-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/689138/seccion/akn689138-po1-ds37-ds94
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/4569
- rdf:type = bcnres:Participacion
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/1
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/4569
- bcnres:tieneReferencia = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/4530
- rdf:value = "
El señor FLORES, don Iván (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado Luciano CruzCoke .
El señor CRUZ-COKE.-
Señor Presidente, es importante comunicarle a la ciudadanía que en la práctica aquí no se está rebajando la dieta parlamentaria a 50 por ciento en forma permanente, sino en forma transitoria, pues solo transcurrirán dos meses entre que se promulgue la ley y que la comisión que hoy estamos creando determine la rentas de los altos funcionarios públicos. Por tanto, vamos a tener una rebaja transitoria, de 60 días, conforme a lo que estamos mandatando.
¡Vaya paradoja de la política! Cuando la ciudadanía está pidiendo que los parlamentarios no tengamos incidencias en fijar nuestras remuneraciones, hoy rasgamos vestiduras para decir que ahora sí haremos el máximo sacrificio, cuando en la práctica son dos meses que pasarán bastante rápido.
Por ende, que no se piense que se está haciendo algo distinto a crear una comisión que fije los sueldos, pues, en efecto, el proyecto en comento crea una comisión que se encargará de fijar los sueldos de las altas remuneraciones públicas, para lo cual establece un órgano, como existe en buena parte de los países de la OCDE, según señaló el Banco Central en su esplendida exposición ante la Comisión de Constitución, planteamiento que, por supuesto, vamos a apoyar con mucha fuerza, porque es de toda lógica rebajar nuestra dieta.
No obstante, también debemos revisar las asignaciones que recibimos los parlamentarios, que corresponden –escuche bien usted señor y señora en su casa, para que no le vendan otra cosa distinta- a 11 millones de pesos mensuales por cada diputado y a 20 millones de pesos mensuales, o más, por cada senador, que son adicionales a la dieta de 9 millones de pesos.
Sentados en este hemiciclo hay señorías que tienen, ni más ni menos, 20 asesores, que avanzan como estelas siguiéndolos por los pasillos, como han consignado los medios y redes sociales. ¿La gente en su casa considerará razonable que un diputado tenga tal cantidad de asesores, los que además se pueden contratar, por vía interposita, a través de la Cámara de Diputados o del Senado, según corresponda?
La señal que debemos dar es determinar lo justo, lo austero, lo probo y lo suficiente para que un parlamentario haga su trabajo. Debemos revisar las asignaciones.
Tampoco queremos tener que ver con las sedes, con los arriendos de autos, ni con los gastos de las oficinas. Todo eso debe ser resorte de esta Corporación, como sucede en el Poder Judicial y en el Ejecutivo. No queremos tener ninguna posibilidad de determinar cómo se transfieren esos recursos, ni tener una cuenta corriente especial, ni menos queremos volver a ver en esta Cámara de Diputados que se paguen gastos personales con cargo a gastos operacionales. ¡Por favor! Si eso es una vergüenza para quienes hemos trabajado y nos hemos ganado la vida en el ejercicio de nuestras profesiones antes de llegar al Congreso Nacional.
Por lo mismo, dado nuevamente el ejercicio ostentoso de subirse en un pedestal a clamar que son mejores que los del frente, aclaro que, en la práctica, lo que estamos haciendo es un ejercicio leve, de un mes para otro.
¿Y por qué este desprestigio? Porque la gente cree que ganamos 22 millones de pesos. Entonces, ¿por qué no va a salir a incendiar y saquear esa porción menos educada de la población si tiene políticos que le están señalando que en los últimos treinta años hemos vivido una farsa? Me estoy refiriendo a aquellos que viven criticando a las AFP, pero descuentan su APV de aquí mismo, del Congreso Nacional, entre los cuales hay varios que están sentados acá; a aquellos que en vez de defender la educación pública tienen a su hijo en el Santiago College, en un Waldorf de 500.000 pesos; a aquellos que en vez de tener Fonasa y atenderse en la salud pública, se operan en la Clínica Alemana; a aquellos que piensan que todo está mal hecho, que todo es insuficiente, que nada sirve, que creían que le pasarían la cuenta al gobierno de derecha.
Pues bien, señores, ahora la gente les dice: “¿Saben qué? Váyanse todos, porque se han comportado como verdaderos nuevos ricos”.
Tiene que dolerles donde debe doler: en la vergüenza.
He dicho.
"
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/689138/seccion/akn689138-po1-ds37
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/689138