adecuado o no ganan lo suficiente para educar a estos niños y mantener su hogar? Este proyecto es importante porque ¿quién no desea que en Chile nuestros niños sean sólo niños, vivan como niños, puedan hacer todo lo que hacen los niños de padres que tienen dinero: estudiar, jugar, recrearse, pensar, soñar con un futuro mejor? Sin embargo, la iniciativa no hace otra cosa que dejar en peores condiciones a los niños que hoy trabajan, porque deroga el inciso tercero del artículo 13 del Código del Trabajo, que establece: “Los menores de quince años y mayores de catorce pueden contratar la prestación de sus servicios, siempre que cuenten con la autorización indicada en el inciso anterior, ...” o sea, de sus padres o de los guardadores, personas o instituciones que hayan tomado a su cargo al menor “... hayan cumplido con la obligación escolar, y sólo realicen trabajos ligeros que no perjudiquen su salud y desarrollo, que no impidan su asistencia a la escuela y su participación en programas educativos o de formación.” Si vamos al fondo del problema, ¿qué ocurrirá cuando este artículo sea derogado? ¿Se cumplirá la ley para que los niños no trabajen? ¿No dejaremos a estos menores mucho más indefensos de lo que están hoy día? Este no es sólo un problema de legislación se debe buscar una adecuación a estos artículos para proteger a los niños, sino también de familia, de trabajo, de educación, de incorporar a las familias que viven en extrema pobreza a los beneficios que proporciona la riqueza que hoy existe en Chile, un país en el cual ella se concentra, en circunstancias que tenemos bolsones de cesantía, como ocurre en la Octava Región, en la zona del carbón, en Tomé, en Penco, en el distrito que represento, con las quiebras de empresas como Lozapenco, ahora último, o de las fábricas textiles, hace algunos años. Entonces, mi preocupación me lleva a preguntarme: ¿Cómo se financiarán estas familias? ¿Cómo llevarán dinero a sus hogares? Aquí se han dicho muchas cosas y es bueno traer a colación todos estos problemas y buenas intenciones. También se ha aseverado que los niños se trauman cuando trabajan. Yo empecé a trabajar a los ocho años, por las causas que todo el mundo conoce. Cuando se separan los padres, cuando en la familia cada uno corta para su lado, cuando es necesario llevar el pan de cada día al hogar, ¿qué solución puede haber? ¿Bastará con la dictación de una ley? Yo no me traumaticé ni me enfermé de la cabeza. Hoy soy Diputado, luché en la vida para surgir y trabajé como cualquiera de los niños que hoy lo hace. Es bueno discutir este tema, pero en lugar de plasmarlo en una moción para derogar algunos artículos y modificar otros, es necesaria una discusión de alto nivel, con el objeto de llamar la atención del Gobierno y de los sectores de mayores recursos para buscar una solución real a una lacra que azota a nuestra patria como es la falta de trabajo. El ex Presidente Aylwin dijo: “En mi Gobierno salió de la extrema pobreza un millón de chilenos”. Pero ¿cómo lo hicieron? ¿Con leyes especiales, con los programas de ayuda? No, señor Presidente. Salieron de la extrema pobreza, porque en esos años, a través de los distintos programas y la política del Gobierno se creó un millón de nuevos empleos. Mientras no haya más trabajo en Chile no terminaremos con la pobreza, porque las dádivas, que son buenas y es necesario continuar dándolas, no terminarán con el problema ni tampoco la derogación de un artículo que, en la selva en que viven estos niños, de alguna manera los protege al colocar las condiciones en que deben trabajar, como son las labores que no afecten su salud o sus vidas. Es fácil decir “terminemos con esto”, pero ¿quién no va a querer que los niños sigan siendo niños, que crezcan y vivan como niños. ¿Quién no desea que eso ocurra realmente? Con la moción en debate los dejaremos más indefensos de lo que hoy están. Hace algunos días escuchaba al Diputado señor Seguel señalar que presentaría una moción no sé si lo hizo para aumentar o entregar un subsidio familiar a las madres de esos niños. Es una idea loable que hay que profundizar. A lo mejor, es el principio en la búsqueda del camino para solucionar o paliar en parte el problema. Creo que aumentar el subsidio familiar, de 2.400 ó 2.800 pesos al doble, que sería la idea, tampoco soluciona el problema de los niños que no tienen cómo educarse, que no cuentan con un hogar, una casa digna o decente. ¿Qué vamos a hacer con ellos? ¿Prohibir que trabajen por medio de una ley? Debemos legislar y buscar una solución al asunto. Hoy tenemos el problema de la drogadicción. Al respecto, quiero llamar la atención del Parlamento, porque, a lo mejor, a estos niños de l2, 13 ó 14 años, en lugar de educarlos y entregarles lo que realmente necesitan para volver a ser niños, se los vamos a entregar a los traficantes para que los manden a vender papelillos de cocaína, como está ocurriendo en los barrios y poblaciones con muchos jóvenes, lo que es un drama para sus familias. Si realmente queremos asumir el tema de los niños que trabajan, pido a la Sala que no aprobemos el proyecto hoy día y que hagamos un gran debate público nacional respecto del problema, frente a los padres, a las madres que tienen hijos y que no los pueden educar ni mantener, porque esto tiene un trasfondo más grande ¿Qué padre o madre va a querer que su hijo no se eduque o no esté en su hogar? Creo que estos problemas no los solucionaremos por medio de una ley o de una modificación del Código del Trabajo, sino cuando haya empresas que den trabajo, con programas de gobierno para educar a los padres en el fortalecimiento de la familia, para que se hagan responsables de los niños que procrean. También debe responsabilizarse la sociedad chilena, los que tienen más, los que tienen la capacidad de crear industrias y más empresas en el país. Hay que buscar caminos que nos permitan comerciar con todos los países del mundo para seguir trayendo capitales y crear trabajo. Si aprobamos el proyecto, ¿quién mantiene a estos niños?, ¿cómo comen? Hay que pensar en esto. Por ejemplo, para los niños que trabajan en los supermercados o para los “chinchorreros”, como decía el otro día más de algún parlamentario soy Diputado de esa zona, nací y viví en Lota y conozco el tema a fondo, porque en algún momento, cuando niño, también lo hice ¿será la solución prohibirles y decirles que no pueden hacer más eso; que la autoridad los persiga porque deben ganarse la vida a diario o llevar el combustible a su hogar, porque no tienen para comprar otra cosa? Creo que debemos seguir discutiendo el tema. Con esto no quiero decir que estoy en contra de los parlamentarios que presentaron la moción o que no deseo discutirla. Yo los felicito sinceramente por haber traído el problema a la Cámara, pero éste no atañe sólo al Parlamento, ya que, por la Constitución de 1980, no tiene atribuciones para aprobar iniciativas de carácter financiero que permitan llevar un paliativo y un alivio a estas familias que viven en la extrema pobreza, que no pueden educar a sus hijos y que ni siquiera, a veces, tienen un hogar digno y decente para vivir. Éste es un problema que debe ser tratado en la Cámara con nuestro Gobierno, con el Gobierno de todos los chilenos, para que juntos busquemos caminos que efectivamente nos lleven a una solución real del problema. Aquí se habló de 800 mil niños, de 500 mil, alguien dijo 120 mil, pero cualquiera que sea la cantidad, aunque sean 10 ó 20 niños, también es un problema grave. Lo importante es que la moción ha permitido traer al debate público este problema que afecta a una parte de la sociedad chilena, que descubre nuestra miseria y pobreza, que pese a todos los esfuerzos del Gobierno y a los programas que se han implementado para paliar la extrema pobreza, no hemos logrado solucionar. Es un problema social muy profundo, que está estrechamente vinculado con la educación, con la fortaleza de la familia, con la preparación de los padres, porque, si escarbamos un poco más a fondo, también existen padres que esquilman a sus hijos, que en vez de trabajar ellos se quedan en sus casas y los mandan a trabajar a ellos y, muchas veces, a su mujer. Este tema tiene muchas aristas, pues está relacionado con problemas de la familia, con el comportamiento del padre, con la violencia intrafamiliar, con la droga, con los niños que no estudian, porque no tienen ropa, zapatos, ni medios para comprarlos. ¿Ustedes creen, mis queridos amigos Diputados, que impidiéndole trabajar al niño que no le gusta o no quiere estudiar, después va a volver al colegio? ¿No es un problema de educación? ¿De hacer un programa obligatorio en todas las comunas para educar a los padres y explicar a los niños que tienen que educarse y prepararse para ser los futuros padres y trabajadores del mañana? Este proyecto no debiera aprobarse hoy. Cometeríamos un gran error al hacerlo, no por el sentido que tiene sé que es otro el sentimiento de los Diputados que presentaron la moción, sino por el efecto que producirá en las clases modestas, sobre todo en las de extrema pobreza, en los bolsones de cesantía que hay en distintas partes del país. Mientras algunas regiones no tienen cesantía, llega sólo a 4,5 ó 5 por ciento, otras, como la que represento, tienen 18, e incluso, 20 por ciento. ¿Qué hace una persona cuando se le niega esta posibilidad? ¿No es necesario dictar una ley que proteja a estos niños? ¿No es necesario buscar caminos que permitan a nuestro gobierno hacer un aporte a esta idea maravillosa de traer a discusión este problema social que azota a Chile? Aquí no se trata de que el proyecto amerite volver a Comisión como lo planteó un señor Diputado, sino de que ni siquiera lo votemos y sea retirado sé que muchos parlamentarios tienen el mismo sentimiento, no para dejar durmiendo el problema, sino con el objeto de buscar un camino que signifique una solución definitiva para los niños chilenos que hoy deben trabajar para llevar un pan a su hogar, que tienen que levantarse a las cinco de la mañana para buscar su sustento o comprarse un par de zapatos. Así, cuando se levanten, puedan hacerlo con la idea de ir a su escuela a estudiar, y cuando regresen, en vez de dejar sus libros para ir a lavar vehículos, a trabajar a un supermercado, a buscar carbón, madera o un combustible para su hogar, esas horas las dediquen a estudiar y a prepararse para ser los hombres del mañana. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- ¿Me permite, señor Diputado? Resta un minuto de su tiempo. Le ruego concluir su discurso. El señor SALAS.- Sí, señor Presidente. Por eso, pido que el proyecto no se trate hoy y que sigamos discutiendo el tema. A lo mejor, la Cámara puede formar una Comisión con los mismos parlamentarios que presentaron la moción son personas que tienen clara conciencia de lo que ocurre en nuestra sociedad y presentarle al Gobierno un proyecto de acuerdo que se transforme en ley, con financiamiento, porque el que estamos estudiando no lo tiene y se limita a decir que terminamos con el trabajo de los menores de 15 años, y que también proteja a los niños mayores de 15 años que trabajan. Es decir, se trata de buscar un camino real, concreto, serio, muy responsable y en profundidad, para terminar con esta lacra y que nuestros niños sigan siendo niños y soñando como lo hacen todos los niños que tienen más en Chile y en el mundo entero. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Juan Pablo Letelier. El señor LETELIER (don Juan Pablo).