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- rdf:value = " El señor SAAVEDRA.- Gracias.
Presidente, 70.439 chilenos que hoy tienen créditos vencidos, con un monto de 1.145 millones de pesos en intereses, pertenecen a los tres quintiles de menores ingresos del país. Por tanto, este método de subsistencia es el que les ha permitido, a lo largo de esta historia, a millones de compatriotas tener recursos frescos para parar la olla, para poder sobrevivir en muchos casos.
Hoy, más de 20 mil tienen créditos en mora. Esto ha adquirido especial relevancia, porque generalmente son bienes queridos los que están "empeñados", como popularmente se conoce. Por consiguiente, así como se fue en ayuda de otros sectores afectados por la crisis que trajo la pandemia para millones de chilenos, estos también requieren un rescate.
Entonces, en buena hora el Congreso, y particularmente el Senado, ha aprobado en sus diferentes Comisiones de Hacienda y de Trabajo que la Dicrep pueda acceder a la suspensión de todos los remates judiciales, fiscales y aquellos de plazo vencido, en que no se pagó o no se hizo la renovación de los créditos.
En buena hora, por tanto, se otorga un alivio a estos 20.416 chilenos que mantienen créditos en mora, que corresponden al 31,26 por ciento de un universo de 70 mil personas.
Además, son mujeres las que más recurren a la Tía Rica para obtener recursos frescos.
Estos chilenos no tienen acceso al sistema bancario o de crédito. Se trata de personas que viven en la informalidad.
En este caso tiene mucho sentido la política, un sentido humanitario profundo. Con nuestros votos estamos permitiendo que los chilenos y chilenas que recurren al crédito de la Tía Rica puedan sobrellevar mejor su vida.
¡En buena hora lo hacemos!
Voy a concurrir con mi voto favorable para que -reitero- miles de personas puedan volver a tener sus bienes, los que estarían en remate o en pérdida si no tomáramos esta decisión, que, bien formulada por el Gobierno del Presidente Boric, nos permite ayudar a los chilenos y a las chilenas que viven del crédito de la Tía Rica.
He dicho, Presidente .
Muchas gracias.
"
- rdf:value = " El señor SAAVEDRA.-
Gracias.
Presidente, 70.439 chilenos que hoy tienen créditos vencidos, con un monto de 1.145 millones de pesos en intereses, pertenecen a los tres quintiles de menores ingresos del país. Por tanto, este método de subsistencia es el que les ha permitido, a lo largo de esta historia, a millones de compatriotas tener recursos frescos para parar la olla, para poder sobrevivir en muchos casos.
Hoy, más de 20 mil tienen créditos en mora. Esto ha adquirido especial relevancia, porque generalmente son bienes queridos los que están "empeñados", como popularmente se conoce. Por consiguiente, así como se fue en ayuda de otros sectores afectados por la crisis que trajo la pandemia para millones de chilenos, estos también requieren un rescate.
Entonces, en buena hora el Congreso, y particularmente el Senado, ha aprobado en sus diferentes Comisiones de Hacienda y de Trabajo que la Dicrep pueda acceder a la suspensión de todos los remates judiciales, fiscales y aquellos de plazo vencido, en que no se pagó o no se hizo la renovación de los créditos.
En buena hora, por tanto, se otorga un alivio a estos 20.416 chilenos que mantienen créditos en mora, que corresponden al 31,26 por ciento de un universo de 70 mil personas.
Además, son mujeres las que más recurren a la Tía Rica para obtener recursos frescos.
Estos chilenos no tienen acceso al sistema bancario o de crédito. Se trata de personas que viven en la informalidad.
En este caso tiene mucho sentido la política, un sentido humanitario profundo. Con nuestros votos estamos permitiendo que los chilenos y chilenas que recurren al crédito de la Tía Rica puedan sobrellevar mejor su vida.
¡En buena hora lo hacemos!
Voy a concurrir con mi voto favorable para que -reitero- miles de personas puedan volver a tener sus bienes, los que estarían en remate o en pérdida si no tomáramos esta decisión, que, bien formulada por el Gobierno del Presidente Boric, nos permite ayudar a los chilenos y a las chilenas que viven del crédito de la Tía Rica.
He dicho, Presidente .
Muchas gracias.
"