
-
http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/706459/seccion/akn706459-po1-ds86-ds106
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/706459/seccion/akn706459-po1-ds86
- bcnres:esParteDe = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/documento/706459
- bcnres:tieneCalidad = http://datos.bcn.cl/recurso/cl/cargo/1
- bcnres:tieneEmisor = http://datos.bcn.cl/recurso/persona/5258
- rdf:value = " La señorita CONCHA (doña Sara) .-
Presidente, este proyecto de ley pretende modernizar la oferta en la educación parvularia. En este sentido, aunque la modernización es en principio una meta deseable, debemos tener sumo cuidado cuando la aplicamos a un ámbito tan delicado como la formación inicial de nuestros niños y niñas.
Esta propuesta, bajo la bandera de la eficiencia, parece olvidar que la educación parvularia no puede ni debe regirse por los mismos principios que cualquier otro servicio. La educación de nuestros pequeños no puede ser tratada como un producto en un mercado. Los niños no son consumidores ni simples números en una tabla de rendimiento, sino seres en pleno desarrollo, y la educación inicial debe centrarse en su bienestar emocional, social y también cognitivo.
Este proyecto tal como está formulado parece enfocado en aumentar la cantidad de opciones disponibles, pero no garantiza una mejora en la calidad ni en la equidad del sistema. Uno de sus mayores riesgos es que al incentivar la diversificación de la oferta se corre el peligro de abrir espacios para propuestas educativas que busquen más el lucro que el beneficio de los niños. Sabemos por experiencia que cuando la educación se mercantiliza, los sectores más vulnerables son los primeros en sufrir. La educación inicial debe ser inclusiva, equitativa y de calidad para todos, no solo para quienes pueden pagar por una mejor oferta.
Además, esta iniciativa no aborda adecuadamente las condiciones laborales de los educadores y asistentes de párvulos, quienes son la base sobre la que se construye la calidad educativa. No podemos exigir excelencia educativa mientras ignoramos las dificultades que enfrentan estos profesionales: la falta de recursos, la sobrecarga laboral y la falta de reconocimiento. Modernizar la oferta debe ir de la mano con dignificar también la labor educativa, ofreciendo formación continua, sueldos justos y condiciones laborales adecuadas.
Me preocupa que este proyecto no contemple una verdadera participación de las familias y comunidades en el proceso educativo. La educación parvularia no es un servicio que se entrega de manera unidireccional; es una construcción conjunta entre educadores, niños y familias. Cualquier intento de modernización que no involucre a las comunidades en las decisiones que afectan la educación de sus hijos está condenado al fracaso.
Lo más probable es que termine por votar en contra este proyecto de ley.
He dicho.
"
- bcnres:tieneTipoParticipacion = bcnres:Intervencion
- rdf:type = bcnres:Participacion
- rdf:type = bcnres:SeccionRecurso