- Señor Presidente, debo confesar que me ha sorprendido el razonamiento del colega que me antecedió en el uso de la palabra. Más aún, porque en torno al tema del trabajo infantil hay focos grises cuando se tocan ciertos tópicos. Es malo que un niño tenga que trabajar. Es muy malo. Y debemos hacer todo lo posible por adecuar nuestra legislación a las convenciones internacionales que deben, por lo menos en ciertos ámbitos, reconocer que los niños no sólo son sujetos de derecho, sino también sujetos de protección. Cuando se pretende elevar en un año, de 14 a 15 años, la prohibición para que los niños trabajen, manteniendo el criterio que se debe regular el trabajo de los menores entre los 15 a 18 años; cuando queremos dar este paso porque es concordante con los acuerdos de la OIT, con la Convención de los Derechos del Niño y con la modernidad más mínima, me sorprende que se haga una apología a la miseria y se diga que deben seguir trabajando o, incluso, se aplaude que algunos niños deban trabajar para sustentar a sus familias. Considero que este tema se aborda con lógicas que no atacan el problema de fondo. Hay tópicos relacionados con este tema, como embarazos no deseados, planificación familiar, familias destruidas, una economía que crece, pero que cada vez produce mayor estratificación y marginación de ciertos sectores de nuestro país. Pero, a mi juicio, no nos debemos dejar llevar nunca por esos efectos negativos, por esos efectos no deseados, por esas realidades que detestamos y lamento que mis reflexiones molesten al colega Salas, pero son mías para que ciertas cosas sigan igual. Yo represento a una de las zonas agrícolas del país, como muchos colegas, en la cual el trabajo infantil es masivo. No hay datos sobre la magnitud del trabajo agrícola infantil en el país. El señor SALAS.- ¿Me permite una interrupción? El señor LETELIER (don Juan Pablo).- No, colega. Al respecto, hay una realidad que necesitamos precisar para conocer su magnitud; pero, sin duda, no estamos hablando de 800 mil niños, ni de 500 mil, ni de 200 mil. El número de niños que beneficia el proyecto es bastante más acotado. Eso se establece de inmediato si se piensa que deben inscribirse al año, en el Servicio Militar Obligatorio, a los más 120 mil menores y que no todos los niños entre 14 y 15 años, que serán alrededor de 100 mil ó 120 mil, están trabajando. En consecuencia, es un segmento pequeño. Es cierto que el impacto de este proyecto puede ser algo ambiguo, porque no todos los niños que trabajan llevados por la necesidad, por la miseria o por la incapacidad de nuestra sociedad de tenderle la mano y garantizar su derecho a educarse, dejarán de hacerlo porque existe esta ley; pero ella refleja la voluntad del Congreso Nacional, a lo menos de su mayoría, que queremos prohibir el trabajo infantil. Es más, la entendemos como una medida, entre otras, tendiente a retener a los niños en los colegios, para que se dediquen a estudiar. Podemos tener diferencias de apreciación. En las zonas agrícolas, donde un tercio de las mujeres son jefes de hogar y las faenas son temporales, el trabajo de los niños les permite comprar sus útiles escolares y ropa; pero jamás voy a llegar a pensar que eso es bueno, ni tampoco mientras yo pueda va a contar con mi aprobación que un niño entre 14 y 15 años esté autorizado a trabajar. Creo que un gesto mínimo de modernidad, de civilización y humanismo es que en nuestro país se prohíba el trabajo de los niños hasta los 15 años y que regulemos cada vez mejor la situación de quienes se incorporan al mundo del trabajo a los 15 años o más. Habrá colegas que argumentarán que los niños de 13 ó 14 años podrán realizar cierto tipo de trabajos sin afectar su desempeño escolar. Podría ser, pero se deben tomar ciertas opciones al respecto. En este momento del desarrollo del país, me declaro contrario a que los niños trabajen, porque, más que nunca, es necesario dar señales claras en nuestra sociedad de que los niños deben ser respetados en sus derechos, pues es uno de los sectores más vulnerables de la sociedad, junto con los adultos mayores. Saludo y felicito a los colegas que presentaron la iniciativa, a la cual hemos adherido muchos Diputados, y espero que muy pronto sea ley de la República. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Coloma. El señor COLOMA.- Señor Presidente, se puede abordar el tema desde muchos puntos de vista. Hemos escuchado en el debate que cada cual ha buscado su propia perspectiva para establecer la posible regulación o prohibición de una actividad que, evidentemente, tiene una relevancia real en Chile. Yo quiero plantear una óptica desde el punto de vista del legislador. No somos comentaristas, psicólogos o sociólogos: somos legisladores; tratamos de crear normas que manden, prohíban o permitan determinadas conductas. Adicionalmente, hay parlamentarios que tienen calificaciones especiales, a quienes aplaudimos, pero lo que se hace en el Congreso es legislar. ¿Cuál es la reflexión que, a mi juicio, debe plantearse un legislador ante el tema del trabajo de un niño de 14 ó 15 años de edad? En primer lugar, si esto es o no deseable. Es la primera discusión importante. Hemos visto multiplicidad de posiciones al respecto. Personalmente, creo que hay que distinguir, al menos, dos grandes ámbitos para tomar una decisión. Uno, el caso del niño que toma una decisión voluntaria en respuesta a un deseo legítimo, que puede tener distintas motivaciones: para perfeccionarse, para contar con recursos, para sentirse útil a la familia o a la sociedad. En esa primera perspectiva no alcanzo a vislumbrar, a pesar de que he puesto especial atención a los patrocinadores del proyecto, cuál sería el beneficio de impedir un trabajo asociado a la voluntariedad de ese niño que en algunos aspectos es joven, pero que, de conformidad con la ley, podría contraer matrimonio si lo autorizan sus padres. Así es que, tal como tienen derechos y obligaciones, pienso que tienen la capacidad para que este cuerpo legislador respete su voluntad. En este primer caso, no veo la razón para impedir por ley el desarrollo de una actividad asumida voluntariamente por el joven como una manera de perfeccionarse. El segundo ámbito es mucho más difícil y complejo: cuando se realiza este trabajo en forma obligatoria, cuando hay algún grado de obligatoriedad en el ejercicio de esa función. Al respecto, existe una segunda distinción que no se ha resaltado suficientemente, es decir, si la obligatoriedad corresponde a una imposición o a una necesidad. Aquí hay una diferencia importante. Si corresponde a una imposición, lo que desgraciadamente existe, como legisladores tenemos que regular y controlar lo que allí ocurre. Si obedece a una necesidad, como legisladores debemos establecer que esa necesidad esté amparada por determinados códigos de conductas o de derecho que impidan que ese trabajo afecte sustancialmente la vida de ese ser humano. Esta distinción es importante para mí. Evidentemente, en el caso de la imposición, uno debe ser exigente y regulador, lo que no impide que esto pueda suceder con niños mayores; pero donde se genera el problema más importante es en el caso de la necesidad. ¿Qué hacer con ese joven, con ese niño que necesita cumplir una función? Hay dos soluciones. Una, la propuesta por los autores del proyecto no me cabe duda, de buena fe, que es decir: “Impidamos ese trabajo, con lo que respondemos al problema que se genera”. La otra, que me parece más acertada, es regular la forma de trabajar. ¿Por qué digo más acertada? Porque también como legislador, y aquí viene el segundo aspecto, tenemos que ver cuál es el efecto que produce la existencia de una norma. A mi juicio, aunque exista una norma que impida el trabajo de los jóvenes entre 14 y 15 años, no podrá derogarse por ley la necesidad de esos jóvenes. Lo que va a ocurrir es que se incentivará a que esos jóvenes desarrollen actividades ilegales. Como parlamentarios, debemos tener especial sensibilidad y cuidado respecto del efecto que producirá una norma, la cual puede estar bien inspirada, como ésta, que trata de impedir una acción de esta naturaleza, pero, a mi juicio, es ingenuo pensar que, porque se dicta una ley, el joven necesitado va a terminar con sus necesidades. Por lo tanto, soy partidario de analizar este tema desde otro punto de vista: no de la derogación del derecho a trabajar, sino que de la regulación de ese derecho. El tema nos entrega algunos aspectos importantes de cómo podríamos hacerlo; pero, a mi entender, derogar por ley esa necesidad, simplemente es desoír la naturaleza humana y nuestra función de legislador. Finalmente, quiero insistir en que aquí también debe existir concordancia con el resto de la legislación, para lo cual volveré al tema del matrimonio. Si en Chile no ha habido una aprobación nuestra en sentido contrario, un joven de 14 años y una niña de 12 pueden contraer matrimonio, lo cual genera también la posibilidad de tener hijos, no veo cómo se les puede impedir trabajar para mantener a su familia. Esa necesidad, en armonía con esa ley, nos genera un desconcierto entre los derechos y obligaciones completamente imposible de resolver hacia adelante. Por eso, al hacer una distinción entre lo voluntario y lo que obedece a una necesidad, y dentro de la necesidad, lo que es impuesto y lo que una persona debe hacer para tratar de satisfacer esa necesidad, resulta inadecuada una ley como la que aquí se ha planteado. Por lo tanto, soy partidario de que la iniciativa vuelva a Comisión para que se busque una fórmula de regular adecuadamente cómo ese joven necesitado va a poder cumplir con su tarea, porque, de lo contrario, estaríamos haciendo trampa en el solitario, al crear una serie inmensa de ilegalidades, a lo que, por cierto, los legisladores no nos podemos prestar. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Roberto León. El señor LEÓN.- Señor Presidente, quiero iniciar mi intervención felicitando al Diputado señor Rodolfo Seguel y a aquellos que tuvieron la feliz iniciativa de redactar este proyecto de ley. También quiero hacer presente a esta honorable Corporación que discrepo muy lealmente de mi camarada y amigo Edmundo Salas y que no comparto las razones que él da para señalar por qué los niños deberían trabajar. Creo que en este Parlamento, junto con analizar las normas legales y las disposiciones que deseamos establecer en el código del ramo, debemos preguntarnos cuál es el Chile que queremos. Cuando tenemos un país que está progresando, desarrollándose y creciendo a tasas del 8 por ciento; cuando tenemos un país que tiene una tasa de cesantía inferior al 5 por ciento, cuando tenemos un país que se está insertando y cada día es más necesario que se incorpore a los mercados internacionales, ¿queremos tener un país que base parte de su fortaleza en el trabajo infantil? ¿Queremos tener un país que recurra al trabajo de los niños para tener una mano de obra barata con el objeto de competir en los mercados internacionales, a través de mano de obra muy barata en el trabajo de los niños? Es algo que no podemos dejar pasar. Para incorporarse a los mercados internacionales, Chile primero debe cumplir los convenios internacionales que prohíben el trabajo de los niños. Y en nuestra legislación existe una norma general, el artículo 13 del Código del Trabajo, que señala que para los efectos de las leyes laborales, se considerarán mayores de edad los mayores de dieciocho años el Diputado señor Coloma, que lamentablemente no se encuentra presente en este momento en la Sala, también debió referirse a ella, y agrega las normas de excepción que se refieren a los menores de dieciocho años y mayores de quince y a los menores de quince años y mayores de catorce, siempre que cumplan determinados requisitos de estudios y de trabajo no dañino para su salud. Tales normas, que se pretende derogar, no se cumplen, han caído en desuso, pero la regulación que reclama el Diputado señor Coloma está establecida en nuestra legislación desde hace muchos años. No operan, y los parlamentarios de distritos rurales tenemos información y antecedentes de que los niños retrasan su ingreso a la educación y se retirar antes del término del año escolar porque deben trabajar en el campo. Entonces, debemos volver a la pregunta inicial: ¿queremos un país que crezca de la mano del trabajo de los niños o queremos uno que sea capaz de insertarse en los mercados internacionales, de cumplir con las normas internacionales y de tener un desarrollo armónico para la sociedad? La discusión de esta materia en la Corporación ha permitido que en los diferentes medios de comunicación se abra un gran debate respecto del trabajo de los niños y de las circunstancias en que lo hacen. Por eso, votaré a favor del proyecto. Por su intermedio, señor Presidente, concedo una interrupción al Diputado señor Salas. