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La señora ARAVENA.-
Presidenta, hoy día nos toca tomar una decisión que, a mi juicio, tiene a buena parte de la ciudadanía expectante. Por supuesto que, como estamos en democracia, vamos a respetar -y así debe ser- la opinión de cada uno y, evidentemente, de los que tienen más experiencia en el Senado. Como yo no tengo tanta, voy a hablar desde la poca experiencia que me dan los dos años y medio que me mantienen hasta el día de hoy en este trabajo.
La experiencia es servir. Y que con nuestra labor podamos cambiar positivamente la vida de las personas es siempre, en mi opinión, un privilegio. Desde mi experiencia particular, en lo laboral, aquello puede realizarse de muchas maneras: desde los municipios, en las universidades, en las instituciones públicas, el Poder Legislativo y, por supuesto, desde la sociedad civil. Elegir el servicio público como propósito de vida implica, en mi concepto, un profundo compromiso con la sociedad y con su pleno desarrollo.
La actividad legislativa, según mi experiencia, es sin duda una importante oportunidad de servicio público, pero no la única. Tampoco está exenta de dificultades, cuestión que todos hemos vivido, de una manera u otra, en estos tiempos.
La falta de confianza de la ciudadanía en nuestras instituciones, y especialmente en la clase política, es, a mi juicio, uno de los grandes problemas que enfrenta nuestra sociedad.
En este nivel de problemática se puede vivenciar claramente que en marzo del 2019 el Consejo para la Transparencia indicó que, de diez personas que eran entrevistadas, ocho pensaban que las instituciones públicas eran corruptas.
Por otro lado, después del estallido social del 18 de octubre, la ciudadanía volvía a reiterar su opinión negativa y planteaba que las instituciones más confiables eran Bomberos, juntas de vecinos y organismos de ayuda.
¿Por qué es tan relevante la confianza? Porque a partir de ella se construye capital social y se permite que la democracia esté en un lugar privilegiado de la ciudadanía y que tenga efectivamente la sanidad que se requiere para construir desarrollo.
Estos dos conceptos que hoy estoy planteado han cambiado muchísimo con el tiempo, porque las nuevas tecnologías, la información y el conocimiento hacen que la ciudadanía cuente con mucho más acceso a la información y, por lo tanto, se siente en la necesidad y el derecho de ser partícipe del desarrollo y de comprender las decisiones que cada uno de nosotros tomamos.
Por lo tanto, en mi opinión, la democracia -y no lo digo yo, lo dicen muchos estudios- está en peligro cuando efectivamente se pierde la confianza en las autoridades y en la instituciones.
Las decisiones se toman siempre en un contexto. Yo no creo que Chile pueda compararse con lo que pasa actualmente en otros países, porque no solo estamos enfrentando las complejidades que provoca el COVID, sino que nos encontramos profundamente complicados con una crisis social que no va a cambiar después de la pandemia si no le damos señales a la ciudadanía.
Hoy debemos decidir si estamos a favor de limitar la reelección, con lo cual estoy absolutamente de acuerdo, y también si es retroactiva o no.
En mi opinión, si no estuviéramos en medio de la crisis que actualmente nos afecta este tema no estaría en discusión. Pero en este momento sí vivimos una crisis y hay que asumirla. Por tanto, votaré a favor de ambas.
Hoy el destino nos regala la oportunidad de dar a la ciudadanía una posibilidad de recambio en la composición del Parlamento. Esto no implica que quienes han estado por años en el Senado o en la Cámara de Diputados no hayan contribuido profundamente al desarrollo del país, todo lo contrario. Fueron tiempos muy difíciles y todas las generaciones van a valorar el trabajo que hemos hecho. Pero Chile es un país de grandes hombres y mujeres. Muchos estarán dispuestos, al igual que nosotros, a trabajar fielmente por el país que tanto queremos.
Señora Presidenta , agradezco la oportunidad histórica de hacer cambios, y por supuesto que vamos a respetar la mayoría, como corresponde a un país democrático.
Vuelvo a reiterar mi voto de aprobación a ambas indicaciones de este proyecto, porque creo que van en el camino correcto. Muchos chilenos esperan que esto suceda porque confían plenamente en la democracia.
Muchas gracias.
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