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- rdf:value = " El señor CASTRO (don Juan Luis).-
Gracias, Presidente.
La verdad es que las experiencias de telemedicina en nuestro país vienen ya en desarrollo, sobre todo a partir de la pandemia. Pero tenemos una dificultad permanente respecto a cómo acercar la cobertura de médicos especialistas a las personas. Ese es el drama que todos vivimos en nuestras regiones.
Existe una carencia de especialistas muy grande en el ámbito público. Es cierto que no todo se resuelve por telemedicina: una operación quirúrgica, una fractura obviamente requieren la presencialidad de la intervención. Pero hoy día hay especialidades como la salud mental, que es parte de la pospandemia que estamos viviendo, donde la falta de médicos psiquiatras, de psicólogos inclusive, ha hecho de esto un estrago permanente.
Cuando me tocó visitar -no hoy, sino hace un tiempo- el hospital digital, que es una experiencia que viene del 2019, vi ahí un esfuerzo notable desde el lado público por lograr, por ejemplo, que en materia de intentos de suicidio, o cuadros depresivos graves, hubiera una conexión telefónica que permitiera hacer ese vínculo y llegar con un especialista.
La lista de espera es el foco número uno del Ministerio de Salud, ¡y caramba que hay aquí un instrumento que permite hacerlo de mejor manera!
Distintos lugares, hospitales clínicos y centros privados tienen también telemedicina en marcha. Pero aquí no ha habido regulación.
Tener telemedicina no es hacer una videollamada, Presidente . No es lo mismo, ¡no es lo mismo! Aquí se está hablando de un estándar bajo condiciones que permitan hacer las cosas correctamente con un paciente. Me ha tocado ver modelos de telemedicina donde están incluso los signos vitales monitorizados a distancia para las personas, sobre todo en el caso de los adultos mayores, donde hay distintas experiencias de control directo a distancia de la evolución de pacientes con enfermedades como la demencia o el alzhéimer.
Es decir, la necesidad existe. El sector público es el que tiene más urgencia de colocarse a la altura de las circunstancias para que podamos cubrir, donde no hay especialistas, esa llegada de manera eficaz y concreta.
Espero que a partir de esta ley, cuando se apruebe y se despache en los próximos días, haya una nueva ofensiva desde la autoridad, que vamos a apoyar y acompañar, para muchos servicios de salud del país, como en el nuestro, con la Senadora Sepúlveda, donde hay 120 mil enfermos en lista de espera, de los cuales 20 mil son quirúrgicos y 100 mil son por razones médicas, o sea solo consultas, con un cardiólogo, en fin.
Todas esas cosas podrían tener un amplio campo de avance si tuviéramos telemedicina disponible.
Y esto es lo que hoy día se requiere como instrumento moderno; no sustitutivo, pero sí complementario y eficaz para todo lo que eso implica.
Por tanto, este es un momento especial, importante para el despacho de esta ley.
Ojalá que se agilicen los reglamentos y protocolos que permitan operativizar en cada región del país el grave problema que tenemos del acceso a la salud digna, a partir de este instrumento, que ya la población conoce, lo ha manejado; nadie deja de tener un celular o un computador; en general se tienen las nociones. Y eso permite, entonces, llegar con soluciones eficaces a las personas.
Gracias, Presidente .
"
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