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Aunque no corresponde reglamentariamente, porque el señor Diputado hizo uso de sus dos discursos, y como será breve, tiene la palabra el señor Salas. El señor SALAS.- Señor Presidente, seré breve y haré referencia al Reglamento también. En primer lugar, lamento que mi camarada y colega señor León haya puesto en mi boca expresiones que no he dicho, por lo que pido que se retiren de la versión, ya que las considero graves. Nunca he sostenido que quiero que los niños trabajen. Por el contrario, he felicitado a los Diputados patrocinantes del proyecto. Sólo hice una reseña de lo dramático que significa el trabajo para los niños. En el fondo, pedí que el proyecto no se vote hoy y sea discutido en la Comisión de Trabajo en forma más amplia, incluso con el propio Gobierno, para buscar una solución real al problema y evitar que no sólo queden las palabras, porque a medida que avanza la discusión, salen al tapete otras leyes y una serie de antecedentes que debemos considerar, como el que señaló el Diputado señor Coloma sobre las madres solteras de 14 años. Por eso, reitero a mis colegas la petición de que se postergue la votación del proyecto. Lamento que el Diputado señor León me haya tergiversado. A lo mejor, no estaba en la Sala o me entendió mal. Nunca he dicho eso y le pido que retire sus palabras. Mal podría yo, que sufrí lo mismo, estar de acuerdo en que los niños sigan trabajando. Por el contrario, sostuve que ojalá los niños de Chile puedan vivir como niños y seguir siendo niños. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Si el Diputado señor León está de acuerdo, no habría problema en eliminar esas expresiones de la versión oficial. El señor LEÓN.- Señor Presidente, escuché atentamente el discurso del Diputado señor Salas, porque sus argumentaciones me sorprendieron. Pero, si mal no recuerdo el señor Secretario o los taquígrafos podrán confirmarlo, señaló la situación en que iban a quedar los niños de entre 14 y 15 años si se derogaba el inciso tercero del artículo 13 del Código del Trabajo. Cuando se argumenta en esa línea, es porque se está a favor de su mantención. Yo creo que hay que derogar esa norma. Entonces, si interpreté bien y el Diputado señor Salas dijo lo que escuché, no tendría nada que suprimir de mi intervención. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Seguel. El señor SEGUEL.- Señor Presidente, antes que todo, quiero felicitar al nuevo Vicepresidente de la Cámara, que ahora dirige la sesión. Espero que su actuación corresponda a la que han tenido todos los presidentes y vicepresidentes de la Corporación. Felizmente, el tema ha sido discutido en la forma que queríamos los parlamentarios que presentamos esta moción. Tanto en la Comisión de Trabajo como en la Sala, se ha analizado ampliamente la situación de los menores de edad que trabajan. Como bien dijo el Diputado señor León, el tema ha sido considerado por el país. La opinión pública se ha manifestado sobre el trabajo de los menores de edad, a través de los medios de comunicación. Se han expresado distintas opiniones. Quiero conversar especialmente sobre las que planteó el Diputado señor Coloma a quien no veo en la Sala. Él sostuvo que sería bueno que los niños trabajaran entre los 14 y los 15 años, y que se mantenga el trabajo para menores de edad. Agregó que corresponde que lo hagan, porque pueden casarse, previa autorización de sus padres. Si es así, quisiera que responda, o que alguien lo haga por él, ¿por qué no permitimos que los menores de edad también tengan derecho a voto y elegir su Presidente, alcaldes, concejales u otras autoridades? ¿Y por qué no pueden ser candidatos a concejales, alcaldes, Diputados, Senadores o Ministros de Estado? ¿Por qué no pueden conducir un vehículo? ¿Por qué se les ponen tantas prohibiciones para asuntos que se ejercen como ciudadano, porque no tienen la edad? Todas las restricciones de los menores de edad es porque no han tenido el raciocinio suficiente para tener una responsabilidad ante la sociedad como una persona que tiene 18 años. Por lo tanto, me preocupa cuando se hacen planteamientos sin haber pensado seriamente en el contexto de lo que se está diciendo. Creo que debemos dejar claramente establecido ante la opinión pública lo que pensamos los parlamentarios sobre el tema que estamos discutiendo. Un informe de Cepal sobre el panorama social para América Latina, de 1995, publicado sólo el jueves de la semana pasada, respalda en un ciento por ciento la posición de los parlamentarios que hemos planteado la abolición del trabajo de menores de edad. Contiene estadísticas claras no opinamos sólo con el corazón y hace buenas recomendaciones a los legisladores y distintos gobiernos de América Latina. Chile es uno de los países con menor cantidad de niños que trabajan en América Latina, pero no es menos cierto que en los últimos años su porcentaje ha aumentado de 3,1 por ciento a 6,2 por ciento. Los niños que aparecen en las encuestas no son aquéllos a los que se han referido muchos parlamentarios, algunos de los cuales dicen que desde chicos fueron a ayudar a la fábrica o a la industria; pero no estamos discutiendo el trabajo de los menores de edad que son hijos de los dueños de las empresas. No es lo mismo un niño que obedece las órdenes del papá el dueño, que le lleva los documentos de un lugar a otro o vigila a los trabajadores, que son sus empleados, por lo cual va a obtener una mesada no un sueldo de su papá, que el niño abandonado, hijo de padres separados o víctima de alguno de los flagelos de nuestra sociedad; o que el niño que limpia autos en la calle, muchas veces a altas horas de la noche, un poco drogado y con algo de alcohol. El niño que tiene padres equis equis, que nadie conoce, no es lo mismo que el hijo del patrón o del dueño de la industria. Por lo tanto, quiero que se tenga muy claro que hay que legislar para aquellos menores de edad que están desprotegidos, que la sociedad sabe dónde se encuentran, en qué calles están, sobre los cuales no hemos hecho un gran esfuerzo. ¿Dónde se encuentran mayoritariamente estos niños? En la agricultura, ganadería, sector forestal, comercio y ferias. Además, trabajan de pirquineros, de mozos, limpiando autos en las esquinas o haciendo trabajos nocturnos que muchos hemos visto y que ocultamos y no queremos decir. Hacia esos niños debe orientarse esta legislación. La Unicef recoge aquí muy bien lo que dijo el Diputado señor Coloma: hay que regular y poner un tope de edad, que para nosotros es de 15 años. Así vamos a tener una legislación similar o parecida a la que propicia la OIT en el ámbito internacional. En el plano nacional, la regulación debe ser entre los 15 y 18 años, y hemos acogido con mucho agrado la indicación del señor Schaulsohn, a la que muchos Diputados adherimos. ¿Qué dicen la Unicef y la Cepal sobre estos niños? En parte de sus informes expresan que en la sociedad y en la economía se justifica la dedicación exclusiva a estudiar, hasta alcanzar, por lo menos, diez años de estudio y, preferentemente, un nivel de educación secundaria completa. Agregan que es particularmente importante la alta rentabilidad económica que se obtiene al aumentar el gasto educacional, de modo que los niños adolescentes obtengan, a lo menos, tres años más de educación primaria o secundaria. Es decir, la Cepal y la Unicef recomiendan que nos preocupemos de invertir en la educación de los menores de edad, porque la inversión del país en esta área, obviamente, va a ser retribuida en el tiempo, cuando sean trabajadores normales, porque su buena preparación estudiantil o educacional les permitirá defender sus derechos y ejercer bien la labor, obra o faena en la cual se desempeñen. Los citados organismos internacionales señalan que también las empresas obtienen importantes reducciones en sus costos de capacitación laboral cuando la fuerza de trabajo que deben capacitar cuenta con tres años más de educación básica. Si el niño ha tenido mayor educación, obviamente, la empresa va a tener mejor rentabilidad. ¿Cuáles son las conclusiones? Resulta antieconómico, tanto para los protagonistas y las familias que formen en el futuro como para las empresas y el país, que los trabajadores no amplíen, a lo menos en tres años, su actual educación. O sea, se insiste en mantener una buena familia, como muy bien lo han sostenido defensoras del derecho de la familia, las Diputadas señora Aylwin, señorita Saa y otras honorables parlamentarias. Según la Cepal y la Unicef, para que haya una familia sólidamente constituida se requiere que tenga mayor educación. En relación con los ingresos, los que trabajan en esta edad acumulan importantes pérdidas de educación dos o más años de estudio frente a quienes no lo hacen o se incorporan al trabajo a los 18 o más años de edad, lo que trae como consecuencia que durante su vida adulta activa perciban ingresos inferiores alrededor de un 20 por ciento al de un trabajador normal, con educación, si el país se ha dedicado a proporcionársela. Hay otro punto muy importante. Quienes sólo trabajan un promedio de 46 horas a la semana despliegan un enorme esfuerzo físico. Ahora, si además estudian, laboran, a lo menos, 35 horas semanales; pero reciben salarios realmente bajos que, en general, representan la mitad de un sueldo mensual de un asalariado adulto con siete años de estudio. Es mejor no continuar con lo señalado por la Cepal y la Unicef. La contundencia de ese informe nos obliga a dedicar mayor y mejor atención al trabajo de los menores de edad. Por lo tanto, por su intermedio, solicito a las autoridades de Gobierno que dediquen más y mejores recursos para la educación; a los empresarios, que usen los recursos que tienen a través del Sence para capacitar y perfeccionar la mano de obra de los trabajadores chilenos. Por último, voy a reiterar una idea que planteé públicamente y que ha sido muy mal interpretada por algunos parlamentarios, quienes, al parecer, no han entendido nada. Cuando me he referido al bono para los estudiantes en el año calendario, no he hablado de cantidades ni cómo funcionará, sino de la necesidad de destinar mayores recursos para los menores que hoy trabajan, a fin de que el incentivo que ellos tienen al recibir monedas, propinas o cuando trabajan en alguna actividad, que no alcanza a más de un 20 por ciento de un sueldo real se transforme en un aporte que les entregue el Estado a las familias de escasos recursos y a las de extrema pobreza, el cual será fiscalizado por las municipalidades a través de la asistencia de los niños al colegio. O sea, fiscalización en el estudio; regulación a los trabajadores entre quince y dieciocho años; mayor preocupación del Ministerio de Educación por una mejor educación para los menores de edad y más dedicación al tema de la familia, porque el país crecerá en la medida en que le demos mayor educación, espacio y credibilidad a los menores de edad. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra la Diputada señora Marina Prochelle. La señora PROCHELLE.- Señor Presidente, la primera finalidad de importancia que ha tenido esta moción es remover a la conciencia de la ciudadanía y de los legisladores, cada uno en su legítima posición, reconociéndoles respetuosamente el derecho a disentir. En esta iniciativa enfrentamos dos tópicos: uno, desde el punto ético, de valores, de la moral; otro, la realidad de nuestro país. Sin lugar a dudas, yo, como mucho otros creo que una gran mayoría no queremos que los menores se vean enfrentados a trabajar antes de completar una educación formal lo más amplia posible. Sin embargo, reconozco en muchos de ellos la necesidad que tienen de aportar a sus familias de muy escasos ingresos lo poco que puedan recibir en este trabajo. Pero, no por reconocer esta necesidad, puedo decir de que es bueno, desde mi punto de vista. Tenemos el deber de continuar este debate hasta que llegue el momento de votar. Lo que no puedo aprobar, sin lugar a dudas siempre se ha hecho en el pasado es que continuemos con algunas prácticas reñidas, desde mi punto de vista, con lo que menos deseo para los niños del país. Por lo tanto, me gustaría que la discusión se ampliara más aún y que en la Comisión se recogieran las indicaciones de algunos señores parlamentarios, pero no por ello dejar de legislar sobre el tema. Señor Presidente, con su venia, concedo una interrupción al Diputado señor Taladriz. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Taladriz hasta por dos minutos. El señor TALADRIZ.- Señor Presidente, esta discusión tiene que ver un poco con los sueños y las realidades. A mi juicio, los niños no deben trabajar, pero pueden hacerlo. Es una necesidad que existe y que esta legislación, bastante teórica, a mi modo de ver, la pone en el tapete de la discusión. Sin embargo, no veo de qué manera se puede decir que la cesantía es del 5 por ciento cuando en el sector juvenil es bastante mayor. Entonces, es evidente que si estos niños no trabajan, no serán buenos estudiantes, sino cesantes, maleantes, una verdadera lacra para la sociedad. Por lo tanto, sería mucho mejor que trabajaran. Me llama la atención que se considere negativo este hecho, porque el trabajo dignifica, ya que la persona que trabaja se fortalece, se habitúa a mejores costumbres y es más útil para la sociedad. Estoy en contra del proyecto y creo que amerita una discusión más intensa en la Comisión y, a lo mejor, acercarse más a la realidad de la pobreza. Si el Gobierno y nosotros estamos empeñados en su erradicación, vamos a dejar sumidos en ella a niños que no tienen otra alternativa. En mi opinión, este proyecto no apunta en el sentido correcto y tampoco ayuda a los objetivos comunes que estamos compartiendo. Gracias por la interrupción concedida. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Recupera la palabra la Diputada señora Prochelle. La señora PROCHELLE.- Señor Presidente, es verdad lo planteado por mi amigo y colega señor Taladriz. No basta con normar la materia en los términos propuestos, sino que es necesario una amplia gama de otras acciones que, sin lugar a dudas, pasan por iniciativas gubernamentales que tiendan a ocupar el tiempo de estos menores en su real formación y preparación. Pero no por ello la balanza estará inclinada en el sentido de que tengamos que dejar que los niños sigan trabajando, porque siempre se ha hecho y porque el trabajo dignifica. Estoy de acuerdo con eso. De una u otra manera, todos hemos sido trabajadores a lo largo de nuestra vida, pero estamos hablando de menores de edad, de niños entre 14 y 15 años. Por lo tanto, no es lo mismo que referirse a un trabajador de 18 o más años. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Pedro Muñoz. El señor MUÑOZ.- Señor Presidente, los socialistas estimamos que la familia es la institución que biológicamente tiene como misión perpetuar la sociedad, dándole nuevos miembros. Es la encargada de proteger al niño hasta que sea capaz de cuidarse a sí mismo, enseñándole conductas socialmente aceptables. Desde un punto de vista sicológico, es la encargada de satisfacer las necesidades afectivas de sus miembros. El cumplimientos de estos roles depende de diversos factores, entre los cuales son preponderantes los sociales, económicos, políticos e individuales. Cuando la familia se encuentra en situación crítica, sus miembros adoptan estrategias de sobrevivencia, priorizando la satisfacción de sus necesidades más elementales. Por la aplicación de políticas económicas de libre mercado que no han ido acompañadas de medidas compensatorias suficientes en favor de los grupos más débiles, en nuestro país se deteriora la distribución del ingreso y de las oportunidades y se acrecienta el porcentaje de quienes viven en la pobreza. En otras palabras, aumentó el número y se agravó la situación de quienes se encuentran en condiciones de vulnerabilidad. Muchas familias afectadas por la crisis se vieron obligadas a incorporar a sus niños al campo laboral, con el fin de ayudar al sustento familiar. Los menores abandonan sus estudios y la mayoría de las veces se involucran en actividades riesgosas para ellos desde el punto de vista físico y moral, con bajos salarios y sin posibilidades de continuar con una capacitación educativa y laboral para el futuro. Estamos, así, ante menores que despliegan una estrategia de supervivencia, que mantienen el vínculo familiar y realizan actividades que generan ingresos, en respuesta a la crítica situación socioeconómica en que viven. La remuneración que reciben puede ser en dinero, especies o servicios y destinarse a ellos mismos, al grupo al cual pertenecen o a terceros. Pueden utilizar un tiempo parcial o total en una actividad ubicada dentro de la economía formal, informal o marginal. En el país no existen trabajos publicados respecto de los peligros y abusos a los cuales se exponen los menores ante la estrategia de supervivencia. Sin embargo, es claro que sus jornadas de trabajo son compatibilizadas con el estudio, por lo cual no tienen tiempo para recrearse o divertirse. Peor todavía, algunas de las labores que desempeñan pueden ser nocivas para su desarrollo físico, mental, moral o social. En el Diario Oficial del 27 de septiembre de 1990 como lo señalaba un señor Diputado que me precedió en la palabra en la sesión pasada, apareció publicada la ley sobre derechos del niño. En síntesis como no quiero repetir lo que el colega señaló, en esta convención se señalan una serie de normas de tipo administrativo, legislativo, social y educacional que regulan la protección de los niños en el mundo del trabajo, para asegurar que estos menores no estén expuestos a elementos nocivos para su salud o desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social. La Conferencia Internacional del Trabajo, en su reunión 81, de 1994, en la memoria del director general, dentro del tema de igualdad y protección social señalaba tres actividades importantes para este año. El primer tema se refería a la igualdad de la mujer en el empleo; el segundo, a la eliminación del trabajo infantil; y el tercero, a la situación de los trabajadores migrantes. La Organización Internacional del Trabajo ha señalado que uno de sus objetivos básicos es la eliminación del trabajo infantil. Esto se aplica, en particular, a toda forma de trabajo que resulte nociva para la salud de los niños o dificulte su desarrollo como seres humanos y miembros de la sociedad. Ahora bien, el ámbito del trabajo infantil es tan vasto y la costumbre de aprovecharlo se halla tan arraigada en muchos países, que se necesitará tiempo y una mejora paulatina de las condiciones socioeconómicas para alcanzar ese objetivo. Por consiguiente, lo que se persigue en el momento es la adopción de medidas de orden social y legislativas con miras a su progresiva erradicación. El director general de la Conferencia Internacional del Trabajo señalaba que también se debe velar para que la educación nacional y las políticas económicas frenen el trabajo infantil en vez de agravarlo, como tan a menudo ocurre. A título de ejemplo, valga mencionar que si bien en la mayoría de los países la enseñanza primaria y la secundaria son gratuitas, cuando se han de pagar los uniformes, el material escolar y los libros, dichos niños pueden verse obligados a trabajar para sufragar los gastos. Señor Presidente, por las consideraciones expuestas, sumadas a las analizadas en la Comisión de Trabajo y Previsión Social de esta Cámara, la bancada de Diputados socialistas anuncia su voto favorable al proyecto que nos ocupa, con la clara intención de que, a partir de la aprobación de este proyecto que deroga la norma que regula la contratación y prestación de servicios de los menores de l5 años y mayores de 14, se inicie una amplia discusión y debate sobre la problemática de fondo: el trabajo de los menores en nuestro país y la necesaria preocupación de la sociedad toda de otorgar protección a nuestro recurso humano del futuro: nuestros hijos menores de 18 años. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Señores Diputados, por acuerdo de la Cámara este proyecto se votará al término del Orden del Día, esto es, a las 13.35. Tiene la palabra el Diputado señor Balbontín. El señor BALBONTÍN.- Señor Presidente, como lo han dicho diversos señores Diputados, estamos frente a una interrogante de carácter ético: si aceptamos o no que en Chile trabajen los niños. Si la pregunta es ésa, mi respuesta es no. Se han dado argumentos importantes sobre el punto, pero más bien válidos para épocas pasadas. Se ha expresado que la explotación de los niños comenzó a partir del proceso de la revolución industrial. Fundamentalmente fue descrita por Dickens y Víctor Hugo. Hablamos, entonces, de aquellos procesos en virtud de los cuales se inició el cambio en la organización social del trabajo, destinado a subdividirlo y, por lo tanto, que distintos tipos de trabajos pesados no pudiesen ser llevados a cabo por niños en la industria textil, minera y otras. Pero ahora estamos esto es lo quiero hacer presente a la honorable Cámara en 1996 y debemos referirnos a un país que no es Francia ni Inglaterra de fines del siglo pasado o de comienzos de éste. Estamos hablando de un país con un ingreso de 5.000 dólares per cápita y a un grupo de edad entre, según nos señala la Dirección de Estadísticas y Censos, los 15 y 19 años, es decir, alrededor de 1.200.000 personas. Y las aludidas por el inciso tercero del artículo 13, que se piensa derogar, no serían más allá de 300 mil niños, lo que estaría de acuerdo con lo que la OIT, la Unicef y otros organismos internacionales demandan de este país civilizado. Por lo tanto, en primer lugar, quiero manifestar claramente mi apoyo a la idea de legislar sobre la materia. En segundo lugar, como éste es un proceso, es indispensable garantizar no sólo el que los niños de 14 a 15 años no trabajen, sino que tengan acceso a dos cuestiones vitales, como son la educación y la formación. Hablamos de personas que, psiquiátrica y psicológicamente, son adolescentes. Es decir, que no tienen completamente desarrolladas todas sus capacidades, ni en el campo del conocimiento que lo percibe la educación, ni, sobre todo, en algo que muchos dicen defender, pero que luego atacan: en su formación de carácter afectivo. Por lo tanto, se trata de precaver situaciones que pueden ser deformantes para el niño en el ámbito laboral o en su desenvolvimiento en la sociedad. Cuando hablamos de los niños que están en un nivel de alto riesgo en Chile 55 mil que se encuentran bajo la protección del Sename y 300 mil que, aproximadamente, no están bajo la cobertura familiar nos referimos a un grupo suficientemente importante. A mi juicio, este proyecto busca una mejora, un avance, que no es definitivo, que nos pone a la par de la civilización, si es que queremos participar en escenarios internacionales. En todo caso, lo relevante es que, junto con establecer la restricción, generemos caminos en ese sentido deben formularse las indicaciones para garantizar que esos niños tengan educación y formación adecuadas, de calidad suficiente para defender a una institución tan cara como es la familia. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Terminado el Orden del Día. Estaban inscritos para hacer uso de la palabra los siguientes señores Diputados: Gajardo, Ojeda, Aylwin, Navarro, García, don René Manuel; Rodríguez, Paya, Ortiz y la Diputada señora María Angélica Cristi, quienes podrán insertar sus intervenciones en el Boletín de Sesiones. De acuerdo al artículo 85 del Reglamento de la Corporación, se inserta el siguiente discurso no pronunciado en la Sala: El señor OJEDA.- Señor Presidente, permitir el trabajo permanente de los niños menores de 15 años es contribuir a su propia pobreza. El menor que se margina del estudio sistemático, continúa entonces en su círculo de pobreza. Eso es como permitir que el pobre siga siendo pobre. Porque se margina del proceso de formación y educación y, con ello pierde toda opción de perfeccionamiento al salir de la escala que le posibilita ascender social y culturalmente. El menor de 15 años que trabaja es el niño pobre, el que tiene que ingresar a un trabajo por las circunstancias económico sociales de su hogar, para ayudar a su familia. El niño de un hogar acomodado no trabaja, por el contrario, tiene toda la atención para su educación. El niño que trabaja, en lugar de una legislación permisiva en este caso, debe tener la protección del Estado, el que debe proveerlo de todos los instrumentos y mecanismos para impedir que él salga de la esfera educativa y familiar y tenga que forzadamente ingresar al mundo laboral, que le es ajeno por sus condiciones físicas y sicológicas. La persona ejecuta a través de su vida actos que están en relación con su formación y sus condiciones físicas. En el caso del niño que trabaja, le adelantan una fase, creamos un niño hombre, un niño trabajador, al que forzamos y empujamos a una fase que no le corresponde. Más aún, cuando no tiene un tratamiento adecuado, porque a veces es objeto de explotación y de injusticias. Señor Presidente, estos niños trabajan no porque lo deseen, sino porque sus circunstancias de pobreza los llevan a esta situación, pese al interés que tengan por estudiar. Por ello, nuestra responsabilidad debe centrarse en prohibir que trabajen y crear las condiciones e instrumentos que los retengan en los estudios. Señor Presidente, la CEPAL, en colaboración con la UNICEF y el Fondo de Población de las Naciones Unidas, acaba de realizar un estudio dando a conocer un lapidario informe. Entre 16 y 18 millones de niños latinoamericanos trabajan. Muchos dejan sus estudios para siempre, el 17% de los niños y adolescentes latinoamericanos trabaja para ayudar económicamente a sus hogares. En algunos países la cifra se eleva al 32%, pero los salarios que ganan estos menores son tan bajos que su labor no contribuye a combatir la extrema pobreza. El informe muestra para Chile cifras preocupantes, dado que en 1987 trabajaba el 3,8% de niños y adolescentes. pero la cifra subió a 6,2% en 1992. El estudio sostiene que el trabajo infantil es un fenómeno extendido, de consecuencias preocupantes, que continúa afectando a los niños de nuestro país, pues es un medio al que recurren los hogares para aliviar las situaciones de pobreza y de extrema pobreza que deben enfrentar porcentajes elevados de la población. Agrega que el fenómeno “es mucho más frecuente en los hogares pobres, pero los ingresos que ganan los menores son tan bajos (como promedio menos de la mitad del salario promedio de un adulto con educación primaria), que el impacto agregado en términos de reducción de la pobreza es poco significativo. La sociedad paga un precio por ese trabajo infantil, dice el informe “si bien permite complementar los ingresos de los hogares, coloca a ese 17% de los niños y adolescentes que trabajan, en una clara desventaja con respecto a aquellos que no lo hacen y que destinan todo su tiempo a la escuela”. “El panorama social (de América Latina 1995) muestra que los menores que trabajan pierden dos o más años de estudio. Tres de cada cuatro menores que trabajan no estudia, como consecuencia de ello, durante su vida adulta reciben ingresos por lo menos 20% más bajos”. En este sentido es uno de los mecanismos más claros de la reproducción intergeneracional de la pobreza: los niños que hoy trabajan, mañana constituirán familias más numerosas y con menor capacidad para generar ingresos, y a la vez, su bajo nivel educacional repercutirá adversamente en sus hijos; asimismo, los organismos de la O.N.U. advierten que los efectos sociales de este trabajo son “enormes”. La Cepal y la Unicef proponen políticas que deben adoptarse frente a esta diferencia social. Entre ellas tenemos: Las dirigidas a retener a los menores en la escuela el mayor tiempo posible; a ejercer un control efectivo de los casos en que no se cumple la legislación en materia de trabajo infantil, y a diseñar los mecanismos expeditos de retención del niño en la escuela. El trabajo de niños en las calles debería ser materia de un estricto control, pues allí se dan las situaciones más aberrantes de no respeto de sus derechos. Las políticas focalizadas en los hogares de más bajos ingresos podrían incluir como dimensiones importantes para el otorgamiento de subsidios monetarios, la presencia o no de menores y adolescentes que trabajan, buscando compensar el ingreso que estos aportan de manera de asegurar que asistan a la escuela. La inversión educacional oportuna, vale decir, realizada en el período de edad que corresponde, “mejora el desarrollo cultural y social de los jóvenes y proporciona una preparación intelectual más adecuada para quienes aspiran a niveles superiores de educación”. Señor Presidente, apoyar el presente proyecto de ley es adecuar nuestra legislación a los convenios internacionales que Chile ha suscrito, y que invita a los Estados a abolir el trabajo de estos menores. Pensamos que el trabajo de los menores de 15 años, es también una forma concreta de generación de la pobreza. He dicho. El señor ESPINA.- Reglamento. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra Su Señoría. El señor ESPINA.- Señor Presidente, en la sesión anterior, el Diputado señor Schaulsohn expresó que las normas de otro proyecto de ley podían incorporarse a éste. ¿Me podría precisar en qué quedó eso? El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Están presentadas las indicaciones correspondientes; por lo cual, de aprobarse la idea de legislar, regresará a la Comisión, donde se tratará el tema. En votación la idea de legislar sobre el proyecto de ley que modifica el Código del Trabajo para abolir el trabajo de los menores de 15 años. Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 55 votos; por la negativa, 8 votos. Hubo 15 abstenciones. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Además, se agregarán los votos favorables de los Diputados señores Ortiz y Muñoz. Aprobada la idea de legislar. Votaron por la afirmativa los siguientes señores Diputados: Acuña, Aguiló, Allende (doña Isabel), Arancibia, Ascencio, Aylwin (don Andrés), Aylwin (doña Mariana), Balbontín, Ceroni, De la Maza, Elgueta, Elizalde, Encina, Escalona, Estévez, Fuentealba, Gajardo, García (don René Manuel), García-Huidobro, Gutiérrez, Huenchumilla, JocelynHolt, Latorre, León, Letelier (don Juan Pablo), Makluf, Martínez (don Gutenberg), Matthei (doña Evelyn), Montes, Morales, Muñoz, Naranjo, Navarro, Ojeda, Ortiz, Palma (don Andrés), Palma (don Joaquín), Pérez (don Aníbal), Pollarolo (doña Fanny), Prochelle (doña Marina), Reyes, Saa (doña María Antonieta), Sabag, Schaulsohn, Seguel, Silva, Tohá, Tuma, Ulloa, Valenzuela, Venegas, Viera-Gallo, Villegas, Villouta y Walker. Votaron por la negativa los siguientes señores Diputados: Cardemil, Espina, García (don José), Hurtado, Jürgensen, Orpis, Rodríguez y Taladriz. Se abstuvieron los Diputados señores: Coloma, Correa, Cristi (doña María Angélica), Chadwick (don Andrés), Ferrada, Karelovic, Leay, Longton, Longueira, Melero, Munizaga, Paya, Pérez (don Víctor), Prokuriça y Salas. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- El proyecto vuelve a Comisión. El proyecto fue objeto de las siguientes indicaciones: Al artículo primero. 1.- Del Diputado señor Viera-Gallo, para intercalar el siguiente número nuevo: “Reemplázase, en el inciso segundo, el guarismo “quince” por “dieciséis”.”. 2.- De la Diputada señora Aylwin y Diputados señores Ascencio, Girardi, Seguel, Sota y Tuma, para sustituir el texto del proyecto por el siguiente: “Artículo primero.- Toda prestación de servicios de los menores de 18 años de edad, de los que provenga algún provecho o beneficio, directo o indirecto, para la persona natural o jurídica sin cuya anuencia o tolerancia no habría sido posible dicha prestación, se entenderá hecha bajo dependencia y subordinación de la beneficiaria, presumiéndose la existencia de un contrato sujeto a las disposiciones del Código del Trabajo, aunque no se haya dado cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 13 de dicho cuerpo legal y sin que la falta de pacto y/o pago de una retribución económica afecte tal presunción. Artículo segundo.- No se aplicará lo dispuesto en el artículo primero si consta por escrito el contrato especial de trabajo de estudiantes, siempre que concurran los requisitos y las condiciones que la presente ley establece. Artículo tercero.- El contrato especial de trabajo de estudiantes es aquél en que el trabajador es un menor de 18 años de edad y mayor de 14, actualmente cursando la educación básica, media o técnico profesional, que se obliga a ejecutar una o más labores específicas que reúnan las características que establece el artículo cuarto, bajo las condiciones que establecen las disposiciones de esta ley. Artículo cuarto.- El contrato que regula esta ley sólo podrá celebrarse respecto de aquellos servicios o labores que de conformidad al Código del Trabajo esté permitido realizar a los menores según su edad y que, además, puedan por su naturaleza llevarse a cabo alternativa e indistintamente por diversas personas. Se entiende que reúnen dichas condiciones, especialmente, todas aquellas labores o servicios cuya ejecución consiste en actos aislados que no forman parte de un proceso y/o que en la práctica suelen desarrollarse alternativamente por distintas personas, tales como los que consisten en empaquetar y/o trasladar las mercaderías o productos que los establecimientos, tiendas, bodegas y otros similares distribuyen o venden, o en realizar o colaborar en la realización de trámites o consultas relacionados con la celebración de actos jurídicos propios del giro del establecimiento, tienda o bodegas, ya sea a petición de los propios dueños, de los clientes y/o empleados de aquél; en todos los servicios a que se refiere el inciso segundo del artículo 8º del Código del Trabajo, cuando la persona no los presta o ejecuta a un público que ella elige o con quienes contrata directamente y, en general, respecto de los cuales la Dirección del Trabajo no dictamine la presunción del artículo 8º inciso primero del Código del Trabajo y/o que habitualmente se realizan sin contrato de trabajo escrito y percibiéndose sólo propinas por concepto de ingresos. Artículo quinto.- Corresponderá a la Dirección del Trabajo resolver, de oficio o a petición de cualquier persona que lo solicite, los casos en que existan dudas sobre la concurrencia de las condiciones expresadas, respecto de una o más labores determinadas, o de uno o más casos específicos. Artículo sexto.- El contrato a que se refiere esta ley, estará además sujeto a las siguientes reglas especiales: a) Para su celebración se debe contar con la autorización expresa de las personas que señala el artículo 13 del Código del Trabajo y acompañar certificado del establecimiento educacional donde el menor esté cursando su educación en el que deberá constar el nivel que cursa el menor y el horario en que se desarrollan las clases. Dicho documento será reactualizado en los meses de marzo y septiembre de cada año. Para los efectos de esta ley, se entenderá que el empleador cumple la obligación del inciso final del artículo 9 del Código del Trabajo, sólo si al contrato se adjunta el documento de la letra a) precedente. b)El contrato será siempre de duración indefinida. c)La duración de la jornada ordinaria de trabajo no excederá de 120 horas al mes, debiendo consignarla en el contrato sólo si se pactare una inferior a dicho máximo. d)La jornada de trabajo será flexible, de manera que el trabajador pueda cumplirla en los días y horas que él determine, teniendo en cuenta sus obligaciones escolares. Podrán sin embargo las partes acordar en el contrato, que el trabajador indicará por escrito al empleador, semanal o quincenalmente, los días y horas en que distribuirá la jornada. e)La jornada semanal podrá distribuirse incluyendo hasta dos domingos al mes. f)Si la distribución de la jornada hecha por el trabajador de conformidad a la letra e) comprende todo o parte del tiempo durante el cual, de conformidad al certificado de la letra a), el menor debe asistir a clases, se entenderá que el trabajador incurrió en causal de terminación del contrato de trabajo, pudiendo el empleador que tome conocimiento del hecho, ponerle término de inmediato en las condiciones del artículo segundo de la ley 19.010. El empleador estará obligado a poner término al contrato si fue informado de la situación a que se refiere el inciso precedente, por el Inspector del Trabajo que la constató en el ejercicio de las funciones y atribuciones que le confiere el decreto con fuerza de ley Nº2 de 1967 y modificaciones posteriores. g)El monto mensual de la remuneración no podrá ser inferior al 60% del ingreso mínimo mensual y si se establecieran o de hecho se trabajaran jornadas parciales, la remuneración no podrá ser inferior a dicho mínimo, proporcionalmente calculado. h)La remuneración se pagará mensualmente. i)El trabajador tendrá derecho a asignación de colación por los días en que trabaje a lo menos 4 horas diarias y ésta se liquidará y pagará una vez a la semana, el día que el empleador determine en el contrato, o los viernes antes de las 18 horas, si en él nada se dijera. El empleador puede en reemplazo del pago en dinero de dicha asignación, dar alimentación al trabajador en los días que corresponda. No obstante ser obligatoria, la asignación de colación no constituye remuneración. j)No será causal de terminación del contrato de trabajo la del número 3 del artículo 2 de la ley 19.010, salvo que la inasistencia, en las condiciones que dicha disposición establece, exceda al 20% de la jornada máxima de la letra j) o de la pactada en el contrato, según sea el caso, o si se produjere en los días y horas convenidos semanal o quincenalmente, de conformidad a la letra f) precedente. k)Será causa justificada para no concurrir a sus labores, las exigencias escolares certificadas por escrito por la Dirección del establecimiento educacional respectivo. l)El trabajador podrá avisar por escrito al empleador, con no menos de 8 días de anticipación, su no concurrencia por un tiempo no inferior a 15 días, en las épocas de pruebas o exámenes escolares. En todo caso, la remuneración que el trabajador perciba será la proporción que corresponda al tiempo efectivamente trabajado y sobre dicha cantidad deberá deducir el empleador las cotizaciones de la seguridad social y demás que corresponda de conformidad a lo dispuesto en el Código del Trabajo, aunque las inasistencias se ajusten a las letras k) y l) de este artículo. m)Los empleadores que exijan el uso de uniforme, deberán proveer de él al trabajador, sea en propiedad o comodato. Artículo séptimo.- El contrato de trabajo de que trata esta ley no hará perder al menor trabajador su calidad de carga familiar ni de beneficiario de cualquier otro derecho que en razón de su edad y/o de parentesco le correspondan, cualquiera que sea su origen. Artículo octavo.- En los casos en que las labores que los menores realicen en virtud de este contrato especial, se relacionen con la atención de público o prestación de servicios directos a los clientes del empleador, éste deberá colocar avisos en cantidad y ubicación suficientes en todos los lugares a que tenga acceso el público, comunicando que dichos trabajadores están expresamente autorizados para recibir propinas, las que por las características y condiciones en que se prestan los servicios, constituyen una parte importante de sus ingresos. Artículo noveno.- Las indemnizaciones por años de servicios y substitutivas del aviso previo, que de conformidad a la ley 19.010 el empleador esté obligado a pagar al trabajador, serán equivalentes a 15 días del promedio de las remuneraciones de los últimos cinco meses, por cada año de servicio y fracción superior a 6 meses, prestados continuamente a dicho empleador, con el aumento del 20% a que se refiere el artículo 10 de dicha ley, en los casos en que de conformidad a dicha disposición ésta sea procedente. Artículo décimo.- Las infracciones a las disposiciones de esta ley en que incurran los empleadores, se sancionarán con multa a beneficio fiscal de 5 a 15 unidades tributarias mensuales, incrementándose hasta en 15 unidades tributarias mensuales por cada 20 trabajadores afectados por la infracción. Estas multas se duplicarán en caso de reincidencia dentro de un período no superior a cuatro meses. Artículo décimo primero.- Se aplicarán al contrato especial de trabajo de los menores estudiantes que crea esta ley, en subsidio de sus disposiciones y en todo lo que no fueren contrarias a ellas, el Código del Trabajo, la ley 19.010 y demás normas laborales vigentes. Disposición transitoria.- Los menores de 18 años que a la fecha de entrada en vigencia de la presente ley se encontraren prestando servicios sin contrato de trabajo, podrán, si se cumplen los requisitos de este contrato especial, optar entre su celebración, con la persona que directa o indirectamente se beneficia con dichos servicios y sin cuya anuencia o tolerancia no habría sido posible su prestación, o dejar de prestarlos a cambio de una indemnización equivalente a 5 veces el 60% del ingreso mínimo mensual vigente a la fecha de su pago efectivo. También tendrán derecho a la señalada indemnización los menores que en iguales condiciones hubieren prestado sus servicios por 3 o más meses, con posterioridad al 1º de septiembre de 1992 y que hubieren dejado de hacerlo por voluntad de la persona natural o jurídica que directa o indirectamente se beneficiaba con ellos.”. -o- VI. INCIDENTES REALIZACIÓN DE COMICIOS COMUNALES EN FECHAS DIFERENTES, POR REGIONES. Oficio. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Como no hay proyectos de acuerdo, pasaremos a Incidentes. El primer turno corresponde al Comité de la Democracia Cristiana. Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. El turno siguiente corresponde al Comité de Renovación Nacional. Tiene la palabra el Diputado señor Luis Valentín Ferrada. El señor FERRADA.- Señor Presidente, la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia está estudiando una moción de varios señores Diputados, encabezados por don Ignacio Walker y entre los cuales me cuento, que tiende a resolver el problema de cronología que se ha presentado en el sistema electoral chileno. Tal como está el actual calendario electoral para los próximos 20 años se prevé que deberían realizarse 17 elecciones generales nacionales distintas. Esto también fue objeto de debates y planteamientos en el último Congreso Pleno, en el que se aprobó una norma transitoria para fijar la próxima elección municipal. Dentro del marco de esos estudios, solicito que se oficie al Director del Registro Electoral y al Ministerio del Interior, Subsecretaría de Desarrollo Regional, para que se nos hagan llegar estudios relativos a la posibilidad de que las elecciones municipales en el futuro no tengan carácter nacional, sino que se realicen en fechas distintas, por regiones, lo cual podría ser un elemento que contribuiría, a lo menos, a aclararnos el problema que actualmente enfrentamos. Por una parte resolvería los problemas originados en cuestiones climatológicas, que muchas veces se han presentado. Ello permitiría que en las regiones del norte del país las elecciones municipales se celebraran en el invierno, y, en el sur, en el verano. Pero el punto central es el siguiente. Al efectuarse las próximas elecciones municipales en fechas distintas por agrupaciones territoriales, se contribuiría a descomprimir notablemente el tema del calendario electoral previsto para los próximos años. Y algo más. Subyace en esta idea un fundamento distinto. Quienes somos partidarios de proponer una indicación como la que señalo y que estimamos que una idea como esta ayudaría poderosamente a focalizar y volver a su naturaleza propia el sistema de la elección municipal, al disponerse por regiones fechas distintas e independientes, no cabe duda de que la elección municipal adquiriría un rango no político, mucho más conforme con los intereses de cada comunidad y nunca tendrían ese perverso carácter plebiscitario de naturaleza política que suele asignarse aun a las elecciones comunales en el país. En consecuencia, solicito que se oficie al Ministerio del Interior y al Director del Registro Electoral para que informe sobre la posibilidad y factibilidad práctica de realizar los comicios municipales en fechas diferentes por regiones o, a contrario sensu, abandonar el sistema de carácter nacional, en una sola fecha para todo el país, vigente hasta ahora. He dicho. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Se enviarán los oficios solicitados por Su Señoría. APLICACIÓN DE LA LEY Nº 19.265. Oficio. El señor ESTÉVEZ (Presidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Jürgensen. El señor JÜRGENSEN.- Señor Presidente, me voy a referir a la aplicación de la ley Nº 19.265 y a la puesta en marcha de las llamadas corporaciones viales, cuya orientación está focalizada en el mantenimiento y conservación de la red vial a niveles comunal, provincial y regional de las Regiones Octava, Novena y Décima. En la Décima Región de Los Lagos se han constituido cinco corporaciones viales correspondientes a las provincias de Valdivia, Osorno, Llanquihue, Chiloé y Palena, formadas, fundamentalmente, por los señores alcaldes, las juntas de vecinos y otras organizaciones sociales. A esas corporaciones se asignaron 9 millones de dólares que equivalen a más de 3 mil 600 millones de pesos para adquirir maquinarias. Para las Regiones Octava, Novena y Décima se compraron 20 motoniveladoras, 10 buldozers, 10 retrocargadores, 10 cargadores frontales, 10 rodillos y 40 camiones tolvas, pero estos equipos no están en funcionamiento, porque las corporaciones no cuentan con personalidad jurídica ni con estructura organizacional formal. A las corporaciones de la Décima Región correspondería la siguiente maquinaria: 8 motoniveladoras, 8 buldozers, 4 retrocargadores, 4 cargadores frontales, 4 rodillos y 16 camiones tolvas que corresponden a cuatro módulos para cinco corporaciones viales, la cual será entregada a las cuatro corporaciones que presenten los mejores proyectos respectivos. Estamos ante caminos en mal estado de conservación y una grave subutilización de recursos, ya que toda esa maquinaria comprada se encuentra estacionada en los recintos de la Dirección de Vialidad de Santiago y no puede ser utilizada mientras no se implemente como es debida la forma jurídica y la estructura de cada corporación. Aquí existe, entonces, una responsabilidad directa de los alcaldes que asumieron las presidencias de las corporaciones, puesto que no han realizado los trámites correspondientes para ponerlas en marcha. Esta subutilización perjudica directamente a los usuarios de los caminos de la Décima Región, ya que éstos necesitan mantención urgente. Por estas razones, solicito que se dirija oficio al Ministro de Obras Pública para que se sirva informar acerca del proyecto general de conservación de caminos que se llevará a efecto a través de las corporaciones viales de la Décima Región, constituidas de acuerdo con la ley Nº 19.265, indicando el programa de trabajo para 1996, los caminos que se beneficiarán, los anteproyectos de las obras que se ejecutarán, su costo, financiamiento y el criterio de priorización que se aplicará. Igualmente, ruego que se especifique la composición del patrimonio de cada una de las corporaciones viales, su personal y el nombre del gerente técnico de cada una de ellas. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviará el oficio solicitado por Su Señoría. MEDIDAS DEFINITIVAS PARA PALIAR LOS EFECTOS DE LA SEQUÍA EN COQUIMBO. Oficios. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Munizaga. El señor MUNIZAGA.- Señor Presidente, los habitantes de Coquimbo están viviendo las consecuencias de la tremenda sequía que afecta a la zona, la cual es la más grande del presente siglo: malas cosechas, desempleo, muerte de ganado, destrucción de viñedos y frutales son algunas de esas consecuencias. En la parte alta de los valles, los agricultores están regando sus plantaciones cada 18 días y en muchos hogares falta el sustento. El Gobierno ha destinado recursos para paliar esos efectos, pero, lamentablemente, o han sido escasos o no han llegado a la totalidad de los interesados, por lo que no han aliviado sus necesidades más inmediatas. Creemos que, ante tan dramática situación se requiere tomar medidas que solucionen de manera definitiva los problemas de la presente sequía y las futuras que afecten el norte chileno. Algunas medidas dicen relación con habilitación de pozos profundos y pavimentación de canales. Al respecto, estimo indispensable que el Ministerio de Hacienda entregue mayores aportes a Indap para la ejecución de proyectos de acción directa. Por ese medio el instituto podrá, junto con las asociaciones de canalistas, construir pozos profundos o pavimentar algunos canales, lo cual constituirá una solución definitiva del problema. Por otra parte, es indispensable otorgar un concurso especial de subsidio de riego para la región de Coquimbo, a fin de que los pequeños y medianos campesinos y agricultores apliquen riego tecnificado en sus viñedos o en sus frutales. Ello cambiaría la vida de esa gran cantidad de gente que hace patria en los distintos rincones de nuestra región, aun en la difícil situación de sequía que los afecta en estos momentos. En atención a lo anterior, solicito que se oficie, en mi nombre, al señor Ministro del Interior, a fin de que pida a la Comisión Nacional de Riego que considere un concurso especial de subsidio de riego para la región de Coquimbo, con flexibilidad en las bases, de modo que pueda atenderse a la gran cantidad de medianos y pequeños campesinos y agricultores que hoy requieren una solución definitiva a su problema. Asimismo, solicito que se oficie a los señores Ministros del Interior y de Hacienda, a fin de aumentar los recursos que se destinan para proyectos de acción directa del Indap, con el objeto de poder ejecutar un programa de construcción de pozos profundos para las asociaciones de canalistas que organicen a sus regantes para ese efecto. Creo que estas medidas definitivas ayudarán reitero a paliar la enorme sequía que afecta a la región. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviarán los oficios solicitados por Su Señoría. ANTECEDENTES SOBRE SOLUCIÓN A CARENCIA DE AGUA EN ARICA Y PARINACOTA. Oficio. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Continuando en el tiempo del Comité de Renovación Nacional, tiene la palabra el Diputado señor Carlos Valcarce. El señor VALCARCE.- Señor Presidente, en primer lugar, quiero agradecer a la Mesa y a todos los Comités de las distintas bancadas por haberme designado vicepresidente, en el Parlamento Latinoamericano, en representación de Chile. En segundo lugar, la ciudad de Arica recibió la información en el sentido de que la Empresa de Servicios Sanitarios de Tarapacá, Essat, manifestó a sus autoridades que no cursará ninguna autorización más para construir nuevas poblaciones, puesto que éstas agravarían la escasez de agua existente. Ante esa situación que los Diputados de la zona hemos planteado durante bastante tiempo, quiero que se oficie al señor Ministro Vicepresidente Ejecutivo de Corfo para que informe a esta Cámara, a la brevedad posible, acerca del estudio de solución del problema de carencia de agua en las provincias de Arica y Parinacota, comprendida en el plan integral de desarrollo que se ha diseñado para ellas. Precisamente, la ley Arica se fundamenta en el desarrollo sostenido de la zona, pero si no hay agua, evidentemente dicho desarrollo no se materializará. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviará el oficio solicitado por Su Señoría, con la adhesión de los señores Diputados de la bancada de Renovación Nacional y de los Diputados señores Masferrer y Salvador Urrutia. APLICACIÓN DE MEDIDAS ANUNCIADAS POR EL MINISTERIO DE AGRICULTURA. Oficio. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Carlos Kuschel. El señor KUSCHEL.- Señor Presidente, solicito que se oficie al señor Ministro de Agricultura para que informe sobre el avance de la aplicación de 48 medidas anunciadas para el sector agrícola en marzo del año pasado, las cuales no hemos visto implementadas en la práctica, así como tampoco las relativas a atender el problema de sequía, particularmente de las comunas de Calbuco, Cochamó, Maullín y Puerto Montt. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviará el oficio solicitado por Su Señoría, con la adhesión del Diputado señor Jürgensen. PROPUESTA DE INCORPORACIÓN DE PROVINCIA DE CHACABUCO A REGIÓN METROPOLITANA. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- En el turno correspondiente al Comité de la Unión Demócrata Independiente, tiene la palabra el Diputado señor Patricio Melero. El señor MELERO.- Señor Presidente, sean mis primeras palabras para darle la bienvenida en su nueva responsabilidad y desearle el mejor de los éxitos en tan merecido cargo. Hoy quiero referirme a la propuesta del Ministerio de la Vivienda en el sentido de modificar el plano regulador metropolitano de Santiago, a fin de incorporar la provincia de Chacabuco. La medida permitirá legislar sobre el uso del suelo de toda esa provincia, que comprende las comunas de Colina, Lampa y Tiltil, y por ello los tres municipios correspondientes han hecho presente observaciones al respecto, sobre las cuales he hecho también algunos comentarios que hoy deseo reiterar. La primera observación que surge sobre la propuesta del Ministerio de la Vivienda en relación con el plano intercomunal de la provincia de Chacabuco constituye la siguiente pregunta: ¿Por qué se incluye a la provincia de Chacabuco en el plano regulador metropolitano de Santiago? No entiendo este cambio de enfoque, en circunstancias de que el objeto original de los municipios de la provincia es desarrollar un plano regulador intercomunal. ¿Qué razón hay, entonces, para quitarle esa potestad en virtud de los planos intercomunales sobre los cuales trabajan los municipios, no considerarla, anexarla al gran plano intercomunal de Santiago y generar un centralismo en las decisiones, otorgándoles a las autoridades ministeriales el casi total manejo político del crecimiento de la provincia y sus respectivas comunas, al menos por un plazo de tres años, como establece la proposición? En segundo lugar, como en el plan propuesto por el Ministerio de la Vivienda las decisiones de todo tipo las toma la autoridad o, al menos, interviene en ella en diversos grados, no se deja su habitual poder de decisión al libre mercado. Por ejemplo, hoy mucha gente quiere irse a vivir a Colina. De hecho, como es de conocimiento público, el valle de Chicureo ha tenido una fuerte expansión en ese sentido; pero a esa comuna se le limitan fuertemente sus posibilidades de expansión y poblamiento, a fin de que se cope y rebase pronto, desplazándose la gente hacia la llamada “terraza norte”, básicamente, a sectores de la comuna de Tiltil, aunque la voluntad original de la gente no sea irse a vivir a ese sector más al norte, sino más bien a la zona de Colina. Creo, sinceramente, que el mercado no funciona así y ese plan probablemente estará destinado al fracaso. ¿Cómo la gente no se va a ir a vivir a Polpaico o a huertos familiares por el solo hecho de que allá se venden tierras que se urbanizarán? Simplemente, ocurrirá que la presión natural del mercado terminará por poblar los terrenos de Colina, que en buena parte de este plano intercomunal se pretenden dejar como agrícolas o rurales, pero sin una planificación urbana y pre-pensada, y, por lo tanto, a mi juicio, algo caótica e ineficiente, con los defectos típicos de las grandes ciudades de hoy. Desgraciadamente, hay numerosos ejemplos como éste en las políticas urbanas de la Región Metropolitana. Casos como las comunas de La Florida, de Maipú, de Santa Rosa de Las Condes, son ejemplos de cómo se coparon rápidamente esas zonas, no obstante la pretensión original de mantenerlas como de utilización agrícola. En mi concepto, si se le diera cabida a la demanda del mercado o si sólo se planificaran etapas, pero pensando en un futuro real, se podría crear en Colina una comuna completa, productiva y autosuficiente, sin utilizar los terrenos planos y sin la con urbanización con Santiago -que representa el temor del ministerio- en que sus varios posibles futuros centros de concentración urbana sean casi ciudades perfectas. En tercer lugar, además de no considerarse al mercado, no se ha valorado suficientemente un hecho único en nuestra historia, cual es que existan simultáneamente tanto territorio disponible y bien ubicado me refiero sólo a las laderas y a los pies de monte; no al plano, tanta población con problemas de espacio y de calidad de vida que resolver como lo expresa hoy el Gran Santiago, municipalidades con mucho ímpetu para grandes realizaciones, grandes capitales privados dispuestos a ser invertidos en el área, con profesionales formando sólidos equipos que las autoridades públicas probablemente no podrían contratar y, por último, todos de acuerdo en desarrollar las áreas mencionadas con enorme energía y buena disposición. Todo ello no se toma en cuenta y se propone un plan que sólo se prepara para un crecimiento vegetativo normal. En cuarto lugar, a mi juicio, es un hecho histórico que los asentamientos humanos de escasos recursos viviendas de interés social, como se podrían llamar, no pueden implantarse artificialmente y con éxito en lugares que no han sido debidamente desarrollados, ya que se les obliga a largos y onerosos recorridos en locomoción colectiva que, a su vez tema de moda, agudizan el atochamiento y el smog y no tienen la infraestructura necesaria para atender los requerimientos de salud y educación. Por lo tanto, es necesario poblar primeramente un territorio, creando suficientes y crecientes áreas productivas y fuentes de trabajo, a la vez que equipamiento comercial, educacional, de salud, de esparcimiento y de todo tipo, para luego, una vez consolidado eso, trasladar a esos lugares sectores de bajos ingresos. De lo contrario, sólo se generará un problema más. El plan intercomunal de Chacabuco propuesto condiciona la autorización de cada etapa de los desarrollos urbanos que se propongan a la existencia de, al menos, un quince por ciento de la población, destinándolos a viviendas de interés social, lo que traerá un problema adicional. Por último, el plan también define discrecionalmente las áreas urbanizables de restricción y límites de expansión urbana de la provincia, pero toma una decisión arbitraria: limita este crecimiento a la cota 700 metros sobre el nivel del mar. ¿Por qué 700 metros y no 800 ó 900? Toda la zona colindante con los cerros hace que haya muchos lugares donde podrían permitirse penetraciones más allá de ese territorio, a cota 800, donde hay hermosas laderas que no tienen problemas de pendientes ni de ningún otro tipo. A mi juicio, es una decisión demasiado inflexible, y creo importante flexibilizarla, manteniéndolas en algunos lugares en 700 metros, y abriéndolas en otros. Tampoco conocemos la política del Ministerio de Obras Públicas en cuanto a cuál será la infraestructura de carreteras en la zona, cómo se atravesará. Tenemos el mapa y las proposiciones, pero ¿habrá una radial, una orbital que unirá? ¿Por dónde empalmará la cuesta La Dormida? ¿Qué se hará con la ruta 5 al norte? ¿Qué irá a concesión? ¿Qué se mantendrá? En fin, todas esas son condicionantes para una zona con gran destino y gran presión, pero muy inadecuadamente plasmadas. En esta primera intervención sólo quiero dejar sentadas estas inquietudes, para más adelante, en una segunda, hacer una serie de planteamientos a la autoridad respecto de esta situación que ha generado tanta inquietud en los habitantes de la provincia, especialmente de Colina, cuyas autoridades obviamente no están conformes con lo que se está proponiendo. He dicho. REITERACIÓN DE IRREGULARIDADES EN ADQUISICIÓN DE TERRENOS POR SERVIU DE LA REGIÓN DEL MAULE. Oficio. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Sergio Correa. El señor CORREA.- Señor Presidente, en esta oportunidad quiero reiterar una denuncia que formulé en noviembre pasado. Se trata de que el Servicio de Vivienda y Urbanización, Serviu, de la Región del Maule, adquirió terrenos ubicados en la comuna de Molina, actuando como intermediario el presidente regional de la Democracia Cristiana, ex colega Gustavo Ramírez, que recibió 80 millones de pesos como comisión por dicho negocio. Al conocer dicha denuncia el señor Ramírez se querelló en mi contra por injurias, causa que en este momento se ventila en la Corte Suprema. Además, con otros parlamentarios, solicité una investigación del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, el que contestó que la operación se ajustaba a derecho y estaba correcta. Pues bien, en esta ocasión quiero mencionar que cuando el señor Ministro de la Vivienda entregó esta información, omitió mencionar un documento, hecho que considero grave. En las bases de la licitación existía un documento titulado “Aclaración Nº 1”, donde se exigía efectuar el cambio de uso de suelo antes de pagar al señor Ramírez los terrenos que estaba vendiendo, cambio que hasta hoy no se ha hecho. Es decir, en las bases de la licitación había una exigencia previa que no se cumplió. Por lo tanto, pido que se oficie, en mi nombre, al Contralor General de la República, para que se pronuncie sobre esta irregularidad ocurrida en el Serviu de la Región del Maule. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviará el oficio solicitado por Su Señoría. PROBLEMAS DERIVADOS DE LA SEQUÍA EN LA CUARTA REGIÓN. CONSTRUCCIÓN DE EMBALSE PUCLARO. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- En el turno correspondiente al Partido Socialista, tiene la palabra el Diputado señor Francisco Encina. El señor ENCINA.- Señor Presidente, al igual que el colega señor Munizaga, quiero referirme al problema de la sequía en la Cuarta Región que ya dura cuatro años, y cuyas secuelas se traducen en pérdidas por alrededor de 100 millones de dólares y en la disminución de la masa del ganado caprino de 450 mil a 200 mil cabezas, lo que afecta duramente a la pequeña economía campesina, al pequeño agricultor y fundamentalmente al pequeño criancero de nuestra Región. Sin embargo, debemos reconocer el esfuerzo que está realizando el Gobierno del Presidente Frei, igual que el efectuado por el ex Presidente Aylwin, que ha puesto a disposición de la Comisión Sequía de nuestra Región, un cúmulo de recursos en 1995, que ascendieron a 5 mil millones de pesos. Sin embargo, quisiéramos que estas medidas se aplicaran en forma similar a como se hace, por ejemplo, en las Regiones Octava, Novena y Décima. Creemos que muchas de ellas se pueden aplicar en nuestra zona, y esperamos que se hagan extensivas a la Tercera y Cuarta regiones, porque también estamos sufriendo el grave problema de la sequía. Señor Presidente, también quiero plantear lo que significa para la Cuarta Región, fundamentalmente para la cuenca del valle de Elqui, la construcción del tranque Puclaro. Ayer se abrieron las propuestas y en los próximos días se adjudicará la obra largamente esperada por los pequeños agricultores del mencionado valle, y concebida en la región de Coquimbo hace 40 años, que será la obra de infraestructura más grande que se haya desarrollado allí en las últimas cuatro décadas. Dicha obra estará destinada fundamentalmente a mejorar las condiciones en que se desenvolverá la agricultura de nuestra región. La única posibilidad de atacar y terminar con el flagelo de la sequía, que tantas repercusiones tiene en nuestra economía regional, es la construcción de ese almacenamiento de agua, única forma de lograr el desarrollo de la agricultura en zonas áridas, semiáridas o semidesérticas, como las de la Cuarta Región. Asimismo, no sólo asegura la actividad agrícola, sino que el agua para beber. La obra tiene un costo de 23 mil millones de pesos y se construirá en alrededor de 1.155 días. Su capacidad de almacenamiento será de 200 millones de metros cúbicos, lo que permitirá asegurar el 86 por ciento de riego de 20 mil hectáreas e incorporar diez mil hectáreas nuevas a la producción agrícola de la Cuarta Región y de la parte baja del valle de Elqui. En cuanto a la generación de empleo, se estima que la construcción del embalse demandará alrededor de 39.100 hombres-mes y que generará 7.480 empleos permanentes durante la vida útil del proyecto. Además, la obra está destinada fundamentalmente a beneficiar a alrededor de 3 mil pequeños campesinos del sector bajo de la cuenca del río Elqui, y permitirá una producción agrícola de alta tecnificación, que nos demandan los convenios internacionales y nuestra inserción en los mercados internacionales. Para terminar, quiero hacer un reconocimiento público en la Sala al Intendente Regional, don Renán Fuentalba Moena, principal impulsor y artífice de la obra desde que asumió su cargo en 1990, durante el Gobierno del Presidente Aylwin; como asimismo al gobierno regional y, por supuesto, al Gobierno del ex Presidente Aylwin, durante el cual se empezó a trabajar en el diseño de ingeniería y evaluación del proyecto. Por otra parte, deseo reconocer la labor desarrollada por el Ministro Ricardo Lagos durante el Gobierno del Presidente Frei, y hacer extensivo dicho reconocimiento tanto al Director Nacional de Riego, como a la Directora Regional de la Cuarta Región, señora Mirta Meléndez. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Diputado señor Navarro. Restan tres minutos al Comité Socialista. El señor NAVARRO.- Señor Presidente, como no alcanzo a desarrollar mi intervención en ese tiempo, en Incidentes de la sesión de mañana me referiré a un importante asunto relativo a las borras asfálticas que se pretenden depositar en la mina de Schwager. Cedo los tres minutos que restan a mi Comité al Diputado señor Felipe Letelier. MODERNIZACIÓN DE LA AGRICULTURA. Oficio. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- En el tiempo del Comité del Partido por la Democracia, tiene la palabra el Diputado señor Felipe Letelier. El señor LETELIER (don Felipe).- Señor Presidente, por las informaciones que tenemos, el ingreso de Chile al Mercosur es algo irreversible, y quiero manifestar mi preocupación por decir lo menos por la forma en que se han llevado a cabo las negociaciones. Me preocupa mucho la forma en que se ha negociado, por cuanto, algunos productos fundamentales de nuestra economía agrícola quedarán cancelados por decirlo de alguna manera durante diez, quince o dieciocho años. Además, se sienta un precedente negativo para futuras negociaciones pendientes con la Apec, el Mercado Europeo, el Nafta, etcétera. Creo que, a diferencia de lo que ocurrió con las negociaciones de México con el Nafta, en que los agricultores fueron permanentemente consultados y considerados en las negociaciones, a mi juicio en Chile no ocurrió así. Digo que se sientan precedentes negativos, por cuanto estamos cediendo, y la argumentación de la autoridad económica es que, como vamos a hacer buenos negocios, tenemos que ceder en algunos aspectos. Una vez más, la economía agrícola ha sido “el pato de la boda”. Por otro lado, se requieren a lo menos dos elementos fundamentales para enfrentar los tremendos desafíos que tenemos con el Mercosur, así como otros compromisos comerciales internacionales. En primer lugar, hay que modernizar la agricultura de verdad, pero modernizarla no significa reconvertirla; debemos tomarla como un problema de seguridad nacional. A mi juicio, están equivocados quienes quieren reconvertirla y tener una agricultura solamente para el mercado y productos rentables que entren en el engranaje del modelo económico de mercado, porque están incurriendo en un error muy importante: la falta de sentido de chilenidad, de nacionalismo. Y aquí hay un problema. Ojalá nunca tengamos un conflicto internacional, porque muchos quieren llenar la bodega o la despensa de nuestro país con productos extranjeros. Lo que estoy diciendo es que la despensa de este país debe ser abastecida con nuestros productos. Para eso, obviamente, tenemos que modernizar nuestra agricultura, lo que no significa reconvertirla, porque donde hoy se siembra arroz por razones naturales no se pueden plantar cerezos o kiwis. En primer lugar, ¿qué quiero decir con tener sentido nacional? Que todos hemos estado entusiasmados con la reconversión y mirando hacia la silvicultura y hacia productos rentables. Pero hay un esfuerzo histórico respecto del tema agrícola, al cual siento que se está renunciando. No le estoy echando la culpa sólo a las autoridades; creo que siempre ha habido un grupo de tecnócratas que no han tenido puesta la camiseta del mundo agro-rural y especialmente de la economía agrícola. En segundo lugar, quiero trasladar la palabra reconversión a las instituciones del Estado que tienen que ver con la agricultura. Por ejemplo, estoy convencido de que el Ministerio de Agricultura y todas sus direcciones no dan cuenta a la nación de los tremendos desafíos presentes y futuros de nuestro país. El Indap, la Conaf y Servicio Agrícola y Ganadero no lo hacen. Entonces, hay que reconvertirlos como instituciones; hay que preparar a su personal, reorientarlo, reformarlo y enseñarle lo que es la vocación por el servicio público. Todos estamos contestes y claros de que estos organismos no dan cuenta de esos hechos. Hoy estamos entrando irreversiblemente a un tratado regional. Estoy de acuerdo en que ingresemos a los bloques, a la economía mundial; pero no podemos entregar, de buenas a primeras, patrimonios históricos. A mi juicio, la agricultura no es sólo rentabilidad, ganancia, productividad, sino como lo he dicho también es chilenidad, patria, soberanía. No todo el mundo está dispuesto a vivir detrás de los cerros. Para eso debemos tener vocación y una visión. Por ello, Laguna del Desierto nos penará históricamente, porque allí tuvimos ausencia. No hubo una política de poblamiento. Yo veo a la agricultura como parte de esto. Por lo expuesto, solicito que se envíe oficio al Presidente de la República para que, en virtud de sus facultades, en esta coyuntura la cual miro como algo positivo, pese a todas las discrepancias que tengo el Estado chileno, el Gobierno de turno, tenga la voluntad política de modernizar la agricultura y otorgar los recursos necesarios para ello. No para reconvertirla, no para que nuestros productos, fundamentales en nuestra mesa, sean reconvertidos en productos vistos sólo desde su rentabilidad. He dicho. El señor CHADWICK (Vicepresidente).- Se enviará el oficio solicitado, con la adhesión del Diputado señor Masferrer. Ofrezco la palabra. Ofrezco la palabra. Por haberse cumplido con su objeto, se levanta la sesión. Se levantó a las 14.17 horas. JORGE VERDUGO NARANJO, Jefe de la Redacción de Sesiones.